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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
- Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 2 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
opordeos pensè que la iba a besar a rayita D: mucho coqueteo niall 7u7
siguela pronto :D
siguela pronto :D
CualquiercosaC:
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
¡Hellooo chicas! ¿Cómo están el día de hoy<3? Espero que estén de maravilla n_n. jahsjsh, son un amor, muchas gracias por leer la novela, love u all. Dentro de unos minutos subo sel siguiente capitulo :D!
-------------.
Jajahsj aw el pequeño secreto de Niall jojo, lo descubrirás más adelante (?). Claaro, si quieres me dices Nia o como gustes n_n! Que bueno que te ha gustado el cap, muchisimas gracias Aly! <3.
-----------------.
¡Graaacias Liz! JAHSJSH ah, I know, yo también amo su actitud uh, es perfecto ese hombre<3. No te preocupes Liz! Lo bueno es que la encontraste otra vez jojo. Gracias cosi, eres un amor n_n!
------------------.
Hello a ti! jahsjsh, pues bienvenida a la novela :D! Gracias<3.
---------------.
Jajaja momento te tensión entre Niall&ella jajsh, gracias<3.
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Jajahsj aw el pequeño secreto de Niall jojo, lo descubrirás más adelante (?). Claaro, si quieres me dices Nia o como gustes n_n! Que bueno que te ha gustado el cap, muchisimas gracias Aly! <3.
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¡Graaacias Liz! JAHSJSH ah, I know, yo también amo su actitud uh, es perfecto ese hombre<3. No te preocupes Liz! Lo bueno es que la encontraste otra vez jojo. Gracias cosi, eres un amor n_n!
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Hello a ti! jahsjsh, pues bienvenida a la novela :D! Gracias<3.
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Jajaja momento te tensión entre Niall&ella jajsh, gracias<3.
Letswalkinthesun
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
Capitulo 5.
- ¿Estás bien? -Pregunta, dando un paso hacia adelante. Yo asiento con la cabeza al tiempo que me levanto del suelo.
- Al punto de un colapso, pero bien. ¿Y tú?
- Bien, vine a decirte que nos vamos en diez minutos... -Esta a punto de salir de mi habitación cuando se gira repentinamente otra vez y me señala de pies a cabeza- No vayas con eso puesto, por favor.
- ¿Qué...? -Niego con la cabeza, suspirando antes de volver la vista al espejo- Me veo horrenda, lo sé. Pero Simon dijo que intentara vestirme mejor.
- ¿Y? Ponte lo que quieras, igual te dejará ir. -Niall se encoje de hombros, curvando una muy pequeña sonrisa- Por cierto, "Horrenda" no es la palabra que usaría.
En el segundo en que Niall abandona mi cuarto me empiezo a desvestir. Abro mi closet y rebusco rápidamente algo que ponerme con lo que sí me sienta cómoda. Me pongo un jean oscuro ajustado, consigo una camisa suelta de color rosa pálido y decido dejarme los tacones, solamente para no hacer enfadar tanto a Simon. Recojo mi cabello en una coleta alta y opto por no ponerme maquillaje. Son apenas las dos y media de la tarde cuando meto todas mis pertenencias en una cartera, me doy un último vistazo al espejo, constatando de que estoy lo suficientemente decente y salgo del cuarto. Cierro la puerta detrás de mi, bajo las escaleras con cuidado para no caerme con los zapatos que llevo puestos. Cuando aparezco en la sala, me encuentro con Simon y Niall, ambos esperando tranquilamente. Saludo a mi tio con un gesto de la mano que responde de la misma forma; al menos el día de hoy me saluda, debe estar de buen humor. Por otro lado, puedo sentir la mirada de Niall evaluando hasta el más pequeño centímetro de mi cuerpo, la incomodidad se apodera de mi al instante. ¿Por qué no quita sus ojos de mi, por qué? Me acerco a ambos intentando no prestarle atención a la presión de los ojos azul cielo del rubio, ojeando mi reloj de muñeca, faltan dos minutos para salir.
- ¿Están listos? -Pregunta Simon, buscando las llaves de su auto en el bolsillo del pantalón- ¿Niall?
- Sí. Hagamos ésto. -Responde, dando un pequeño aplauso, por fin retirando su mirada de mi.
- Vale, entonces hay que irnos. -Se detiene antes de abrir la puerta principal y me evalúa con la mirada- Al fin te vistes como la gente.
Ignoro el comentario con una sonrisa hipócrita antes de salir de la casa, dos pasos más atrás de Simon. ¿Por qué está constantemente intentando de hundirme? Pensé que para esta altura ya habríamos superado los malos tratos, pero él sigue empeñado en dejarme saber que le arruiné el verano, y que no merezco quedarme en su casa. Niall hace una mueca, dándome un juguetón empujón en el hombro, restando importancia al asunto. Nos subimos a la camioneta negra de Simon esta vez; ellos dos adelante y yo atrás. A medida que salimos del recinto de la casa, dejando atrás un par de paparazzis que al parecer no planean abandonar la casa nunca, me pierdo tontamente en mis pensamientos. No he tenido tiempo de contarle nada de lo que está pasando a Katty; no aún, y se que en el segundo en que le diga que conocí a One Direction, que mi tío trabaja con ellos, y que estoy actualmente viviendo con Niall Horan a una puerta de distancia de mi, le dará un ataque cardíaco. En realidad, tengo ganas de llamarla, Katty es literalmente la mejor amiga que tengo, la única que me ha apoyado en todo, y la única que en realidad sabe lo mucho que necesito una voz alentadora de vez en cuando. Hago una nota mental, recordándome a mi misma que debo llamarla tan pronto como tenga un minuto libre. Mientras tanto, avanzamos por las estrechas calles de Londres, tomando las vías mas cercanas para llegar al centro de la ciudad. Agradezco que se me ocurrió meter la cámara en mi bolso y la saco para tomar un par de fotografías ahora que estamos atrapados en el tráfico. Le tomo fotos a un pequeño pub que pasamos lentamente, a un letrero gigante y a un par de personas con muchos tatuajes que pasan caminando lo suficientemente cerca para poder hacer la fotografía Estoy a punto de guardar la cámara cuando hago una foto más, le quito el flash para que Simon y Niall no se den cuenta y la tomo. Los dos salen completamente distraídos, el primero concentrado en el camino, y el segundo viendo al horizonte, como sí su mente estuviera en otra parte. Guardo la cámara con una pequeña sonrisa y me recuesto en el asiento, observando por la ventanilla. No hago más en el resto del camino que murmurar en tono muy bajito una que otra canción que se me viene a la mente y mirar todo maravillada, Londres realmente es hermoso. Cuando por fin llegamos al edificio empresarial de Tele4, me tengo que echar automáticamente hacia atrás, alejándome de la ventanilla lo más que puedo cuando los flashes de las cámaras y los paparazzis se abalanzan sobre el coche. Me obligo a mi misma a no gritar, aún cuando esos hombres me tomaron completamente por sorpresa cuando veo que tanto Simon como Niall los ignoran, como si fueran completamente normal. "Para ellos es normal, son famosos" me digo a mi misma, preguntándome como hacen para lidiar con todo eso. Simon se detiene frente al estacionamiento subterráneo del edificio y espera al que vigilante del mismo confirme su pase de entrada, aparte a los paparazzis y abra la entrada para poner el auto en movimiento nuevamente. Abro la puerta en el segundo en que se estaciona, estirando mis piernas antes de caer de pie sobre el suelo.
- ¿Siempre es así? -Pregunto, teniendo que correr ligeramente para ponerme a la par justo antes de subirnos al elevador. Simon utiliza nuevamente su pase para marcar el piso veintiséis.
- ¿Cómo? -Pregunta Niall, mirándome. Yo ladeo la cabeza.
- Así, los paparazzis todo el tiempo avalanzandose sobre los autos...
- Es pero. -Responde Simon, callándonos a los dos antes de dirigirse estrictamente a Niall- ¿Estás preparado? Sé que te dí poco tiempo para prepararte, pero necesito saber que estás bien antes de entrar a esa entrevista.
- Estoy bien, Simon. -Le asegura el rubio, sonriendo honestamente por primera vez- ¿Estás preocupado?
- ¿Me puedes culpar por estarlo? La entrevistadora es Kiley Longwave, sabes como puede ser, pero prometió no presionarlos tanto esta vez. -Dice él, estirando la mano para palmear la espalda de Niall- Estarás bien.
- Eso espero.
- Lo estarás, sabes que todos aquí sabemos lo que pasó y te apoyamos. Solo no lo empeores y pronto todos se olvidarán de ésto.
El ascensor se abre ante nuestras narices y no me da tiempo de decir nada, pero lo que acabo de ver me enternece el corazón. No importa lo mucho que Niall diga que Simon lo odia, o que One Direction esté convencido de que él siempre está de mal humor, por un resbaladizo momento, por una fracción de segundo, vi lo mucho que en realidad se preocupa Simon por él. Lo mucho que se preocupa por todos ellos. Quizás es verdad que no lo muestra muy seguido, y que la mayor parte del tiempo vive con una mueca de mal humor en su rostro, pero hasta yo puedo notar que en el fondo los quiere, y siente la necesidad de protegerlos. Mi pregunta es: ¿De qué? ¿De qué intenta proteger a Niall, por qué? Es claro que algo sucedió o ya estaba sucediendo antes de que yo llegara, y que he caído en el medio de la tormenta sin saber de que se trata. No le puedo preguntar a ninguno de los dos, con uno no tengo la confianza suficiente y el otro me mandara al diablo si le pregunto, así que estoy en la oscuridad cuando entramos a un set de grabación. Es una habitación grande, abierta y sin paredes en el medio, con paredes completamente blancas, un ventanal gigante con vista a la ciudad, un sofá de cuero marrón situado en el medio de todas las cámaras e iluminación, justo al lado de una silla naranja alta y acolchada, que me imagino es el puesto de la entrevistadora. A un extremo del set hay una mesa preparada con bocadillos, refrigerios y todo tipo de bebidas sin alcohol, al otro extremo hay varias sillas plegables y espejos con luces de marquesina. Simon se dirige directamente a hablar con otros dos hombres de traje, que lo reciben con una sonrisa y un abrazo; no tengo idea de quienes son. Yo sigo a Niall, el cual se acerca hasta donde está el resto de los chicos ya listos para la entrevista.
- Viniste. -Lo saluda Zayn, levantándose de su silla para abrazarlo- ¿Como estás?
- Bien, sorprendentemente. -Niall sonríe saludando al resto- Perdón por mi ataque de rabia ayer, esto de la entrevista me tenia mal y...
- No tienes que explicarte. -Dijo Liam, encogiéndose de hombros, restando importancia- Todos hemos tenido esos momentos.
- Lo importante es que viniste. -Intervino Louis con una pequeña sonrisa- ¿Quien te convenció?
- Ella. -Dice Niall, señalándome con un gesto de cabeza- Tenían que escucharla...
- ¡Cállate! -Murmuro, negando con la cabeza- Lo hice porque ellos me lo pidieron, ¿Cierto?
- Es verdad. -Dijo Harry, divertido- Le pedimos que te vigilara, para que no hicieras nada loco. Gracias, _______.
- Al parecer la chica sabe como convencerte. -Comenta Zayn en tono divertido justo antes de que Louis suelte una carcajada y Liam le pegue disimuladamente en el hombro.
- No le creas, _______., es solo... -Comienza a decir, pero yo niego con la cabeza, sonriendo.
- No pasa nada. -Le aseguro, devolviendole la sonrisa.
Antes de que alguno pueda agregar algo más a la conversación un pequeño letrero se enciende y anuncian que todos deben tomar su posición. Los cinco se despiden de mi, levantándose de sus asientos para pasarse al gran sofá de cuero. De pronto, toda la habitación cobra vida. Los maquilladores se acercan a los cinco, retocándolos mientras otras personas les ofrecen agua o algo de beber a ultimo momento, mientras otros más se encargan de asegurarse de que las cámaras y las luces estén en posición. De último entra Kiley, la entrevistadora, una mujer que debe de tener al menos treinta años, pero luce muchísimo mejor que yo. Lleva un bonito vestido negro ajustado y tacones rojo intenso. Los asistentes también retocan su cabello y maquillaje antes de que la mujer pueda saludar cordialmente a los chicos. Veo que Simon me hace señas desde el otro lado de la habitación para que me siente y lo hago, sentándome donde apenas minutos antes se encontraba Louis. Me pongo cómoda y veo como le dan los últimos toques a todo el sitio para empezar la entrevista. El hombre de la cámara principal da la señal y comienza, todo el cuarto se sume en silencio por unos segundos hasta que Kiley Longwave habla, utilizando el típico tono energético y carismático de todo entrevistador. Acomodo mi cuerpo sobre la silla, lista para ver por primera vez una entrevista en vivo y directo.
- Buenas tardes televidentes de Tele4. Hoy estamos aquí con la mayor y más famosa boyband de ésta generación. Los cinco chicos que perdieron en The X Factor pero ganaron el mundo. ¡One Direction! -La mujer sonríe, viéndolos a todos- ¿Cómo están chicos?
- Muy bien, gracias Kiley. -Responde Liam sonriendo cordialmente.
- ¿Las fans los dejaron entrar tranquilamente el día de hoy? ¿O fueron un problema?-Pregunta Kiley. Louis sonríe y niega con la cabeza.
- Nunca son un problema, son ruidosas y adorables, como siempre.
- Escuché que tienen pensado comenzar el tour por UK más temprano este año, ¿Es eso cierto?
- Si, decidimos adelantar la fecha de inicio para poder dar más conciertos antes de que acabe este año. -Responde Harry con ese tono de voz lento y carrasposo- Queremos dar tantos conciertos como sea posible.
- ¿Y luego? ¿Tienen pensado extender el tour por América?
- Quizás el próximo año, después de las vacaciones de invierno. -Dice Zayn, interviniendo en la entrevista.
- Además, he escuchado rumores de que planean irse de vacaciones todos juntos, ¿Qué me dicen de eso?
- No es seguro, Kiley. -Comenta Louis- Todos queremos pasar tiempo con nuestras familias también, pues casi nunca los vemos, quizás nos vayamos unos días todos juntos a algún lado, pero no todas las vacaciones.
- Claro, debe ser difícil, ¿No es cierto? Extrañar a su familia, no tener tiempo para ustedes.
- Lo es. -La voz de Niall interviene por primera vez. Sé que intenta sonar normal, despreocupado como el resto, pero la forma en que dice eso que deja prever que algo lo molesta. Kiley ignora el tono extraño en su voz, continuando con la entrevista.
- Bien, hablemos de unos cuantos rumores y noticias que se han llevado la atención de las fans. Primero, Harry ¿Es cierto que planeas removerte el tatuaje de mariposa?
- ¿Qué? No, no. -El castaño sonríe negando con la cabeza- Es uno de mis favoritos, no tengo planeado removerlo, solo no me haré más por los momentos.
- Él ama ese tatuaje. -Bromea Louis y todos en la habitación ríen incluso yo, cuando Harry le hace una mueca.
- Ahora, Niall, todas las fans han estado extremadamente preocupadas por tí últimamente y todas se preguntan lo mismo ¿Estás bien? ¿O toda esta locura te está cansando?
- Nuestras fans siempre se preocupan, es la razón por la que las amamos tanto. -Responde Niall antes de negar levemente con la cabeza- Nunca me cansaré de esta locura, por esto vivo.
- Pero, ¿Estás bien? Pues creo que todos estamos de acuerdo que te has estado comportando extraño. -Preciona Kiley con una sonrisa a punto de reventar.
- No creo que me he estado comportando extraño, Kiley, es solo... -Pero la mujer lo interrumpe.
- ¿No? Veamos este vídeo por favor. Fue enviado por una cadena americana y creo que es la razón por la que todo el mundo se preocupa tanto por tí y tu estabilidad mental.
De inmediato los ojos de todos se dirigen a una pequeña pantalla justo detrás de una de las cámaras. Un vídeo de Niall entrando y saliendo repetidas veces el mismo día de un edificio realmente feo y devastado por el paso del tiempo empieza a reproducirse, seguido de fotos de él en múltiples clubs, acompañado siempre por una chica diferente, las fotos no parecen tener nada de malo según yo, pero la forma en que las ponen en ese vídeo las hacen parecer sobre expuestas, seguido de pequeños vídeos de como Niall parece completamente desconectado en diferentes entrevistas empieza a verse. Yo quito mi mirada de la pantalla para verlo a él. Niall está totalmente en shock, tiene las manos apoyadas en sus rodillas, apretando con fuerza una de ellas en un puño, su rostro está completamente rojo y sus ojos cristalinos. No soy la única que se da cuenta, pues noto como Zayn y Liam lo ven, como sí intentaran darle apoyo moral desde donde estaban. Duele verlo así, acatado por los medios, pues es notorio que están transversando esas imágenes para hacerlo lucir mal, que lo están manipulando. Solo quiero levantarme de mi asiento y abrazarlo, sacarlo de allí para que pare la humillación cuando me fijo en la mirada de estupefacción en el rostro de Simon, cuando noto que de repente todos en la habitación menos Niall y Kiley tienen la vista fija en mi. No entiendo porqué demonios todos repentinamente me están viendo a mi hasta que me fijo en la pantalla. El vídeo se ha dejado de reproducir y ahora una sola foto con algo escrito debajo ocupa toda la pantalla. Mi corazón parece congelarse en mi pecho cuando noto que es una foto mía; una foto mía tropezando de lleno con Niall con las letras "¿La próxima chica de Horan?". Mis ojos se abren como platos cuando conecto los puntos. Esa foto fue tomada el día anterior, cuando el paparazzi dentro de la casa de Simon me cogió por sorpresa, cuando entré corriendo y tropecé con Niall, tan solo segundos antes de que este tapara todas las ventanas de la casa. Fue un error, y ahora lo estaban haciendo quedar a él como un total mujeriego y a mi como su desesperada amante, cuando todo lo que en realidad pasó fue me asusté por el paparazzi y tropecé con él en mi huida.
La pantalla se apaga y Kiley vuelve a hablar; mis ojos buscan desesperadamente a los de Niall, de alguna forma siento que es mi culpa, que le he cargado con otro problema. Intento hacer que se fije en mi para poder decirle lo siento, pero él sencillamente despega su mirada de la pantalla y, con gran esfuerzo, intenta aparentar que todo lo que acaba de pasar no le afecta.
"You came and broke the perfect girl"
Ladeo la cabeza, intentando verme desde un angulo diferente, pero obtengo el mismo resultado: Alguien que no soy yo. La falda me queda demasiado ajustada, la camisa se siente extraña y los tacones... Dios, los tacones. No soy del tipo de chica que ama estar en unos tacones de diez centímetros si, los uso, claro, sino no los hubiera comprado unas semanas atrás, pero no me gusta usarlos a diario, me siento extraña. Así que mientras me miro a mi misma en el espejo, tuerzo una mueca. Me veo exactamente como una madre de cuatro hijos a punto de salir de la oficina a buscarlos. Sencillamente no está bien. Suelto un grito de frustración, dejándome caer por el borde de la cama hasta aterrizar sentada en la alfombra del cuarto. Nunca en toda mi vida he ido a una entrevista, nunca, ni siquiera una entrevista para el periódico escolar de mi viejo instituto. No le había dado mucha importancia a como me iba a vestir para acompañarlos a la entrevista de esta mañana hasta que Simon, como siempre, puso una presión sobre mis hombros. Ya había sido bastante malo tener que aguantar su mirada de "Eres una inaguantable" cuando Niall le dijo explicitamente que no iría a esa entrevista al menos que yo fuera con ellos. Honestamente, no me importa quedarme en la casa, o incluso salir a otro sitio mientras ellos están encargándose de la entrevista, pero Niall estaba completamente serio cuando le dijo a Simon que si no iba yo, él tampoco. Quería que me tragara la tierra y me devolviera a mi casa cuando Simon me miró la noche pasada, murmurando un pesado y chocante "Si eso es lo que quieres, bien." Sé perfectamente que no está de acuerdo conmigo, que no me quiere interfiriendo otra vez en su trabajo, después de todo, esa entrevista es parte de su trabajo con One Direction. Ya me esperaba las miradas pesadas y los comentarios sarcásticos de mi tío con respecto al tema, pero cuando me dijo con el rostro completamente serio que no me quería vestida como "Una adolescente desubicada" me dejó en blanco. ¿A que se refiere con eso? ¿Qué no le gusta como me visto? Sé que no tengo el mejor gusto en todo el universo, o mejor dicho, el dinero para probar que tengo buen gusto, pero me siento cómoda con lo que uso, me siento cómoda con jeans semi ajustados, camisas sueltas, shorts sencillos y zapatillas, ¿Por qué tiene que criticarme la forma en que me visto justo antes de ir a una entrevista? Estoy convencida de que quiere acabar con la poca cordura mental que me queda, pero no puedo acusarlo de eso en su cara. De repente, la puerta de mi habitación se abre. Levanto la mirada para encontrarme con Niall, va vestido con pantalones algo sueltos, una camisa blanca sencilla y un suéter azul oscuro. Se queda parado junto a la puerta, viéndome sin saber bien porqué estoy en el suelo. Alza una ceja en forma de interrogación.- ¿Estás bien? -Pregunta, dando un paso hacia adelante. Yo asiento con la cabeza al tiempo que me levanto del suelo.
- Al punto de un colapso, pero bien. ¿Y tú?
- Bien, vine a decirte que nos vamos en diez minutos... -Esta a punto de salir de mi habitación cuando se gira repentinamente otra vez y me señala de pies a cabeza- No vayas con eso puesto, por favor.
- ¿Qué...? -Niego con la cabeza, suspirando antes de volver la vista al espejo- Me veo horrenda, lo sé. Pero Simon dijo que intentara vestirme mejor.
- ¿Y? Ponte lo que quieras, igual te dejará ir. -Niall se encoje de hombros, curvando una muy pequeña sonrisa- Por cierto, "Horrenda" no es la palabra que usaría.
En el segundo en que Niall abandona mi cuarto me empiezo a desvestir. Abro mi closet y rebusco rápidamente algo que ponerme con lo que sí me sienta cómoda. Me pongo un jean oscuro ajustado, consigo una camisa suelta de color rosa pálido y decido dejarme los tacones, solamente para no hacer enfadar tanto a Simon. Recojo mi cabello en una coleta alta y opto por no ponerme maquillaje. Son apenas las dos y media de la tarde cuando meto todas mis pertenencias en una cartera, me doy un último vistazo al espejo, constatando de que estoy lo suficientemente decente y salgo del cuarto. Cierro la puerta detrás de mi, bajo las escaleras con cuidado para no caerme con los zapatos que llevo puestos. Cuando aparezco en la sala, me encuentro con Simon y Niall, ambos esperando tranquilamente. Saludo a mi tio con un gesto de la mano que responde de la misma forma; al menos el día de hoy me saluda, debe estar de buen humor. Por otro lado, puedo sentir la mirada de Niall evaluando hasta el más pequeño centímetro de mi cuerpo, la incomodidad se apodera de mi al instante. ¿Por qué no quita sus ojos de mi, por qué? Me acerco a ambos intentando no prestarle atención a la presión de los ojos azul cielo del rubio, ojeando mi reloj de muñeca, faltan dos minutos para salir.
- ¿Están listos? -Pregunta Simon, buscando las llaves de su auto en el bolsillo del pantalón- ¿Niall?
- Sí. Hagamos ésto. -Responde, dando un pequeño aplauso, por fin retirando su mirada de mi.
- Vale, entonces hay que irnos. -Se detiene antes de abrir la puerta principal y me evalúa con la mirada- Al fin te vistes como la gente.
Ignoro el comentario con una sonrisa hipócrita antes de salir de la casa, dos pasos más atrás de Simon. ¿Por qué está constantemente intentando de hundirme? Pensé que para esta altura ya habríamos superado los malos tratos, pero él sigue empeñado en dejarme saber que le arruiné el verano, y que no merezco quedarme en su casa. Niall hace una mueca, dándome un juguetón empujón en el hombro, restando importancia al asunto. Nos subimos a la camioneta negra de Simon esta vez; ellos dos adelante y yo atrás. A medida que salimos del recinto de la casa, dejando atrás un par de paparazzis que al parecer no planean abandonar la casa nunca, me pierdo tontamente en mis pensamientos. No he tenido tiempo de contarle nada de lo que está pasando a Katty; no aún, y se que en el segundo en que le diga que conocí a One Direction, que mi tío trabaja con ellos, y que estoy actualmente viviendo con Niall Horan a una puerta de distancia de mi, le dará un ataque cardíaco. En realidad, tengo ganas de llamarla, Katty es literalmente la mejor amiga que tengo, la única que me ha apoyado en todo, y la única que en realidad sabe lo mucho que necesito una voz alentadora de vez en cuando. Hago una nota mental, recordándome a mi misma que debo llamarla tan pronto como tenga un minuto libre. Mientras tanto, avanzamos por las estrechas calles de Londres, tomando las vías mas cercanas para llegar al centro de la ciudad. Agradezco que se me ocurrió meter la cámara en mi bolso y la saco para tomar un par de fotografías ahora que estamos atrapados en el tráfico. Le tomo fotos a un pequeño pub que pasamos lentamente, a un letrero gigante y a un par de personas con muchos tatuajes que pasan caminando lo suficientemente cerca para poder hacer la fotografía Estoy a punto de guardar la cámara cuando hago una foto más, le quito el flash para que Simon y Niall no se den cuenta y la tomo. Los dos salen completamente distraídos, el primero concentrado en el camino, y el segundo viendo al horizonte, como sí su mente estuviera en otra parte. Guardo la cámara con una pequeña sonrisa y me recuesto en el asiento, observando por la ventanilla. No hago más en el resto del camino que murmurar en tono muy bajito una que otra canción que se me viene a la mente y mirar todo maravillada, Londres realmente es hermoso. Cuando por fin llegamos al edificio empresarial de Tele4, me tengo que echar automáticamente hacia atrás, alejándome de la ventanilla lo más que puedo cuando los flashes de las cámaras y los paparazzis se abalanzan sobre el coche. Me obligo a mi misma a no gritar, aún cuando esos hombres me tomaron completamente por sorpresa cuando veo que tanto Simon como Niall los ignoran, como si fueran completamente normal. "Para ellos es normal, son famosos" me digo a mi misma, preguntándome como hacen para lidiar con todo eso. Simon se detiene frente al estacionamiento subterráneo del edificio y espera al que vigilante del mismo confirme su pase de entrada, aparte a los paparazzis y abra la entrada para poner el auto en movimiento nuevamente. Abro la puerta en el segundo en que se estaciona, estirando mis piernas antes de caer de pie sobre el suelo.
- ¿Siempre es así? -Pregunto, teniendo que correr ligeramente para ponerme a la par justo antes de subirnos al elevador. Simon utiliza nuevamente su pase para marcar el piso veintiséis.
- ¿Cómo? -Pregunta Niall, mirándome. Yo ladeo la cabeza.
- Así, los paparazzis todo el tiempo avalanzandose sobre los autos...
- Es pero. -Responde Simon, callándonos a los dos antes de dirigirse estrictamente a Niall- ¿Estás preparado? Sé que te dí poco tiempo para prepararte, pero necesito saber que estás bien antes de entrar a esa entrevista.
- Estoy bien, Simon. -Le asegura el rubio, sonriendo honestamente por primera vez- ¿Estás preocupado?
- ¿Me puedes culpar por estarlo? La entrevistadora es Kiley Longwave, sabes como puede ser, pero prometió no presionarlos tanto esta vez. -Dice él, estirando la mano para palmear la espalda de Niall- Estarás bien.
- Eso espero.
- Lo estarás, sabes que todos aquí sabemos lo que pasó y te apoyamos. Solo no lo empeores y pronto todos se olvidarán de ésto.
El ascensor se abre ante nuestras narices y no me da tiempo de decir nada, pero lo que acabo de ver me enternece el corazón. No importa lo mucho que Niall diga que Simon lo odia, o que One Direction esté convencido de que él siempre está de mal humor, por un resbaladizo momento, por una fracción de segundo, vi lo mucho que en realidad se preocupa Simon por él. Lo mucho que se preocupa por todos ellos. Quizás es verdad que no lo muestra muy seguido, y que la mayor parte del tiempo vive con una mueca de mal humor en su rostro, pero hasta yo puedo notar que en el fondo los quiere, y siente la necesidad de protegerlos. Mi pregunta es: ¿De qué? ¿De qué intenta proteger a Niall, por qué? Es claro que algo sucedió o ya estaba sucediendo antes de que yo llegara, y que he caído en el medio de la tormenta sin saber de que se trata. No le puedo preguntar a ninguno de los dos, con uno no tengo la confianza suficiente y el otro me mandara al diablo si le pregunto, así que estoy en la oscuridad cuando entramos a un set de grabación. Es una habitación grande, abierta y sin paredes en el medio, con paredes completamente blancas, un ventanal gigante con vista a la ciudad, un sofá de cuero marrón situado en el medio de todas las cámaras e iluminación, justo al lado de una silla naranja alta y acolchada, que me imagino es el puesto de la entrevistadora. A un extremo del set hay una mesa preparada con bocadillos, refrigerios y todo tipo de bebidas sin alcohol, al otro extremo hay varias sillas plegables y espejos con luces de marquesina. Simon se dirige directamente a hablar con otros dos hombres de traje, que lo reciben con una sonrisa y un abrazo; no tengo idea de quienes son. Yo sigo a Niall, el cual se acerca hasta donde está el resto de los chicos ya listos para la entrevista.
- Viniste. -Lo saluda Zayn, levantándose de su silla para abrazarlo- ¿Como estás?
- Bien, sorprendentemente. -Niall sonríe saludando al resto- Perdón por mi ataque de rabia ayer, esto de la entrevista me tenia mal y...
- No tienes que explicarte. -Dijo Liam, encogiéndose de hombros, restando importancia- Todos hemos tenido esos momentos.
- Lo importante es que viniste. -Intervino Louis con una pequeña sonrisa- ¿Quien te convenció?
- Ella. -Dice Niall, señalándome con un gesto de cabeza- Tenían que escucharla...
- ¡Cállate! -Murmuro, negando con la cabeza- Lo hice porque ellos me lo pidieron, ¿Cierto?
- Es verdad. -Dijo Harry, divertido- Le pedimos que te vigilara, para que no hicieras nada loco. Gracias, _______.
- Al parecer la chica sabe como convencerte. -Comenta Zayn en tono divertido justo antes de que Louis suelte una carcajada y Liam le pegue disimuladamente en el hombro.
- No le creas, _______., es solo... -Comienza a decir, pero yo niego con la cabeza, sonriendo.
- No pasa nada. -Le aseguro, devolviendole la sonrisa.
Antes de que alguno pueda agregar algo más a la conversación un pequeño letrero se enciende y anuncian que todos deben tomar su posición. Los cinco se despiden de mi, levantándose de sus asientos para pasarse al gran sofá de cuero. De pronto, toda la habitación cobra vida. Los maquilladores se acercan a los cinco, retocándolos mientras otras personas les ofrecen agua o algo de beber a ultimo momento, mientras otros más se encargan de asegurarse de que las cámaras y las luces estén en posición. De último entra Kiley, la entrevistadora, una mujer que debe de tener al menos treinta años, pero luce muchísimo mejor que yo. Lleva un bonito vestido negro ajustado y tacones rojo intenso. Los asistentes también retocan su cabello y maquillaje antes de que la mujer pueda saludar cordialmente a los chicos. Veo que Simon me hace señas desde el otro lado de la habitación para que me siente y lo hago, sentándome donde apenas minutos antes se encontraba Louis. Me pongo cómoda y veo como le dan los últimos toques a todo el sitio para empezar la entrevista. El hombre de la cámara principal da la señal y comienza, todo el cuarto se sume en silencio por unos segundos hasta que Kiley Longwave habla, utilizando el típico tono energético y carismático de todo entrevistador. Acomodo mi cuerpo sobre la silla, lista para ver por primera vez una entrevista en vivo y directo.
- Buenas tardes televidentes de Tele4. Hoy estamos aquí con la mayor y más famosa boyband de ésta generación. Los cinco chicos que perdieron en The X Factor pero ganaron el mundo. ¡One Direction! -La mujer sonríe, viéndolos a todos- ¿Cómo están chicos?
- Muy bien, gracias Kiley. -Responde Liam sonriendo cordialmente.
- ¿Las fans los dejaron entrar tranquilamente el día de hoy? ¿O fueron un problema?-Pregunta Kiley. Louis sonríe y niega con la cabeza.
- Nunca son un problema, son ruidosas y adorables, como siempre.
- Escuché que tienen pensado comenzar el tour por UK más temprano este año, ¿Es eso cierto?
- Si, decidimos adelantar la fecha de inicio para poder dar más conciertos antes de que acabe este año. -Responde Harry con ese tono de voz lento y carrasposo- Queremos dar tantos conciertos como sea posible.
- ¿Y luego? ¿Tienen pensado extender el tour por América?
- Quizás el próximo año, después de las vacaciones de invierno. -Dice Zayn, interviniendo en la entrevista.
- Además, he escuchado rumores de que planean irse de vacaciones todos juntos, ¿Qué me dicen de eso?
- No es seguro, Kiley. -Comenta Louis- Todos queremos pasar tiempo con nuestras familias también, pues casi nunca los vemos, quizás nos vayamos unos días todos juntos a algún lado, pero no todas las vacaciones.
- Claro, debe ser difícil, ¿No es cierto? Extrañar a su familia, no tener tiempo para ustedes.
- Lo es. -La voz de Niall interviene por primera vez. Sé que intenta sonar normal, despreocupado como el resto, pero la forma en que dice eso que deja prever que algo lo molesta. Kiley ignora el tono extraño en su voz, continuando con la entrevista.
- Bien, hablemos de unos cuantos rumores y noticias que se han llevado la atención de las fans. Primero, Harry ¿Es cierto que planeas removerte el tatuaje de mariposa?
- ¿Qué? No, no. -El castaño sonríe negando con la cabeza- Es uno de mis favoritos, no tengo planeado removerlo, solo no me haré más por los momentos.
- Él ama ese tatuaje. -Bromea Louis y todos en la habitación ríen incluso yo, cuando Harry le hace una mueca.
- Ahora, Niall, todas las fans han estado extremadamente preocupadas por tí últimamente y todas se preguntan lo mismo ¿Estás bien? ¿O toda esta locura te está cansando?
- Nuestras fans siempre se preocupan, es la razón por la que las amamos tanto. -Responde Niall antes de negar levemente con la cabeza- Nunca me cansaré de esta locura, por esto vivo.
- Pero, ¿Estás bien? Pues creo que todos estamos de acuerdo que te has estado comportando extraño. -Preciona Kiley con una sonrisa a punto de reventar.
- No creo que me he estado comportando extraño, Kiley, es solo... -Pero la mujer lo interrumpe.
- ¿No? Veamos este vídeo por favor. Fue enviado por una cadena americana y creo que es la razón por la que todo el mundo se preocupa tanto por tí y tu estabilidad mental.
De inmediato los ojos de todos se dirigen a una pequeña pantalla justo detrás de una de las cámaras. Un vídeo de Niall entrando y saliendo repetidas veces el mismo día de un edificio realmente feo y devastado por el paso del tiempo empieza a reproducirse, seguido de fotos de él en múltiples clubs, acompañado siempre por una chica diferente, las fotos no parecen tener nada de malo según yo, pero la forma en que las ponen en ese vídeo las hacen parecer sobre expuestas, seguido de pequeños vídeos de como Niall parece completamente desconectado en diferentes entrevistas empieza a verse. Yo quito mi mirada de la pantalla para verlo a él. Niall está totalmente en shock, tiene las manos apoyadas en sus rodillas, apretando con fuerza una de ellas en un puño, su rostro está completamente rojo y sus ojos cristalinos. No soy la única que se da cuenta, pues noto como Zayn y Liam lo ven, como sí intentaran darle apoyo moral desde donde estaban. Duele verlo así, acatado por los medios, pues es notorio que están transversando esas imágenes para hacerlo lucir mal, que lo están manipulando. Solo quiero levantarme de mi asiento y abrazarlo, sacarlo de allí para que pare la humillación cuando me fijo en la mirada de estupefacción en el rostro de Simon, cuando noto que de repente todos en la habitación menos Niall y Kiley tienen la vista fija en mi. No entiendo porqué demonios todos repentinamente me están viendo a mi hasta que me fijo en la pantalla. El vídeo se ha dejado de reproducir y ahora una sola foto con algo escrito debajo ocupa toda la pantalla. Mi corazón parece congelarse en mi pecho cuando noto que es una foto mía; una foto mía tropezando de lleno con Niall con las letras "¿La próxima chica de Horan?". Mis ojos se abren como platos cuando conecto los puntos. Esa foto fue tomada el día anterior, cuando el paparazzi dentro de la casa de Simon me cogió por sorpresa, cuando entré corriendo y tropecé con Niall, tan solo segundos antes de que este tapara todas las ventanas de la casa. Fue un error, y ahora lo estaban haciendo quedar a él como un total mujeriego y a mi como su desesperada amante, cuando todo lo que en realidad pasó fue me asusté por el paparazzi y tropecé con él en mi huida.
La pantalla se apaga y Kiley vuelve a hablar; mis ojos buscan desesperadamente a los de Niall, de alguna forma siento que es mi culpa, que le he cargado con otro problema. Intento hacer que se fije en mi para poder decirle lo siento, pero él sencillamente despega su mirada de la pantalla y, con gran esfuerzo, intenta aparentar que todo lo que acaba de pasar no le afecta.
Letswalkinthesun
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
No lo puedo creer, simplemente me sentí muy mal cuando la entrevistadora, lo expuso de esa manera :c yo también sentiría que es mi culpa, si fuera ___. (aunque obviamente no lo es) pero no sé. La que se les va a armar con Simon jojojojojó XDD yo tampoco soy muy fan de los tacones de 10cm. ¡Creeme! XD oh por dios, yo me visto así. Me visto como adolescente des ubicada. Rayos. Aunque si Simon fuera mi tío, y me dijera eso, me vendría valiendo tres kilos de mierda y me voy a la entrevista como se me antoje XD. ¡En fin!. Me gusto mucho el capitulo c: Me imagine la cara de ___ era como de :o XDDD Bueno, ¡Siguela! Me gusta mucho está novela *www* Un abrazote.
Invitado
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Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
Oh mi Dios, oh mi Dios. ¡Steph! Hay Dios estoy como en shock. Pobre Nialler, quieren hacerlo ver mal :'c pobre mi duende. Y ____. Dios ahora le quieren poner también el problema, odio eso paparazzi que inventan cosas a lo bruto ¬¬' ¡yo querer saber que paso! Tenes que seguirla weóna, no puedo esperar. Besos, I love u<3
Invitado
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Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
bestia pobre duende yo lo consuelo beos siguela pronto
tortugitastyles
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
mygosh! D: odio a kiley grr e.e *merece la pena de muerte* xd
no la dejes ahi D: quiero saber que dice niall! x.x:wut:
no la dejes ahi D: quiero saber que dice niall! x.x:wut:
CualquiercosaC:
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
Holisss. ¿Cómo están el día de hoy n_n? Espero que muy bien<3. Yo recién vengo llegando a mi casa, por eso no les había subido cap antes. Muchaas gracias por leer y comentar, son un amor todas<3.
PD: Subo el capitulo dentro de unos minutitos!
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JAJAJA, chocalas que yo también me visto asi :D! Idk, es más cómodo andar así por la vida(?). Muchaaas gracias Aly, que bueno que te halla gustado el cap<3.
Por cierto, en este cap sales tú, yeaaay! jahsj, besos xx.
-------------------------.
Awww, gracias gracias Liz! I know, y lo triste es que eso les pasa mucho a los chicos, dios :'c. ¡Me alegro que te guste la novela *-*! Muchas gracias por leer Liz, love you <3.
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ajajajajaja, yo también, lo abrazo todo el día para consolarlo al pobre. Gracias por leer :D
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Lo sé, lo sé, también la odio :c. jhajshs, gracias por leer, que bueno que te gustó<3.
PD: Subo el capitulo dentro de unos minutitos!
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JAJAJA, chocalas que yo también me visto asi :D! Idk, es más cómodo andar así por la vida(?). Muchaaas gracias Aly, que bueno que te halla gustado el cap<3.
Por cierto, en este cap sales tú, yeaaay! jahsj, besos xx.
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Awww, gracias gracias Liz! I know, y lo triste es que eso les pasa mucho a los chicos, dios :'c. ¡Me alegro que te guste la novela *-*! Muchas gracias por leer Liz, love you <3.
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ajajajajaja, yo también, lo abrazo todo el día para consolarlo al pobre. Gracias por leer :D
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Lo sé, lo sé, también la odio :c. jhajshs, gracias por leer, que bueno que te gustó<3.
Letswalkinthesun
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
omg, ya quiero leer. Mi día estuvo bien, fui a la escuela de música, todo normal, aunque estresada por no poder terminar el cap para mi novela ¬¬
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Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
Oh por dios, en esté Cap salgo yo *wwww* ¡Tienes que subirlo ya! me comen las ansias
Invitado
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Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
Capitulo 6.
Escucho mi celular sonar por décima quinta vez en menos de quince minutos, aturdiendome. No pienso levantar un dedo para contestarle a nadie, sencillamente me niego a lidiar con todo eso. Mi celular no ha dejado se sonar desde que me levanté. Al principio hice el intento de contestar todas las llamadas, empezando por las de mis padres, que resultan ser a los únicos a los que le respondo, pues son los únicos que gracias a Dios no saben nada sobre el mundo de la música adolescente, pues, por otro lado, todas las personas de mi edad que alguna vez llegué a conocer y tienen mi numero me han llamado. Es realmente impresionante como personas que nunca me dedicaron más allá de un sencillo "Hola, ¿Cómo estás?" ahora me llaman nada más porque esa odiosa noticia se escapó en televisión internacional. Quise que me tragara la tierra cuando mis ojos se fijaron en la imagen de la pantalla en el estudio. ¿Cómo pudieron hacer eso? ¿Cómo demonios trucaron la foto para cambiar toda la situación a su favor? pasé de ser una adolescente de dieciocho años común y corriente con el cabello teñido de azul en las puntas a estar en casí todos los blogs de noticias de música, así como en la tele. Mi celular nunca ha recibido tantas llamadas en un día y de repente la gente ha encontrado mis redes sociales. Además, como si el circo mediático que se desató desde ayer no fuera suficiente, Simon no hizo más que empeorarlo. No nos dirigió la palabra ni a Niall ni a mi en el camino de regreso, casí ni nos vio pero en el segundo en que pasamos las puertas hacia la sala principal, fue como si alguien le hubiera cambiando el interruptor. Nos gritó; no solamente a mí, sino a Niall también. Nos tachó de irresponsables, de tontos e ingenuos. A mi, particularmente, me recordó el dolor en el trasero que soy para él y como sigo haciéndole todo más difícil. Nos regañó por un aproximado de veinte minutos, hasta que me pidió que me fuera y siguió gritándole únicamente a Niall. Cuando los dos pensamos que había terminado, justo antes de que acabara la noche, nos pidió que nos reuniéramos todos en la sala y ahí fue cuando todo empeoró un poco más para ambos. Como si las reglas de ésta casa no fueran ya bastantes, agregó unas cuantas más: Las pantallas en los ventanales de la sala y la cocina vivirían abajo de ahora en adelante, para evitar que algún paparazzi lograra filtrarse. No teníamos permiso de salir, aunque esa regla era únicamente para mí, pues ellos dos salieron esta misma mañana a dar entrevistas y firmas de autógrafos diciéndome que no regresarían hasta entrada la noche. Yo por mi parte, no tengo el permiso de salir hasta que las aguas se calmen y la gente deje de especular sobre una inexsistente relación entre Niall y yo. La ultima regla era exclusivamente para él y yo no la entendí. Simon lo miró con rostro serio y le dijo de plano: "Olvídate de ir a ese lugar por el momento" Aún no entiendo a que se refiere Simon al decir eso, pero es obvio que es sobre el tan misterioso pasado de Niall que no logro entender y no tengo ánimos de preguntar. Así que aquí me encuentro, tirada boca arriba en esta inmensa cama sin poder salir y sin tener a nadie con quien hablar. Intenté con todas mis ganas llamar a Katty y explicarle, pero mi amiga está tan molesta pues cree que le mantuve esto en secreto, que le colgué. Quizás la llame más tarde, cuando se halla calmado, pero por los momentos, no tengo absolutamente nada que hacer o a donde ir.
Suelto un grito de frustración cuando mi celular suena por octava vez en menos de cinco minutos y por fin me digno a apagarlo. Disfruto del la sensación de tranquilidad en el silencio de la habitación unos segundos antes de levantarme e introducirme al baño. Dejo mi ropa sucia en la canasta, abro la ducha y entro. El agua fría me golpea de lleno, aclarándome las ideas poco a poco, me quedo así, parada bajo el chorro de agua por un buen rato mientras sopeso mis opciones. Son dos opciones bastante sencillas: O me quedo todo el día encerrada para luego verle el rostro malhumorado a Simon, o salgo y ruego porque no se entere. Una parte de mi realmente quiere salir, ir a descubrir Londres por mí misma. Después de todo, ¿Quién me conoce? Nadie. En la foto se ve mi cara, es cierto, pero si me cubro lo suficiente, nadie tiene porque tomarme en cuenta. Hago mi decisión al tiempo que salgo de la ducha. Envuelvo mi cuerpo en una toalla y salgo de regreso a mi habitación. Abro el closet y sin pensarlo saco un short oscuro, unas zapatillas claras, una camisa con la frase "This is love" y una chaqueta negra de manga larga y capucha. Me visto sin prisa antes de dejar mi cabello suelto, asegurándome de que cubriera lo más que pudiera mi rostro. Para mi suerte, el día amenaza con lluvia, así que no se verá extraño si llevo la capucha encima. Subo el cierre de la chaqueta, acomodo la capucha sobre mi cabello y agarro mi bolso de jean con el Ipod, la cámara y dinero adentro. Como no tengo pensado regresar hasta tarde, y probablemente para ese entonces Niall y Simon ya han regresado, me detengo para quitarles el seguro a las ventanas de mi habitación. Doy un vistazo al balcón de la misma y sonrío al comprobar que el muro queda lo suficientemente cerca para poder trepar por el y de allí subirme al balcón. Me aseguro de tener conmigo la copia de la alarma de la reja principal, la que da hacia la calle y por fin salgo de la habitación.
El aire frío de Londres me pega en el rostro, aclarándome la mente. Por fin estoy afuera de esa casa; sola, sin paparazzis molestos o el rostro de Simon buscando motivos para regañarme cerca de mí. Al fin tengo la oportunidad de recorrer el lugar por mi misma, de ir a donde quiera sin que nadie me moleste. Sonrío para mi misma al tiempo que saco el Ipod de mi bolso, me coloco los audífonos le doy play a la lista de canciones aleatorias y empiezo a caminar calle abajo. No recuerdo muy bien como salir de aquel vecindario donde vive mi tío pero al menos trato de memorizar como llegué allí el primer día. Al cabo de unos veinte minutos logro salir de la vista de casas enormes y autos lujosos para adentrarme a un paisaje más urbano. A medida que me adentro en el centro de la ciudad más despierta me siento, como sí alguien me quitara una venda de los ojos. Saco la cámara para llevarla en la mano, tomando fotos por aquí y por allá. Le tomo fotos a todo lo que me parece interesante, en especial a una cabina telefónica roja, típica de Londres, que no había visto nunca antes en mi vida. Consulto rápidamente el GPS de mi celular para saber donde estoy y que tanto me he alejado de la casa, trazo un pequeño mapa mental para llegar hasta un parque, que, según mi guía turística es realmente hermoso y guardo el celular nuevamente. Me detengo en una pequeña tienda y compro dos botellas de agua, chocolate, muffins y un helado de cono antes de salir, guardo todo menos el helado, el cual aprovecho para comer mientras espero a que el bus pase por la estación. ¿Por qué no había salido antes? Todo aquí es tan bello, tan hermoso, tan atrapante, que logra distraerme por completo. Las calles llenas de sonidos, olor a café y ropa nueva, la gente que camina rápido y con buena cara, algunos sosteniendo paraguas aunque aún no está lloviendo y otros sencillamente dejándose llevar. Subo al autobús de un solo piso, pagando el pasaje al entrar y me siento en el primer asiento libre que veo, el más cercano a la puerta, aún distraída con mis pensamientos. Repaso la línea de paradas y compruebo cual es la mía, cuando me doy cuenta que es la tercera parada asiento con la cabeza y desvío la vista a la ventanilla. A Katty le encantaría estar aquí conmigo, paseando por las calles de Londres, tomando millones de fotos que probablemente terminaré desechando para quedarme solamente con unas veinte, comiendo dulces sin preocuparse de la vida. Siento un ligero vacío en mi corazón por haber estado ignorando a mi mejor amiga durante todo el día de hoy, pero realmente no tengo ánimos de explicarle el incidente con la entrevista; no aún. No tengo ánimos de explicarle nada a nadie, solo quiero distraerme hasta que caiga la noche. El autobús se detiene en mi parada y bajo de un saltito gritando un "Gracias" al conductor. Doy un rápido vistazo a la parada y sonrío, adentrandome en el pequeño parque frente a mí.
El sitio es realmente hermoso, lleno de gente, adultos, niños pequeños, empresarios, hippies, hipsters o adolescentes comunes como yo; de todo un poco. Todo rodeado de árboles, jardines artificiales, pequeños cafés y dulcerias, además de una pequeña área para patinar. Sigo caminando, tomando fotos aquí y allá a las cosas que encuentro más bonitas. Ajusto mi chaqueta, subiendo la capucha de la misma solo por precaución, pues nadie se ha fijado en mí hasta los momentos. Detengo mi andar en un banquillo verde libre y me dejo caer sobre él. Dedico los siguientes veinte minutos a devorar el chocolate que compré antes, beber una botella entera de agua, mandarle un rápido mensaje a mis padres diciéndoles que los llamaba a la noche para saber de ellos y, por último, simplemente disfrutar de la vista. Arrepiento no haberme traído patines; no es que tenga, pero nunca se me ocurrió comprar, de otra forma, podría estar patinando ahora mismo. Me levanto nuevamente cuando mi reloj da las siete de la tarde y con paso tranquilo me dirijo hacia el pequeño café. Es un bonito café que queda en el medio del parque, con mesas de color negro y sillas de mimbre al aire libre, aunque también hay la opción de sentarse adentro; escojo mantenerme fuera de la vista de las personas. Entro al lugar que está casi vacío en el interior y me quito la capucha, pues no tiene sentido llevarla en un lugar donde casi no hay nadie. Disfruto de la corriente de aire antes de sentarme en la mesa del fondo. Me quito los auriculares y descuelgo mi bolso de mi espalda. No han pasado mucho más de cinc minutos cuando escucho los murmullos detrás de la barra. Levanto la mirada, chocando con todos los empleados que me miran fijamente. Tanto ellos como yo retiramos la mirada, pretendiendo que nada sucede, pero es obvio que sí pasa algo. Ruego porque no me empiecen a interrogar, porque me dejen pasar desapercibida como la persona común que soy. Los murmullos siguen por unos minutos hasta que por fín una chica se acerca a mí. Es alta, de cabello castaño oscuro que le llega casi por la cintura y ojos oscuros también. Se detiene justo frente a mi mesa, y es la única que, para mi suerte, parece no importarle en lo más mínimo los rumores sobre mí. Sonrío internamente.
- Bienvenida a Little coffe, disculpe la tardanza ¿Que desea ordenar? - Pregunta con voz amable.
- Oh, no he visto el menú... -Murmuro, abriendo la carta para leerla rápidamente. Intento concentrarme, pero los rumores detrás de ella siguen. Suelto una maldición, cerrando el menú y subiendo la mirada- ¿Qué acaso soy un fenómeno -Le pregunto, frustrada- ¿O soy un criminal? No; yo soy una adolescente normal, que, lo juro, solo quiso salir de la casa de su tío pues no quiere volverse loca. ¡Y todo el mundo me mira y habla de mi como si fuera gran cosa! ¡No lo soy! Fue una estúpida entrevista que mal entendió todo. ¿Puedes decirles a tus amigos que dejen de verme así y que no crean en todo lo que escuchan? Niall Horan es el famoso, no yo.
Siento mis mejillas rojas y mi corazón acelerado por la rabia y sé que debo estar echando humo por las orejas. No sé que tan ridícula debo de lucir así, explotando frente a una camarera pero la chica, al contrario de mis expectativas, se ríe. Niega con la cabeza, señalando al resto de los empleados.
- No son mis amigos, son mis compañeros de trabajo. -Me explica, aún riendo suavemente- Estás frustrada, ¿No es cierto?
- Bastante. -Admito, frotándome la frente con la yema de los dedos- Perdón...
- Aly. -Dice ella con calma- Me llamo Aly.
- ___________. -Digo, presentándome Disculpa, Aly, es que no conozco a nadie aquí y todo esto me está volviendo loca. No sé porqué te cuento, no te conozco y probablemente te aburra y solo quieres tomar mi orden e irte.
- No, esto me entretiene. -Aly sonríe y quita el menú de mis manos- Mira, lo único bueno de aquí es la torta de chocolate y el café helado, ¿Quieres uno de ambos?
- Por favor. -Digo, desesperanzada. Ella anota la orden rápidamente y asiente- Bien, iré a pedirlo y luego puedes contarme todo lo que quieras.
- ¿Les puedes decir que dejen de mirarme como si fuera una fenómeno?
- Oh, no lo harán. Ellos son unos obsesionados con la gente famosa, no tienes idea. Pero les pediré que al menos disimulen.
Observo como Aly regresa a la barra y les grita sin disimulo al resto de sus compañeros que vuelvan al trabajo y se busquen una vida propia. Tomo una larga bocanada de aire, agradeciendo internamente que al menos alguien en está ciudad honestamente no le importa con quien se rumorea que estoy saliendo, o mejor dicho, quien supuestamente está saliendo conmigo. Ojalá el resto de las personas fueran así. Espero unos diez minutos hasta que ella regresa, deja mi orden frente a mi y un batido de fresa para ella antes de sentarse. Me mira, como si esperara que yo dijera algo. No puedo evitar pensar que hay algo interesante en ella. Como sí fuera un alma libre, no lo sé. Es ese tipo de personas que estoy acostumbrada a ver de regreso en casa, que tienen alma de artista o al menos desprende esa sensación, pero que no había visto allí desde que llegué. Me distraigo unos segundos para probar el café helado, que está delicioso, por cierto, y un bocado de la torta de chocolate.
- Tienes razón, esto sabe riquísimo. -Le digo, tomando otro sorbo del café antes de seguir- Debe ser raro, ya sabes, tener que aguantar a una completa extraña quejarse de su vida.
- Oh, no, es divertido e interesante. -Me responde, bebiendo su batido de fresa- Aunque no lo creas no eres la primera que entra con un quiebre mental. Éste lugar tiene como un imán para esas personas.
- Bien, al menos no soy la única. -Sonrío ligeramente, devorando otro trozo de torta- No pensé que iba a ser tan difícil estar en Londres, realmente pensé que mis vacaciones tendrían un inicio diferente, pero con todo lo que ha pasado y no poder contárselo a nada...
- Lo sé. Cuando me mudé tampoco tenía a nadie. -Comenta Ally, encogiéndose de hombros- Es difícil estar aquí por tu cuenta.
- Dímelo a mí. -Murmuro, dejando de un lado la torta- ¿Cual es tu historia?
- Mis padres querían que estudiara derecho internacional en Harvard, pero yo quería estudiar artes. Los convencí de que estudiaría eso si me pagaban la Universidad aquí. Ellos creen que llevo meses estudiando derecho, pero en realidad me inscribí en la escuela de artes.
- Wow. -Digo, realmente impresionada por todo lo que ha hecho.
- ¿Y la tuya? Porqué siento es mucho más interesante que la mía.
- No sé si más interesante, pero sí más retorcida. -Coincido, haciendo una mueca- Verás, vine aquí de "Vacaciones" pues mis padres están en su luna de miel, pero todo lo que ha pasado en menos de dos semanas es bastante extraño.
- Tiene que serlo para aparecer en una revista. -Dice ella, soltando una risa antes de negar con la cabeza- Perdón, pero es que obviamente eso te está volviendo loca.
- ¿Tanto se nota? -Pregunto, realmente preocupada.
- Bastante.
Sopeso por un momento si debo o no contarle todo lo que me ha pasado. Lo cierto es que no tengo nada que perder, la mayor parte de mi vida ya se encuentra expuesta en diferentes blogs de la noche a la mañana y da igual contárselo a ella, además, no creo que realmente le importe nada sobre Niall Horan o One Direction, sino que realmente le gustan las buenas historias y la mía, en ese caso, es bastante buena. Comienzo a retarle todo lo que me sucedió desde el momento en que me bajé del avión. Le cuento sobre Simon sin excederme mucho, así como también le digo como rayos terminé viviendo con Niall (Me guardo los pormenores del estado del rubio, pues ni siquiera yo se muy bien porqué motivo terminó el viviendo con nosotros) le digo lo que en realidad sucedió, que no fue nada parecido a lo que dicen los medios de comunicación, así como también me extiendo hablándole de porqué decidí escaparme ese día cuando se supone que no puedo salir de mi encierro. En lo que me percato de la hora, ya son las 8:30 y yo he pasado los últimos treinta minutos contándole mi vida a una completa extraña. Cuando por fin cierro mi bocota, Ally asiente lentamente con la cabeza, dándome a entender que me ha estado prestando atención de verdad y no solo fingiendo.
- Tenía razón, tu historia es mucho más interesante que la mía. -Sonríe, ladeando la cabeza- No debe ser sencillo tener que lidiar con todo eso, ¿Sabes? pero desde el punto en que yo lo veo, puedes sacarle provecho. Es decir, estás viviendo con un integrante de una de las bandas más famosas del mundo y te estás amargando por eso. ¡No te amargues! Divierte, o te juro tu alma se arrugará rápido. Por lo que yo veo, tienes dos opciones: Encerrarte en tu habitación o escaparte y hacer algo divertido como lo hiciste hoy.
- ¿Y los rumores? -Pregunto, aún indecisa.
- Siempre habrá, más si sigues viviendo con él. Pero, por lo que entiendo, ustedes no son nada y no deberías permitir que esos rumores te arruinen el verano. -Ally se levanta y recoge todo en una bandeja antes de agregar:- Por cierto, fue divertido escucharte. Ya me estaba muriendo de aburrimiento.
Se lleva todo los platos sucios de regreso y yo de inmediato recojo mis cosas y me levanto del asiento para alcanzarla. Aly me dice el costo de todo y lo pago con calma antes de hablar.
- Gracias por escucharme, de verdad. -Le digo, sonriendo con emoción- Ayudaste mucho, en serio.
- Ah, vamos, no hay de qué. -Me dice, encogiéndose de hombros- ¡Si necesitas que alguien te muestre la ciudad un día o quieres salir, sabes donde encontrarme!
- A Simon probablemente le de un ataque, pero me da igual. No tengo ningún otro amigo en toda la ciudad. -Anoto rápidamente mi numero en un trozo de papel- ¿Te molesta si mañana no vengo sola? Conozco a alguien que quizás le relaje conocer este lado de Londres.
- Claro, nos vemos mañana.
- ¡Nos vemos Aly! -Me despido, saliendo como una exhalación del pequeño café.
Corro hacia la salida del parque, ya sin importarme si alguien me ve o no. No me detengo hasta que alcanzo la estación del bus y cuando lo hago mi respiración está completamente agitada. Me hubiera podido quedar hablando un rato más con la primera amiga que he hecho por mi cuenta en esa ciudad, pero la hora me sorprendió por completo. Se me ha hecho de noche sin que me diera cuenta. Subo al primer autobús que se detiene en la parada justo unos segundos antes de que comience a llover. Genial, lo que me faltaba. Vuelvo a sentarme en el primer asiento junto a la puerta y observo las lineas de paradas. Me toca bajarme en la segunda esa vez. Voy todo el camino de regreso rogando que la lluvia se detenga para cuando me toque bajarme, pero eso no pasa, pues cuando el bus se tiene en mi parada, al mismo tiempo que mi reloj me indica que son ya las nueve y quince de la noche, sigue lloviendo terriblemente afuera. Me cuelgo el bolso al revés, resguardandolo bajo la chaqueta, haciendo que luciera como sí tuviera una pansa inmensa bajo mi ropa y subo la capucha, cubriéndome lo más que puedo. Me bajo corriendo del autobús, adentrándome en la calle aún llena de personas con paraguas e impermeables. Sigo mi trote descontrolado por las mismas calles que tomé de camino cuando aún era de día, agradeciendo que las recordaba, pues no podía sacar mi celular para ver el GPS en esos momentos de lluvia. A medida que avanzo como alma que lleva el diablo por las calles, más empapada me encuentro. Si bien tengo ligeramente seco el pecho, pues la chaqueta de cuero me protege, mi rostro y mis piernas son algo completamente diferente. Tengo todas las piernas empapadas de agua y mi cara parece cubierta de gotas de sudor cuando en realidad son gotas de lluvia, además, estoy segura que la figura de una chica de dieciocho años corriendo bajo una tormenta no es muy fiable, así que debo lucir como una total maníaca. Sin embargo, la única cosa en mi mente es llegar lo más rápido que pueda a la casa de Simon. Para mi suerte, más pronto de lo que espero, me encuentro en el vecindario donde él vive. Bajo un poco la velocidad, caminando hasta que me encuentro con la gran reja negra frente a mí. De inmediato rebusco en mis bolsillos y saco el control automático. Dejo que la puerta se abra tan solo lo suficiente para que yo pueda pasar y la cierro nuevamente. Otra vez emprendo una carrera como sí fuera de vida o muerte hasta el jardín trasero de la casa, rogando internamente que nadie me halla visto abrir la verja principal, pues sí es así, estoy en problemas. El muro que separa la piscina del resto del jardín exterior se alza frente a mí. Visualizo mi balcón semi abierto a tan solo unos metros de distancia y me armo de valor. Bajo la lluvia y el cielo oscuro debe ser mucho más difícil escalar ese muro, aún cuando no es tan grande como aparenta. Sin embargo, no tengo otra opción, al menos que quiera soportar los regaños de Simon por décima vez en menos de quince días. Tomo una larga bocanada de aire, repitiéndome a mi misma "Tu puedes hacerlo. No vas a morir. Tu puedes hacerlo" en voz de ánimo. Me acerco un poco más al muro de piedras y, sin permitirme a mi misma cuestionarme dos veces, salto. Mis manos se agarran de un hueco entre dos rocas y mis pies encuentran un agarradero un poco más abajo. Escalo el muro con sumo cuidado, agradeciendo que al menos la capucha me cubre los ojos de la lluvia directa. Subo hasta poder sentarme encima del muro y me permito a mi misma tomarme un respiro. Deslizo mi cuerpo hasta quedar lo más cerca posible al balcón de mi habitación y me preparo para lo que viene. Un pequeño salto, eso es todo, solo un salto y estaré dentro de la casa. Me levanto con todo el cuidado posible, parándome sobre el muro y estiro los brazos. No puedo caerme, esa no es una opción. Cierro los ojos apenas unos segundos, estiro los brazos, doblo las rodillas y abro los ojos justo antes de lanzarme al vacío.
Por una fracción de segundo llego a creer que caeré al suelo, me estrellaré contra él y moriré joven, pero entonces mis manos logran afianzarse con fuerza de los barrotes del balcón. Balanceo mi cuerpo sobre el aire de un lado al otro hasta que soy capaz de agarrarme con las piernas al balcón. Jalo de mi misma con los brazos, subo una pierna sobre los barrotes, luego otra, y por fin caigo de bruces en el frío suelo de cerámica del balcón. Lo he logrado: Entrar sin matarme en el intento. Dejo que una risa de satisfacción se escape de mis labios antes de levantarme. Abro los ventanales del balcón hacia la habitación y entro chorreando agua por todos lados. Comienzo a relajarme cuando piso algo duro bajo mis pies. Estoy a punto de gritar con todas mis fuerzas cuando unos brazos me jalan hacia abajo y caigo en el suelo debajo de alguien.
- ¡Shhh! No grites. -La voz de Niall me sorprende por completo. Tiene su mano derecha presionada contra mi boca, evitando que grite- Dios, me quedé dormido. Así que llegaste.
- ¡¿Qué demonios haces?! -Le digo cuando retira su mano, gritando. Niall vuelve a poner su mano contra mi boca, acercando su rostro al mío.
- Shh, Simon te va a oír. -Entre las sombras de mi habitación noto que el sonríe. Retira su mano de mi boca, pero su cuerpo no se mueve ni un poco. Está encima de mi, con sus brazos a mi costado y sus piernas presionando levemente contra mi- ¿Sabes que tuve que cubrirte?
- ¿Cubrirme? Mierda, ¿Se dio cuenta que no estaba? -Pregunto, intentando no pensar en el calor que emanaba de su cuerpo. El asiente con la cabeza, rozando su nariz con la mía.
- Había mucho silencio en la casa cuando llegamos. -Me dice en un susurro- Él quería subir a verte pero le dije que yo lo haría y cuando vi que no estabas le mentí y le dije que estabas dormida profundamente.
- ¿Y se lo creyó? -Digo, incrédula. Su risa choca contra mi rostro.
- Si, o al menos no preguntó más por ti. Yo, por otro lado... -De repente, acerca aún más su rostro a mi, presionando a la vez su cuadrado pecho contra el mio. Mi cuerpo enseguida siente su calor invadirme, pasando incluso el frío que me ha dejado la lluvia- Si noté tu ausencia. ¿Así que te gusta escaparte? -Murmura contra mi oído. Suelto una maldición interna; ese es mi punto débil.
- No me quería quedar sola. No son los únicos con derecho salir de ésta casa de vez en cuando. -Reprocho, mirándolo directamente a los ojos. Niall sonríe.
- Yo me quedaría todo el día aquí sin problemas. Sí estás tu, claro; sino sería aburrido. -Entonces noto su mano en mi mentón, acariciando suavemente mi mejilla en un ritmo suave.
Ambos nos miramos por unos segundos, porque incluso allí, en la oscuridad, sus ojos son demasiado atrapantes. Quiero besarlo. Quiero besarlo y hundir mis dedos en su cabello rubio ahí mismo, pero justo cuando ese glorioso pensamiento cruza mi mente, unos pasos en el pasillo nos pillan desprevenidos. Como si alguien hubiera presionado un botón, ambos nos levantamos. Empujo a Niall hacia el baño, cerrando la puerta de un tirón y me dirijo hacia el armario. Saco la primera pijama que encuentro y me cambio lo más rápido que puedo, confiando en que Niall no está viendo y sigue con la puerta cerrada. Apenas tengo tiempo de descalzarme cuando Simon abre la puerta y enciende la luz de la habitación.
- Creí escuchar algo. -Dice, mirándome con confusión. Yo me encojo de hombros.
- Quizás escuchaste la puerta del baño; me estaba duchando. -Respondo con naturalidad, mostrando un mechón de mi cabello mojado.
- Eres extraña, ________. -Murmura antes de echar un vistazo a la habitación y agrega:- Que pases buenas noches.
Espero a que Simon cierre la puerta para soltar un suspiro enorme de alivio y me dirijo a la puerta del baño para abrirla. Niall me mira con expresión divertida en el rostro, como si todo aquello fuera de lo más cómico para él.
- ¿Qué te divierte tanto? -Le reprocho, dándole un pequeño golpe en el hombro. El se rie por lo bajo.
- Lo cerca que estuvo eso. -Me responde.
- Pensé que la primera regla que te dijo Simon es que tienes prohibido siquiera tocarme. -Le digo, mirándolo con el ceño fruncido pues el sigue sonriendo.
- No me importa romper las reglas; en especial esa. -Me dice, acercándose peligrosamente hacia mí, pero la adrenalina ya se me ha pasado y estoy realmente cansada para analizar todo lo que está pasando. Me hago a un lado y señalo la puerta de la habitación.
- Gracias por cubrirme Niall. Ahora, sal de aquí, ¿Sí? Estoy muy cansada y... -El me interrumpe, abrazándome. Pero no un abrazo soso cualquiera. Sino que me rodea con sus brazos, me jala suavemente hacia él y me mantiene así unos segundos.
- Si vas a escaparte otra vez, llévame contigo, por favor. -Susurra con suavidad antes de alejarse y darme un beso en la coronilla- Buenas noches.
"I wish i was beside you"
Escucho mi celular sonar por décima quinta vez en menos de quince minutos, aturdiendome. No pienso levantar un dedo para contestarle a nadie, sencillamente me niego a lidiar con todo eso. Mi celular no ha dejado se sonar desde que me levanté. Al principio hice el intento de contestar todas las llamadas, empezando por las de mis padres, que resultan ser a los únicos a los que le respondo, pues son los únicos que gracias a Dios no saben nada sobre el mundo de la música adolescente, pues, por otro lado, todas las personas de mi edad que alguna vez llegué a conocer y tienen mi numero me han llamado. Es realmente impresionante como personas que nunca me dedicaron más allá de un sencillo "Hola, ¿Cómo estás?" ahora me llaman nada más porque esa odiosa noticia se escapó en televisión internacional. Quise que me tragara la tierra cuando mis ojos se fijaron en la imagen de la pantalla en el estudio. ¿Cómo pudieron hacer eso? ¿Cómo demonios trucaron la foto para cambiar toda la situación a su favor? pasé de ser una adolescente de dieciocho años común y corriente con el cabello teñido de azul en las puntas a estar en casí todos los blogs de noticias de música, así como en la tele. Mi celular nunca ha recibido tantas llamadas en un día y de repente la gente ha encontrado mis redes sociales. Además, como si el circo mediático que se desató desde ayer no fuera suficiente, Simon no hizo más que empeorarlo. No nos dirigió la palabra ni a Niall ni a mi en el camino de regreso, casí ni nos vio pero en el segundo en que pasamos las puertas hacia la sala principal, fue como si alguien le hubiera cambiando el interruptor. Nos gritó; no solamente a mí, sino a Niall también. Nos tachó de irresponsables, de tontos e ingenuos. A mi, particularmente, me recordó el dolor en el trasero que soy para él y como sigo haciéndole todo más difícil. Nos regañó por un aproximado de veinte minutos, hasta que me pidió que me fuera y siguió gritándole únicamente a Niall. Cuando los dos pensamos que había terminado, justo antes de que acabara la noche, nos pidió que nos reuniéramos todos en la sala y ahí fue cuando todo empeoró un poco más para ambos. Como si las reglas de ésta casa no fueran ya bastantes, agregó unas cuantas más: Las pantallas en los ventanales de la sala y la cocina vivirían abajo de ahora en adelante, para evitar que algún paparazzi lograra filtrarse. No teníamos permiso de salir, aunque esa regla era únicamente para mí, pues ellos dos salieron esta misma mañana a dar entrevistas y firmas de autógrafos diciéndome que no regresarían hasta entrada la noche. Yo por mi parte, no tengo el permiso de salir hasta que las aguas se calmen y la gente deje de especular sobre una inexsistente relación entre Niall y yo. La ultima regla era exclusivamente para él y yo no la entendí. Simon lo miró con rostro serio y le dijo de plano: "Olvídate de ir a ese lugar por el momento" Aún no entiendo a que se refiere Simon al decir eso, pero es obvio que es sobre el tan misterioso pasado de Niall que no logro entender y no tengo ánimos de preguntar. Así que aquí me encuentro, tirada boca arriba en esta inmensa cama sin poder salir y sin tener a nadie con quien hablar. Intenté con todas mis ganas llamar a Katty y explicarle, pero mi amiga está tan molesta pues cree que le mantuve esto en secreto, que le colgué. Quizás la llame más tarde, cuando se halla calmado, pero por los momentos, no tengo absolutamente nada que hacer o a donde ir.
Suelto un grito de frustración cuando mi celular suena por octava vez en menos de cinco minutos y por fin me digno a apagarlo. Disfruto del la sensación de tranquilidad en el silencio de la habitación unos segundos antes de levantarme e introducirme al baño. Dejo mi ropa sucia en la canasta, abro la ducha y entro. El agua fría me golpea de lleno, aclarándome las ideas poco a poco, me quedo así, parada bajo el chorro de agua por un buen rato mientras sopeso mis opciones. Son dos opciones bastante sencillas: O me quedo todo el día encerrada para luego verle el rostro malhumorado a Simon, o salgo y ruego porque no se entere. Una parte de mi realmente quiere salir, ir a descubrir Londres por mí misma. Después de todo, ¿Quién me conoce? Nadie. En la foto se ve mi cara, es cierto, pero si me cubro lo suficiente, nadie tiene porque tomarme en cuenta. Hago mi decisión al tiempo que salgo de la ducha. Envuelvo mi cuerpo en una toalla y salgo de regreso a mi habitación. Abro el closet y sin pensarlo saco un short oscuro, unas zapatillas claras, una camisa con la frase "This is love" y una chaqueta negra de manga larga y capucha. Me visto sin prisa antes de dejar mi cabello suelto, asegurándome de que cubriera lo más que pudiera mi rostro. Para mi suerte, el día amenaza con lluvia, así que no se verá extraño si llevo la capucha encima. Subo el cierre de la chaqueta, acomodo la capucha sobre mi cabello y agarro mi bolso de jean con el Ipod, la cámara y dinero adentro. Como no tengo pensado regresar hasta tarde, y probablemente para ese entonces Niall y Simon ya han regresado, me detengo para quitarles el seguro a las ventanas de mi habitación. Doy un vistazo al balcón de la misma y sonrío al comprobar que el muro queda lo suficientemente cerca para poder trepar por el y de allí subirme al balcón. Me aseguro de tener conmigo la copia de la alarma de la reja principal, la que da hacia la calle y por fin salgo de la habitación.
El aire frío de Londres me pega en el rostro, aclarándome la mente. Por fin estoy afuera de esa casa; sola, sin paparazzis molestos o el rostro de Simon buscando motivos para regañarme cerca de mí. Al fin tengo la oportunidad de recorrer el lugar por mi misma, de ir a donde quiera sin que nadie me moleste. Sonrío para mi misma al tiempo que saco el Ipod de mi bolso, me coloco los audífonos le doy play a la lista de canciones aleatorias y empiezo a caminar calle abajo. No recuerdo muy bien como salir de aquel vecindario donde vive mi tío pero al menos trato de memorizar como llegué allí el primer día. Al cabo de unos veinte minutos logro salir de la vista de casas enormes y autos lujosos para adentrarme a un paisaje más urbano. A medida que me adentro en el centro de la ciudad más despierta me siento, como sí alguien me quitara una venda de los ojos. Saco la cámara para llevarla en la mano, tomando fotos por aquí y por allá. Le tomo fotos a todo lo que me parece interesante, en especial a una cabina telefónica roja, típica de Londres, que no había visto nunca antes en mi vida. Consulto rápidamente el GPS de mi celular para saber donde estoy y que tanto me he alejado de la casa, trazo un pequeño mapa mental para llegar hasta un parque, que, según mi guía turística es realmente hermoso y guardo el celular nuevamente. Me detengo en una pequeña tienda y compro dos botellas de agua, chocolate, muffins y un helado de cono antes de salir, guardo todo menos el helado, el cual aprovecho para comer mientras espero a que el bus pase por la estación. ¿Por qué no había salido antes? Todo aquí es tan bello, tan hermoso, tan atrapante, que logra distraerme por completo. Las calles llenas de sonidos, olor a café y ropa nueva, la gente que camina rápido y con buena cara, algunos sosteniendo paraguas aunque aún no está lloviendo y otros sencillamente dejándose llevar. Subo al autobús de un solo piso, pagando el pasaje al entrar y me siento en el primer asiento libre que veo, el más cercano a la puerta, aún distraída con mis pensamientos. Repaso la línea de paradas y compruebo cual es la mía, cuando me doy cuenta que es la tercera parada asiento con la cabeza y desvío la vista a la ventanilla. A Katty le encantaría estar aquí conmigo, paseando por las calles de Londres, tomando millones de fotos que probablemente terminaré desechando para quedarme solamente con unas veinte, comiendo dulces sin preocuparse de la vida. Siento un ligero vacío en mi corazón por haber estado ignorando a mi mejor amiga durante todo el día de hoy, pero realmente no tengo ánimos de explicarle el incidente con la entrevista; no aún. No tengo ánimos de explicarle nada a nadie, solo quiero distraerme hasta que caiga la noche. El autobús se detiene en mi parada y bajo de un saltito gritando un "Gracias" al conductor. Doy un rápido vistazo a la parada y sonrío, adentrandome en el pequeño parque frente a mí.
El sitio es realmente hermoso, lleno de gente, adultos, niños pequeños, empresarios, hippies, hipsters o adolescentes comunes como yo; de todo un poco. Todo rodeado de árboles, jardines artificiales, pequeños cafés y dulcerias, además de una pequeña área para patinar. Sigo caminando, tomando fotos aquí y allá a las cosas que encuentro más bonitas. Ajusto mi chaqueta, subiendo la capucha de la misma solo por precaución, pues nadie se ha fijado en mí hasta los momentos. Detengo mi andar en un banquillo verde libre y me dejo caer sobre él. Dedico los siguientes veinte minutos a devorar el chocolate que compré antes, beber una botella entera de agua, mandarle un rápido mensaje a mis padres diciéndoles que los llamaba a la noche para saber de ellos y, por último, simplemente disfrutar de la vista. Arrepiento no haberme traído patines; no es que tenga, pero nunca se me ocurrió comprar, de otra forma, podría estar patinando ahora mismo. Me levanto nuevamente cuando mi reloj da las siete de la tarde y con paso tranquilo me dirijo hacia el pequeño café. Es un bonito café que queda en el medio del parque, con mesas de color negro y sillas de mimbre al aire libre, aunque también hay la opción de sentarse adentro; escojo mantenerme fuera de la vista de las personas. Entro al lugar que está casi vacío en el interior y me quito la capucha, pues no tiene sentido llevarla en un lugar donde casi no hay nadie. Disfruto de la corriente de aire antes de sentarme en la mesa del fondo. Me quito los auriculares y descuelgo mi bolso de mi espalda. No han pasado mucho más de cinc minutos cuando escucho los murmullos detrás de la barra. Levanto la mirada, chocando con todos los empleados que me miran fijamente. Tanto ellos como yo retiramos la mirada, pretendiendo que nada sucede, pero es obvio que sí pasa algo. Ruego porque no me empiecen a interrogar, porque me dejen pasar desapercibida como la persona común que soy. Los murmullos siguen por unos minutos hasta que por fín una chica se acerca a mí. Es alta, de cabello castaño oscuro que le llega casi por la cintura y ojos oscuros también. Se detiene justo frente a mi mesa, y es la única que, para mi suerte, parece no importarle en lo más mínimo los rumores sobre mí. Sonrío internamente.
- Bienvenida a Little coffe, disculpe la tardanza ¿Que desea ordenar? - Pregunta con voz amable.
- Oh, no he visto el menú... -Murmuro, abriendo la carta para leerla rápidamente. Intento concentrarme, pero los rumores detrás de ella siguen. Suelto una maldición, cerrando el menú y subiendo la mirada- ¿Qué acaso soy un fenómeno -Le pregunto, frustrada- ¿O soy un criminal? No; yo soy una adolescente normal, que, lo juro, solo quiso salir de la casa de su tío pues no quiere volverse loca. ¡Y todo el mundo me mira y habla de mi como si fuera gran cosa! ¡No lo soy! Fue una estúpida entrevista que mal entendió todo. ¿Puedes decirles a tus amigos que dejen de verme así y que no crean en todo lo que escuchan? Niall Horan es el famoso, no yo.
Siento mis mejillas rojas y mi corazón acelerado por la rabia y sé que debo estar echando humo por las orejas. No sé que tan ridícula debo de lucir así, explotando frente a una camarera pero la chica, al contrario de mis expectativas, se ríe. Niega con la cabeza, señalando al resto de los empleados.
- No son mis amigos, son mis compañeros de trabajo. -Me explica, aún riendo suavemente- Estás frustrada, ¿No es cierto?
- Bastante. -Admito, frotándome la frente con la yema de los dedos- Perdón...
- Aly. -Dice ella con calma- Me llamo Aly.
- ___________. -Digo, presentándome Disculpa, Aly, es que no conozco a nadie aquí y todo esto me está volviendo loca. No sé porqué te cuento, no te conozco y probablemente te aburra y solo quieres tomar mi orden e irte.
- No, esto me entretiene. -Aly sonríe y quita el menú de mis manos- Mira, lo único bueno de aquí es la torta de chocolate y el café helado, ¿Quieres uno de ambos?
- Por favor. -Digo, desesperanzada. Ella anota la orden rápidamente y asiente- Bien, iré a pedirlo y luego puedes contarme todo lo que quieras.
- ¿Les puedes decir que dejen de mirarme como si fuera una fenómeno?
- Oh, no lo harán. Ellos son unos obsesionados con la gente famosa, no tienes idea. Pero les pediré que al menos disimulen.
Observo como Aly regresa a la barra y les grita sin disimulo al resto de sus compañeros que vuelvan al trabajo y se busquen una vida propia. Tomo una larga bocanada de aire, agradeciendo internamente que al menos alguien en está ciudad honestamente no le importa con quien se rumorea que estoy saliendo, o mejor dicho, quien supuestamente está saliendo conmigo. Ojalá el resto de las personas fueran así. Espero unos diez minutos hasta que ella regresa, deja mi orden frente a mi y un batido de fresa para ella antes de sentarse. Me mira, como si esperara que yo dijera algo. No puedo evitar pensar que hay algo interesante en ella. Como sí fuera un alma libre, no lo sé. Es ese tipo de personas que estoy acostumbrada a ver de regreso en casa, que tienen alma de artista o al menos desprende esa sensación, pero que no había visto allí desde que llegué. Me distraigo unos segundos para probar el café helado, que está delicioso, por cierto, y un bocado de la torta de chocolate.
- Tienes razón, esto sabe riquísimo. -Le digo, tomando otro sorbo del café antes de seguir- Debe ser raro, ya sabes, tener que aguantar a una completa extraña quejarse de su vida.
- Oh, no, es divertido e interesante. -Me responde, bebiendo su batido de fresa- Aunque no lo creas no eres la primera que entra con un quiebre mental. Éste lugar tiene como un imán para esas personas.
- Bien, al menos no soy la única. -Sonrío ligeramente, devorando otro trozo de torta- No pensé que iba a ser tan difícil estar en Londres, realmente pensé que mis vacaciones tendrían un inicio diferente, pero con todo lo que ha pasado y no poder contárselo a nada...
- Lo sé. Cuando me mudé tampoco tenía a nadie. -Comenta Ally, encogiéndose de hombros- Es difícil estar aquí por tu cuenta.
- Dímelo a mí. -Murmuro, dejando de un lado la torta- ¿Cual es tu historia?
- Mis padres querían que estudiara derecho internacional en Harvard, pero yo quería estudiar artes. Los convencí de que estudiaría eso si me pagaban la Universidad aquí. Ellos creen que llevo meses estudiando derecho, pero en realidad me inscribí en la escuela de artes.
- Wow. -Digo, realmente impresionada por todo lo que ha hecho.
- ¿Y la tuya? Porqué siento es mucho más interesante que la mía.
- No sé si más interesante, pero sí más retorcida. -Coincido, haciendo una mueca- Verás, vine aquí de "Vacaciones" pues mis padres están en su luna de miel, pero todo lo que ha pasado en menos de dos semanas es bastante extraño.
- Tiene que serlo para aparecer en una revista. -Dice ella, soltando una risa antes de negar con la cabeza- Perdón, pero es que obviamente eso te está volviendo loca.
- ¿Tanto se nota? -Pregunto, realmente preocupada.
- Bastante.
Sopeso por un momento si debo o no contarle todo lo que me ha pasado. Lo cierto es que no tengo nada que perder, la mayor parte de mi vida ya se encuentra expuesta en diferentes blogs de la noche a la mañana y da igual contárselo a ella, además, no creo que realmente le importe nada sobre Niall Horan o One Direction, sino que realmente le gustan las buenas historias y la mía, en ese caso, es bastante buena. Comienzo a retarle todo lo que me sucedió desde el momento en que me bajé del avión. Le cuento sobre Simon sin excederme mucho, así como también le digo como rayos terminé viviendo con Niall (Me guardo los pormenores del estado del rubio, pues ni siquiera yo se muy bien porqué motivo terminó el viviendo con nosotros) le digo lo que en realidad sucedió, que no fue nada parecido a lo que dicen los medios de comunicación, así como también me extiendo hablándole de porqué decidí escaparme ese día cuando se supone que no puedo salir de mi encierro. En lo que me percato de la hora, ya son las 8:30 y yo he pasado los últimos treinta minutos contándole mi vida a una completa extraña. Cuando por fin cierro mi bocota, Ally asiente lentamente con la cabeza, dándome a entender que me ha estado prestando atención de verdad y no solo fingiendo.
- Tenía razón, tu historia es mucho más interesante que la mía. -Sonríe, ladeando la cabeza- No debe ser sencillo tener que lidiar con todo eso, ¿Sabes? pero desde el punto en que yo lo veo, puedes sacarle provecho. Es decir, estás viviendo con un integrante de una de las bandas más famosas del mundo y te estás amargando por eso. ¡No te amargues! Divierte, o te juro tu alma se arrugará rápido. Por lo que yo veo, tienes dos opciones: Encerrarte en tu habitación o escaparte y hacer algo divertido como lo hiciste hoy.
- ¿Y los rumores? -Pregunto, aún indecisa.
- Siempre habrá, más si sigues viviendo con él. Pero, por lo que entiendo, ustedes no son nada y no deberías permitir que esos rumores te arruinen el verano. -Ally se levanta y recoge todo en una bandeja antes de agregar:- Por cierto, fue divertido escucharte. Ya me estaba muriendo de aburrimiento.
Se lleva todo los platos sucios de regreso y yo de inmediato recojo mis cosas y me levanto del asiento para alcanzarla. Aly me dice el costo de todo y lo pago con calma antes de hablar.
- Gracias por escucharme, de verdad. -Le digo, sonriendo con emoción- Ayudaste mucho, en serio.
- Ah, vamos, no hay de qué. -Me dice, encogiéndose de hombros- ¡Si necesitas que alguien te muestre la ciudad un día o quieres salir, sabes donde encontrarme!
- A Simon probablemente le de un ataque, pero me da igual. No tengo ningún otro amigo en toda la ciudad. -Anoto rápidamente mi numero en un trozo de papel- ¿Te molesta si mañana no vengo sola? Conozco a alguien que quizás le relaje conocer este lado de Londres.
- Claro, nos vemos mañana.
- ¡Nos vemos Aly! -Me despido, saliendo como una exhalación del pequeño café.
Corro hacia la salida del parque, ya sin importarme si alguien me ve o no. No me detengo hasta que alcanzo la estación del bus y cuando lo hago mi respiración está completamente agitada. Me hubiera podido quedar hablando un rato más con la primera amiga que he hecho por mi cuenta en esa ciudad, pero la hora me sorprendió por completo. Se me ha hecho de noche sin que me diera cuenta. Subo al primer autobús que se detiene en la parada justo unos segundos antes de que comience a llover. Genial, lo que me faltaba. Vuelvo a sentarme en el primer asiento junto a la puerta y observo las lineas de paradas. Me toca bajarme en la segunda esa vez. Voy todo el camino de regreso rogando que la lluvia se detenga para cuando me toque bajarme, pero eso no pasa, pues cuando el bus se tiene en mi parada, al mismo tiempo que mi reloj me indica que son ya las nueve y quince de la noche, sigue lloviendo terriblemente afuera. Me cuelgo el bolso al revés, resguardandolo bajo la chaqueta, haciendo que luciera como sí tuviera una pansa inmensa bajo mi ropa y subo la capucha, cubriéndome lo más que puedo. Me bajo corriendo del autobús, adentrándome en la calle aún llena de personas con paraguas e impermeables. Sigo mi trote descontrolado por las mismas calles que tomé de camino cuando aún era de día, agradeciendo que las recordaba, pues no podía sacar mi celular para ver el GPS en esos momentos de lluvia. A medida que avanzo como alma que lleva el diablo por las calles, más empapada me encuentro. Si bien tengo ligeramente seco el pecho, pues la chaqueta de cuero me protege, mi rostro y mis piernas son algo completamente diferente. Tengo todas las piernas empapadas de agua y mi cara parece cubierta de gotas de sudor cuando en realidad son gotas de lluvia, además, estoy segura que la figura de una chica de dieciocho años corriendo bajo una tormenta no es muy fiable, así que debo lucir como una total maníaca. Sin embargo, la única cosa en mi mente es llegar lo más rápido que pueda a la casa de Simon. Para mi suerte, más pronto de lo que espero, me encuentro en el vecindario donde él vive. Bajo un poco la velocidad, caminando hasta que me encuentro con la gran reja negra frente a mí. De inmediato rebusco en mis bolsillos y saco el control automático. Dejo que la puerta se abra tan solo lo suficiente para que yo pueda pasar y la cierro nuevamente. Otra vez emprendo una carrera como sí fuera de vida o muerte hasta el jardín trasero de la casa, rogando internamente que nadie me halla visto abrir la verja principal, pues sí es así, estoy en problemas. El muro que separa la piscina del resto del jardín exterior se alza frente a mí. Visualizo mi balcón semi abierto a tan solo unos metros de distancia y me armo de valor. Bajo la lluvia y el cielo oscuro debe ser mucho más difícil escalar ese muro, aún cuando no es tan grande como aparenta. Sin embargo, no tengo otra opción, al menos que quiera soportar los regaños de Simon por décima vez en menos de quince días. Tomo una larga bocanada de aire, repitiéndome a mi misma "Tu puedes hacerlo. No vas a morir. Tu puedes hacerlo" en voz de ánimo. Me acerco un poco más al muro de piedras y, sin permitirme a mi misma cuestionarme dos veces, salto. Mis manos se agarran de un hueco entre dos rocas y mis pies encuentran un agarradero un poco más abajo. Escalo el muro con sumo cuidado, agradeciendo que al menos la capucha me cubre los ojos de la lluvia directa. Subo hasta poder sentarme encima del muro y me permito a mi misma tomarme un respiro. Deslizo mi cuerpo hasta quedar lo más cerca posible al balcón de mi habitación y me preparo para lo que viene. Un pequeño salto, eso es todo, solo un salto y estaré dentro de la casa. Me levanto con todo el cuidado posible, parándome sobre el muro y estiro los brazos. No puedo caerme, esa no es una opción. Cierro los ojos apenas unos segundos, estiro los brazos, doblo las rodillas y abro los ojos justo antes de lanzarme al vacío.
Por una fracción de segundo llego a creer que caeré al suelo, me estrellaré contra él y moriré joven, pero entonces mis manos logran afianzarse con fuerza de los barrotes del balcón. Balanceo mi cuerpo sobre el aire de un lado al otro hasta que soy capaz de agarrarme con las piernas al balcón. Jalo de mi misma con los brazos, subo una pierna sobre los barrotes, luego otra, y por fin caigo de bruces en el frío suelo de cerámica del balcón. Lo he logrado: Entrar sin matarme en el intento. Dejo que una risa de satisfacción se escape de mis labios antes de levantarme. Abro los ventanales del balcón hacia la habitación y entro chorreando agua por todos lados. Comienzo a relajarme cuando piso algo duro bajo mis pies. Estoy a punto de gritar con todas mis fuerzas cuando unos brazos me jalan hacia abajo y caigo en el suelo debajo de alguien.
- ¡Shhh! No grites. -La voz de Niall me sorprende por completo. Tiene su mano derecha presionada contra mi boca, evitando que grite- Dios, me quedé dormido. Así que llegaste.
- ¡¿Qué demonios haces?! -Le digo cuando retira su mano, gritando. Niall vuelve a poner su mano contra mi boca, acercando su rostro al mío.
- Shh, Simon te va a oír. -Entre las sombras de mi habitación noto que el sonríe. Retira su mano de mi boca, pero su cuerpo no se mueve ni un poco. Está encima de mi, con sus brazos a mi costado y sus piernas presionando levemente contra mi- ¿Sabes que tuve que cubrirte?
- ¿Cubrirme? Mierda, ¿Se dio cuenta que no estaba? -Pregunto, intentando no pensar en el calor que emanaba de su cuerpo. El asiente con la cabeza, rozando su nariz con la mía.
- Había mucho silencio en la casa cuando llegamos. -Me dice en un susurro- Él quería subir a verte pero le dije que yo lo haría y cuando vi que no estabas le mentí y le dije que estabas dormida profundamente.
- ¿Y se lo creyó? -Digo, incrédula. Su risa choca contra mi rostro.
- Si, o al menos no preguntó más por ti. Yo, por otro lado... -De repente, acerca aún más su rostro a mi, presionando a la vez su cuadrado pecho contra el mio. Mi cuerpo enseguida siente su calor invadirme, pasando incluso el frío que me ha dejado la lluvia- Si noté tu ausencia. ¿Así que te gusta escaparte? -Murmura contra mi oído. Suelto una maldición interna; ese es mi punto débil.
- No me quería quedar sola. No son los únicos con derecho salir de ésta casa de vez en cuando. -Reprocho, mirándolo directamente a los ojos. Niall sonríe.
- Yo me quedaría todo el día aquí sin problemas. Sí estás tu, claro; sino sería aburrido. -Entonces noto su mano en mi mentón, acariciando suavemente mi mejilla en un ritmo suave.
Ambos nos miramos por unos segundos, porque incluso allí, en la oscuridad, sus ojos son demasiado atrapantes. Quiero besarlo. Quiero besarlo y hundir mis dedos en su cabello rubio ahí mismo, pero justo cuando ese glorioso pensamiento cruza mi mente, unos pasos en el pasillo nos pillan desprevenidos. Como si alguien hubiera presionado un botón, ambos nos levantamos. Empujo a Niall hacia el baño, cerrando la puerta de un tirón y me dirijo hacia el armario. Saco la primera pijama que encuentro y me cambio lo más rápido que puedo, confiando en que Niall no está viendo y sigue con la puerta cerrada. Apenas tengo tiempo de descalzarme cuando Simon abre la puerta y enciende la luz de la habitación.
- Creí escuchar algo. -Dice, mirándome con confusión. Yo me encojo de hombros.
- Quizás escuchaste la puerta del baño; me estaba duchando. -Respondo con naturalidad, mostrando un mechón de mi cabello mojado.
- Eres extraña, ________. -Murmura antes de echar un vistazo a la habitación y agrega:- Que pases buenas noches.
Espero a que Simon cierre la puerta para soltar un suspiro enorme de alivio y me dirijo a la puerta del baño para abrirla. Niall me mira con expresión divertida en el rostro, como si todo aquello fuera de lo más cómico para él.
- ¿Qué te divierte tanto? -Le reprocho, dándole un pequeño golpe en el hombro. El se rie por lo bajo.
- Lo cerca que estuvo eso. -Me responde.
- Pensé que la primera regla que te dijo Simon es que tienes prohibido siquiera tocarme. -Le digo, mirándolo con el ceño fruncido pues el sigue sonriendo.
- No me importa romper las reglas; en especial esa. -Me dice, acercándose peligrosamente hacia mí, pero la adrenalina ya se me ha pasado y estoy realmente cansada para analizar todo lo que está pasando. Me hago a un lado y señalo la puerta de la habitación.
- Gracias por cubrirme Niall. Ahora, sal de aquí, ¿Sí? Estoy muy cansada y... -El me interrumpe, abrazándome. Pero no un abrazo soso cualquiera. Sino que me rodea con sus brazos, me jala suavemente hacia él y me mantiene así unos segundos.
- Si vas a escaparte otra vez, llévame contigo, por favor. -Susurra con suavidad antes de alejarse y darme un beso en la coronilla- Buenas noches.
Última edición por Letswalkinthesun el Mar 13 Ago 2013, 12:37 am, editado 1 vez
Letswalkinthesun
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
siguela porfavor ese niall como que medio acosador nos salio no... sigue
tortugitastyles
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
-"Si vas a escaparte otra vez, llévame contigo, por favor. -Susurra con suavidad"
Amé eso :') fue muy tierno, y a la vez parecía que se lo suplicaba, no lo sé. Ame mi aparición *www* Enserio, fue kjdlkfjlsdjflsjsl no sé describirlo con palabras perfectas, pero me encantó, Nia. jdfnhldsfjlsfjlsfjs ¡Yehi! mañana ____ y yo nos volveremos a ver XD. ¿A quien llevará? :o ¿De que "lugar" hablarán Simon y Niall? :o. Estúpida rayita :c ¿por que no lo besaste? ¡En fin! Amo está novela :'). Apenas subiste esté capitulo, y ya quiero otro ._.' Soo *Inserte falso acento británico aquí* ¡SIGUELA!. Te mando un abrazote.
Aly, cambió y fuera.
Amé eso :') fue muy tierno, y a la vez parecía que se lo suplicaba, no lo sé. Ame mi aparición *www* Enserio, fue kjdlkfjlsdjflsjsl no sé describirlo con palabras perfectas, pero me encantó, Nia. jdfnhldsfjlsfjlsfjs ¡Yehi! mañana ____ y yo nos volveremos a ver XD. ¿A quien llevará? :o ¿De que "lugar" hablarán Simon y Niall? :o. Estúpida rayita :c ¿por que no lo besaste? ¡En fin! Amo está novela :'). Apenas subiste esté capitulo, y ya quiero otro ._.' Soo *Inserte falso acento británico aquí* ¡SIGUELA!. Te mando un abrazote.
Aly, cambió y fuera.
Invitado
Invitado
Re: - Fix me. {Niall Horan&Tú} -Hot-
oh my gash. Hay Dios Stef, tu quieres matarme. ¿como escribes tan perfecto? ¿como? ¿como? ok ya. Hay Dios es que estoy como en momento de shock. Haber, ¿porque diablos rayita no beso a Nialler? Yo me lo violo :aa: Ese Nialler, anda de coqueto*.* Pero aún es taaaaan tierno, ow' lo ultimo me mato, enserio. Fue tan romántico. Tenes que seguirla Stef. ¡Besos!
Invitado
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