Re: Lazos de sangre 2 [Zayn Malik, Harry Styles y Tú] TERMINADA

por **Harriet** Lun 29 Jul 2013, 6:24 pm

Ya se, la parte anterior la hize más corta, perdón es que no me di cuenta ya hasta ahorita que no organize bien las partes,

por **narrysgirl** Lun 29 Jul 2013, 6:38 pm

¡TIENE QUE LLEGAR ZAYN A SALVARLOS!

por **Chloe** Lun 29 Jul 2013, 6:42 pm

nooooo wow no pueden dejar a Liam , zayn salva a rayis aunque sea que vengas en traje pero salvarla zayn por el amor de dios

por Invitado Lun 29 Jul 2013, 6:52 pm

NO ME DEJES ASIIIIIIIIIII :wut:
DALE DALE, SIGUE XDDD MAMEEH.

por Invitado Lun 29 Jul 2013, 6:53 pm

OH *llora como María Magdalena*
Ya se acabó el capi...
*se va por la rebanada de pan*
Gracias por subir mujer, te amo ♥

por **Vikilita** Lun 29 Jul 2013, 7:00 pm

Necesito que llegue Zayn dios QUE NO PUEDE SENTIR TODO ESO? No quiero que maten a Liam dios! Esto es malo no es justo malditos vampiros aaaaggg y Harry tampoco en verdad aa esos vampiros de pacotilla que según la protegen no están sirviendo de nada
Louis no c donde con Harry y Zayn no c donde con no ce quien los tres haciendo no c que y Liam apunto de morir o matar a su hermana hay definitivamente esto es malo la tienes que seguirrrr

por **Cony'.** Lun 29 Jul 2013, 7:28 pm

Lazos de sangre 2 [Zayn Malik, Harry Styles y Tú] TERMINADA - Página 34 1857533193

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¡Vamos Li! tu puedes contra ese desgraciado.
Síguelaaaaaa

por **AnnaMacias** Lun 29 Jul 2013, 9:21 pm

¡Perdóname la life!

En serio. Te lo juro, no fue mi intención de no pasar por tu novela. Es solo que me di cuenta de que Un amante de ensueño es algo así como una saga?) Y tiene veinte libros, muy buenos y románticos todos. Entonces me puse a leer como loca y ya llevo los tres primeros y obviamente el primero que es UN AMANTE DE ENSUEÑO.

También porque tenía prueba de mate. Tenía que actualizar mis novelas y además de todo me fui a una reunión familiar por la nueva casa de mi tía (no jodas, hay tanto espacio que me puedo secuestrar a One Direction y a los gemelos Harries y esconderlos ahí) Hahaha. Entonces estuve muy ocupada.

Olivia me encanto, superprotectora. ¿Que puedo decir de Hector y Violet? ¡A la mierda con esos dos! Me encanta. Zayn y ___ F&A haha. No sé que decir, lo amo tanto. Busque en internet y me gusto más el nombre original de Eleanor: Mae. Pero supongo que es para tener una cara más fácil de identificar.

Te quiero.

Besos aplastantes por aguantarme.

por **Aislinn** Lun 29 Jul 2013, 9:45 pm

INSISTO PORQUE SON ASI ??AGG SUERTE QUE IBAS CON LIAM Y CHARLOTTE JAJAJAJA SEGUILA ELY

por **TheExistenceUniverse** Lun 29 Jul 2013, 9:47 pm

Esto esta demasiadi bueno como para quedar asi. Conoces la serie El barco? es de ese pais que descubruo america( te diria el nombre pero no me deja escribir la letra que va despues de la N, estupidos teclados peque.os).

por **Harriet** Lun 29 Jul 2013, 10:01 pm

AnnaMacias escribió:
¡Perdóname la life!

En serio. Te lo juro, no fue mi intención de no pasar por tu novela. Es solo que me di cuenta de que Un amante de ensueño es algo así como una saga?) Y tiene veinte libros, muy buenos y románticos todos. Entonces me puse a leer como loca y ya llevo los tres primeros y obviamente el primero que es UN AMANTE DE ENSUEÑO.
También porque tenía prueba de mate. Tenía que actualizar mis novelas y además de todo me fui a una reunión familiar por la nueva casa de mi tía (no jodas, hay tanto espacio que me puedo secuestrar a One Direction y a los gemelos Harries y esconderlos ahí) Hahaha. Entonces estuve muy ocupada.
Olivia me encanto, superprotectora. ¿Que puedo decir de Hector y Violet? ¡A la mierda con esos dos! Me encanta. Zayn y ___ F&A haha. No sé que decir, lo amo tanto. Busque en internet y me gusto más el nombre original de Eleanor: Mae. Pero supongo que es para tener una cara más fácil de identificar.
Te quiero.
Besos aplastantes por aguantarme.

No te preocupes, ¿me creerias si te digo que justamente me estaba acordando de tí? pero pensaba en tí aun con la foto de la chava con el cabello morado no con la de lilly collins xdé.
Sí yo también el otro día que te hable de Un amante de ensueño vi en wikipedia qué tenia bastantes libros, es una saga con todos esos libros pero cada libro creo es una historia diferente, personajes diferentes & asi.
Hahaha omg ya tienes ya ahora donde esconderlos XD.
JAJA los amaras después por lo mismo de que son bien molestosos XD, bueno yo digo, porqué si ellos no anduvieran molestando no pasarían las cosas que pronto pasaran.
#TeamZayn :D
jskdjskdjsls sí es bonito. hace ratos casí se me pasa algo, estaba respondiendo y yo puse "Eleanor y Ezra" se me paso el nombre original, & yo debía poner Louis jaja,
Son Jack: Zayn, Peter: Harry, Ezra: Louis, Mae: Eleanor, Milo: Liam, Jane: Charlotte, Alice: _____ {XD}, Jordan: Niall.
Ya los de olivia, violet y lucian {hector aunque el diga que lucian XD} ya decidi no cambiarlos.
SJDKSJDKS no vallas a leer las sinopsis de la tercera ni la cuarta porqué ya no tendría chiste XD

Yo también te quiero, cuidate mucho& Besos <3.

por **Harriet** Mar 30 Jul 2013, 8:04 am

chicas me voy a la playa hoy con mi familia paterna así que llegare tarde xdé y ya mejor de una vez subo el capítulo. primera vez que no lo subire en partes jaja.

Capítulo 19

Charlotte cerró las puertas con seguro. Me deslicé por el asiento hasta apoyar la espalda contra la ventanilla opuesta a aquella a través de la cual Violet se había quedado mirándonos.
Charlotte se acercó a mí, y cuando Violet empezó a aporrear la ventanilla con las palmas de las manos, ambas nos pusimos a chillar. Estábamos al borde de la histeria; si Violet continuaba golpeando el cristal con su fuerza sobrehumana, tardaría muy poco en romperlo y tenernos al alcance de la mano.
Liam la apartó de la ventanilla de un golpe y me fijé en que el coche aparcado junto al nuestro tenía una abolladura. No se veía a Lucian por ningún lado, pero Liam tenía el torso lleno de sanguinolentos arañazos. Dio unos golpes en la ventanilla para que quitáramos el seguro, y Charlotte se inclinó para hacerlo.
Liam abrió la puerta del coche y Violet se abalanzó sobre él. Le mordió el cuello con sus afilados incisivos. Liam la apartó de un empujón y Violet cayó dando tumbos en el suelo. Mi hermano ocupó acto seguido el asiento del conductor y cerró de nuevo las puertas con seguro. Tenía sangre en el cuello y me dio la impresión de que ni siquiera se había dado cuenta de ello.
— ¡Estás sangrando! —dijo Charlotte, sofocando un grito.
—Dame las llaves —dijo Liam, a la vez que le tendía la mano. Violet se lanzó contra el parabrisas y aporreó el cristal con los puños. Me miró fijamente con sus enloquecidos ojos morados y me enseñó los dientes con toda su intención.
— ¡Sácanos de aquí! —gritó Charlotte en cuanto le hubo pasado las llaves a mi hermano.
Liam puso el coche en marcha y salió de allí como un rayo. Violet salió proyectada contra el suelo y no tengo ni idea de dónde aterrizó. El coche salió del aparcamiento con un rechinar de neumáticos, obviando el tráfico; todo el mundo fue abriéndonos paso hasta que por fin nos adentramos en la noche.
No íbamos en dirección a casa, ni hacia la de Liam ni hacia la mía, pero, por el modo en que miraba constantemente por el retrovisor, adiviné que sus motivos tendría para haber elegido aquel trayecto.
Enfilamos la carretera a toda velocidad y Charlotte debió de sentirse lo bastante segura como para separarse de mí. Yo seguía pegada a la puerta. Echó un vistazo a mi maltrecho vestido y, sin preguntármelo siquiera, me arrancó la mitad inferior de la falda. Hizo una bola con el tejido y taponó con la tela la herida que Liam tenía en el cuello. Mi hermano se apartó al sentir el contacto.
—Sólo pretendo detener la hemorragia para que no mueras desangrado —dijo Charlotte, dolida.
—Estoy bien —le soltó Liam, clavando de nuevo la vista en el retrovisor.
— ¿Nos siguen? —le pregunté.
—No lo sé. No lo veo, pero no logro imaginarme que se dé por vencido. —Sus palabras eran más ciertas de lo que me gustaría y tuve que tragar saliva para no vomitar.
—Pero ¿qué pasa? —preguntó Charlotte. Seguía con la cabeza asomada entre los dos asientos delanteros y presionando el trapo contra el cuello de Liam.
—Es complicado de explicar —dije.
Me hundí en el asiento para que no pudieran verme desde el exterior, aunque estaba segura de que Lucian había tomado buena nota del coche. Y en el caso de que no lo hubiera hecho, podía identificar perfectamente a Liam conduciendo.
Rasgué un pedazo más de mi falda para presionarlo sobre la herida de mi rodilla y los arañazos que me había dejado Violet en las piernas, intentando evitar que el olor a sangre inundara el coche. Me habría gustado bajar la ventanilla, pero me aterrorizaba la posibilidad de que pudiera entrar cualquier cosa por ella.
— ¡Parecían vampiros! —dijo Charlotte, y me falló el corazón por un instante. Mi mirada se cruzó con la de Liam en el espejo retrovisor: ninguno de los dos sabía cómo abordar ese tema—. ¿Ustedes vieron los colmillos que tenía esa chica? ¿Y esos ojos de loca? Seguro que se había tomado algo.
—Sí, probablemente —dije en seguida.
— ¿Qué querían de ustedes, chicos? Parecían un par de obsesos. —Charlotte se quedó mirándome, a la espera de que le proporcionara respuestas, pero evité su mirada y negué con la cabeza. —No tengo ni idea. —Tragué saliva, pues lo que acababa de responder no era exactamente una mentira.
—Tienen que llamar a la policía o hacer algo —dijo Charlotte—. O como mínimo ir al hospital. Estás lleno de...
Se quedó con la mirada fija en el pecho de mi hermano y comprendí que se sentía embargada por aquella extraña sensación, mezcla de confusión e incredulidad, que experimenté yo cuando vi que las heridas de Zayn se esfumaban. Quedaban aún rastros de sangre, una prueba de que no se había vuelto loca, pero los cortes habían desaparecido.
Retiró el trapo del cuello y sofocó un grito. Allí donde debería haber un tajo enorme sólo había un poco de piel levantada y sonrosada, similar a una cicatriz reciente.
— ¿Cómo lo has hecho? ¿Cómo has podido hacer eso? —Charlotte estaba temblando y blanca como el papel.
—Mírame, Charlotte —dije—. Mejor que no lo sepas.
— ¡Pues claro que quiero saberlo! —insistió ella, aunque parecía que iba a echarse a llorar de un momento a otro—. ¿Se encuentran bien? ¿Ustedes son... normales? —preguntó Charlotte.
Separé el trapo de mi rodilla para enseñarle mi ensangrentada herida. —Sigo siendo yo. ¿No te parece? No he cambiado en nada —dije, en un intento de tranquilizarla. Asintió y se recostó en el asiento a mi lado.
Aquello serviría de consuelo por el momento. O eso me imaginé.
Entonces Charlotte se volvió para mirarme y vi que tenía los ojos llenos de lágrimas. Con dedos temblorosos, se apartó un mechón de pelo que le caía en la cara y con un hilo de voz, susurró: —Son vampiros, ¿verdad?
—Hay cosas que es mejor no saber —dije. Se mordió el labio y asintió, un gesto que no supe muy bien si tomarme como un sí.
—Me gustaría que Zayn estuviese aquí —dijo Liam, pasándose la mano por su pelo oscuro.
—Creo que eso nos gustaría a todos —dije.
—Me refiero a que sé que puedo cuidar de mí mismo, pero protegeros a las dos... —Se interrumpió—. No sé. Creo que no estoy preparado.
La verdad era que me sentía bastante segura viajando a toda velocidad por la autopista en el asiento trasero de un coche con todos los seguros cerrados. Pero Liam tenía razón. Charlotte me cogió la mano y me la apretó con fuerza. Si era mi mejor amiga, era por algo.
A pesar de todas sus carencias, Charlotte acababa de salvarme la vida y me permitía guardar mis secretos cuando yo más lo necesitaba. Eran puntos a su favor.
—De acuerdo. Veamos. Éste es el plan. Ahora daremos unas cuantas vueltas en coche. Cuando crea que estamos seguros o estemos a punto de quedarnos sin gasolina, iremos a mi casa. Y Eleanor sabrá qué tenemos que hacer —decidió Liam.
Me entraron temblores y mi adrenalina se agotó dolorosamente. Liam seguía alternando la mirada entre la carretera y el espejo retrovisor, mientras que Charlotte consiguió tranquilizarse al cabo de un rato. Descansó la cabeza sobre mi hombro y yo, continué mirando por las ventanillas, preguntándome constantemente si los coches que nos adelantaban estarían llenos de vampiros sedientos de sangre.
Cuando empecé a notar el agotamiento, empecé también a sentirme insegura. Por un lado no confiaba en poder permanecer despierta, pero por el otro no sabía qué ocurriría si me quedaba dormida. Busqué el teléfono que guardaba en el interior del sujetador, el único lugar donde podía ubicarlo si salía de marcha con un simple vestido.
« Tienes que volver a casa. En seguida. Creo que tenemos problemas », le escribí a Zayn. Ahora, sólo nos quedaba esperar.
Al final, Liam se detuvo a repostar gasolina y Charlotte se despertó al intuir la falta de movimiento. Antes de salir, Liam nos ordenó que, pasara lo que pasase, permaneciéramos dentro del coche con las puertas cerradas.
Se acercó a la parte trasera del coche, abrió el maletero y extrajo una camiseta que llevaba guardada allí. Le iba un poco grande y tenía un estampado horrendo de dinosaurios, por lo que imaginé que sería de Zayn.
Después de haber visto a mi hermanito atacar a un vampiro, lanzarlo contra el coche aparcado junto al nuestro con tanta fuerza que le había dejado incluso una abolladura del tamaño de un cuerpo, ya no me sentía tan nerviosa por él. Liam era fuerte y lo bastante inteligente como para intuir que con aquello no había bastado.
La luz blanca de los fluorescentes de la gasolinera hacía difícil adivinar si empezaba ya a clarear. No lo sabía, pues cuando paramos estaba medio adormilada. Las calles estaban desiertas y la gasolinera estaba aún cerrada, por lo que Liam tuvo que pagar directamente en el dispensador.
En el aparcamiento había un semirremolque estacionado y por la carretera acababa de pasar un todoterreno al que sólo le funcionaba una de las luces delanteras. Vi también pasar un chico andando que, a pesar de que debíamos de estar a más de veinte grados, iba vestido con una gigantesca sudadera con capucha. Por lo demás, estábamos solos.
Le solté la mano a Charlotte para echar un vistazo alrededor del coche. Era imposible que aún estuvieran siguiéndonos, por muy vampiros que fuesen. Llevábamos no sé cuánto rato dando vueltas a toda velocidad por el área metropolitana, por lo que a pie no podían habernos seguido y tampoco veían más coches.
Liam golpeó la ventanilla para que quitáramos el seguro y pudiera entrar. Charlotte dio un respingo. Bajo aquella luz tan destemplada, mi hermano se veía blanquísimo. Al abrir la puerta del coche, me di cuenta de que le temblaban las manos y cuando lo miré a los ojos a través del espejo retrovisor, capté una mirada de desesperación. A pesar de que el aire acondicionado funcionaba al máximo y yo estaba congelada, Liam tenía el cuello empapado en sudor.
—Creo que ha pasado el peligro —le dije.
No replicó, pero la tensión que aprecié en su mandíbula me dio a entender que estaba apretando los dientes. Observé el nerviosismo de sus ojos, su respiración dificultosa. Puso el coche en marcha con cierta brusquedad y el motor rebuznó a modo de protesta. Se tensó entonces su cuerpo y la vena del cuello despuntó. Aquello me llevó a pensar en un yonqui que necesita su dosis.
— ¿Estás bien, Liam? —le pregunté, viendo que se esforzaba por controlarse.
No sabía siquiera cómo había logrado aguantar tanto tiempo. Tal vez el hecho de salir del coche y darse cuenta de que todo iba bien había puesto en marcha sus demás sentidos y sólo entonces se había percatado de lo hambriento que estaba.
—He perdido sangre, _____, y la adrenalina me ha ayudado hasta ahora —dijo entre dientes—. Pero si me contengo mucho más tiempo, será peligroso.
— ¿De qué habla? —preguntó Charlotte, mirando a Liam a los ojos a través del retrovisor—. ¿Te encuentras bien? —Él la miró y me di cuenta de que la respiración de Charlotte experimentaba un cambio y se volvía más profunda y sensual.
—No, Liam, volvamos a tu casa —dije. Me había sujetado en el reposacabezas del asiento del acompañante y me dolían los dedos de la fuerza que estaba aplicando.
Ignorándome por completo, Liam puso el coche en marcha. Pero en lugar de incorporarse a la carretera, se dirigió hacia la parte posterior de la gasolinera, que quedaba oculta y estaba completamente oscura. Buscaba un lugar recogido y, cuando vi que aparcaba el coche, se me erizó el vello de la nuca.
—Liam, vamos. Hay otras maneras —le supliqué, pero ya se había decidido. La sensación de hambre era demasiado fuerte como para ignorarla.
—Cállate, _____ —me dijo Liam en voz baja. Me miró fijamente un instante; sus ojos reflejaban la sed primitiva que sentía, no transmitían absolutamente nada más—. Cierra los ojos. O sal, si lo consideras necesario. Será tan sólo un minuto.
—Y entonces miró fijamente a Charlotte, que lo observaba con una estúpida expresión de adoración—. ¿Confías en mí, Charlotte?
—Sí —dijo con un gesto afirmativo, como un zombi descerebrado.
Se volvió hacia Charlotte y le puso la mano en el cuello, le acarició las venas unos segundos con el pulgar. Y de repente, se abalanzó sobre ella. A pesar de estar ladeado entre ambos asientos, le clavó los dientes en el cuello con una velocidad pasmosa.
Charlotte aspiró con fuerza, y oí el sutil sonido de la carne al desgarrarse. Cerré los ojos y apoyé la espalda en la puerta, alejándome todo lo posible de la escena. Charlotte gimió, mientras que lo único que yo deseaba era llorar, gritar o romper a reír.
Aquello empezaba a parecerme una eternidad, aunque estoy segura de que no fue así. Me había quedado en el coche porque quería asegurarme de que Liam no llegara demasiado lejos. Abrí los ojos y, sin saber cómo había acabado así, aunque supongo que como resultado de la necesidad refleja de salir corriendo de allí, me encontré de pie en el asiento: agazapada, con las rodillas dobladas, la espalda pegada a la ventanilla y la cabeza contra el techo.
Charlotte tenía los ojos en blanco pero la oía gemir, una clara indicación de que seguía con vida.
Liam tenía los dedos enredados en su cabello para mantener el cuello pegado a su boca. Estaba de espaldas a mí, razón por la cual me resultaba imposible verle la cara, pero sí atisbaba la posición de su boca, la sangre derramándose.
La única imagen que me venía a la cabeza era la de un perro hambriento devorando un mapache muerto en la cuneta. El perro sujetaba la pata con su boca del mismo modo que Liam le sujetaba el cuello a Charlotte.
—Ya está bien, Liam, ya es suficiente —dije con una vocecita que en nada se parecía a la mía.
A mí me habían mordido, pero ver a un vampiro morder a una persona era algo completamente distinto. Resultaba aterrador y asqueroso.
Y mientras Liam comía, se me hizo patente por vez primera que los vampiros no eran humanos. Tal vez poseyeran el aspecto y cierta apariencia de humanidad, pero aquello —mi hermano— alimentándose de Charlotte, aquello era puramente animal.
— ¡Liam! ¡Para! —repetí. Charlotte parpadeó y su respiración se volvió más superficial. Estaba perdiendo el conocimiento y la muerte no tardaría mucho en llegar—. ¡Liam ¡Estás matándola! ¡Para! ¡Para!
Viendo que no paraba, y a pesar de estar muerta de miedo, decidí que tenía que acer alguna cosa. Probé a darle unos delicados golpecitos en el hombro imaginándome que Liam, igual que haría un lobo en su lugar, se volvería bruscamente y me arrancaría la mano entera.
Viendo que no se daba cuenta de nada, volví a darle, con más fuerza en esta ocasión. Y de nuevo, y una vez más, hasta que soltó por fin a Charlotte y se dejó caer en su asiento.
Charlotte se derrumbó también en su asiento, golpeándose la cabeza contra la puerta, gimoteando. Liam tenía los ojos cerrados y parecía que estuviese maravillosamente colocado después de haberse drogado.
Sin apenas darse cuenta, se limpió con el dorso de la mano la sangre que le había quedado en los labios y murmuró alguna incoherencia. Sus facciones se habían dulcificado y parecía mucho más joven. Tenía la cabeza apoyada en el asiento y miraba hacia mí, pero estaba prácticamente inconsciente.
— ¿Charlotte? —Me incliné hacia ella y le di unas palmaditas en las mejillas con la intención de espabilarla. El mordisco del cuello mostraba ya el tono rosado de una cicatriz, lo que probaba que el proceso de curación se había iniciado. Le di más palmaditas, pero Charlotte respondió apartando la cabeza.
— ¿Charlotte? ¿Estás bien? ¿Me oyes? ¿Charlotte? —Me dio un débil golpe en la mano, en un intento de apartarme de su lado.
Me dejé caer en mi asiento, con la espalda pegada a la fría ventanilla, y fue entonces cuando por fin rompí a llorar. Había estado a punto de morir en manos de un par de vampiros. Charlotte y yo estábamos llenas de arañazos que demostraban que Violet había estado a un paso de acabar con nosotras aquella noche.
Había sobrevivido, pero sólo para ver a mi hermano planteándose matarnos a las dos, aunque al final hubiera tomado la decisión de alimentarse sólo de Charlotte. Estaban ambos sin conocimiento y yo era el único ser consciente en el interior de un coche cerrado a cal y canto y aparcado en la parte trasera de una gasolinera en plena noche.
Y no teníamos ni idea de qué había sido de nuestros perseguidores.
—_____, _____ —murmuró Liam sin abrir los ojos—. No llores. Estamos... —Se interrumpió y alargó el brazo en dirección a mí, pero antes de que su mano entrara en contacto conmigo, la dejó caer.

por **Harriet** Mar 30 Jul 2013, 8:29 am

Chicas, después contesto sus respuestas, besos.

por **acebedo_13malik** Mar 30 Jul 2013, 9:10 am

:gasp: Ahhhhhh qque o quien sera yo creo que es zayn aahy tia sigulaaaa que muero besos wapa

por **narrysgirl** Mar 30 Jul 2013, 9:49 am

D-; ¿cómo le pudo hacer eso a la pobre charlotte? cada vez se pone más buena, síguela<3.

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