Re: Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic)

por **Nialler's wife** Vie 24 Ene 2014, 6:14 pm

valeriekehrhahn03 escribió:oh pobre emma :(

SIGUELAAA

lo sé :( la sigo pronto :)

por **Dilingdingdong** Vie 24 Ene 2014, 7:36 pm

jsakjsajs que mala!!!

por **Nialler's wife** Vie 24 Ene 2014, 9:35 pm

Dilingdingdong escribió:jsakjsajs que mala!!!

lo sé JAJAJAAJA

por **Nialler's wife** Vie 24 Ene 2014, 11:42 pm

Capítulo diez: “Repítelo.”

Emma notó al entrar a su casa que su pequeño hermano yacía plácidamente dormido en el sofá de la sala. Se había quedado dormido viendo Hora de Aventura. Ella entró y cerró la puerta principal con cuidado de no hacer ruido alguno que despertase a su hermano, y se dirigió de puntitas a la cocina a por un vaso de agua.
Su garganta de encontraba seca de tanto gritar, de tanto gritarle a Zayn que lo odiaba. Pero raramente ella no lo odiaba, solo estaba dolida por lo sucedido. Lo tomaba como traición aunque ella sabía que eso no iba al caso. Zayn jamás fue exclusivo con ninguna chica, Emma tampoco era así, pero se sentía mal por lo que hizo el moreno. ¿Rechazarla para dormir con otra? Era un gran golpe al ego de Emma Eastwood.
Sacó un vaso de la alacena y se sirvió agua fría de la heladera. Se recostó por la encimera pensando en nada por un rato mientras se acababa su agua. Luego escuchó el timbre.
Dejó su vaso en un lugar equis y se dirigió a abrir la puerta.
– ¿Quién? –preguntó antes de sacar la tranca de la puerta.
–Emma, soy yo –dijo en tono suplicante una voz.
Zayn Malik.
–Vete –ordenó Emma.
–Emma, por favor…
–Por favor, tú –hipó Emma–. Vete.
Se escuchó el suspiro frustrado del moreno, que luego golpeó con fuerza la puerta. Emma se giró a mirar a Elliot, que sólo se removió inquieto en el sofá.
– ¡Perdón, Emma! –gritó frustrado Zayn desde el otro lado.
–Por favor, Elliot está durmiendo –dijo Emma.
–Ábreme, por favor, por favor, Emma –suplicó el chico desde afuera.
– ¿Luego te irás? –pidió la morena.
–Está bien –medio rugió el chico.
Emma abrió la puerta y salió afuera, cerrándola detrás de sí. No le dio tiempo de ponerse de frente al chico de ojos avellana para cuando él ya tenía sus manos en el rostro de ella y estaba besándola con urgencia, insistente, rogándole, implorándole perdón.
Emma se perdió por un momento en el beso, olvidándose de la otra chica, olvidándose de todo sólo por unos segundos. Se agarró de sus antebrazos y se obligó a apartar sus labios de los de él.
–No me beses… –pidió ella.
–No me pidas eso –rogó él, abrazándola.
Ella sollozó un poco en el abrazo pero luego se recompuso como si ese momento de debilidad nunca hubiese existido.
–Perdón –dijo el chico, besando el rostro de Emma. Ella hizo un gesto de dolor con cada beso, le dolía en el corazón toda la situación ésta.
–No me beses, aún tienes los residuos de ella en tus labios –imploró Emma–. No me hagas esto, por favor… yo…
– ¿Qué tengo que hacer para que me perdones? –suplicó el chico abrazándola fuerte. Impidiéndole el mero intento de alejarse de él. Lo raro era que ella no se quería alejar de él.
–Eres un imbécil –bramó Emma.
–Lo sé.
–Te odio.
–No…
Y Emma lo besó. Lo besó duro y sin sentimientos. Zayn sentía que algo iba mal con ella, con el beso, con ellos.
– ¿Por qué no me follas como follaste a tu Anna? –preguntó Emma muy cerca de su oído, su respiración chocando con la sensible piel de ese lugar.
Zayn se tensó.
–Emma…
– ¡Hazlo! Cobarde –ordenó.
–No –se impuso él.
– ¡Jódete! –gritó ella.
– ¡¿Cuándo entenderás que no te quiero sólo para eso?! ¡¿Cuándo comprenderás que te quiero para más?! ¡Maldita sea, Emma! –vociferó Zayn desesperado.
– ¿Más? –Rio incrédula la morena–. Nunca obtendrás más de mí. Soy la chica-problema. ¿Lo olvidas? Eres un idiota.
Zayn apretó los dientes y agarró a Emma del codo, la obligó a mirarlo a la cara, a los ojos.
–Repítelo –ordenó él.
Ella lo miró impasible.
–Repite, que no me quieres para más –dijo él.
–Suéltame.
–Eso pensé –dijo soltándola.
Emma pasó los dedos por la marca roja producto del agarre del moreno de ojos avellana. Él se quedó viéndola, pasándose las manos por el cabello rebelde, todo agitado por la situación.
–Debes irte –dijo nada más Emma.
El chico asintió y sin despedirse se alejó calle bajo.

Pasaron dos días entre clases y Zayn y Emma ignorándose mutuamente. Era algo bueno en el fondo. Puesto que así el moreno no se arriesgaba a recibir ninguna paliza por parte de Michael Clifford y sus matones –amigos–, y a Emma eso la tranquilizaba.
El moreno no se volvió a aparecer por su casa desde esa tarde-noche del martes cuando pelearon y él se largó sin un “adiós” siquiera.
Emma lo prefería así de todos modos.

Era viernes al mediodía cuando una morena y una rubia se encontraban compartiendo el asqueroso almuerzo del comedor de su instituto.
Emma Eastwood había cruzado miradas con Zayn Malik durante casi todo el almuerzo, pero alejaba la mirada enseguida. Michael sonreía ante el hecho de que ellos ya no se hablaban.
– ¿Vamos a Coco’s hoy? –propuso Emma a su amiga.
Melanie revolvió su comida, que era un intento fallido de alguna pasta rara. Ella torció la boca con disgusto y soltó sus cubiertos.
– ¿Para? –preguntó.
–Festejar –respondió Emma.
Melanie arqueó las cejas.
– ¿Festejar? –repitió.
–Sip.
– ¿Qué, se supone, festejamos?
–Mi cumpleaños.
–Falta una semana, chica.
–Lo sé, ¿y? Quiero, necesito sexo.
Zayn, sin querer, escuchó eso último mientras pasaba cerca de la mesa de las chicas, llevando su bandeja vacía hacia el lugar dónde se colocaban. Apretó los dientes, tensando la mandíbula y casi dio vuelta para encarar a Emma frente a toda la gente. Lo reflexionó más y se dijo que no valía la pena hacer una escena, puesto que Emma sólo se enojaría más.
Se demoró un rato para escuchar a Melanie reír y responder:
–Seguro, vamos a Coco’s.

– ¿Qué me pongo, Mel? –preguntó Emma.
–Uhm –dijo Melanie jugando con su celular–. La pollera de jean corta y la blusa negra.
– ¡Sí! Eres una niña genio, te amo –dijo Emma.
–Lo sé –respondió la rubia.
– ¿Qué tacones?
–Los rojos, de infarto –dijo Melanie guiñándole un ojo a Emma. Eso produjo que Emma se riese sin control.
– ¿Qué te pondrás? –preguntó Emma a Melanie.
–El short negro con la blusa verde agua y… uhm… tus tacones negros.
– ¿Mis?
– Tus.
Ambas rieron.
–Espero de verdad conseguir sexo –dijo Emma.
Melanie asintió seria.
–Yo ya me quiero acostar contigo, rawr, sacas mi lado lésbico –dijo Melanie.
Emma rio a carcajada limpia.
–Oh, Dios mío.
Se maquillaron un poco y luego salieron con dirección a Coco’s. Ingresaron al local gracias a Melanie que sabe como convencer al guardia. Sonaba alto Trouble de Neon Jungle.
Melanie miró a Emma y se echó a reír como maniaca. Emma rio con ella por la canción y su letra. Empezaron por ir por unas cervezas y Mel aprovechó para coquetear con el barman. Tomaron dos latas de Miller y luego fueron a la pista a bailar. Sonaba ya entonces We Can’t Stop de Miley Cyrus, una de las canciones favoritas de las chicas; coreaban y bailaban riendo. Pronto se acercaron dos muchachos guapos junto a ellas. Uno era rubio, de ojos entre azules y verdes. Se llamaba James y enseguida quiso bailar con Emma. Ella gustosa agarró sus manos y lo llevó al centro de la pista, donde bailaron juntos mientras Melanie se quedó bailando con el moreno de ojos verdes de nombre Alec.
Las chicas disfrutaban la noche con sus respectivas compañías. Emma no notó al moreno que la controlaba desde un lugar apartado. El chico miraba entristecido como Emma bailaba con este otro chico. Cerró los ojos con fuerza, por el dolor de ver los labios de Emma en los de otro chico. Se maldecía a sí mismo por ser un idiota y haber hecho lo que hizo. Él no podía reclamar nada a Emma, le tocaba mirar impotente desde un lugar lejos de ella y contentarse con llenar ese vacío –cada vez más profundo–, con cerveza barata.
Luego de unas horas empezó a sonar una canción que él amaba, y entonces se dirigió hacia Emma y su acompañante. Le hizo unas señas al chico y él muchacho se apartó dócilmente, poniendo la excusa de ir a conseguir cerveza.
–Te espero –dijo Emma batiendo las pestañas.
Luego de unos segundos, sintió unas manos en su cadera. Sonrió para sus adentros y bailó pegando su espalda al desconocido con quien bailaba. Jamás se percató de que era Zayn. Agarró sus manos mientras John Newman cantaba Love Me Again. Se giró para quedar de frente al chico y retrocedió en seco cuando vio que era Zayn.
– ¿Dónde está James? –exigió evitando la mirada de Zayn.
– ¿El chico que te metía la lengua hasta la garganta? –preguntó Zayn.
Emma se tensó. Zayn sonaba completamente borracho. Lo miró.
– ¿Estás bien? –preguntó preocupada.
Él negó con la cabeza.
– ¿Bien? –Replicó frunciendo el ceño–. Me duele aquí –dijo agarrando la mano de Emma y poniéndola sobre su pecho, encima del corazón–, porque estabas besándote con otro.
Emma sacó su mano rápidamente.
–No empieces.
–Baila conmigo –dijo él agarrándola de las caderas fuertemente.
–No –dijo Emma.
–Por favor –rogó.
–Estás ebrio –dijo ella.
–Y enojado –dijo él–. Y al verte así de sexi solo me provoca querer follarte como se los hago a todas las putas de estos bares, porque estoy tan enojado contigo.
Emma aguantó la respiración.
–Zayn, estás muy ebrio. Buscaré a Mel para irnos.
–No. Quiero tomarte en el baño de aquí. Como cuando estuve con la rubia, ¿te acuerdas?
Emma sabía que era el alcohol lo hacía hablar y actuar de esa manera, pero le dolía cada cosa que él hacía o decía. Era ridículo puesto que antes le imploraba que la follara de ese modo.
–Vamos por Mel –dictaminó ella.
Él la siguió dócilmente a través de la masa infernal de gente en la discoteca. Melanie los visualizó antes de que llegaran ella y articuló “mierda” cuando vio a Zayn tropezar y a Emma sostenerlo.
–Eres caso serio, chico –dijo Melanie.
–Vámonos, Mel –pidió Emma.
–Está bien.
Se despidieron de los chicos y Melanie se disculpó con ellos, al igual que Emma.
–Lo lamento, James –dijo apenada Emma.
– ¿Lo haces? –preguntó mordaz Zayn.
Emma lo codeó.
–Está bien, preciosa –Emma sonrió y lo besó en los labios como despedida.
Zayn cerró los ojos y gruñó.
–Camina –ordenó Emma.
– ¿Te gusta hacerme sufrir?
–No, Zayn.
–Sí –dijo dolido.
–Siquiera no me acosté con él –replicó molesta.
–Pero querías.
–Sí, lo jodiste una vez más –dijo enervada.
–Ya te dije que se puede arreglar –dijo el moreno cerca de su cara.
–No me voy a acostar contigo, Malik.
–Ouch, Eastwood. Me duele.
–Lo siento –dijo ella cortante.
– ¿Me llevarás a casa?
–Sí.
–Llévame a la tuya –pidió.
–De ninguna manera.
– ¿No confías en mí?
–No así.
–Nunca te haría daño.
–Recién dijiste que querías follarme como a una de tus tantas putas.
–Lo hago. Pero no te haría daño. No a ti.
–Ebrio y loco –dijo ella frustrada.
–Loco por ti.
–Dejen el romanticismo, please –rogó la rubia.
Emma le quitó el dedo del medio y Zayn rio. En algún momento dado los tres empezaron a reír como dementes.
Caminaron hasta la casa de Emma y metieron como pudieron a Zayn a la casa y lo acostaron en el sofá. La morena despidió a su amiga desde la puerta y dijo que ella se encargaría del chico. Melanie le dijo que se cuide y que la llame para cualquier cosa. Se abrazaron y Emma entró de nuevo a la casa.
Zayn no se encontraba en el sofá.
Emma blasfemó. ¡Despertará a Elliot!, dijo para sí Emma. Se puso a buscarlo y lo encontró bebiendo agua en la cocina. Parecía con la mente más despejada pero aún así ella guardó algo de distancia. Se acercó lentamente a él.
–No te haré daño, perdón si te asusté –dijo él.
–Lo sé –dijo Emma–. No me asustaste.
–Claro que sí.
–No.
Él la miró triste.
–Lo estabas besando.
–Zayn…
–Apenas lo conoces.
–No me salgas con eso.
Él asintió sonriendo.
Se acercó a Emma con cautela y le puso un mechón de cabello detrás de la oreja izquierda. Se agachó cerca y Emma se tensó. Zayn inspiró cerca de su cuello. Su respiración hacía cosquillas a Emma.
–Hueles bien –dijo él–. Pero hueles un poco a él.
–Ah.
Zayn agarró a Emma de las muñecas y se las levantó de golpe. Poniéndola por la heladera se pegó a ella. Ella tragó saliva.
–Zayn…
–Te quiero, Emma.
–Estás ebrio.
–Sí, pero los ebrios siempre dicen la verdad.
–Mañana no te acordarás de esto –dijo ella.
–No sé…
–Suéltame.
–No.

Zayn besó enérgicamente a Emma.

por **●cнrιѕ●** Sáb 25 Ene 2014, 1:40 am

¡Nueva lectora!
¡Hola! :P
¿Cómo es posible que esta novela sea tan perfecta? :aah:
Te juro que si la dejas ahí te mandaré a Elmo, él sabe donde vives Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic) - Página 4 2278276204

Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic) - Página 4 2278276204

Siguela, por favor Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic) - Página 4 1926951358

Besos :hug:

por **Nialler's wife** Sáb 25 Ene 2014, 8:56 am

●cнrιѕ● escribió:¡Nueva lectora!
¡Hola! :P
¿Cómo es posible que esta novela sea tan perfecta? :aah:
Te juro que si la dejas ahí te mandaré a Elmo, él sabe donde vives
Siguela, por favor
Besos :hug:

Elmo es mi mejor amigo(? ahque. JAJAAJAJAJA ¡HOLAAAAA! ay, no es perfecta :oops: es re normal :oops: Gracias por comentar Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic) - Página 4 1608199403

Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic) - Página 4 1608199403

por **valeriekehrhahn03** Sáb 25 Ene 2014, 5:12 pm

LO AMEEE!

SIGUELAAAAAAAAA

por **Dilingdingdong** Sáb 25 Ene 2014, 5:39 pm

Ay dios mio askjksjkasj otra vez en la mejoor parte!!! malvadaaaaa kajskajskjja. me gusto muchismo este cpi<3

por **Nialler's wife** Dom 26 Ene 2014, 4:11 pm

valeriekehrhahn03 escribió:LO AMEEE!

SIGUELAAAAAAAAA

la sigo pronto adsfgdhjkf ahora ¿tal vez?

por **Nialler's wife** Dom 26 Ene 2014, 4:11 pm

Dilingdingdong escribió:Ay dios mio askjksjkasj otra vez en la mejoor parte!!! malvadaaaaa kajskajskjja. me gusto muchismo este cpi<3

soy telible(? ya la sigo :)

por **Nialler's wife** Dom 26 Ene 2014, 4:16 pm

Capítulo once: “Todo.”

Emma le devolvió el beso de manera febril, como si no hubiese un mañana, por lo menos un mañana con Zayn Malik. Le importaba realmente poco ya el hecho de que él estuviese ebrio, o si él no se acordaba de nada al día siguiente. Lo quería y necesitaba en ese momento.
Él le soltó las muñecas y ella le levantó la camiseta de Nirvana, tirándola al suelo. Zayn se pegó más a ella y Emma lo sentía en todo su esplendor contra su vientre. Jadeaba con intensidad sólo por el hecho de estar pegados. ¡Y eso que seguían –en el caso de Zayn parcialmente– vestidos!
Emma pasaba sus manos de arriba abajo por el torso de Zayn, sintiéndolo, sintiendo su piel caliente bajo sus manos.
Zayn la besaba fuerte. Emma le tomó la palabra de que él la “follaría” como folla a sus putas. No le importaba. O quizá sí. Pero estaba muy caliente –en toda la extensión de la palabra– y ligeramente mareada por la cercanía y la colonia de Zayn, que no le importaba si lo hacían en el suelo de la cocina de su casa.
Entre besos Zayn murmuraba algo ininteligible. Eventualmente Emma entendió que decía “habitación”. Ella lo agarró de la mano y lo guio hasta las escaleras que llevaban a la segunda planta donde se encontraba su habitación. Agradecía a todos los santos de que Elliot no se encontrase en la casa.
Le dio indicaciones de cómo llegar a su habitación y dijo que lo encontraría ahí. Tenía que pensar, a solas. Él subió y Emma lo observó hasta que desapareció. Ella se dirigió a la cocina y se sirvió agua fría en el vaso que Zayn había utilizado. Se dijo que no quería hacer esto. No mientras él no esté en sus cabales.
Subió las escaleras a paso ligero, pensó que con suerte y Zayn se había quedado dormido. No fue así. Lo encontró sentado en su cama, descalzo y con un portarretratos rojo en sus manos.
La foto de mamá y papá, pensó Emma.
Ella tocó la puerta y Zayn se sobresaltó. Dejó a un lado el portarretratos y se acercó a Emma dándole un beso en la coronilla.
–Perdón si no quiero hacer esto –murmuró Zayn.
–Está bien –musitó ella–. Tampoco quiero hacerlo.
– ¿No?
–No ahora.
Él sonrió.
–Tú mamá era una mujer hermosa. Veo a quien saliste –comentó él.
Emma se mordió la lengua.
–No, gracias –dijo–. No me parezco en nada a esa mujer.
Él frunció el entrecejo.
– ¿No la… quieres? –preguntó tímido.
– ¿Cómo querer a alguien que te abandonó?
–Emma…
–No la quiero. Fin –dijo cortante.
Zayn asintió.
–Está bien –musitó suavemente, abrazando a Emma.
–Yo soy como papá, realmente –dijo Emma sonriendo en su hombro–. Siempre me dijeron que saqué su personalidad. Obstinada como él.
–Oh, sí –dijo Zayn.
–Cállate –dijo riendo.
–Estoy ebrio. Demándame.
Emma rio.
–Deberías dormir, Zayn –dijo ella seriamente–. Acuéstate, yo dormiré en la cama de Elliot.
–Duerme aquí.
–Zayn…
–Sólo dormir, Emma.
Ella dudó.
–Está bien –dijo finalmente.
Se acostó primero Emma y luego Zayn a su lado, abrazándola. Se taparon con la sábana púrpura, se besaron unos minutos y se durmieron así. Juntos.

Era sábado de mañana. Las diez y cuarto para ser exactos, cuando Emma se despertó y no encontró a Zayn a su lado. Algún tipo de decepción zumbaba cerca, pero decidió ignorar eso y arreglarse. Se encerró en su baño, se duchó y cambió de ropa a algo más cómodo. Se colocó unas de sus remeras de Sleeping With Sirens y puso un short color verde oscuro, obscenamente corto, total, no había nadie en su casa.
O eso pensó ella.
Bajó las escaleras alzándose el cabello en una coleta. Entró a la cocina y se encontró con un Zayn Malik preparando el desayuno.
–Oh mi… No tenías qué –dijo ella.
–Está bien, pasas mucho tiempo cuidando a Elliot, ¿verdad? Déjame cuidar de ti –dijo Zayn tranquilamente.
Se fijó en su short y sonrió. Emma lo estiró más abajo.
–Me tientas, Emma –dijo con una sonrisa de medio lado, calentando el café.
–Pensé que… te habías… uhm… ¿Ido? –dijo, muy tímida de repente.
Zayn sonrió.
–Nop. Aquí estoy.
–Puedo verlo –dijo Emma secamente–. ¿Tienes la mente más despejada?
Zayn dejó lo que hacía y la miró.
–Perdón por ayer.
–No, está…
–No lo está –dijo él–. No era yo, o quizá sí. Pero no es el yo que quiero ser contigo.
Ella asintió mordiéndose el labio. Se acercó a él y se puso de puntitas para depositar un tierno beso de “olvídalo, está bien” en su mejilla. Zayn sonrió.
–Todo, parcialmente, olvidado –dijo Emma.
– ¿Parcialmente?
–Hay cosas que me gustaría recordar –musitó sonrojándose.
¿Quién era esta chica toda tímida? Definitivamente no Emma Eastwood.
– ¿Cómo qué? –preguntó él.
– ¿No te acuerdas de nada?
Él negó.
–Que bien –dijo ella sonriendo.
– ¡Emma!
– ¡Zayn! –imitó ella riendo.
Ambos rieron y desayunaron juntos.
Daban las una pm y Zayn tenía que reportarse en su casa y Emma tenía que traer a Elliot de lo de su compañero. Se despidieron con un casto beso.

–Melanie, compra algo ya –dijo una morena ya furiosa en el centro comercial de la ciudad.
– ¡No puedes sólo comprarlo! ¿Sabes? –exclamó la rubia.
Emma Eastwood y Melanie Grace estuvieron recorriendo todo el centro comercial y sus tiendas para comprar un vestido y zapatos para la boda de la tía de Melanie. Melanie no quería asistir pero debía ir. Era la cuarta boda de su tía Suzanne y ella debía estar presente según su madre.
La señora Grace había invitado a Emma a asistir pero ésta se excuso con que tenía que cuidar a Elliot –que no era del todo falso– pero, en realidad no tenía qué ponerse.

–Te presto vestido.
–Mel, tengo que cuidar a Elliot.
– ¿Segura?
–Sí.
Ambas sonrieron.

Caminaban pasando tiendas y tiendas y cientos de probadores con diversos vestidos y la rubia no se decidía por ninguno. Y faltaban los zapatos que combinasen. Era una tortura salir de compras con Melanie Grace.
–Mel –rogó Emma.
– ¡Perdón por no ser Emma-a-mí-todo-me-queda-genial!
– ¿De verdad todo me queda genial?
Melanie le fulminó con la mirada, Emma rio.
Por fin, luego de unas tantas tiendas más y unos vestidos más, Melanie se decidió por un vestido corto de color coral y unos zapatos de punta redonda color negro. Sonrió satisfecha con su elección. Compraron unos helados y un M&M para Elliot, y se dirigieron al estacionamiento subterráneo. Llegaron a la camioneta de Mel entre risas cuando se escuchó un silbido insistente.
Eran Michael y sus amigos.
Mierda, pensó Emma.
–Mi amor –dijo Michael.
–Ni remotamente –dijo Emma.
Él sonrió.
–Me contaron, Em, que no cumpliste con lo que te ordené –dijo Michael cerca de Emma.
–No me llames “Em” –dijo ella.
–Em, ¿quieres que me desquite con tu amiguito?
–Eres un imbécil –escupió la morena.
Melanie la agarró de un brazo.
–Vámonos –dijo ésta.
–No me provoques –le dijo Michael a la morena.
Emma lo miró sin disimular su odio y se subió a la camioneta de Melanie.
Salieron del estacionamiento con los matones y Michael detrás de ellas. Melanie miró apenada a Emma.
– ¿Nunca te dejará en paz, verdad?
–No sé qué quiere –suspiró frustrada Emma, agarrándose del cabello y tirándolo fuerte.
–Calma, Em.
Ella asintió mirando a cualquier lado.

Al llegar a su casa, encontró a Elliot sentado mirando Ben 10, le arrojo el M&M y se dirigió a la cocina a tomar un calmante. Estaba nerviosa por su encuentro clandestino con Michael. Y una parte de ella la obligó prácticamente a agarrar la línea baja y marcar el número de Zayn –que cabe destacar, se lo sabía de memoria– a ver si se encontraba bien.
Sonó una… dos… tres veces…
– ¿Hola? –Era la voz de Zayn–. ¿Sí?
–Hola –respiró Emma.
– ¿Emma? ¿Qué pasa? ¿Quieres que vaya…?
–No, tranquilo. Sólo quería saber si estabas bien. ¿Lo estás?
–Sí, ¿por qué no iba a estarlo?
–No lo sé…
–Emma…
–Michael me amenazó con golpearte.
–Emma, no te preocupes por mí.
– ¿Es broma? –preguntó exaltada–. ¿Qué no me preocupe?
–Emma.
– ¡Zayn!
–Estoy bien.
–Bien.
–Emma, por favor…
–Chau.
Y colgó, sin siquiera despedirse de él. Estaba enojada porque su loco ex novio amenazaba con golpear a Zayn y él le decía “que no se preocupe”. Idiota, pensó Emma. ¡Qué no me preocupe, por favor!

Pasaron unos minutos, como 20 y sonó el timbre. Elliot gritó un “¡Abre, Em!” desde algún lado de la casa, probablemente su habitación, Emma no lo sabía.
Preguntó el habitual “¿Quién?” y nadie respondió, pensó que tal vez se trataba de una broma de algún niño pesado de la cuadra.
Volvieron a tocar el timbre, volvió a preguntar quién estaba del otro lado y esta vez se escuchó una tos. ¡Alguien tosiendo!
– ¿Quién está ahí? ¿Se encuentra bien? –preguntó ella.
–Emma, soy yo –era Zayn con una voz torturada.
Emma pensó lo peor.
Ella se precipitó a abrir la puerta tan rápidamente que casi la saca de lugar. Se encontró a un Zayn apunto de morir…de risa.
– ¡Idiota! –le gritó ella. Casi le cerró la puerta en la cara, pero él fue rápido e ingresó dentro.
–Lo siento –dijo Zayn riendo–. Debiste haber visto tu cara –empezó a carcajear.
–No es gracioso –dijo. Pero él continuó riendo hasta que notó que Emma temblaba.
Se le acercó y la abrazó suavemente, besando su pelo. La acurrucó hasta que el temblor abandonó su cuerpo.
–Perdón, Emma –dijo sincero.
–Uhm…
–De verdad.
–Está bien, ya no me asustes –indicó ella besándolo.
Él prolongó el beso que pretendía ser uno casto, agarró el labio inferior de Emma y ésta gimió levemente.
–Emma, ¿qué somos? –preguntó Zayn de repente.
–No lo sé –dijo ella sinceramente–. ¿Qué quieres que seamos?
–Todo.

Ella sonrió radiante.

por **Magui Styles Malik** Dom 26 Ene 2014, 4:59 pm

Me encantaaaa esta nove
New reader!!

por **Dilingdingdong** Dom 26 Ene 2014, 9:18 pm

Ay dios mio que bellos askjaksjkajs Zayn te amo, eres demasiado hermoso con Emma <3

por **valeriekehrhahn03** Dom 26 Ene 2014, 9:49 pm

QUE HERMOSO!

LO AMEE

por **valeriekehrhahn03** Lun 27 Ene 2014, 3:40 pm

SIGUELAA

por Contenido patrocinado

ϟ hypatia. aka Kate. MP ϟ Ver perfil.	ϟ dépayser aka Lea. MP ϟ Ver perfil.
ϟ youngjae aka . MP ϟ Ver perfil.	ϟ Stark. aka Cande. MP ϟ Ver perfil.

ϟ Legendary. aka Steph. MP ϟ Ver perfil.	ϟ chihiro aka Zoe. MP ϟ Ver perfil.
ϟ Kurisu aka Teph. MP ϟ Ver perfil.	ϟ Calore aka idk. MP ϟ Ver perfil.

ϟ ego. aka Kalgh/Charlie. MP ϟ Ver perfil.	ϟ Asclepio. aka Gina. MP ϟ Ver perfil.
ϟ mieczyslaw aka Alec. MP ϟ Ver perfil.