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"Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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1, 2, 3
Re: "Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
por giuly123 Lun 02 Dic 2013, 10:06 am
Por que nunca mas la seguiste?
giuly123
Re: "Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
por lizbeht malik Jue 02 Ene 2014, 4:12 pm
siguela porfavor, nueva lectora
lizbeht malik
Re: "Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
por Monii*Directioner Lun 17 Feb 2014, 7:27 pm
Séptimo Capítulo:
6 de Julio del 2013, 10:12 am:
El sol brilloso y ardiente se colaba por la ventana de la habitación opaca, uno que otro rayo picoso se escabullía por la gruesa tela negra de cortina. Un cuerpo acostado en el suelo, a pies de la puerta blanca de madera. Delgado, un poco alto, solo vestía una larga camisa blanca y un simple bóxer negro. Su rostro estaba mojado, sus ojos muy hinchados y rojos debido a la irritación de tanto llorar, su cabello revuelto en un completo desastre y la habitación también con el mismo aspecto del caos. El pecho del individuo subía y bajaba en un ritmo muy profundo y tranquilo, no obstante, también tenía sus dificultades gracias al llanto de la noche anterior. Su posición era fetal e inofensiva, de una persona que no mataría ni a una mosca, o como un niño delicado e indefenso a cualquier ataque de un brabucón.
Dicha persona, era más y nada menos que Liam, quien dormía en el suelo con miedo de que su esposo entrara por la puerta del cuarto y lo golpeara nuevamente. La noche anterior, luego de la pelea por querer ir a ver su hermoso cachorro que había decido adoptar con su mejor amiga, no pudo conciliar su sueño, se la había pasado llorando y preguntándose el porqué de ese comportamiento tan agresivo y extraño de Zayn. Nunca del tiempo que llevaban de novios, había actuado de esa manera tan grotesca y terrible, lo desconocía por completo. Su preocupación era demasiada, pues por la conclusión que había sacado, aparentemente no conocía del todo bien a la persona con quien pensaba pasar el resto de su vida.
Toda clase de pareja tiene discusiones, bien sea tontas u otras muy graves y serias, pero las tienen, y Zayn y el no eran la excepción para nada. Sin embargo, ¿Por qué llegar tan lejos? A los golpes. ¿Por qué la violencia? Era una discusión que simplemente se podía resolver dialogando, no ameritaba a los golpes, pero ya había sucedido, había sido golpeado y también encerrado. Ahora, con algunos moretones, ojos hinchados y aspecto de haber tenido una mala noche, que si la tuvo, se despertó. Bostezó, se estiró en el mismo piso y con un poco de dificultad por la posición y la incomodidad, ya que sus músculos estaban entumidos y dormidos, se levantó del suelo.
Miró a todas partes buscando a Zayn desconcertado, deseaba que la discusión que había tenido con él, hubiera sido una mala pesadilla o un terrible sueño indeseado, pero al observarse los brazos, los cuales tenían marcados los dedos gruesos del moreno y uno que otro moretón en su cuerpo, cayó en cuenta de que no había sido un mal sueño sino, una gran y triste realidad. Había sucedido y no sabía qué hacer. Caminó en dirección hacia la puerta sigiloso, sin hacer mucho ruido, “seguramente Zayn estaba abajo, durmiendo en los muebles” Intuyó. Giró de la manilla, temiendo de que todavía estuviera cerrada, pero lo sorprendente había sido que no, en realidad estaba abierta. Abrió la puerta completamente para salir de la habitación, se deslizó con cuidado y detrás de él, cerró con mucha precaución y silencio otra vez.
El pasillo hacia el baño estaba silencioso y despejado, deseaba ir a vaciar su vejiga y sinceramente no apetecía encontrarse todavía con el moreno. Aún sentía miedo de que se fuera a repetir la escena tan horrorosa de la noche anterior, se sentía vulnerable, no estaba acostumbrado a los malos tratos, menos con Zayn, quien era el que le daba tanto cariño y amor. Atravesó el pasillo de puntillas, viendo de lado a lado cerciorándose de que el moreno no viniera y que tampoco se despertara. Llegó de zancadas al baño y se encerró nuevamente, puesto que desde abajo había escuchado un gran bostezo, se había asustado.
Se acercó al inodoro, alzó la tapa y se bajó un poco el bóxer para poder sacar su miembro y comenzar a orinar. Su corazón empezó a palpitar de los nervios de hace segundos, mientras el líquido caliente y amarillo se deslizaba de su órgano. Se preguntó de momentos, como había sido posible que Zayn lo dejara libre, o en qué momento le abrió la puerta sin darse cuenta, seguramente mientras dormía. En toda la noche él estuvo despierto y no había oído o escuchado la cerradura ni menos el picaporte. Al terminar sacudió cualquier rastro de orine, como él era muy pulcro, decidió pasarse un poco de papel por la punta para quitar el exceso. Lo botó y se volvió a subir el bóxer. Caminó al lavamanos, tomó su cepillo de dientes y lo llenó de crema para empezar a cepillarse, pero antes de eso, se observó al espejo grande y cuadrado. Su aspecto no le impresionó en lo absoluto, sus ojeras moradas estaban tan notorias y su aspecto tan pálido le hacía parecer un vampiro. Sus parpados hinchados y los ojos rojos gracias a las lágrimas y la mala noche que paso. Sus labios estaban de un color amarillo muy claro, casi tirando a blanco y estaban agrietados por la falta de hidratación. Su cabello corto castaño, estaba enredado y desordenado, también sucio por el piso y con mechones rebeldes que cubrían su frente. Sinceramente se veía terrible. Se frotó las manos un par de veces, sintiéndose inquieto e incómodo con su aspecto, puesto que el jamás se descuidaba con su persona, pero realmente necesitaría de un milagro para medio arreglarse. Se sentía feo, asqueroso y triste, además de roto. A la cuarta vez de frotarse, algo lastimó uno de sus dedos contrarios, para ser más específica, fue el dedo anular. Giró su vista a la cosa que lo lastimó y se encontró con un hermoso anillo de plata que tenía abajo un hermoso mensaje, muy corto pero significativo “Te amo por siempre, vida mía”
Una lágrima, solo una muy diminuta salió de sus orbes, haciendo el mismo recorrido por la mejilla hasta llegar a la barbilla. Amaba a Zayn con toda su vida misma, pero lo que le había hecho ayer le había dolido en lo más profundo de su ser, no podía creer que una persona tan dócil se hubiera puesto tan agresivo y violento de la noche a la mañana, era tan increíble y macabro. Se secó de mala gana la lágrima y procedió a cepillarse. Al terminar, lavó su cepillo quitándole el resto de crema dentífrica y se lavó la cara con jabón y agua. Vio si había un peine cerca para arreglarse los mechones rebeldes de su cabello medio rizado, pero no encontró nada. Lo único que hizo para poder más o menos arreglar su cabello fue, mojar sus dedos con agua y aplacarlos. Pero, también fue inútil, porque su cabello era tan rebelde.
Secó sus manos y rostro con un suave paño de la mejor marca, que estaba colocado allí en un sostenedor y se dirigió a la puerta. Antes de abrirla pegó su oído a ver si escuchaba algún ruido o indicios que le avisaran que el moreno estaba rondando por el pasillo, pero aparentemente no escuchó nada en lo absoluto. Decidido a regresar a su habitación abrió la puerta del baño, salió de esta, cerró la puerta detrás de él, caminó tres pasos y justamente a su espalda una respiración le erizo los vellos y un susurro lo termino de asustar.
-Buenos Días… Liam-. Su corazón se aceleró y lo primero que se le pasó por la cabeza fue… correr. Y eso hizo.- ¡Hey! ¡¿Adónde vas?!-. Le preguntó el moreno, corriendo detrás del castaño, quien iba camino a la habitación de nuevo, quería evitarlo a toda costa.
Liam llegó de primero al cuarto y cuando justamente pensaba cerrar la puerta, el moreno se lo impidió, interponiendo su pie entre la puerta y empujándola para entrar. El castaño seguía ejerciendo fuerza para cerrarla, sentía la necesidad de volver a llorar, sus ojos comenzaban a escocerle y sus mejillas a arderle. Comenzó ahora a empujar el poco cuerpo que se asomaba del moreno al otro lado, lastimándolo de una manera brutal.
-¡Cuidado que me lastimas, Liam!-. Gritó.
-¡¿Qué te lastimo?! ¡¿Y tú qué?! ¡¿Eh?! ¡Tú también me lastimaste, me golpeaste, me maltrataste animal! ¡Vete! ¡No te quiero ver!-. Gritó también, pero con la voz un poco quebrada. Zayn hizo caso o miso y volvió a empujar, haciéndose más daño.
-¡Por favor, Li! ¡Necesitamos hablar!
-¿Hablar? ¡¿Hablar de qué?! ¡¿De cómo me golpeaste y te comportaste como un idiota violento?! ¡Ja! ¡No gracias, ya me lo dejaste claro ayer! ¡Lárgate que no te quiero ver!
-Liam, por favor… Te lo pido por las buenas… No quiero entrar por las malas…
-¡Bah! ¡Cállate! ¡No quiero que entres, no lo deseo!
-Bien, será por las malas entonces…-. Sentenció Zayn con una mueca. Se separó lentamente de la puerta y Liam se alarmó, pero aprovechó y decidió cerrar ahora sí la puerta. Cuando colocó sus dos manos en la cerradura para trancar, una fuerza descomunal lo lanzó al otro lado, pegándolo de la pared y a la vez aprisionándolo. Cerró sus ojos de golpe para no ver quien lo sostenía.
-No me toques…
-Tengo derecho, soy tu esposo.
-Mi esposo… No mi Amo.
-¿Quién dice que no?
-Vete a la mierda… Me das miedo.
-No me temas, soy el mismo de siempre… Solo que ayer me comporte así porque no me hiciste caso y me desobedeciste. Acata mis órdenes y no pasara nada.
-¿Qué?
-¿Lo harás?
-…¿Quién eres? Y… ¿Qué has hecho con mí, Zayn?
-Soy yo, Liam.
-No… Tú eres el diablo.
6 de Julio del 2013, 10:12 am:
El sol brilloso y ardiente se colaba por la ventana de la habitación opaca, uno que otro rayo picoso se escabullía por la gruesa tela negra de cortina. Un cuerpo acostado en el suelo, a pies de la puerta blanca de madera. Delgado, un poco alto, solo vestía una larga camisa blanca y un simple bóxer negro. Su rostro estaba mojado, sus ojos muy hinchados y rojos debido a la irritación de tanto llorar, su cabello revuelto en un completo desastre y la habitación también con el mismo aspecto del caos. El pecho del individuo subía y bajaba en un ritmo muy profundo y tranquilo, no obstante, también tenía sus dificultades gracias al llanto de la noche anterior. Su posición era fetal e inofensiva, de una persona que no mataría ni a una mosca, o como un niño delicado e indefenso a cualquier ataque de un brabucón.
Dicha persona, era más y nada menos que Liam, quien dormía en el suelo con miedo de que su esposo entrara por la puerta del cuarto y lo golpeara nuevamente. La noche anterior, luego de la pelea por querer ir a ver su hermoso cachorro que había decido adoptar con su mejor amiga, no pudo conciliar su sueño, se la había pasado llorando y preguntándose el porqué de ese comportamiento tan agresivo y extraño de Zayn. Nunca del tiempo que llevaban de novios, había actuado de esa manera tan grotesca y terrible, lo desconocía por completo. Su preocupación era demasiada, pues por la conclusión que había sacado, aparentemente no conocía del todo bien a la persona con quien pensaba pasar el resto de su vida.
Toda clase de pareja tiene discusiones, bien sea tontas u otras muy graves y serias, pero las tienen, y Zayn y el no eran la excepción para nada. Sin embargo, ¿Por qué llegar tan lejos? A los golpes. ¿Por qué la violencia? Era una discusión que simplemente se podía resolver dialogando, no ameritaba a los golpes, pero ya había sucedido, había sido golpeado y también encerrado. Ahora, con algunos moretones, ojos hinchados y aspecto de haber tenido una mala noche, que si la tuvo, se despertó. Bostezó, se estiró en el mismo piso y con un poco de dificultad por la posición y la incomodidad, ya que sus músculos estaban entumidos y dormidos, se levantó del suelo.
Miró a todas partes buscando a Zayn desconcertado, deseaba que la discusión que había tenido con él, hubiera sido una mala pesadilla o un terrible sueño indeseado, pero al observarse los brazos, los cuales tenían marcados los dedos gruesos del moreno y uno que otro moretón en su cuerpo, cayó en cuenta de que no había sido un mal sueño sino, una gran y triste realidad. Había sucedido y no sabía qué hacer. Caminó en dirección hacia la puerta sigiloso, sin hacer mucho ruido, “seguramente Zayn estaba abajo, durmiendo en los muebles” Intuyó. Giró de la manilla, temiendo de que todavía estuviera cerrada, pero lo sorprendente había sido que no, en realidad estaba abierta. Abrió la puerta completamente para salir de la habitación, se deslizó con cuidado y detrás de él, cerró con mucha precaución y silencio otra vez.
El pasillo hacia el baño estaba silencioso y despejado, deseaba ir a vaciar su vejiga y sinceramente no apetecía encontrarse todavía con el moreno. Aún sentía miedo de que se fuera a repetir la escena tan horrorosa de la noche anterior, se sentía vulnerable, no estaba acostumbrado a los malos tratos, menos con Zayn, quien era el que le daba tanto cariño y amor. Atravesó el pasillo de puntillas, viendo de lado a lado cerciorándose de que el moreno no viniera y que tampoco se despertara. Llegó de zancadas al baño y se encerró nuevamente, puesto que desde abajo había escuchado un gran bostezo, se había asustado.
Se acercó al inodoro, alzó la tapa y se bajó un poco el bóxer para poder sacar su miembro y comenzar a orinar. Su corazón empezó a palpitar de los nervios de hace segundos, mientras el líquido caliente y amarillo se deslizaba de su órgano. Se preguntó de momentos, como había sido posible que Zayn lo dejara libre, o en qué momento le abrió la puerta sin darse cuenta, seguramente mientras dormía. En toda la noche él estuvo despierto y no había oído o escuchado la cerradura ni menos el picaporte. Al terminar sacudió cualquier rastro de orine, como él era muy pulcro, decidió pasarse un poco de papel por la punta para quitar el exceso. Lo botó y se volvió a subir el bóxer. Caminó al lavamanos, tomó su cepillo de dientes y lo llenó de crema para empezar a cepillarse, pero antes de eso, se observó al espejo grande y cuadrado. Su aspecto no le impresionó en lo absoluto, sus ojeras moradas estaban tan notorias y su aspecto tan pálido le hacía parecer un vampiro. Sus parpados hinchados y los ojos rojos gracias a las lágrimas y la mala noche que paso. Sus labios estaban de un color amarillo muy claro, casi tirando a blanco y estaban agrietados por la falta de hidratación. Su cabello corto castaño, estaba enredado y desordenado, también sucio por el piso y con mechones rebeldes que cubrían su frente. Sinceramente se veía terrible. Se frotó las manos un par de veces, sintiéndose inquieto e incómodo con su aspecto, puesto que el jamás se descuidaba con su persona, pero realmente necesitaría de un milagro para medio arreglarse. Se sentía feo, asqueroso y triste, además de roto. A la cuarta vez de frotarse, algo lastimó uno de sus dedos contrarios, para ser más específica, fue el dedo anular. Giró su vista a la cosa que lo lastimó y se encontró con un hermoso anillo de plata que tenía abajo un hermoso mensaje, muy corto pero significativo “Te amo por siempre, vida mía”
Una lágrima, solo una muy diminuta salió de sus orbes, haciendo el mismo recorrido por la mejilla hasta llegar a la barbilla. Amaba a Zayn con toda su vida misma, pero lo que le había hecho ayer le había dolido en lo más profundo de su ser, no podía creer que una persona tan dócil se hubiera puesto tan agresivo y violento de la noche a la mañana, era tan increíble y macabro. Se secó de mala gana la lágrima y procedió a cepillarse. Al terminar, lavó su cepillo quitándole el resto de crema dentífrica y se lavó la cara con jabón y agua. Vio si había un peine cerca para arreglarse los mechones rebeldes de su cabello medio rizado, pero no encontró nada. Lo único que hizo para poder más o menos arreglar su cabello fue, mojar sus dedos con agua y aplacarlos. Pero, también fue inútil, porque su cabello era tan rebelde.
Secó sus manos y rostro con un suave paño de la mejor marca, que estaba colocado allí en un sostenedor y se dirigió a la puerta. Antes de abrirla pegó su oído a ver si escuchaba algún ruido o indicios que le avisaran que el moreno estaba rondando por el pasillo, pero aparentemente no escuchó nada en lo absoluto. Decidido a regresar a su habitación abrió la puerta del baño, salió de esta, cerró la puerta detrás de él, caminó tres pasos y justamente a su espalda una respiración le erizo los vellos y un susurro lo termino de asustar.
-Buenos Días… Liam-. Su corazón se aceleró y lo primero que se le pasó por la cabeza fue… correr. Y eso hizo.- ¡Hey! ¡¿Adónde vas?!-. Le preguntó el moreno, corriendo detrás del castaño, quien iba camino a la habitación de nuevo, quería evitarlo a toda costa.
Liam llegó de primero al cuarto y cuando justamente pensaba cerrar la puerta, el moreno se lo impidió, interponiendo su pie entre la puerta y empujándola para entrar. El castaño seguía ejerciendo fuerza para cerrarla, sentía la necesidad de volver a llorar, sus ojos comenzaban a escocerle y sus mejillas a arderle. Comenzó ahora a empujar el poco cuerpo que se asomaba del moreno al otro lado, lastimándolo de una manera brutal.
-¡Cuidado que me lastimas, Liam!-. Gritó.
-¡¿Qué te lastimo?! ¡¿Y tú qué?! ¡¿Eh?! ¡Tú también me lastimaste, me golpeaste, me maltrataste animal! ¡Vete! ¡No te quiero ver!-. Gritó también, pero con la voz un poco quebrada. Zayn hizo caso o miso y volvió a empujar, haciéndose más daño.
-¡Por favor, Li! ¡Necesitamos hablar!
-¿Hablar? ¡¿Hablar de qué?! ¡¿De cómo me golpeaste y te comportaste como un idiota violento?! ¡Ja! ¡No gracias, ya me lo dejaste claro ayer! ¡Lárgate que no te quiero ver!
-Liam, por favor… Te lo pido por las buenas… No quiero entrar por las malas…
-¡Bah! ¡Cállate! ¡No quiero que entres, no lo deseo!
-Bien, será por las malas entonces…-. Sentenció Zayn con una mueca. Se separó lentamente de la puerta y Liam se alarmó, pero aprovechó y decidió cerrar ahora sí la puerta. Cuando colocó sus dos manos en la cerradura para trancar, una fuerza descomunal lo lanzó al otro lado, pegándolo de la pared y a la vez aprisionándolo. Cerró sus ojos de golpe para no ver quien lo sostenía.
-No me toques…
-Tengo derecho, soy tu esposo.
-Mi esposo… No mi Amo.
-¿Quién dice que no?
-Vete a la mierda… Me das miedo.
-No me temas, soy el mismo de siempre… Solo que ayer me comporte así porque no me hiciste caso y me desobedeciste. Acata mis órdenes y no pasara nada.
-¿Qué?
-¿Lo harás?
-…¿Quién eres? Y… ¿Qué has hecho con mí, Zayn?
-Soy yo, Liam.
-No… Tú eres el diablo.
Monii*Directioner
Re: "Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
por Rocio1D Sáb 15 Mar 2014, 8:16 pm
Dios por que tiene que comportarse como idiota Zayn?
me da pena Liam :c
Odio a Zayn (en la vida real te amo xD) ojala recapacite
la seguiras??
pd:nueva lectora
me da pena Liam :c
Odio a Zayn (en la vida real te amo xD) ojala recapacite
la seguiras??
pd:nueva lectora
Rocio1D
Re: "Las Apariencias Engañan"- Mini Novela- Ziam
por giuly123 Dom 16 Mar 2014, 3:52 pm
OMG¡¡ PENSE QUE NUNCA MAS LA IBAS A SEGUIR¡¡ ME ENCANTA¡¡ *o* :imdead:
Pobre mi Li, termino maltratado por el amor de su vida :(
Zayn realmente en la nove parece el diablo :wut:
SEGUILA¡¡ ACA TU FIEL LECTORA :ilusion:
Pobre mi Li, termino maltratado por el amor de su vida :(
Zayn realmente en la nove parece el diablo :wut:
SEGUILA¡¡ ACA TU FIEL LECTORA :ilusion:
giuly123
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