THANK YOU FOR LOVING ME (HARRY STYLES)

por **IngridGarcia1D** Dom 07 Jul 2013, 5:50 pm

Hola, les dejaré una novela por aquí, se llama "Thank you for loving me"

Nombre: THANK YOU FOR LOVING ME

ADAPTACIÓN: No.

PERSONAJES PRINCIPALES: Harry Styles & Mia Moore.

GÉNERO: Romance y Drama.

SINOPSIS:

El mundo, la sociedad, su entorno, pensaba que él lo tenía todo, que era completamente feliz con lo que hacía, que no necesitaba de alguien para lograr lo que quería; pero todos ellos estaban completamente equivocados. Él no lo tenía todo, le faltaba algo especial, algo que todos a excepción de nadie necesita “amor”.

Ella disfrutaba lo que hacía, amaba su trabajo, ella creía que tenía su vida completa, ella ya tenía una idea de amor, pues lo estaba experimentando, estaba a tres meses de casarse con “el amor de su vida”. Ella creía ser completamente feliz.

por **IngridGarcia1D** Dom 07 Jul 2013, 6:03 pm

CAPITULO 1

THANK YOU FOR LOVING ME (HARRY STYLES) 1309456974505651

Era el mes de noviembre, mes del otoño, las calles de Londres lucían ya las luces navideñas, pues el otoño anunciaba la llegada de la navidad.
Mía caminaba a un paso tranquilo las calles de su apartamento hasta la escuela de “Artes dramáticas”. Ella era una joven profesora de 23 años, enseñaba teatro a varios adolescentes apasionados a la actuación, al igual que ella.
-Buenos días, hoy todos ustedes serán aves liberadas.-dijo Mía mientras ingresaba al salón de clases y se quitaba los guantes que tenía puestos, todos los alumnos empezaron a imitar a aves volando.-Bien ahora todos tomen asiento.

-Por favor Mary, comuníqueme con los inversionistas de USA, mi padre ha dejado este proyecto en el aire.-le habló Harry a su secretaria.
-En seguida señor Styles.-respondió ella.
Harry era un joven de 25 años, egresado de una de las mejores universidades del mundo, la universidad de Cambridge, además de haber realizado su maestría en la Universidad de Navarra-España. Éste joven apenas y empezaba a tener experiencia laboral en la empresa familiar, sus padres habían decidido hacer un viaje de todo un año para recorrer el mundo, y no habían tenido mejor idea que dejar a cargo a su primogénito, quien recién había hecho su maestría en “Ciencias empresariales”. Harry no era hijo único, tenía una hermana menor de 17 años, recién había terminado la escuela y su sueño era ser actriz, sus padres no se opusieron en lo absoluto y le brindaron su apoyo inscribiéndola en la mejor escuela de Artes Dramáticas de Londres; “LAMDA”. Harry no estaba muy a favor de que su hermana estudie eso, pero eran las decisiones de ella y no podía intervenir.

-Gemma necesito hablar contigo al finalizar la clase.-ordenó Mía.
-Sí profesora.-respondió Gemma.
Mía tenía a cargo la próxima producción teatral que la escuela de teatro daría, faltaba casi medio año, pero tenía que organizarse desde ya si quería que todo saliese perfecto, una obra no se prepara de un día para otro.
Al finalizar la clase, todos los jóvenes fueron abandonando el salón, mientras Gemma esperaba a que Mía terminara de ordenar unos papeles.
-Gemma, te he pedido que te quedes porque quiero hacerte una propuesta.-empezó Mía.
-Lo que diga profesora.-continuó Gemma.
-Primero, llámame Mía, no soy tan vieja, apenas tengo 23.-sonrió.
-Está bien… Mía.-dijo tímidamente Gemma.
-Bueno pues, he notado que tienes potencial en esto de la actuación, realmente lo disfrutas, y creo que serías perfecta para un papel.
-Es que en serio esto es lo que amo.-dijo sonriendo Gemma.
-Lo he notado Gemma, por eso quiero proponerte que hagas el casting para el personaje principal de la próxima obra teatral que estrenará la academia.
-¿En serio?-Gemma estaba sorprendida, recién llevaba dos meses en la academia y ya le estaban proponiendo un protagónico.
-Sí, tienes que hacer el casting como todos, ya se han presentado varias aspirantes, pero no encuentro a la indicada, y creo que esa serás tú.-le dijo Mía.
-Me fascina la idea, mañana mismo daré el casting.
-Me parece perfecto, entonces te veré mañana.-le sonrío Mía.
-Te veo mañana Mía.

-Gemma ¿dónde estás?-preguntó Harry al otro lado del teléfono.
-Harry estaba hablando con mi profesora, ya estoy saliendo gruñón.-respondió entre risas Gemma, le hacía gracia cada vez que su hermano se molestaba por algo.
-Bien, apúrate que tengo hambre.
-Ya voy, mejor le hubiera dicho a Zayn que me recoja.-bromeó Gemma.
-Ey.-alargó Harry.-No te perdonaría que escojas a tu noviecito antes que a mí.-fingió ofendido.
-Ya Edward, no te sulfures, ya llego a la puerta.-dijo Gemma antes de colgar.

-Si cariño ya salí, te veo en el restaurant entonces… bien te amo.-colgó Mía.
Mía iba caminando al restaurant de siempre, al mismo lugar donde ella y Greg, su prometido, almorzaban, iba recordando la singular pedida de mano que su novio le había hecho.
***
Ella se encontraba con su hermana Danielle en un McDonals comprando unas hamburguesas, cuando de repente ve a su novio Greg parado afuera con un cartel en la mano sonriendo, éste cartel decía “Sé que tarde mucho tiempo en decírtelo pero…” ella sonrío enternecida al ver el mensaje, Greg dejó el cartel a un lado y cogió inmediatamente otro que decía “… ahora he tomado el valor necesario para hacerlo…” lo dejó nuevamente y cogió otro diciendo “… Mía Moore, ¿quisieras ser MI ESPOSA?” Mía al leer estas palabras no pudo contener su felicidad y derramó lágrimas de emoción y enseguida Greg entró con un ramo de flores y se las entregó, acto seguido colocó un anillo de compromiso en el dedo anular de Mía, a lo que ella respondió “Sí quiero ser tu esposa”
***
-Hola amor.-Greg le dio un corto beso en los labios.
-Hola cariño.-respondió Mía.
-¿Qué tal tu día hoy?
-Bien, creo que al fin encontré a la chica para el protagónico.-dijo alegre Mía.-Y a ti cómo te fue.
-Bien, hoy junto con Niall terminamos de hacer el proyecto para el nuevo centro comercial.
Mía y Greg disfrutaron de sus almuerzos juntos platicando de cómo había sido su día y de lo contentos que estaban porque se casarían muy pronto, faltaban 5 meses para su boda.
-Creo que mañana iré con tu mamá a elegir el vestido.-dijo emocionada Mía.
-Está bien supongo, solo no dejes que influya mucho, ya sabes cómo es mi mamá.-bromeó Greg.-Y yo mañana iré a ver mi traje con Niall.
-Oh mi duende, dile que no sea ingrato y vaya a visitarme.
-Se lo diré amor.

-Entonces ¿es posible que hagas el protagónico?-pregunto Harry asombrado.
-Así es, Mía, mi profesora me dijo que tenía las cualidades para poder hacerlo.-sonrió Gemma.
-Pues veo que tu profesora no se equivoca.
-Bueno iré a repasar las líneas, mañana haré la casting y quiero hacerlo perfecto.
-Lo harás perfecto Gemma.-sonrió Harry.-Yo me iré a la empresa, cualquier cosa me llamas.
-Bien.-gritó Gemma desde su habitación.

por **IngridGarcia1D** Dom 07 Jul 2013, 6:09 pm

CAPITULO 2

-Creo que este está perfecto.-dijo Maura, mamá de Greg, mirando el vestido que traía Mía.

-Creo que tienes razón Maura, me decidiré por este.-dijo Mía mirándose al espejo.
-Te queda hermoso.-dijo la vendedora al ver a Mía con el vestido.
-Éste será el indicado.-dijo Maura.

-¡Harry!-gritó emocionada Gemma al entrar a la casa.
-¿Por qué gritas así?-Harry salió del estudio.-Estaba leyendo unos papeles.
-Adivina.-Gemma lo miraba con una amplia sonrisa.
-Terminaste con Zayn.-Bromeó Harry, Zayn era el novio de Gemma, a Harry no le caía mal, solo que era algo celoso.
-No seas tonto.-Gemma le tiró un ligero golpe en su hombro.
-No sé qué es, hoy se me malogro la esfera mágica.-volvió a bromear Harry.
-Me dieron el protagónico.-Gemma saltaba de la emoción.
-Felicidades enana, sabía que lo lograrías.-la abrazó.-Vamos a festejar, qué quieres hacer hoy.
-Ir de compras, y ver una película con mi hermano favorito.
-Acepto lo de ir al cine, pero no me castigues haciendo que te acompañe de compras.-suplicó Harry.
-Es lo que quiero hacer, así que tienes que cumplir.

-Ahora los zapatos.-dijo Maura.
-Acá cerca hay un centro comercial donde podemos encontrar varias zapaterías.-recomendó Mía.
-Pues vamos.
Mía y Maura se encaminaron al centro comercial, el mismo al que irían Harry y Gemma, Mía entró a una zapatería dónde observo varios modelos pero ninguno le llamó mucho la atención, así que optó por otras, Maura por otra parte buscaba zapatos para ella en otras zapaterías distintas.
-Lo siento no me fijé.-se disculpó Mía al momento de chocar con alguien.
-No te preocupes, fui yo el despistado.-se disculpó el joven.-Creo que esto es suyo.-le alcanzó las bolsas que a Mía se le cayeron.
-Gracias.-Mía se perdió en esos ojos verdes que tenía el joven con el cual se había chocado.
-Harry creo que me llevaré estos.-gritó Gemma.-¿Mía?
-¿Gemma?-dijo Mía al reconocer a su alumna.
-¿Se conocen?-pregunto Gemma mirando a su hermano y a Mía.
-No, lo siento soy Harry Styles.-dijo estrechando su mano.
-Mía Moore.-hizo lo mismo.
-Harry, ella es mi profesora de teatro.-intervino Gemma.
-Mucho gusto, mi hermana no para de hablar de usted.-bromeó Harry.-Solo porque la eligió para el protagónico.
-No la elegí, ella se lo ganó, tiene el potencial.-Mía miró a Gemma.
-Gracias.-dijo Gemma.
-Bueno los dejo, seguiré haciendo lo que hacía.-se despidió Mía.
-Seguir chocándote con gente.-bromeó Harry.
-Gusto en conocerlo Señor Styles.
-Igualmente señorita Moore.

-Entonces ¿ya escogiste el vestido?-preguntó Niall quien había invitado a su mejor amiga a comer algo.
-Sí, tu mamá me ayudó un poco.-respondió Mía.
-Sé que te verás estupenda el día de tu boda, y más al lado mío.-bromeó Niall.
-Sí lo sé, tú te lucirás conmigo de la mano ese día.-dijo entre risas Mía.
-Tú serás la que te lucirás, que un hombre apuesto te lleve al altar no se ve todos los días.
-Tienes razón, lástima que no encontré otro hombre tan apuesto como mi papá.
-¡Ey!-alargó Niall.-Yo soy quien te llevaré, y déjame decirte que soy verdaderamente apuesto.
-Sí Niall, lo eres.-dijo Mía entre risas.
-Bueno, ya vámonos a casa, mañana tienes que trabajar temprano.-Niall se levantó de la mesa.
-Sí y me espera un largo día de trabajo, aún tengo que ver muchas audiciones.
-Sí me lo comento Greg, estarás a cargo de la próxima obra teatral, todo saldrá estupendo.
-Eso espero.
-¿Cuándo es?
-Un mes antes de la boda, no tengo mucho tiempo.
-Todo saldrá bien, te ayudaría pero sabes que eso no es lo mío.
-Tranquilo Niall, haces suficiente dándome ánimos.
Niall se ofreció a llevar a Mía a su casa, ya que Mía había dejado su auto y Niall no quería que se fuera sola.
-Dile a Gerg que mañana no podremos almorzar juntos, no creo tener tiempo suficiente.-le dijo Mía a Niall.
-No te preocupes, yo se lo diré.-sonrió Niall.
-Te veo luego.-Mía abrazó a Niall.
-Adiós enana.

-¿Cuánto tiempo estarás de viaje?-le preguntó Gemma a Harry.
-No lo sé, dos días tal vez, no creo que sea mucho tiempo, no puedo dejarte sola en casa sin que hagas una fiesta o algo.
-Tranquilo Hazza, no haré nada, estaré estudiando mi guión.-mintió Gemma.
-Gemma, Louis vendrá a cuidarte.-le advirtió Harry.
-Uy sí, yo seré quien cuidará a ese ser.-dijo entre risas Gemma.-Louis es como un niño de 6 años Harry.
-Pero evitará al menos que hagas alguna fiesta.
-Bien, como quieras, pero por lo menos Zayn puede venir a visitarme ¿verdad?-Gemma hizo un puchero.
-Solo hasta las 9, ni un minuto más.-la miró amenazanate.

-Está bien.

por **IngridGarcia1D** Dom 07 Jul 2013, 6:17 pm

CAPITULO 3

Habían pasado ya dos meses, Mía cada vez se concentraba más en su trabajo de producción de la obra teatral, Gemma se preparaba constantemente para hacer un gran papel protagónico, Harry seguía al mando de la gerencia de la empresa familiar.

-Esta noche es la fiesta de Danielle.-le dijo Mía a través del teléfono a Greg.

-Sí lo sé amor, paso por ti a las 9 ¿te parece?-contestó Greg.

-Sí a esa hora está bien, traje elegante, no lo olvides, díselo también a Niall.-Greg odiaba utilizar traje elegante, no era su tipo de vestir.

-No tengo opción ¿cierto?

-No cariño, es eso o nada.

-Entonces nada.

-Y pretendes que vaya sola.-fingió estar ofendida Mía.

-No cariño, iré en traje.

-Bien te espero.

-Te amo.

-Te amo.-colgó Mía.

-Mía, hoy no habrá ensayo en la tarde ¿verdad?-se acercó Gemma hasta donde estaba Mía.

-Sí hay, pero no estaré yo, vendrá una amiga a hacerse cargo. ¿Por qué?

-Es que tenía que hacer algo, pero no importa.

-Bien, Gemma estás haciendo un muy buen trabajo, sigue así.-le sonrío Mía.

-Solo hago lo que me gusta.

-Sí papá, todo ya esta en orden.-dijo cansado Harry.

-Recuerda que esa empresa ahora es tu responsabilidad, un error tuyo puede generar miles de pérdidas.-le advirtió su padre.

-Lo sé, ahora déjame trabajar, un beso a mamá.-Harry estaba cansado de que su padre le recordase que si algo salía mal sería culpa de él, eso le estresaba mucho.-Mary, llama a Louis por favor.

-Como diga señor Styles.

A los pocos minutos ingresó Louis, un chico alto de cabeño castaño y ojos azules, el mejor amigo de Harry.

-¿Qué pasó Harold?

-Hoy es viernes, tenemos fiesta.-anunció Harry.

-¿Quién es tu nueva victima hoy?-preguntó curioso Louis.

-Se llama Abigail, y es rubia.-sonrío maliciosamente Harry.

-Harry soy tu amigo y por eso te lo digo, el hecho de que Kate te hiciera lo que hizo no significa que todas las mujeres sean así, mejor deja esa vida y busca a una chica de verdad.

-Louis, pequeño Louis, tú más que nadie sabes que jamás volveré a enamorarme, Kate fue una zorra más.

-De la cual te enamoraste.-lo interrumpió Louis.

-Sí, de la cual de enamoré perdidamente, pero ella solo buscaba mi dinero, por eso no pienso enamorarme jamás.

-Ay Harry, es que no todas son iguales, ¡Entiéndelo! Ahí afuera.-señaló la ventana que estaba atrás del sillón de Harry, la cual daba una vista panorámica a la ciudad de Londres.-puede estar el amor de tu vida, y tú desperdiciando tiempo en vengarte con chicas que no tienen la culpa de nada.

-Louis sabes que no me gusta que te pongas a hablarme así, yo hago con mi vida lo que quiero.

-Debes para Harry, chicas inocentes pagan por otra.

-Me acompañas o no.-preguntó impacientemente Harry.

-No, esta noche saldré con Eleanor.

-Bueno, iré solo entonces.

-Mejor quédate en casa.-le sugirió Louis.

-No gracias, no quiero aburrirme, juré despues de terminar con Kate que disfrutaría de mi vida con muchas mujeres.

-Harry, reflexiona amigo, esto no está bien.

-Louis, no hay nada que hacer, tú estás con Eleanor y yo disfruto de mi soltería, y si quieres decir algo más, mejor anda agradécele a Kate por hacerme así.

-Kate no te hizo así, no es por defenderla, pero tú solo estas volviéndote en lo que eres.

-Ya basta Louis, eres mi mejor amigo y no quiero pelear solo por una fiesta.

-Es que no es solo una fiesta, es tu vida la que estás arruinando, y no solo la tuya, sino la de muchas chicas más.

-Y todo eso gracias a Kate te lo vuelvo a repetir.

-Contifo no se puede Harry.

-Diviertete.-le dijo Harry a su amigo cuando salió de su oficina.

Harry se quedó pensando en lo que su amigo le dijo, quizás tenga razón, quizás sí está arruinando su vida, pero él juró vengarse por todo lo que le hizo Kate.

-Danielle, feliz cumpleaños.-la felicitó Greg.

-Greg gracias, espero que disfrutes de la fiesta.-le sonrío Danielle.

-Lo haré.

-Claro si estas con mi hermana.-bromeó Danielle.

-Dani creo que Liam te esta buscando.-intervino Mía.

-Bien, iré con mi amado, disfruten la fiesta.

Danielle era la hermana menor de Mía, cumplía 18 años, ella era una chica alta de cabello rizado y dueña de una linda sonrisa, su pasión era la danza por eso estudiaba ballet en la misma escuela donde Mía daba clases.

Greg y Mía disfrutaron al máximo de la fiesta, estuvo increíble, hubo un momento de sensibilidad, ya que la mamá de Mía y Danielle le dio unas palabras a sus hijas diciéndoles lo cuán orgullosa estaba de ellas dos, y que su papá si estuviera vivo también lo estaría, ambas hermanas no pudieron aguantar y soltaron unas pequeñas lágrimas al recordar la trágica muerte de su padre, él había fallecido en un accidente automovilístico.

-Amor siempre estaré conitgo.-Liam, el novio de Danielle, la abrazó.

-Yo igual.-le dijo Greg a Mía.

-Bueno, sigamos la fiesta.-Danielle no le gustaba mucho estar triste, ella sabía que ahora su padre estaba descansando.

La fiesta continuó su ritmo, la mejor fiesta que Danielle haya tenido.

Mía y Greg decidieron retirarse cuando ya eran cerca de las 2 de la mañana, Mía estaba cansada debido a su trabajo con la obra de teatro.

-Dani ya me voy, estoy algo cansada.-se despidió Mía de su hermana.

-Gracias Mía por estar aquí, mañana vas a la casa.-le dijo Danielle.

-Sí, mañana iré a ver un rato a mamá, la veo algo triste.

-Extraña a papá, la otra semana era su aniversario de casados.-le recordó Danielle.

-Cierto, no puedo olvidarlo, te veo mañana.

-Adios Dani.-se despidió Greg.

-Adiós chicos.-Danielle levantó la mano en señal de despedida.

Greg llevaría a Mía su apartamento, Mía había tomado un poco y no se sentía bien como para manejar, por suerte Greg no había probado una gota de alcohol.

-Gracias por llevarme.-dijo Mía sonriendo.

-¿Qué clase de novio sería si no lo hiciera?

-Uno muy malo.-río Mía.

-Pasaremos por una gasolinera, casi no tengo combustible.

-Está bien, yo trataré de no dormirme.

-Ponte el cinturón amor.-le dijo Greg.

-Está bien.-dijo con voz de chiquita Mía, a lo cual Greg río.

-Te amo.-le dijo Greg a Mía.

-Yo te amo mucho más.

-Eso es imposible.-Greg le sonrío.

-Te dejaré ganar esta vez.-le dijo Mía.-Nunca dejaré de agradecerle a Niall que te haya pedido ayuda para ese trabajo que teníamos que hacer.

-Y yo jamás me cansaré de recordar tu cara al ver mi camisa manchada.-Greg se río.

Llegaron a la gasolinera, Greg tuvo que bajarse del auto para poder retirar plata de un cajero, mientras terminaban de llenar el tanque.

-Ahora sí a casa.-dijo Greg en cuanto puso en marcha el auto, mientras sonaba de fondo Someone like you de Adele.

por **IngridGarcia1D** Lun 08 Jul 2013, 2:13 pm

CAPITULO 4

Mía sentía un gran dolor en su cabeza, se esforzaba por abrir sus ojos pero no lo lograba, solo sentía como su cuerpo estaba siendo apretado por otra cosa, hizo lo posible para sacar ese cuerpo extraño pero no podía, intento relajarse para así poder tomar fuerzas y nada, después de unos minutos escuchó unas sirenas sonando muy fuerte cerca de donde se encontraba ella, escuchaba murmuros pero no lograba entender absolutamente nada.

-Tomaremos sus declaraciones señor Styles.-le dijo el policía de turno a Harry.

-¿Ya vio si alguno de los dos está vivo?-preguntó preocupado Harry.

-Al parecer la muchacha si lo está, pero el joven no, murió instantáneamente, no tenía puesto el cinturón de seguridad.-informó el policía.

-Espero sirva de algo mi ayuda.

-Claro que servirá señor Styles, gracias de antemano.

Mía después del accidente había permanecido en coma por 3 días, el accidente había ocurrido la madrugada del día sábado, era lunes por la noche cuando ella despertó.

-¿Qué es lo que te duele?-le preguntó una enfermera a Mía.

-La cabeza.-dijo adormilada.

-Descansa.

-¿Dónde estoy?-preguntó confundida.

-Estas en un hospital, sufriste un accidente automovilístico, tienes que guardar reposo.-le indicó la enfermera.

-¿Cómo está él?-preguntó refiriéndose a Greg.

-¿Él?

-Greg, mi novio ¿dónde está?-volvió a preguntar Mía.

-No lo sé, tú viniste sola, ahora descansa.-la enfermera salió de la habitación, Mía caía en un profundo sueño.

La enfermera le avisó al doctor que Mía ya había despertado y que ahora dormía, era lo mejor para ella.

-¿Cómo está mi hija?-preguntó la mamá de Mía.

-Señora, su hija ya despertó, gracias a Dios el golpe en su cabeza no causo problemas como perdida de memoria o algo parecido, ahora esta descansando.-informó el doctor.

-¿Cuándo puedo verla?-angustiada preguntó nuevamente la señora Moore.

-En cuanto despierte de su siesta, ahora será mejor que se tranquilice señora.

-Gracias.

-Mamá ya que Mía está fuera de peligro, ahora habrá que decirle lo de Greg.-dijo preocupada Danielle.

-Lo mejor es que no se lo digamos ahora, aún se está recuperando.-sugirió Liam.

-¿No ha llamado Maura?-preguntó la señora Moore.

-No, solo llamó Niall preguntando por Mía.-dijo Danielle.

-Iré a llamarla, ya vuelvo hija.

-¿Por qué mi hijo?-lloraba la señora Maura.-Él no debía morir, no de esa manera.

-Mamá… tranquila, todos estamos sufriendo.-dijo entre llantos Niall.

-Mi hijito.-sollozaba, en eso suena su celular.-¿Hola?-preguntó con voz entrecortada.

-¿Maura?-dijeron al otro lado de la línea.

-Sí ella habla.

-Maura soy Ana, la mamá de Mía.

-Hola Ana.-dijo entre sollozos.

-Siento mucho lo de Greg.-dijo apenada.

-Mi hijito.-lloraba Maura.-Él no puede estar muerto.

-Sé cómo te sientes, yo pasé por eso hace 4 años, con mi esposo.-de repente se le quebró la vos a Ana.

-¿Cómo sigue Mía?¿Ya despertó?-pregunto preocupada Maura.

-Sí, pero esta tomando una siesta, el doctor dijo que tenía que descansar, ya cuando este mejor podré verla.

-¿Es la mamá de Mía?-se escuchó preguntar a Niall.

-Sí, Mía ya despertó.-dijo Maura.

-Maura, siento mucho no estar ahí.-dijo tristemente Ana.

-Ana tú debes estar ahí con Mía, Greg ahora está en un mejor lugar.-dijo amablemente Maura

-Iré a visitarte en cuanto pueda.

-No te preocupes Ana, ahora debes estar con tu hija, ella te necesita.-dijo Maura.

-Saluda a Niall, yo debo colgar ahora.

-Yo le diré Ana, cuídate y saluda a Mía de mi parte.

-Sí oficial como usted diga, mañana a primera hora estaré por allá.-habló Harry a través del teléfono.

-¿Oficial?-preguntó confundida Gemma.-En qué líos estás metido Harry.

-En ninguno, es sobre el accidente del que fui testigo el fin de semana.-dijo Harry mientras comía su cena.

-Hablando de accidentes, mi profesora que esta encargada de la obra sufrió uno y está muy grave.-Gemma dijo con tristeza, en todo este corto tiempo que estaba tratando a Mía, Gemma le cogió mucho cariño.

-Oh pequeña lo siento, si gustas podemos ir a visitarla, aún es temprano.-se ofreció Harry, él sabía que Mía se había convertido en alguien especial para su hermana.

-¿En serio?-preguntó ilucionada Gemma.

-Claro, termina tu cena y nos vamos.

Gemma termino su cena lo más rápido que pudo, Harry solo sonreía al ver a su hermana atragantarse, después de media hora salieron rumbo al hospital donde Mía se encontraba, a Gemma en la academia le habían dicho dónde estaba hospitalizada Mía.

-La señorita Moore por favor.-le dijo Harry a la recepcionista.

-En el tercer piso, área de cuidados intensivos.-respondió la recepcionista.

-Gracias.-dijo Harry mientras tomaba a Gemma de la mano para dirigirse hasta el tercer piso. Estando en el tercer piso volvió a pedir información de Mía.

-La señorita Moore por ahora no puede recibir visitas.-le indicó la enfermera.

-Lo siento Gemma.-se disculpó Harry.

-¿Buscas a Mía Moore?-preguntó una chica alta de rizos.

-Sí.-respondió Gemma.

-Es mi hermana, ahora está descansando, Danielle Moore.-dijo extendiendo su mano.

-Gemma Styles.-hizo lo mismo.-Y él es mi hermano Harry.

-Mucho gusto.-ofreció su mano Harry.

-Igualmente.-sonrió Dani.-Eres muy joven para ser amiga de mi hermana.-se dirigió a Gemma.

-En realidad soy su alumna.

-Oh eres la chica del protagónico ¿verdad?-preguntó sonriente Dani, Mía le había hablado muchas veces a Dani sobre Gemma, le había dicho cómo era físicamente.

-Sí, y quise venir a verla porque fue por ella que logré ese papel.-Gemma estaba a punto de llorar.

-Ven cariño, la podemos ver desde la ventana nada más.-la llevó Dani hasta dónde se encontraba Mía, Harry las siguió.

Gemma quedó impactada al ver a su maestra postrada en una cama conectada a un respirador y con muchos cables a su alrededor, sentía como su corazón sufría por ver a Mía así, no pudo más y soltó unas lágrimas.

-¿Cómo sucedió?-dijo entre sollozos Gemma.

-No lo sabemos.-Dani abrazó a Gemma.-Ella venía en el auto con su novio y un hombre venía manejando un camión en estado de ebriedad y chocó con el carro dónde ella iba.-A Danielle se le quebró la voz.

Harry al escuchar eso se quedó mirando a Mía, él había visto aquel accidente, vio cómo el carro en el que viajaba Mía se destrozaba cuando el camión lo impacto.

-Danielle ¿cuándo fue el accidente?-preguntó perplejo Harry.

-La madrugada del sábado.

-Ella es.-dijo Harry con su mirada en Mía aún.-Ella es.

-No entiendo.-dijo Danielle.

-Yo… yo vi cómo fue ese choque.-habló nervioso Harry.

-¿Qué?-dijo Gemma confundida.

-Es que yo el viernes salí a una fiesta…

***

Era viernes por la noche, Harry tenía planes para esta noche, su amigo Louis le dijo que no lo acompañaría esta vez, pues él se lo perdería, Harry no pensaba dejar su viernes de “saliditas” solo porque su mejor amigo ya tenía una pareja, así que decidió ir solo. Fue al bar que siempre frecuentaba.

-Harry.-lo saludó Max, el barman.- ¿Y dónde dejaste a tu amigo hoy?

-Él no quiso venir hoy, ya tiene pareja.

-¿Lo mismo de siempre?-le ofreció Max.

-Sí lo mismo de siempre.

Harry sabía muy bien que sin su amigo de juergas no podía divertirse, sentía que no era lo mismo, así que estuvo un rato en el bar hablando con Max y otros amigos más pero no tomó más que un solo trago, pues no estaría Louis con él para que luego manejara.

Eran cerca de las 2 de la mañana cuando Harry decidió retirarse puesto que esa noche no tendría diversión, manejaba por la autopista que lo dirigía hasta su casa cuando en eso nota que un camión viene en sentido contrario, él hizo maniobras para alejarse del camión y logra desviarse de la autopista, pero notó que un auto que venía tras de él no pudo hacerlo, el gran camión impacto contra el pequeño automóvil dejándolo totalmente destruido.

-¿Si con emergencias?-Harry llamó a la policía.-Acaba de ocurrir un accidente en el Km 54… gracias.

Harry esperó hasta que la policía junto con los bomberos llegarán y pudieran rescatar a las personas que iban en ambos vehículos.

-Tomaremos sus declaraciones señor Styles.-le dijo el policía de turno a Harry.

-¿Ya vio si alguno de los dos está vivo?-preguntó preocupado Harry.

-Al parecer la muchacha si lo está, pero el joven no, murió instantáneamente, no tenía puesto el cinturón de seguridad.-informó el policía.

-Espero sirva de algo mi ayuda.

-Claro que servirá señor Styles, gracias de antemano.

Después de eso Harry volvió a su casa aún impactado por lo que había visto, una pareja había sido la que estaba viajando el auto que sufrió la mayor parte del accidente y al parecer el novio fue quien murió, sintió tristeza por aquella chica.

***

-Entonces fuiste tú quien llamó a la policiía.-dijo Danielle

-Sí, pero jamás pensé que fuera Mía la que iba en ese vehículo.

-Harry lo que hiciste sirvió de mucha ayuda, si tu no los hubieras llamado mi hermana ahora no estaría con nostros.-Harry no entendía.

-¿A qué te refieres?-preguntó confundido.

-El doctor nos dijo que mi hermana había llegado al hospital con las justas, que fue un milagro que resistiera tanto.-Dani derramaba lágrimas.-Y juro que con mi mamá lucharemos hasta que ese hombre pague.

-Tranquila Danielle, estoy seguro que la policía hará bien su trabajo.-trató de calmarla Harry.

En ese momento llegó Liam junto con la señora Ana, ambos habían ido a la capilla del hospital a rezar por Mía.

-Amor ¿qué te pasó?-preguntó Liam mientras abrazaba a Dani.

-Nada cariño, es solo que no quisiera perder a mi hermana, estamos pasando por lo mismo de hace 4 años.

-Tranquila amor, yo estoy contigo.-dijo dándole un beso en la frente.

-Hija, esta vez tu hermana si sobrevivirá, tu padre quiere que ella se quede con nosotros.-la animó su mamá.

-Mamá ellos son Gemma y Harry.-los presentó Danielle.

-Un gusto.-dijo la señora Moore.

-Igualmente.-dijeron Gemma y Harry.

Harry y Gemma se quedaron junto a la familia Moore unas dos horas más, Harry le explicó a la señora Ana cómo fue el accidente y le ofreció su ayuda para que se haga justicia con Mía y Greg.

por **IngridGarcia1D** Miér 10 Jul 2013, 10:56 am

CAPITULO 5

Ya había pasado una semana desde que Mía despertó, ahora se encontraba en la comodidad de su casa bajo las atenciones de su madre, ya mañana volvía a retomar sus labores en la academia, era lo que más quería, aun así estuviera con un brazo enyesado Mía no quería dejar por nada del mundo la obra que estaba preparando, estaba a poco de dos meses de su estreno, además que en eso podía entretenerse después de haber perdido a su novio en ese trágico accidente.
-Greg no sé por qué te fuiste, tú me prometiste estar siempre a mi lado.-lloraba junto a la tumba de su prometido.-Me hubieras llevado a mí contigo, tú sabes bien que no soy feliz.-sollozaba.
-Mía amor.-le habló alguien en un susurro.-Tus alumnos te necesitan, tu felicidad esta en este mundo, solo tienes que saberla buscar.
-¿Greg? ¿Dónde estás?-preguntó confundida Mía.-No me dejes por favor.
-No te dejaré amor, siempre te cuidaré, pero es hora de que seas feliz.
-Contigo era feliz.-volvió a llorar Mía.
-Habrá otra persona que te hará muy feliz.

-Mañana ya llegará Mía de nueva a la academia.-le dijo Gemma muy alegre a Harry.
-Qué bueno que ya se este recuperando, ojalá no este tan mal por la muerte de su novio.-dijo apenado Harry.
-Lo debe estar, se iban a casar muy pronto.-dijo Gemma.
-Debe ser feo perder a la persona con la que te casarás.
-Pobre Mía, pero yo haré que no este triste.-sonrió Gemma.-Harry y cuándo conoceré a una novia tuya-preguntó divertida Gemma.
-Jamás, ya no volveré a tener novias, todas solo buscan mi dinero.-Harry recordó lo que hizo Kate.
-Hermano, todas las mujeres no son como Kate, yo no soy como ella y Mía tampoco.-dijo Gemma.
-No saldría contigo porque eres mi hermana, y con Mía, bueno a ella no la conozco.
-Conócela.-lo motivó Gemma.
-Si piensas que entre tu profesora y yo puede pasar algo estás equivocada, creo que ya debes ir a dormir es tarde.
-Sería una buena idea, ambos formarían una linda pareja.-sonrió nuevamente Gema.
-¡A dormir!-le gritó Harry haciendo que Gemma se fuera a su habitación riendo, ella esperaba ansiosa el día de mañana, ya que después de una larga semana vería por fin a su profesora, en la academia la extrañaban mucho.

Hoy Mía volvería nuevamente a retomar sus labores, pero ni eso podía mantener que los recuerdos de su novio muerto vinieran a su mente.
-Hija, espero tengas un buen día.-le dijo Ana a Mía.
-Mis días ya no serán buenos mamá, él se ha ido, mi vida no tiene sentido sin él.-habló con tristeza Mía.
-Mía, hija, si Greg se fue es por algo, tú todavía tienes que vivir.
-¡Yo no quiero vivir!-gritó Mía.-No si no es con él, lo amo demasiado.
Ana solo abrazaba a su hija mientras se le rompía el corazón verla llorar de esa manera, no soportaba ver a su hija destrozada, ella la entendía perfectamente, pues hace 4 años Ana pasó por lo mismo al perder a su esposo, a su amado, de la misma manera en que Mía había perdido a Greg.
-Amor hay mucha gente aquí que te ama, y no queremos verte así.-le habló Ana.
-Es que no entiendo, por qué tuvo que irse así, por qué Dios me lo arrebató de esa manera.
-Ya no pienses en eso.
-Mamá…-lloraba Mía.-no puedo… siento que me falta algo.
-Te entiendo hija, pero tienes que seguir con tu vida.-le dio un beso en la frente.
-¿Todo estará bien?-preguntó aun entre sollozos Mía.
-Sí hija, todo estará bien, lo prometo.-le sonrió Ana.
Mía como un día cualquiera se dirigió hasta la academia, esta vez tomo un taxi ya que la casa de su madre estaba un poco lejos de la academia, trataría de hacer lo que su mamá le dijo, seguir con su vida, aunque ella sabía que ya nada sería igual, ya no tenía a Greg a su lado para platicarle cómo le fue su día, ya no estaba esa ilusión de llegar de blanco al altar, ya no tenía al amor de su vida, y el simple hecho de pensar en todo eso entraba nuevamente en depresión.
Llegó a su salón de clases y todos sus alumnos le habían preparado una pequeña bienvenida, en el pizarrón se apreciaba en letras grandes dibujadas a tiza diciendo “Bienvenida Mía” y en todo el resto del pizarrón el nombre de todos sus alumnos, cada uno se acercó a ella y le dio un abrazo y un beso, acompañado también de una rosa blanca, las favorita de Mía, ella solamente les ofrecía una sonrisa.
-Gracias chicos por esto, no debieron molestarse.-dijo Mía cuando ya la bienvenida había terminado.
-No fue nada profesora, la extrañamos mucho.-habló Jack, un joven de cabello rojizo, uno de los mejores alumnos. Mía le regaló una sonrisa.
-Mía espero que vuelvas a estar a cargo de la obra.-habló Gemma.
-Claro, esta tarde ya vendré a ponerme al día.-le respondió Mía.
El resto del día para Mía fue tranquilo, cuando llego la hora del almuerzo nuevamente se deprimió, pues no almorzaría con Greg como de costumbre, en eso una llamada irrumpe sus recuerdos.
-¿Hola?-contestó Mía.
-Mía, qué te parece si hoy almorzamos juntos.-le habló su mejor amigo.
-Gracias Niall, pero hoy me quedaré todo el día en la academia, en serio lo siento.-se excusó Mía.
-No hay problema Moore, pero mañana no te escapas ¿eh?.-Mía rió, siempre le causaba gracia cuando Niall la llamaba por su apellido.
-Está bien Nialler, mañana si almorzamos juntos.
-Te veré mañana entonces.
-Hasta mañana.-colgó Mía. De alguna manera sentía que Niall sólo la invitaba a almorzar para que se vaya acostumbrado a la idea de que Greg ya no estaría con ella, nuevamente lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.

-Entonces ¿qué tal le pareció la bienvenida a la señorita Moore?-preguntó Harry.
-Bien, se puso un poco nostálgica, pero trato de sonreír siempre, aunque no tenía la misma sonrisa de siempre.-le dijo Gemma.
-Gemma es entendible, acaba de perder al amor de su vida, es obvio que no va a sonreír igual.
-Sí lo sé, pero igual, Mía ha perdido algo de ella, y no me refiero a su novio, sino que pareciera que no ve la vida como antes.
-¿A qué te refieres?-preguntó un curioso Harry.
-A que ella amaba darnos clases, pero hoy noté que lo hacía solo por compromiso.
-Tal vez son solo ideas tuyas enana.
-Ojala, pero igual, mi profesora no está bien.
-Dale tiempo para que se recupere, mejor cuéntame cómo es eso de que Zayn y tú ya no están.-preguntó con una sonrisa Harry.
-No sé por qué te alegras que ya no esté con él, y aún seguimos, solo fue una pequeña discusión.
-No me alegro, solo que cómo ayer le gritaste “Quédate con esa zorra” me dio gracia recordar tu cara.
-Te odio Harry, mejor llévame de nuevo a la academia, hoy tengo ensayo.
-Como diga señorita Styles.-Gemma rió ante el comentario de su hermano.

-Es todo por hoy, ya pueden ir a sus casas.-dijo Mía cuando termino el ensayo.
-Pero aún no me sale bien la escena.-dijo Jack.
-Tenemos dos meses aún, luego saldrá bien.-le dijo Mía, lo cierto era que Mía no quería saber nada de nada, solo quería recostarse en su cama y olvidarse de todo.
-Mía, creo que Jack tiene razón, no podemos irnos hasta que salga la escena.-intervino Gemma.
-Quédense ustedes entonces, yo dije que el ensayo terminó.-Mía alzó la voz.
-Está bien.-dijo agachando la cabeza Gemma.
Mía al ver la reacción de Gemma sintió que había hecho mal en gritar a su alumna, ella no tenía la culpa de todo lo que le estaba pasando.
-Gemma, lo siento, es solo que no me siento bien hoy, si gustan quédense ensayándola ustedes y mañana la revisamos ¿vale?-miró a ambos chicos.
-No hay problema Mía, tranquila.-le sonrío Gemma.

***
MÍA

(Hago un parentesis para recomendarles que pueden leer esta parte del caoítulo con la canción moments,disfruten)
Mi vida ya no tenía sentido, nada tenía sentido ahora si no está él, lo extrañaba más que a nada en el mundo, es en estos momentos de mi vida que odio todo lo que existe a mi alrededor, incluso lo odio a él por haberme dejado de esa manera, él juró estar conmigo siempre, pero me dejó, me dejó faltando poco tiempo para ser felices, faltando poco para jurarnos amor eterno frente a Dios, frente a todos, Greg se ha ido y me ha dejado con un pena, con un dolor, que a nadie se lo desearía.
Habían pasado ya dos semanas de ese trágico accidente, estaba sentada en su tumba hablándole, diciéndole lo mucho que lo amo, y lo mucho que lo odio a la vez, lloraba por que no está conmigo. Todas estas dos semanas me las he pasado llorando, estuve en casa de mi madre la primera semana después del accidente, pero después creí conveniente volver a mi apartamento, ya que en casa de mi madre no podía llorar con más libertad como lo hago aquí.
Estas dos semanas he sido prácticamente una “antisocial y amargada”, lo cierto es que no tenía ganas de salir, ni de hablar con alguien, con las únicas personas que hablaba era mi madre, mi hermana y mis alumnos, pero no para charlar por horas como una conversación normal, sino porque de alguna forma tenía que emitir palabras, Niall me invitó muchas veces a almorzar con él pero siempre terminé rechazándolo, me dolía rechazar a mi mejor amigo, el único que entendía perfectamente cómo me sentía en realidad, pero no quería hablar con nadie, después cuando esté mucho mejor tal vez le llame.
En la academia no me ha ido muy bien que digamos, siempre estaba de mal humor y tratando de alejar a mis alumnos, les contestaba de manera cortante y algunas veces hirientes, ya había tomado de nuevo a cargo la producción de la obra teatral que iba a realizarse casi a un mes y medio, y no era lo suficientemente responsable cómo para hacer un buen trabajo, pero es que ahora ya nada me llamaba la atención, ya no me importaba si salía bien o no, la vida ahora me apestaba.
Después de regresar del cementerio, estuve en mi habitación recostada en la cama recordando muchos momentos que viví junto a Greg, todas nuestras citas y salidas que teníamos juntos, muchos recuerdos inundaron mi mente como si de una película se tratase, en uno de ellos vino a mi mente cómo fue que lo conocí.
En una de las tantas visitas que hacía a la casa de Niall conocí a Greg, yo había ido a ver a mi mejor amigo porque teníamos que hacer juntos un trabajo para nuestra calificación final del semestre en la escuela, era un proyecto de ciencias, recuerdo que ni Niall ni yo tenía idea alguna de qué podíamos hacer, entonces Niall le pidió ayuda a su hermano mayor para que nos diese algunas ideas, él le dijo que no tenía tiempo ya que estaba en exámenes finales en la universidad, ambos estaban discutiendo en la cocina mientras yo pensaba en algunas ideas pero no se me ocurría nada, entonces Niall regresó a la sala junto con su hermano y yo sin querer derramé la silicona líquida que tenía en mi manos sobre su camisa, lo miré avergonzada porque era una camisa muy bonita, Niall se echó a reír porque era la camisa favorita de su hermano, le dije como diez veces lo siento y Greg solo me miraba con una sonrisa hasta que luego me dijo “No importa, es solo una camisa” yo en ese momento quería que me tragara la tierra porque apenas vi su sonrisa me encantó.
Siempre le agradecía a Niall porque fue gracias a él que conocí al amor de mi vida, estuvimos juntos por cerca de 7 años, desde que tuve 16 fue mi amor único, ahora solo quedan los recuerdos, recuerdos hermosos que jamás volveré a vivirlos, me levanté de mi cama con mi rostro lleno de lágrimas y empecé a arrojar todo lo que encontraba en mi paso, lloraba desconsoladamente y tiraba todas las cosas que se encontraban en mi cómoda, mientras las lanzaba por el aire gritaba frases incoherentes, frases de rencor, de odio, y sobre todo de reproche porque él me había dejado.
-¿Por qué te fuiste?-grité mientras arrojaba un portarretratos con una foto de los dos.-Juraste estar conmigo siempre.-grité entre sollozos.-Greg regresa.-dije casi en un suspiro, me deslicé por la pared que estaba atrás mío quedando sentada en el suelo, recogí mi rodillas llevándolas hasta mi pecho y lloré, lloré mucho y seguía gritando, jamás pensé llorar tanto después de la muerte de mi padre, ahora los dos hombres de mi vida se habían ido y me habían dejado sola.
No sé cuánto tiempo fue que estuve llorando en el suelo hasta que me quedé dormida. Después de un rato escuché murmullos a mi alrededor, quise abrir mis ojos pero estaba muy cansada y no quería hacerlo, sentí que unos brazos me rodearon y me cargaron, mientras escuchaba lo que decían.
-No puedo dejar que mi hermana siga de esta manera.-escuche una voz femenina.
-Danielle tranquilízate, si te ve llorar será peor.-escuché esta vez a un chico.-No debieron dejar que deje la casa de tu madre.
-Ella se fue sin avisarnos, solo dejo una nota y se fue, incluso dejó sus cosas allá.
-Ya eso no importa, busca en el botiquín algo de alcohol y trae su inhalador, es un milagro que no le haya cogido un ataque de asma.
Después de escuchar a mi hermana hablar con su novio sentí un fuerte olor a mi alrededor, alcohol, gracias a eso logré despertar, ni bien abrí mis ojos mi hermana me envolvió en sus brazos.
-Mía ¿estás bien?-preguntó de inmediato, solo asentí lentamente con mi cabeza y volví a abrazarla.-Estamos muy preocupados por ti, mamá sobre todo, ¿por qué no nos llamaste?
-Quería… estar sola.-hablé con dificultad.
-No es bueno estar sola Mía.-me volvió a abrazar.
-Mía, en casa todos te extrañamos.-habló Liam.-Es mejor que estes allá con tu madre que en este lugar sola.-me dio una sonrisa. Negué rápidamente, no quería gente a mi alrededor, eso me ponía aún más triste porque ellos eran felices y yo no.
-Mía, hermanita, vamos a casa ¿sí?
-NO.-hablé fuerte.-Entiéndanme, solo quiero estar SOLA.-dije exasperada.
-Pero no estás bien.-dijo Danielle.-Mírate, has bajado mucho más de peso, estas demacrada y no sé siquiera si sigues tomando tus pastillas.
-Estoy bien.-volví a decir.
-Mía, no, no estas bien.-habló nuevamente Liam.-Tu mamá te necesita, la estas matando sin darle alguna noticia tuya.
Me quedé impactada con esas palabras “LA ESTAS MATANDO”, no puede ser, yo no puedo estar matando a mi madre, no soportaría ver como otra persona que amo muere, si eso pasara yo también me moriría.
-No digas eso, yo no estoy matando a mi mamá.-dije agitando mi cabeza.
-Sí lo estás haciendo, regresemos a casa para que ella esté tranquila.-me dijo Liam.
-Mía, hazlo por ella, no por nosotros sino por mamá.-me miró triste.
No podía resistirme ante tal petición, ahora que no tenía a Greg a mi lado mi madre era un gran soporte para mí, ella había luchado por nosotros cuando papá murió, ella se hizo la fuerte y lloró muy poco la partida de mi padre, muchas veces creí que no lo amó lo suficiente como para no llorar su partida como lo hicimos mi hermana y yo, pero después entendí que mi mamá solo fingía ser fuerte, porque sí lloraba la muerte de mi padre, pero cuando estaba sola, cuando mi hermana y yo no la veíamos ya que no quería que nosotras estuviéramos mal.

-Está bien.-dije en un suspiro, no podía dejar que mi madre me dejara, o bueno no podía dejar a mi madre.

por **IngridGarcia1D** Miér 10 Jul 2013, 3:44 pm

CAPITULO 6

Estaba a dos semanas de que se presente la obra de teatro, poco a poco iba recuperándome de la pérdida de Greg, aún lloraba su partida pero en menor intensidad, mi madre si estaba mal con mi depresión, y fue por eso que regrese a su casa, pero solo por un mes, cuando ya estaba mejor de mi depresión volví a mi apartamento, es decir hace dos días atrás, estaba volviendo a retomar mi vida, iba a la academia a dar mis clases, trataba con cariño a mis alumnos y le ponía esfuerzo y dedicación a mi producción, almorzaba junto con mi mejor amigo, todos los días pasaba por mí para ir a almorzar a algún lugar, deje de concurrir el restaurant al que solía ir con Greg, lo hice más por mi salud que por gusto, me encantaba ir a ese lugar, pero no era sano para mí en estos momentos. Ahora más que nunca le ponía empeño a la obra que estaba dirigiendo, quería que todo saliera perfecto.

-Mía ya solo faltan dos semanas.-me dijo Gemma muy alegre.

-Así es, y ya solo falta ensayar la última escena y ya podremos hacer el ensayo general.-le sonreí.

-Pero aún me da pena besarme con Jack.-dijo Gemma mientras se le ponían rojas sus mejillas.

-Es solo actuación linda.-traté de tranquilizarla.

-Lo sé, pero mi novio vendrá a verme y no me gustaría que me vea besando a Jack.

-Cariño, él debe entender que es tu pasión, que se trata sólo de actuación.
Soltó un suspiro que me hizo sonreír.-Ojalá lo entienda. No hay forma de que omita la parte del beso ¿verdad?-preguntó esperanzada.

-No, lo siento, así está escrito el guión.

-Bien, entonces tendré que prepararlo psicológicamente para que no le de algún ataque en medio de la escena.-sonreí ante su comentario.

-Buscan a la señorita Styles.-nos indicó el conserje de la academia, al parecer ya había venido su hermano a verla.

-Josef, puedes decirle a mi hermano que pase.-le dijo Gemma al conserje.

-Está bien.-le dijo Josef.

-Mía, quiero que Harry vea una parte de la obra, quiero que me dé su opinión.

-Está bien, dile a Jack que escena harán.

Por lo que veía Gemma era muy unida a su hermano, hasta ahora no tenía el gusto de conocer con sus papás, puesto que a todas las reuniones que se organizaban asistía su hermano como su tutor.

-Buenas tardes.-dijo Harry mientras se recostaba en el marco de la puerta.

-Buenas tardes.-le di una sonrisa.

-Gemma me dijo que…-lo interrumpí.

-Sí, adelante, tome asiento, está terminando de prepararse.-le indiqué.

-Bien, gracias.-dijo mientras tomaba asiento.

Fui hacia atrás del escenario para ver qué es lo que estaba haciendo Gemma, ella venía caminando con su vestuario ya puesto y atrás de ella venía Jack.

-¿Ya está sentado?-peguntó Gemma algo nerviosa.

-Sí, está esperando a verte.-le sonreí para tranquilizarla.

Me dirigí a los asientos para poder observar la escena de Gemma, me senté a unos cuatros asientos de dónde estaba sentado Harry. Gemma salió interpretando su papel junto con Jack, amaba la forma en la que estos dos adolescente interpretaban sus personajes, sentían pasión hacia la actuación, Gemma me hacía recordar a mí en mis épocas de aprendiz, recuerdo que en mi primera presentación en vivo me puse demasiado nerviosa antes de salir al teatro, pero gracias a Greg me tranquilicé, él antes de que yo actuara fue a verme a mi vestidor sólo para decirme lo mucho que me amaba y lo tan orgulloso que estaba de que yo hiciera el protagónico, sus palabras vinieron a mi mente y no puede evitar llorar, en menos de lo que pensé yo ya estaba con mis ojos rojos y llenos de lágrimas antes los recuerdos.

-Mía ¿te sientes bien?-me preguntó Gemma, al parecer había interrumpido su escena.

-Sí, lo siento, es solo que…-no pude terminar la frase porque estallé en lágrimas, en eso siento cómo unos brazos me toman por la espalda y me arrullan.-Lo extraño más que a nada.-sollocé.

-Ya tranquila, él te cuida desde el cielo ahora.-me dijo la persona que me estaba abrazando.

-¿Mía?-preguntó alguien desde la puerta, alcé mi mirada para ver de quien se trataba.

-Niall.-dije en un suspiro mientras iba a abrazarlo soltándome del abrazo de Harry, Harry era quien me había abrazado, por alguna extraña razón me sentí protegida, sentí cómo me calmaban sus brazos.

-¿Qué tienes?-preguntó preocupado mi amigo.

-Nada es solo que recordé algo.-dije en voz baja.

-Vamos Mía, dijimos que nada de recuerdos.-me dijo Niall mientras tomaba mi mentón con sus manos.

-Es que no lo puedo evitar.-dije soltando nuevas lágrimas. Niall me abrazó.

-¿Te parece si vamos a almorzar?-me preguntó, como siempre lo hacía.

-Sí está bien, pero antes.-dije secando mis lágrimas.-terminemos de ver una escena que interrumpí.-dije mirando a Gemma.

-No te preocupes Mía, si no te sientes bien lo haré otro día.-pude notar un poco de desilusión en la mirada de Gemma.

-Me siento mejor ya, quiero ver tu escena, además tu hermano.-dirigí mi mirada hacia Harry.-no ha venido en vano.

-Está bien.-dijo con una sonrisa Gemma.

Junto con Harry y Niall nos sentamos a ver la escena de Gemma y Jack, estaban a punto de concluir su escena con un beso cuando en eso Harry interrumpe.

-Creo que es una hermosa escena, pero ¿es necesario el beso?-preguntó Harry antes de que Gemma y Jack se besaran, reí ante su pregunta.

-Sí lo es, así es como está escrito el guión.-le sonreí, siempre me parecía gracioso este tipo de cosas, es decir, celos por una simple actuación.

-No creo soportar ver eso, es que aún no me acostumbro a la idea de que mi hermana este intercambiando saliva con alguien más.-hizo una mueca.

-Harry.-exclamó Gemma, pude notar que estaba avergonzada ante el comentario de su hermano.-Es solo una escena.

-Y ¿ya lo sabe Zayn?-preguntó Harry mientras enarcaba una ceja.

-No, pero ya lo prepararé psicológicamente.-volví a reír ante el comentario de Gemma.

-Los hombres deben dejar de ser tan celosos y entender que solo se trata de actuación.-intervine.

-Deberías entender eso Harry.-le dijo Gemma a su hermano.

-Bien, trataré de ser fuerte cuando vea aquel beso.-dijo Harry mientras cerraba sus ojos.

-Bueno Gemma y Jack, ha salido genial la escena, hoy en la tarde no habrá ensayo, nos vemos mañana.-les dije mientras tomaba mi bolso.

-¿Por qué no almorzamos juntos?-preguntó mi amigo, lo miré algo extrañada.

-Me parece una buena idea.-concordó Harry.-¿Qué opina tu amigo, Gemma?

-Yo no puedo, gracias por la invitación.-dijo Jack.-Los veo mañana.-se dirigió hacia la puerta.

-¿Y bien?-volvió a hablar Niall.

-Tengo apetito de pasta.-dije en forma de aceptación ante la propuesta del almuerzo.

-Entonces almorzaremos pasta.-dijo Harry.

Fuimos juntos a un restaurant que Harry recomendó como el mejor en preparar pasta, Gemma llamó a alguien que al parecer era su novio, porque cuando llegó al restaurant Harry se puso algo serio.

-Zayn llegaste.-dijo Gemma con una sonrisa en su rostro.

-Hola linda.-la saludó con un beso en la mejilla.-Hola Harry.-le ofreció la mano.-Y hola a…-no termino la frase porque no sabía quién era yo y mi mejor amigo.

-Zayn ella es Mía, mi profesora y él es…-también dejó al aire la frase.

-Él es Niall mi mejor amigo.-no podía creer que haya olvidado presentar a mi mejor amigo antes.

-Mucho gusto.-dijo Zayn.

-Igualmente.-respondí.

-Así que tú eres la famosa Gemma.-dijo Niall, haciendo que Gemma se sonrojara un poco.-Mía no para de hablar de ti, dice que eres su mejor alumna.

-Gracias.-dijo Gemma.

-No puedo esperar a que vean la obra, sé que les encantará.-le dije a todos.

-Ya lo creo, confío en tu talento Mía.-dijo Niall.

-Y yo no puedo esperar a ver a mi novia actuando.-comentó Zayn.

-¿Ya le dijiste Gemma?-preguntó Harry.

-Decirme qué.-dijo un confundido Zayn.

-Harry.-le regañó Gemma.-Luego se lo diré.

-¿De qué hablan?-volvió a preguntar Zayn.

-Lo que pasa es que Gemma be…-Gemma interrumpió a su hermano.

-Zayn, en mi guión tengo que besar a alguien casi al finalizar la obra.-comentó Gemma algo preocupada.

-¿No puedes omitirlo?-al parecer a Zayn tampoco le gustaba la idea de que Gemma besara a alguien más.

-Zayn, es solo actuación, soy su profesora y puedo asegurarte eso, los hombres deberían tener un poco más de confianza y entender esto.-intervine, quería aclarar cómo eran las cosas.

-Solo espero que no sea largo.-comentó el novio de Gemma.

-No lo será.-le dijo Gemma sonriendo.

El resto del almuerzo se pasó en pláticas y recuerdos de la infancia de Gemma, Harry nos contaba muchas anécdotas graciosas de su hermana haciéndola sonrojar, Gemma tampoco se quedó atrás, cada vez que tenía oportunidad la aprovechaba para decir algo gracioso acerca de Harry.

-Fue un placer almorzar con ustedes.-dije despidiéndome.

-El pacer fue mío señorita Moore.-indicó Harry.

-Dime solo Mia.-le sonreí.

-Gracias por todo.-dijo mi amigo.-Espero verlos pronto.

-Igualmente.-sonrío Gemma.

-Adiós.-me despedí alzando una mano y agitándola.

Junto con Niall salimos del restaurant y él se ofreció a llevarme a mi apartamento, en estas últimas semanas se había vuelto un poco más atento de lo normal.

-Entonces Mía te veré mañana.

-Niall, mañana tendré un día agitado, no creo poder almorzar contigo.

-No importa, igual si necesitas algo me llamas.

-Lo tendré en cuenta, hasta luego.-le sonreí.

-Te veo después Mía.

Después de que Niall se haya marchado decidí ir a terminar de arreglar unas cosas para la obra, ya mañana empezaré el ensayo general y quiero que todo salga bien desde el primer día. Estaba ordenando unos papeles cuando en eso una llamada telefónica interrumpe la tranquilidad de mi habitación.

-¿Mía?-hablaron al otro lado de la línea.

-Sí, quién habla.-pregunté al no reconocer la voz.

-Soy Lili, tu prima que vive en España.-automáticamente recordé a mi prima, digamos que fue mi mejor amiga cuando vivíamos juntas.

-Lili ¡qué sorpresa!-le dije emocionada.

-Me alegra saber que este es tu número, ¿cómo estás?-preguntó alegre.

-Bien, gracias, y a qué debo el motivo de tu llamada.

-Oh, es que iré unas semanas a Londres y quería pedirte un favor.

-El que quieras Lili.

-Quería saber si puedo quedarme contigo, solo por unos días en lo que encuentro un hotel.

-Nada que unos días, todo el tiempo que quieras puedes quedarte acá, además vivo sola.

-Y ¿Greg? No me digas que cancelaron la boda.-cuando mi prima preguntó eso sentía que el mundo se me caía, todos los recuerdos vinieron nuevamente a mi mente, pensar que me iba a casar y ahora todo estaba en nada.

-N…no.-dije con dificultad.-Greg…fa…falleció.-dije tartamudeando.

-Oh Mía, cuánto lo siento.-se disculpó mi prima.

-No te preocupes.-dije limpiándome unas lágrimas.-¿cuándo llegas?

-El viernes por la mañana, igual de todos modos te llamaré.

-Perfecto, que tengas un buen viaje Lili.

-Hasta el viernes mía.-apenas colgué el teléfono solté en llanto, quería ser fuerte ante la muerte de Greg pero cuando alguien lo nombraba o lo mencionaba entraba en una depresión total. Agarré el teléfono en mis manos y lo lancé hacia la pared. Nuevamente la depresión se asomaba.

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