Ella trae problemas. (Zayn Malik fanfic)

por **Nialler's wife** Dom 29 Dic 2013, 1:30 pm

Nombre: Ella trae problemas.
Autor: Yo, Rebecca Insfrán :)
Adaptación: No.
Género: Romance.
Advertencias: ninguna.
Otras páginas: sí, wattpad :) http://www.wattpad.com/story/9874113-ella-trae-problemas-zayn-malik

Ella trae problemas.

La chica más caliente del instituto con el chico más "tímido" del planeta tierra.
Oh, maldición si esto no terminará bien…
Él es un buen chico, un muy buen chico; dedicado, estudioso, tranquilo, y tímido hasta la seducción. O eso se cree.
Ella es una mala chica, una muy mala chica; floja, irresponsable, loca y atrevida hasta el infierno. O eso se cree.
¿Quién se cansará primero?
¿Se cansará ella de la ternura de él?
¿Se cansará él de la locura de ella?
¿Los "opuestos" se atraen?
¿Realmente son como todo el mundo cree?
¿Realmente funcionará?

por **Nialler's wife** Lun 30 Dic 2013, 4:45 am

Capítulo Uno: “¿Zayn, cierto?”

- ¿Por qué haría eso?
Emma realmente no entendía por qué tendría que aceptar esa estúpida apuesta. No quería hacerlo. “Enamorar” al más tímido del instituto no estaba en sus planes de último año. No quería joder con nadie, no podía joder con nadie. Definitivamente un muchacho que apenas respiraba si una chica le hablaba no figuraba entre su lista de “Muchachos con quienes follar”.
No es como si tuviera una de esas listas, de hecho.
-Porque eso es lo que tú haces. Enamorar, joder, destrozar corazones… ésa es tu reputación.
Emma miró con un fingido asco a su rubia amiga y le propinó un golpe en el brazo antes de echarse a reír como dementes.
-Yo no hago eso –dijo Emma sonriendo.
-Oh, lo haces, no me malinterpretes, me encanta, me encantas, toda loca y sin preocupaciones…
-Eso no es cierto…
-Sí lo es, eres como… libre. Sí, libre. Me encanta. Desearía ser tú… me gusta tu trasero, para serte honesta.
Emma miró a su amiga detenidamente y luego le sonrío. Lo cierto era que ella sí tenía preocupaciones, muchas. Toda la secundaria se comportó horrible y aún así, milagrosamente siempre lograba salvar el año.
En su último año se prometió mejorar, aunque sea solo un poco.
No era libre, ni remotamente.
El timbre sonó, haciendo entender a los estudiantes que las clases ya estaban por empezar y que se debían dirigir a sus respectivas aulas.
Emma se despidió con la mano de su rubia amiga, y se dispuso a ir a su clase de Historia Universal.
- ¿Lo harás, Emma? –preguntó su amiga.
- ¿Uhm…? –dijo ella.
-La apuesta. ¿Es una apuesta? ¿Lo harás? –preguntó impaciente la rubia.
-Está bien –Emma hizo un gesto vago y se dio la vuelta para evitar la sonrisa deslumbrante de la rubia.
Aún no lograba entender que quería probar su amiga. ¿Que ella aún era una loca? ¿Que nunca cambiaría? ¿Que podía hacer que el chico más frío del instituto cayera rendido a sus pies? Lo cierto era que Emma sabía que él no era frío. Sólo tímido, reservado, y eso era… caliente.
Emma apostaría una tapita de gaseosa a que él aún era virgen. “Qué lindo”, pensó Emma con una sonrisa.
Pero ella no quería jugar con él. Parecía un buen chico y no debía ser corrompido por ella. Ni por nadie.
Pero una apuesta es una apuesta. Y a ella no le gustaba perder.
Haría lo que fuera para que el tímido del instituto se enamore de ella.
Lo que fuera.

Emma caminaba despacio, sin prisas, como siempre, dirigiéndose a la clase que le tocaba. Caminaba pensando en un plan que funcione con el chico-de-hielo. No iba estar nada fácil hacerlo caer. Él era un chico muy, muy inteligente. Y hacerle creer que la chica más deseada del instituto se fijaba en él iba a ser la cosa más complicada de la vida.
Emma había estado observando a Zayn Malik desde hace varias semanas ya. Le gustaba, sí. Le gustaba el chico-de-hielo. ¿Por qué? Quizás porque es muy diferente a los otros chicos. Zayn es inteligente y sensual. Y tímido, y el que sea tímido lo hace ser aún más sensual a los ojos de una depredadora como lo es Emma.
Ella ya tenía la primera jugada.
“Hola ¿Zayn, verdad?” jugaría con su pelo “Me preguntaba sí…” se mordería el labio de manera sensual “…podrías enseñarme algo de física.”
Luego lo miraría a los ojos y le sonreiría. Y listo. Lo tendría en una milésima de segundo.

Zayn se encontraba caminado por los pasillos del instituto cuando divisó a la morena más hermosa que había visto jamás. Emma. Él sabía lo que su nombre significaba. Fuerza, y ella era fuerte. La chica más fuerte del mundo. Perdió a su padre, y aún así ella seguía sonriendo. El resto de su familia se desmoronó con el suicidio de su madre, y aún así ella seguía sonriendo. Se quedó a cargo de su hermano menor teniendo sólo 15 años cumplidos y una adolescencia por vivir, y aún así ella seguía sonriendo. Era fuerte, de eso no había dudas.
Su nombre también significaba amable. Pero Emma no era amable. No se la podía culpar por eso. La vida no fue amable con ella y ella decidió no ser amable con nadie.
Zayn aceptaba eso.

Emma Eastwood chocó con Zayn Malik haciendo que éste echase todo lo que llevaba en sus manos. Libros, lápices, y otros elementos quedaron desparramados por el suelo a los pies de ambos chicos.
-Lo siento. De verdad, de verdad lo siento –dijo Emma disculpándose.
-Está bien –murmuro cabizbajo el chico-de-hielo.
“Tan tierno”, pensó Emma.
-Soy Emma, ¿y tú? ¿Zayn, cierto?
- ¿Me estás hablando? ¿Tú?
Emma parpadeó. Por supuesto que le estaba hablando, era obvio.
-Sí –dijo Emma –te estoy… erm… ¿hablando? Sí –dijo.
-No lo hagas.
Emma abrió la boca y luego la cerró. ¿Él le dijo…?
- ¿Qué? –articuló ella.
Zayn Malik le dirigió una mirada fría. No quería hacerlo. Pero debía mantener a esa chica lo más lejos posible. Ella era problemas. Ella trae problemas. Ella es un problema. Problema es su segundo nombre…y su apellido… y probablemente su apodo, también.
Y él no necesita problemas.
No quiere problemas.

por **Nialler's wife** Miér 01 Ene 2014, 9:29 am

¿Les gusta? ¿No les gusta? ¿La sigo? ¿No la sigo? Me gustaría que dejaran opiniones.

por **Nialler's wife** Miér 01 Ene 2014, 12:05 pm

Capítulo dos: “¿Ayuda con física?”

-Básicamente te dejó en claro que él no está interesado en meterse entre tus bragas, uh –dijo una rubia a su amiga morena.
-No dijo eso. Sólo me dijo “que no le hable” –Emma hizo comillas imaginarias en la frase.
Estaba frustrada hasta el dedo meñique del pie. Ese chico le había dicho que no le dirija la palabra. A ella. A Emma. Cuando cualquier otro chico le hubiese dicho que era el mejor día de su vida sólo porque ella le había dirigido la palabra. Era frustrante.
Ella siempre conseguía lo que se proponía con sólo una mirada. Sus profundos ojos grises capturaban la atención de todos los chicos del instituto y los hacía sus esclavos.
Pero este chico, Zayn Malik, no era igual a todos los del instituto, y eso era algo que Emma sabía muy bien. Su actitud fría para con ella sólo despertó más el interés de Emma. Un chico que se hacía del de rogar. ¿Acaso fue mujer en otra vida?, pensó Emma.
Zayn Malik era el chico más condenadamente caliente que alguna vez se cruzó con Emma Eastwood. Y, al parecer, no tenía interés alguno en ella.
De locos, de locos porque todos tenían interés en Emma.
Bueno, todos excepto Zayn Malik.

Él le había hablado mal a ella. Oh, maldición. Zayn Malik sabía que tenía que guardar distancias con la chica-problema. Él sabía que si se dejaba manipular acabaría con él, ella lo haría, sin piedad alguna. Porque eso es lo que hace la chica-problema. Juega con todos y ninguno juega con ella.
Sólo una vez todo el instituto creyó que ella se había enamorado. Zayn había aguantado la respiración todas las veces que escuchó que “Emma Eastwood se había enamorado de Michael Clifford” “Mike y Emma” “Emma y Michael”. Zayn se mordía la lengua cada vez que escuchaba eso porque le dolía. O le apretaba el pecho. O le oprimía el corazón. Patético, porque Emma Eastwood nunca le había dirigido siquiera la palabra a él. Nadie nunca lo hacía.
Él había sido testigo de cómo Michael Clifford se burlaba de Emma Eastwood. Le era infiel y además, se burlaba de la situación que ella pasaba. Horrible, porque a Emma se la notaba ilusionada.
Horrible, porque por culpa de Michael ella se volvió una perra.
Horrible, porque indirectamente también fue culpa de Zayn.
Si Zayn hubiese sido una mejor persona, y no un cobarde, le hubiese contado todo a Emma. Desde la primera hasta la última burla. Pero no lo hizo. En todo caso ella no le hubiese creído.
Zayn Malik fue el único testigo de las lágrimas que Emma Eastwood derramó por Michael Clifford. Él la había encontrado detrás del colegio, cerca de la cancha, tirada en el suelo, llorando. Se había quedado paralizado mirándola llorar.
Ella nunca lo notó.
Él nunca se hizo notar.
Sólo él pudo ser testigo de la vulnerabilidad de la más “perra” del colegio.
Días después corrió el rumor de la separación de la pareja más caliente del instituto. Como era de esperarse toda la culpa recayó en la perra de Emma. Todos decían que ella había engañado a Michael Clifford con un chico cualquiera. Pero Zayn sabía que eso no era cierto. Aunque Emma no negó nada, nunca lo hacía, ella sólo sonreía a todo.
“Su sonrisa es bonita”, pensó Zayn. Inmediatamente rechazó ese pensamiento. Ella es la chica-problema. Bonita, pero llena de problemas.
Y Zayn no quiere problemas.
¿O sí…?

Emma Eastwood caminaba directo al comedor. Comería cualquier cosa con tal de tener tiempo para estudiar física.
Física, esa habría sido su excusa para acercarse a Zayn. Aunque no era del todo una excusa. Lo cierto era que ella era pésima en física. Odiaba esa materia y odiaba al molesto señor que tenía por profesor. Era un viejo calentón que casi nunca iba a clases y cuando lo hacía se pasaba acosando a las alumnas. Una vez, estando solos, tocó el cuarto de Emma y ella le pateó la entrepierna. Hubiese acudido a la directora, pero ella era la chica-problema y nadie le creería. Nunca nadie lo haría.
Pidió una manzana y un jugo de naranja y se sentó en una mesa alejada. Se puso los auriculares, con Sleeping with sirens sonando fuerte, y abrió su libro de física. Parecía que todo eso estaba escrito en griego, y ella no era Percy Jackson para saber qué carajos decía ahí. Suspiró frustrada y cerró los ojos. No le iría bien en el examen.
Abrió los ojos y se encontró con un chico mata rubia que la miraba fijamente, con sorna en sus ojos. Ella entrecerró los ojos y se sacó los auriculares.
- ¿Qué carajos se te ofrece, Michael? –escupió la morena.
-Uhm, me gustaría un beso tuyo –dijo Michael riendo.
Ella lo fulminó con la mirada y decidió ignorarlo. Siempre lo hacía. Lo ignoraba y eso a Michael le dolía. Pero no fue ella quién había fallado con él. Fue al revés. Y Michael lo pagaría.
-Te extraño –dijo Michael totalmente serio.
- ¿A mí o a mi cuerpo? –soltó ella.
-Ambos –respondió él, mirándola lujuriosamente.
Emma sintió asco. Lo odiaba. Odiaba a Michael Clifford porque él había puesto todas sus defensas por el suelo, él había ingresado a su corazón y había causado estragos.
Él había jugado con ella. Pero así no era la cosa, ella era la que jugaba con todos y nadie con ella. Así tenía que ser.
-Aléjate, lo digo en serio –dijo Emma tranquilamente.
Michael la miró dolido. Ella siempre lo rechazaba, siempre desde que él jugó con ella. Y Michael se arrepentía, lo hacía, pero ella no quería creerle. Estaba bien, él lo entendía, lo hacía. Probablemente él mismo nunca se perdone por haber jugado con ella.
-Lo siento, de verdad lo hago, Emma. Aún te quiero –dijo Michael mirándola a los ojos.
Emma miró los ojos verde-grisáceos de Michael y asintió. Más no le creía. Nunca lo haría. Y no le perdonaría. Nunca lo haría.
Michael se alejó hacia su grupo de amigos y Emma lo vio caminar hasta que llegase a ellos. Era muy atractivo, rubio, y sus ojos eran hermosos. Era alto y eso le gustaba a Emma. Y su cuerpo era… increíble. Emma pensó en darle una oportunidad para una noche si él aceptaba el no involucrar sentimientos. Porque le jodía el sentimentalismo últimamente.
Cuando Emma alejó los ojos del trasero de Michael fijó su atención en el moreno que ingresaba al comedor. Cabizbajo como siempre. “Adorable”, pensó Emma. Y sonrió. Porque ella nunca pensaba en ese tipo de cosas, cursilerías patéticas.
Pero Zayn Malik la hacía ponerse muy cursi. Patética, porque lo único que necesitaba era ganar una tonta apuesta. Probarle a su amiga que ni el chico-de-hielo se puede resistir a Emma Eastwood, y luego se olvidaría de su nombre. Como hacía con todos los chicos.

Zayn Malik se dirigió a una apartada mesa y se sentó. Empezó a mirar frenéticamente a su alrededor, como siempre, sólo que ésta vez su mirada cayó sobre una morena en una, también apartada, mesa cercana. Parecía que tenía problemas con lo que sea que estaba estudiando porque resoplaba y dejaba caer su cabeza sobre la mesa repetidas veces. Zayn quería ayudarla a estudiar. Bueno, en realidad sólo quería estar cerca de ella y oler su sombroso cabello, y mirar a sus increíbles ojos grises, y escuchar su asombrosa y seductora voz…
Maldición, Zayn estaba en problemas.
Se levantó y caminó hasta la mesa en la que encontraba Emma Eastwood, quién tenía la cabeza puesta sobre la mesa y estaba recitando fórmulas de memoria. Él le tocó el hombro, más bien le acarició, paseó los dedos por el hombro de Emma y ella se sobresaltó al tacto.
-Maldición, te dije que me dejaras en paz, Mike...
Emma miró a los ojos avellana que la miraban avergonzados. Por el toque pensó que había sido Michael, pero no. Era Zayn Malik quien la había tocado de esa manera. Eso instaló confusión en Emma.
-Zayn –susurró ella en una voz increíblemente baja.
-Yo… pensé que… te veías… uhm –dijo él.
Emma miró a Zayn de cerca y pudo notar lo hermoso que era. Jesús, era hermoso. Realmente atractivo. ¿Cómo nunca se dio cuenta?
Recordó que él le había dicho que no le hablara. Así que se calló. Y lo miró por mucho tiempo.
- ¿Necesitas… ayuda para, erm, estudiar? –preguntó amable Zayn.
Ella no le respondió.
- ¿No? –insistió él.
Ella no le respondió. Sólo lo miró.
-Oh, bueno –Zayn empezó a girarse cuando ella lo agarró por la muñeca y lo hizo quedarse mientras escribía algo en la parte de atrás de su libro. Zayn miraba aturdido como ella garabateaba unas palabras. Luego ella se lo entregó y él pudo leer: “Me dijiste que no te hablara :(”
Zayn la miró disculpándose. Se acordaba, claro que se acordaba de cómo la había tratado.

-Soy Emma, ¿y tú? ¿Zayn, cierto?
- ¿Me estás hablando? ¿Tú?
-Sí.
-No lo hagas.

Estúpido. La había tratado mal. Era un imbécil. Estúpido. Muy estúpido. Ahora ella no le hablaría a él.
-Lo siento, no quería ser así de grosero –dijo.
Ella asintió.
-Emma, puedes hablarme –rogó él.
-Está bien –dijo ella.
Y ella le sonrió.
Y él casi murió.
- ¿Ayuda con física? –preguntó apenas Zayn.

Ella volvió a sonreír.

por **Nialler's wife** Lun 06 Ene 2014, 8:12 am

Capítulo tres: “Vete.”

Zayn Malik pasó todo el almuerzo y parte de su hora libre ayudando a una Emma que no entendía ni atrás ni delante de qué se trataba caída libre. Zayn sí, porque él si prestaba atención a las clases del viejo calentón, como le llamaba Emma Eastwood.
Había pasado la mayor parte del tiempo admirándola. Y riendo en su interior de cómo ella se sulfuraba por no entender un simple ejercicio.
-Oh, por favor. Emma, concéntrate. Se lanza un cuerp…
-No. Estoy harta. No lo lograré, ¿sabes? Soy un asco en esto.
Zayn la miró y luego volvió su atención al libro.
-Si tan sólo prestases atención a las clases del señor Gaona.
Esta vez fue Emma lo que lo miró y luego negó con la cabeza.
-Ese viejo calentón, me odia. Lo hace. No me soporta. El sentimiento es mutuo, por cierto. Igual si paso, el hará que repruebe. Me odia, Zayn –dijo Emma mirándolo a los ojos.
- ¿Por qué le dices viejo calentón? –preguntó Zayn sonriendo.
Emma apretó los dientes y apartó la mirada.
La sonrisa de Zayn se borró.
- ¿Te hizo algo el señor Gaona? –preguntó Zayn discreto.
La idea era repugnante, pero ciertamente el señor Gaona tenía fama de ser un tipo que acosaba a sus estudiantes, o les pedía algo a cambio de salvar el año.
Era algo desagradable, pero nadie nunca se quejaba de él, y era un buen profesor en cuanto a su materia se refiere.
- ¿Importa acaso? –dijo Emma riendo entre dientes.
Sí, el señor Gaona se había metido con Emma. Oh por… Zayn quería asesinarlo, de verdad quería.
- ¿Se lo contaste a alguien? –preguntó el moreno.
- ¿Quién le creería a la más puta del instituto?
Zayn tragó saliva. ¿En verdad ella pensaba tan mal de sí misma? Al moreno no le gustaba que ella hablase así de su persona. ¿Por qué ella era así?
Emma Eastwood no era una buena chica, no. De hecho era muy, muy mala. Pero no importaba eso. Ella tenía sus razones para ser como era. Ella misma se degradaba en un nivel tan extremo que las demás personas creían que si se unían para degradarla no importaría. Pero importaba, por lo menos para Zayn Malik.
-No hables así de ti –le dijo él, simplemente.
Emma lo miró con una sonrisa tan deslumbrante que Zayn creyó que se desmayaría en ése instante.
-Es lo que soy, es lo que hay, amor –respondió Emma.
Zayn casi escupe el agua que había ingerido. Emma Eastwood lo había llamado amor. Oh por… estaba empezando. Debía poner una barrera ya mismo. Ahora. Antes de caer en las redes de la chica-problema. Porque la chica-problema te toma, te mastica, te escupe y luego te pisa. Eso es lo que hace Emma Eastwood con cada espécimen masculino sobre la faz del planeta… o bueno, del instituto.
Emma al notar la reacción de Zayn se echó a reír.
Zayn frunció el ceño.
- ¿Qué te parece gracioso? –preguntó él irritado.
-Oh –Emma respiró –tú eres muy gracioso –dijo con una sonrisa. –Y tierno.
-No soy tierno.
-Por supuesto que no, bad boy –dijo Emma ahogando una carcajada.
Zayn sólo miró a otro lado.
-Dime, bad boy, ¿hay alguna chica especial por ahí?
Sí, tú. Pensó Zayn.
-No.
- ¿Soltero?
-Sí.
- ¿Has tenido novia?
Zayn lo pensó un poco.
-No.
Emma jadeó.
- ¿Ninguna? –Zayn negó con la cabeza. -¿Nunca? –él volvió a negar. -¿Siquiera has besado a alguna chica?
Zayn la miró como si fuese una retrasada.
-Sí, Emma.
Emma se decepcionó un poco.
- ¿Por qué nunca has tenido novia? Eres atractivo.
-No tengo tiempo para eso –respondió cortante el moreno.
- ¿Ah, no? ¿Sólo sales por ahí en las noches, te emborrachas, te llevas extrañas a tu casa, tienen sexo hasta al amanecer y luego vuelves a este asqueroso instituto fingiendo ser un pan de Dios?
Zayn no se inmutó. De hecho, Emma había dado en el clavo.
-Oh… -dijo Emma.
Woah, esto era algo nuevo. ¿Zayn Malik era realmente igual a esos otros chicos? La idea era chocante. Ella hasta lo creyó virgen.
-Mi vida privada no es algo que te concierne, Emma Eastwood.
-No, es sólo… woah, pensé que eras distinto a los chicos del instituto. ¿Quién eres realmente, Zayn Malik? Si ése es tu verdadero nombre –dijo ella levemente dolida. Decepción corría por sus venas y daba de lleno con su corazón. Él era igual a todos. Esta apuesta no tenía sentido.
-Las chicas sólo quieren joder –dijo él.
Emma parpadeó.
- ¿Perdón? Son los chicos los imbéciles aquí. No nosotras.
Zayn rio.
- ¿De verdad, Emma? ¿De verdad crees eso, chica-problema? No creo que seas la indicada para hablar de eso.
Wow, derechazo del chico-cara-angelical.
-Ah –dijo Emma, sentándose recta y mirándolo a la cara.
Zayn se arrepintió de su brusquedad, primero le decía que no se deshonrara a sí misma y ahora él se le unía en la tarea. Imbécil.
Emma le sonrío.
-Cierto, chico-de-hielo. Soy la menos indicada. Pero al parecer, soy el tipo de chicas que te gusta, ¿no? –Dijo Emma acercándosele - ¿te parece si tú… y yo…?
Emma fue interrumpida por el timbre.
-No –dijo Zayn levantándose –no eres mi tipo, Emma Eastwood.
-Soy el tipo de todos, Zayn Malik.
-No –dijo él y se alejó de ella.
Este era realmente un chico muy frustrante.

Emma Eastwood había rendido física y milagrosamente había aprobado, estudiar con Zayn había sido de gran ayuda. Pero luego tuvieron esa pequeña discusión.
Una vez más Zayn Malik le había dejado en claro que no quería nada con ella. O eso había entendido ella. Maldición. Le gustaba cada día más. ¿Era acaso eso posible?
Emma había estado buscando a Zayn para agradecerle el haberle enseñado algo de física, y también quería disculparse con él, por haber sido una desubicada y haberle coqueteado sabiendo que él la rechazaría y se sentiría incómodo. Casi que parecía que le tenía asco. El corazón de Emma se apretaba de pensar que Zayn no le aguantaba. Era una extraña sensación, que pulsaba dentro de ella sin su consentimiento.
Cuando no lo había encontrado por el instituto supuso que se había marchado. Salió del instituto para ponerse a caminar directo a su casa. Se ponía a pensar; ¿qué tipo de lugares frecuentaría Zayn? ¿Iría todas las noches? ¿Se acostaría con cada mujer que encontrase? La idea le formaba un nudo en la garganta. Lo cierto era que a Zayn no podía faltarle compañía femenina, él era atractivo. Sus ojos avellana ya te hacían caer de una, su sonrisa era deslumbrante, su cabello negro corto provocaba llevar las manos y estirarlo, y su cuerpo… wow, santa mierda. Zayn era atractivo.
Decidió salir con su amiga rubia a un club cualquiera a ver si se encontraban con Zayn, chico-de-hielo, Malik.

- ¿Me estas diciendo que el chico-santo no es tan santo como aparenta? ¿Es eso acaso verdad? ¿Bromeas? –casi gritó Melanie.
-Mel, me das jaqueca –dijo Emma llevándose las manos a los oídos.
- ¿Sale todas la noches, y se emborracha, y tiene sexo con una chica cualquiera en algún callejón oscuro? –gritó Melanie.
-No lo sé –dijo Emma frustrada.
- ¿Celos? –dijo Melanie levantando una ceja.
Emma la miró con los ojos como platos. ¿Celos? ¿Ella? La chica-problema no siente celos, y menos de un perdedor como Zayn Malik.
-No me hagas reír.
-No lo haces.
Emma escaneó a su amiga y luego le quitó el dedo corazón. Melanie se echó a reír y saltó por Emma, posando un brazo sobre los hombros de la chica de ojos grises.
-Sabes que no hablo en serio.
Emma le codeó en el estómago y Melanie se quedó sin aire.
- ¿Te parece si me sirves de algo y me ayudas a buscar un buen atuendo?
-Quieres impresionar al chico-de-hielo –dijo Melanie sonriendo.
-Te cortaré la lengua.
Melanie se echó a reír.
-Aparte –dijo Emma, haciendo un gesto con la mano –ni siquiera sabemos si lo encontraremos.
-Oh, pero quieres hacerlo.
-Sí, hace dos semanas que no tengo sexo con nadie.
Melanie jadeó.
-Sabes que no me refería a eso con hacerlo –hizo una mueca.
Emma rio.
- ¡Atuendo, Melanie!
Melanie casi corrió al armario de Emma.

Una Emma increíblemente sensual en un vestido rojo, increíblemente corto, ingresó al bar Coco’s, acompañada de su rubia amiga, Melanie.
Apenas ingresó se fijó en una pareja sentada en un sofá, una rubia, con unos quilos de más, estaba sentada a horcadas sobre un moreno que estaba ocupadísimo metiéndole mano bajo su vestido verde agua.
Sí, Zayn Malik estaba prácticamente teniendo sexo con una rubia asquerosa en pleno bar a la vista de todos.
Melanie ahogó un grito en cuanto siguió la dirección de la mirada de Emma y se encontró con semejante escena.
Emma apretó los dientes.
-Wo ho hoo…
-Ahí está tu santo –dijo Emma enojada.
Melanie notó su reacción, y ése deje filoso en su voz, más no dijo nada.
-Es una… sorpresa –dijo Melanie.
Emma caminó arrastrando a Melanie con ella hacia la barra del bar, y Zayn se fijó en ellas.
Las reconoció al instante y se apartó de un salto de la rubia. Ésta lo miró confundida.
- ¿Hice algo mal, guapo?
- No –dijo él distraído –yo… tengo que hacer algo, si me disculpas –dijo levantándose y dejando sola a la rubia que lo miraba sin entender nada.
- ¡Vuelve enseguida, guapo!
Zayn ignoró eso.
Caminó, pasando gente borracha hasta que divisó el vestido rojo más corto y sensual del mundo cerca de la barra.
Jesús. Pensó Zayn.
- ¿Qué demonios haces aquí? –dijo Zayn agarrándole del brazo a Emma y arrastrándole lejos de la barra.
-Suéltame –dijo ella.
Zayn la soltó.
-Quiero que te vayas, ya. Y lleva a tu amiga. Éste no es un lugar para ustedes, éste no es un lugar para ti.
-Oh, por favor…
-Vete.

por **valeriekehrhahn03** Lun 06 Ene 2014, 9:21 pm

siguelaaaaaaaaaaa

por **Nialler's wife** Mar 07 Ene 2014, 2:13 pm

valeriekehrhahn03 escribió:siguelaaaaaaaaaaa

buenooooo :)

por **Nialler's wife** Jue 09 Ene 2014, 7:45 pm

Capítulo cuatro: “Tú no eres tan diferente.”

-No me iré, chico-de-hielo –soltó Emma.
Zayn inspiró pesadamente y se agarró el puente de la nariz en señal de frustración.
Chica-problema ataca de nuevo, maldición… ¿Cómo haría ahora para sacar a Emma de ése espantoso lugar?
-Por Dios, chica-problema, sal, ¿si? Yo te llevaré a casa, y luego puedo…
-Volver a lo que estabas, ¿no? Sexo con desconocidas, ¿quién lo diría? Nos tenías a todos engañados, chico-de-hielo –interrumpió Emma, ligeramente enojada.
Zayn notó su tono de voz, ¿a qué quería jugar? ¿Estaba realmente celosa o sólo jugaba con su mente? No tenía tiempo para pensar en eso, debía sacar a Emma y a Melanie de ahí antes de que algún idiota se pase con ellas, porque Zayn no sabía cómo reaccionaría si alguien llegase a tocar a Emma.
-Lo que yo haga o deje de hacer no te concierne, Eastwood –dijo él agarrándola del brazo.
Emma forcejeó hasta lograr soltarse y luego lo miró con rabia.
-Lo mismo para ti, Malik –dijo ella.
Zayn respiró hondo, cerrando los ojos. Era obvio que no podía hacer nada para que Emma abandonase el lugar. Ella era tan terca que se quedaría hasta que algo malo le sucediese. Y con ese vestido… pensó Zayn.
-Te vigilaré, no te metas en más problemas –dijo él, comenzando a caminar de vuelta hacia la prostituta que le esperaba paciente en el sofá.
- ¡Problema es mi segundo nombre! –gritó Emma con una sonrisa.
Zayn no se volvió hacia ella pero negó con la cabeza repetidamente.

- ¿Esto es real? Me llevo preguntando esto desde que entramos, prácticamente –dijo Melanie, llevándose una lata de cerveza barata a la boca-.Aún no caigo que él sea el chico-de-hielo –dijo riendo – ¿lo has visto? wow -señaló hacia Zayn, que hablaba animadamente con la prostituta rubia.
Emma miró hacia la escena y lo vio sonreír y meter su mano bajo el vestido de la rubia. Hizo una mueca. Melanie carcajeó.
-Estás tan celosa que no te reconozco –dijo.
-Oh, por fa…
-Cállate, lo estás.
Emma miró a su compañera y asintió.
-Está bien, sí. Lo estoy, pero no por lo que crees.
Melanie frunció el ceño.
-No hay sentimientos. Estoy celosa porque él me rechazó y prefiere tener sexo con una prostituta rubia y gorda. Así que, estoy inclusive más enojada que celosa –dijo Emma, llevándose la lata a la boca y mirando hacia el moreno.
Melanie aceptó eso porque parecía lógico. ¿Pagar por tener sexo cuando Emma Eastwood se te ofreció? Emma era mil veces más bonita que esa rubia. Y ningún chico nunca le negó algo… bueno, ningún chico excepto Zayn Malik.

Emma y Melanie bailaron un rato en la pista al ritmo de Alive de One Direction. Melanie se divertía y reía, mientras que Emma miraba en dirección al moreno que estaba con la rubia, provocándolo con la mirada. Zayn se fijaba en ella y luego enseguida volvía su atención a la rubia. Eso a Emma le molestaba mucho.
Melanie se dirigió a la barra por más bebidas, dejando a Emma sola.
Emma visualizó a un muchacho de cabellera rubia mirando hacia ella. Michael. ¿Aquí es dónde venía Michael cada vez que la engañaba? Emma no lo sabía, pero no le dio importancia a eso. Bailó para Michael, que la comía con la mirada. Michael sonrió, ella le devolvió la sonrisa. Zayn fijó su atención en cómo Emma sonreía y siguió su mirada. Michael. ¿Qué hacía Michael ahí? Zayn no lo sabía, pero ahora más que nunca debía sacar a Emma de ahí.
Se levantó, quitándose a la rubia de encima y caminó dirigiéndose a Emma. La rubia le habló:
- ¿Cuál es el problema? ¿No tienes ganas? Deja de hacerme perder el tiempo, guapo –dijo ésta.
-Lo que sea –respondió Zayn.
Caminó y agarró de la cintura a Emma y la apartó de la pista. Michael notó al moreno y frunció el ceño. Dejó su cerveza y comenzó a avanzar hacia ellos.
- ¿Ahora qué demonios te pasa? –se sacudió Emma.
-Tu ex está aquí. ¿Ahora sí quieres irte? –dijo Zayn.
-Ya sé que está aquí –dijo Emma mirándolo –estoy bailando para él.
Zayn sonrió apretadamente.
-Curioso. Juraría que recién bailabas para mí –dijo en su oído.
La respiración de Emma se aceleró.
- ¿Me prestaste atención? Con lo ocupado que estabas –soltó.
-Emma, déjame llevarte…
-Hola preciosa. ¿Quién es tu amigo?
Era Michael.
Zayn se giró y lo miró a la cara.
-No puede ser –dijo Michael sonriendo.
-Zayn Malik, diría que es un gusto pero no soy tan buen mentiroso, como verás –dijo Zayn.
Michael lo miró con asco.
- ¿Quieres bailar, Mike? Estoy aburrida –dijo Emma interponiéndose entre Michael y Zayn.
-Oh, ¿de verdad, Emma? –dijo Zayn agarrándola del brazo.
-Suéltame –le susurró Emma a Zayn.
Zayn la soltó y alzó sus manos.
-Claro, preciosa –dijo Michael sonriéndole a Emma.
-Ahora vuelvo, voy un rato junto a Mel –dijo la morena de ojos grises.
Se marchó caminando y contoneando las caderas hacia los dos chicos, Michael miraba embobado y Zayn apretó los dientes.
- ¿Quién lo diría, chico-de-hielo? –dijo Michael poniendo ambas manos sobre los hombros del moreno –tenías todo esto bien escondido, ¿eh? –le estaba sonriendo a Zayn –si yo le cuento a alguien que te vi en este lugar no me creería.
-No me toques –dijo Zayn.
Michael sacó sus manos y le sonrió.
-Emma no es tu tipo de chica y lo sabes. Mantente alejado –dijo Michael.
-Sé que no lo es –dijo Zayn tranquilo.
-Bien.

Emma caminó apresurada hacia una Melanie que charlaba animadamente con el barman. La agarró y la estiró aparte. Melanie chilló.
- ¿Qué rayos…?
-Voy a bailar con Mike –soltó Emma.
Melanie la miró y se rio.
- ¿Qué? –dijo Emma.
-Deja las drogas –dijo Melanie riendo.
Emma hizo una mueca.
-Va en serio. Michael está aquí. Estuve bailando para él y Zayn lo notó. No estoy segura, pero creo que se puso celoso. Me exigió que me vaya y en eso llegó Mike, y le dije que bailemos.
Melanie miró con rabia a su morena amiga.
-Si te pagaran por ser estúpida…
Emma miró a su rubia amiga con la boca abierta.
- ¿Perdón?
-Me escuchaste. Quieres poner celoso a un chico sólo porque éste te rechazó. Cuando hay miles que se te tiran encima. Y vas a utilizar a tu increíblemente estúpido ex novio para llevar a cabo tu labor.
-No sé de quién fue la idea de la estúpida apuesta –soltó Emma.
-Perdiste cuando él te rechazó la primera vez.
-Nunca acordamos el número de intentos.
- ¿Quieres seguir con esto? –dijo la rubia.
Emma apretó los labios en una mueca.
-Zayn empezó, él me quiso poner celosa. ¿Viste como me miraba mientras tocaba a esa prostituta? Dos pueden jugar este maldito juego –dijo Emma dándose la vuelta para volver a al pista.
Su amiga la agarró de la muñeca, clavándole las uñas, y la giró hasta quedar cara a cara.
- ¿“Dos pueden jugar este juego”? ¿Te estas escuchando? Él no te quiso poner celosa. Esto es lo que él hace. Esto es él –dijo haciendo un gesto vago hacia el local –esto no tiene nada que ver contigo. Fuiste tú la que vino a parar aquí, a su mundo –dijo Melanie mirándola a los ojos-.Amo con el alma a esa Emma que hace lo que quiere y se deja llevar pero, odio que salga lastimada. Y a Michael no le tengo confianza.
Emma se soltó de ella y se giró caminando hacia donde se encontraba Michael esperándole. Melanie suspiró frustrada.

Emma llegó junto a Michael y éste la agarró de la cintura acercándola a él lo más posible, le sonrió y besó su mejilla. Emma miró a todos lados buscando a Zayn con la mirada. Lo encontró sentado en un lugar apartado observándola. Ella puso las manos en la nuca de Michael. Notó cómo el cuerpo de Zayn se tensó y sonrió para sus adentros.
Empezó a sonar la canción Gorilla de Bruno Mars, una canción muy sensual, y empezaron a bailar lento, pegándose; ella miraba hacia Zayn que no dejaba de mirarla. El moreno apretaba los dientes cada vez que Michael posaba las manos en el trasero de Emma.
-Emma, yo…
-Cállate y baila –dijo ella interrumpiendo a Mike.
Él asintió y bailó, acariciando el cuerpo de Emma. Zayn llegó al límite cuando Michael agarró las nalgas de Emma de manera brusca. Se levantó de su lugar y caminó hacia Emma. La sacaría de ahí.
-Nos vamos –anunció Zayn mirando a Emma.
-Olvídalo –dijo ella apartándose un poco de Michael.
- ¿Quién te crees que eres? –gritó Michael.
Zayn le pegó un puñetazo en el rostro, tirándolo al suelo.
Emma casi gritó.
Zayn la alzó sobre sus hombros y ella chilló. Empezó a patalear y pegarle en la espalda repetidas veces.
-Bájame –chilló Emma.
-No.
Zayn posó su mano en trasero de Emma para evitar que su increíblemente corto vestido se subiera. Caminó hacia la barra en busca de Melanie y cuando la divisó, le gritó:
-Camina, rubia –dijo, ignorando la cara de sorpresa de la chica.
-Claro –dijo ella haciendo un gesto tipo militar.
Caminaron hacia la salida y una vez fuera del local, dejó a Emma en el suelo. Ella se acomodó el cabello y el vestido, y trató de alejar la increíble colonia del moreno, que revoloteaba hacia sus fosas nasales.
- ¿Qué diablos te pasa, imbécil? –le gritó al moreno.
-Me pasa que no te podías quedar más, lo siento.
- ¿Bromeas? ¡Estaba muy bien bailando! ¡Eres un idiota!
-Claro, me llamas idiota a mí, pero al que te metía mano no. Claro, eso es lógico, Eastwood –dijo Zayn enfadado.
Melanie rio.
- ¿Qué diantres es gracioso para ti? –le gritó Emma.
-Ustedes dos, los celos –dijo la rubia riendo.
-Cállate –largó Emma.
-Yo tampoco soy partidario de que esa linda boquita siga hablando –dijo el moreno.
Emma miró parpadeando varias veces hacia Zayn.
- ¿Acaso estás coqueteando con mi amiga? –bramó la morena.
- ¿Te importa acaso? –vociferó Zayn.
Melanie hipó.
-Oh, eres guapo, pero no…no quiero lidiar con una increíblemente celosa Emma de por vida –dijo Melanie.
Emma la miró con la boca abierta.
Melanie se llevó ambas manos a la boca.
-Oh por… ¿dije eso en voz alta? Emma me cortará la lengua mientras duermo –chilló la rubia.
- ¿Mientras duermes? Lo haré cuando estés consciente –bramó la morena.
Zayn rio.
-Tú –dijo Emma señalándolo -déjame en paz.
-Sólo quería alejarte de ese idiota que se estaba propasando contigo –dijo mirándola los ojos con mucha intensidad.
-Tú no eres tan diferente –dijo Emma apartando la mirada.
-Sólo te toqué porque tu vestido se levantaba –dijo Zayn roncamente –no… quise… uhm, incomodarte.
Emma se sonrojó.
-No me refería a mí, sino a la rubia –dijo ella.
-A ella le pago para eso –dijo simplemente él.
Emma lo miró.
-Yo lo hago gratis –sonrió. Zayn aguantó la respiración –o pensaba hacerlo, hasta que me apartaste de Mike –dijo.
- ¿Quieres volver a ése punto? ¿Recuerdas lo que te hizo ése imbécil? ¿Recuerdas cómo te engañó? ¿Recuerdas lo que lloraste? –le gritó Zayn.
- ¿Cómo sabes que lloré por él? –susurró Emma –ni siquiera Mel lo sabe.
-Te vi ese día.
Emma aguantó la respiración.
-Agradecería que no se lo dijeses a nadie.
-No lo haré. Pero no le cuentes a nadie que me viste acá.
-No lo haré. No me creerían de todos modos.
-Tenía que sacarte, ¿comprendes? –dijo Zayn.
Emma lo miró y asintió.
-Pero ahora, te quedaste sin sexo y yo también…
-Oh, Emma… –roncó Zayn.
Emma se acercó a Zayn lentamente y pasó sus manos por su torso. Zayn inspiró pesadamente pero se apartó de ella.
-No eres mi tipo, Eastwood –dijo y volvió al local.
Emma se quedó nuevamente frustrada y con la condenada labor de llevar a una Melanie que apenas se mantenía en pie de lo ebria que se encontraba.
Genial no fue la noche de Emma Eastwood.

por **Nialler's wife** Jue 09 Ene 2014, 7:47 pm

HOLA.
Comenten, please. No sean fantasmas :lloro: me parece que a nadie le gusta :(

por **Nialler's wife** Jue 09 Ene 2014, 10:05 pm

fantasmas, fantasmas everywhere. Bueno :(

por **Dilingdingdong** Jue 09 Ene 2014, 11:39 pm

¡NUEVA LECTORA!

Dios, esta novela me esta matando sajskjajskasj. Me encanta todooo.

sakjkajs síguela soon <3

por **Nialler's wife** Vie 10 Ene 2014, 12:33 am

Dilingdingdong escribió:¡NUEVA LECTORA!

Dios, esta novela me esta matando sajskjajskasj. Me encanta todooo.

sakjkajs síguela soon <3

asdfghjklñd ¡yo te conozco a vos! (? ¿es eso raro? anyway, gracias por comentar :) la seguiré pronto :)

por **Nialler's wife** Vie 10 Ene 2014, 12:46 am

Capítulo cinco: “No llores, no aquí.”

“No eres mi tipo, Eastwood.” Maldito Zayn Malik, pensó Emma. Maldito él, sus ojos avellana y su estúpida colonia increíblemente varonil.

Emma Eastwood estuvo procurando toda la mañana de su viernes en no pensar en Zayn Malik. Porque Zayn Malik era un imbécil para ella. Un imbécil que la rechazó muchas veces, ¡a ella! ¡A Emma caliente Eastwood!
A la hora del almuerzo esperó sentada a que el apuesto chico-de-hielo se apareciese por el comedor de la secundaria. No lo hizo. Probablemente se estaba escondiendo de ella.
Era patético, en cierto modo.
–Deja ya el tema éste de la obsesión –dijo Melanie, a la par que tiraba su cartera encima de mesa que ocupaba Emma, y se sentaba en un banco contiguo.
–No es una obsesión –respondió Emma cortante, mientras daba otro mordisco a su manzana.
– ¿Solo comerás esa manzana? Eastwood, estás perdiendo peso –dijo la rubia, que se preocupaba por el bienestar de su morena amiga.
–No tengo hambre –dijo Emma mirándola a los ojos.
Grises contra verdes-azulados.
Un gran choque.
Entonces Melanie lo entendió.
–Oh mi… ¿cuánto? –exigió saber la de ojos verdes-azulados.
– ¿Cuánto qué? –de pronto, Emma se sintió nerviosa.
–No jodas conmigo, Eastwood. No me jodas con ese tema, ¿cuánto? –exigió enervada la rubia.
–No necesito dinero, Mel. Si lo hiciese serías la primera a quien acudiría –dijo Emma en un susurro. –Estoy bien. Elliot está bien. Estamos bien –insistió la de ojos grises, ligeramente decaída.
–Oh, Emma –dijo Mel, con ojos aguados. –Por favor, no seas orgullosa. Si me necesitas… si necesitas…
No terminó la oración, pero Emma le comprendía y le sonrió de manera deslumbrante.
–Claro, Mel –dijo Emma abrazando a la rubia, y levantándose de su banco para ir a su clase de gimnasia. –Me voy, llegaré tarde si no me apresuro. ¿Qué hora tienes?
– ¿Y tu celular? –preguntó Melanie.
Emma cerró los ojos y trató de sonreírle.
–Emma Eastwood…
–La hora, por favor –suplicó Emma.
Melanie trató de sonreírle.
–Las 12:48 am.
–Oh, santa mierda. ¡Me voy! –chilló Emma, agarrando sus cosas.
Melanie negó con la cabeza repetidas veces, en dirección a dónde desapareció la morena de ojos grises. Ella estaba preocupada, sí. Preocupada por Emma, preocupada por Elliot. Pobre Elliot, chilló mentalmente la rubia. ¿Tendrían para pagar la luz? ¿Para pagar el agua? ¿Les alcanzaría para la ropa? ¿Para las cosas de Elliot? ¿Para comer, siquiera? Pobre Emma, pensó Melanie tristemente. Ella sabía que Emma trabajaba, cuando podía, sin descuidar el colegio. Ella sabía que unos tíos del extranjero la estaban ayudando con las cuentas. ¿Acaso ya no la ayudaban, ahora que estaba por cumplir la mayoría de edad? Melanie no lo sabía, pero tenía que averiguarlo lo más pronto posible. De ser así, ella ayudaría a Emma de cualquier manera que se le ocurriese.

Emma Eastwood se apresuró corriendo hacia la parte de atrás del colegio, donde se encontraba la cancha, que servía tanto para vóleibol, como para básquetbol y fútbol. Llegó y se fijó en un grupo de muchachos que estaban molestando a otro, de cabellera oscura y ojos… ojos avellana.
Santa mierda, pensó Emma. Es Zayn.
Se le formó un nudo en la garganta e, ignorando el pitido del silbato del entrenador –y su profesor de gimnasia–, corrió, cruzando la cancha, en dirección a la masa de chicos que fastidiaban al chico-de-hielo, entre ellos se encontraba Michael.
–Ya, déjenlo en paz –gritó Emma, acercándose a Zayn, que estaba sentado en las graderías, completamente mojado con alguna especie de líquido desconocido y asqueroso.
– ¿O si no, qué? –la desafió Michael.
–Eres un imbécil, Michael, ¿lo sabías? –escupió en su dirección Emma.
La banda de chicos se empezó a carcajear, como si Emma hubiese contado algún tipo de chiste descabellado.
– ¿Estás bien? –le susurró Emma a Zayn muy cerca del oído, poniendo una mano sobre su hombro derecho, y otra en su espalda, sin importarle siquiera que se mojaría con el líquido raro.
Zayn estaba respirando entrecortadamente, muy nervioso, y no le respondió nada.
– ¿Por qué no te defiendes? –le susurró la morena, otra vez muy cerca de su oído.
–Claro, Eastwood. Siete contra uno. Si piensas que ganaría, me tienes mucha fe –respondió sarcástico el moreno.
Emma le sonrió.
– ¡Hablas! –medio chilló, medió susurró la chica.
Zayn le sonrió.
– ¡Qué romántico! –exclamó, ligeramente enojado, el chico de cabellera rubia.
–Púdrete –soltó Emma.
–Contigo, amor –le respondió el chico mata-rubia.
Emma hizo una especie de mueca desagradable con la boca. Hizo ademán de levantarse, pero Zayn le cogió de la muñeca y la obligó a bajarse a su nivel.
–Vete, Eastwood. Ahora viene la golpiza, y no quiero que salgas lastimada, vete –imploró Zayn.
–No me iré, Malik –dijo Emma. –Me golpearán contigo.
–No puedo defenderte de tantos, Emma –medio roncó apenadamente Zayn. –Lárgate –ordenó.
Emma lo miró a los ojos, y quiso besarlo tanto. Apretó los labios y asintió con la cabeza. Zayn le soltó la muñeca, acariciándola y ella se levantó, rodeando tranquilamente a los siete chicos, que conversaban animadamente de cómo, y con qué, golpearían al chico de ojos avellana.
Emma sintió asco.
– ¡Corre ahora! –gritó el moreno a la chica.
Emma empezó a correr, y casi, por poco y la agarran. Uno de cabellera castaña, trató de agarrarla por los hombros pero ella fue más rápida y se alejó en dirección al entrenador.
– ¿Salvando a la puta? –le preguntó divertidamente Michael a Zayn.
–Tú, más que nadie, sabe bien que ella no es una puta –arrojó Zayn. –Tú lo sabes muy bien, ¿a quién quieres mentir?
La boca de Michael se cerró en una dura línea
–Es mi puta –dijo Michael mordaz. –Recuérdalo.
–Ni puta, ni tuya –dijo Zayn, mientras recibía el primer golpe.

Emma Eastwood pasó corriendo a un costado del entrenador.
–Eastwood, detención, el lunes –dijo el entrenador.
¿Por qué todos me llaman por mi apellido?, pensó Emma.
–Sí, sí –respondió vagamente mientras corría.
Se dirigió a la clase de química, donde se encontraba Melanie. Tocó la puerta y le abrió la profesora Verdón.
–Eastwood, qué sorpresa –dijo la señora Verdón.
– ¿Puedo… erm, hablar con Mel… digo Melanie? –dijo Emma sin aliento.
La profesora la miró detenidamente.
–Oh por fa… cosas de mujeres –dijo Emma con urgencia.
–Claro, pequeña –dijo la profesora, dándole un guiño. – ¡Grace!, –gritó la señora –la buscan.
Melanie recogió sus cosas apresuradamente y salió junto a su morena amiga.
– ¿Tampón o…?
–Mel –dijo Emma con urgencia.
Melanie le miró la cara, los ojos vidriosos.
–Eastwood, ¿estás bien? ¿Te duele algo? –exigió la rubia.
–Es Zayn…
– ¿Qué con él?
–Michael lo va a pegar –dijo Emma lagrimeando.
–Emma… tranquila –dijo Melanie abrazándola.
–No –dijo ella apartándose. –Me iban a pegar a mí también si no fuera por él. Yo… él me exigió que… que me vaya.
–Emma…
–Tenemos que ayudarlo.
–Claro. ¿Y el entrenador?
–Es tío de Michael, ¡al diablo si nos hará caso! –rugió Emma.
– ¿Dónde está Zayn?
–En la cancha, en la parte alejada de las graderías.
–Vamos por él –dijo Melanie, tirando ligeramente de su morena amiga, y dirigiéndose a la parte de atrás del colegio.

Una rubia y una morena corrieron, cruzando la inmensa cancha, para dirigirse a las graderías, donde se notaba bien el cuerpo de un chico, tirado.
Zayn Malik se encontraba inconsciente luego de la golpiza recibida por siete cobardes.
–Oh mi… –chilló Melanie. – ¿Está muerto?
–Cállate –medio gimoteó Emma.
–Perdón.
Emma se agachó y colocó a Zayn boca-arriba. Soltó el aire contenido al notar que su pecho subía y bajaba, y agradeció mentalmente a todos los dioses que permiten vivir a chicos de increíbles ojos avellana.
–Zayn –susurró Emma, pasando su mano por la cara, ligeramente magullada, del moreno. – ¿Zayn, puedes escucharme?
El moreno no se movía.
–Zayn… –rogó en un susurro Emma. –Zayn, háblame.
El moreno no respondía.
Melanie miró con pena el cuerpo del chico, y a su amiga, que se encontraba realmente tocada, para ser un chico al que apenas conocían.
Emma empezó a lagrimear.
–Zayn… –la morena sorbió por su nariz. –Zayn, por favor…
–No llores, Eastwood –pidió el moreno sin abrir los ojos. Emma se secó los ojos con las palmas de las manos. –No llores por mí, no aquí –dijo el chico.
Melanie frunció el entrecejo.
– ¿No aquí? –preguntó desconcertada.
Zayn empezó a toser en exceso.
–Ayúdame a levantarlo, Mel –pidió Emma.
Melanie se acercó, y ayudó a que el moreno se sentara/recostara por las graderías.
–Zayn –llamó la de ojos grises, agarrando con amabas manos su cara.
El moreno hizo una mueca de dolor, apretando los ojos y llevando una mano en su cadera y la otra en un brazo de Emma.
–Emma –dijo apenas el chico.
A Emma se le rompió el corazón.
–Perdón, si yo me hubiese quedado ellos no te habrían golpeado… perdón, yo sólo… –lloriqueó Emma.
– ¿Bromeas? No hubiesen tenido compasión, Emma –dijo Melanie. –Te hubiesen lastimado a ti también.
Zayn Malik abrió los ojos, y miró a la rubia de ojos verdes-azulados como notándola por primera vez.
–La rubia tiene razón –dijo Zayn mirando a Emma. –Y yo… yo no hubiese podido defenderte de tantos, Eastwood –gruñó Zayn. –Lo habría intentado, pero ellos… eran muchos…
–Lo sé –dijo Emma.
–Si ellos te tocaban, Emma… –dijo el moreno en un susurro sentido.
–Lo sé –dijo Emma, lagrimeando.
Zayn trató de acercarse más a la morena, y con una mueca de dolor, y agarrándose de la cadera, quedó a centímetros de la chica de ojos grises.
Levantó una mano y la pasó por la cara de Emma, limpiando las lágrimas cuidadosamente, como si fuera ella la que estuviese lastimada y no él.
–No llores, no aquí –susurró el moreno, muy cerca de la cara de Emma Eastwood.
Pudieron haberse besado si no fuera por…
Melanie tosió falsamente.
–Debes ir al hospital –dijo Emma, mirando a los ojos avellana del moreno. –Voy a llevarte al hospital. Te llevaremos al hospital –dijo Emma mirando a Melanie.
–Traeré el auto a esta zona, ya vuelvo –anunció Melanie, mientras daba la vuelta y se disponía a trotar hacia el aparcamiento de enfrente.
–Zayn –llamó la morena.
El chico que se encontraba con los ojos cerrados, los abrió de repente mirando a los grises, llenos de preocupación, de la chica de que se encontraba frente a él.
–Emma –dijo el chico.
–Lo siento –dijo la chica.
–No es tu culpa –dijo él.
–Sí lo es –dijo ella.
Zayn la miró detenidamente. Podría besarla, pensó él.
–Si no fuera por lo de la otra noche, él no hubiese venido por ti –gimió Emma.
–Emma, no es tu culpa –dijo el moreno, acariciando el rostro de la chica.
Emma llevó su mano sobre la de él, y la acarició. Se miraron quedamente un largo rato. Zayn respirando con dificultad, a causa de los golpes, y Emma respirando con dificultad, a causa de los sollozos.
–Te llevaré al hospital –dijo Emma en un suspiro.
–Gracias –respondió Zayn mirándola.

Emma Eastwood desvió su mirada de la de Zayn Malik.

por **Dilingdingdong** Vie 10 Ene 2014, 8:12 am

Nialler's wife escribió:
Dilingdingdong escribió:¡NUEVA LECTORA!

Dios, esta novela me esta matando sajskjajskasj. Me encanta todooo.

sakjkajs síguela soon <3
asdfghjklñd ¡yo te conozco a vos! (? ¿es eso raro? anyway, gracias por comentar :) la seguiré pronto :)

En serio? skajkajs de donde? ajskajs. ame el capi, dios. Realmente esta novela me está matando, es demasiado buena!! skjsjskaj Síguela cuando puedas <3

por **valeriekehrhahn03** Vie 10 Ene 2014, 5:03 pm

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