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El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Es Hermosaa
A Hazza Lo Golpea Su Padre :CCCCC
dSPAKD Em Louis Es De Harry
Hazza Celoso dfkjsd
A Hazza Lo Golpea Su Padre :CCCCC
dSPAKD Em Louis Es De Harry
Hazza Celoso dfkjsd
@Daniela1D
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Ahora la sigo, un beso corazón•Luciana•unicornia• escribió:Aaaaa lo ame
Aaaa Harry vive en un remolque
Y su papa lo golpea que triste
Ame el capítulo
Owwww es como una cita
Que se besen!!!!
Síguela ;)
mellamotam
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Yo cuando leia el libro no dejaba de imaginarme a Harry y Louis JAJAJA. Ahora la sigo, un beso♥♥Chris-Kwallier escribió:M-M-ME QUEDÉ PICADA. MUJER, CONTINÚA ESTO ANTES DE QUE ME DE UN ATAQUE DE ANSIEDAD O ALGO.
Me gusta mucho, no he querido leer el libro porque me parece más interesante con Larry (?) Gracias por actualizar, espero el siguiente capítulo ¡Besos!
mellamotam
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
AJAJAJAAJAJAJA AY TUS COMENTARIOS♥ Todo muy aww. Ahora la sigo, un beso debby♥Debby1D escribió:asxjsdhgvh esa salida es practicamente como una cita (?
Tiene su dibujo en un marco,aww.
A Harry se le para cuando ve a Lou sin remera, aww.
La rubia no es su tipo porque a el le cabe el chori, aww.
Ahora se lo va a llevar a un re terreno baldio y ..
we ya quisiera JAJAJ
Seguila pronto por favor!
Adios ♥
mellamotam
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Gracias! pero yo solo la adapto :). Ahora la sigo, un beso♥_ForeverHazza1D escribió:Me encanto dijpsjkds
debes seguirlaaa!!!
escribes hermoso y la novela es re linda :)
saludos!!
mellamotam
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Harry celoso♥♥ Ahora la sigo, un beso! :)@Daniela1D escribió:Es Hermosaa
A Hazza Lo Golpea Su Padre :CCCCC
dSPAKD Em Louis Es De Harry
Hazza Celoso dfkjsd
mellamotam
Capítulo 4
-¿De veras? ¿Aquí es adónde vamos? -Harry miraba por la ventana al gran cementerio situado en una colina a las afueras de la ciudad.
-Sí, está oscuro y alto y no hay árboles en el camino. Es perfecto. -Echó un vistazo a Harry, mientras que seguían el camino alrededor de la colina.
-Si tú lo dices, pero si sucede lo mismo que en La Noche de los Muertos Vivientes , sabes que seremos los primeros en irnos.
Louis se echó a reír: -Soy más rápido que los zombis. Sería capaz de salvarnos. -Harry podía ver a Louis como si realmente estuviera imaginando sacarlos de la colina si un enjambre de no-muertos los atacaran.
Louis estacionó la camioneta más allá de las tumbas a un lado de la colina, abrupta y escarpada. No había árboles cubriendo el área, así que tenía una vista perfecta del cielo lleno de estrellas. Una luna llena pendía alta en el cielo hacia el oeste y la Osa Mayor era claramente visible entre los cientos de estrellas. Era sin duda una hermosa vista. Harry salió una vez que la camioneta se había detenido y se acercó a la orilla del acantilado.
-Esto es realmente alto. -Harry se quedó mirando a la oscuridad, la luna llena siempre con un poco de luz, pero todavía no podía ver más que unos pocos metros.
-Oye, aléjate de allí. -Louis se apoyó en un costado de la camioneta, pero no llegó más lejos.
-¿Por qué? Ven aquí y mira, es muy lejos hacia abajo. -Harry se inclinó un poco más cerca.
-Harry, por favor, regresa a la camioneta.
Le llevó a Harry un segundo darse cuenta. -¿Tienes miedo a las alturas?
-Tal vez. -Louis se cruzó de brazos.
-¿Así que no te gusta si hago esto? -Harry sacó la pierna a lo largo de la cornisa, pero se retiró de nuevo rápidamente.
-Maldita sea, si no vuelves a la camioneta te voy a dejar. -Louis se trasladó a la puerta y puso la mano en la manija.
-Está bien. -Harry levantó las manos-. Voy a retroceder. No puedo creer que el duro deportista le tenga miedo a las alturas. -Harry se echó a reír. Casi podría apostar que nadie más aparte de él sabía de la fobia de Louis.
Louis le frunció el ceño. -Estoy contemplando la posibilidad de irme y dejarte aquí sólo por burlarte de mí.
-Sé que no me dejarías. -Harry se inclinó contra la camioneta, sólo a un par de pies de Louis. Él tenía la repentina urgencia de presionar su cuerpo contra el chico más pequeño. Para sentir esos músculos definidos apretados contra él. Se sintió agradecido cuando Louis dio un paso atrás y agarró la manija de la puerta.
-He traído mantas. -Louis abrió la puerta de la cabina y tomó dos grandes mantas del suelo.
Harry vio que extendió una manta en el capó y se subió sobre ella. No estaba seguro de qué pensar cuando Louis dio unas palmaditas en el lugar junto a él. Harry vaciló por un segundo, la imagen de unos pocos segundos antes seguía plagando su mente. Y teniendo en cuenta sus reacciones recientes ante el deportista, no estaba seguro si era una buena idea yacer tan cerca de él. Después de unos segundos de conflicto interno, y una súplica silenciosa a su polla para que se comportase, se arrastró unas pulgadas. Cuando se instaló al lado de Louis, estaban tan cerca que sus muslos se estaban tocando. Estuvo más caliente al instante, casi como si el aire frío de la noche no estuviera circulando a su alrededor.
-¿Alguna vez has traído a una chica aquí? -Harry preguntó. Tal vez la conversación lo haría dejar de pensar en el calor que irradiaba el cuerpo a su lado. Además, sabía que Louis había estado aquí antes, podría decirlo por lo bien que conocía el camino.
-No, nunca traje a una chica aquí. Nunca he traído a nadie aquí en realidad. Esto es un poco como un lugar en donde vengo para aclarar mi mente. -Louis puso sus brazos detrás de la cabeza.
-Entonces, ¿por qué me has traído? Quiero decir que sólo hemos empezados a tratarnos hace un par de días.
Louis estuvo en silencio unos pocos segundos. -No sé, supongo que simplemente no quería venir aquí solo, y pareces ser el tipo de persona al que le agradaría algo así como una lluvia de meteoritos. Si le pidiera a cualquier persona que venga aquí, con un clima frío, a mirar a las estrellas por un par de horas, me mandaría a la mierda. De alguna manera, sabía que no serías una de ellas.
Harry tenía que decir que era más que un poco halagador el que Louis lo escogiera de entre los atletas populares y las porristas con los que normalmente se juntaba. -Lo aprecio. -Harry tiró de la manta hasta el cuello cuando el primer disparo de meteoros cruzó el cielo.
*
Harry se despertó temprano la mañana siguiente, a pesar de que él y Harry habían regresado bastante tarde. Estaba un poco cansado, pero no era nada que no pudiera manejar. Habían tenido una gran noche, hablando y viendo las estrellas. Se sintió conectado a Harry de una manera en la que no había estado con ninguna otra persona. Louis seguía sin saber si Harry era gay. Pero sabía que el chico no tenía novia. A pesar de que había salido con un par de chicas, nada había pasado desde entonces.
Louis se vistió rápidamente. Le gustaba hacer ejercicio en el gimnasio de la escuela antes de que empezaran las clases. Maldijo en voz baja mientras aparcaba en el estacionamiento de grava y miraba la camioneta blanca de Charlie estacionada junto a la puerta. Honestamente no podía decir que estaba sorprendido de que Charlie estuviera allí esperando por él. En pocas palabras, pensó en volver a casa y hacer sus ejercicios más tarde, pero sabía que Charlie probablemente iría a su casa si él no se presentaba en el gimnasio. Suspiró al agarrar su bolso y se dirigió hacia el interior. Así como él predijo, Charlie estaba sentado en el banco de pesas, recostado sobre los codos, las piernas cruzadas en los tobillos, sin prestar ninguna atención a la puerta. Sus ojos azules miraban fijamente a la distancia fuera de la ventana, la mandíbula cincelada estirada como si estuviera contemplando algo en su cabeza.
Louis no le hizo caso y comenzó su entrenamiento habitual.
-¿Así que ni siquiera me vas a saludar?
Charlie se le puso delante, los brazos cruzados.
-Mira, Charlie, sólo quiero hacer mi sesión de ejercicios y llegar a clase. ¿Te parece bien? -Louis rodó los ojos y continuó con su rutina.
-¡No sé por qué mierda no me hablas! -Charlie le gritó, con voz tan fuerte y llena de ira que Louis saltó desde el banquillo.
-Es más, Charlie. ¡Aléjate de mí! -Louis se dirigió hacia el vestuario. Terminaría su entrenamiento más tarde. Estaba tirando la ropa dentro de su bolso, a punto de tomar una ducha rápida, cuando sintió que Charlie lo agarraba.
-No te metas conmigo -escupió Charlie.
Empujó a Louis primero, de cara contra la pared de fríos azulejos, torciendo su brazo a la espalda para sostenerlo en su lugar y manteniendo su otra mano con firmeza sobre las baldosas. El movimiento ocurrió tan rápido que Louis no tuvo tiempo de defenderse.
»-Te amo, Lou, así que no me hagas daño. No me obligues a hacer algo que podría lamentar.
-Estás loco, Charlie. Necesitas ayuda. -Louis trató de maniobrar su cuerpo de tal manera para poder zafarse, pero Charlie lo mantenía muy apretado, y la lucha sólo empeoró las cosas.
-Simplemente... -Las palabras de Charlie se vieron truncadas cuando oyó que la puerta del gimnasio se abría y luego la voz del entrenador hablando con uno de sus compañeros de equipo. Charlie lo liberó-. Realmente deberías reconsiderar lo que estás haciendo. -Se detuvo en la puerta y giró la cabeza lo suficiente como para que Louis pudiera ver su perfil. Luego se marchó, pasando por la puerta justo cuando el entrenador entró.
-¿Cuál es su problema? -El entrenador entrecerró los ojos en Louis.
Se encogió de hombros, haciendo gala de pretender no tener ni idea.
-No lo sé. Él ha estado de mal humor el último par de semanas. -Su voz se quebró mientras hablaba, y él mismo se reprendió porque demostró que fue sacudido por el estallido de Charlie, sin importar lo mucho que tratara de convencerse de que no lo estaba.
Louis saltó bajo el agua caliente debajo del pulverizador de la ducha y se quedó allí durante unos minutos. Charlie en realidad no le haría daño, ¿o sí? Su ex novio nunca lo había amenazado antes, pero antes jamás había hecho nada para hacerlo enojar.
Se sacudió esos pensamientos de su cabeza y rápidamente terminó de ducharse, vestirse, y peinó su cabello. Tenía sólo unos minutos antes de que empezaran sus clases, y no quería llegar tarde.
*
El torso duro, sin camisa, yacía pesadamente sobre él, aplastándolo contra el colchón. Las manos fuertes se mantenían firmes en sus muñecas. Harry se empujaba hacia arriba en el toque que parecía alejarse. Gimió mientras trataba desesperadamente de moverse para volver a estar en contacto. -Por favor -sólo rogó. Oyó una risa suave por encima de él y abrió los ojos, pero la fuente de la risa estaba protegida por la oscuridad.
-Relájate. -La voz era baja, un ligero soplo de aire sopló en el oído de Harry y un escalofrío se deslizó por su cuerpo enrojecido.
Harry hizo lo que le dijo y apretó la cabeza contra la suave almohada. -Louis -murmuró, sabiendo que la voz pertenecía a él a pesar de que no podía ver su hermoso rostro.
-No te preocupes, bebé, todo estará bien. -La lengua húmeda de Louis se movió por su pecho dejando una franja húmeda que enfriaba su piel cuando el aire soplaba sobre él.
Harry se quejó en voz baja cuando el calor se movió por encima de su cadera, las pequeñas manos ásperas se deslizaron con gracia sobre sus muslos, fácilmente separándolos.
-Voy a hacerte sentir tan bien. -Louis respiraba y apretó sus labios contra la cabeza de la polla de Harry y la mantuvo allí antes de deslizar los labios hacia abajo sobre el eje duro como roca.
*
Los ojos de Harry se abrieron cuando la alarma en la mesilla de noche empezó a sonar a todo volumen. Rápidamente rodó por su espalda y accionó el interruptor para dejar la habitación en silencio. Una gota de sudor se deslizó lentamente por su frente. El sueño que acababa de experimentar vino corriendo hacia su cabeza como un torbellino; las manos, la carne caliente, un cuerpo duro musculoso, y una boca caliente. Louis. Se recostó contra la almohada y se quedó mirando el techo, decidido a no tocar su polla erecta. «Fue sólo un sueño», pensó. «Esto no quiere decir que me sintiera atraído por Louis».
Harry se destapó y se levantó lentamente. Una sacudida repentina de dolor se disparó por su costado, y miró la contusión morada que cubría el lado derecho de su caja torácica. Casi se había olvidado de eso. «Casi». Suspiró y se levantó lentamente. El dolor generalmente se desvanecía en un par de días, pero el hematoma parecía que se quedaría por una semana o más. Tomó un poco de ropa y se dirigió a la ducha.
Harry se apresuró a entrar a la escuela cuando la campana comenzó a sonar. No le gustaba llegar tarde, pero por alguna razón había tomado un cuidado especial en su apariencia. Se encontró hurgando en su armario para encontrar una camisa blanca con un diseño de color rojo en la parte delantera y un par de jeans nuevos y estrechos que había comprado, pero nunca se había molestado en ponerse más de un par de veces.
-Gracias por unirte a nosotros. -La profesora le dio una apretada sonrisa. Tomó su asiento normal en la parte posterior de la clase, y abrió su libro de Inglés. Mientras estaba escribiendo notas de lo que la profesora decía, de repente tuvo la sensación de que estaba siendo vigilado. Miró hacia arriba, la profesora estaba mirando hacia la pizarra y todos alrededor de Harry parecían estar prestando atención a ella. Echó un vistazo a la habitación, sus ojos finalmente aterrizaron en los azules cielo, dos filas a su lado. Louis lo miraba fijamente, con los ojos pesados, y esta vez el atleta no se molestó en mirar hacia otro lado. Harry tragó saliva, y se mordió el labio inferior. Aunque nunca había visto a nadie que lo mirara de esa manera antes, ni siquiera él podría decir que era lujuria.
Los ojos de Louis estaban clavados en él y Harry tenía la sensación de que podía ver directamente a través de él. Ver todos los secretos, todas las noches solo, cada vez que se quedó magullado y roto en el suelo. Louis estaba viendo dentro de él. Harry podía sentirlo.
Harry tragó saliva y apartó la vista. La intensidad de la mirada le hacía retorcerse. Se estaba volviendo difícil lograr llenar de oxígeno sus pulmones. Esa mirada no podía haber estado dirigida a él, ¿verdad? Cerró los ojos y trató de regular su respiración entrecortada. ¿Louis tendría los mismos sentimientos que Harry estaba desarrollando? Casi se echó a reír ante la idea. Louis no era gay. Era el mariscal de campo del equipo de fútbol, un hombre grande en el campus. No había manera de que mirara a alguien como Harry de ninguna otra manera que no fuera amistad.
Para el final de la clase, Harry se había convencido de que Louis ni siquiera lo miraba a él sino a la chica guapa que estaba sentada en la silla del frente. La única cosa que le molestaba a Harry era la pequeña punzada de decepción que se formaba dentro de él. Nunca se había sentido atraído por otro hombre, pero las mariposas no parecían desaparecer ante la presencia de Louis, los sueños vívidos que lo dejaron duro como una roca, y la forma en que se preguntaba qué se sentiría al ser envuelto entre los musculosos y fuertes brazos de Louis, estaban empezando a hacerle reconsiderar esa parte de sí mismo.
Había visto a chicas que pensaba que eran bonitas. Había estado incluso atraído por las dos chicas con las que había salido. Pero, siempre existía el problema de no querer estar cerca de ellas. Él había besado a una de ellas, pero no había sido nada más que un beso de buenas noches en los labios. Nunca había tenido un beso de verdad. Aunque una gran parte de él sabía que acercarse a alguien significaba que tendría que hablarle de su padre. También se preguntó si tal vez la razón principal era esta sensación que tenía al ver a Louis salir del salón que se vaciaba con tanta rapidez.
Harry negó con la cabeza. No le hacía falta desarrollar un flechazo por Louis. No sólo porque era un hombre, sino porque no tenía necesidad de arriesgarse a ser golpeado si alguien descubría que el emo podía tener sentimientos por el deportista. Se dijo que las reacciones recién descubiertas eran sólo porque Louis había sido amable con él, le había ayudado en su momento de necesidad. Eso tenía que ser.
Una vez que hubiera terminado la escuela y comenzara una nueva vida, nunca vería a Louis otra vez. El único problema era que no podía librarse de la sensación de que iba a estar recordando a Louis por un tiempo muy largo.
Las siguientes dos clases pasaron rápidamente, y Harry pronto se encontró en el comedor. Tomó su asiento habitual en la mesa por la ventana en la parte posterior de la habitación. Siempre estaba sentado solo, y por lo general le gustaba de esa manera. Sin embargo, por alguna razón, ese día se sentía muy solo. Se quedó mirando la bola de comida en el centro de su plato. El plato del día era de macarrones sorpresa, pero la pelota naranja y grasosa no era algo que Harry estuviera dispuesto a intentar comer. Estaba empujando lejos el plato cuando una voz familiar habló cerca de él.
-¿Puedo sentarme contigo? -la fina voz le preguntó.
Harry miró hacia arriba para ver a Louis de pie, la bandeja en la mano, al otro lado de la mesa. Su camiseta negra lo abrazaba con la fuerza suficiente como para que pareciera una segunda piel. De repente, las mariposas de antes estaban de vuelta. -Umm, seguro. -Harry se mordió el labio inferior una vez más. La tendencia nerviosa también empezaba a convertirse en un hábito. Louis se subió sobre la banqueta, y rápidamente comenzó a devorar su mezcla de macarrones.
-¿No quieres sentarte con tus amigos? -Harry hizo un gesto hacia la mesa llena de jugadores de fútbol americano y porristas que estaban mirando en su dirección, obviamente, preguntándose por qué su amigo estaba sentado con el bicho raro.
-Eres mi amigo, ¿verdad?
Sí, Harry suponía que lo era.
-Además, Charlie y yo no nos llevamos bien. -Louis miró hacia arriba, la salsa en la esquina de su boca-. Si él me dice una palabra más, probablemente vaya a darle un puñetazo en la boca. -Louis tomó una servilleta, se limpió el residuo y miró por encima del hombro. Harry siguió su mirada y vio dagas dispararse desde Charlie en la dirección de Louis.
-¿No eran los mejores amigos? -Harry estaba un poco confundido. Sabía que los amigos se metían en peleas a veces pero, con honestidad, Charlie parecía que podría matar a Louis y no pensarlo dos veces. Su cabello rubio arenoso estaba cortado en un estilo corto militar que lo hacía parecer un recién graduado de Boot Camp . Harry no estaba seguro de por qué, pero esa mirada lo hacía temblar un poco por dentro.
-Lo éramos. -Louis se inclinó hacia atrás-. Tuvimos un pequeño desacuerdo y está enojado por ello. -Se encogió de hombros como si en realidad no significara nada-. ¿Vas a comerte eso? -Louis señaló los alimentos de Harry, que todavía estaban intactos.
-Sírvete lo que gustes. -Harry empujó el plato hacia Louis, que lo tomó y lo remató en un par de minutos.
-Esta cosa es lo mejor. -Sonrió una vez que la comida se terminó-. ¿Por qué, no te gusta?
-Honestamente, no tengo el coraje de intentarlo. -Harry sonrió un poco-. La palabra sorpresa simplemente no se siente bien para mí.
-Bueno, debes intentarlo la próxima vez. -Louis apiló sus dos bandejas y las apartó-. Entonces, ¿cómo va tu día? -Louis se inclinó hacia adelante apoyando los codos, sus ojos azules más claros a la luz del sol, y Harry recordó rápidamente la forma en la que lo había mirado en el primer periodo.
Harry se encogió de hombros. -Igual que siempre, supongo. -Pero el día había sido cualquier cosa menos normal.
-¿Cuánto tiempo llevas trabajando en Music World?
-Empecé hace un par de años, justo después de mi decimosexto cumpleaños. -Music World era en realidad el primer trabajo que Harry había solicitado, y lo habían aceptado en el acto. Cuando había preguntado después por qué, a Sandy, la propietaria, le había dicho que se veía como del tipo que vendía música, lo que sea que eso significase.
-¿Así que tienes dieciocho años?
-Sí.
-¿Te gusta trabajar allí? Me sorprende que las personas sigan comprando CDs.
-Sí, es bastante tranquilo. Supongo que la mayoría de la gente descarga de iTunes hoy en día. Sin embargo, nosotros vendemos algunas tarjetas de regalo, camisas, y reproductores de MP3. Creo que eso es lo que mantiene a la tienda en el negocio.
-Me gustó el CD que compré la otra noche, todavía está en mi reproductor. -Louis sonrió-. Hey, ¿tienes un teléfono celular? -Louis sacó el suyo de su bolsillo y lo encendió.
-Si. -De hecho, él tenía un teléfono celular. Lo había conseguido tan sólo hace un par de semanas. Había pensado en conseguir una computadora portátil, pero no tenía una conexión a internet en su casa, así que pensó que sería más útil el celular. Había oído en la radio acerca de una oferta especial en la empresa de telefonía celular local. Por lo tanto, decidió que compraría un teléfono celular con una conexión a internet móvil, de esa manera podría conseguir entrar en internet cuando lo necesitara. La cuota mensual era un poco cara, pero tenía algo de dinero ahorrado en el banco y con su trabajo no creía que el pago se convirtiera en un problema.
Sacó el teléfono, y le entregó el dispositivo a Louis. Harry todavía tenía un poco de problemas para manejar la touch screen . Louis presionó un par de botones como si supiera exactamente lo que estaba haciendo. Le devolvió el teléfono a Harry con una sonrisa en su rostro. -Puesto que no tienes a alguien en la lista me puse como una marcación rápida.
Malditas mariposas. Harry sacó el teléfono de la mano de Louis, y sus dedos se rozaron brevemente, causando la misma sensación de electricidad que había sentido esa noche en el trabajo dispararse a través de él una vez más. Debería seriamente pensar más en eso. Averiguar exactamente lo que estaba empezando a sentir por Louis.
-¿Cuál es tu número? -Louis miró a Harry desde la parte superior de su teléfono.
Harry terminó de recitar el último número justo en el momento en que la campana sonó.
-Te enviaré un mensaje de texto en algún momento. -Louis sonrió al tiempo que agarraba las dos bandejas y se dirigía hacia el carro al lado de la puerta.
-De acuerdo. -Harry metió las manos en el bolsillo y le dio una última sonrisa antes de salir por la puerta hacia su próxima clase.
-Sí, está oscuro y alto y no hay árboles en el camino. Es perfecto. -Echó un vistazo a Harry, mientras que seguían el camino alrededor de la colina.
-Si tú lo dices, pero si sucede lo mismo que en La Noche de los Muertos Vivientes , sabes que seremos los primeros en irnos.
Louis se echó a reír: -Soy más rápido que los zombis. Sería capaz de salvarnos. -Harry podía ver a Louis como si realmente estuviera imaginando sacarlos de la colina si un enjambre de no-muertos los atacaran.
Louis estacionó la camioneta más allá de las tumbas a un lado de la colina, abrupta y escarpada. No había árboles cubriendo el área, así que tenía una vista perfecta del cielo lleno de estrellas. Una luna llena pendía alta en el cielo hacia el oeste y la Osa Mayor era claramente visible entre los cientos de estrellas. Era sin duda una hermosa vista. Harry salió una vez que la camioneta se había detenido y se acercó a la orilla del acantilado.
-Esto es realmente alto. -Harry se quedó mirando a la oscuridad, la luna llena siempre con un poco de luz, pero todavía no podía ver más que unos pocos metros.
-Oye, aléjate de allí. -Louis se apoyó en un costado de la camioneta, pero no llegó más lejos.
-¿Por qué? Ven aquí y mira, es muy lejos hacia abajo. -Harry se inclinó un poco más cerca.
-Harry, por favor, regresa a la camioneta.
Le llevó a Harry un segundo darse cuenta. -¿Tienes miedo a las alturas?
-Tal vez. -Louis se cruzó de brazos.
-¿Así que no te gusta si hago esto? -Harry sacó la pierna a lo largo de la cornisa, pero se retiró de nuevo rápidamente.
-Maldita sea, si no vuelves a la camioneta te voy a dejar. -Louis se trasladó a la puerta y puso la mano en la manija.
-Está bien. -Harry levantó las manos-. Voy a retroceder. No puedo creer que el duro deportista le tenga miedo a las alturas. -Harry se echó a reír. Casi podría apostar que nadie más aparte de él sabía de la fobia de Louis.
Louis le frunció el ceño. -Estoy contemplando la posibilidad de irme y dejarte aquí sólo por burlarte de mí.
-Sé que no me dejarías. -Harry se inclinó contra la camioneta, sólo a un par de pies de Louis. Él tenía la repentina urgencia de presionar su cuerpo contra el chico más pequeño. Para sentir esos músculos definidos apretados contra él. Se sintió agradecido cuando Louis dio un paso atrás y agarró la manija de la puerta.
-He traído mantas. -Louis abrió la puerta de la cabina y tomó dos grandes mantas del suelo.
Harry vio que extendió una manta en el capó y se subió sobre ella. No estaba seguro de qué pensar cuando Louis dio unas palmaditas en el lugar junto a él. Harry vaciló por un segundo, la imagen de unos pocos segundos antes seguía plagando su mente. Y teniendo en cuenta sus reacciones recientes ante el deportista, no estaba seguro si era una buena idea yacer tan cerca de él. Después de unos segundos de conflicto interno, y una súplica silenciosa a su polla para que se comportase, se arrastró unas pulgadas. Cuando se instaló al lado de Louis, estaban tan cerca que sus muslos se estaban tocando. Estuvo más caliente al instante, casi como si el aire frío de la noche no estuviera circulando a su alrededor.
-¿Alguna vez has traído a una chica aquí? -Harry preguntó. Tal vez la conversación lo haría dejar de pensar en el calor que irradiaba el cuerpo a su lado. Además, sabía que Louis había estado aquí antes, podría decirlo por lo bien que conocía el camino.
-No, nunca traje a una chica aquí. Nunca he traído a nadie aquí en realidad. Esto es un poco como un lugar en donde vengo para aclarar mi mente. -Louis puso sus brazos detrás de la cabeza.
-Entonces, ¿por qué me has traído? Quiero decir que sólo hemos empezados a tratarnos hace un par de días.
Louis estuvo en silencio unos pocos segundos. -No sé, supongo que simplemente no quería venir aquí solo, y pareces ser el tipo de persona al que le agradaría algo así como una lluvia de meteoritos. Si le pidiera a cualquier persona que venga aquí, con un clima frío, a mirar a las estrellas por un par de horas, me mandaría a la mierda. De alguna manera, sabía que no serías una de ellas.
Harry tenía que decir que era más que un poco halagador el que Louis lo escogiera de entre los atletas populares y las porristas con los que normalmente se juntaba. -Lo aprecio. -Harry tiró de la manta hasta el cuello cuando el primer disparo de meteoros cruzó el cielo.
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Harry se despertó temprano la mañana siguiente, a pesar de que él y Harry habían regresado bastante tarde. Estaba un poco cansado, pero no era nada que no pudiera manejar. Habían tenido una gran noche, hablando y viendo las estrellas. Se sintió conectado a Harry de una manera en la que no había estado con ninguna otra persona. Louis seguía sin saber si Harry era gay. Pero sabía que el chico no tenía novia. A pesar de que había salido con un par de chicas, nada había pasado desde entonces.
Louis se vistió rápidamente. Le gustaba hacer ejercicio en el gimnasio de la escuela antes de que empezaran las clases. Maldijo en voz baja mientras aparcaba en el estacionamiento de grava y miraba la camioneta blanca de Charlie estacionada junto a la puerta. Honestamente no podía decir que estaba sorprendido de que Charlie estuviera allí esperando por él. En pocas palabras, pensó en volver a casa y hacer sus ejercicios más tarde, pero sabía que Charlie probablemente iría a su casa si él no se presentaba en el gimnasio. Suspiró al agarrar su bolso y se dirigió hacia el interior. Así como él predijo, Charlie estaba sentado en el banco de pesas, recostado sobre los codos, las piernas cruzadas en los tobillos, sin prestar ninguna atención a la puerta. Sus ojos azules miraban fijamente a la distancia fuera de la ventana, la mandíbula cincelada estirada como si estuviera contemplando algo en su cabeza.
Louis no le hizo caso y comenzó su entrenamiento habitual.
-¿Así que ni siquiera me vas a saludar?
Charlie se le puso delante, los brazos cruzados.
-Mira, Charlie, sólo quiero hacer mi sesión de ejercicios y llegar a clase. ¿Te parece bien? -Louis rodó los ojos y continuó con su rutina.
-¡No sé por qué mierda no me hablas! -Charlie le gritó, con voz tan fuerte y llena de ira que Louis saltó desde el banquillo.
-Es más, Charlie. ¡Aléjate de mí! -Louis se dirigió hacia el vestuario. Terminaría su entrenamiento más tarde. Estaba tirando la ropa dentro de su bolso, a punto de tomar una ducha rápida, cuando sintió que Charlie lo agarraba.
-No te metas conmigo -escupió Charlie.
Empujó a Louis primero, de cara contra la pared de fríos azulejos, torciendo su brazo a la espalda para sostenerlo en su lugar y manteniendo su otra mano con firmeza sobre las baldosas. El movimiento ocurrió tan rápido que Louis no tuvo tiempo de defenderse.
»-Te amo, Lou, así que no me hagas daño. No me obligues a hacer algo que podría lamentar.
-Estás loco, Charlie. Necesitas ayuda. -Louis trató de maniobrar su cuerpo de tal manera para poder zafarse, pero Charlie lo mantenía muy apretado, y la lucha sólo empeoró las cosas.
-Simplemente... -Las palabras de Charlie se vieron truncadas cuando oyó que la puerta del gimnasio se abría y luego la voz del entrenador hablando con uno de sus compañeros de equipo. Charlie lo liberó-. Realmente deberías reconsiderar lo que estás haciendo. -Se detuvo en la puerta y giró la cabeza lo suficiente como para que Louis pudiera ver su perfil. Luego se marchó, pasando por la puerta justo cuando el entrenador entró.
-¿Cuál es su problema? -El entrenador entrecerró los ojos en Louis.
Se encogió de hombros, haciendo gala de pretender no tener ni idea.
-No lo sé. Él ha estado de mal humor el último par de semanas. -Su voz se quebró mientras hablaba, y él mismo se reprendió porque demostró que fue sacudido por el estallido de Charlie, sin importar lo mucho que tratara de convencerse de que no lo estaba.
Louis saltó bajo el agua caliente debajo del pulverizador de la ducha y se quedó allí durante unos minutos. Charlie en realidad no le haría daño, ¿o sí? Su ex novio nunca lo había amenazado antes, pero antes jamás había hecho nada para hacerlo enojar.
Se sacudió esos pensamientos de su cabeza y rápidamente terminó de ducharse, vestirse, y peinó su cabello. Tenía sólo unos minutos antes de que empezaran sus clases, y no quería llegar tarde.
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El torso duro, sin camisa, yacía pesadamente sobre él, aplastándolo contra el colchón. Las manos fuertes se mantenían firmes en sus muñecas. Harry se empujaba hacia arriba en el toque que parecía alejarse. Gimió mientras trataba desesperadamente de moverse para volver a estar en contacto. -Por favor -sólo rogó. Oyó una risa suave por encima de él y abrió los ojos, pero la fuente de la risa estaba protegida por la oscuridad.
-Relájate. -La voz era baja, un ligero soplo de aire sopló en el oído de Harry y un escalofrío se deslizó por su cuerpo enrojecido.
Harry hizo lo que le dijo y apretó la cabeza contra la suave almohada. -Louis -murmuró, sabiendo que la voz pertenecía a él a pesar de que no podía ver su hermoso rostro.
-No te preocupes, bebé, todo estará bien. -La lengua húmeda de Louis se movió por su pecho dejando una franja húmeda que enfriaba su piel cuando el aire soplaba sobre él.
Harry se quejó en voz baja cuando el calor se movió por encima de su cadera, las pequeñas manos ásperas se deslizaron con gracia sobre sus muslos, fácilmente separándolos.
-Voy a hacerte sentir tan bien. -Louis respiraba y apretó sus labios contra la cabeza de la polla de Harry y la mantuvo allí antes de deslizar los labios hacia abajo sobre el eje duro como roca.
*
Los ojos de Harry se abrieron cuando la alarma en la mesilla de noche empezó a sonar a todo volumen. Rápidamente rodó por su espalda y accionó el interruptor para dejar la habitación en silencio. Una gota de sudor se deslizó lentamente por su frente. El sueño que acababa de experimentar vino corriendo hacia su cabeza como un torbellino; las manos, la carne caliente, un cuerpo duro musculoso, y una boca caliente. Louis. Se recostó contra la almohada y se quedó mirando el techo, decidido a no tocar su polla erecta. «Fue sólo un sueño», pensó. «Esto no quiere decir que me sintiera atraído por Louis».
Harry se destapó y se levantó lentamente. Una sacudida repentina de dolor se disparó por su costado, y miró la contusión morada que cubría el lado derecho de su caja torácica. Casi se había olvidado de eso. «Casi». Suspiró y se levantó lentamente. El dolor generalmente se desvanecía en un par de días, pero el hematoma parecía que se quedaría por una semana o más. Tomó un poco de ropa y se dirigió a la ducha.
Harry se apresuró a entrar a la escuela cuando la campana comenzó a sonar. No le gustaba llegar tarde, pero por alguna razón había tomado un cuidado especial en su apariencia. Se encontró hurgando en su armario para encontrar una camisa blanca con un diseño de color rojo en la parte delantera y un par de jeans nuevos y estrechos que había comprado, pero nunca se había molestado en ponerse más de un par de veces.
-Gracias por unirte a nosotros. -La profesora le dio una apretada sonrisa. Tomó su asiento normal en la parte posterior de la clase, y abrió su libro de Inglés. Mientras estaba escribiendo notas de lo que la profesora decía, de repente tuvo la sensación de que estaba siendo vigilado. Miró hacia arriba, la profesora estaba mirando hacia la pizarra y todos alrededor de Harry parecían estar prestando atención a ella. Echó un vistazo a la habitación, sus ojos finalmente aterrizaron en los azules cielo, dos filas a su lado. Louis lo miraba fijamente, con los ojos pesados, y esta vez el atleta no se molestó en mirar hacia otro lado. Harry tragó saliva, y se mordió el labio inferior. Aunque nunca había visto a nadie que lo mirara de esa manera antes, ni siquiera él podría decir que era lujuria.
Los ojos de Louis estaban clavados en él y Harry tenía la sensación de que podía ver directamente a través de él. Ver todos los secretos, todas las noches solo, cada vez que se quedó magullado y roto en el suelo. Louis estaba viendo dentro de él. Harry podía sentirlo.
Harry tragó saliva y apartó la vista. La intensidad de la mirada le hacía retorcerse. Se estaba volviendo difícil lograr llenar de oxígeno sus pulmones. Esa mirada no podía haber estado dirigida a él, ¿verdad? Cerró los ojos y trató de regular su respiración entrecortada. ¿Louis tendría los mismos sentimientos que Harry estaba desarrollando? Casi se echó a reír ante la idea. Louis no era gay. Era el mariscal de campo del equipo de fútbol, un hombre grande en el campus. No había manera de que mirara a alguien como Harry de ninguna otra manera que no fuera amistad.
Para el final de la clase, Harry se había convencido de que Louis ni siquiera lo miraba a él sino a la chica guapa que estaba sentada en la silla del frente. La única cosa que le molestaba a Harry era la pequeña punzada de decepción que se formaba dentro de él. Nunca se había sentido atraído por otro hombre, pero las mariposas no parecían desaparecer ante la presencia de Louis, los sueños vívidos que lo dejaron duro como una roca, y la forma en que se preguntaba qué se sentiría al ser envuelto entre los musculosos y fuertes brazos de Louis, estaban empezando a hacerle reconsiderar esa parte de sí mismo.
Había visto a chicas que pensaba que eran bonitas. Había estado incluso atraído por las dos chicas con las que había salido. Pero, siempre existía el problema de no querer estar cerca de ellas. Él había besado a una de ellas, pero no había sido nada más que un beso de buenas noches en los labios. Nunca había tenido un beso de verdad. Aunque una gran parte de él sabía que acercarse a alguien significaba que tendría que hablarle de su padre. También se preguntó si tal vez la razón principal era esta sensación que tenía al ver a Louis salir del salón que se vaciaba con tanta rapidez.
Harry negó con la cabeza. No le hacía falta desarrollar un flechazo por Louis. No sólo porque era un hombre, sino porque no tenía necesidad de arriesgarse a ser golpeado si alguien descubría que el emo podía tener sentimientos por el deportista. Se dijo que las reacciones recién descubiertas eran sólo porque Louis había sido amable con él, le había ayudado en su momento de necesidad. Eso tenía que ser.
Una vez que hubiera terminado la escuela y comenzara una nueva vida, nunca vería a Louis otra vez. El único problema era que no podía librarse de la sensación de que iba a estar recordando a Louis por un tiempo muy largo.
Las siguientes dos clases pasaron rápidamente, y Harry pronto se encontró en el comedor. Tomó su asiento habitual en la mesa por la ventana en la parte posterior de la habitación. Siempre estaba sentado solo, y por lo general le gustaba de esa manera. Sin embargo, por alguna razón, ese día se sentía muy solo. Se quedó mirando la bola de comida en el centro de su plato. El plato del día era de macarrones sorpresa, pero la pelota naranja y grasosa no era algo que Harry estuviera dispuesto a intentar comer. Estaba empujando lejos el plato cuando una voz familiar habló cerca de él.
-¿Puedo sentarme contigo? -la fina voz le preguntó.
Harry miró hacia arriba para ver a Louis de pie, la bandeja en la mano, al otro lado de la mesa. Su camiseta negra lo abrazaba con la fuerza suficiente como para que pareciera una segunda piel. De repente, las mariposas de antes estaban de vuelta. -Umm, seguro. -Harry se mordió el labio inferior una vez más. La tendencia nerviosa también empezaba a convertirse en un hábito. Louis se subió sobre la banqueta, y rápidamente comenzó a devorar su mezcla de macarrones.
-¿No quieres sentarte con tus amigos? -Harry hizo un gesto hacia la mesa llena de jugadores de fútbol americano y porristas que estaban mirando en su dirección, obviamente, preguntándose por qué su amigo estaba sentado con el bicho raro.
-Eres mi amigo, ¿verdad?
Sí, Harry suponía que lo era.
-Además, Charlie y yo no nos llevamos bien. -Louis miró hacia arriba, la salsa en la esquina de su boca-. Si él me dice una palabra más, probablemente vaya a darle un puñetazo en la boca. -Louis tomó una servilleta, se limpió el residuo y miró por encima del hombro. Harry siguió su mirada y vio dagas dispararse desde Charlie en la dirección de Louis.
-¿No eran los mejores amigos? -Harry estaba un poco confundido. Sabía que los amigos se metían en peleas a veces pero, con honestidad, Charlie parecía que podría matar a Louis y no pensarlo dos veces. Su cabello rubio arenoso estaba cortado en un estilo corto militar que lo hacía parecer un recién graduado de Boot Camp . Harry no estaba seguro de por qué, pero esa mirada lo hacía temblar un poco por dentro.
-Lo éramos. -Louis se inclinó hacia atrás-. Tuvimos un pequeño desacuerdo y está enojado por ello. -Se encogió de hombros como si en realidad no significara nada-. ¿Vas a comerte eso? -Louis señaló los alimentos de Harry, que todavía estaban intactos.
-Sírvete lo que gustes. -Harry empujó el plato hacia Louis, que lo tomó y lo remató en un par de minutos.
-Esta cosa es lo mejor. -Sonrió una vez que la comida se terminó-. ¿Por qué, no te gusta?
-Honestamente, no tengo el coraje de intentarlo. -Harry sonrió un poco-. La palabra sorpresa simplemente no se siente bien para mí.
-Bueno, debes intentarlo la próxima vez. -Louis apiló sus dos bandejas y las apartó-. Entonces, ¿cómo va tu día? -Louis se inclinó hacia adelante apoyando los codos, sus ojos azules más claros a la luz del sol, y Harry recordó rápidamente la forma en la que lo había mirado en el primer periodo.
Harry se encogió de hombros. -Igual que siempre, supongo. -Pero el día había sido cualquier cosa menos normal.
-¿Cuánto tiempo llevas trabajando en Music World?
-Empecé hace un par de años, justo después de mi decimosexto cumpleaños. -Music World era en realidad el primer trabajo que Harry había solicitado, y lo habían aceptado en el acto. Cuando había preguntado después por qué, a Sandy, la propietaria, le había dicho que se veía como del tipo que vendía música, lo que sea que eso significase.
-¿Así que tienes dieciocho años?
-Sí.
-¿Te gusta trabajar allí? Me sorprende que las personas sigan comprando CDs.
-Sí, es bastante tranquilo. Supongo que la mayoría de la gente descarga de iTunes hoy en día. Sin embargo, nosotros vendemos algunas tarjetas de regalo, camisas, y reproductores de MP3. Creo que eso es lo que mantiene a la tienda en el negocio.
-Me gustó el CD que compré la otra noche, todavía está en mi reproductor. -Louis sonrió-. Hey, ¿tienes un teléfono celular? -Louis sacó el suyo de su bolsillo y lo encendió.
-Si. -De hecho, él tenía un teléfono celular. Lo había conseguido tan sólo hace un par de semanas. Había pensado en conseguir una computadora portátil, pero no tenía una conexión a internet en su casa, así que pensó que sería más útil el celular. Había oído en la radio acerca de una oferta especial en la empresa de telefonía celular local. Por lo tanto, decidió que compraría un teléfono celular con una conexión a internet móvil, de esa manera podría conseguir entrar en internet cuando lo necesitara. La cuota mensual era un poco cara, pero tenía algo de dinero ahorrado en el banco y con su trabajo no creía que el pago se convirtiera en un problema.
Sacó el teléfono, y le entregó el dispositivo a Louis. Harry todavía tenía un poco de problemas para manejar la touch screen . Louis presionó un par de botones como si supiera exactamente lo que estaba haciendo. Le devolvió el teléfono a Harry con una sonrisa en su rostro. -Puesto que no tienes a alguien en la lista me puse como una marcación rápida.
Malditas mariposas. Harry sacó el teléfono de la mano de Louis, y sus dedos se rozaron brevemente, causando la misma sensación de electricidad que había sentido esa noche en el trabajo dispararse a través de él una vez más. Debería seriamente pensar más en eso. Averiguar exactamente lo que estaba empezando a sentir por Louis.
-¿Cuál es tu número? -Louis miró a Harry desde la parte superior de su teléfono.
Harry terminó de recitar el último número justo en el momento en que la campana sonó.
-Te enviaré un mensaje de texto en algún momento. -Louis sonrió al tiempo que agarraba las dos bandejas y se dirigía hacia el carro al lado de la puerta.
-De acuerdo. -Harry metió las manos en el bolsillo y le dio una última sonrisa antes de salir por la puerta hacia su próxima clase.
+
¡Gracias por leer y comentar! Para las que leen BL en estos días actualizo, un beso!♥
mellamotam
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
OMFG LLORO, LLORO, LLORO Y ESO QUE NI SIQUIERA SE HAN PUESTO REALMENTE ROMÁNTICOS, OMFG. HARREH, TERNURA HERMOSA, LOUEH, SEGUNDA TERNURA HERMOSA Y CHARLE ME CAGAS.
Necesito más de esto, es como mi pan de cada día (Literal) me gusta mucho, demasiado.
Acabo de descargar un libro pero no lo he iniciado, de hecho tengo varios pendientes pff. Bueno, volviendo al tema: gracias por adaptar esto, cariño. ¡Besos! Y felicitaciones por tu trabajo.♥
Necesito más de esto, es como mi pan de cada día (Literal) me gusta mucho, demasiado.
Acabo de descargar un libro pero no lo he iniciado, de hecho tengo varios pendientes pff. Bueno, volviendo al tema: gracias por adaptar esto, cariño. ¡Besos! Y felicitaciones por tu trabajo.♥
Chris-Kwallier
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
HOLAAAAAA
Ame el capítulo
Es tan alsjsishsjysdh
Que "cita" tan romántica en el cementerio
Aaaaaaaaaaa son tan lindosss
Aaaa odio a charlie
Tienes otra novela !genial!!!!!!!! Me pasas el link????
Bueno
Eeeeeeeeeeeeen fin
Síguela ;)
Ame el capítulo
Es tan alsjsishsjysdh
Que "cita" tan romántica en el cementerio
Aaaaaaaaaaa son tan lindosss
Aaaa odio a charlie
Tienes otra novela !genial!!!!!!!! Me pasas el link????
Bueno
Eeeeeeeeeeeeen fin
Síguela ;)
•Luciana•unicornia•
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Que "romantica" "cita" comida y un cementerio, es un poco inusual pero bueh.
Porque Louis lo miraba asi? Sera que vio el moreton de Harry?
Puto padre de Harry
porque lo golpea?
Ese pibe me da mala espina (charlie)
Siguela pronto
atte
andrea
Porque Louis lo miraba asi? Sera que vio el moreton de Harry?
Puto padre de Harry
porque lo golpea?
Ese pibe me da mala espina (charlie)
Siguela pronto
atte
andrea
Ann
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Nueva lectora!.
Realmente me encanta el desarrollo de esta historia así que te pido que la sigas pronto.
Realmente me encanta el desarrollo de esta historia así que te pido que la sigas pronto.
fromfinner.
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
W[FKPE Que Romántico :333
AJAJAJJA La Amo
Continua la Por Favor
AJAJAJJA La Amo
Continua la Por Favor
@Daniela1D
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
En primer lugar puto blog no avisa
y en segundo y mas importante LA AMO LA AMO
y en segundo y mas importante LA AMO LA AMO
Dimples'sHarold
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
AWWW M GUSTA ESTA NOVELAAA
NOY M GUSTA CHARLIE!!!!!!!
M GUSTA MUCHO :) !!
BESOS !
NOY M GUSTA CHARLIE!!!!!!!
M GUSTA MUCHO :) !!
BESOS !
LittleFlowersLove
Re: El Emo y el Deportista - Larry Stylinson |TERMINADA|
Síguela!,me enganché mucho con la historia.
fromfinner.
Página 4 de 30. • 1, 2, 3, 4, 5 ... 17 ... 30
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