Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 5 de 23. • Comparte
Página 5 de 23. • 1, 2, 3, 4, 5, 6 ... 14 ... 23
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
:( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :( :(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
Lorelou. escribió:Holiii:) nueva lectora je. me encanta, me fascina, me todoo *-* . Siguela porfavooorrrr, siguela NOW!
bienvenida cariño es genial q te fascine ya la seguiré
ElitzJb
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
8
Día 3, 7:02 p.m.
Siempre quiero al que no puedo tener.
(Tn) Maguire.
(TN)
El me ignoró todo el día, lo que está bien. En serio. No me
importa estar sola en la casa de huéspedes porque Oh mi
dios, la última cosa que quiero hacer es pasar el rato con sus
padres. Nick fue al golf con su padre esta mañana y no he vuelto a
verlo. No tengo idea si incluso volverá a casa. Lo que sé, es que podría
estar haciendo el tiempo de la familia feliz en la casa principal mientras
estoy aquí atrapada y sola.
Maldición, suena amargo en mi cabeza. Y además, sé que él no
está en casa porque he estado aquí todo el día y no lo he visto regresar.
Aunque la soledad me ha hecho volver a la realidad. Una vez
más. Y eso es una buena cosa. Me siento demasiado atrapada con
Nick cuando estoy con él y eso definitivamente no es una buena cosa.
De esta manera, pasar tiempo sola en esta casa irreal con una vista
irreal, sé que es una fantasía.
Pillé a Adele husmeando hace un rato alrededor de la casa de
huéspedes. Echando un vistazo a las ventanas, caminando alrededor
de toda la casa. La miré por un rato, escondiéndome en los rincones
pero luego me comencé a enojar. ¿Qué estaba haciendo? ¿Tratando
de espiarme? ¿O buscaba a Nick ?
Finalmente, no pude aguantar más y abrí la puerta cuando la vi
merodeando en la parte delantera. —¿Buscas a alguien? —le pregunte,
usando el tono más arrogante que pude.
Cruzó sus brazos frente a ella, elegante como siempre en un
suéter color blanco puro y botas negras. Me gustaría ver a un
vagabundo
con una ropa similar. Por supuesto, la suya era
probablemente de diseñador y costó un montón de dinero, mientras mi
suéter y mallas venían de Wal-Mart o Target. —Pensé que te habías ido
—dijo.
—Esperabas que me haya ido, estoy segura. —No sé de donde
saqué las pelotas para hablarle así, pero lo hice. El viaje a casa anoche
había sido una tortura. Nadie habló y la tensión era casi insoportable. Un
giro completo desde el paseo al club de campo, cuando Nick y yo nos
besamos y sus manos estaban sobre mí.
Sonrió. —No te gusto mucho, ¿cierto?
—Me di cuenta que el sentimiento era mutuo. —Me encojo de
hombros, tratando de hacer mi mejor esfuerzo de lucir como si no me
importara, pero mi estómago era un batido de nervios.
—No durarás, ya sabes. No eres su tipo.
Fruncí el ceño. Claro, no soy su tipo. Eso es obvio, pero no me
figuraba que la perra de su madrastra tan descaradamente me lo
dijera. —¿Y cuál exactamente es el tipo de Nick ?
—Alguien como yo. —Su sonrisa creció, como si supiera que sus
palabras dieron un puñetazo directamente en mi estómago. Sin decir
una palabra, se dio vuelta y se alejó.
La respuesta de Adele se quedó conmigo todo el día. ¿Qué
demonios quiso decir? No me gusta. Habla sobre Nick , mira a Nick ,
como si le perteneciera. Casi como si tuvieran una relación. Es
jodidamente espeluznante y me pregunto tal vez si han tonteado en el
pasado.
Tan asqueroso. Y da miedo. Nick actúa como si la odiara y eso
abre una nueva lata de gusanos en mi cerebro. Un montón de “qué
pasaría si” que no me gusta pensar porque son demasiado feos para
enfrentar. Nada de eso es mi problema, me lo digo una y otra vez
mientras me siento sola y pienso.
Pero me trajo a este desastre. Es un poco de mi problema, ¿no?
Error. Algunas cosas son mejor dejarlas en paz.
No si alguien se daña por esa causa.
Mi debate interno lucha por el resto del día. Hasta que soy un lío
total de nervios mientras espero ansiosamente su regreso. ¿Dónde
puede estar? Sé que los juegos de golf pueden tardar una eternidad,
pero nada como esto. Y sé que está con su papá porque he visto el
maldito garaje durante horas y nadie ha vuelto.
Aunque Adele se fue hace unos treinta minutos. Eso me asusta.
¿Qué si se fue a algún lugar a encontrarlo?
Mierda. No sé qué hacer.
Cuando la puerta finalmente se abre a las siete y media, me llena
de alivio. Oigo sus pasos que resuenan en la entrada de azulejo, lo veo
pasando, se dirige al pasillo mientras me siento en la sala de estar.
Tengo unas de estas increíblemente suaves mantas de piel artificial
cubriéndome y probablemente me mezclo con el sofá. No me nota, no
se molesta en decir una palabra.
Mastico ansiosamente mi uña, mi estómago gruñe ya que no
comí la cena. Lo escucho entrar en su habitación y cerrar la puerta y
dejo escapar un suspiro tembloroso. Estaba conteniendo la respiración y
ni siquiera me di cuenta.
Ni dos minutos más tarde está fuera de su habitación, entrando en
la sala de estar y deteniéndose cuando me ve. —Hola.
—Hola. —Presiono mis labios, diciéndome a mí misma que respire.
—No te vi cuando entré. —Se ve increíble en una sudadera con
capucha negra y shorts cargo de color caqui, el cabello oscuro rizado
por el viento que aquí parece soplar constantemente. Apostaría un
millón de dólares a que tiene una camisa polo debajo. Típica ropa de
golf, aunque debería estar usando shorts a cuadro con colores pastel.
No es que sepa algo de golf.
—He estado aquí sentada todo el tiempo.
Se pasa la mano por la cabeza y mis dedos literalmente pican por
hacer lo mismo. Recuerdo lo sedoso que es su cabello, lo mucho que le
gustó cuando lo toqué allí. ¿Alguna vez realmente permite que alguien
lo toque? Tiende a moverse a través de la vida por sí mismo.
Esa realidad me llena de tristeza. Mientras permito que un flujo sin
fin de chicos me toquen. Lo hago porque lo anhelo por un breve
momento, siento que alguien se preocupa por mí. La sensación siempre
es fugaz y termino tan vacía como estaba antes. A veces más.
—No sabía dónde estuviste todo el día —digo, para llenar el
silencio ya que no habla.
—Lo siento por estar afuera tanto tiempo. —Me pregunto si tomó
mucho de él para que se disculpe conmigo. Apuesto que no tiene que
responderle a nadie la mayoría del tiempo.
Me encojo de hombros. Tengo que actuar como si el hecho no
me molestara. —No soy tu guardián.
—Sí, pero eres mi invitada. Estoy seguro de que te has aburrido
todo el día. —Se acerca al sofá y es entonces cuando el olor me
golpea.
Apesta a cerveza. Y sus ojos están un poco enrojecidos, sus
mejillas sonrojadas. Apuesto a que está borracho. Mi defensa se va
inmediatamente y me empujo a la esquina del sofá mientras se coloca
a mi lado. No me gusta el olor de cerveza, lo que es loco, considerando
que trabajo en un bar.
Pero cuando lo huelo en La Salle, es diferente. Estoy ocupada, me
estoy moviendo, le estoy sirviendo a clientes y trabajando. En una
situación de uno-a-uno, el olor a cerveza me recuerda a mi mamá y a
todos sus novios de mierda. Cómo bebían constantemente. Casi todos
los chicos con los que ha estado eran completamente alcohólicos con
problemas de ira.
Los borrachos enojados me asustan como el infierno y Nick es un
tipo grande con un montón de cosas reprimidas. Si muestra incluso un
atisbo de ira, me voy de aquí.
—Estaba bien —digo—. Me senté en la playa por un largo tiempo.
—¿No te dio frío? El tiempo no era el mejor hoy.
Me encojo de hombros. —Pensé que debería disfrutar mientras
estoy aquí, ¿no? Dudo que alguna vez esté en un lugar tan hermoso
como este.
—Perdón por no estar aquí, (Tn) . —Su voz es suave, su
expresión… rompe mi corazón. Se ve tan sombrío, tan perturbado. Me
gustaría decirle algo, hacer algo para aliviar su dolor.
(NICK )
Como de costumbre, me mira como si pudiera ver mi interior y
hace que me ponga nervioso. Todo el día he estado alejado de (Tn) a
propósito. Lo que pasó anoche me hizo sentir en espiral, totalmente
fuera de control con toda la mierda que pasamos juntos. No me había
sentido de esa forma desde hace tiempo. Esta es la razón por la cual no
puedo volver a casa.
Y nunca voy a volver después de esta visita. No me importa lo
mucho que lastime a mi papá. No puedo seguir con esto. No puedo
pretender en este lugar, estas personas no me importan. Lo hacen. Todo
explota en mi cabeza y me recuerda cómo solía ser. Ya no quiero ser
esa persona. Ya no lo soy.
No hay otra opción. Tengo que alejarme.
Veo a (Tn) , miro la alegría de sus ojos, lo sé debería alejarme de
ella también. Una vez que me conozca sé que podría lastimarla. Sé que
voy a hacerle daño. Creo que está cerca de descubrir cuál es mi
problema. Y si no lo hace, me temo que estoy por decírselo. Una vez
que se lo confiese, no hay vuelta atrás. Eso hará que nos sintamos
incómodos. Arruinaría la relación, la amistad, como se llame lo que sea
que tenemos.
No podía soportar la idea, así que me fui temprano de la casa,
evitando responder a mi papá cuando me pidió ir al golf, no sólo
íbamos a jugar por mucho tiempo, en dieciocho rondas en parejas con
sus amigos, luego seguramente iríamos a un bar. No soy un gran
bebedor pero me encanta tomar una cerveza tras otra, disfruto la
sensación del alcohol. Mi cerebro se nubla, todo se vuelve difuso, es
perfecto para olvidar.
Bromeamos, hablamos, mi papá se jacta de que soy un gran
jugador y eso me hace sentir bien. Papá y yo no tenemos mucho
tiempo juntos. Adele siempre está tratando de arruinar nuestra relación,
o hacíamos algo que no duraba mucho porque era uno a uno. El
almuerzo de ayer fue muy incómodo, estoy agradecido de que a haya
pasado.
El día de hoy la relación con mi padre es buena para los dos. Pero
siempre he tenido un presentimiento que no me deja en paz. Esa es la
razón por la que me estoy alejando de (Tn) y me estoy sintiendo
culpable.
Esto es el por qué le dije que lo sentía.
—Sorprendí a tu madrastra espiándonos esta tarde. —El tono en el
que lo dice es casual, pero sus palabras son como siete pequeñas
bombas cayendo en mí.
La tensión se instala en mi columna vertebral y pasa a mis
hombros. —¿Sí?
(Tn) asiente. —La enfrenté.
—¿Qué? —digo en estado de shock. Siento miedo. ¿Qué pasa si
Adele le dijo algo?
—Sí, no le gustó. Me dijo que lo nuestro no iba a durar, que yo no
era tu tipo.
Me quedo en silencio, temeroso de sus próximas palabras.
—Y cuando le pregunté cuál era tu tipo, me dijo que ella lo era.
La sangre bombea en mi cabeza con cada palabra que dice, no
puedo escucharla. Sus labios se están moviendo pero literalmente no
puedo oírla. Sin pensarlo me levanto y me voy a mi recámara. Me llama,
su voz suena débil y creo que me está siguiendo, pero no estoy seguro.
No puedo verla, mi vista se vuelve borrosa y estoy listo para morirme de
rabia y de vergüenza.
Adele ha ido muy lejos. Otra vez. Siempre lo hace. Quiero decirle
a (Tn) todo pero no puedo.
Tengo miedo de que me odie. Me juzgue. Que esté tan enojada
que me deje.
Estamos en la mitad de este viaje estúpido y todo se está yendo a
la mierda. No sé cómo manejar esto.
(TN)
Sigo diciendo su nombre, pero es como si Nick no pudiera oírme.
Su rostro se vació de toda emoción cuando le dije lo que Adele me dijo
y eso me asustó. Se puso distante enfrente de mí y eso fue muy extraño.
Como si hubiera activado un mecanismo de defensa.
Azota la puerta de su cuarto en mi cara, pero la abro, irrumpiendo
en su habitación como una mujer en misión. Se detiene en el centro de
su cuarto dándome la espalda, su cabeza mirando el techo. Desearía
poder leer sus pensamientos, para consolarlo, decirle algo o lo que sea.
Pero sólo permanezco en mi lugar, infinitamente confundida.
—Deberías irte —dice con una voz sin emoción.
—Bien, te dejaré solo. —Entiendo cuando alguien necesita estar
solo—. De todos modos soy una persona madura.
—No —dice mirándome dura e inflexible—. Quiero decir que
deberías irte, a tu casa. No necesitas estar aquí. Ya no necesito tu
ayuda.
Mi estómago se encoge y siento que voy a vomitar. —No me
importa quedarme…
—No quiero que estés aquí —me interrumpe dejándome con la
boca cerrada—. No necesitas estar alrededor de esta mierda (Tn) . Ya
has vivido lo suficiente.
Siento que voy a llorar. No me quiere aquí. De todas formas nadie
me quiere. A mi mamá no le importa si vivo o muero. A mi hermano sólo
le importan sus amigos. Realmente no tengo amigos, más que algunos
del trabajo y realmente somos conocidos no amigos. Las chicas no me
quieren porque piensan que soy una puta que va robarle a su novio en
cualquier momento.
En este momento estoy sola. Nadie me quiere.
Sostengo mi cabeza en alto, lucho con las lágrimas que
amenazan por salir. —Iré a empacar mi maleta.
Doy media vuelta y me voy de su cuarto y no me detiene. No me
sorprende. ¿Qué es lo que esperaba? ¿Qué me persiguiera y me
suplicara que no me fuera? Por supuesto que no. Mi vida no es una
película o una novela. No le importo. Tengo que recordarlo.
Mi cuarto está obscuro, sólo hay una pequeña luz que proviene
del techo, voy al armario en donde está mi bolsa con polvo y algo rota.
Está medio llena, nunca he desempacado completamente porque
siempre tuve miedo de que algo como esto sucediera.
Supongo que mis habilidades psíquicas están funcionando
completamente.
Empiezo a meter toda mi ropa en el bolso, sin molestarme en
doblar nada. No sé cómo se supone que voy a irme, pero supongo que
podría llamar un taxi y decirle que me llevara a la estación de
autobuses. Tengo dinero en mi cuenta bancaria, así que puedo pagar
mi boleto y volver a casa. Espero no tener que esperar mucho tiempo
en la estación.
Pongo mi teléfono en mi bolsillo, veo la pantalla y veo que Owen
ha enviado un mensaje. Algo relacionado con pasar la noche en lo
Wade otra vez, le digo que está bien que regreso a casa esta noche.
Me responde inmediatamente.
¿Qué sucedió? ¿Te despidieron? ¿El papá te hizo algo? preguntó.
Es una larga historia. Te explicaré cuando llegue a casa. Le
respondí, después guardo mi teléfono en la bolsa de mi pantalón.
Me siento como una fracasada. No puedo ser una buena novia y
lo único que tenía que hacer es estar ahí y lucir bonita. Sonreír, asentir y
no decir nada. ¿Qué tan difícil era?
Enojada conmigo misma, voy al baño y vacío el tocador, quito mi
bolsa de cosméticos, guardo mi máquina de afeitar, mi champú,
acondicionador, todo lo meto en la maleta y la cierro, satisfecha con lo
escandalosa que fui al recoger. Todo tiene eco en esta casa con el
techo alto y las baldosas del suelo. La casa principal me pone de
nervios.
Tal vez sea feliz por salir de aquí. Cuando suba al autobús tal vez
sea capaz de respirar.
Salgo del baño y encuentro a Nick en la puerta, al igual que la
otra noche. Está apoyado en el marco de la puerta con la mitad de su
cuerpo en la entrada. Su vestimenta es para morirse, su camiseta le
queda entallada y sus pantalones le cuelgan a la cadera, dejando
descubierto una parte de su estómago. Veo un poco de bello negro en
su ombligo, cuando levanto mi mirada veo que me está observando,
aparto mi mirada avergonzada, debería de estar enojada con él y no
estarlo comiendo con los ojos.
—No te vayas.
Me petrifico. Esto es ridículo. Todo este estira y afloja está
dañando mi cerebro.
—No estoy de humor para tus juegos Nick .
Entra a mi cuarto y viene al baño. Me volteo para alejarme de él,
hasta que mi trasero golpea el mostrador y me detiene. Estoy
temblando, pero no es de miedo. Es porque está muy cerca, puedo
olerlo.
De alguna manera el olor a cerveza se ha ido y Nick ha
recuperado su olor familiar. Puedo sentir el calor de su cuerpo, la tensión
emana de su cuerpo con ondas potentes.
—Lo lamento (Tn) . Sólo… es que este sitio apesta. Y no te culpo
si quieres irte, sólo te estaba dando una salida. Trataba de
convencerme que es lo mejor, sacarte de aquí, pero no puedo hacer
esto solo. No quiero hacer esto solo. Me gustaría que te quedaras.
—¿Qué es lo vas a hacer solo Nick ? ¿Qué tienen de malo tus
padres? No me estás diciendo nada y mi mente está imaginando cosas.
—Inhalo bruscamente cundo se detiene directamente enfrente de mí,
estamos tan cerca que su pecho toca el mío.
Sin ningún aviso, envuelve sus manos alrededor de mi cintura y me
jala hacia arriba, sentándome en el borde de la repisa del baño. Suelto
un chillido por la sorpresa y se acomoda entre mis piernas. Está tan
cerca de mí que tengo que alejar mi cabeza para verlo, me mira
preocupado.
—No quiero hablar de eso —susurra—. Quiero decírtelo, pero no
puedo.
Toco su rostro y se recarga en mi mano y cierra los ojos. Puedo
estudiar se hermosa cara y siento el deseo de darle un beso. Me pierdo
en él.
—Mantener todo encerrado no es saludable. —Acaricio su mejilla
y abre sus ojos—. Deberías hablar con alguien. —Trato de hacerle
comprender que es mejor que hable acerca de lo que le está
molestando.
—No puedo.
—Está bien, cuando estés listo, sabes que estoy aquí. —Dejo caer
mi mano de su rostro, me apoyo en el borde de la repisa, me estiro un
poco y le doy un beso en su mejilla. Quiero que sepa que estoy con él
pase lo pase. No me importa el tipo de secreto que esconde, tengo la
sensación de que es algo horrible. Quiero estar con él y ayudarlo.
Podría ser algo problemático, pero creo que vale la pena. Este
hombre llegó a mi vida por alguna razón, así como yo entré a la suya.
Tal vez debamos ayudarnos el uno al otro. O darnos esperanza.
_________________________________________________________________Día 3, 7:02 p.m.
Siempre quiero al que no puedo tener.
(Tn) Maguire.
(TN)
El me ignoró todo el día, lo que está bien. En serio. No me
importa estar sola en la casa de huéspedes porque Oh mi
dios, la última cosa que quiero hacer es pasar el rato con sus
padres. Nick fue al golf con su padre esta mañana y no he vuelto a
verlo. No tengo idea si incluso volverá a casa. Lo que sé, es que podría
estar haciendo el tiempo de la familia feliz en la casa principal mientras
estoy aquí atrapada y sola.
Maldición, suena amargo en mi cabeza. Y además, sé que él no
está en casa porque he estado aquí todo el día y no lo he visto regresar.
Aunque la soledad me ha hecho volver a la realidad. Una vez
más. Y eso es una buena cosa. Me siento demasiado atrapada con
Nick cuando estoy con él y eso definitivamente no es una buena cosa.
De esta manera, pasar tiempo sola en esta casa irreal con una vista
irreal, sé que es una fantasía.
Pillé a Adele husmeando hace un rato alrededor de la casa de
huéspedes. Echando un vistazo a las ventanas, caminando alrededor
de toda la casa. La miré por un rato, escondiéndome en los rincones
pero luego me comencé a enojar. ¿Qué estaba haciendo? ¿Tratando
de espiarme? ¿O buscaba a Nick ?
Finalmente, no pude aguantar más y abrí la puerta cuando la vi
merodeando en la parte delantera. —¿Buscas a alguien? —le pregunte,
usando el tono más arrogante que pude.
Cruzó sus brazos frente a ella, elegante como siempre en un
suéter color blanco puro y botas negras. Me gustaría ver a un
vagabundo
con una ropa similar. Por supuesto, la suya era
probablemente de diseñador y costó un montón de dinero, mientras mi
suéter y mallas venían de Wal-Mart o Target. —Pensé que te habías ido
—dijo.
—Esperabas que me haya ido, estoy segura. —No sé de donde
saqué las pelotas para hablarle así, pero lo hice. El viaje a casa anoche
había sido una tortura. Nadie habló y la tensión era casi insoportable. Un
giro completo desde el paseo al club de campo, cuando Nick y yo nos
besamos y sus manos estaban sobre mí.
Sonrió. —No te gusto mucho, ¿cierto?
—Me di cuenta que el sentimiento era mutuo. —Me encojo de
hombros, tratando de hacer mi mejor esfuerzo de lucir como si no me
importara, pero mi estómago era un batido de nervios.
—No durarás, ya sabes. No eres su tipo.
Fruncí el ceño. Claro, no soy su tipo. Eso es obvio, pero no me
figuraba que la perra de su madrastra tan descaradamente me lo
dijera. —¿Y cuál exactamente es el tipo de Nick ?
—Alguien como yo. —Su sonrisa creció, como si supiera que sus
palabras dieron un puñetazo directamente en mi estómago. Sin decir
una palabra, se dio vuelta y se alejó.
La respuesta de Adele se quedó conmigo todo el día. ¿Qué
demonios quiso decir? No me gusta. Habla sobre Nick , mira a Nick ,
como si le perteneciera. Casi como si tuvieran una relación. Es
jodidamente espeluznante y me pregunto tal vez si han tonteado en el
pasado.
Tan asqueroso. Y da miedo. Nick actúa como si la odiara y eso
abre una nueva lata de gusanos en mi cerebro. Un montón de “qué
pasaría si” que no me gusta pensar porque son demasiado feos para
enfrentar. Nada de eso es mi problema, me lo digo una y otra vez
mientras me siento sola y pienso.
Pero me trajo a este desastre. Es un poco de mi problema, ¿no?
Error. Algunas cosas son mejor dejarlas en paz.
No si alguien se daña por esa causa.
Mi debate interno lucha por el resto del día. Hasta que soy un lío
total de nervios mientras espero ansiosamente su regreso. ¿Dónde
puede estar? Sé que los juegos de golf pueden tardar una eternidad,
pero nada como esto. Y sé que está con su papá porque he visto el
maldito garaje durante horas y nadie ha vuelto.
Aunque Adele se fue hace unos treinta minutos. Eso me asusta.
¿Qué si se fue a algún lugar a encontrarlo?
Mierda. No sé qué hacer.
Cuando la puerta finalmente se abre a las siete y media, me llena
de alivio. Oigo sus pasos que resuenan en la entrada de azulejo, lo veo
pasando, se dirige al pasillo mientras me siento en la sala de estar.
Tengo unas de estas increíblemente suaves mantas de piel artificial
cubriéndome y probablemente me mezclo con el sofá. No me nota, no
se molesta en decir una palabra.
Mastico ansiosamente mi uña, mi estómago gruñe ya que no
comí la cena. Lo escucho entrar en su habitación y cerrar la puerta y
dejo escapar un suspiro tembloroso. Estaba conteniendo la respiración y
ni siquiera me di cuenta.
Ni dos minutos más tarde está fuera de su habitación, entrando en
la sala de estar y deteniéndose cuando me ve. —Hola.
—Hola. —Presiono mis labios, diciéndome a mí misma que respire.
—No te vi cuando entré. —Se ve increíble en una sudadera con
capucha negra y shorts cargo de color caqui, el cabello oscuro rizado
por el viento que aquí parece soplar constantemente. Apostaría un
millón de dólares a que tiene una camisa polo debajo. Típica ropa de
golf, aunque debería estar usando shorts a cuadro con colores pastel.
No es que sepa algo de golf.
—He estado aquí sentada todo el tiempo.
Se pasa la mano por la cabeza y mis dedos literalmente pican por
hacer lo mismo. Recuerdo lo sedoso que es su cabello, lo mucho que le
gustó cuando lo toqué allí. ¿Alguna vez realmente permite que alguien
lo toque? Tiende a moverse a través de la vida por sí mismo.
Esa realidad me llena de tristeza. Mientras permito que un flujo sin
fin de chicos me toquen. Lo hago porque lo anhelo por un breve
momento, siento que alguien se preocupa por mí. La sensación siempre
es fugaz y termino tan vacía como estaba antes. A veces más.
—No sabía dónde estuviste todo el día —digo, para llenar el
silencio ya que no habla.
—Lo siento por estar afuera tanto tiempo. —Me pregunto si tomó
mucho de él para que se disculpe conmigo. Apuesto que no tiene que
responderle a nadie la mayoría del tiempo.
Me encojo de hombros. Tengo que actuar como si el hecho no
me molestara. —No soy tu guardián.
—Sí, pero eres mi invitada. Estoy seguro de que te has aburrido
todo el día. —Se acerca al sofá y es entonces cuando el olor me
golpea.
Apesta a cerveza. Y sus ojos están un poco enrojecidos, sus
mejillas sonrojadas. Apuesto a que está borracho. Mi defensa se va
inmediatamente y me empujo a la esquina del sofá mientras se coloca
a mi lado. No me gusta el olor de cerveza, lo que es loco, considerando
que trabajo en un bar.
Pero cuando lo huelo en La Salle, es diferente. Estoy ocupada, me
estoy moviendo, le estoy sirviendo a clientes y trabajando. En una
situación de uno-a-uno, el olor a cerveza me recuerda a mi mamá y a
todos sus novios de mierda. Cómo bebían constantemente. Casi todos
los chicos con los que ha estado eran completamente alcohólicos con
problemas de ira.
Los borrachos enojados me asustan como el infierno y Nick es un
tipo grande con un montón de cosas reprimidas. Si muestra incluso un
atisbo de ira, me voy de aquí.
—Estaba bien —digo—. Me senté en la playa por un largo tiempo.
—¿No te dio frío? El tiempo no era el mejor hoy.
Me encojo de hombros. —Pensé que debería disfrutar mientras
estoy aquí, ¿no? Dudo que alguna vez esté en un lugar tan hermoso
como este.
—Perdón por no estar aquí, (Tn) . —Su voz es suave, su
expresión… rompe mi corazón. Se ve tan sombrío, tan perturbado. Me
gustaría decirle algo, hacer algo para aliviar su dolor.
(NICK )
Como de costumbre, me mira como si pudiera ver mi interior y
hace que me ponga nervioso. Todo el día he estado alejado de (Tn) a
propósito. Lo que pasó anoche me hizo sentir en espiral, totalmente
fuera de control con toda la mierda que pasamos juntos. No me había
sentido de esa forma desde hace tiempo. Esta es la razón por la cual no
puedo volver a casa.
Y nunca voy a volver después de esta visita. No me importa lo
mucho que lastime a mi papá. No puedo seguir con esto. No puedo
pretender en este lugar, estas personas no me importan. Lo hacen. Todo
explota en mi cabeza y me recuerda cómo solía ser. Ya no quiero ser
esa persona. Ya no lo soy.
No hay otra opción. Tengo que alejarme.
Veo a (Tn) , miro la alegría de sus ojos, lo sé debería alejarme de
ella también. Una vez que me conozca sé que podría lastimarla. Sé que
voy a hacerle daño. Creo que está cerca de descubrir cuál es mi
problema. Y si no lo hace, me temo que estoy por decírselo. Una vez
que se lo confiese, no hay vuelta atrás. Eso hará que nos sintamos
incómodos. Arruinaría la relación, la amistad, como se llame lo que sea
que tenemos.
No podía soportar la idea, así que me fui temprano de la casa,
evitando responder a mi papá cuando me pidió ir al golf, no sólo
íbamos a jugar por mucho tiempo, en dieciocho rondas en parejas con
sus amigos, luego seguramente iríamos a un bar. No soy un gran
bebedor pero me encanta tomar una cerveza tras otra, disfruto la
sensación del alcohol. Mi cerebro se nubla, todo se vuelve difuso, es
perfecto para olvidar.
Bromeamos, hablamos, mi papá se jacta de que soy un gran
jugador y eso me hace sentir bien. Papá y yo no tenemos mucho
tiempo juntos. Adele siempre está tratando de arruinar nuestra relación,
o hacíamos algo que no duraba mucho porque era uno a uno. El
almuerzo de ayer fue muy incómodo, estoy agradecido de que a haya
pasado.
El día de hoy la relación con mi padre es buena para los dos. Pero
siempre he tenido un presentimiento que no me deja en paz. Esa es la
razón por la que me estoy alejando de (Tn) y me estoy sintiendo
culpable.
Esto es el por qué le dije que lo sentía.
—Sorprendí a tu madrastra espiándonos esta tarde. —El tono en el
que lo dice es casual, pero sus palabras son como siete pequeñas
bombas cayendo en mí.
La tensión se instala en mi columna vertebral y pasa a mis
hombros. —¿Sí?
(Tn) asiente. —La enfrenté.
—¿Qué? —digo en estado de shock. Siento miedo. ¿Qué pasa si
Adele le dijo algo?
—Sí, no le gustó. Me dijo que lo nuestro no iba a durar, que yo no
era tu tipo.
Me quedo en silencio, temeroso de sus próximas palabras.
—Y cuando le pregunté cuál era tu tipo, me dijo que ella lo era.
La sangre bombea en mi cabeza con cada palabra que dice, no
puedo escucharla. Sus labios se están moviendo pero literalmente no
puedo oírla. Sin pensarlo me levanto y me voy a mi recámara. Me llama,
su voz suena débil y creo que me está siguiendo, pero no estoy seguro.
No puedo verla, mi vista se vuelve borrosa y estoy listo para morirme de
rabia y de vergüenza.
Adele ha ido muy lejos. Otra vez. Siempre lo hace. Quiero decirle
a (Tn) todo pero no puedo.
Tengo miedo de que me odie. Me juzgue. Que esté tan enojada
que me deje.
Estamos en la mitad de este viaje estúpido y todo se está yendo a
la mierda. No sé cómo manejar esto.
(TN)
Sigo diciendo su nombre, pero es como si Nick no pudiera oírme.
Su rostro se vació de toda emoción cuando le dije lo que Adele me dijo
y eso me asustó. Se puso distante enfrente de mí y eso fue muy extraño.
Como si hubiera activado un mecanismo de defensa.
Azota la puerta de su cuarto en mi cara, pero la abro, irrumpiendo
en su habitación como una mujer en misión. Se detiene en el centro de
su cuarto dándome la espalda, su cabeza mirando el techo. Desearía
poder leer sus pensamientos, para consolarlo, decirle algo o lo que sea.
Pero sólo permanezco en mi lugar, infinitamente confundida.
—Deberías irte —dice con una voz sin emoción.
—Bien, te dejaré solo. —Entiendo cuando alguien necesita estar
solo—. De todos modos soy una persona madura.
—No —dice mirándome dura e inflexible—. Quiero decir que
deberías irte, a tu casa. No necesitas estar aquí. Ya no necesito tu
ayuda.
Mi estómago se encoge y siento que voy a vomitar. —No me
importa quedarme…
—No quiero que estés aquí —me interrumpe dejándome con la
boca cerrada—. No necesitas estar alrededor de esta mierda (Tn) . Ya
has vivido lo suficiente.
Siento que voy a llorar. No me quiere aquí. De todas formas nadie
me quiere. A mi mamá no le importa si vivo o muero. A mi hermano sólo
le importan sus amigos. Realmente no tengo amigos, más que algunos
del trabajo y realmente somos conocidos no amigos. Las chicas no me
quieren porque piensan que soy una puta que va robarle a su novio en
cualquier momento.
En este momento estoy sola. Nadie me quiere.
Sostengo mi cabeza en alto, lucho con las lágrimas que
amenazan por salir. —Iré a empacar mi maleta.
Doy media vuelta y me voy de su cuarto y no me detiene. No me
sorprende. ¿Qué es lo que esperaba? ¿Qué me persiguiera y me
suplicara que no me fuera? Por supuesto que no. Mi vida no es una
película o una novela. No le importo. Tengo que recordarlo.
Mi cuarto está obscuro, sólo hay una pequeña luz que proviene
del techo, voy al armario en donde está mi bolsa con polvo y algo rota.
Está medio llena, nunca he desempacado completamente porque
siempre tuve miedo de que algo como esto sucediera.
Supongo que mis habilidades psíquicas están funcionando
completamente.
Empiezo a meter toda mi ropa en el bolso, sin molestarme en
doblar nada. No sé cómo se supone que voy a irme, pero supongo que
podría llamar un taxi y decirle que me llevara a la estación de
autobuses. Tengo dinero en mi cuenta bancaria, así que puedo pagar
mi boleto y volver a casa. Espero no tener que esperar mucho tiempo
en la estación.
Pongo mi teléfono en mi bolsillo, veo la pantalla y veo que Owen
ha enviado un mensaje. Algo relacionado con pasar la noche en lo
Wade otra vez, le digo que está bien que regreso a casa esta noche.
Me responde inmediatamente.
¿Qué sucedió? ¿Te despidieron? ¿El papá te hizo algo? preguntó.
Es una larga historia. Te explicaré cuando llegue a casa. Le
respondí, después guardo mi teléfono en la bolsa de mi pantalón.
Me siento como una fracasada. No puedo ser una buena novia y
lo único que tenía que hacer es estar ahí y lucir bonita. Sonreír, asentir y
no decir nada. ¿Qué tan difícil era?
Enojada conmigo misma, voy al baño y vacío el tocador, quito mi
bolsa de cosméticos, guardo mi máquina de afeitar, mi champú,
acondicionador, todo lo meto en la maleta y la cierro, satisfecha con lo
escandalosa que fui al recoger. Todo tiene eco en esta casa con el
techo alto y las baldosas del suelo. La casa principal me pone de
nervios.
Tal vez sea feliz por salir de aquí. Cuando suba al autobús tal vez
sea capaz de respirar.
Salgo del baño y encuentro a Nick en la puerta, al igual que la
otra noche. Está apoyado en el marco de la puerta con la mitad de su
cuerpo en la entrada. Su vestimenta es para morirse, su camiseta le
queda entallada y sus pantalones le cuelgan a la cadera, dejando
descubierto una parte de su estómago. Veo un poco de bello negro en
su ombligo, cuando levanto mi mirada veo que me está observando,
aparto mi mirada avergonzada, debería de estar enojada con él y no
estarlo comiendo con los ojos.
—No te vayas.
Me petrifico. Esto es ridículo. Todo este estira y afloja está
dañando mi cerebro.
—No estoy de humor para tus juegos Nick .
Entra a mi cuarto y viene al baño. Me volteo para alejarme de él,
hasta que mi trasero golpea el mostrador y me detiene. Estoy
temblando, pero no es de miedo. Es porque está muy cerca, puedo
olerlo.
De alguna manera el olor a cerveza se ha ido y Nick ha
recuperado su olor familiar. Puedo sentir el calor de su cuerpo, la tensión
emana de su cuerpo con ondas potentes.
—Lo lamento (Tn) . Sólo… es que este sitio apesta. Y no te culpo
si quieres irte, sólo te estaba dando una salida. Trataba de
convencerme que es lo mejor, sacarte de aquí, pero no puedo hacer
esto solo. No quiero hacer esto solo. Me gustaría que te quedaras.
—¿Qué es lo vas a hacer solo Nick ? ¿Qué tienen de malo tus
padres? No me estás diciendo nada y mi mente está imaginando cosas.
—Inhalo bruscamente cundo se detiene directamente enfrente de mí,
estamos tan cerca que su pecho toca el mío.
Sin ningún aviso, envuelve sus manos alrededor de mi cintura y me
jala hacia arriba, sentándome en el borde de la repisa del baño. Suelto
un chillido por la sorpresa y se acomoda entre mis piernas. Está tan
cerca de mí que tengo que alejar mi cabeza para verlo, me mira
preocupado.
—No quiero hablar de eso —susurra—. Quiero decírtelo, pero no
puedo.
Toco su rostro y se recarga en mi mano y cierra los ojos. Puedo
estudiar se hermosa cara y siento el deseo de darle un beso. Me pierdo
en él.
—Mantener todo encerrado no es saludable. —Acaricio su mejilla
y abre sus ojos—. Deberías hablar con alguien. —Trato de hacerle
comprender que es mejor que hable acerca de lo que le está
molestando.
—No puedo.
—Está bien, cuando estés listo, sabes que estoy aquí. —Dejo caer
mi mano de su rostro, me apoyo en el borde de la repisa, me estiro un
poco y le doy un beso en su mejilla. Quiero que sepa que estoy con él
pase lo pase. No me importa el tipo de secreto que esconde, tengo la
sensación de que es algo horrible. Quiero estar con él y ayudarlo.
Podría ser algo problemático, pero creo que vale la pena. Este
hombre llegó a mi vida por alguna razón, así como yo entré a la suya.
Tal vez debamos ayudarnos el uno al otro. O darnos esperanza.
pobre el nicho x no contarle la verdad y pobre de a rayis x que nadie la valora como ella quiere :(....
pero imagino q ya ustedes has de saber algo cierto???
bueno falta poco para q sean las confesiones nos leeremos mañana vale
desfruten del capitulo. ah y no se imaginan lo q viene las dejara loquitas
pero imagino q ya ustedes has de saber algo cierto???
bueno falta poco para q sean las confesiones nos leeremos mañana vale
desfruten del capitulo. ah y no se imaginan lo q viene las dejara loquitas
ElitzJb
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
Maldita brujaaaaaa!!!!!... Y me dejas picadaaa ..... Que pasara!!?????? Anda espero otro caaapiiiisss y ya esta bueno de sufrir!!!!!..... Creo que nick se culpa por la muerte de su hermana y creo saber el porque!!!!!
chelis
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
me odias??no???como la dejas ahii!siguela xfa!:(
nickelen
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
ahh pobre de Nick!! Esta sufriendo mucho!!
Ojala que la rayiz lo pueda curar!
Esa Adele es una loca! Hay que golpearla!!
Siguela!
Ojala que la rayiz lo pueda curar!
Esa Adele es una loca! Hay que golpearla!!
Siguela!
aranzhitha
Re: Segunda Oportunidad (novio) Nick y __TN (TERMINADA)
9
Día 4, 1:12 p.m.
Es hermosa, lo cual le hará ser cortejada; es mujer, por lo tanto será
ganada.
William Shakespeare
(NICK )
llevé a (Tn) a comer como una manera de darle las gracias
por aguantar mi mierda. Lo que le hice anoche era
inexcusable, pero de algún modo encontró la forma de
perdonarme. Era tan buena conmigo que no sabía qué había hecho
para merecerla.
Invitarle a un buen almuerzo es un pobre intento de demostrar mi
agradecimiento, pero es todo lo que tengo, no creo que estuviera muy
receptiva de aceptar lo que de verdad quiero hacer para mostrarle mi
agradecimiento. A pesar del dulce beso en la mejilla que me dio
anoche y el tranquilizador abrazo que me ofreció antes de que ambos
nos fuéramos a la cama, los cuales sin duda tenían más una intención
fraternal que una del tipo “Estoy ardiendo por ti”.
Es una pena, porque me está volviendo loco y estoy teniendo
dificultades para concentrarme. Preferiría llevarla a la cama, desnudarla
y enterrarme en ella para poder olvidar, por lo menos durante un rato.
Quiero trazar cada centímetro de su piel con mi boca. Quiero sentarme
con ella entre mis brazos y besarla durante horas, hasta que nuestros
labios estén hinchados y nuestras mandíbulas cansadas. Quiero saber
qué aspecto tiene cuando se corre. Y quiero ser el único que haga que
se corra con mi nombre cayendo de sus labios.
Nunca antes me he sentido de esta forma por ninguna chica.
Jamás. Sueno como una nenaza, pero (Tn) me abruma, en el buen
sentido. Y la he conocido hace menos de una semana.
A veces, supongo que es todo lo que se necesita.
—Me encanta este restaurante. —Echa un vistazo alrededor
después de que la camarera traiga nuestros platos, la sonrisa en el rostro
de (Tn) es la más feliz que le he visto desde que la traje a esta ciudad
en donde crecí—. Es tan lindo. Y la comida huele de maravilla.
Todo en el centro de Carmel es lo que yo etiquetaría como lindo.
Parece de juguete, montones de cabañas por donde mires y todo es
pequeño, todos los pasajes estrechos y escondrijos secretos. Es como un
cuento de hadas.
—Empieza a comer —le animo porque me muero de hambre y
estoy listo para seguir mi propio consejo. Pedí un sándwich de pollo,
mientras que (Tn) pidió alguna clase de ensalada asiática de pollo.
Tomo un par de mordiscos, tan envuelto en mi boca llena de comida,
que me estoy perdiendo la mirada de pura felicidad en el rostro de
(Tn) mientras come.
Dejo el sándwich en mi plato, totalmente paralizado. Esto es
ridículo, mi reacción ante ella. No ayuda que esté tan cachondo como
nunca y todo lo que hace parece encenderme más.
Pero está disfrutando en serio de la ensalada. Sus ojos están
medio cerrados y tiene una expresión soñadora. Se lame los labios, la
visión de su lengua rosada hace que tenga que tragar saliva con fuerza
y de repente, mi apetito por la comida desaparece.
En vez de eso, mi apetito por (Tn) viene a la vida rugiendo.
—Esto es increíble. Es el mejor aliño que he probado en mi vida. —
Me mira, con sus delicadas cejas fruncidas—. ¿Estás bien? Pensé que
estabas hambriento.
—Uhh… —gruño.
—No estás comiendo. ¿No te gusta? —Su preocupación es dulce,
pero esto no tiene nada que ver con el maldito sándwich y sí todo con
ella. Con lo mucho que la deseo. Y la deseo tanto.
Por una vez estoy listo para dejarme llevar y no preocuparme por
las consecuencias. Nos atraemos el uno al otro. Ella no tendrá ninguna
expectativa y yo tampoco. Mi turbulento pasado puede ser apartado y
sustituido, al menos temporalmente, con nuevos recuerdos que puedo
crear aquí, con (Tn) .
—El sándwich está bueno. —Doy otro mordisco para demostrarlo y
sonríe con aprobación antes de empezar a comer de nuevo su
ensalada.
Entonces me doy cuenta de que estamos en una cita para
almorzar. Soy el chico más patético de veintiún años. Juego al fútbol,
tengo buenas notas en la universidad, tengo a chicas que se mueren
por salir conmigo y realmente nunca he llevado a una chica a una cita.
No tengo ni idea de cómo estar en una relación. Mi pasado me ha
arruinado para todas esas cosas y he permitido que me gobierne
durante demasiado tiempo.
—Mañana es Acción de Gracias —dice (Tn) después de tomar
un sorbo de su té helado—. ¿Tu familia tiene una gran reunión o qué?
—No realmente. —Bueno, no la tenemos ya que mi hermana
Vanessa murió, pero no voy a ir. Demasiado duro para un tema de
conversación por hoy—. En los últimos años nos hemos ido de
vacaciones durante Acción de Gracias.
—Qué divertido. —Su sonrisa es dulce, pero no llega a sus ojos.
Sólo está diciendo eso porque piensa que es lo que espero. Ella ve lo
jodidos que estamos todos.
Es la primera persona que descifra eso.
—Además, la mayoría de la familia de mi padre está en la costa
este. Mi padre es de Nueva York —continuo.
—¿De verdad? —Se limpia la boca con una servilleta blanca y
después la deja en su regazo. Mi mirada se posa en sus labios. Están
llenos, con una sombra rosada y me muero por probarlos otra vez.
Es como si me hubiera levantado esta mañana con el sexo en la
cabeza. Bastante preciso, teniendo en cuenta la erección mañanera
que lucía. Había soñado con ella, imágenes borrosas y desenfocadas
de nosotros dos enredados en las sábanas. Ella me está consumiendo y
estoy permitiendo que suceda. Deleitándome, en realidad.
—Sí. Mi madre también era de allí. —Frunzo el ceño. Tampoco
quiero pensar en ella.
—¿Has regresado de visita?
—No en años, pero sí. Mis abuelos viven a un paseo de Brooklyn.
Allí es una forma de vida totalmente diferente. —Me gustaría volver. Mi
abuela y mi abuelo aún están vivos, pero son viejos y no estarán por
mucho más tiempo.
Pero a Adele no les gusta mucho, así que no vamos demasiado.
—Me encantaría ir allí alguna vez. —Suspira con nostalgia—.
Siempre he querido ver la ciudad de Nueva York.
—Es una experiencia, eso seguro. —Me gustaría poder llevarla. Es
totalmente una presunción de mi parte, pero me siento obligado por la
necesidad de hacerla feliz. De mostrarle las cosas que sé que la vida no
le permite ver.
—Cuéntame algo —le digo cuando terminamos de comer y
esperamos a que la camarera nos traiga la cuenta.
—¿Qué quieres saber? —Cautela revolotea en sus ojos y me llama
la atención. Somos más parecidos de lo que pensaba y eso me parece
tranquilizador.
—¿Cómo conseguiste tu nombre? —Cuando frunce el ceño,
continuo—: (Tn) . Tienes que admitirlo, es bastante inusual.
—Oh. —Sus mejillas se sonrojan, como si estuviera avergonzada y
baja la mirada a la mesa—. Mi madre. Es… diferente. Cuando nací me
echó una mirada y me declaró un alma sabia. Se supone que sabía sin
duda que tendría muchas historias que contar. Al menos eso es lo que
me dijo cuando tenía unos cinco años. Mi abuela dijo lo mismo.
—Un alma sabia, ¿eh? —La estudio y esos grandes e insondables
ojos verdes me devuelven la mirada. Parece mucho más madura que
otras chicas que conozco de nuestra edad. También ha tenido que
tratar con mucho más. Es como si cuidara de todo el mundo. Y
entonces, ¿quién cuida de (Tn) ?
—¿Tienes muchas historias que contar?
Sacude lentamente la cabeza, sus mejillas oscureciéndose de
color carmesí.
—Mi vida es infinitamente aburrida.
—Lo dudo. —La encuentro misteriosa. Se coloca una barrera,
como si fuera fuerte y no tomara ninguna mierda, pero tengo la
sensación de que tiene un enorme lado vulnerable.
—Si te refieres a mis supuestas aventuras sexuales, en realidad.
Totalmente aburrido. No hay nada que contar. La mayoría de las
historias que flotan por ahí no son ciertas, de todas formas.
Su boca se cierra con fuerza después de esa declaración, sus
labios casi desaparecen.
Estoy momentáneamente sorprendido por lo que ha dicho. Estoy
tratando de llegar a conocerla, no de entrometerme en sus asuntos
privados y en su pasado sexual. Sin duda, todavía no estoy listo para ir
allí. No sé si alguna vez lo estaré.
—No me importa nada de eso.
—Sin embargo eso es precisamente por lo que me elegiste para
ser tu novia falsa. —El dolor en su voz es inconfundible. Al elegirla, he
herido a esta chica que ya está dañada. Ese hecho me hace sentir
como la mierda.
—No voy a mentirte. Tienes razón. —Alcanzo el otro lado de la
mesa, tomo su mano en la mía y entrelazo nuestros dedos. La suya es
muy delgada y está muy fría. Le doy un apretón con la esperanza de
que pueda entrar en calor—. Pero ahora estoy muy contento de
haberte elegido.
Su mirada se encuentra con la mía una vez más, completa y
extensa, y me siento como si acabara de descubrir mi alma.
—También me alegro de que me eligieras —admite, su voz tan
suave que casi no la oigo.
Una oleada de emoción quema a través de mí y hago mi mejor
intento para mantenerlo sencillo y ligero entre nosotros. Pero por dentro,
estoy tambaleándome. Tenemos una pequeña charla y pago la
cuenta, sin embargo todo en lo que puedo pensar es en ella. En lo
mucho que la deseo. En la facilidad con la que se ha colado en mi vida
y ya no puedo imaginármela saliendo de ella.
Completamente loco.
Además, lo que sea que sucedió anoche alivió la tensión entre
nosotros y esta tarde estamos mucho más abiertos con el otro. Así de
abiertos que cuando salimos del café y nos encaminados por el
empinado camino hacia dónde aparqué mi coche, agarro su mano y
ella me permite sostenerla.
Como si fuéramos una pareja real.
—Huele a lluvia —murmura (Tn) y miro hacia el cielo, fijándome
en la oscuridad y en las grandes nubes.
—Sí, así es. —La primera gota cae en el momento en el que digo
las palabras y se ríe, el sonido deslizándose sobre mí, retorciéndose en mi
interior. Me encanta el sonido y quiero oírla otra vez.
Gruesas gotas de lluvia empiezan a caer y nos detenemos para
mirarnos el uno al otro. Estrecho mi agarre sobre su mano y empezamos
a caminar más rápido, como si pudiéramos escapar de la lluvia, ya que
cae con más y más fuerza. Hasta que estamos en medio de una lluvia
torrencial y nos estamos calando hasta los huesos.
—¿Cómo de lejos aparcamos otra vez? —pregunta. La lluvia está
cayendo tan fuerte que apenas puedo oírla.
—Demasiado lejos. —Fui a un aparcamiento público, así no
tendría que preocuparme por los parquímetros y ahora deseaba no
haberlo hecho. Las aceras están prácticamente abandonadas, la lluvia
está empezando a caer en cortinas y todavía tenemos dos manzanas
por recorrer.
—Quizás deberíamos resguardarnos en una tienda y esperar allí un
rato —sugiere.
Eso funcionaría, pero veo una mejor solución. Arrastrándola
conmigo, me deslizo dentro de un estrecho callejón que conozco que
queda entre el estudio de un artista y la galería. El callejón está
completamente sobrecargado, cubierto con espesa hiedra que crece
a lo largo de los laterales y en todo el enrejado que está construido ahí.
Está oscuro y resguardado de la lluvia y pequeñas luces parpadeantes
blancas han sido esparcidas entre la hiedra en preparación de la
próxima temporada de fiestas.
Es absolutamente mágico y me doy cuenta de cómo (Tn) alza
la vista, mirando con asombro, con los labios entreabiertos y los ojos muy
abiertos. Se da la vuelta para mirarme, su largo cabello rubio mojado,
sus mejillas salpicadas con gotas de lluvia. Sin pensarlo me acerco y
limpio las gotitas con mi pulgar, primero de una mejilla, luego de la otra.
Un temblor la recorre y junta los labios, su mirada cayendo al suelo.
—¿Tienes frío? —murmuro. Estoy abrumado por la necesidad de
tocarla, de seguir tocándola. De algún modo ha llegado a ser mi
salvación.
(Tn) sacude lentamente la cabeza, alza la mirada para
encontrarse con la mía una vez más.
—Este lugar es tan bonito. ¿Estás seguro de que está bien que nos
escondamos aquí durante un rato?
—Sí. Desde luego. —Tiro de ella hacia mí porque no puedo
resistirlo y viene de buena gana, mirando mis labios. Estamos
compartiendo los mismos pensamientos y eso me llena de alivio. Quiere
esto tanto como yo.
Pero es tan pequeña, me elevo sobre ella y miro alrededor,
detectando el banco de madera que está a nuestra derecha. La
agarro por la cintura, haciéndola chillar y la dejo en la parte superior del
banco, por lo que ahora está más alta que yo.
—¿Qué estás haciendo? —Apoya sus manos sobre mis hombros,
sus dedos clavándose en el tejido mojado de mi camiseta.
—Permitiéndote tomar la iniciativa —digo, esperando que lo
haga. Maldita sea, la deseo tanto. Tanto, que está matándome.
Descanso mis manos en sus caderas, deseando que no estuviera
llevando vaqueros. Deseando en realidad que no estuviera llevando
nada en absoluto y que estuviéramos en otro lugar, de regreso en la
casa de huéspedes, su cuerpo debajo del mío mientras nos exploramos
el uno al otro con nuestras manos y bocas.
Estar con (Tn) me libera. Ojala me hubiera dado cuenta antes.
(TN)
Algo ha cambiado en Nick desde anoche. Donde antes estaba
tenso y reservado, hoy parece más abierto y más feliz de lo que alguna
vez lo he visto. Desde que hemos llegado aquí, hemos hablado,
peleado, hablado algo más y de alguna manera eso nos ha unido más.
Pero también estoy asustada. Él va y viene. Un minuto abierto y
encantador y tan irresistible que roba mi aliento. Entonces, al siguiente
es oscuro y aislado, tranquilo. Cuesta un montón de energía pasar
tiempo con Nick , pero cuando está actuando así, olvido todo el drama
y me deleito estando con él.
La inesperada tormenta me ha dejado húmeda y miserable, pero
no me importa. No cuando tengo a Nick mirándome, con sus ojos
azules centrados en los míos. Su rostro está húmedo con gotas de lluvia y
su cabello está empapado, al igual que su ropa, como la mía. Pero
estamos en este pequeño túnel de un callejón, cubierto por un enrejado
de madera cubierto de hiedra y un poco acogedor. Pequeñas luces
blancas de navidad emiten un débil resplandor sobre nosotros y es de
noche, el único sonido son nuestra respiraciones aceleradas, la lluvia
cayendo sobre la acera y la calle solamente a unos pocos metros de
distancia.
Me siento sola con él. Completa y totalmente aislada, sin
preocuparme de quien podría vernos o qué podrían decir. Podemos
hacer lo que sea que queramos sin temor a ser juzgados o a
comentarios sarcásticos. Las chicas celosas y las madrastras celosas se
desvanecen hasta que sólo somos yo, él y la lluvia.
Estudiando su rostro, deslizo mi dedo índice a lo largo de su mejilla,
luego la otra. No se afeitó esta mañana y la barba en su cara es áspera.
Me pregunto si se sentiría igual, si lo tuviera rozando mis partes sensibles
del cuerpo con esas mejillas ásperas.
Un escalofrío se mueve a través de mí ante el pensamiento.
Está completamente inmóvil, sólo el débil destello de sus párpados
demuestra que está afectado por mi tacto y comienzo a ser más audaz,
trazo su boca. Poco a poco, a lo largo de la curva de su labio superior,
luego el lleno labio inferior, mi dedo flotando en las esquinas,
absorbiendo las pequeñas gotas de agua que salpican su piel. Separa
sus labios, capturando la punta de mi dedo entre ellos y un suspiro
escapa de mí cuando muerde suavemente mi dedo y después lo lame.
Dios. Está matándome. No sé por qué hoy está más audaz, no sé
por qué de repente está haciendo este movimiento sobre mí, pero no
estoy cuestionándolo. Quiero esto. Lo quiero.
—¿Vas a besarme o qué? —pregunta después de sacar mi dedo
de entre sus labios—. Estás torturándome, ¿sabes?
—Tal vez lo quiera. —Me siento coqueta y traviesa y la lenta
sonrisa que se propaga a través de su rostro ante mi comentario vale la
pena.
Nick desliza su mano por mi espalda hasta que está ahuecando
mi nuca, sus dedos agarrando mi cabello húmedo. Inclino mi cabeza,
nuestras bocas rozándose ligeramente y es como si una chispa de
electricidad se enciende entre nosotros.
Instantáneamente estoy hambrienta de él, pero me fuerzo a
actuar con moderación. No quiero apresurar este momento. Hay una
especie de magia en este espacio que está tejiendo su hechizo a
nuestro alrededor y no estoy lista para romperlo todavía.
Quiero hacer que este momento con él dure.
Nuestros labios se encuentran una y otra vez en el más puro de los
besos, cada vez que su boca conecta con la mía, cosquillas danzan en
mi estómago. Mi piel está cubierta de piel de gallina y enrollo mis brazos
alrededor de su cuello, deslizando mis dedos en su cabello húmedo y
aferrándolo cerca. Su otro brazo está envuelto alrededor de mi cintura y
me tira más cerca hasta que nuestros cuerpos mojados están pegados
juntos.
—(Tn) —susurra mi nombre con profunda y sexy voz y separo mis
labios, respirando en él. Su boca es suave y dulce, su lengua cálida y
húmeda mientras se enreda con la mía. La lenta y profunda quemazón
en mi estómago está inflamando más alto. Más alto todavía, hasta que
estoy hambrienta, tan caliente que deseo poder desgarrar mi ropa y
frotar mi cuerpo desnudo contra el suyo.
Los lentos besos dan paso a unos calientes y frenéticos. Sus dedos
están tan pegados a mi cabello que duele, pero no me importa. Me
muero de hambre por él y quiero más. Quiero todo lo que pueda
darme.
Rompe el beso primero e inclino mi frente contra la suya, nuestras
respiraciones fuera de control y fuertes en comparación a la
tranquilidad silenciosa del túnel. La lluvia parece haber disminuido, no es
tan fuerte y abro los ojos para encontrarlo mirándome con atención.
—¿Deberíamos salir corriendo? —pregunta.
No sé cómo responder. No lo quiero lejos de mí. Me tiene tan
sostenida que me siento segura. Protegida.
—Todavía está lloviendo.
—Pero no tan fuerte.
—Vamos a mojarnos —señalo sin convicción.
—Ya estamos mojados. —Me besa, mantiene su boca cerca de la
mía cuando susurra—: Quiero sacarte de la lluvia y volver a la casa de
huéspedes, así podemos estar realmente solos.
Mi corazón se acelera en anticipación ante sus palabras. Me
desea. Y yo también le deseo.
—Está bien —concuerdo con un asentimiento y cuidadosamente
me levanta del banco, dejándome ir, y de esta manera me deslizo por
la longitud de su cuerpo durante todo el camino. Siento todo, sus duros
y firmes músculos, lo mucho que le afecta… es excitante, cuanto poder
tengo sobre él en este mismo momento.
Lo que sea que está a punto de pasar cambiará todo entre
nosotros. Y por una vez, estoy deseando que llegue. No hay vergüenza
en el sexo cuando estás con una persona que te importa. No es sólo
otro chico anónimo buscando aliviar ese dolor dentro de mí.
La comprensión de esto me excita tanto como me aterra.
(NICK )
No pude conducir de vuelta a la casa de huéspedes lo
suficientemente rápido. El tráfico era una mierda, debido a la lluvia y las
carreteras resbaladizas. Necesitaba ser cuidadoso, conseguí que mis
neumáticos traseros derraparan por el asfalto un par de veces cuando
giraba en las esquinas y bajaba la velocidad. Me esforzaba en ser
paciente.
Pero con (Tn) sentada en el asiento del pasajero toda mojada y
sexy, luciendo lo suficiente buena para comérsela, es difícil.
Al momento en que llegamos a casa, estoy fuera de la camioneta
y abriéndole la puerta. La lluvia ha disminuido, sin embargo sigue
estable y no tengo ni idea de si hay alguien en casa.
Demonios, tampoco me importa. Estoy demasiado ansioso por
llevar a (Tn) adentro, que casi no puedo ver bien.
Está riéndose cuando la empujo al interior de la casa de
huéspedes y cierro y bloqueo la puerta con una decisión que me trae
una completa satisfacción. Nadie va a interrumpir esto. No lo permitiré.
Tengo que tener a (Tn) desnuda. Tengo que tenerla. No hay otra
opción.
La presiono contra la pared junto a la puerta principal y pongo
mis manos sobre su cabeza, besándola hasta que ambos estamos locos
por la lujuria. Nuestras caderas conectan, moliéndose una contra la otra
y la ropa mojada que tenemos me está volviendo loco, así que alcanzo
el dobladillo de su camisa y lentamente empiezo a tirar hacia arriba.
—¿Estás tratando de desnudarme? —Está bromeando, me
encanta el sonido de su voz, tan lleno de cariño y asiento, incapaz de
decir una palabra por miedo a arruinar el momento.
Empuja mi pecho, por lo que no tengo más opción que dar un
paso hacia atrás y observar sin aliento como alcanza su camisa y la
levanta poco a poco, hasta que la saca por su cabeza y la deja caer
de sus dedos al suelo. Está de pie ante mí, con un sujetador rosa pálido
con adornos de encaje negro, sus pechos curvados sobre las copas y
mierda, todo lo que quiero hacer es quitarle el sujetador para poder
tocarla.
Sus ojos están brillando mientras me alcanza de nuevo y voy de
buena gana, devorando su boca, pasando mis manos arriba y abajo
por sus costados desnudos. Mis dedos están cada vez más y más cerca
de su pechos cubiertos por el sujetador y entonces estoy ahí,
acunándola, alisando mis pulgares en la parte delantera de su
sujetador, ganándome un dulce y agónico gemido por mis esfuerzos.
La oigo susurrar mi nombre cuando beso su cuello y tiembla bajo
mis labios. Trazo mi lengua por su piel, saboreando su sabor, la forma en
que se derrite contra mí y llegando a su espalda busco a tientas el
broche de su sostén hasta que me deshago de él con relativa facilidad.
Los nervios hacen que mi mano tiemble y me aparto de ella, paso
mis temblorosos dedos por su pelo, a través de su mejilla. Nos miramos el
uno al otro, veo como los tirantes de su sostén están sueltos sobre sus
hombros y deslizo mis dedos por debajo de las correas de encaje,
lentamente bajándolas, revelándola a mí por primera vez.
Mi respiración se atasca en mi garganta y todo lo que puedo
hacer es mirar. Es hermosa, con los pezones rosa pálido más bonitos que
he visto y la toco ahí, hago un círculo primero en un pezón con mi
pulgar, luego el otro.
Cierra los ojos en un siseo, sus manos apoyadas contra la pared,
su pecho hacia adelante. Me inclino sobre ella y dejo una lluvia de
besos por su clavícula, su pecho, la parte superior de sus pechos, en el
valle entre ellos. Me estoy burlando de ella, burlándome de mí mismo y
maldición, ya siento como que voy a explotar.
Cuando finalmente tomo un duro pezón entre mis labios, mete sus
manos en mi cabello, su cuerpo entero se tensa mientras paso mi
lengua alrededor y alrededor de su carne. Está jadeando, estoy
jadeando y me gustaría no haber empezado esto aquí. Debería haber
esperado hasta que al menos la llevara a una cama.
—Nicholas —susurra, el sonido de mi nombre completo me
congela y voy completamente inmóvil mientras los recuerdos pasan
sobre mí.
Sólo déjame que te toque, Nicholas sé que te gustará. Será tan
perfecto entre nosotros. Por favor, Nicholas . Sé cómo hacerte sentir
bien…
Me deshago del agarre de (Tn) y me alejo de ella, mi respiración
viniendo en ondas irregulares, mi cerebro girando con viejos recuerdos
mezclados con otros nuevos y frescos.
—Nick , ¿qué pasa? ¿Qué sucede?
Enfoco mi mirada en (Tn) , la veo mientras se aleja de la pared y
viene hacia mí, sus pechos rebotando con cada paso, su expresión
llena de preocupación. Lo estoy arruinando. Estoy dejando que mi
pasado ensombrezca mi presente, infiernos, mi futuro entero y me lleno
de una rabia inexplicable.
Esto no debería haber pasado, no así, no hoy y niego con la
cabeza, incapaz de hablar, mi lengua se siente demasiado gruesa.
Llega a mí, su mano toca la mía y la alejo como si me quemara.
—Nick . —Su voz se hace severa, recordándome de nuevo mi
pasado y niego con la cabeza de nuevo, tratando de sacudir los
pensamientos de mierda, pero no está funcionando.
—No te cierres a mí, Nick . No huyas. Dime qué pasa. —Está
pidiéndomelo, juro que veo lágrimas corriendo por sus mejillas, pero no
puedo decirle que está mal.
Si piensa que las cosas están mal ahora, espera hasta que se
entere de la verdad.
—No… no puedo hacer esto. —Sin esperar por una respuesta, me
aparto de ella y escapo a mi habitación, golpeando la puerta detrás de
mí antes de girar la cerradura. La quiero conmigo, pero la quiero lejos,
muy lejos. Soy una total contradicción y ya no sé qué hacer conmigo
mismo. Tal vez en verdad estaría mejor solo.
No puedo seguir viviendo mi vida así, dejando que… una mujer
me controle como lo hace, pero no puedo evitar mis reacciones.
Necesito ayuda. Soy un puto desastre y necesito que alguien me salve
antes de llegar a ser completamente insalvable.
Ondas de miedo bajan por mi columna mientras me quito toda la
ropa, dejándolas en un montón húmedo en el suelo. Ignoro mi furiosa
erección. Estoy demasiado duro, mi polla duele, pero me rehúso a
tocarme, sin importar cuánto alivio sentiré cuando termine. Debería
estar con (Tn) ahora mismo, no sólo con mi jodidos recuerdos.
Está golpeando la puerta, pidiéndome que la deje entrar. Me giro
y miro la puerta cerrada, mi corazón latiendo tan fuerte que el sonido
llena mi cabeza y realmente no puedo escuchar nada más. Estoy
respirando como si acabara de correr cientos de kilómetros sin
detenerme y mi piel se siente tan tensa que siento que podría estallar.
Estoy caliente. Febril.
Mi cabeza da vueltas.
Mierda.
(TN)
Estoy en puntillas y alcanzo la parte superior del marco de la
puerta, encontrando una de esas llaves hexagonales que abrirá
cualquier cerradura. Agarrándola, meto la delgada pieza de metal en
la cerradura y la giro, agradecida cuando hace clic con facilidad.
Tal vez no debería hacer esto. Invadir la privacidad de Nick
cuando claramente está dejándome fuera. Pero la forma en que
reaccionó me asustó demasiado y también me llenó de preocupación;
sabía que tenía que ir tras él y asegurarme de que todo está bien. Su
expresión había estado tan llena de desesperación cuando se apartó
de mí, que no estoy segura de lo que le provocó.
Tengo miedo de descubrir qué está mal, pero tengo que hacer
esto. Por Nick .
Cuando abro la puerta, veo que está de pie en medio del cuarto
completamente desnudo y por un momento, estoy aturdida. Su cuerpo
es hermoso, una obra de arte masculina. Anchos hombros, espalda lisa
con músculos fluidos y un trasero que luce tan firme como el acero. Mi
cuerpo entero duele por sentirlo moviéndose contra mí, conmigo, pero
sé que no es lo que necesita en estos momentos.
—Nick —susurro, mi voz quebrada, casi tanto como mi corazón.
Se gira, el dolor y la humillación escritos en toda su cara.
—Debes irte.
—Déjame ayudarte. —Empiezo a acercarme a él y niega con la
cabeza.
—Vete, (Tn) . No quiero que me veas así. —Baja la cabeza y mi
mirada cae a la parte inferior de su cuerpo. Está erecto, una enorme
erección y no sé lo que sucedió para arruinar lo que iba a ser sin duda
alguna un hermoso momento entre nosotros, pero ahora no hay nada
que pueda hacer al respecto.
—No puedes alejarme. —Sé que es lo que está haciendo. Lo que
solía hacer. Me niego a dejar también que me lo haga a mí. Me
mantendré firme y a realmente ayudarle.
Quiero quedarme.
—No me deseas —susurra con voz áspera—. No así. No puedo…
no quieras tratar conmigo cuando estoy así.
—Por favor, Nick . —Estoy rogando y no me importa. Nunca hago
esto. No me arrastro, lo intento lo mejor que puedo para no perder la
cabeza. Pero verlo así me asusta. No quiero dejarlo solo y no quiero que
me aleje. Siento que en este momento soy todo lo que tiene—. Dime
qué puedo hacer.
—Puedes irte. —Se aleja de mí y corro hacia él, agarrando su
brazo e impidiendo que siga adelante.
—No. —Nuestras miradas chocan y me mantengo firme en mi
lugar, incluso sabiendo que debo lucir ridícula medio vestida y
empapada por la lluvia—. No voy a irme.
Sus ojos caen a mí, todavía con el pecho desnudo y se quedan
allí. Mis pezones se aprietan por su descarado examen y me balanceo
hacia él como si no pudiera evitarlo. Mi cuerpo me traiciona a pesar de
que hago mi mejor esfuerzo por pretender que él no me afecta. Lo que
está sucediendo entre nosotros no es sobre sexo justo ahora. Nick
necesita mi consuelo. Mi aceptación.
—Estás temblando —murmura, extendiendo una mano para
agarrar un mechón de pelo mojado. Lo frota entre sus dedos, con la
mirada todavía clavada en mi pecho—. Tienes que cambiarte esa ropa
mojada.
Es como si estuviera volviendo lentamente a mí, volviendo de ese
oscuro y desolado lugar a donde se retiró. Su expresión es más ligera, sus
ojos no están tan amplios y llenos de terror. Su voz ha vuelto a la
normalidad y no está temblando tanto.
No estoy segura de lo que quiere de mí, pero sea lo que sea,
estoy dispuesta a darlo.
Completamente.
_________________________________________________________________________________
Continuara...
Día 4, 1:12 p.m.
Es hermosa, lo cual le hará ser cortejada; es mujer, por lo tanto será
ganada.
William Shakespeare
(NICK )
llevé a (Tn) a comer como una manera de darle las gracias
por aguantar mi mierda. Lo que le hice anoche era
inexcusable, pero de algún modo encontró la forma de
perdonarme. Era tan buena conmigo que no sabía qué había hecho
para merecerla.
Invitarle a un buen almuerzo es un pobre intento de demostrar mi
agradecimiento, pero es todo lo que tengo, no creo que estuviera muy
receptiva de aceptar lo que de verdad quiero hacer para mostrarle mi
agradecimiento. A pesar del dulce beso en la mejilla que me dio
anoche y el tranquilizador abrazo que me ofreció antes de que ambos
nos fuéramos a la cama, los cuales sin duda tenían más una intención
fraternal que una del tipo “Estoy ardiendo por ti”.
Es una pena, porque me está volviendo loco y estoy teniendo
dificultades para concentrarme. Preferiría llevarla a la cama, desnudarla
y enterrarme en ella para poder olvidar, por lo menos durante un rato.
Quiero trazar cada centímetro de su piel con mi boca. Quiero sentarme
con ella entre mis brazos y besarla durante horas, hasta que nuestros
labios estén hinchados y nuestras mandíbulas cansadas. Quiero saber
qué aspecto tiene cuando se corre. Y quiero ser el único que haga que
se corra con mi nombre cayendo de sus labios.
Nunca antes me he sentido de esta forma por ninguna chica.
Jamás. Sueno como una nenaza, pero (Tn) me abruma, en el buen
sentido. Y la he conocido hace menos de una semana.
A veces, supongo que es todo lo que se necesita.
—Me encanta este restaurante. —Echa un vistazo alrededor
después de que la camarera traiga nuestros platos, la sonrisa en el rostro
de (Tn) es la más feliz que le he visto desde que la traje a esta ciudad
en donde crecí—. Es tan lindo. Y la comida huele de maravilla.
Todo en el centro de Carmel es lo que yo etiquetaría como lindo.
Parece de juguete, montones de cabañas por donde mires y todo es
pequeño, todos los pasajes estrechos y escondrijos secretos. Es como un
cuento de hadas.
—Empieza a comer —le animo porque me muero de hambre y
estoy listo para seguir mi propio consejo. Pedí un sándwich de pollo,
mientras que (Tn) pidió alguna clase de ensalada asiática de pollo.
Tomo un par de mordiscos, tan envuelto en mi boca llena de comida,
que me estoy perdiendo la mirada de pura felicidad en el rostro de
(Tn) mientras come.
Dejo el sándwich en mi plato, totalmente paralizado. Esto es
ridículo, mi reacción ante ella. No ayuda que esté tan cachondo como
nunca y todo lo que hace parece encenderme más.
Pero está disfrutando en serio de la ensalada. Sus ojos están
medio cerrados y tiene una expresión soñadora. Se lame los labios, la
visión de su lengua rosada hace que tenga que tragar saliva con fuerza
y de repente, mi apetito por la comida desaparece.
En vez de eso, mi apetito por (Tn) viene a la vida rugiendo.
—Esto es increíble. Es el mejor aliño que he probado en mi vida. —
Me mira, con sus delicadas cejas fruncidas—. ¿Estás bien? Pensé que
estabas hambriento.
—Uhh… —gruño.
—No estás comiendo. ¿No te gusta? —Su preocupación es dulce,
pero esto no tiene nada que ver con el maldito sándwich y sí todo con
ella. Con lo mucho que la deseo. Y la deseo tanto.
Por una vez estoy listo para dejarme llevar y no preocuparme por
las consecuencias. Nos atraemos el uno al otro. Ella no tendrá ninguna
expectativa y yo tampoco. Mi turbulento pasado puede ser apartado y
sustituido, al menos temporalmente, con nuevos recuerdos que puedo
crear aquí, con (Tn) .
—El sándwich está bueno. —Doy otro mordisco para demostrarlo y
sonríe con aprobación antes de empezar a comer de nuevo su
ensalada.
Entonces me doy cuenta de que estamos en una cita para
almorzar. Soy el chico más patético de veintiún años. Juego al fútbol,
tengo buenas notas en la universidad, tengo a chicas que se mueren
por salir conmigo y realmente nunca he llevado a una chica a una cita.
No tengo ni idea de cómo estar en una relación. Mi pasado me ha
arruinado para todas esas cosas y he permitido que me gobierne
durante demasiado tiempo.
—Mañana es Acción de Gracias —dice (Tn) después de tomar
un sorbo de su té helado—. ¿Tu familia tiene una gran reunión o qué?
—No realmente. —Bueno, no la tenemos ya que mi hermana
Vanessa murió, pero no voy a ir. Demasiado duro para un tema de
conversación por hoy—. En los últimos años nos hemos ido de
vacaciones durante Acción de Gracias.
—Qué divertido. —Su sonrisa es dulce, pero no llega a sus ojos.
Sólo está diciendo eso porque piensa que es lo que espero. Ella ve lo
jodidos que estamos todos.
Es la primera persona que descifra eso.
—Además, la mayoría de la familia de mi padre está en la costa
este. Mi padre es de Nueva York —continuo.
—¿De verdad? —Se limpia la boca con una servilleta blanca y
después la deja en su regazo. Mi mirada se posa en sus labios. Están
llenos, con una sombra rosada y me muero por probarlos otra vez.
Es como si me hubiera levantado esta mañana con el sexo en la
cabeza. Bastante preciso, teniendo en cuenta la erección mañanera
que lucía. Había soñado con ella, imágenes borrosas y desenfocadas
de nosotros dos enredados en las sábanas. Ella me está consumiendo y
estoy permitiendo que suceda. Deleitándome, en realidad.
—Sí. Mi madre también era de allí. —Frunzo el ceño. Tampoco
quiero pensar en ella.
—¿Has regresado de visita?
—No en años, pero sí. Mis abuelos viven a un paseo de Brooklyn.
Allí es una forma de vida totalmente diferente. —Me gustaría volver. Mi
abuela y mi abuelo aún están vivos, pero son viejos y no estarán por
mucho más tiempo.
Pero a Adele no les gusta mucho, así que no vamos demasiado.
—Me encantaría ir allí alguna vez. —Suspira con nostalgia—.
Siempre he querido ver la ciudad de Nueva York.
—Es una experiencia, eso seguro. —Me gustaría poder llevarla. Es
totalmente una presunción de mi parte, pero me siento obligado por la
necesidad de hacerla feliz. De mostrarle las cosas que sé que la vida no
le permite ver.
—Cuéntame algo —le digo cuando terminamos de comer y
esperamos a que la camarera nos traiga la cuenta.
—¿Qué quieres saber? —Cautela revolotea en sus ojos y me llama
la atención. Somos más parecidos de lo que pensaba y eso me parece
tranquilizador.
—¿Cómo conseguiste tu nombre? —Cuando frunce el ceño,
continuo—: (Tn) . Tienes que admitirlo, es bastante inusual.
—Oh. —Sus mejillas se sonrojan, como si estuviera avergonzada y
baja la mirada a la mesa—. Mi madre. Es… diferente. Cuando nací me
echó una mirada y me declaró un alma sabia. Se supone que sabía sin
duda que tendría muchas historias que contar. Al menos eso es lo que
me dijo cuando tenía unos cinco años. Mi abuela dijo lo mismo.
—Un alma sabia, ¿eh? —La estudio y esos grandes e insondables
ojos verdes me devuelven la mirada. Parece mucho más madura que
otras chicas que conozco de nuestra edad. También ha tenido que
tratar con mucho más. Es como si cuidara de todo el mundo. Y
entonces, ¿quién cuida de (Tn) ?
—¿Tienes muchas historias que contar?
Sacude lentamente la cabeza, sus mejillas oscureciéndose de
color carmesí.
—Mi vida es infinitamente aburrida.
—Lo dudo. —La encuentro misteriosa. Se coloca una barrera,
como si fuera fuerte y no tomara ninguna mierda, pero tengo la
sensación de que tiene un enorme lado vulnerable.
—Si te refieres a mis supuestas aventuras sexuales, en realidad.
Totalmente aburrido. No hay nada que contar. La mayoría de las
historias que flotan por ahí no son ciertas, de todas formas.
Su boca se cierra con fuerza después de esa declaración, sus
labios casi desaparecen.
Estoy momentáneamente sorprendido por lo que ha dicho. Estoy
tratando de llegar a conocerla, no de entrometerme en sus asuntos
privados y en su pasado sexual. Sin duda, todavía no estoy listo para ir
allí. No sé si alguna vez lo estaré.
—No me importa nada de eso.
—Sin embargo eso es precisamente por lo que me elegiste para
ser tu novia falsa. —El dolor en su voz es inconfundible. Al elegirla, he
herido a esta chica que ya está dañada. Ese hecho me hace sentir
como la mierda.
—No voy a mentirte. Tienes razón. —Alcanzo el otro lado de la
mesa, tomo su mano en la mía y entrelazo nuestros dedos. La suya es
muy delgada y está muy fría. Le doy un apretón con la esperanza de
que pueda entrar en calor—. Pero ahora estoy muy contento de
haberte elegido.
Su mirada se encuentra con la mía una vez más, completa y
extensa, y me siento como si acabara de descubrir mi alma.
—También me alegro de que me eligieras —admite, su voz tan
suave que casi no la oigo.
Una oleada de emoción quema a través de mí y hago mi mejor
intento para mantenerlo sencillo y ligero entre nosotros. Pero por dentro,
estoy tambaleándome. Tenemos una pequeña charla y pago la
cuenta, sin embargo todo en lo que puedo pensar es en ella. En lo
mucho que la deseo. En la facilidad con la que se ha colado en mi vida
y ya no puedo imaginármela saliendo de ella.
Completamente loco.
Además, lo que sea que sucedió anoche alivió la tensión entre
nosotros y esta tarde estamos mucho más abiertos con el otro. Así de
abiertos que cuando salimos del café y nos encaminados por el
empinado camino hacia dónde aparqué mi coche, agarro su mano y
ella me permite sostenerla.
Como si fuéramos una pareja real.
—Huele a lluvia —murmura (Tn) y miro hacia el cielo, fijándome
en la oscuridad y en las grandes nubes.
—Sí, así es. —La primera gota cae en el momento en el que digo
las palabras y se ríe, el sonido deslizándose sobre mí, retorciéndose en mi
interior. Me encanta el sonido y quiero oírla otra vez.
Gruesas gotas de lluvia empiezan a caer y nos detenemos para
mirarnos el uno al otro. Estrecho mi agarre sobre su mano y empezamos
a caminar más rápido, como si pudiéramos escapar de la lluvia, ya que
cae con más y más fuerza. Hasta que estamos en medio de una lluvia
torrencial y nos estamos calando hasta los huesos.
—¿Cómo de lejos aparcamos otra vez? —pregunta. La lluvia está
cayendo tan fuerte que apenas puedo oírla.
—Demasiado lejos. —Fui a un aparcamiento público, así no
tendría que preocuparme por los parquímetros y ahora deseaba no
haberlo hecho. Las aceras están prácticamente abandonadas, la lluvia
está empezando a caer en cortinas y todavía tenemos dos manzanas
por recorrer.
—Quizás deberíamos resguardarnos en una tienda y esperar allí un
rato —sugiere.
Eso funcionaría, pero veo una mejor solución. Arrastrándola
conmigo, me deslizo dentro de un estrecho callejón que conozco que
queda entre el estudio de un artista y la galería. El callejón está
completamente sobrecargado, cubierto con espesa hiedra que crece
a lo largo de los laterales y en todo el enrejado que está construido ahí.
Está oscuro y resguardado de la lluvia y pequeñas luces parpadeantes
blancas han sido esparcidas entre la hiedra en preparación de la
próxima temporada de fiestas.
Es absolutamente mágico y me doy cuenta de cómo (Tn) alza
la vista, mirando con asombro, con los labios entreabiertos y los ojos muy
abiertos. Se da la vuelta para mirarme, su largo cabello rubio mojado,
sus mejillas salpicadas con gotas de lluvia. Sin pensarlo me acerco y
limpio las gotitas con mi pulgar, primero de una mejilla, luego de la otra.
Un temblor la recorre y junta los labios, su mirada cayendo al suelo.
—¿Tienes frío? —murmuro. Estoy abrumado por la necesidad de
tocarla, de seguir tocándola. De algún modo ha llegado a ser mi
salvación.
(Tn) sacude lentamente la cabeza, alza la mirada para
encontrarse con la mía una vez más.
—Este lugar es tan bonito. ¿Estás seguro de que está bien que nos
escondamos aquí durante un rato?
—Sí. Desde luego. —Tiro de ella hacia mí porque no puedo
resistirlo y viene de buena gana, mirando mis labios. Estamos
compartiendo los mismos pensamientos y eso me llena de alivio. Quiere
esto tanto como yo.
Pero es tan pequeña, me elevo sobre ella y miro alrededor,
detectando el banco de madera que está a nuestra derecha. La
agarro por la cintura, haciéndola chillar y la dejo en la parte superior del
banco, por lo que ahora está más alta que yo.
—¿Qué estás haciendo? —Apoya sus manos sobre mis hombros,
sus dedos clavándose en el tejido mojado de mi camiseta.
—Permitiéndote tomar la iniciativa —digo, esperando que lo
haga. Maldita sea, la deseo tanto. Tanto, que está matándome.
Descanso mis manos en sus caderas, deseando que no estuviera
llevando vaqueros. Deseando en realidad que no estuviera llevando
nada en absoluto y que estuviéramos en otro lugar, de regreso en la
casa de huéspedes, su cuerpo debajo del mío mientras nos exploramos
el uno al otro con nuestras manos y bocas.
Estar con (Tn) me libera. Ojala me hubiera dado cuenta antes.
(TN)
Algo ha cambiado en Nick desde anoche. Donde antes estaba
tenso y reservado, hoy parece más abierto y más feliz de lo que alguna
vez lo he visto. Desde que hemos llegado aquí, hemos hablado,
peleado, hablado algo más y de alguna manera eso nos ha unido más.
Pero también estoy asustada. Él va y viene. Un minuto abierto y
encantador y tan irresistible que roba mi aliento. Entonces, al siguiente
es oscuro y aislado, tranquilo. Cuesta un montón de energía pasar
tiempo con Nick , pero cuando está actuando así, olvido todo el drama
y me deleito estando con él.
La inesperada tormenta me ha dejado húmeda y miserable, pero
no me importa. No cuando tengo a Nick mirándome, con sus ojos
azules centrados en los míos. Su rostro está húmedo con gotas de lluvia y
su cabello está empapado, al igual que su ropa, como la mía. Pero
estamos en este pequeño túnel de un callejón, cubierto por un enrejado
de madera cubierto de hiedra y un poco acogedor. Pequeñas luces
blancas de navidad emiten un débil resplandor sobre nosotros y es de
noche, el único sonido son nuestra respiraciones aceleradas, la lluvia
cayendo sobre la acera y la calle solamente a unos pocos metros de
distancia.
Me siento sola con él. Completa y totalmente aislada, sin
preocuparme de quien podría vernos o qué podrían decir. Podemos
hacer lo que sea que queramos sin temor a ser juzgados o a
comentarios sarcásticos. Las chicas celosas y las madrastras celosas se
desvanecen hasta que sólo somos yo, él y la lluvia.
Estudiando su rostro, deslizo mi dedo índice a lo largo de su mejilla,
luego la otra. No se afeitó esta mañana y la barba en su cara es áspera.
Me pregunto si se sentiría igual, si lo tuviera rozando mis partes sensibles
del cuerpo con esas mejillas ásperas.
Un escalofrío se mueve a través de mí ante el pensamiento.
Está completamente inmóvil, sólo el débil destello de sus párpados
demuestra que está afectado por mi tacto y comienzo a ser más audaz,
trazo su boca. Poco a poco, a lo largo de la curva de su labio superior,
luego el lleno labio inferior, mi dedo flotando en las esquinas,
absorbiendo las pequeñas gotas de agua que salpican su piel. Separa
sus labios, capturando la punta de mi dedo entre ellos y un suspiro
escapa de mí cuando muerde suavemente mi dedo y después lo lame.
Dios. Está matándome. No sé por qué hoy está más audaz, no sé
por qué de repente está haciendo este movimiento sobre mí, pero no
estoy cuestionándolo. Quiero esto. Lo quiero.
—¿Vas a besarme o qué? —pregunta después de sacar mi dedo
de entre sus labios—. Estás torturándome, ¿sabes?
—Tal vez lo quiera. —Me siento coqueta y traviesa y la lenta
sonrisa que se propaga a través de su rostro ante mi comentario vale la
pena.
Nick desliza su mano por mi espalda hasta que está ahuecando
mi nuca, sus dedos agarrando mi cabello húmedo. Inclino mi cabeza,
nuestras bocas rozándose ligeramente y es como si una chispa de
electricidad se enciende entre nosotros.
Instantáneamente estoy hambrienta de él, pero me fuerzo a
actuar con moderación. No quiero apresurar este momento. Hay una
especie de magia en este espacio que está tejiendo su hechizo a
nuestro alrededor y no estoy lista para romperlo todavía.
Quiero hacer que este momento con él dure.
Nuestros labios se encuentran una y otra vez en el más puro de los
besos, cada vez que su boca conecta con la mía, cosquillas danzan en
mi estómago. Mi piel está cubierta de piel de gallina y enrollo mis brazos
alrededor de su cuello, deslizando mis dedos en su cabello húmedo y
aferrándolo cerca. Su otro brazo está envuelto alrededor de mi cintura y
me tira más cerca hasta que nuestros cuerpos mojados están pegados
juntos.
—(Tn) —susurra mi nombre con profunda y sexy voz y separo mis
labios, respirando en él. Su boca es suave y dulce, su lengua cálida y
húmeda mientras se enreda con la mía. La lenta y profunda quemazón
en mi estómago está inflamando más alto. Más alto todavía, hasta que
estoy hambrienta, tan caliente que deseo poder desgarrar mi ropa y
frotar mi cuerpo desnudo contra el suyo.
Los lentos besos dan paso a unos calientes y frenéticos. Sus dedos
están tan pegados a mi cabello que duele, pero no me importa. Me
muero de hambre por él y quiero más. Quiero todo lo que pueda
darme.
Rompe el beso primero e inclino mi frente contra la suya, nuestras
respiraciones fuera de control y fuertes en comparación a la
tranquilidad silenciosa del túnel. La lluvia parece haber disminuido, no es
tan fuerte y abro los ojos para encontrarlo mirándome con atención.
—¿Deberíamos salir corriendo? —pregunta.
No sé cómo responder. No lo quiero lejos de mí. Me tiene tan
sostenida que me siento segura. Protegida.
—Todavía está lloviendo.
—Pero no tan fuerte.
—Vamos a mojarnos —señalo sin convicción.
—Ya estamos mojados. —Me besa, mantiene su boca cerca de la
mía cuando susurra—: Quiero sacarte de la lluvia y volver a la casa de
huéspedes, así podemos estar realmente solos.
Mi corazón se acelera en anticipación ante sus palabras. Me
desea. Y yo también le deseo.
—Está bien —concuerdo con un asentimiento y cuidadosamente
me levanta del banco, dejándome ir, y de esta manera me deslizo por
la longitud de su cuerpo durante todo el camino. Siento todo, sus duros
y firmes músculos, lo mucho que le afecta… es excitante, cuanto poder
tengo sobre él en este mismo momento.
Lo que sea que está a punto de pasar cambiará todo entre
nosotros. Y por una vez, estoy deseando que llegue. No hay vergüenza
en el sexo cuando estás con una persona que te importa. No es sólo
otro chico anónimo buscando aliviar ese dolor dentro de mí.
La comprensión de esto me excita tanto como me aterra.
(NICK )
No pude conducir de vuelta a la casa de huéspedes lo
suficientemente rápido. El tráfico era una mierda, debido a la lluvia y las
carreteras resbaladizas. Necesitaba ser cuidadoso, conseguí que mis
neumáticos traseros derraparan por el asfalto un par de veces cuando
giraba en las esquinas y bajaba la velocidad. Me esforzaba en ser
paciente.
Pero con (Tn) sentada en el asiento del pasajero toda mojada y
sexy, luciendo lo suficiente buena para comérsela, es difícil.
Al momento en que llegamos a casa, estoy fuera de la camioneta
y abriéndole la puerta. La lluvia ha disminuido, sin embargo sigue
estable y no tengo ni idea de si hay alguien en casa.
Demonios, tampoco me importa. Estoy demasiado ansioso por
llevar a (Tn) adentro, que casi no puedo ver bien.
Está riéndose cuando la empujo al interior de la casa de
huéspedes y cierro y bloqueo la puerta con una decisión que me trae
una completa satisfacción. Nadie va a interrumpir esto. No lo permitiré.
Tengo que tener a (Tn) desnuda. Tengo que tenerla. No hay otra
opción.
La presiono contra la pared junto a la puerta principal y pongo
mis manos sobre su cabeza, besándola hasta que ambos estamos locos
por la lujuria. Nuestras caderas conectan, moliéndose una contra la otra
y la ropa mojada que tenemos me está volviendo loco, así que alcanzo
el dobladillo de su camisa y lentamente empiezo a tirar hacia arriba.
—¿Estás tratando de desnudarme? —Está bromeando, me
encanta el sonido de su voz, tan lleno de cariño y asiento, incapaz de
decir una palabra por miedo a arruinar el momento.
Empuja mi pecho, por lo que no tengo más opción que dar un
paso hacia atrás y observar sin aliento como alcanza su camisa y la
levanta poco a poco, hasta que la saca por su cabeza y la deja caer
de sus dedos al suelo. Está de pie ante mí, con un sujetador rosa pálido
con adornos de encaje negro, sus pechos curvados sobre las copas y
mierda, todo lo que quiero hacer es quitarle el sujetador para poder
tocarla.
Sus ojos están brillando mientras me alcanza de nuevo y voy de
buena gana, devorando su boca, pasando mis manos arriba y abajo
por sus costados desnudos. Mis dedos están cada vez más y más cerca
de su pechos cubiertos por el sujetador y entonces estoy ahí,
acunándola, alisando mis pulgares en la parte delantera de su
sujetador, ganándome un dulce y agónico gemido por mis esfuerzos.
La oigo susurrar mi nombre cuando beso su cuello y tiembla bajo
mis labios. Trazo mi lengua por su piel, saboreando su sabor, la forma en
que se derrite contra mí y llegando a su espalda busco a tientas el
broche de su sostén hasta que me deshago de él con relativa facilidad.
Los nervios hacen que mi mano tiemble y me aparto de ella, paso
mis temblorosos dedos por su pelo, a través de su mejilla. Nos miramos el
uno al otro, veo como los tirantes de su sostén están sueltos sobre sus
hombros y deslizo mis dedos por debajo de las correas de encaje,
lentamente bajándolas, revelándola a mí por primera vez.
Mi respiración se atasca en mi garganta y todo lo que puedo
hacer es mirar. Es hermosa, con los pezones rosa pálido más bonitos que
he visto y la toco ahí, hago un círculo primero en un pezón con mi
pulgar, luego el otro.
Cierra los ojos en un siseo, sus manos apoyadas contra la pared,
su pecho hacia adelante. Me inclino sobre ella y dejo una lluvia de
besos por su clavícula, su pecho, la parte superior de sus pechos, en el
valle entre ellos. Me estoy burlando de ella, burlándome de mí mismo y
maldición, ya siento como que voy a explotar.
Cuando finalmente tomo un duro pezón entre mis labios, mete sus
manos en mi cabello, su cuerpo entero se tensa mientras paso mi
lengua alrededor y alrededor de su carne. Está jadeando, estoy
jadeando y me gustaría no haber empezado esto aquí. Debería haber
esperado hasta que al menos la llevara a una cama.
—Nicholas —susurra, el sonido de mi nombre completo me
congela y voy completamente inmóvil mientras los recuerdos pasan
sobre mí.
Sólo déjame que te toque, Nicholas sé que te gustará. Será tan
perfecto entre nosotros. Por favor, Nicholas . Sé cómo hacerte sentir
bien…
Me deshago del agarre de (Tn) y me alejo de ella, mi respiración
viniendo en ondas irregulares, mi cerebro girando con viejos recuerdos
mezclados con otros nuevos y frescos.
—Nick , ¿qué pasa? ¿Qué sucede?
Enfoco mi mirada en (Tn) , la veo mientras se aleja de la pared y
viene hacia mí, sus pechos rebotando con cada paso, su expresión
llena de preocupación. Lo estoy arruinando. Estoy dejando que mi
pasado ensombrezca mi presente, infiernos, mi futuro entero y me lleno
de una rabia inexplicable.
Esto no debería haber pasado, no así, no hoy y niego con la
cabeza, incapaz de hablar, mi lengua se siente demasiado gruesa.
Llega a mí, su mano toca la mía y la alejo como si me quemara.
—Nick . —Su voz se hace severa, recordándome de nuevo mi
pasado y niego con la cabeza de nuevo, tratando de sacudir los
pensamientos de mierda, pero no está funcionando.
—No te cierres a mí, Nick . No huyas. Dime qué pasa. —Está
pidiéndomelo, juro que veo lágrimas corriendo por sus mejillas, pero no
puedo decirle que está mal.
Si piensa que las cosas están mal ahora, espera hasta que se
entere de la verdad.
—No… no puedo hacer esto. —Sin esperar por una respuesta, me
aparto de ella y escapo a mi habitación, golpeando la puerta detrás de
mí antes de girar la cerradura. La quiero conmigo, pero la quiero lejos,
muy lejos. Soy una total contradicción y ya no sé qué hacer conmigo
mismo. Tal vez en verdad estaría mejor solo.
No puedo seguir viviendo mi vida así, dejando que… una mujer
me controle como lo hace, pero no puedo evitar mis reacciones.
Necesito ayuda. Soy un puto desastre y necesito que alguien me salve
antes de llegar a ser completamente insalvable.
Ondas de miedo bajan por mi columna mientras me quito toda la
ropa, dejándolas en un montón húmedo en el suelo. Ignoro mi furiosa
erección. Estoy demasiado duro, mi polla duele, pero me rehúso a
tocarme, sin importar cuánto alivio sentiré cuando termine. Debería
estar con (Tn) ahora mismo, no sólo con mi jodidos recuerdos.
Está golpeando la puerta, pidiéndome que la deje entrar. Me giro
y miro la puerta cerrada, mi corazón latiendo tan fuerte que el sonido
llena mi cabeza y realmente no puedo escuchar nada más. Estoy
respirando como si acabara de correr cientos de kilómetros sin
detenerme y mi piel se siente tan tensa que siento que podría estallar.
Estoy caliente. Febril.
Mi cabeza da vueltas.
Mierda.
(TN)
Estoy en puntillas y alcanzo la parte superior del marco de la
puerta, encontrando una de esas llaves hexagonales que abrirá
cualquier cerradura. Agarrándola, meto la delgada pieza de metal en
la cerradura y la giro, agradecida cuando hace clic con facilidad.
Tal vez no debería hacer esto. Invadir la privacidad de Nick
cuando claramente está dejándome fuera. Pero la forma en que
reaccionó me asustó demasiado y también me llenó de preocupación;
sabía que tenía que ir tras él y asegurarme de que todo está bien. Su
expresión había estado tan llena de desesperación cuando se apartó
de mí, que no estoy segura de lo que le provocó.
Tengo miedo de descubrir qué está mal, pero tengo que hacer
esto. Por Nick .
Cuando abro la puerta, veo que está de pie en medio del cuarto
completamente desnudo y por un momento, estoy aturdida. Su cuerpo
es hermoso, una obra de arte masculina. Anchos hombros, espalda lisa
con músculos fluidos y un trasero que luce tan firme como el acero. Mi
cuerpo entero duele por sentirlo moviéndose contra mí, conmigo, pero
sé que no es lo que necesita en estos momentos.
—Nick —susurro, mi voz quebrada, casi tanto como mi corazón.
Se gira, el dolor y la humillación escritos en toda su cara.
—Debes irte.
—Déjame ayudarte. —Empiezo a acercarme a él y niega con la
cabeza.
—Vete, (Tn) . No quiero que me veas así. —Baja la cabeza y mi
mirada cae a la parte inferior de su cuerpo. Está erecto, una enorme
erección y no sé lo que sucedió para arruinar lo que iba a ser sin duda
alguna un hermoso momento entre nosotros, pero ahora no hay nada
que pueda hacer al respecto.
—No puedes alejarme. —Sé que es lo que está haciendo. Lo que
solía hacer. Me niego a dejar también que me lo haga a mí. Me
mantendré firme y a realmente ayudarle.
Quiero quedarme.
—No me deseas —susurra con voz áspera—. No así. No puedo…
no quieras tratar conmigo cuando estoy así.
—Por favor, Nick . —Estoy rogando y no me importa. Nunca hago
esto. No me arrastro, lo intento lo mejor que puedo para no perder la
cabeza. Pero verlo así me asusta. No quiero dejarlo solo y no quiero que
me aleje. Siento que en este momento soy todo lo que tiene—. Dime
qué puedo hacer.
—Puedes irte. —Se aleja de mí y corro hacia él, agarrando su
brazo e impidiendo que siga adelante.
—No. —Nuestras miradas chocan y me mantengo firme en mi
lugar, incluso sabiendo que debo lucir ridícula medio vestida y
empapada por la lluvia—. No voy a irme.
Sus ojos caen a mí, todavía con el pecho desnudo y se quedan
allí. Mis pezones se aprietan por su descarado examen y me balanceo
hacia él como si no pudiera evitarlo. Mi cuerpo me traiciona a pesar de
que hago mi mejor esfuerzo por pretender que él no me afecta. Lo que
está sucediendo entre nosotros no es sobre sexo justo ahora. Nick
necesita mi consuelo. Mi aceptación.
—Estás temblando —murmura, extendiendo una mano para
agarrar un mechón de pelo mojado. Lo frota entre sus dedos, con la
mirada todavía clavada en mi pecho—. Tienes que cambiarte esa ropa
mojada.
Es como si estuviera volviendo lentamente a mí, volviendo de ese
oscuro y desolado lugar a donde se retiró. Su expresión es más ligera, sus
ojos no están tan amplios y llenos de terror. Su voz ha vuelto a la
normalidad y no está temblando tanto.
No estoy segura de lo que quiere de mí, pero sea lo que sea,
estoy dispuesta a darlo.
Completamente.
_________________________________________________________________________________
Continuara...
ElitzJb
Página 5 de 23. • 1, 2, 3, 4, 5, 6 ... 14 ... 23
Temas similares
» UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD PARA AMAR (Liam payne Y tu)(1°TEMPORADA) ( TERMINADA)
» My Destiny (Nick y Tu) Segunda Temporada TERMINADA
» Segunda Oportunidad ♥ -HarryJudd&Tú-
» Segunda Oportunidad (Harry y _____)
» Segunda y última oportunidad. {Joe Jonas}
» My Destiny (Nick y Tu) Segunda Temporada TERMINADA
» Segunda Oportunidad ♥ -HarryJudd&Tú-
» Segunda Oportunidad (Harry y _____)
» Segunda y última oportunidad. {Joe Jonas}
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 5 de 23.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.