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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
Julia Pérez 1D escribió:SIGUELA. AMO TU NOVELA
me alegro que ames la novela ejejeje la sigo ahora <3 bye
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
la sigo ahora <3 byeAbii Meza escribió: seguila :bye:
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
mari2900 escribió:siento comentar tarde esk el chsime este no iba bien ejjejeejej pero estoy aki y con cara de WHAT??????? pero pero pero aber esta buenisima la novela me estoy carcomiendo la cabeza pensando en k pasara y lo k me pregunto yo xk harry no ace divorcio expres y se keda con rayis agagaggaahahhahhghg claro esk seguira keriendo a la otra buffffffffffffffff jajajajj estoy loca tu niñita buena se le a ido la cabeza con tu novela jejeejej bueno espero con muchiiiiiiiiiiiisiiimasssssss ansias el proximo capitulo jeejejejeej besosssssssssssssss mari
no te preocupes jejejee lo que vale es que comentase jejeje me alegro muchísimo que te guste la novela, yo también me preguntaba lo mismo "un divorcio express" jejejeje ya mi niña buena la sigo ahora para que no quedes con la duda beshoooooooooooooooooooooos xxx:michelle
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
Capítulo 23
La mañana siguiente me devané los sesos pensando en qué podría ponerme esa noche. ¿Algo elegante o simplemente casual?
¿Esto era una cita? ¿Dónde nos encontraríamos? ¿A qué hora? ¿Debo depilarme por precaución?
Ya. Cálmate. Respira. Empecemos la mañana de buena manera.
Tomé unos pantalones de gimnasia y zapatillas deportivas.
Una camiseta blanca ajustada, un sweater azul oscuro dos tallas más grande y el cabello atado.
Perfecto.
Tomando mi IPod y auriculares bajé las escaleras.
-¿Vas a algún lado?- preguntó mi madre mientras tomaba su café.
Tomé una botella de agua del refrigerador.
-Iré a correr.
Ella me miró, desconcertada.
-¿Desde cuándo lo haces?
-Desde hoy- dije tajante intentando acabar con la absurda conversación.
Ella asintió y continuó viendo las noticias en el comedor.
Vaya… ésta vez ni te molestaste en fingir interés, mamá.
(…)
Luego de dos kilómetros, me detuve de a poco, respirando agitada.
La temperatura era algo fría pero me sentía realmente genial. Había hecho una buena elección a escoger aquel inmenso parque. El ambiente era fresco, y el aire inusualmente puro.
__________ Liejett haciendo ejercicio. Eso no es algo que pase todos los días.
Había decidido empezar a hacer lo que Harry me había dicho la noche anterior. Quizá si mis padres veían que se me tornaba una rutina esto de salir a hacer algo de ejercicio, podría tener más excusas para volver temprano a casa de la noche anterior.
Al llegar, tomé una larga y relajante ducha demasiado necesitada de mi parte.
El agua caliente relajó todos mis músculos, y mis nervios en sí.
(…)
{Narra Harry}
-No puedo creer que tengas el apodo de inocente, maldito suertudo. ¡Te la tirarás ésta noche!
Solté un bufido y coloqué los dos álbumes de fotos dentro de la caja color madera.
-No hables de ella como si fuera un objeto, Zayn- me quejé ante la mirada del ojimiel.
-Cálmate rizos, estoy seguro que _________ tiene más funciones que un simple objeto- dijo lascivamente.
-¡Zayn!- gruñí y él soltó una risita.
Decidí ignorar sus comentarios poco apropiados acerca de __________, y continuar con el trabajo, pero mi mente se vió eclipsada en pocos segundos.
Era ella, sus besos la noche anterior… su manera de ser.
¿Qué es lo que tiene que me vuelve loco, desenfrenado y tan increíblemente celoso?
Tomé mi celular para fijarme la hora. En treinta minutos debería estar frente a la academia para entregar las fotos.
-Toma la otra caja y llevémoslas al auto- le dije al moreno que asintió mientras le daba una última calada a su cigarro.
Mientras revisaba los mensajes se me ocurrió una idea.
Fui a la lista de llamadas y lo encontré.
El número de ____________ había quedado grabado en mi teléfono tras la llamada de Marcie anoche.
La agregué a mis contactos como “Perdición”. Sin rastros de ironía.
« ¿Quieres que pase por ti o nos encontramos en algún lugar?» tecleé mientras Zayn se ponía al volante.
Cinco minutos después, el sonido me sacó de mis cavilaciones.
«Disculpa, ¿quién eres?»
Oh oh, había olvidado avisarle que era yo.
«Adivina» propuse.
« ¿Harry?»
¿Cómo diablos adivinó tan rápido?
« ¿Cómo supiste?» le envié.
«Eres el único que me diría “adivina”. Respondiendo a tu pregunta, nos encontramos en Anacks xx»
« ¿A qué hora?»
No recibí respuesta y eso me perturbó.
Luego de unos minutos, opté por llamarla bajo la atenta escucha de Zayn.
-Qué desesperado eres- dijo ella al otro lado de la línea soltando una risita.
Eso me alivió.
-Pues respóndeme.
-Luego de mi turno en Anacks me voy contigo, ¿bien?
-¿Seguirás bailando luego de que te pedí que no lo hicieras? ¿O sólo yo seré tu cliente?
-Sí a la primera, y ya veremos a la segunda- murmuró y supe que estaba sonriendo.
-Eres intratable, Liejett- me quejé sin poder evitar una sonrisa.
-Me lo han dicho, deberás acostumbrarte- dijo ella animada. –Debo irme, nos veremos ésta noche, cuídate y no te diviertas sin mí, ¿bien?
Sonreí una vez más.
-Por supuesto, señorita.
Ella rió otra vez, y se escuchó un sonoro “mwah” del otro lado.
Corté la comunicación y observé el camino.
¿En qué momento llegamos a la academia?
-Así que… ¿le pediste que no bailara para otros hombres?- preguntó Zayn asombrado mientras desabrochaba su cinturón de seguridad.
-No es de tu incumbencia- dije secamente.
-Oh vamos, nunca me cuentas nada. Detesto que seas tan reservado.
Suspiré.
-Me molesta que baile para otros, es decir,…
-¿Ustedes están saliendo?- me interrumpió. Negué con la cabeza. -¿Entonces porqué debería molestarte? No tienen ningún compromiso ni nada.
Arqueé una ceja.
-Vaya aliento que me das- dije sarcásticamente.
-No te ofendas amigo, pero es la realidad. No creo que ___________ se amarre a nadie. Ella no es así.
-¿Y cómo sabes tú tanto de ella?- cuestioné más molesto de lo que pretendía.
-Simplemente es lógico, es una stripper, quiero decir… Viene de una familia con mucha pasta, es plenamente consciente de que cualquiera moriría por ella, es joven y talentosa, ¿para qué querría una relación seria?
Aquello me destrozó de mil maneras diferentes. Zayn tenía razón. ___________ tenía todo lo que deseaba y más de lo que yo podía otorgarle.
Pero… ¿por qué me preocupaba aquello? Yo fui desde un principio el que pensó que sólo sería algo casual.
“Dejémoslo fluir” había dicho.
¿Por qué la idea de alejarme de ella se me hacía tan dolorosa?
¿Sí esto no llegara a funcionar?
La mañana siguiente me devané los sesos pensando en qué podría ponerme esa noche. ¿Algo elegante o simplemente casual?
¿Esto era una cita? ¿Dónde nos encontraríamos? ¿A qué hora? ¿Debo depilarme por precaución?
Ya. Cálmate. Respira. Empecemos la mañana de buena manera.
Tomé unos pantalones de gimnasia y zapatillas deportivas.
Una camiseta blanca ajustada, un sweater azul oscuro dos tallas más grande y el cabello atado.
Perfecto.
Tomando mi IPod y auriculares bajé las escaleras.
-¿Vas a algún lado?- preguntó mi madre mientras tomaba su café.
Tomé una botella de agua del refrigerador.
-Iré a correr.
Ella me miró, desconcertada.
-¿Desde cuándo lo haces?
-Desde hoy- dije tajante intentando acabar con la absurda conversación.
Ella asintió y continuó viendo las noticias en el comedor.
Vaya… ésta vez ni te molestaste en fingir interés, mamá.
(…)
Luego de dos kilómetros, me detuve de a poco, respirando agitada.
La temperatura era algo fría pero me sentía realmente genial. Había hecho una buena elección a escoger aquel inmenso parque. El ambiente era fresco, y el aire inusualmente puro.
__________ Liejett haciendo ejercicio. Eso no es algo que pase todos los días.
Había decidido empezar a hacer lo que Harry me había dicho la noche anterior. Quizá si mis padres veían que se me tornaba una rutina esto de salir a hacer algo de ejercicio, podría tener más excusas para volver temprano a casa de la noche anterior.
Al llegar, tomé una larga y relajante ducha demasiado necesitada de mi parte.
El agua caliente relajó todos mis músculos, y mis nervios en sí.
(…)
{Narra Harry}
-No puedo creer que tengas el apodo de inocente, maldito suertudo. ¡Te la tirarás ésta noche!
Solté un bufido y coloqué los dos álbumes de fotos dentro de la caja color madera.
-No hables de ella como si fuera un objeto, Zayn- me quejé ante la mirada del ojimiel.
-Cálmate rizos, estoy seguro que _________ tiene más funciones que un simple objeto- dijo lascivamente.
-¡Zayn!- gruñí y él soltó una risita.
Decidí ignorar sus comentarios poco apropiados acerca de __________, y continuar con el trabajo, pero mi mente se vió eclipsada en pocos segundos.
Era ella, sus besos la noche anterior… su manera de ser.
¿Qué es lo que tiene que me vuelve loco, desenfrenado y tan increíblemente celoso?
Tomé mi celular para fijarme la hora. En treinta minutos debería estar frente a la academia para entregar las fotos.
-Toma la otra caja y llevémoslas al auto- le dije al moreno que asintió mientras le daba una última calada a su cigarro.
Mientras revisaba los mensajes se me ocurrió una idea.
Fui a la lista de llamadas y lo encontré.
El número de ____________ había quedado grabado en mi teléfono tras la llamada de Marcie anoche.
La agregué a mis contactos como “Perdición”. Sin rastros de ironía.
« ¿Quieres que pase por ti o nos encontramos en algún lugar?» tecleé mientras Zayn se ponía al volante.
Cinco minutos después, el sonido me sacó de mis cavilaciones.
«Disculpa, ¿quién eres?»
Oh oh, había olvidado avisarle que era yo.
«Adivina» propuse.
« ¿Harry?»
¿Cómo diablos adivinó tan rápido?
« ¿Cómo supiste?» le envié.
«Eres el único que me diría “adivina”. Respondiendo a tu pregunta, nos encontramos en Anacks xx»
« ¿A qué hora?»
No recibí respuesta y eso me perturbó.
Luego de unos minutos, opté por llamarla bajo la atenta escucha de Zayn.
-Qué desesperado eres- dijo ella al otro lado de la línea soltando una risita.
Eso me alivió.
-Pues respóndeme.
-Luego de mi turno en Anacks me voy contigo, ¿bien?
-¿Seguirás bailando luego de que te pedí que no lo hicieras? ¿O sólo yo seré tu cliente?
-Sí a la primera, y ya veremos a la segunda- murmuró y supe que estaba sonriendo.
-Eres intratable, Liejett- me quejé sin poder evitar una sonrisa.
-Me lo han dicho, deberás acostumbrarte- dijo ella animada. –Debo irme, nos veremos ésta noche, cuídate y no te diviertas sin mí, ¿bien?
Sonreí una vez más.
-Por supuesto, señorita.
Ella rió otra vez, y se escuchó un sonoro “mwah” del otro lado.
Corté la comunicación y observé el camino.
¿En qué momento llegamos a la academia?
-Así que… ¿le pediste que no bailara para otros hombres?- preguntó Zayn asombrado mientras desabrochaba su cinturón de seguridad.
-No es de tu incumbencia- dije secamente.
-Oh vamos, nunca me cuentas nada. Detesto que seas tan reservado.
Suspiré.
-Me molesta que baile para otros, es decir,…
-¿Ustedes están saliendo?- me interrumpió. Negué con la cabeza. -¿Entonces porqué debería molestarte? No tienen ningún compromiso ni nada.
Arqueé una ceja.
-Vaya aliento que me das- dije sarcásticamente.
-No te ofendas amigo, pero es la realidad. No creo que ___________ se amarre a nadie. Ella no es así.
-¿Y cómo sabes tú tanto de ella?- cuestioné más molesto de lo que pretendía.
-Simplemente es lógico, es una stripper, quiero decir… Viene de una familia con mucha pasta, es plenamente consciente de que cualquiera moriría por ella, es joven y talentosa, ¿para qué querría una relación seria?
Aquello me destrozó de mil maneras diferentes. Zayn tenía razón. ___________ tenía todo lo que deseaba y más de lo que yo podía otorgarle.
Pero… ¿por qué me preocupaba aquello? Yo fui desde un principio el que pensó que sólo sería algo casual.
“Dejémoslo fluir” había dicho.
¿Por qué la idea de alejarme de ella se me hacía tan dolorosa?
¿Sí esto no llegara a funcionar?
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
dios me a ecantado no la dejes asi al final me voy a morir ejjjeje siguela besossssssssssssssss mari
Devon.
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
mari2900 escribió:dios me a ecantado no la dejes asi al final me voy a morir ejjjeje siguela besossssssssssssssss mari
me alegro que te gustara no te mueras please jejeje la sigo ahora beshoooooooooos bye
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
MARATÓN 1° PARTE
Capítulo 24
-Mamá, ésta noche me quedaré en casa de Marcie- le avisé a mi madre mientras terminábamos de cenar. Ella me observó y arqueó una ceja, suspicaz.
Ahora veo de dónde lo heredé…
-¿Marcie? ¿Aquella amiga tuya que luce como una vulgar mujerzuela de cabaret?- dijo ácidamente sin perder la más mínima fracción de gracia y elegancia.
Mi padre se aclaró la garganta.
-Esa misma- dije tranquilamente desafiante.
-No creo que debas seguir juntándote con ella. No es apropiado.
-Te recuerdo que tengo diecinueve años, y puedo elegir mis amistades.
-Y si mal no recuerdo yo, aun vives en ésta casa- me retrucó ella, secamente.
-¿Planeas echarme por tener una amiga que no te agrade? Una madre tan comprensiva… -ironicé.
Al parecer, mi táctica le dio al clavo porque ella suspiró, a modo de rendición.
-¿Cuándo regresarás?
-Mañana por la tarde.
-Más te vale que tengas tu móvil encendido- me advirtió.
¿Quién diablos soy para estar recibiendo su permiso? ¡Tengo la edad suficiente!
(…)
-¡Hoy dormirás con él!- dijo Marcie emocionada y sonriendo frente al espejo. –Oh Dios, ¿estas nerviosa?
Negué con la cabeza, pero fue inútil. No le puedes mentir a tu mejor amiga.
-No estés nerviosa, apuesto a que será muy divertido- bromeó ella y le di un codazo. –No salgas corriendo como lo haces habitualmente.
-Eso es sólo en las exposiciones en la academia, no saldré corriendo en este asunto- le dije sonrojándome.
Al parecer mis nervios irracionales eran un gran tema del que burlarse para Marcie. Malditas sean las amigas.
-Me pregunto que tendrá planeado- dijo curiosa mi amiga, la observé. Yo también me lo preguntaba.
A eso de las once, luego de bailar para un tipo de unos veinte y tantos años, me dirigí a mi receso personal.
En la barra pedí algo de cerveza. Extrañamente, Harry no había aparecido. ¿Se habría olvidado?
Salía por la puerta de empleados al callejón para tomar aire cuando…
-Ésta vez no te me escapas- me dijo alguien al oído y me aparté por reflejo. El olor a alcohol brotaba por todos sus repulsivos poros. –Te saldrá muy caro lo que me hiciste ayer, linda zorra…
Lo observé, fulminante y con asco. ¿Vienes a amenazarme a mí, patético idiota? ¿Justo a mí?
-Pues la de ayer te la merecías, y si no quieres que mi tacón termine enterrado en tu cornea izquierda en este instante, más te vale que te alejes de mí.
-¿Crees que me asustas?- preguntó David riendo. Se secó la boca con la manga de su camisa y luego eructó.
Oh desgraciado, ¿eres un asco de nacimiento o fuiste acumulando puntos con el correr de los años?
Tomé mi celular del bolsillo trasero de mis shorts y marqué el número asignado a marcación rápida. Tom.
-Hola Tom, disculpa por molestarte en tu trabajo- comencé observando la mirada atenta de David al escuchar el nombre masculino. – ¿Recuerdas al idiota del que nos burlábamos el otro día?- hice una pausa. –Oh sí, ese mismo- reí. –Pues, ha estado molestándome últimamente, por eso quería preguntarte… ¿habría forma de qué me ayudarás… uhmm… a alejarlo de mí?
David me observó espantado. Consciente de que Tom era su peor pesadilla, sonreí maliciosamente y luego asentí.
-Gracias Tom, se lo informaré- dije y corté la comunicación. – ¿Quieres que te diga lo que me dijo o prefieres correr ahora?
-¡Eres una perra rastrera!
-Oh… ¿igual de rastrera que tu hermanita menor?- me burlé y él levantó su puño derecho. Al parecer, estaba corto de reflejos porque cuando me moví a un lado ni se inmutó. En un segundo y con ventaja mi rodilla derecha se instaló furiosamente en su ingle.
Un grito agudo me demostró que quizá lo había dejado estéril.
Bien… al menos sus asquerosos espermas no entrarían al banco genético.
Se levantó y se alejó cojeando. Liejett manda. Oh sí.
(…)
A la una de la mañana, ya demasiado cansada para bailar y sin ánimos de quedarme, me senté en una de las mesas lejanas al escenario, con Marcie a mi lado.
-¿Qué pasa, cielo?
-Nada, Harry no ha aparecido en toda la noche.
-¿Ni mensajes ni llamadas?- preguntó sorprendida. Negué con la cabeza y suspiré.
-Se ha olvidado de seguro- apreté los dientes.
No quería pasarme la noche atormentándome con decepción y enojo.
-Puedes venir a casa si quieres- me ofreció Marcie. –Ya que fue eso lo que le dijiste a tus padres…
Sonreí a medias. A veces pienso que todas necesitamos una rubia loca y efusiva que nos saque de quicio como mejor amiga.
-Bueno… -dijo Marcie mirando detrás de mí. –Creo que mejor cancelamos lo de mi casa…
La miré confundida y luego seguí su mirada detrás de mí.
Con su mejor sonrisita de hoy-salgo-con-alguien caminó a través de las mesas hacia nosotras, deliciosamente vestido con un smoking informal de color gris oscuro y el cabello hacia atrás con algo de gel.
Lucía tan… ¿poderoso?
Abrí los ojos como platos cuando llegó a nuestro lado sin preocuparme por disimular que lo estaba mirando de arriba abajo.
«Cierra la boca o babearás» me advirtió una vocecita en mi interior.
-Vaya- fue lo único que dije.
Él sonrió y tomó mi mano sentándose a mi lado.
-¿Qué tal su noche, señoritas?- preguntó tranquilamente mientras con su pulgar acariciaba el dorso de mi mano.
«Hmmm… una caricia tan suave y engañosa.»
-Justo estábamos hablando de ti- dijo Marcie sonriente y lanzándome una mirada cómplice que ignoré. –Así que… ¿a qué se debe que te hayas peinado?- bromeó la rubia y los tres soltamos una carcajada.
-Hoy tengo una cita- le respondió él y guiñó un ojo.
Me sonrojé.
-¿Se puede saber con quién?- preguntó Marcie fingiendo asombro.
-Es una morena, ojos algo verdes, y mirada de manipuladora- comenzó Harry sin siquiera mirarme. –Fuerte temperamento, y caderas de muerte. Es realmente hermosa- concluyó. –Mentira, saldré con ___________.
Marcie estalló en carcajadas y yo me quejé quitando mi mano de la suya y dándole un codazo.
«Conmigo no te vienes a hacer el gracioso, Styles.»
-Oye- se quejó él. –Tus ojos son grises, no verdes. Y no usaría un adjetivo tan básico como “hermosa” para describirte- explicó mirándome a los ojos cálidamente. –Preferiría decir que eres maravillosa.
Me quedé observándola, embobada, con aquel enojo esfumándose.
¿Cómo haces eso, Harry Styles? ¿Cómo me arrastras hasta las estrellas sólo con tu voz o tu mirada?
--
Imaginense a esa como la loca de rayis ^^
-Mamá, ésta noche me quedaré en casa de Marcie- le avisé a mi madre mientras terminábamos de cenar. Ella me observó y arqueó una ceja, suspicaz.
Ahora veo de dónde lo heredé…
-¿Marcie? ¿Aquella amiga tuya que luce como una vulgar mujerzuela de cabaret?- dijo ácidamente sin perder la más mínima fracción de gracia y elegancia.
Mi padre se aclaró la garganta.
-Esa misma- dije tranquilamente desafiante.
-No creo que debas seguir juntándote con ella. No es apropiado.
-Te recuerdo que tengo diecinueve años, y puedo elegir mis amistades.
-Y si mal no recuerdo yo, aun vives en ésta casa- me retrucó ella, secamente.
-¿Planeas echarme por tener una amiga que no te agrade? Una madre tan comprensiva… -ironicé.
Al parecer, mi táctica le dio al clavo porque ella suspiró, a modo de rendición.
-¿Cuándo regresarás?
-Mañana por la tarde.
-Más te vale que tengas tu móvil encendido- me advirtió.
¿Quién diablos soy para estar recibiendo su permiso? ¡Tengo la edad suficiente!
(…)
-¡Hoy dormirás con él!- dijo Marcie emocionada y sonriendo frente al espejo. –Oh Dios, ¿estas nerviosa?
Negué con la cabeza, pero fue inútil. No le puedes mentir a tu mejor amiga.
-No estés nerviosa, apuesto a que será muy divertido- bromeó ella y le di un codazo. –No salgas corriendo como lo haces habitualmente.
-Eso es sólo en las exposiciones en la academia, no saldré corriendo en este asunto- le dije sonrojándome.
Al parecer mis nervios irracionales eran un gran tema del que burlarse para Marcie. Malditas sean las amigas.
-Me pregunto que tendrá planeado- dijo curiosa mi amiga, la observé. Yo también me lo preguntaba.
A eso de las once, luego de bailar para un tipo de unos veinte y tantos años, me dirigí a mi receso personal.
En la barra pedí algo de cerveza. Extrañamente, Harry no había aparecido. ¿Se habría olvidado?
Salía por la puerta de empleados al callejón para tomar aire cuando…
-Ésta vez no te me escapas- me dijo alguien al oído y me aparté por reflejo. El olor a alcohol brotaba por todos sus repulsivos poros. –Te saldrá muy caro lo que me hiciste ayer, linda zorra…
Lo observé, fulminante y con asco. ¿Vienes a amenazarme a mí, patético idiota? ¿Justo a mí?
-Pues la de ayer te la merecías, y si no quieres que mi tacón termine enterrado en tu cornea izquierda en este instante, más te vale que te alejes de mí.
-¿Crees que me asustas?- preguntó David riendo. Se secó la boca con la manga de su camisa y luego eructó.
Oh desgraciado, ¿eres un asco de nacimiento o fuiste acumulando puntos con el correr de los años?
Tomé mi celular del bolsillo trasero de mis shorts y marqué el número asignado a marcación rápida. Tom.
-Hola Tom, disculpa por molestarte en tu trabajo- comencé observando la mirada atenta de David al escuchar el nombre masculino. – ¿Recuerdas al idiota del que nos burlábamos el otro día?- hice una pausa. –Oh sí, ese mismo- reí. –Pues, ha estado molestándome últimamente, por eso quería preguntarte… ¿habría forma de qué me ayudarás… uhmm… a alejarlo de mí?
David me observó espantado. Consciente de que Tom era su peor pesadilla, sonreí maliciosamente y luego asentí.
-Gracias Tom, se lo informaré- dije y corté la comunicación. – ¿Quieres que te diga lo que me dijo o prefieres correr ahora?
-¡Eres una perra rastrera!
-Oh… ¿igual de rastrera que tu hermanita menor?- me burlé y él levantó su puño derecho. Al parecer, estaba corto de reflejos porque cuando me moví a un lado ni se inmutó. En un segundo y con ventaja mi rodilla derecha se instaló furiosamente en su ingle.
Un grito agudo me demostró que quizá lo había dejado estéril.
Bien… al menos sus asquerosos espermas no entrarían al banco genético.
Se levantó y se alejó cojeando. Liejett manda. Oh sí.
(…)
A la una de la mañana, ya demasiado cansada para bailar y sin ánimos de quedarme, me senté en una de las mesas lejanas al escenario, con Marcie a mi lado.
-¿Qué pasa, cielo?
-Nada, Harry no ha aparecido en toda la noche.
-¿Ni mensajes ni llamadas?- preguntó sorprendida. Negué con la cabeza y suspiré.
-Se ha olvidado de seguro- apreté los dientes.
No quería pasarme la noche atormentándome con decepción y enojo.
-Puedes venir a casa si quieres- me ofreció Marcie. –Ya que fue eso lo que le dijiste a tus padres…
Sonreí a medias. A veces pienso que todas necesitamos una rubia loca y efusiva que nos saque de quicio como mejor amiga.
-Bueno… -dijo Marcie mirando detrás de mí. –Creo que mejor cancelamos lo de mi casa…
La miré confundida y luego seguí su mirada detrás de mí.
Con su mejor sonrisita de hoy-salgo-con-alguien caminó a través de las mesas hacia nosotras, deliciosamente vestido con un smoking informal de color gris oscuro y el cabello hacia atrás con algo de gel.
Lucía tan… ¿poderoso?
Abrí los ojos como platos cuando llegó a nuestro lado sin preocuparme por disimular que lo estaba mirando de arriba abajo.
«Cierra la boca o babearás» me advirtió una vocecita en mi interior.
-Vaya- fue lo único que dije.
Él sonrió y tomó mi mano sentándose a mi lado.
-¿Qué tal su noche, señoritas?- preguntó tranquilamente mientras con su pulgar acariciaba el dorso de mi mano.
«Hmmm… una caricia tan suave y engañosa.»
-Justo estábamos hablando de ti- dijo Marcie sonriente y lanzándome una mirada cómplice que ignoré. –Así que… ¿a qué se debe que te hayas peinado?- bromeó la rubia y los tres soltamos una carcajada.
-Hoy tengo una cita- le respondió él y guiñó un ojo.
Me sonrojé.
-¿Se puede saber con quién?- preguntó Marcie fingiendo asombro.
-Es una morena, ojos algo verdes, y mirada de manipuladora- comenzó Harry sin siquiera mirarme. –Fuerte temperamento, y caderas de muerte. Es realmente hermosa- concluyó. –Mentira, saldré con ___________.
Marcie estalló en carcajadas y yo me quejé quitando mi mano de la suya y dándole un codazo.
«Conmigo no te vienes a hacer el gracioso, Styles.»
-Oye- se quejó él. –Tus ojos son grises, no verdes. Y no usaría un adjetivo tan básico como “hermosa” para describirte- explicó mirándome a los ojos cálidamente. –Preferiría decir que eres maravillosa.
Me quedé observándola, embobada, con aquel enojo esfumándose.
¿Cómo haces eso, Harry Styles? ¿Cómo me arrastras hasta las estrellas sólo con tu voz o tu mirada?
--
Imaginense a esa como la loca de rayis ^^
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
MARATON 2° PARTE
Capítulo 25
Marcie me miró asombrada.
-Suertuda- gesticuló con los labios entornando los ojos.
Sonreí.
-¿Has terminado por hoy?- preguntó Harry sacándome de mis cavilaciones. Asentí. – ¿Quieres irte ya?
Asentí una vez más, con la emoción a flor de piel.
Marcie me tomó de la mano y me arrastró al vestuario.
-Oh Dios, el es encantador- dijo ella con una risita tomando un trozo de algodón y quitándome el maquillaje. –Cuídate ésta noche, Liejett. No quiero ser tía a tan corta edad- casi me atraganté.
-Cállate. Con él, no se sabe que debes esperar- me quejé. –Es un jodido y perfecto impredecible.
-Y te encanta- afirmó Marcie muy segura. Asentí a modo de rendición. Ella quitó todo el maquillaje y acomodé un poco mi cabello.
Reemplacé mis shorts de cuero, por unos jeans al cuerpo y mi blusa corta y escotada, por una de tirantes blanca. Pasé los brazos por las mangas de un sweater rosa pálido y controlé mi cabello, inusualmente rebelde, en una coleta alta. Algunos mechones cayeron sobre mis sienes.
-Oh… luces tan bonita- dijo Marcie. –Lo eres. Te prefiero así que con maquillaje.
Sonreí.
-Digo lo mismo de ti- opiné mientras guardaba la ropa en mi bolso y luego me echaba algo de perfume.
-Estás encantadora. Nadie diría que eres una stripper- dijo ella divertida.
{Narra Harry}
Estaba tan jodidamente nervioso. ¿Por qué? Demonios, ella lucía tan… despreocupada.
Eso me irritaba, ¿porqué podía mostrarse tan tranquila y natural y yo no?
Esperaba en el taburete cerca de la barra cuando la vi salir por las puertas del vestuario junto a Marcie.
Un sweater y unos jeans, oh dios… lucía tan… sencilla, tan dulce...
¿Quién diría que detrás de aquella ropa se escondía una stripper de infarto?
Los hombres la observaban asombrados, sin creerse lo que veían… ¿___________ Liejett? ¿Luciendo como un perfecto ángel?
Se acercó a mí y le dio un beso en la mejilla a su amiga, recordándole algo en voz baja.
Tomó mi mano y me guío a través del pasillo.
-La última vez que te vi así estabas en la academia- musité entrelazando nuestros dedos. –Estás preciosa.
-La mitad de los hombres aquí dirían que lucía mejor en shorts pequeños y camisas ajustadas- dijo ella divertida. –Oh y claro… con tres toneladas de rímel y labial encima.
-No lo creo. Luces tan bonita… creo que ésta eres tú- dije en voz baja y aparté mi mano de la suya para engancharla a su cintura. Su pequeño cuerpo lucía tan frágil junto a mí.
Ella sonrió y pasó su brazo por mi cadera.
Una vez que estuvimos afuera la helada brisa de otoño nos hizo tiritar por lo que la envolví en brazos y caminamos rápido hacia el coche.
-¿Qué haremos ésta noche?- preguntó mientras encendía la calefacción y yo ponía el motor en marcha. – ¿Iremos a tu casa?
Asentí, tragando saliva.
-¿Es muy lejos?- preguntó luego de un rato.
-A unas treinta manzanas de aquí- le respondí con los ojos en el camino.
-¿Te gustaría hablar mientras tanto?
La observé y me entregó una sonrisita ladina.
Tan encantadora…
Asentí.
-¿Cómo te ha ido hoy en el trabajo?
Oh vaya pregunta…
-Supongo que bien. Fue un día bastante movido- expliqué frenando ante el semáforo en rojo. –Hoy entregamos las fotos en la academia.
Ella asintió.
-Estoy segura de que la directora quedará encantada- dijo mirando a través del cristal. -¿Tu estudio queda cerca de tu casa?- preguntó volviendo su vista a mí.
Sus ojos grises, cálidamente tranquilos.
¿Quién eres y qué has hecho con la fiera de _________ Liejett?
-Masomenos, queda en el centro de la ciudad. Algún día puedo llevarte si quieres…
-Pues claro, ya me gustaría verte en acción- dijo divertida y noté algo capcioso en sus palabras. ¿Estaba seduciéndome? Porqué está funcionando.
Me removí en mi asiento.
-Me sorprendió tu explicación acerca de esa pintura… -dije recordando la triste inspiración de su obra de arte. –No creí que fueras…
-¿Una niña solitaria?- preguntó con una risita. –Admítelo, ni siquiera creíste que fuera de la alta sociedad, ¿verdad? –Asentí avergonzado. –Pues no lo soy, mis padres sí- explicó. –Mi madre sobretodo, es bastante superficial.
La observé. Ella no lucía así.
-¿He de suponer que el favorito es tu padre?
Ella soltó una carcajada bajita.
-Así es. Aunque el también es frío y calculador pero en lo que respecta a mí, la mayoría de las veces ha sido más comprensivo que mi madre. Supongo que es más tímido.
Acaricié sus dedos con mi mano y ella se quedó mirándome, con aquella mirada gris y seductora, que me volvía loco y me llevaba muy lejos de allí.
Puse los ojos en el camino, pero sin soltar su mano. El contacto se me hacía tan íntimo, tan natural.
-¿Y tus padres?- preguntó jugando con mis dedos.
--
Les doy un pequeño aviso de que el próximo capítulo se pone picante asdkljñfsdlñkf no me hago cargo de traumas, no digan que no avisé.
Marcie me miró asombrada.
-Suertuda- gesticuló con los labios entornando los ojos.
Sonreí.
-¿Has terminado por hoy?- preguntó Harry sacándome de mis cavilaciones. Asentí. – ¿Quieres irte ya?
Asentí una vez más, con la emoción a flor de piel.
Marcie me tomó de la mano y me arrastró al vestuario.
-Oh Dios, el es encantador- dijo ella con una risita tomando un trozo de algodón y quitándome el maquillaje. –Cuídate ésta noche, Liejett. No quiero ser tía a tan corta edad- casi me atraganté.
-Cállate. Con él, no se sabe que debes esperar- me quejé. –Es un jodido y perfecto impredecible.
-Y te encanta- afirmó Marcie muy segura. Asentí a modo de rendición. Ella quitó todo el maquillaje y acomodé un poco mi cabello.
Reemplacé mis shorts de cuero, por unos jeans al cuerpo y mi blusa corta y escotada, por una de tirantes blanca. Pasé los brazos por las mangas de un sweater rosa pálido y controlé mi cabello, inusualmente rebelde, en una coleta alta. Algunos mechones cayeron sobre mis sienes.
-Oh… luces tan bonita- dijo Marcie. –Lo eres. Te prefiero así que con maquillaje.
Sonreí.
-Digo lo mismo de ti- opiné mientras guardaba la ropa en mi bolso y luego me echaba algo de perfume.
-Estás encantadora. Nadie diría que eres una stripper- dijo ella divertida.
{Narra Harry}
Estaba tan jodidamente nervioso. ¿Por qué? Demonios, ella lucía tan… despreocupada.
Eso me irritaba, ¿porqué podía mostrarse tan tranquila y natural y yo no?
Esperaba en el taburete cerca de la barra cuando la vi salir por las puertas del vestuario junto a Marcie.
Un sweater y unos jeans, oh dios… lucía tan… sencilla, tan dulce...
¿Quién diría que detrás de aquella ropa se escondía una stripper de infarto?
Los hombres la observaban asombrados, sin creerse lo que veían… ¿___________ Liejett? ¿Luciendo como un perfecto ángel?
Se acercó a mí y le dio un beso en la mejilla a su amiga, recordándole algo en voz baja.
Tomó mi mano y me guío a través del pasillo.
-La última vez que te vi así estabas en la academia- musité entrelazando nuestros dedos. –Estás preciosa.
-La mitad de los hombres aquí dirían que lucía mejor en shorts pequeños y camisas ajustadas- dijo ella divertida. –Oh y claro… con tres toneladas de rímel y labial encima.
-No lo creo. Luces tan bonita… creo que ésta eres tú- dije en voz baja y aparté mi mano de la suya para engancharla a su cintura. Su pequeño cuerpo lucía tan frágil junto a mí.
Ella sonrió y pasó su brazo por mi cadera.
Una vez que estuvimos afuera la helada brisa de otoño nos hizo tiritar por lo que la envolví en brazos y caminamos rápido hacia el coche.
-¿Qué haremos ésta noche?- preguntó mientras encendía la calefacción y yo ponía el motor en marcha. – ¿Iremos a tu casa?
Asentí, tragando saliva.
-¿Es muy lejos?- preguntó luego de un rato.
-A unas treinta manzanas de aquí- le respondí con los ojos en el camino.
-¿Te gustaría hablar mientras tanto?
La observé y me entregó una sonrisita ladina.
Tan encantadora…
Asentí.
-¿Cómo te ha ido hoy en el trabajo?
Oh vaya pregunta…
-Supongo que bien. Fue un día bastante movido- expliqué frenando ante el semáforo en rojo. –Hoy entregamos las fotos en la academia.
Ella asintió.
-Estoy segura de que la directora quedará encantada- dijo mirando a través del cristal. -¿Tu estudio queda cerca de tu casa?- preguntó volviendo su vista a mí.
Sus ojos grises, cálidamente tranquilos.
¿Quién eres y qué has hecho con la fiera de _________ Liejett?
-Masomenos, queda en el centro de la ciudad. Algún día puedo llevarte si quieres…
-Pues claro, ya me gustaría verte en acción- dijo divertida y noté algo capcioso en sus palabras. ¿Estaba seduciéndome? Porqué está funcionando.
Me removí en mi asiento.
-Me sorprendió tu explicación acerca de esa pintura… -dije recordando la triste inspiración de su obra de arte. –No creí que fueras…
-¿Una niña solitaria?- preguntó con una risita. –Admítelo, ni siquiera creíste que fuera de la alta sociedad, ¿verdad? –Asentí avergonzado. –Pues no lo soy, mis padres sí- explicó. –Mi madre sobretodo, es bastante superficial.
La observé. Ella no lucía así.
-¿He de suponer que el favorito es tu padre?
Ella soltó una carcajada bajita.
-Así es. Aunque el también es frío y calculador pero en lo que respecta a mí, la mayoría de las veces ha sido más comprensivo que mi madre. Supongo que es más tímido.
Acaricié sus dedos con mi mano y ella se quedó mirándome, con aquella mirada gris y seductora, que me volvía loco y me llevaba muy lejos de allí.
Puse los ojos en el camino, pero sin soltar su mano. El contacto se me hacía tan íntimo, tan natural.
-¿Y tus padres?- preguntó jugando con mis dedos.
--
Les doy un pequeño aviso de que el próximo capítulo se pone picante asdkljñfsdlñkf no me hago cargo de traumas, no digan que no avisé.
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
Holaaaaaaaaaaaa nueva lectora seguilaaaaaaaaaaaaa.
Tu nove es tan sdijfidjfildsfjijfisljfd LA AMO figjmdif.
BESOOOOOOOOOOOOOOOOOS...
Tu nove es tan sdijfidjfildsfjijfisljfd LA AMO figjmdif.
BESOOOOOOOOOOOOOOOOOS...
Última edición por CamiCalder el Sáb 06 Jul 2013, 3:45 pm, editado 1 vez (Razón : N)
CamiCalder
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
hay hay hay dios miio k el prroximo capitulo se pone subidito ayyyy k bien a mi me encanta cada dia mas tu novela estoy tambada de un tiran por el corazpn k lo tengo amil con tal novel aacomo no espero ya los proximos capitulos sino manana no me encuentran viva jshxsbusbdhexf jajajajja bueno me an encantado los caps te espero sentadita de parte de la niña buena ewjjeejjeje te esperoooooooooo
Devon.
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
Capítulo 26
{Narras tú}
-Ellos fallecieron hace algunos años- dijo él con una expresión inescrutable.
Oh no… qué estúpida que soy, ¿quién me ha mandado a preguntar?
-Lo lamento- musité y apreté su mano. El me miró de lado y sonrió tímidamente.
-No lo lamentes. Ya eran ancianos y mi madre en sus últimos años se enfermaba demasiado, mi padre sufría por eso. Pero tuvieron sus años felices- me entregó una sonrisa y se la devolví, minuciosamente. –Mamá falleció primero, y unos meses después, mi padre. En la misma fecha.
Lo miré sorprendida.
-Supongo que fue depresión del lado de mi papá, ellos se amaban mucho.
-¿Estaban casados?
Él asintió.
-Estuvieron casados veinte años.
-Vaya…
-Lo sé- dijo él haciendo una mueca. Lo observé. –Supongo que eso fue realmente amor.
Quise preguntar algo más, pero me guardé la duda para otro momento.
No quería desviarme del tema y llegar al asunto de su fracaso en el matrimonio.
Aparcó el coche frente a la bonita casa que había visto la última vez. Ahora que me detenía a observarla con detalle, parecía bastante grande y por la construcción apostaba a que tenía un gigantesco jardín trasero.
Desabroché mi cinturón a la par de él, y nos bajamos del coche.
Me acercó su abrigo cubriendo por la espalda, e inhalé su dulce aroma.
Hmmm… tan masculino.
Una vez dentro de la casa, me senté en el sofá, sin quitarme el abrigo.
Él desapareció en la cocina y se acercó con dos tazas de café.
Noté que sutilmente los retratos de su futura ex esposa, habían desaparecido.
Suprimí la sonrisa de victoria en mi rostro antes de que él lo notara.
Él acercó una manta al sofá y encendió el televisor.
-Enserio luces muy bien- comentó a mi lado mientras bebía un sorbo de café. –Tranquila, relajada y sencilla. ¿Ésta eres tú realmente?
Tragué saliva. «No. Ésta no soy yo. Tú me pones así» pensé.
-Quizá. No lo sé. Creo que hay facetas de mí que nadie ha llegado a conocer- dije desviando la mirada, nerviosa.
Bebí el café y luego me acurruqué contra su hombro. Su piel era suave… y fuerte. Sus músculos se tensaron bajo el sweater negro y flexionó el brazo para arrinconarme contra su torso.
El frío y los abrazos íntimos combinan muy bien.
-Me gustaría conocer todo de ti- murmuró sobre mi oído y me sonrojé.
-Conoces la parte esencial- susurré y lo sentí sonreír aun sin verlo. –Sabes que soy una loca stripper y no has salido corriendo.
-Nadie saldría corriendo, créeme- dijo Harry con una risita y lo acompañé.
Me acercó, sentándome sobre su regazo y acarició mi mejilla.
Tomé su rostro entre mis manos, y disfrute el tacto ante su barba incipiente. Me acerqué a sus labios, y con deliberada lentitud, me fundí en ellos, poco a poco, siendo arrastrada a ese oscuro y cálido rincón de nuevo. Ese rincón al que solía llamarle, perdición.
Jugó con mi lengua, y sus manos se instalaron en mi cadera, apretándome contra él. Jadeé entre besos y gemí cuando sentí su mano calentita en mi espalda, por debajo del sweater y la blusa.
Descendí mis manos desde su nuca por sus hombros, a lo largo de su pecho, hasta esos fuertes y deliciosos abdominales. Por debajo de la camisa, metí mis manos absorbiendo el calor de su perfecto cuerpo. El gruñó mientras mis manos recorrían aquel trabajado abdomen. Sentí su lengua contra mi boca, entrar en guerra con la mía. Impetuosa, ardiente.
Me quitó la chaqueta de los hombros y me acurrucó contra él.
¿Lo hago o no lo hago? ¿Lo hago o no lo hago? ¿Lo hago o no lo hago?
Oh sí, hagámoslo.
Tomé el borde de su sweater y se lo quité por los hombros, echándolo a un lado. Tenía una camisa blanca que no tardé en desechar también.
Ahora, a mí vista sus perfectos pectorales y aquel imperdible y tan deseable abdomen, me derretí en sus brazos obligándome a no gritar mientras el mordisqueaba el lóbulo de mi oreja o mi clavícula.
Me recosté sobre el sofá con él encima de mí, estimulando cada zona sensible de mi cuerpo.
-Te deseo… -dijo en voz baja y sentí un punzante tirón en el bajo vientre. –Ahora.
Quitó mi sweater y luego mi blusa de tirantes. Por una fracción de segundo sentí el frío hasta que se recostó de nuevo encima de mí, controlando la presión de su peso para que no tuviera que cargar con él.
La calidez de su piel contra la mía me enloqueció y me desesperó aun más.
¿Era eso posible?
Se apartó para deshacerse de mis jeans y regresó a mi boca murmurando aquellas palabras que no olvidaría jamás.
-Olvídate de todo y de todos ahora- susurró y besó mejilla lentamente. Me miró a los ojos con aquel intenso verde fundido. Sonrió con ese pequeño hoyuelo y me derretí de mil maneras diferentes. Dios debería prohibir aquel tipo de perfección. Sencilla, discreta, dulce. –Quiero que seamos sólo nosotros dos, y hacerte llegar hasta el cielo... –dijo sin dejar de mirarme y me sonrojé-… aquí sobre el sofá de la sala- agregó divertido y solté una risita que pronto fue ahogada por su ardiente beso.
Unos segundos después, cuando ambos nos habíamos deshecho de nuestra ropa interior, lo observé. Oí algo romperse, y aventuré a que era un paquete de aluminio. La protección.
Diablos, casi me olvidaba de ello.
Unos segundos después él se hundía en mí. Lenta, profunda y deliciosamente en mí.
Embistió acompasadamente mientras yo hundía mi cabeza en su hombro y disfrutaba de la interminable cantidad de sensaciones agradables que él cernía sobre mi cuerpo.
Acorralé su cintura con mis piernas y entrelacé mis dedos detrás de su nuca besándolo con necesidad, deseo y quizá algo más.
Esto era único.
{Narra Harry}
Me removí inquieto en el sofá.
Abrí un ojo y lo volví a cerrar. El televisor continuaba encendido y su luz me provocaba un fuerte dolor de cabeza. Me froté los ojos y luego los abrí.
Fue cuando la vi.
Desnuda, perfecta, y en su estado más puro y dulce.
___________ estaba junto a mí, con su mejilla sobre mi pecho y algo sonrojada.
Dormía profundamente acurrucando su cuerpo junto a mí. Observando el reloj en la pared, noté que eran las seis y media de la mañana. Aun teníamos tiempo por lo que, tomé el control remoto que se encontraba en el borde del sofá y apagué la tele dejando la habitación a oscuras.
Nos cubrí a ambos con la colcha y ella suspiró entre sueños.
La noche había sido tan perfecta.
No quería alejarme de ese momento, no quería tener que volver a la realidad dentro de unas horas, la quería sólo para mí, y así era en ese momento. Sólo mía.
-Duerme- me dijo ella en voz baja y sonreí. Acomodé mi cabeza en la almohada y ella la suya contra mi pecho. –Ha sido magnífico- murmuró y buscó mi mano.
Tomé la suya y entrelacé nuestros dedos.
No podía verla, pero sabía que tenía los ojos cerrados y muy probablemente estaba a punto de dormirse de nuevo.
-Tú eres magnífica- musité contra su cabello y luego cerré los ojos, disfrutando de su aroma, su compañía, y todo lo que sentía cuando estaba junto a ella.
--
Les dije que era picante, akdsfjaks
{Narras tú}
-Ellos fallecieron hace algunos años- dijo él con una expresión inescrutable.
Oh no… qué estúpida que soy, ¿quién me ha mandado a preguntar?
-Lo lamento- musité y apreté su mano. El me miró de lado y sonrió tímidamente.
-No lo lamentes. Ya eran ancianos y mi madre en sus últimos años se enfermaba demasiado, mi padre sufría por eso. Pero tuvieron sus años felices- me entregó una sonrisa y se la devolví, minuciosamente. –Mamá falleció primero, y unos meses después, mi padre. En la misma fecha.
Lo miré sorprendida.
-Supongo que fue depresión del lado de mi papá, ellos se amaban mucho.
-¿Estaban casados?
Él asintió.
-Estuvieron casados veinte años.
-Vaya…
-Lo sé- dijo él haciendo una mueca. Lo observé. –Supongo que eso fue realmente amor.
Quise preguntar algo más, pero me guardé la duda para otro momento.
No quería desviarme del tema y llegar al asunto de su fracaso en el matrimonio.
Aparcó el coche frente a la bonita casa que había visto la última vez. Ahora que me detenía a observarla con detalle, parecía bastante grande y por la construcción apostaba a que tenía un gigantesco jardín trasero.
Desabroché mi cinturón a la par de él, y nos bajamos del coche.
Me acercó su abrigo cubriendo por la espalda, e inhalé su dulce aroma.
Hmmm… tan masculino.
Una vez dentro de la casa, me senté en el sofá, sin quitarme el abrigo.
Él desapareció en la cocina y se acercó con dos tazas de café.
Noté que sutilmente los retratos de su futura ex esposa, habían desaparecido.
Suprimí la sonrisa de victoria en mi rostro antes de que él lo notara.
Él acercó una manta al sofá y encendió el televisor.
-Enserio luces muy bien- comentó a mi lado mientras bebía un sorbo de café. –Tranquila, relajada y sencilla. ¿Ésta eres tú realmente?
Tragué saliva. «No. Ésta no soy yo. Tú me pones así» pensé.
-Quizá. No lo sé. Creo que hay facetas de mí que nadie ha llegado a conocer- dije desviando la mirada, nerviosa.
Bebí el café y luego me acurruqué contra su hombro. Su piel era suave… y fuerte. Sus músculos se tensaron bajo el sweater negro y flexionó el brazo para arrinconarme contra su torso.
El frío y los abrazos íntimos combinan muy bien.
-Me gustaría conocer todo de ti- murmuró sobre mi oído y me sonrojé.
-Conoces la parte esencial- susurré y lo sentí sonreír aun sin verlo. –Sabes que soy una loca stripper y no has salido corriendo.
-Nadie saldría corriendo, créeme- dijo Harry con una risita y lo acompañé.
Me acercó, sentándome sobre su regazo y acarició mi mejilla.
Tomé su rostro entre mis manos, y disfrute el tacto ante su barba incipiente. Me acerqué a sus labios, y con deliberada lentitud, me fundí en ellos, poco a poco, siendo arrastrada a ese oscuro y cálido rincón de nuevo. Ese rincón al que solía llamarle, perdición.
Jugó con mi lengua, y sus manos se instalaron en mi cadera, apretándome contra él. Jadeé entre besos y gemí cuando sentí su mano calentita en mi espalda, por debajo del sweater y la blusa.
Descendí mis manos desde su nuca por sus hombros, a lo largo de su pecho, hasta esos fuertes y deliciosos abdominales. Por debajo de la camisa, metí mis manos absorbiendo el calor de su perfecto cuerpo. El gruñó mientras mis manos recorrían aquel trabajado abdomen. Sentí su lengua contra mi boca, entrar en guerra con la mía. Impetuosa, ardiente.
Me quitó la chaqueta de los hombros y me acurrucó contra él.
¿Lo hago o no lo hago? ¿Lo hago o no lo hago? ¿Lo hago o no lo hago?
Oh sí, hagámoslo.
Tomé el borde de su sweater y se lo quité por los hombros, echándolo a un lado. Tenía una camisa blanca que no tardé en desechar también.
Ahora, a mí vista sus perfectos pectorales y aquel imperdible y tan deseable abdomen, me derretí en sus brazos obligándome a no gritar mientras el mordisqueaba el lóbulo de mi oreja o mi clavícula.
Me recosté sobre el sofá con él encima de mí, estimulando cada zona sensible de mi cuerpo.
-Te deseo… -dijo en voz baja y sentí un punzante tirón en el bajo vientre. –Ahora.
Quitó mi sweater y luego mi blusa de tirantes. Por una fracción de segundo sentí el frío hasta que se recostó de nuevo encima de mí, controlando la presión de su peso para que no tuviera que cargar con él.
La calidez de su piel contra la mía me enloqueció y me desesperó aun más.
¿Era eso posible?
Se apartó para deshacerse de mis jeans y regresó a mi boca murmurando aquellas palabras que no olvidaría jamás.
-Olvídate de todo y de todos ahora- susurró y besó mejilla lentamente. Me miró a los ojos con aquel intenso verde fundido. Sonrió con ese pequeño hoyuelo y me derretí de mil maneras diferentes. Dios debería prohibir aquel tipo de perfección. Sencilla, discreta, dulce. –Quiero que seamos sólo nosotros dos, y hacerte llegar hasta el cielo... –dijo sin dejar de mirarme y me sonrojé-… aquí sobre el sofá de la sala- agregó divertido y solté una risita que pronto fue ahogada por su ardiente beso.
Unos segundos después, cuando ambos nos habíamos deshecho de nuestra ropa interior, lo observé. Oí algo romperse, y aventuré a que era un paquete de aluminio. La protección.
Diablos, casi me olvidaba de ello.
Unos segundos después él se hundía en mí. Lenta, profunda y deliciosamente en mí.
Embistió acompasadamente mientras yo hundía mi cabeza en su hombro y disfrutaba de la interminable cantidad de sensaciones agradables que él cernía sobre mi cuerpo.
Acorralé su cintura con mis piernas y entrelacé mis dedos detrás de su nuca besándolo con necesidad, deseo y quizá algo más.
Esto era único.
{Narra Harry}
Me removí inquieto en el sofá.
Abrí un ojo y lo volví a cerrar. El televisor continuaba encendido y su luz me provocaba un fuerte dolor de cabeza. Me froté los ojos y luego los abrí.
Fue cuando la vi.
Desnuda, perfecta, y en su estado más puro y dulce.
___________ estaba junto a mí, con su mejilla sobre mi pecho y algo sonrojada.
Dormía profundamente acurrucando su cuerpo junto a mí. Observando el reloj en la pared, noté que eran las seis y media de la mañana. Aun teníamos tiempo por lo que, tomé el control remoto que se encontraba en el borde del sofá y apagué la tele dejando la habitación a oscuras.
Nos cubrí a ambos con la colcha y ella suspiró entre sueños.
La noche había sido tan perfecta.
No quería alejarme de ese momento, no quería tener que volver a la realidad dentro de unas horas, la quería sólo para mí, y así era en ese momento. Sólo mía.
-Duerme- me dijo ella en voz baja y sonreí. Acomodé mi cabeza en la almohada y ella la suya contra mi pecho. –Ha sido magnífico- murmuró y buscó mi mano.
Tomé la suya y entrelacé nuestros dedos.
No podía verla, pero sabía que tenía los ojos cerrados y muy probablemente estaba a punto de dormirse de nuevo.
-Tú eres magnífica- musité contra su cabello y luego cerré los ojos, disfrutando de su aroma, su compañía, y todo lo que sentía cuando estaba junto a ella.
--
Les dije que era picante, akdsfjaks
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
BIENVENIDA jejeje me alegro muchi-simo que te guste la novela jejjee ya la segui beshoooooooooooooooooos byeCamiCalder escribió:Holaaaaaaaaaaaa nueva lectora seguilaaaaaaaaaaaaa.
Tu nove es tan sdijfidjfildsfjijfisljfd LA AMO figjmdif.
BESOOOOOOOOOOOOOOOOOS...
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
ya lo subi para que no te diera nada jejjejee me alegro muchoo que te guuste la novela encerio, despues te ago una maraton; para mi niña buena :twisted: jejjee behoooooooooooosmari2900 escribió:hay hay hay dios miio k el prroximo capitulo se pone subidito ayyyy k bien a mi me encanta cada dia mas tu novela estoy tambada de un tiran por el corazpn k lo tengo amil con tal novel aacomo no espero ya los proximos capitulos sino manana no me encuentran viva jshxsbusbdhexf jajajajja bueno me an encantado los caps te espero sentadita de parte de la niña buena ewjjeejjeje te esperoooooooooo
:bye:
michu
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: SIGUELA MICHU,POR FAVOR AISHFDSAIJFASIFSAS LA AMO :P
CamiCalder
Re: One and Only {Harry&tú} -Cami. TERMINADA
dios mio ayyyyy dios mio ayyyyy dios mio ayyyyy dios mio tu me kieres atar k capirulo k capituloooooooooooooooooo por favor no me dejes asi me voy a omorir el capitulo esta nqobwnorfjwelkfjborswi me encant asiguela por favorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
besosssssssssssssssssss la niña buena ejjeejjejej
besosssssssssssssssssss la niña buena ejjeejjejej
Devon.
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