"Speak Now" (Nick y tu) [TERMINADA]

Capitulo 30: Trabajo de medio tiempo

Las cosas eran un sueño, mi vida era el cuento de hadas que siempre había soñado. Tenía a mi novio, una casa, mi familia, a mis amigos, y al sol cada mañana, que se colaba por mi ventana y me hacía sentir viva, cada día, me hacía saber que en verdad estaba viva y podía correr y gritarlo, podía abrazar a Nick cuando llegaba del trabajo t decirle cuanto lo amaba, sabía que quizás estábamos cansados de la rutina, que no teníamos una mansión, que no teníamos dinero de sobra, que no teníamos dinero para la mayoría de nuestros planes ni sueños. Pero sin embargo comprendí el significado de “El dinero no es la felicidad” Claro que ayuda muchísimo, puede traer todo lo que deseas, pero no lo es todo, si tienes mucho dinero, pero no tienes amor, no podrás ser una persona demasiado feliz, el amor es felicidad, con o sin mucho dinero y yo no tengo dinero, pero que feliz soy, definitivamente, soy feliz enteramente por primera vez en la vida. Solo le ruego al cielo que no se lleve esto nunca.

Tu: Hola amor.
Nick: (Llegando) Hola princesa.

Tu lo besaste y el se sacó el moño de camarero.

Tu: Estuve pensando… ¿Y si dejo la universidad? Podría trabajar y no se, reunir dinero para cualquier ocasión.
Nick: No, no amor ni lo pienses.
Tu: Es que a mi aun me quedan cuatro años para recibirme…
Nick: Y a mí uno. Aguantaremos este año, nada más, luego tú seguirás estudiando y viviremos mejor.
Tu: Al menos déjame conseguir un trabajo de medio tiempo.
Nick: Ok, hazlo. Pero esta vez será más fácil… ¿No?
Tu: Pues si, supongo que encontraré alguno, no tiene que pagarme demasiado como el anterior, con los dos trabajando podremos comprar galletitas una vez a la semana.
Nick: Hmm…

El se acercó y te abrazó. Al otro día luego de la universidad saliste por las calles y un montón de solicitudes que habías sacado del diario. Entraste a una tienda de ropa y le preguntaste a la chica del mostrador por el empleo de medio tiempo.

Chica: Ah, si, espera, te traeré al dueño del local.

La chica fue al fondo y volvió con un muchacho de 25 o 26, alto, de cabello moreno y corto, con ojos verdes y grises al mismo tiempo, tenía los ojos grandes y relucientes, al verte se dirigió con una mirada seria hacia ti. Tu lo miraste sería también, el luego sonrió para saludarte e hizo una reverencia con la cabeza. Mientras tomaba tu mano y te daba un beso en la mejilla.

El: Encantado, soy David.
Tu: _________, mucho gusto.
David: ¿Vienes por el empleo de vendedora?
Tu: Amm si, quería saber si es solo por el verano o también puedo seguir trabajando el resto del año.
David: Ah, no, nosotros no damos empleos de verano, es para todo el año.
Tu: Genial, eso es lo que estoy buscando. ¿Qué horarios tienen?
David: Amm… el empleo disponible comienza a las cuatro y se extiende hasta las ocho.
Tu: Bien, estoy disponible.
David: Pasa a mi oficina, discutiremos algunas cosas y tienes que llenar algunas fichas. Firmar papeles, ya sabes.

El era muy simpático.

Tu: Listo, entonces, ¿Comienzo el lunes siguiente?
David: Seguro, te presentaré a tus compañeras ese mismo día tendrás una semana y debes vender 25 prendas, son 5 días, (De lunes a viernes) ¿Podrás vender cinco prendas por día?
Tu: Si, no hay problema… Bien, entonces… (Parándote de la silla de la oficina) Gracias.
David: Fue un placer.

El se levantó y te abrió la puerta. Tú lo saludaste con un apretón de manos y una sonrisa. Pasaste por la puerta y te dirigiste a la salida por el pasillo. Cerrando la puerta de pasillo hacia el local te diste cuenta de que aún estaba observando desde la oficina.

Nick: ¡Es asombroso! Conseguiste un trabajo en un solo día.
Tu: Pues si. (Mientras revolvías la salsa y el ponía la mesa para la cena)
Nick: Es genial, así que estarás vendiendo ropa… ¿Tienes carácter de vendedora?
Tu: Si no me das un beso no te daré salsa.
Nick: La compro.
Tu: Jajaja… ¿Ves? No es tan difícil.

Nick te besó y luego comieron pasta con salsa.
El primer día vendiste siete prendas, resultaste ser convincente para esas cosas. David quedó encantado con tu trabajo, eras una chica fresca, sonriente, simpática, y amable con los clientes. Tus tres compañeras eran muy buenas y graciosas, ellas te dieron la bienvenida. Eran Bridget (Mendler), Tiffany (Thorton) y Chelsea (Staub).

Bridget: (Mientras doblaba ropa en una mesa junto a ti) ¿Qué edad dijiste que tenías?
Tu: Tengo 20 ¿Y tú?
Bridget: Tengo 22… Oye eres muy simpática, David esta quedando bastante contento con tu trabajo.
Tu: ¿Ah si?
Bridget: Si, ¿Que no has notado la sonrisa que tiene cada vez que te saluda?
Tu: Amm… No.
Bridget: El tiene planes para ti.
Tu: ¿Qué?
Bridget: Te irá genial ya verás.
Tu: (Confundida) Gracias.

A las dos semanas las cosas seguían iguales, habías conservado el empleo ya que vendiste cerca de 6 o 7 prendas por día.
Solo faltaban 10 minutos de trabajo para irte a casa y David te llamó a su oficina.
Tu tocaste la puerta y el te hizo pasar.

Tu: ¿Necesitaba verme?
David: Ah, si.
Tu: ¿Algo anda mal?
David: No, no… Eres maravillosa, te está yendo muy bien.
Tu: Hmm…
David: Quería verte, porque quiero que vayas a tomar un café conmigo dentro de diez minutos, las chicas cierran y vamos a un restaurante, a donde quieras.
Tu: Amm… es muy amable pero…
David: Por favor, solo para, hablar de trabajo.
Tu: Señor, es considerado de su parte pero no se si será una buena idea.
David: Acepta, será divertido.
Tu: Está bien…

Capitulo 31: “Nunca te dejaría sola”

Te levantaste y fuiste al vestuario a sacarte el uniforme.
Cuando saliste te veías así.



David: Tiffany asegúrate de que quede bien cerrado.
Tiffany: Claro señor.
David: ¿Nos vamos? (A ti)
Tu: Claro…

Te llevó a un café y se sentó en una mesa delante de ti. Revolvía su capuchino mientras te miraba.

David: Háblame de ti, tiendo a conocer a mis empleadas.
Tu: Soy universitaria, estudio medicina, vivo a 4Km de aquí sobre la playa, tengo 20 años…
David: Bien… ¿Tienes hijos?

Tú largaste una risa de burla.

Tu: No, no aun no.
David: ¿Aun no?
Tu: No, hasta los 24 no.
David: Ja…
Tu: ¿Y usted?
David: Ay, no, y no se si tendré, no quiero dejar las cosas que hago ahora.

Tu lo miraste curiosa.

David: Salir, tener amigos, novias, trabajo…
Tu: Si, entiendo.
David: ¿Estas casada?
Tu: No, aun no.
David: ¿Aun no?

Había pasado un rato te estabas riendo tentada y cuando levantaste la mirada allí estaba Nick entrando al café. Tu rostro quedo serio mirándolo, el aun no te había visto. Pero en un momento su mirada cruzó la tuya. Luego sus ojos se dirigieron a David, quien se dio vuelta para ver que estabas mirando. El lo miró y mezclo rabia con enojo y tristeza, con decepción con silencio con un millón de preguntas en su mirada y la dirigió sobrecargada para ti. Tú no pudiste hacer más que ver como salía del restaurante. Te paraste y le dijiste a David que te perdonara. Corriste detrás de Nick quien se dio vuelta y quedaste frente a el sin poder explicar, viendo su rostro tan confundido había confundido tu mente.

Nick: ¿Y?
Tu: Nick, es mi jefe, me invitó a tomar un café al salir del trabajo.
Nick: Ah, que bueno. (Sarcasmo)
Tu: Nick, no te enojes, tu sabes que eres al único que amo.
Nick: Es que no lo soporto. No soporto verte sentada en un restaurante con un tipo que no conozco, riéndote.
Tu: Nicholas, esos son celos, no te preocupes.
Nick: Te das cuenta de la hora que es ¿No?
Tu: ¿Qué hora es?
Nick: Son las nueve y media. ¿Qué podría pensar yo?
Tu: ¿Qué estabas haciendo aquí?
Nick: Pensé que sería lindo que comprara un pastel para sorprenderte cuando llegaras cansada de tu trabajo.
Tu: (Encantada pero acabada por la culpa) Nick, lo siento.
Nick: Siéntelo.

Se subió al auto y se fue.
Tu volviste al café y miraste a David desde la puerta, el se paró y fue hasta ti.

David: ¿Todo en orden?
Tu: No, nada.
David: ¿Qué sucedió?
Tu: Nada, debo irme.
David: ¿Quieres que te lleve?
Tu: No, tomaré el bus.
David: No, por favor, déjame llevarte.
Tu: Está bien.

Decidiste aprovechar que podías llegar mas rápido con el, en ese momento, solo querías ver a Nick y explicarle todo.

David: (Mientras conducía) ¿Era tu novio?
Tu: (Callaste por unos segundos) Si, era el.
David: ¿Causé muchos problemas?
Tu: No, no te preocupes, es algo celoso, eso es todo.
David: De verdad lo siento.
Tu: No pasa nada.

Bajaste del auto y te dirigiste a la entrada de tu casa. Entraste y Nick no estaba. Fuiste a la cocina y dejaste tu bolso sobre la mesa, te refrescaste la cara con agua y Nick entró por la puerta hacia la playa, seguramente había salido a tomar aire.

Nick: (Acercándose) Tu jefe te trajo a casa.
Tu: ¿Qué me estas espiando?
Nick: No, sabes que no. Pero no soy tan torpe de no ver que me dejaste esperándote una hora y media por tu jefe, que ni siquiera se si de negocios hablaban, ¿Qué tanto hablas con una empleada de hermosos ojos, cabello suave y un cuerpo modelo?
Tu: Ay Nick, sabes que jamás te engañaría.
Nick: Acaba de traerte otro tipo que te mira con cara de secuestrador ¿Qué quieres que piense?
Tu: Nick, ten confianza en mí.
Nick: ¡No puedo evitar pensar que haría si te pierdo!
Tu: Nick no vale la pena discutir esto.

Luego la discusión empeoró hasta que te fuiste a caminar a la playa. Al volver ya eran la una y media de la madrugada. Encontraste a Nick sentado en la mesada de la cocina. Tú lo miraste mientras entrabas y cerrabas la puerta.
Increíblemente la pelea continuó hasta las tres de la madrugada, pero esta vez no aguantaste y te largaste a llorar mientras discutías.

Tu: (Llorando) ¿Qué no recuerdas cuando nos sentamos en el agua? Todo lo que vivimos Nicholas, ¡Yo te amo!

Corriste fuera de la casa, corriste hacia la calle. Llegaste afuera llorando. Estabas de espaldas a la casa, solo bastaron uno o dos minutos para que Nick te abrazara por atrás. Tu te soltaste, el tomó tu mano y tu no lo permitiste. Nick comenzó a pedir perdón y a intentar abrazarte. Tu te rendiste y el te miró de frente. Tomo tu rostro y cerca de el susurró con una voz tan dulce y suave como solo el sabe hacerlo “Nunca te dejaría sola” El dijo “Recuerdo como me sentí sentado en el agua, y cada vez que te miro es como la primera vez, me enamore de la hija de un padre descuidado y ella es la mejor cosa que alguna vez fue mía” Al escuchar esto lloraste y lo abrazaste fuerte. No querías que se te escapara otra vez. Lo amabas, de verdad lo amabas, por un momento te preparaste para un adiós pero el de verdad, te había tomado por sorpresa.

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new reader !!!
x dios cmo AMOOO tu nove .. es simplement WOW !!!
Amo demasiado las canciones d taylor !!
y el ultimo capitulo con mine !! ♥ ♥
me encanta !
y nick ... todo muy hermoso en serio
SIIIIGUELAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Capitulo 32: Eres la mejor cosa que alguna vez fue mía

Luego de aquella horrorosa pelea hablamos y arreglamos todo. Seguí yendo a ese trabajo porque Nick insistió en que confiaba en mí y porque de verdad me gusta… David coquetea pero ya no le hago mucho caso.
Comencé a escribir otra canción, acerca de lo que hemos vivido con Nick y de que ahora, somos realmente fuertes.

Había pasado un año desde aquella discusión. Este verano, los ahorros permitían tener una vida más relajada. Tú dejaste tu empleo durante el verano. Nick dijo que ya no era necesario, pronto comenzaría a ejercer como abogado.

Nick: Amor, vamos a la playa.

Hacia calor, estaban en febrero, Nick había cumplido sus 24 y tu tus 21. Era casi el atardecer cuando caminaban por la orilla del agua de la mano. El silencio los dejaba disfrutar del simple hecho de estar juntos. Ya cuando el sol comenzaba a tocar el agua te diste cuenta que estaban en el lugar donde habían ido en tu cumpleaños numero 19, donde el había pasado su brazo sobre ti por primera vez, el mismo día en que se besaron por primera vez.
El se detuvo y se paró delante de ti.

Nick: ¿Recuerdas este lugar?
Tu: Claro que si.
Nick: Hay que meternos al agua.

Pasaron un largo rato en el agua, el te levantaba y jugaba contigo. Luego se besaban mientras sus caricias eran más suaves por el agua. El sol estaba a medias metido en el agua y sus rostros estaban pegados mientras se miraban a los ojos tan abrazados como podían.
Nick te llevó a la orilla y te pusiste un vestido suelto y blanco por encima del bikini. El tenía su bermuda y estaba sin blusa. Te miró a los ojos y te abrazó. El sol ya casi desaparecía y el metió sus manos en unos pequeños bolsillos de tu vestido.

Nick: __________.
Tu: Mmm…
Nick: (Pegando su rostro al tuyo) ___________.
Tu: Nicholas.
Nick: Cásate conmigo.

Tu lo miraste mientras el se arrodillaba con una cajita que había sacado del bolsillo de tu vestido.

Nick: (Arrodillado) _________ Swift. ¿Te casarías conmigo?

El sol desaparecía dejando otra vez el cielo multicolor. Tu quedaste parada sin saber como explicar la felicidad que tenías.

Su mirada estaba totalmente iluminada. Tenía el rostro serio esperando mi respuesta, no me había dado cuenta de donde estaba hasta que mis lagrimas cayeron, ahí reaccioné de que en verdad no era un sueño, el estaba allí, arrodillado en frente mío, con un anillo plateado con un cristal azul tan delicado que sonríes si lo ves. Era hermoso. Tuve mil fotografías de su rostro en mi mente y todo eso tardo como 7 segundos luego de que el preguntó. Sonreí, mientras mis lagrimas no paraban de caer, me reí de la emoción y luego grite una y otra vez “Si, si, si, si, si, si, si, si, si, si, si, si, si, si… ¡SI NICHOLAS! ¡Claro que si!” Me tape la boca con mis manos mientras estaba completamente asombrada y contenta. Me arrojé al suelo y lo abracé igual que el a mi. Lo amaba, simplemente lo amaba como a nadie más. Llore unos segundos en su cuello y luego me separé, el secó mis lagrimas y yo continuaba con esa sonrisa en mi rostro, el tenía una muy parecida en el de él. Aun arrodillados tomo mi mano y puso el anillo en su lugar.

Nick: Te amo.
Tu: Te amo Nicholas.

Me beso como nunca me había besado, reviví todo aquello que habíamos vivido y aquel primer beso donde sentí en mundo en mis manos, las estrellas, las mil sensaciones. Seguí en sus labios hasta que se paró y me tomó en sus brazos y me llevó a casa, aun con su bella cara de felicidad.

Amaneciste el otro día con tu rostro pegado al de el. Nick tenía sus bellos ojos cerrados. Tú optaste por no despertarlo, se veía hermoso. Te levantaste, te duchaste y tomaste la guitarra para salir de la habitación. Te sentaste en el porche del fondo, desde donde veías el mar, comenzaste a tocar una bella melodía u recordaste todo lo que había pasado con ustedes en los últimos años.



Nick: Que bonita.

Allí estaba mi futuro esposo con una terrible cara de recién levantado, recostado en la puerta. El me miró y pidió que cantara otra vez ya que no había escuchado el principio, y le gusto que lo que hice con nuestros recuerdos.

Nick: Entonces… (Sentado a tu lado en el porche) ¿Cuántos hijos quieres tener?
Tu: (Riendo) ¿Qué?
Nick: Ya oíste, ¿Cuántos hijos quieres tener?
Tu: Ahora ninguno, por ahora no.
Nick: Ay, vamos, solo quiero saber cuantos.
Tu: Es muy fácil preguntar tu no eres el que tendrá panza.
Nick: (Se ríe) ¿Nena o varón?
Tu: Me da igual, lo voy a amar como sea.
Nick: Ya, dime cuantos.
Tu: No se… ¿Cuántos quieres tu?
Nick: (Luego de pensar unos segundos) Dos o tres.
Tu: Hmm…

Lo abrazaste mientras contemplaban el agua tan azul que se encontraba tan cerca de su hogar.

Tu: Hay que notificar a todos.
Nick: Ok. Alistate, iremos casa por casa.
Tu: Ok.

Ya que era sabado subieron al auto para ir a visitar a tus padres, a los suyos y a algunos amigos. Llegaste a la casa de tus padres e inmediatamente la puerta se abrió y salió tu hermanita corriendo a abrazarte.

Tu: ¡Hola Miles!
Miley: ¡Hermanita!
Tu: Tengo una gran noticia Miley, ven, vamos a dentro.
Miley: Ok. Hola Nick.
Nick: Hola belleza ¿Cómo estas?
Miley: Bien.

Miley se acercó a saludar a Nick y Nick la subió a sus brazos, entro a la casa contigo. Tu cerraste la puerta y Nick miró a Miley que aun estaba abrazada a su cuello sentada en sus brazos.

Nick: ¿Y tus papás?
Miley: Estan con Zac en el fondo.
Tu: Ok, vamos.

Al llegar a la puerta del fondo estaban tus padres sentados y Zac corría hacia ti con una sonrisita de lo mas tierna. Tu lo levantaste y él le sonrió a Miley y a Nick desde su altura. Nick bajó a Miley y se acercaron a saludar.

Tu: (Sentada con Zac en brazos y Nick detrás) Mamá, papá, les tenemos una noticia.
Tom: ¿Es buena?
Nick: Es muy buena.
Miley: ¿Qué es?
Tu: (Sonriente) Nos vamos a casar.

Tus padres los felicitaron y Miley estaba muy contenta al saber que ella llevaría los anillos.
Luego de tomar algo con tus padres te despediste y fueron a lo de Kevin. Kevin reacciono con un abrazo hacia ti y un millón de felicidades. Selena también se hallaba contenta igual que sus padres, ya que ellos te conocían muy bien.
La parte mas difícil había llegado, era hora de decirle a sus padres, o peor aun, a su madre.

Paul: Hola, ¿Cómo están?
Nick y tu: Bien.
Paul: Pasen chicos.

Tu pasaste y Nick permaneció unos segundos junto a su padre.

Nick: Por favor papá, evita que mamá se vuelva loca, no quiero que ________ se ponga triste, tenemos una noticia.

OMG !!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Nos vamos a casar !!!!!!!!!!!!! aaaaaaaaa q emocionnnnnnnnnn !!!!!! q amor mas tiernooooooooooooooo ... en la playaaaaaaaaaaa aaawwwwwnnnnnnn

pero ..........................

no me gusta no caerle bien a la suegra u.u

no me qiere T.T

SIIIGUELAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Capitulo 33: Noticias y festejos

Nick: Por favor papá, evita que mamá se vuelva loca, no quiero que ________ se ponga triste, tenemos una noticia.
Paul: Claro, lo intentaré.

Tú miraste a la cocina y salía Demi con sus brazos abiertos y dos pastelitos en las manos, uno estaba mordido y estaba mascando algo… en fin, te abrazó.

Demi: ¿Cómo has estado ____-?
Tu: Muy bien ¿Y tu Dem?
Demi: Bien, aun no entiendo como soportas a mi hermano, pero te he extrañado…
Tu: (Sonríes) Aww…
Demi: Hey, toma un pastelito.
Tu: Gracias. (Tomando el pastelito)
Nick: Hola Demi.
Demi: Hola bro.
Nick: ¿Y mamá?
Demi: Esta allí haciendo pasteles.
Nick: Oh, claro.

Nick te tomó por la cintura y caminó hasta quedar al lado de su madre.

Denisse: Hola cariño.

Denisse lo saludó comúnmente y continuó amasando. Luego te miró y te dio un beso en la mejilla también.

Tu: Hola señora Jonas.
Denisse: ¿Cómo han estado?

Su actitud era distraída, no los miraba, pasaba de amasar en la mesada a buscar cosas en los armarios y en la mesa de la cocina, evitaba las miradas que pudieran terminar en ustedes.

Nick: Mamá. (Viendo que tu te estabas sintiendo incomoda)
Denisse: ¿Si? (Mirando el batido)
Nick: Mamá mírame, tenemos una noticia.

Denisse se detuvo y se recostó en la mesada a mirarlos.

Denisse: ¿Nietos? Oh, por dios, ni me lo digas…
Nick: (Ignorándola) Papá, ven, ¡DEMI!

Demi vino a la cocina.

Nick: Familia, nos vamos a casar.
Paul: Es grandioso hijo, felicidades a los dos.
Demi: Wao, que dulces, felicitaciones.
Denisse: Esta vez espero que no te enamores de nadie más mientras estas comprometido.

Tu sonrisa se borró y bajaste la mirada.
Salieron luego de un rato y te sentaste en el asiento del pasajero, te pusiste el cinturón y bajaste la mirada. Nick cerró la puerta de su lado luego de entrar y quedó callado mirando hacia delante. Mordió su labio y te miró, tú suspiraste.

Nick: No es nada importante.
Tu: Si Nick, si lo es. Imagina que mi madre te odiara, ¿Te sentirías cómodo con eso?

Nick bajo la mirada.

Tu: Quiero que entiendas que es difícil para mi… Casarme contigo es el sueño de mi vida. Pero es difícil no contar con esa aprobación.
Nick: No te preocupes. Solo, ha de estar un poco rara… ya se le pasará.
Tu: Si tu dices.
Nick: Hey… (Se acercó a ti) Todo estará bien amor.
Tu: Ok…

El te besó y tú sonreíste.

Nick: ¿Ok?

Tu te reíste suavemente, el te hacía feliz.

Nick: Amo cuando te ríes sin razón alguna. ¿Quieres ir a cenar?
Tu: Tenemos que ahorrar para la boda.
Nick: Ya sabremos que hacer con eso. Soy abogado ¿Lo olvidas?
Tu: Ok… ¿Vamos a cenar?
Nick: Claro hermosa.

Fueron a festejar a solas, Nick te llevó a un hermoso restaurante.

Nick: (Bajando del auto) Quizás te haya llevado a algún restaurante desde donde se vieran las olas, pero nunca te llevé a un restaurante SOBRE LAS OLAS.



Tu mirabas boquiabierta el hermoso lugar.

Tu: Cenar aquí debe constar una fortuna Nick.
Nick: Ah, no tanto… y si tienes reservaciones… es mejor.
Tu: Awws…

Te acercaste y lo besaste.
Iban vestidos así



Nick tomó tu mano y se dirigió a la entrada.

Señor: ¿Tiene reservaciones?
Nick: Sr. Jonas.
Señor: Pase.

Nick había reservado una mesa mas en el medio, donde estaban bien sobre el agua y contra el borde, así podrían sentir mejor las olas.

Tu: (Sentándote) Es hermoso, me encanta Nick.
Nick: Hmm… Me alegro. Hey, respecto a lo de hoy, no te preocupes por nada, nosotros somos felices ¿Ok? Además tu familia lo compensa todo, ellos están muy felices y podríamos invitarlos a casa algún día… Que vengan a cenar y a cuidar bebés.
Tu: Jaja, Nick, si que estás con eso de los bebés ¿Eh?
Nick: Pues si, tus hermanos son tan lindos que me dan ganas de tener niños en casa todo el tiempo…
Tu: Ok, algún día tendrás.
Nick: ¿Lo prometes?
Tu: Algún día…
Nick: Está bien… ¿Qué vas a ordenar?
Tu: Lo mismo que ordene en nuestra primera cita.
Nick: ¿Planeas conocer a un galán hoy?
Tu: ¿Para que? Si ya tengo todo lo que quiero.
Nick: Excepto hijos.

Luego de cenar se fueron a casa. El domingo fue normal, estuvieron en casa juntos… A la tarde tus padres pasaron un rato por tu casa y estuvieron en la playa con Miley. El lunes fue extraño. Nick llegó mas tarde de lo normal, estaba raro, era amoroso, bueno, gracioso… pero había algo que no estaba del todo bien. Le preguntaste varias veces si se sentía bien pero te respondía que si, que no era nada, que solo estaba cansado… A la noche cuando te abrazó por detrás y recostó su frente en tu cabeza confirmaste que algo andaba mal, podía ser el trabajo, algún plan o algo que pudiera afectarte ya que el tenía esos gestos cuando estaba preocupado por ti. Nick suspiró y tu te aferraste a el. El pudo sentir que te habías dado cuenta de que estaba preocupado, tu te diste vuelta y lo abrazaste. Pensaste que no había nada que no pudieran superar así que le susurraste al oido, tan suave como pudiste mientras enredabas tus dedos en sus rulos y tus piernas en las de el “No hay nada que nos derrumbe, podemos con todo”. Nick sonrió y te abrazó fuerte, no sabías que era lo que pasaba pero sabías que no era muy bueno. Solo sabías que Nick estaba preocupado por algo

d q sta p`reocupadooo ?? :pale:

spero q no sea nada muy grave :S

siiiiguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

AVISO: LES DEJO DOS CAPS QUE SON UN TANTO TRISTES PERO BUENO ASI ES LA NOVE Y DEBE CONTINUAR. LO QUE LES QUIERO AVISAR ES QUE HAY PEQUEÑAS COSAS, PEQUEÑOS DETALLES QUE SON FICTICIOS, PERO BUENO EN UNA NOVE TODO SE VALE ASI QUE YA LES SUBO :)

Capitulo 34: ¿Qué sucede?

Nick estaba preocupado por algo. Sus abrazos durante toda esa semana eran extraños, pareciera que estaba intentando aferrarse a ti para nunca soltarse, parecía que no quería que te fueras, que no quería dejarte, que no quería alejarse de ti. Ya estabas harta de eso, estabas aun mas preocupada que el… Estabas volviéndote loca de la intriga, querías saber que rayos era lo que te ocultaba.

Tu: (Volteando a ver a Nick, estabas lavando los platos) Ya, Nicholas ¡¿QUÉ TE PASA?!
Nick: Nada, ¿Por qué te pones así?
Tu: Estoy enloqueciendo, no se que es lo que te tiene tan mal, Nick, quiero ayudarte quiero saber que sucede.
Nick: No te preocupes amor, todo está bien.
Tu: No, no lo está, se que hay algo que esta yendo mal y ¿Podrías decirme que cosa es?
Nick: No te preocupes, enserio. Todo está bajo control.

El te abrazó y tú tenías aun esa enorme intriga que te volvía loca.

Sabía que algo iba terriblemente mal, lo notaba en sus ojos, de verdad, cuando conoces a Nick, puedes adivinar lo que le sucede, como se siente y que tiene oculto cuando lo miras a los ojos o cuando te abraza. Es muy dulce, pero a veces, como esta vez, es aterrador pensar que algo terrible lo rodea, te hace temblar. Puedes sentir lo que el siente cuando tienes la conexión de tu mirada junto a la de el. Me corre un escalofrío cada vez que me mira últimamente.

Nick llegó un jueves luego de trabajar, el seguía raro… hacia mas o menos una semana. Te besó y se tiró en la cama, tú entraste a la habitación y te sentaste en los pies de la misma.

Tu: Nunca me vas a decir… ¿Cierto?
Nick: ¿Qué quieres que te diga?
Tu: Qué te pasa.
Nick: No me sucede nada.
Tu: Nicholas. Por favor.
Nick: No te preocupes, enserio.

Saliste de la habitación. Te recostaste en la mesada de la cocina y tuviste ganas de llorar, pero no lo hiciste. Querias saber que pasaría, querías entrar a la habitación y exigirle que confesara. Pero no lo haría. El parecía enfermo y no querías ni imaginar que fuera algo sobre su salud. No soportarías verlo en un hospital. Menos herido. Definitivamente te estaba volviendo loca, estabas cada vez mas histerica. Hasta que entraste al cuarto decidida a que confesara.

Lo miré, el estaba mirando el techo. Dije su nombre y cerró sus ojos. Supe que algo estaba cayendo.

Tu: Nicholas, ¿Qué sucede?
Nick: Amor, llama a la ambulacia.

Casi se me detiene el corazón. Corrí a la cocina, tome el telefono y disque al 911. Luego de la llamada corrí al cuarto y quedé de rodillas en la cama tomando sus manos. Estaba como loca, comencé a temblar aguantando el llanto, no sabía que le pasaba pero el estaba allí tirado como que no pudiera moverse o no tuviera energía y le doliera algo dentro de si. Recosté mi cabeza en su pecho y el colocó su mano suavemente en mi cabello.

Nick: No es nada, no es nada.

El repetia eso mientras su mano temblaba.
Eran las 10:30 de la noche y tú estabas en la emergencia, sentada al lado de la camilla de Nick. El doctor entró y miró a Nick.

Doctor: Hola Sr. Jonas. ¿Cómo le va?
Nick: No muy bien.
Doctor: Bueno, sus resultados vienen en camino, pero yo espero que no tenga leucemia.
Tu: (Reaccionando luego de quedar congelada) ¿¡QUÉ!?
Nick: Sh…
Doctor: Ah… Bueno, Sr. Jonas, lo que podemos hacer ahora es inyectarle insulina.
Tu: ¿QUÉ? ¿¡Por qué!?
Doctor: Señorita, salga un minuto por favor.
Nick: No le diga.
Doctor: Necesita saberlo.

El doctor cerró la puerta y tú lo miraste. Aguantabas las lágrimas en tus ojos.

Doctor: El Sr. Jonas, es diabético tipo uno, lo cual es muy delicado. Acaba de bajar el nivel de insulina y por eso está tan mal… Pero lo recuperaremos. El problema es que cada un tiempo, debe hacerce un analisis para detectar leucemia en caso de que haya, lo que es posible en los diabeticos. Hace dos años que el Sr. Jonas no se hace uno de estos analisis por lo que podría tener leucemia, asi como puede simplemente estar bien. Pero aun no tenemos los resultados, al parecer los estan corroborando y llegarán dentro de dos o tres días.

Tú llorabas desesperadamente.

Tu: No tenía idea de nada, no sabía nada.
Doctor: Iré por agua.
Tu: No, no, estoy bien, solo necesito hablar con él.
Doctor: Bueno, pero no es aconsejable preocuparlo.
Tu: Ok…

Abriste la puerta de la pequeña habitación donde se encontraba.

Nick: ¿Qué te dijo?
Tu: Que vas a morir.

Nick cerró los ojos.

Tu: Yo te mataré Nick. Nunca me dijiste que eras diabético, y yo, aun más tonta, no me había dado cuenta.
Nick: No quería que te preocuparas, eras más feliz así.
Tu: No Nick, viéndote sufrir y no saber por qué… Y… encima… podrías tener leucemia. Ay, Nicholas.
Nick: Estaré bien.
Tu: (Abrazándolo) Tengo miedo.
Nick: ¿El doctor te dio miedo?
Tu: No tonto, tengo miedo de perderte.
Nick: ¿Estás insinuando que moriré?
Tu: Tú eres inmortal. Nicholas, te amo.
Nick: No llores.

Tú comenzabas a llorar en su pecho.

Nick: Sobreviví 10 años con esto, lo superaré además, no es seguro que tenga leucemia.
Tu: No, no tienes, ¿Por qué tendrías?
Nick: ¿Ves? Es solo otro examen, ahora es solo otra baja de insulina, esto es normal.
Tu: No entiendo porque me lo ocultaste todo este tiempo, nunca encontré nada, nunca sospeché.
Nick: No soy tonto ¿Sabes?
Tu: Hmm…

Te aferraste a él aun más, ¿Toda aquella preocupación por un examen cualquiera? ¿Toda aquella tristeza en su rostro por eso? Había algo más, de seguro.
Luego de unas horas se fue a casa contigo y se hallaban acostados en la cama, era ya de mañana y Nick estaba mirando el techo con tu cabeza en su cuello, el silencio ahogaba un millón de preguntas…
Luego de unos días esperaban el resultado que nunca llegó. Pero Nick estuvo mal unos cuantos días más hasta que un día recibiste la peor noticia que alguna vez podrías recibir.

Capitulo 35: Lágrimas y mas lágrimas

La peor noticia que podrías recibir. Ese día te habías despedido de Nick cuando se fue a trabajar, tú lo miraste irse en el auto preocupada. Pero confiabas en el, ya que te había dicho que estaba bien. Tú te alistaste y saliste a trabajar mas tarde. De camino a la tienda llamaste a Nick.

Nick: ¿Hola?
Tu: Nick, soy yo.
Nick: Hola amor.
Tu: ¿Cómo estás?
Nick: Estoy bien princesa, ¿Cómo estás tú?
Tu: Bien, algo preocupada, ¿Seguro que estás bien cierto?
Nick: Si amor, no te preocupes, te esperaré con la cena en casa ¿Ok?
Tu: Ok… Nicholas…
Nick: ¿Si?
Tu: Te amo, cuídate ¿Si?
Nick: Claro amor, tu también. Te amo.

Fin de la llamada.

Quedaste preocupada por Nick, pero te mandaba mensajes a cada rato. Volviste a casa y Nick no había llegado, dejaste las llaves y miraste hacia la playa a ver si estaba por allí afuera. Luego de comprobar que no había llegado aún lo llamaste. Pero atendió una voz que no conocías.

El: ¿Familiares del Sr. Jonas?
Tu: ¿Qué pasó?
El: Soy el Dr. Kent ¿Puede venir a emergencias ahora?
Tu: (Corriendo) Ya estoy en camino. ¿Qué pasó?
Dr. Kent: Nicholas Jonas tuvo un accidente automovilístico, tengo que irme, digame su nombre para que la dejen pasar.
Tu: (Te tapaste la cara llorando mientras buscabas aliento para responder y un taxi) ________ Swift, estoy comprometida con el.
Dr. Kent: Bien, gracias.

Cortaste y detuviste un taxi y te sentaste en el asiento trasero. Cerraste la puerta y te tapaste la cara con ambas manos. Comenzaste a llorar. El taxista te miró por el espejo luego de haberte preguntado más de tres veces “¿A dónde vamos?” Pero no te interrumpió y se quedó en silencio.

Tu: Al Hospital.

El taxista obviamente entendió por qué llorabas y se dirigió lo más rápido que pudo hacia allá. Le pagaste cuando te bajaste y le diste como 20 dolares de más, ni siquiera te importó el cambio, saliste corriendo y entraste a la emergencia. Pusiste tus manos bruscamente contra el mostrador y una enfermera te miró.

Tu: Nicholas Jonas.
Enfermera: No puedo dejarla pasar.
Tu: Tomé mi identificación, hablé con el Dr. Kent.
Enfermera: Ah, señorita Swift. Le pido disculpas, venga por aquí.

Tú seguías llorando. La enfermera te dio pañuelos y te informó de la situación antes de que pudieras entrar a una pequeña habitación donde Nick estaba esperando todos los análisis de posibles huesos rotos, golpes, etc.

Enfermera: El Sr. Jonas tuvo un choque automovilístico en la esquina de Av. Washington y la calle Mariposa. ¿Volvía de su trabajo?
Tu: (Con lágrimas en las mejillas) Si.
Enfermera: Bien, al parecer tiene un fuerte golpe en la cabeza y lo que es seguro es que tiene una pierna quebrada (En la parte inferior).
Tu: Ok, ya, déjeme verlo.
Enfermera: Señorita… (Tomándote del brazo) El está inconsciente.

Tú te recostaste contra la pared y lloraste.

Tu: ¿Por qué? Dígame cuando va a despertar.
Enfermera: Lo más probable es que despierte dentro de algunas horas, o quizás mañana… No es un coma. Despertará, no se preocupe.

Tú te calmaste al oír eso. Entraste a la sala ya mas tranquila y allí estaba el con sus ojos cerrados, sus labios sellados y partidos a un costado. Tenía una pierna toda vendada y tubos para respirar. Lo miraste y tomaste su mano.

Tu: Nick, amor. (Sentándote al lado de la camilla) Estoy aquí. Por favor despierta… (Llorabas) Todo estará bien bebé.

Corriste tus dedos por su cabello y te recostaste en su cuello, tú rente en su mejilla. Te acomodaste allí en su piel sin soltar su mano, la cual llevaste a su pecho y acariciaste durante un rato. El seguía con sus ojitos cerrados y lo único en lo que podías pensar era en que los abriera y te dijera que se irían a casa, que ya no tenía nada y que fuera cierto.
Como 15 minutos luego llegó su familia. Denisse con lágrimas en los ojos entró a la habitación y tú permaneciste como estabas. Ella te miró y tú te aferraste a la mano de Nick.

Paul: (Entrando detrás de Denisse) Hola ________.
Tu: (Cerrando los ojos) Hola.
Demi: (Acercándose a ti) Hey ____- ¿Qué tal si vienes a la cafetería conmigo? Vamos a tomar algo.
Tu: (Viendo que lo que quería era que evitaras a Denisse) Ok.

Te apartaste de él y te fuiste con Demi, quien quedó mirando a su hermano desde la puerta antes de irse.
Estaban ambas calladas con la mirada baja, sentadas en una mesa de la cafetería del hospital. Ese silencio era terrible, hacía que pensarás en todo lo que podía pasarle a Nick, en lo que pasaría si le detectaran leucemia, en si tendría solución.

Demi: (Callando el horrible silencio) Todo estará bien.
Tu: Demi… ¿Sabes algo del examen de leucemia?
Demi: No mas que tú.
Tu: ¿Ya sabes el resultado como yo? (Mentiste para sacarle información)
Demi: Así que ya lo sabes… Creí que no te diría.
Tu: Ayer me lo dijo.
Demi: Existen tratamientos, no te preocupes, podrán curarlo.

¡NO! No, no, no, no, no, no, no… Era la confirmación de que el si tenía leucemia… ¡Dios! Tan mal me sentía que comencé a llorar y me tapé la cara, tenía ganas de gritar, ganas de preguntarle al cielo ¡¿POR QUÉ?! El era todo lo que yo quería, yo quería estar con el durante el resto de mi vida y resultó que tenía cáncer en la sangre… Demi me abrazó y yo no pude ni responder el abrazo, solo lloré en su hombro.
Como media hora después llegó Kevin, yo no sabía que estaba haciendo allí pero me contó que Demi había llamado a mi casa para avisarle a mis padres que yo estaba en una clase de ataque y mi pequeña hermanita llamó a Kevin para que viniera el a estar conmigo. El entro y se sentó en unos bancos de la cafetería a mi lado.

Kevin: No te preocupes hermanita, todo estará perfectamente bien ¿Si?
Tu: Ok… Kevin gracias por venir. Te quiero mucho.

Kevin te abrazó con el cariño con el que lo hacía antes de conocer a Nick, ese calor y ese afecto que te hacían sentir tan bien. Demi estaba con sus padres en la sala de Nick. Kevin se quedó hablándote de cualquier cosa… Luego de un rato Kevin te había hecho sonreír un par de veces.

Demi: (Llegando) Bueno, dicen que despertará pronto.
Kevin: ¿Quieres ir ___-?
Tu: Si, ¿Me acompañas?
Kevin: Claro.

no me maten a mi, en todo caso maten a xophie jajajaja

Capitulo 36: Volviéndome Loca

Ya estabas al lado de Nick, Denisse y Paul estaban afuera, en la cafetería. Tú tomaste su mano. Deseaste que despertara… De pronto Nick presionó tu mano. Tú lo miraste fijamente, estabas intentando manejar sus parpados para que abriera sus ojos. Nick sonrió y sin abrir los ojos continuó aferrado a tu mano.

Nick: Hola amor.
Tu: ¿Cómo estás? (Sonriendo)
Nick: No lo se… ¿Cómo estás tu?
Tu: Igual que tu.
Nick: ¿Vas a matarme?
Tu: No, aun no. Demi, nos dejarías un segundo.
Demi: Claro. (Saliendo de la habitación)
Tu: Nick…
Nick: Esto no es bueno. (Abrió sus ojos y te miró)

Su mirada te estremeció… estabas conteniendo nuevamente las lágrimas.

Tu: ¿Tienes leucemia?

Nick volvió a cerrar sus ojos.

Tu: (Llorando) Nicholas, respóndeme.
Nick: Todo va a estar bien, me van a curar, ya verás.
Tu: Ay, ¡Nick!

Lo abrazaste y lloraste, lloraste escandalosamente, dejaste salir todo el dolor.

Nick: No llores princesa. Por favor no llores.
Tu: ¿Cómo quieres que no llore? ¿Cuándo planeabas decírmelo?
Nick: Nunca. No esperaba escucharte llorar así nunca.

A los dos días pudieron volver juntos a casa. Nick entró con sus muletas a casa y se sentó en el sofá, pasé silenciosamente delante de el y me encerré en el baño. Me arrodille en el suelo y saqué todo el llanto acumulado, pasé como 10 minutos llorando allí dentro hasta que me mojé la cara y salí. Le sonreí con mis ojos hinchados y me miró triste. Me senté a su lado, ninguno de los dos estaba listo para discutir… pero igualmente lo intenté.

Tu: ¿Qué vamos a hacer?
Nick: Tengo que empezar un tratamiento.
Tu: ¿Te vas a curar?
Nick: Eso espero. Me prometiste que tendríamos hijos ¿Recuerdas?
Tu: Cierto…
Nick: Además tenemos que casarnos.
Tu: Cierto.
Nick: No te preocupes por nada… todo estará bien. Ya verás princesa.

Tu te recostaste en él… querías saber que tan avanzada estaba la enfermedad y si de verdad era curable…
Nick miraba el techo pensativamente en la mitad de la noche. Tu lo mirabas sin que el se diera cuenta, te costaba tanto dormir con esa sensación extraña, sentías que no podías hacer nada para evitar que se te fuera de las manos. Obviamente tratabas de pensar que esto no sería problema alguno, que dentro de unos meses Nick estaría saludable otra vez… pero esa sensación tan fuerte de tristeza te rodeaba… estabas atormentada.
Los siguientes días había silencio en la casa, ambos estaban devastados… por las noches Nick dormía muy poco y tu lo vigilabas, veías el brillito de sus ojos en la oscuridad prometiendo quedarse allí para siempre. De verdad estabas volviéndote loca nuevamente. Querías desesperadamente que aquello no estuviera pasando. Te hallabas observándolo una vez que el cerró sus ojos y parecía estar dormido.

Nick: Se que estás ahí.

Abrió sus ojos y miró los tuyos.

Nick: ¿Por qué no duermes?
Tu: ¿Por qué tú tampoco lo haces?
Nick: No lo sé… Me preocupa que no duermas.
Tu: Nick… Te amo.
Nick: No voy a morir.
Tu: Ya lo sé…
Nick: ________...

Tú lo miraste.

Nick: Te amo.
Tu: (Sonreíste) Eres asombroso.
Nick: ________ Cásate conmigo.
Tu: ¿Quieres repetirlo? Ok… Si, Nicholas, me casaré contigo con gusto.
Nick: Excelente. Entonces porque piensas en otras cosas.
Tu: No lo sé, he pensado mucho en que estoy enloqueciendo.
Nick: Seguramente. Lo bueno es que enloqueceremos juntos amor.
Tu: Hmm…
Nick: Oye, no pienses más ¿Ok? Solo te autorizo a que pienses en nuestra boda. ¿Ya te dije que me casaré dentro de 2 semanas?
Tu: Ha, ok… Ok…

Después de todo el tenía razón, se casarían dentro de dos semanas, debías concentrarte en que saliera todo perfecto.

Nick: ¡Quiero ver!

Tu estabas en el cuarto de Miley en la casa de tus padres junto con Selena y Miley, le estabas mostrando a Miley el vestido de novia que habías comprado con Selena. Nick estaba gritando del otro lado de la puerta.

Tu: ¡¡¡No Nick, no puedes!!!
Selena: ¡Es de mala suerte ver a la novia antes del altar Nick!
Miley: ¡Solo intentamos protegerte!
Nick: ¡Quiero ver!

Las tres se reían y tu madre pasó al cuarto sacando a los empujones a Nick, que estaba tratando de pasar.

Judy: ¡AY QUE BONITA! Definitivamente es un vestido muy, muy hermoso. Y una bella hija también.
Tu: Gracias mamá… (Con una sonrisa)
Selena: Hey y ¿Quién te va a peinar?
Tu: Ay, pues no lo sé… Supongo que iré a algún salón de belleza pero no a “Sel y Meg” Eso es seguro.

Selena se había convertido en una excelente estilista e incluso tenia un salón de belleza pequeño en el pueblo junto con una amiga de ella llamada Meaghan.

Selena: Eres una peleadora.
Tu: Pues si…
Selena: Ja, te haría un excelente descuento de amiga.
Tu: Entonces voy.
Selena: Jajaja…
Tu: No, no te preocupes, solo bromeaba, por supuesto que iré a tu salón Sel. Te adoro.
Nick: ¿¡PUEDO VER!?
Todas: ¡¡¡NO!!!
Tom: (Desde la cocina) ¡¡No te recomiendo entrar a la fuerza, ellas tienen aun más hijo!!