Los Mejores Amigos [ Logan Lerman]

Mi celular comenzó a sonar escandalosamente provocando que se me callera de mis manos, y quedara en el suelo. Mire por detrás de mi hombro percatándome de que Sam siguiera hablando y no se haya dado cuenta de mi torpeza. Efectivamente el seguía hablando por teléfono en la otra habitación. Tome con rapidez el celular y me fije quien llamaba. Solté un suspiro al ver que solo era Brie.
- ¿Hola? - conteste de inmediato.
- ¿¡Donde demonios estas!? ¡Estamos llamándote y la señorita tenia el teléfono apagado! - grito desde la otra linea. Se pare el celular de mi oído antes de que me dejara sorda. - Logan esta muy preocupado.
- Logan no me necesita allí - replique con orgullo.
- No seas orgullosa, Bella - suspiro.
- Soy tan patética ¿No? - contuve las lagrimas que amenazaban con salir - Estoy bien ¿De acuerdo? No se preocupen.
- ¡¿Pero donde estas?! Bella por favor, al menos dinos donde te encuentras...
- Logan vendrá a buscarme si te digo - resople recordado las miles de veces que me pasaba a buscar cuando me escapaba de mi casa.
- Hey, soy tu amiga ¿No? Puedes confiar en mi - prometió Brie.

No sabia si confiar en Brie, hace poco que la conocía y tenia miedo de que su lealtad fuera hacia Logan. Realmente quería quedarme al menos lejos de el, me costaba perdonar y quería perdonar a Logan por haber sido de esa forma tan cruel conmigo, por haberme dicho la verdad de esa forma tan cruda.
- Estoy en lo de Sam - respondí mirando sobre mi hombro y me sorprendí al verlo allí parado al rubio - y estoy bien, Brie. Nos vemos mañana.
- Okey, Bella. Cuídate y disfruta de ese galanaso - dijo con humor lanzando unas risitas.
- ¿Que demonios se te ha pasado por la cabeza? - inquirí sintiendo mis mejillas rojas.
- Oh Bella, no seas tímida - soltó una pequeña risita - Suerte con Saaaam.
- ¡Espera Brie! ¡No es lo que ....! - no me dejo terminar, ya que ya había cortado la muy tonta

Intente calmar mi enojo, y solo deseaba que ella cumpliera con su palabra de no decirle nada a Logan. Al menos solo quería que le dijera que estaba bien y que no había motivos de que preocuparse. Sam al cabo de unos segundos se sentó a mi lado con una sonrisa tímida en el rostro, de la cual respondí de la misma manera.
- Lo siento, me había llamado mi hermana pequeña...
- ¿Tienes una hermana menor? - pregunte sorprendida - pensé que eras hijo único ....
- Hijo único varón - se encogió los hombros - Hablar de mi hermana me incomoda un poco, mas con la enfermedad que padece - susurro mientras jugaba con sus manos.
- ¿Quieres hablar de ello? Sabes que puedes contarme lo que sea - dije mientras acariciaba su hombro en forma de apoyo.
- Esta paralitica - dijo segundos después - No puede mover las piernas para nada, desde el accidente que tuvimos cuando ella tenia cinco. Mi padre aun no se resigna de que quedara así por siempre pero no pierde las esperanzas de que Samanta caminara algún día. Mi madre ya las perdió hace tiempo, y bueno... yo no se si resignarme o darle lucha llenando le de esperanzas vacías como mi papa.
Quede sorprendida aun mas con lo que me contaba Sam, pude ver en sus ojos reflejado el dolor y la desesperación. Comprendía muy bien como se sentía, antes Connor había tenido mucha dificultad para hablar, sus cuerdas vocales estaban afectadas y le costaba articular palabra. La mayoría de los niños de sus clases se burlaban de el, lo que por una parte me hizo la matona de la escuela por golpear a cada uno de ellos que se burlaban de el, sea una chica o un chico. Era una impotencia increíble lo que sentía, pero lo bueno era que mi mama jamas me retaba por esos motivos, es mas , me motivaba a seguir así. Aunque eso implicara ser expulsada.
- Yo creo que deberías alentarla - le aconseje sonriendole - Lo ultimo que se pierde son las esperanzas. Y tu hermana esta viva, y apuesto que va a seguir peleando por volver a caminar, solo que necesita tu apoyo y el de tu mama.
- Hay muy pocas posibilidades - paso una mano por su cabeza - Si vuelve a caminar después de la próxima operación, sera por puro milagro. Si en esta operación falla como las demás, no volverá a caminar nunca en su vida. Tengo miedo - la voz de Sam se quebró y oculto su rostro bajo sus manos.

Lo abrace con fuerza deseando que dejara de llorar y no perdiera las esperanzas. Sam me correspondió el abrazo con fuerza, sollozando en mi hombro. Susurro sobre que la operación seria en dos semanas y que no sabia si podría ir, sobre que no estaba seguro si podía aguantar tanta espera.
- Yo te acompañare - sonreí mientras me separaba un poco de el.
- ¿Que? No Bella, no puedo dejar que me acompañes - negó con la cabeza algo sorprendido.
- ¿Por que no? Apuesto a que a tu hermana le voy a caer bien - dije con humor intentando convencerlo.
- No quiero que lo hagas por lastima - susurro mirando hacia otro lado.
- No es por lastima, Sam - replique - Iré porque eres mi amigo y quiero estar allí para apoyarte - sonreí aun mas - Te prometo que iré ¿Si?
- ¿Lo dices enserio?
- Te doy mi palabra - jure mientras uníamos nuestros meñiques.

Al otro Día

Mas o menos como a las once volví a mi casa, esperando a que Logan todavía este durmiendo aunque sabia que era imposible, el siempre madrugaba y no me equivoque, porque cuando abrí la puerta la música clásica de Bethoveen estaba sonando por toda la casa, se podía escuchar la estufa y olí el olor de las hamburguesas cocinándose. El estomago gruño y me recrimine a mi misma que recién había comido, poco, pero había comido en lo de Sam.
Logan apareció en la sala a los pocos segundos limpiándose las manos con un re-pasador, y mirándome con su mirada glacial. Yo me saque la chaqueta colocando la en el perchero y devolviendo le la mirada de la misma manera. Me dispuse a caminar hacia las escaleras para encerrarme en mi cuarto. No tenia ganas de discutir ni menos con Logan. Pero antes de que pudiera dar siquiera un primer escalón, Logan me sujeto con fuerza el codo impidiéndome que siguiera caminando.
- ¿Donde demonios estabas, Isabella? - pregunto con la voz dura.
- ¿Te importa acaso? - replique intentando zafarme de su agarre pero sin éxito - Logan, suéltame.
- No hasta que me digas donde estuviste. Se lo dijiste a Brie, también me lo puedes decir a mi.
- Me estas lastimando.
- Al menos si te ibas a desaparecer un día entero podrías haber avisado - aflojo su agarre pero seguía igual de firme.
- Oh, claro ¿Como tu debiste avisarme sobre que irías con los chicos a bailar? ¿Que te quedarías a dormir en quien sabe donde? ¡ Suéltame de una maldita vez!
Logan me soltó y camino hacia la cocina con pasos largos y rectos. Comencé a acariciarme el hombro donde me había sujetado me dolía un poco y esperaba que no me haya dejado algun moretón. Aveces Logan podía ser un poco bruto sin intención.
Camine hacia la cocina donde el se encontraba dando vueltas las hamburguesas, con la vista fija en la sarten.
- Lo siento, es verdad te tuve que haber avisado que saldría con los chicos. - murmuro segundos después - iba a ir de regreso después del boliche pero... se ve que estaba tan borracho que me tire encima a una chica que tenia novio, y estaba su primo también. Así que Freddie me cubrió la espalda, aunque... no sirvió de mucho contando mi nariz rota y su ojo morado - soltó una pequeña risita provocando una sonrisa torcida en mi rostro. Al instante se dio vuelta - Lo siento Bells, pero la droga y el alcohol no se dejan de un día para otro aunque todos quisiéramos. Igual que tu no dejaras de querer a Peter de la noche a la mañana. Lo siento mucho.
Abrace a Logan con fuerza sin querer separarme de el. No podía enojarme con el, con todo lo que había echo por mi no se merecía que lo tratara así.
- Perdóname a mi también, Logan. Debí avisarte, pero de todos modos estaba bien.
- ¿Donde te habías ido?- pregunto con calma separándose un poco de mi.
- Me fui al parque cerca que queda a unas cuadras y al rato paso Sam. Cene con el y dormí en su cuarto mientras el dormía en lo de su compañero.
- ¿No paso nada mas? - insistió cerrando los ojos.
- ¡Claro que no! - exclame divertida - Sam es mi amigo, nada mas.
- Pero yo soy tu mejor amigo ¿Cierto? No iras a cambiarme por ese rubio ¿No? - rió por debajo.
- Eso ni se habla. Jamas te cambiare, Logan - asentí sonriendo.

No me percate de que nuestros rostros estaban tan cerca que hasta podía sentir su respiración chocando con la mía. Logan también se dio cuenta pero no se movió ni un centímetro, hasta sentí que se acercaba a un mas. El teléfono empezó a sonar separándonos con brusquedad. El volvió a las hamburguesas que estaba preparando y yo camine con rapidez a contestar el teléfono. Agradecí a Dios que alguien llamara. Valla a saber que diablos hubiese pasado sino.
- Hola - conteste con la respiración algo agitada. Había estado conteniendo el aire sin darme cuenta.
- Hola Bella - se escucho una voz de una niña detrás de la linea - ¿Estaría Logan por allí?
- Oh, Hola Linsey - dije con amabilidad - Si ya te paso con tu hermano.
Tome el teléfono innalambrico y se lo pase a Logan si dirigirle la mirada, el lo tomo y empezó hablar con su pequeña hermana. Hace tiempo que no hablaba con ella. Se había ido de viaje con Lucas antes de que nos fuéramos, por lo que la despedida con ella fue mucho mas antes.Me atreví a mirar el rostro de Logan cuando escuche como farfullaba algo molesto, tenia el rostro lleno de preocupación. Cuando corto largo un suspiro frustrado.
- ¿Que sucedió?
- Larry tuvo un infarto - dijo dejándonos en silencio a los dos - Este es el tercero. El había venido al otra vez a pedirme que me hiciera cargo de la empresa porque estaba muriéndose, Bells... y yo no lo escuche...
Volví a abrazar a Logan esperando a que mi abrazo lo calmara un poco de la culpa que debía sentir. Sabia que Larry algo ocultaba algo cuando le pregunte porque quería que Logan se hiciera cargo ahora de la empresa, y lo único que me respondió fue que a mi no me tenia que interesar para nada de lo que sucediera. Pero la verdad, es que yo estaba tan adentro en todo esto como Logan.