Re: No me sueltes la mano. [Larry Stylinson] TERMINADA.

por **I'mLarryShipper** Sáb 25 Ene 2014, 8:14 pm

Hola!
Me llamo Renata, tengo 14 y yo también soy de Buenos Aires :)
Quedé fascinada con el prólogo!
Me muero de ternura con Harry y Louis!
Seguíla pronto! No puedo esperar, ya quiero leer el primer cap!
Besos :hug:

por **memiabril** Dom 26 Ene 2014, 12:45 pm

Angeles escribió:Aww que lindo <3
Me gusta como escribis!! Escribis lindo n.n
Son chiquititos, y ya se quieren mucho fsngvjsaf *-*
Pero Louis se fue, ay, no quiero saber como va a estar Harry :c
Me gustó!!
Saludos!!

¡Hola, babe!
Aw, que lindo que te guste como escribo, :D. Bálsamo para el alma leer eso.
Sí, Lou se fue enamorado profundamente de su tierno Harry. Oh, ya verás; aunque por las advertencias que puse y el resumen, bueno, espero que lo tengan en cuenta, xD.
Me alegro mucho que te gustara, :D.
Gracias por leer y comentar, <3.
Besotes con amor.

por **memiabril** Dom 26 Ene 2014, 12:51 pm

I'mLarryShipper escribió:Hola!
Me llamo Renata, tengo 14 y yo también soy de Buenos Aires :)
Quedé fascinada con el prólogo!
Me muero de ternura con Harry y Louis!
Seguíla pronto! No puedo esperar, ya quiero leer el primer cap!
Besos :hug:

¡Hola, Rena!
Eso es genial, :D. Más genial es que hayas quedado fascinada. Me encanta la vida leer eso.
No mueras!! D:. Ya, ya, ya llega la semana que viene y podrás leerlo y no más intriga! :P.
Te dejo muchos besotes y gracias por tomarte el tiempo de leer y comentar, <3.

por **memiabril** Mar 28 Ene 2014, 5:01 pm

Capítulo uno: Malos días.

No me sueltes la mano. [Larry Stylinson] TERMINADA. - Página 2 Tumblr_mzl5fdab2b1rj1n18o1_500

Harry lo sabía: hoy era un mal día.

Rebuscó entre su armario con desespero. ¿Dónde había puesto las malditas pastillas? Diablos, ¿acaso su madre había estado investigando de nuevo? Rogaba a quien fuera que pudiera leer sus pensamientos porque la respuesta fuera negativa. ¿Y si las había dejado en el colegio? ¿O a la vista de su madre? Maldijo entre dientes su mala memoria y por haber cometido la equivocación de portar las putas pastillas con él todo el tiempo.

Estaba empeorando. Los llantos se habían hecho más frecuentes; las noches de insomnio se hacían más regulares; la comida estaba empezando a darle asco y era casi imposible hacerla llegar a su estómago; las risas fueron apagándose, remplazadas con silencios largos. Lo peor de sí mismo estaba volviendo. Estaba alejando a todos de nuevo y empujándose cada vez más cerca del precipicio. Casi fantaseando con el final. Igual que hace cuatro meses.

Tenía que mentalizarse en que lo que sucedía no le debía dar igual; que su vida contaba; que lo que pensaba de sí mismo era un engaño; que el dolor por saberse diferente y la negativa aceptación no eran más que una fase que todo chico podía experimentar a los diecisiete años. Incluso la homosexualidad, ¿verdad?

Era ridículo pensar lo contrario. Él había tenido tres novias y se había besado con muchas chicas durante su adolescencia; había tenido relaciones sexuales con todas sus parejas y se había sentido bien, correcto. Ni siquiera se había acercado a otro hombre con otra intención que no fuera la de formar una amistad.

Pero entonces llegó Nick Grimmshaw.

Un chico que había repetido su cuarto año y se había trasladado a su colegio. Un chico que se declaraba abiertamente gay. El mismo año de su ingreso, durante todo su año pasado, Harry tuvo que enfrentarse a la inminente obviedad de que su heterosexualidad prendía de un hilo muy fino que se podía cortar en cualquier momento. Sus hormonas estaban al límite como cualquier adolescente y Nick no dejaba de atentar contra eso, tentándolo con sus pantalones apretados, remeras escotadas y clavículas huesudas, sonrisa seductora y un trasero que Harry no podía evitar darse la vuelta para observarlo. Era la primera vez que no entendía qué diablos estaba sucediendo con su cuerpo y la forma de reaccionar de este. Muchas veces tuvo que levantar la mano durante la mitad de sus clases para ir al baño y poder calmar una erección que en primer lugar no debería estar ahí.

Cuando finalmente se dejó seducir por Nick, luego de cuatro meses de acoso y persistentes miradas que lo desafiaban a decirle en su cara que no le pasaba nada con él, Harry se dijo que solo estaba experimentando. Cualquier chico de su edad quería vivir dentro de ese mundo: alcohol, drogas, sexo y fiestas. ¿Por qué él iba a ser el primero en negarse? Era una forma de sacarse de encima toda la frustración; ¿quién rechazaría una noche de sexo? Nadie, por supuesto.

Su mundo se derrumbó cuando comenzó a comparar y a, finalmente, sentir. Todo era distinto; principalmente porque no era con una mujer, sino con un hombre. No tenía que ser delicado, ni contemplativo, ni controlarse; podía ser brutal, pasional, dominador; cuanto más brusco fuera y más profundo penetrara, mejor. Todo era distinto y muy a su pesar, esa distinción, le gustaba. Le satisfacía y lo llenaba. Y, maldita sea, eso no debería pasar. Se suponía que solo sería una noche, pero luego fueron más encuentros furtivos entre ellos. Comenzó a necesitarlo; a desearlo; a disfrutarlo. Para cuando se dio cuenta de que no había retorno, ya estaba encerrado en el baño con la navaja descansando en el piso y su sangre desbordándose junto al agua de la bañera.

Ese fue el principio del fin.

Su golpe con la realidad y la negación al tratar de ser alguien que posiblemente no era, lo llevaron al límite. Rechazó a Nick. Rechazó a sus amigos. Rechazó a todo aquel que se le acercara porque todos venían bajo el mismo pretexto: “ser diferente está bien”. ¡No, no estaba bien! Ser diferente era ser excluido y formar parte de una etiqueta que no le correspondía. Él no quería ser aquella persona en la que Nick lo había transformado.

Ahora recordaba el momento exacto donde todo se empezó a ir por el abismo; el momento exacto en el que se dijo que solo sería un experimento. Recuerda también la primera vez que le insinuaron que las fases no duran un año. Fue Nick quien se lo dio a entender y terminó con una nariz quebrada y con él alejándose hacia su casa junto a la palabra “marica” retumbando en sus oídos.

Daba igual, toda esa mierda ya estaba sepultada en el pasado. Luego de un verano agitado entre psiquiatras y medicamentos de todo tipo, Harry ya tendría que estar mejor; ya tendría que haber vuelto a ser el viejo rizado de perenne sonrisa coqueta; ya tendría que haber llenado ese agujero en el pecho que lo ahogaba y lo pujaba hacia abajo. Excepto que no lo estaba; no lo era; y en lo posible, se sentía aún más vacío.

Exclamó triunfante cuando finalmente halló la botellita amarilla que contenía las pastillas. Se las había recetado su psiquiatra hacía menos de dos meses, pues la anterior medicación parecía no surtir efecto; supuestamente, era una dosis más fuerte que las anteriores y no había posibilidades de que su depresión pudiera acentuarse más. Pero era evidente que nadie previó que los malos días existían.

Su madre no merecía esto. Su hermana, quien aunque no viviera con él siempre estaba para cuando la necesitaba, tampoco merecía esto. Se repetía que ellas estarían mejor sin él mientras observaba el rostro pálido, huesudo y ojeroso reflejado en el espejo. No se reconocía a simple vista, pero sus ojos verdes y brillosos por las lágrimas que se desbordaban, le decían que se trataba de él, de Harry; de su nuevo y destructivo Harry. Y no lo aceptaba. No lo quería.

Contó ocho pastillas exactas, confiando en que el efecto tendría que ser rápido y lo suficientemente potente para ponerlo a dormir; para matar sus latidos. Cerró los ojos, sabiendo que pronto se quedarían así: cerrados para siempre. Pensó en que su próxima vida podría ser normal y vivir una vida tranquila. Pensó en su madre y su hermana y en que ahora podrían seguir con sus vidas sin preocuparse de una abominación como él. Pensó en unos ojos color cielo que pertenecían a nadie, pero donde él creía que se encontraba su lugar. Pensó en una cálida mano extendiéndose hacia él, prometiéndole no dejarlo caer, pase lo que pase. Y entonces tragó las pastillas todas a la vez, forzándolas a pasar por su garganta, pensando por última vez que ahora, por fin, sería libre.

Lo primero que pudo distinguir, fueron luces fluorescentes blancas y cegadoras inundando su campo de visión; luego de la inesperada ceguera, el techo color menta tomó forma una vez dispersa la niebla de sus ojos. Lo segundo, fue un olor a alcohol, desinfectante y enfermedad que le confirmaban que se encontraba en una habitación de hospital. Lo tercero, fue una brisa que le acariciaba y lo hacía estremecer un poco al estar cubierto por una fina tela; seguramente era causada por las cortinas corridas y manchadas de un descolorido color gris. Lo cuarto que notó fue que estaba cubierto por intravenosas y molestos cables dispersos por sus brazos y su pecho. Finalmente, el quinto reconocimiento de forma auditiva, fue lo que lo impactó, desesperó y decepcionó al mismo tiempo: el molesto pitido del holter que señalaban el ritmo de un corazón latiendo. Todavía estaba vivo.

Había fallado por segunda vez.

Tenía ganas de gritar y llorar al mismo tiempo. ¿Cómo podía ser que hasta matarse le saliera mal? ¿Qué tan jodida podía ser la vida con él? ¿Aún le quedaba más por sufrir y por eso no lo dejaba marchar? La rabia, la frustración y la impotencia nublaban sus pensamientos. Harry solo quería marcharse en paz. Dejar de tener que recurrir a una navaja para marcar su muñeca porque no podía soportar el peso del dolor y los pensamientos que lo atacaban sin respiro.

Se estaba cuestionando qué razones podría haber para estar retenido en el mundo, cuando una llorosa y destrozada mujer entró a su habitación. Le costó reconocerla al principio debido a lo atontado que estaba por los sedantes y el reciente despertar, pero al encontrarse con los ojos inconfundiblemente verdes, supo que se trataba de su madre.

Dios, esa no podía ser la fuerte e independiente Anne Cox. Esa mujer sollozante, de sonrisa rota y brazos vacilantes que lo tomaban con cautela, no podía ser su madre. Y si lo era… la culpabilidad se le agarrotó en la garganta. Él había sido el causante de crear esa sombra callada y dubitativa que lo miraba con demasiado dolor y mucha tristeza.

─Lo siento ─murmuró ella, ahogando un nuevo sollozo. Harry no contestó; podía sentir en su garganta seca como miles de llamas lo incendiaban─. Sé que nada de lo que te diga ahora va a cambiar tu forma de pensar y de ver las cosas, pero te amo, Harry, lo hago, y yo… ─Se interrumpió, inhalando profundamente para ahogar un desgarrado llanto que amenazaba con salir de lo más profundo de su alma.

Harry quería decirle que lo sabía. Que no era su culpa que él estuviera ahí. Que todo saldría bien y que le prometía mejorar. Que lamentaba haberla roto en mil pedazos y haberla herido hasta el punto de convertirla en esto, haciéndola cargar con un hijo tan inútil, despreciable y anormal. Pero no podía. Las yemas de sus dedos picaban; quería tocarla, abrazarla y dejarse mimar porque, después de todo, lo había salvado de nuevo y, sin embargo, tampoco lo hizo.

─Estoy frustrada, pero no contigo, sino conmigo ─confesó Anne, deshaciendo el abrazo y mirándolo con sus ojos rojos─; es decir, soy tu madre, ¿cómo no me di cuenta de que estabas mal? ¿Por qué fui tan ciega? ─cuestionó desesperada, negando con la cabeza─. Te prometo, mi amor, que te ayudaré a mejorar; buscaré la mejor ayuda para que te quedes a mi lado porque no te quiero perder, Harry. No a ti ─ Y no puso contenerse más. Su madre se derrumbó frente a sus ojos.

Pasó toda la noche en la clínica, dejándose mimar por su mamá, ambos en silencio y compartiendo la cama en la que Harry se encontraba, con él hundido en sus brazos. Sus músculos comenzaban a doler y su cuello se estaba torciendo de una manera casi antinatural, provocando una futura contractura, pero no le importó. Después de que Anne confesara todo aquello, Harry no podía negarle que se quedara a su lado. A decir verdad, las caricias que dejaba sobre su pelo lo hacían sentir tranquilo y adormilado. Sin preocupaciones. Sin problemas. Sin intentos. Sin etiquetas. Solo eran él y su madre.

─Harry, bebé ─Le llamó, suavemente. Levantó sus cansados ojos verdes, murmurando un leve “hum”, dándole a entender que le estaba prestando atención─. Una última cosa: siempre serás mi Harry, sin importar el camino que elijas y lo que quieras ser, ¿de acuerdo? ─Ok, eso no se lo esperaba; su cuerpo se tensó visiblemente. Sintió un beso cargado de amor posarse en sus rulos, calmándolo─. Está bien, mi cielo. Duerme, sueña y despierta, Harry ─Como una nana de dulces palabras, él no discutió.

Tal vez fue un sueño, se cuestionó. Es que parecía tan real, se contradijo. Mordió sus labios, preocupado. No podía ser un sueño porque, ¿cómo podría cuando todo le parecía familiar? Incluso esos ojos cielo, esa risa contagiosa y ruidosa, y esa mano. Esa cálida mano que lo apretaba y lo sostenía para no dejarlo caer. ¿Quién era? ¿Por qué estaban en ese lugar? ¿Qué significaba ese lugar?

Gruñó y se hundió más contra el cuero del asiento del auto. Seguro no era más que una tontería; nada importante. En este momento debería estar preocupándose por otras cosas; como, por ejemplo, que hoy ingresaría a un hospital psiquiátrico en el centro de Londres.

Compuso una mueca. Había prometido a su madre que intentaría mejorar y que aceptaría cualquier tipo de ayuda que ella considerara prudente para él. Pero jamás se imaginó que lo internaría en un sanatorio. A solo dos días del “accidente”, Anne se había puesto en contacto de inmediato con el hospital para organizar su duradera, él creía, estadía. Fue aceptado de inmediato y procesaron su ficha de ingreso el mismo día. La única razón por la cual no estaba allá desde que le habían dado de alta, fue su hermana Gemma, quien viajó desde Manchester para despedirse, gritarle y llorar con él. Su hermana nunca cambiaría y eso es algo que a él le hubiera gustado tener como cualidad: no cambiar.

─Prométeme que darás lo mejor de ti. Ya sabes, los Styles no nos damos por vencidos y siempre tenemos la razón ─Le recordó Gemma, con diversión y una sonrisa que poseía los mismos hoyuelos que él, pero que no era feliz, sino melancólica.

Le devolvió la sonrisa más sincera que podía brindarle, dejándola un poco más conforme al juzgar por la expresión satisfecha de sus facciones. Cielos, no se había dado cuenta de lo mucho que la había extrañado desde que había partido a la Universidad. Más que a su padre, se atrevía a decir.

Su padre…

─¿Estás listo, Harry? ─preguntó su madre, sacándolo de sus pensamientos.

Miró hacia su izquierda y observó el blanco edificio que se desplegaban detrás de las rejas negras que formaban el amplio portón, sosteniendo un cartel arriba donde se leía claramente: “Hospital psiquiátrico. Bienvenido a Simon Cowell”. Vaya nombre. De repente se sintió muy nervioso.

Cruzaron la gran puerta de fierro forjado y caminaron por el gran camino de asfalto que se extendía hasta la entrada del edificio. Harry observaba anonadado el lugar: hojas naranjas, rojas y amarillas, propias del otoño, poblaban el patio delantero a ambos lados del sendero, rodeando al edificio; árboles pelados se desplegaban hasta la mitad del camino, estratégicamente plantados para que formaran una fila y quedaran en plan de decoración; también había estatuas de ángeles colocadas una al lado de la otra, a la derecha y a la izquierda, a menos de cinco metros, del camino de cemento. No se parecía en nada a los manicomios tétricos que salían en las películas o en las series. Este lugar se veía tan… vivo.

─Bienvenidos al hospital Cowell. ¿En qué puedo ayudarle? ─preguntó la recepcionista del lugar apenas ingresaron por las puertas automáticas de vidrio.

La chica era joven, de apenas unos veintipocos años, cabello rubio lacio, cejas pronunciadas, labios rosas, alta, de cuerpo esbelto y muy, muy atractiva. Y no le había movido ni un solo rulo a Harry. Una alarma invisible resonó en su cabeza. Sos ojos no cambiaron la perspectiva sobre la joven; no la miraron de otra forma que no fuera una simple chica al pasar; no estaba encantado, ni tenía ganas de saltarle encima. ¿No era una reacción normal cuando ves a una linda chica el querer coquetear con ella? Harry no sentía que eso fuera correcto.

Quería darse de cabezazos contra la pared, pero recordó dónde se encontraba ahora y no quería que le pusieran un chaleco de fuerza tan pronto.

Mientras su madre se encargaba del papeleo, el rizado se sorprendía más a medida que inspeccionaba el lugar: era como un hospital más. Paredes blancas, sillas de espera forradas de cuero azul, miles de puertas por todos lados, rodeando la recepción, la cual consistía en una amplia mesa blanca y una maseta con flores sobre ella. Nada desconocido ni que no le fuera familiar. Podía sentirse un poco más cómodo si solo se detenía a pensar en ello y no en las próximas terapias, pastillas y el hecho de que estaba en un sanatorio y no en un hospital común.

Entonces lo vio desde lejos. Allí, recargado contra la pared, un par de ojos color cielo lo miraban fijamente.

Dos ojos demasiado familiares.

LEEME:

por **Angeles** Mar 28 Ene 2014, 11:16 pm

Ay Harry D:
Pobre, pero se tiene que aceptar por como es >:c NO SUICIDARSE! ah
Bueno, perdón.
No me gusta que se sienta así :c
Al menos apareció Louis... ahí mirándolo... intesamente (? ah JAJAJAJAJAJAJA
Bueno... si es que ese es Louis, ah.
Me gustó el capitulo!!!
Saludos n.n

por **I'mLarryShipper** Miér 29 Ene 2014, 12:32 am

Es Louis el que apareció no? Ojalá que sii!!!
Me super gustó el cap y me dio mucha lastima Harry.
Espero que Louis lo ayude a volver a ser como antes.
Ya quiero que sea la semana que viene!!
Pero el problema es que me voy de vacaciones y no voy a tener internet!
(Quería matarlos a mis viejos cuando me dijeron eso) pero bue, que se le va a hacer... voy a tener que esperar...
Igual espero que en algún momento poder encontrar Wi-Fi en un café o algo.
No molesto más.
Besos :hug:

por **PastelitoDePazzaxD** Miér 29 Ene 2014, 5:13 am

Hiii New Reader is here!!!
Me llamo Paz, pero dime Pazza, soy de Mexico &' tengo 13 años...

Amo tu novela pobre Harry... Nunca me cayo bien Nick...

El chico que estaba en la puerta era Louis..? Que hace ahi...?

Siguelaaa

por **pattyguzman** Miér 29 Ene 2014, 11:00 am

Wassaap!! me llamo patricia pero :c dime mejor patty e-e, que lindos eran de peques :3 tan inocentes ~~bueno un poco mas el haroldo e_e~~ y lucho :3 el mismo dia que le dijo que nunca le soltaria la mano :c se fue :c y ahora el harold jodido :c, ese desgra de nick ¬¬ jamas me cayo bien, noc le siento como una mala espina :/ en la nove y en la vida real xdd noc presiento algo que no me gusta de el ¬¬, y ahora el pobre haroldo dañado intentando 2 veces suicidarse y uff anne le salva al menos :3, bueh al menos ahora le ayudaran, pero O_O el que le estaba viendo era lucho? *-* ERA EL? DIME QUE SI PLISSSS, NO VAYA A SER EL DUENDE ESE XDD, bueh byee cuidatee :DD y siguela pronto :DD

PD: no se si termine de leer tu nove, ya que en marzo me ire a vivir con mi papa a USA, y el como no sabe usar mucho la pc xdd dudo que me deje a mi xdd y le encanta andar mas en la calle que en la casa y creo que milagro entrare a internet xdd pero si puedo uff gracias a Dios ire rapido para poder leer tu nove :3 presiento que amare esta nove *-* bueh ahora si byee :DD

por **Verothful** Miér 29 Ene 2014, 8:18 pm

¡Nueva Lectora! :3
Amé el prólogo y el capítulo, es tan hermoso el prólogo me dio tanta ternurita pero ODIO AL PADRE DE LOUIS, ¿Por qué decidió eso? Y el capítulo fue tan triste, pobre mi Hazza está tan triste que me contagia :'( Pero estoy segura que harás que en la clínica mejore porque ahí esta Boo Bear :)

En fin, quiero que ese par se encuentre y sean pareja ¡YA! Ntee. Siguela y espero capítulo cuanto antes, prometo comentar cuando lo subas y sino lo hago pido disculpas pero la uni me trae de cabeza.

Besos x(:

por **Dimples'sHarold** Jue 30 Ene 2014, 1:56 pm

nueva lectora! me llamo Alba

Pobre babe :(

por **LARRYSTYLINSON05** Jue 30 Ene 2014, 8:30 pm

HOLAAA! :DD
Wow, dios casi me haces llorar, sentí todo lo que sintió Harry..
No no me paso en la "vida real", pero tu novela me transmitió su sufrimiento..
Me encanta como escribes, me sorprendes cada día mas, pero odio esperar xD
Así que nena sube el capitulo dos o ya te estoy rastreando xD
SE ENCONTRÓ CON ESOS OJOS AZULES! :DD
Es increíble la novela, me encanta la trama <3
Nos vemos(:
BESOOS <3

por **memiabril** Vie 31 Ene 2014, 12:54 pm

Angeles escribió:Ay Harry D:
Pobre, pero se tiene que aceptar por como es >:c NO SUICIDARSE! ah
Bueno, perdón.
No me gusta que se sienta así :c
Al menos apareció Louis... ahí mirándolo... intesamente (? ah JAJAJAJAJAJAJA
Bueno... si es que ese es Louis, ah.
Me gustó el capitulo!!!
Saludos n.n

Hola, babe!
Oh, bueno, alguien lo está vigilando a nuestro Harry. Ya veremos, hay muchos ojos azules rodeando la vida real de Harry, e.e.
Sí, ya sé, lo hago sufrir al pobrecito, u.u. Y realmente, creo que en este fic voy a tener cierta manía con eso. Te advierto, por si las dudas, :P.
Muchas gracias por leer y comentar, cariño, <3.
Te dejo muchos besotes con amor.

por **memiabril** Vie 31 Ene 2014, 12:59 pm

I'mLarryShipper escribió:Es Louis el que apareció no? Ojalá que sii!!!
Me super gustó el cap y me dio mucha lastima Harry.
Espero que Louis lo ayude a volver a ser como antes.
Ya quiero que sea la semana que viene!!
Pero el problema es que me voy de vacaciones y no voy a tener internet!
(Quería matarlos a mis viejos cuando me dijeron eso) pero bue, que se le va a hacer... voy a tener que esperar...
Igual espero que en algún momento poder encontrar Wi-Fi en un café o algo.
No molesto más.
Besos :hug:

Hola, cariño!
Ou, me alegra mucho que te haya gustado el capítulo, :D.
Definitivamente, no te puedo adelantar nada, pero Louis tendrá mucho que ver con el mejoramiento o empeoramiento de Harry.
Me llena de emoción que quieras el segundo capítulo, :D.
Oh, vamos, disfruta de un poco de relax en la playa/o donde sea que vayas, :D. Quedate tranquila que no borraré nada y, es más, ya tendrás un cap nuevo la semana que viene para leer cuando vuelvas. ^^.
Jajjjaja, ánimo y espero que lo pases muy lindo, :D.
Muchas gracias por el lindo comentio, <3.
Besotes con amor.

por **memiabril** Vie 31 Ene 2014, 1:01 pm

PastelitoDePazzaxD escribió:Hiii New Reader is here!!!
Me llamo Paz, pero dime Pazza, soy de Mexico &' tengo 13 años...

Amo tu novela pobre Harry... Nunca me cayo bien Nick...

El chico que estaba en la puerta era Louis..? Que hace ahi...?

Siguelaaa

Hola, corazón.
Me encanta que ames mi novela, ou, que lindo es leer eso.
Sí, a mi tampoco me cae bien Nick, ni en este fic, ni en la vida real, ¬¬. Grrr.
Oh, ya veremos, ya veremos en el segundo capítulo. (Me gusta generar intriga, lo siento :P).
Gracias por comentar y leer, <3.
Besotes con mucho amor.

por **memiabril** Vie 31 Ene 2014, 4:03 pm

pattyguzman escribió:Wassaap!! me llamo patricia pero :c dime mejor patty e-e, que lindos eran de peques :3 tan inocentes ~~bueno un poco mas el haroldo e_e~~ y lucho :3 el mismo dia que le dijo que nunca le soltaria la mano :c se fue :c y ahora el harold jodido :c, ese desgra de nick ¬¬ jamas me cayo bien, noc le siento como una mala espina :/ en la nove y en la vida real xdd noc presiento algo que no me gusta de el ¬¬, y ahora el pobre haroldo dañado intentando 2 veces suicidarse y uff anne le salva al menos :3, bueh al menos ahora le ayudaran, pero O_O el que le estaba viendo era lucho? *-* ERA EL? DIME QUE SI PLISSSS, NO VAYA A SER EL DUENDE ESE XDD, bueh byee cuidatee :DD y siguela pronto :DD

PD: no se si termine de leer tu nove, ya que en marzo me ire a vivir con mi papa a USA, y el como no sabe usar mucho la pc xdd dudo que me deje a mi xdd y le encanta andar mas en la calle que en la casa y creo que milagro entrare a internet xdd pero si puedo uff gracias a Dios ire rapido para poder leer tu nove :3 presiento que amare esta nove *-* bueh ahora si byee :DD

Hola, Patty. Bienvenida, :D.
Jajajja, sí, a mí tampoco me cae bien Nick, :/, idk why, pero es así.
Bueno, digamos que varias personas de ojos celestes rodean a Harry, apenas me di cuenta de ello, jajaja. Emm, ay, me gana decirte, pero a la vez quiero dejarte con la intriga. Igual, en el comienzo del segundo cap, ya se descubre quién es, :O.
Ou, cariño, eso es buenísimo por ambos lados; me alegra que tengas esas expectativas sobre mi fic, :D y gracias, en serio lo voy a valorar muchísimo por tan lindo afecto. Emmm, por desgracia no creo terminarla antes de marzo, u.u. Fuck. :(. Lo lamento por eso, u.u.
Te dejo muchos besotes con amor, honey, <3.

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