Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 15 de 19. • Comparte
Página 15 de 19. • 1 ... 9 ... 14, 15, 16, 17, 18, 19
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Capitulo 25 parte 2
―La forma en que lo atienden― repuso eso último imitando la voz de Lola.
Gerald mostró una media sonrisa y rio por lo bajo.
―¿Y para qué le digo que no? A veces quisiera que fueran más groseras conmigo o que me trataran como a un cliente normal.― su sonrisa se volvió una leve línea recta y se aclaró la garganta― Bueno, ¿de qué quería hablar, señorita Vanderbilt?
―Tutéeme, llámeme _____, por favor.
―Lo haré, pero llámame Gerald.
―Gerald.
―_____ . Ese era uno de los momentos en los que _____ se sonrojaba si mantenía el contacto visual, así que desvió la mirada al porta servilletas del centro de la mesa.
―Estoy muy preocupada por Magda, Gerald.― se sentía rara tuteándolo, pero continuó― Tal vez tú no lo sepas pero ella es la única que se ha molestado en ser mi amiga y últimamente actúa de forma rara…― esperó a que Gerald dijera o hiciera algo que delatara que sabía algo pero siguió mirándola fijamente, impasible― Llega tarde a la escuela, me evita, la última vez tenía un ojo tan lastimado que no podía abrirlo ¡tú la viste!― Gerald asintió lentamente con la cabeza, con expresión seria― y hoy…― la voz comenzaba a pesarle con el nudo en la garganta que la asfixiaba.
Gerald perdía la paciencia y puso ambas manos sobre la mesa.
―Hoy qué,_____.―la apremió ―Tenía el labio roto y le salía mucha sangre. Gerald tensó la barbilla apretando los dientes y cerró un puño.
―Dios…
―Ya no sé qué hacer, no habla conmigo, no me dice nada. Quisiera no pensar mal de ella, pero no puedo apartar la idea de que anda en asuntos chuecos…
Gerald se exaltó.
―¿A qué te refieres? Ella se encogió de hombros.
―Es una persona bastante ruda, creo que es miembro de alguna banda delictiva― se estremeció de sólo pensarlo― tal vez la estén obligando a hacer algo que ella se niega a hacer y la castigan…
―Con golpes.
―Exacto. El otro día llegó con un flamante BlackBerry que debe costar como tres mil libras cuando ella misma me ha dicho que a veces no tiene dinero suficiente para comer. Se lo robó, Gerald, se lo robó. Me cuesta creerlo y no lo quiero creer.
________ comenzaba a ponerse tan angustiosa que tuvo que hacer una pausa y luego de un momento alzó la vista y vio a Gerald sin rastro de inmutación en su rostro.
―¿Por qué estás tan tranquilo? Te estoy diciendo que tu cliente puede ser culpable de robo, ¿no te preocupa?
Gerald suspiró reclinándose en su asiento. ―Magda Howell no se ha robado ni un cacahuate en su vida. Yo le di ese celular porque no tiene teléfono y necesitábamos estar en contacto.
―Ah… _____ estaba impactada con la aclaración. Sentía un impulso enloquecedor de abrazarlo «¡Gracias, Dios! ¡Gracias!»
―Es… ¿Es enserio?― dijo con un dejo de emoción perceptible
en la voz.
―En serio. _____lo miró y sonrió de oreja a oreja sintiendo cómo el alivio barría el peso de sus hombros.
―Pero… ¿entonces por qué necesita de tus servicios como abogado?
Por un momento creyó haber visto que Gerald vacilaba, se quedaron mirando el uno al otro y él ocultó las manos bajo la mesa. _____ sabía que las manos delataban muchas cosas, por lo visto Gerald estaba enterado de ese truquito revelador.
―Yo…― empezó a decir él cuando Lola apareció con una deslumbrante sonrisa y bandeja en mano.
Gerald tuvo que jurarle que no necesitaban otra cosa para que la mujercilla se alejara sin querer mucho la cosa.
_____lo observó meter el sorbete en la abertura del vaso y fruncir los labios alrededor de él para sorber.
―¿No vas a tomarte eso? Ella negó con la cabeza. Ni siquiera había tocado el vaso. ―No hasta que me digas lo que quiero saber. Gerald soltó un largo suspiro, miró a ambos lados y se inclinó sobre la mesa.
―Acércate― hizo un gesto con la mano para que ________ se reclinara también y cuando lo hizo le susurró― No puedo decirlo.
―¿Por qué no?
―Ética.
―No, al diablo la ética― se exasperó― Gerald, por favor, necesito saber. Puede que Magda no quiera que la ayude pero no me importa lo que ella quiera, no me voy a alejar así como así, no la voy a dejar sola en esto. Está loca si cree que no puedo ayudarla a cargar la cruz…― maldición, otra vez tenía unas estúpidas ganas de llorar― sé que no tengo demasiado tiempo de conocerla pero ¿es necesario el tiempo cuando me importa más de lo que puedo expresar?― se irguió en el asiento y golpeó la mesa con un dedo para dar más énfasis―: la cosa está así, señor Styles, Magda me cuida la espalda y yo se la cuido a ella. Se lo ruego, dígame qué ha hecho Magda.
Gerald estaba impresionado con semejante demostración de lealtad. Tenía entendido que las mejores amigas se decían lo que querían escuchar y no la realidad, para después envidiarse y calumniarse en secreto. Decir que te gusta su vestido cuando en realidad la hace ver como una ballena embarazada o ayudarla a ligarse a un chico cuando en realidad aprovechas para ligártelo tú.
Y ahí estaba esa chica que conocía los defectos de Magda y aun así la quería.
La verdadera amistad es como la sangre, que acude a la herida sin ser llamada.
________ no pedía nada a cambio más que apoyar. Cielos… Gerald tuvo que maldecir a Magda por tener una moneda de oro como amiga y ser tan ingrata. Tal vez ni siquiera la merecía, pero quién rayos era él para juzgar.
Alzó los ojos al techo y dijo con un suspiro derrotado: ―Ay, está bien, está bien. Voy a contarte lo que pasa pero te pido que no digas ni una sola palabra de lo que escuches ¡ni una sola! Cualquier cosa puede interferir en el juicio y perjudicaría a mi cliente como no tienes idea, todo esto sumado a que perdería mi licencia y posteriormente mi trabajo por demanda de Magda así que… tú dices si nos condenas a todos.
____ tragó saliva. Ahora resultaba que tenía que proteger el pellejo de dos personas. ¡Ni siquiera pudo mantener vivo a su hámster! «Henry, el hámster en paz descanse» Gerald volvió a mirar furtivamente alrededor y habló por lo bajo como conspirador.
―La cuestión es, que la señorita Howell… «Mató a una persona, violó a un anciano, asaltó un banco, pateó un gato, corrió desnuda frente a la Reina, robó la paleta de un niño, es terrorista y trabaja con Osama Bin Laden…» ________ se imaginó toda clase de crímenes habidos y por haber que una persona falta de juicio podría cometer, pero nunca se imaginó lo que Gerald estaba a punto de decir:
―…no es mi cliente y tampoco está acusada de cometer algún delito.
―Oh…― parpadeó ―Entonces… ¡¿Entonces por qué maldita razón todo este rollo mareador?!― Gerald levantó una mano para tranquilizarla pero no surgió el efecto deseado. ____ se dio rienda suelta ― Sabrás perdonar mis palabrejas, Gerald Styles, pero esto me está jodiendo el entendimiento. Me arriesgo saliendo así de la escuela, de por sí mis padres ya no me tienen tanta confianza desde mi borrachera y por si fuera poco no puedo llorar en el hombro de mi mejor amiga recién ganada porque ya la estoy perdiendo y no sé de qué otro lado ver la moneda, pero tal parece que mis primeras sospechas son correctas― entornó lo ojos― Magda y usted están saliendo y no quiere que yo interfiera. Caso cerrado.
Esperaba que Gerald pareciera avergonzado pero más bien estaba al filo de la perplejidad. Él abrió la boca para luego cerrarla y parpadeó un par de veces para recuperar la coherencia de lo que estaba pasando.
―Cielo Santo ¿Cómo se te ocurre una cosa así?― mostró una sonrisa irónica bastante atractiva― Tenía pensado mantener mi vida privada en la oscuridad, pero usted me obliga a hacer lo contrario, señorita Vanderbilt― dijo su apellido con lentitud y voz grave― Para empezar, estoy comprometido, me caso en dos meses y antes de que siga calumniándome, no es con Magda― ______ abrió la boca para decir algo pero Gerald levantó una mano― permíteme terminar. Magda se enteró de mi éxito en el último caso que me fue asignado y se contactó conmigo― Gerald recordaba esa noche precisamente porque eran las tres de la mañana y estaba en la habitación de su departamento, en plena sesión romántica con Roselyn, su prometida, él no quería interrumpirse pero Rose insistió en que contestara el teléfono:
Alargó el brazo por encima de los pechos de Roselyn quien soltó una risita y miró el número en la brillante pantalla del celular. Llamaban desde un teléfono público ¿A las tres de la mañana? Debía ser una broma.
―Styles.― Contestó tratando de reprimir el dejo de pasión en su voz.
Se escuchó algo de interferencia aterradora y luego una serie de jadeos, como si la persona al otro lado hubiera estado corriendo. Gerald frunció el ceño.
―¿Hola?― insistió. No hubo respuesta. Retiró el teléfono para mirar la pantalla, lo regresó a su oreja y luego volvió a retirarlo para colgar, pero justo en ese momento:
―Necesito que me ayude.― alcanzó a escuchar una voz de chica.
Él se incorporó en sus codos mientras Rose lo miraba con interrogación en la mirada.
―¿Quién habla? ―Por favor…―se escuchó un sollozo débil― necesito que saque a mi padre de la cárcel ¡el no hizo nada! Es inocente, lo sé, yo lo vi…lo vi todo. Por favor, sólo…― un ruido de llantas chirriando interrumpió la conversación.
Gerald se alarmó y se incorporó totalmente. La chica sonaba muy alterada, histérica.
―¿Hola? ¿Sigue ahí? ―Joder…Tengo que irme, creo que ya me encontraron.― Y se cortó la comunicación seguido del sonido corrido de la línea.
Gerald se quedó un rato escuchando ese sonido con el teléfono pegado a la oreja mientras miraba al vacío. ¿Qué había sido eso? Si era una broma, seguro que era la más convincente que le habían jugado.
Al día siguiente, sentado tras el escritorio de cristal de su moderna oficina sonó el celular. Era de nuevo la chica.
―¿Y bien Styles? ¿Vas a ayudarme o me pongo a tejer? Le sorprendió el tono con el que le hablaba, sin rastros de la chica asustadiza de la noche anterior.
―¿Y con quién tengo el gusto de hablar?―inquirió él manteniendo el tono cordial.
―Magdalena Howell. ―Bien, Magdalena Howell. Le informo que no sólo es cuestión de querer ayudarla. Hay una serie de procedimientos que…
―Sí, sí, sí, ya sé.― repuso en tono aburrido― Papeleo, contrato, firma, entrevista y dinero ¿no? Le informo que no tengo tiempo para eso, si las cosas no se agilizan le van a dar cadena perpetua a mi padre, sin derecho a fianza ¿comprende? Qué bueno, ahora, en cuanto al dinero, conseguí un trabajo en el centro comercial y estoy ahorrando para pagarle, pero me tiene que esperar por lo menos uno o dos años para tapar la deuda ¿trato?
Gerald se quedó mudo por un momento, era una chica de negocios muy ruda.
―Señorita Howell.
―¿Sí?
― ¿Qué hizo exactamente su padre? Magda vaciló al teléfono.
―No puedo decirlo aquí― miró alrededor de la cabina pública e inconscientemente se llevó los dedos a la frente donde tenía una herida en forma de tajo reciente. Los hombres que la perseguían se la habían hecho como advertencia de que le pasarían cosas peores si abría la boca― debemos vernos en un lugar tranquilo.
―¿Dónde?― preguntó la voz ronca de Gerald.
―En Dancey High, acabo de inscribirme y es una zona vigilada
¿Tomará el caso?
Hubo una pausa.
―Lo pensaré. Y un mes después ahí estaba. A la directora Foutley le pareció sospechoso a pesar de que tuvo la osadía de coquetear un poco con él y no lo dejó pasar, pero le permitió a Magda salir.
Se esperaba una chica bajita, flacucha sin gracia y lánguida. Pero oh vaya sorpresita, era una mujer salida de algún programa de gladiadores. Por otra parte parecía nerviosa y tenía la cabeza empapada. Gerald le sonrió de la forma que siempre conseguía tranquilizar a las mujeres (menos a su madre) y escuchó toda la historia durante casi tres horas.
Henry Howell, el padre de Magda, trabajaba en un taller mecánico en Leyton, uno de los barrios más cutres y peligrosos de Londres (a Scotland Yard* siempre le daba problemas). Al negocio de Henry solían llegar autos robados pero no hacía ningún comentario a sus clientes para evitarse problemas.
Al parecer el verdadero dueño de uno de los autos fue a hacer justicia por su propia mano y se encontró con los delincuentes en un callejón cercano. Claro, fue una reverenda tontería, todo el mundo sabe que si quieres morir en Londres métete a un callejón y espera tu muerte segura. Él tipo sólo sacó valor porque estaba ebrio y tal vez drogado, pero Henry Howell no lo sabía y acudió en su ayuda encontrándose a tres tipos grandes armados hasta los dientes. Ya era demasiado tarde, habían disparado al hombre que yacía inerte en el suelo húmedo.
Magda iba de camino al taller cuando escuchó los gritos de su padre, siguió el sonido hasta el callejón y ahogó un grito justo cuando los hombres rodeaban a Henry.
«Vete» suplicaban los ojos de su padre cuando sus miradas se cruzaron por una fracción de segundo antes de que lo golpearan en la espalda haciéndolo perder el equilibrio.
Magda no se fue, no podía irse, tampoco podía dejar de mirar horrorizada, y lo peor, no podía ayudar, ni gritar. Estaba paralizada viendo sufrir a su padre y luego sonaron las sirenas de una patrulla. Los hombres dejaron inmediatamente a Henry, uno de ellos volteó y vio a Magda apuntándola con un dedo. Fue tras ella mientras que los demás dejaban a su padre medio inconsciente junto al hombre baleado, arrojaron la pistola cerca de él y una bolsa con alguna droga dentro para que en cuanto llegara la policía lo encontraran como el absoluto culpable. Sólo tenían que eliminar a la testigo.
―Ya…― _____tenía la vista fija en el linóleo de la mesa y apoyaba su frente en una mano― basta, por favor…ya no me digas más.
Gerald no pudo evitar mirarla con compasión. ______aún era demasiado inocente como para enterarse de lo crudo que podía ser la vida. No era fácil haber vivido engañada en un mundo color de rosa y luego recibir un balde de agua fría.
O de ácido. Trató de controlar su creciente hiperventilación respirando profundo pero sólo acrecentó su ansiedad.
―La están amenazando de muerte― repuso _____ incorporándose― Es por eso que llega lastimada…¡Gerald, la vida de Magda está en peligro!― puso su mano sobre la que él tenía en la mesa y la sacudió mientras que con los dedos de la otra apretaba el medallón del collar que Harry le había dado, como si su frio contacto la fuera a tranquilizar.
Gerald observó destellar el borde del medallón y luego no pudo apartar la mirada de él.
―¿Qué es eso? ______ siguió la dirección de los ojos de Gerald y se posó sobre su pecho.
―Un collar ¿Pero qué tiene que ver con…?― se interrumpió cuando él alargó una mano para tocarlo pero se detuvo a medio camino y la miró.
― ¿Podría…?
―Oh, claro― totalmente desconcertada se llevó las manos a la nuca y desabrochó la cadena pasándola a manos de Gerald que la acercó a sus ojos y la hizo girar en sus dedos.
Él no podía creer que tuviera esa cosa en las manos. En una cara del ovalado medallón estaba grabado «Harry» en elegante caligrafía y del otro lado un diminuto escudo de armas atravesado por dos espadas que formaban una X y un par de leones flanqueando el borde.
― ¿Dónde conseguiste esto?― preguntó con voz ronca sin dejar de mirar el medallón, sin dejar de pasar los dedos por sus relieves.
A los ojos de_____, era como ver al personaje pequeño y arrugado de El Señor de los Anillos mientras mimaba el anillo maldito y decía “Mi precioso, mi precioso”.
― Me lo dio Harry. Gerald levantó bruscamente la vista hacia ella. Pues sí, ahí decía “Harry”, ni modo que el collar diga eso y sea de “Robert”.
― ¿Quién es Harry?― pronunció lentamente. ____ esbozó una ligera sonrisita, la primera en mucho rato.
―Mi novio-dije orgullosa
Gerald asintió con la cabeza pero no pareció haberla escuchado porque de nuevo estaba idiotizado con el medallón, así que ____ intentó con otra táctica:
― ¿Sabe? ¿Es idéntico a usted? Se lo dije pero su respuesta fue “¿Enserio tengo la boca tan grande”― imitó la voz de Harry al decir lo último.
Gerald sonrió, era una sonrisa extraña, como si él no se diera cuenta de que sonreía, por lo tanto, no había censura mostrando sentimientos, parecía triste.
― ¿Y dime?― repuso luego de aclararse la garganta― ¿Es tan guapo como el tipo que tienes enfrente?
Oh. Por. Dios. ____ se quedó tensa, estática, y Gerald creyó haberla ofendido de alguna forma.
―¿Qué pasa? ¿Por qué esa cara?
―Harry dijo lo mismo.
―Ah…
―Harry dijo…lo mismo― repitió esta vez para sí misma. A la mente de Gerald acudieron un montón de palabras incomprensibles y cabos sueltos coleccionados a lo largo de su vida.
Ahora él también parecía estar perdido en alguna especie de dimensión desconocida.
_______ lo vio meter una mano dentro de su camisa y buscar a tientas algo. Al sacarla tenía consigo una larga y fina cadena de oro que colgaba desde su cuello.
―Lo mismo― dijo y abrió la mano para que _____ pudiera ver una réplica exacta del pequeño medallón ovalado.
«Gerald» Era lo que decía con el mismo tipo de caligrafía que el de Harry y al reverso… el mismo escudo.
«Lo mismo» Ninguno de los dos dijo nada ni afirmó nada. Era una conversación sin palabras en la que sabían lo que cada uno estaba pensando y lo que estaban pensando era lo mismo.
―Le di a entender que tal vez sería posible, pero me dejó claro que no podía ser…
―Mi hermano.
Él dejó caer el medallón sobre su pecho al igual que su espalda sobre el respaldo del asiento y miró a_____. Bueno, no exactamente a ella, si no más allá de ella.
______, de alguna manera tenía una corazonada, un presentimiento, una convicción, una esperanza, un imperioso deseo de que las cosas fueran como ella se las había imaginado. Y aun así no estaba preparada para que fuera verdad. Seguro nunca olvidaría ese día.
Una verdad tras otra. ¿Es que era más fácil vivir engañado?
―¿Por qué?― preguntó ella encontrando al fin su voz. Gerald se limitó a observarla con una mirada que luchaba por mantenerse en algo sólido.
―¿Por qué las cosas son como son? ¿Por qué Harry no sabe nada de ti ni de su familia? ¿Por qué todo acabó así?― De inmediato la respuesta que _____quería ignorar fue la única que alzó la mano en su cabeza.
«Los dos sabemos que ninguna madre quiere a un hijo mutante»
Gerald se pasó una mano por la cara antes de soltar un suspiro.
―Creo que puedo contestar a tu pregunta.― Repuso, y ____ ya tenía una idea de lo que escucharía.
―Qué haces tú aquí.― masculló una voz a espaldas de ____. Era Magda. Y no se veía precisamente amistosa.
*Scotland Yard: La policía de Londres equivalente al FBI de Estados Unidos HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
O DIOS!!!
SU HERMANO *------------------------------------------*
que porque cual es el secreto de la familia styles?? ya descubrimos el secreto de madga y vaya problema vamos gerald tienes que ayudarla!!
se casara?? eso me de celos y non se porque XD
siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
me a encantado y eh amado mucho los caps!!!
*------------*
awwwww
que problema hoy a sido un dia de muchas confesiones eh? :3
bueno honey espero la sigas pronto besos
:*******
SU HERMANO *------------------------------------------*
que porque cual es el secreto de la familia styles?? ya descubrimos el secreto de madga y vaya problema vamos gerald tienes que ayudarla!!
se casara?? eso me de celos y non se porque XD
siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
me a encantado y eh amado mucho los caps!!!
*------------*
awwwww
que problema hoy a sido un dia de muchas confesiones eh? :3
bueno honey espero la sigas pronto besos
:*******
.Sweet Angel.
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
ENSERIO! ENSERIOO!! :o hermano? Woow! ._. Como, donde y cuando?
X.x sigue que cada vez se pone MEJOR!!
X.x sigue que cada vez se pone MEJOR!!
carla
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Me encanto espero q la sigas pronto...era hora q se sepa...chau besitos;)
ayluu_garciaa;)
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
WTF HARRY NO ESTA SOLO EN ESTE MUNDO
OMGGG
SIGUELA PORFAVOR
OMGGG
SIGUELA PORFAVOR
Bianch
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Volvii, el estupido correo no deja que me lleguen los mensajes
OMG Gerald es el hermano de mi Hazza
Pobre Magda
siguela pronto
OMG Gerald es el hermano de mi Hazza
Pobre Magda
siguela pronto
AnneleStyles
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Capitulo 26
Había parado de sangrar, pero la sangre se le había hecho una gruesa costra marrón rojiza en el labio inferior y un moretón tomaba forma en su mentón.
Miró a ______, luego a Gerald y de nuevo a _____.
―Miren nada más―cruzó los brazos sobre el pecho― yo pensé que con Harry tenías hasta de sobra, pero veo que te encanta traicionar.
Traición. Eso era de lo peor que una amiga podía acusar. A _____ se le encogió el estómago.
―Señorita Howell, ¿cómo nos encontró? ―La baratija que me diste tiene GPS para localizar contactos ¿Te acuerdas?
______ se puso de pie y encaró a Magda, Gerald también se levantó de un salto.
― ¿Qué es lo que crees?―empezó diciendo _____ a Magda con un tono de voz más que seguro de sí mismo.― ¿Que estoy pintada en una pared o qué?
Magda la miraba desde arriba con ojos entornados de furia y Gerald sólo podía pensar «Cállate o te va a matar, ¡cállate! Deja de hacerte la temeraria»
― ¿De qué diablos hablas?― pronunció Magda a media voz con los dientes apretados.
― ¡De lo de tu padre! ¿De qué voy a estar hablando? ¿Tengo que enterarme por otras personas? ¿Tan poca es la maldita confianza que me tienes?
Magda abrió los ojos como platos y las personas en el café (que ya eran más) voltearon a ver a la pelirroja que gritaba. Se hizo silencio, incluso la música de fondo cesó.
― ¿Quién te dijo…?―miró por encima del hombro de ____ a Gerald― oh, ya sé.― la apartó a un lado y avanzó hacia él, pero Gerald no retrocedió ni un ápice, ni se intimidó. Era incluso, más alto que Magda.― ¿Por qué no puedes mantener el hocico cerrado?― se exasperó levantando los brazos― Te estoy pagando, Gerald, no lo estás haciendo de a gratis, por lo tanto me obedeces. Si te digo que saltes de un acantilado, saltas. Si te digo que te sientes, te sientas. Si te digo que te dispares, te disparas. Y si te digo que te calles la boca ¡Te callas la boca!
Gerald frunció el entrecejo y apuntó a Magda con un dedo.
― Podré estar a tu servicio, pero me reservo el derecho a decirte que eres una mocosa malcriada, mal agradecida y mal educada. Como tu abogado te aconsejo que mantengas a tus amigos lo más cerca posible de ti o terminarás volviéndote loca, el juzgado te desquiciará, créeme, y tú no tendrás a nadie alentándote cuando mires por encima de tu hombro. ¡Te dan la mano y tu ni la uña agarras! ¿Por qué no le contaste a ______ lo de tu padre? ¡Es tu amiga y la estás lastimando!
― ¡Idiota! ¡Precisamente porque no quiero que la lastimen no se lo dije! ¡Y estás despedido!―.rugió.
______ se quedó muda, Gerald se quedó mudo, todo el mundo estaba mudo, sólo un bebé comenzó a llorar rompiendo con el silencio que se había impuesto.
― ¿Qué dijiste?― la voz provenía detrás de Magda. Ella giró encontrándose con una ______ al borde de las lágrimas, pero ejerciendo una fuerza increíble por
―_____, quiero que me mires, sólo mírame. Ellos me hicieron esto―señaló la cicatriz sobre su ceja― porque sé algo que no debería saber ¿Acaso querías que te pasara lo mismo? Si tan sólo esos desgraciados se enteraran de que sabes la verdad, tu vida peligraría tal como peligra la mía ¿Quieres lo mismo? ¿Lo quieres?― hizo una pausa y al ver que no contestaba continuó con voz más calmada― Porque yo no. Tal vez no pueda protegerme a mí misma, pero puedo protegerte a ti y hasta puedo proteger a Harry― esbozó una sonrisa irónica― ¡Y si se me diera la gana protegería a la perra de Keyra, al estúpido de Brandon y a todo el inepto equipo de futbol!― _____ rio débilmente― y los protegeré guardando silencio. Este secreto es como la sangre, sin ella me muero, ¿entiendes?― ______ asintió desviando la mirada― Y para que lo sepas, tú y Harry son los mejores.― sonrió― Par de estúpidos tórtolos.
____ también sonrió. El momento se prestaba para un abrazo, pero no era el estilo de ninguna, así que quedó implícito en el aire y en la sonrisa que se compartieron.
―Vámonos de aquí― dijo Magda empujando a ____ hacia la salida― Ah, y disculpen todos por las molestias― se dirigió con un gesto de mano a las personas que la miraban irritados y por último miró sobre su hombro hacia Gerald, que seguía en su sitio con cara de total desconcierto― Styles, estás recontratado.― y salió de ahí con _____.
Mientrastanto con Harry
― ¿Seguro que va a funcionar?
―Por supuesto― aseguró Harry― es un plan a prueba de tontos.
― ¿Eh?
―No me refiero a ti Brandon, hablo de Callahan
―Oh…espera, ¿acabas de llamarme tonto?― lo apuntó con un dedo― Déjame decirte, estúpido, que…
―¡Shh!― lo silenció Harry levantando una mano. Ambos caminaban por el pasillo y se dirigían al campo de futbol para que les levantaran la sentencia.
En realidad, no fue tan malo pasar todo el día esposado a Brandon, no para nada ¡fue horrible!
Nunca había conocido a una persona que se quejara tanto como él, que se riera de cualquier tontería como él, que tuviera menos cerebro que él y que pensara que todo era una estupidez como él: “Estúpido aquí, estúpido allá”.
Hubo una ocasión, ¡una sola!, durante Biología, en la que Harry decidió hacer la tarea y averiguar algo sobre la vida o aspiraciones de Brandon.
Le preguntó “¿Qué carrera quieres estudiar?” Brandon lo miró y contestó:
―Estoy interesado en la ciencia.
Harry se quedó boquiabierto. Vaya, esto comenzaba a ponerse más interesante.
―Con que científico ¿eh?―enarcó las cejas― creo que podría empezar a respetarte más y a verte menos como idiota.
Brandon le lanzó una mirada furibunda.
―El día en que trabajes para mí lo lamentarás. Cuando sea científico y compruebe mi teoría te haré limpiar los baños de los discapacitados con la lengua.
Harry sonrió irónicamente con una sonrisa de medio lado.
― ¿Y cuál es esa teoría? Ilumíname. Brandon irguió la espalda con orgullo y comenzó con tono informativo:
―Bueno, un gato siempre cae de pie ¿correcto? ―Harry asintió vacilante. ―Y una tostada siempre cae por el lado en que le untas la mantequilla ¿correcto?
―Ajá…
―Por lo tanto―Brandon se aclaró la garganta para continuar― lo que quiero comprobar es, ¿qué pasaría si a un gato le atas una tostada con mantequilla en la espalda y lo dejas caer desde un segundo piso? ¿Caerá de espaldas?― una de sus cejas bailoteó de arriba hacia abajo.
Harry estaba totalmente desconcertado. Soltó un resoplido exasperado y puso los ojos en blanco.
Después de todo, Brandon siempre vuelve a su lugar de origen: Idiotilandia.
Hizo un último intento y le preguntó por algo que sabía que le interesaría, al igual que a casi todos los chicos de Dancey High.
― ¿Qué hay de tu novia? Se lastimó y ahora vive en casa de la mía, ¿ya has hablado con ella? ¿Le has preguntado cómo está?
Brandon hizo un sonido de pedo con la boca.
―¿Quién? ¿Keyra? ¡Já! Esa sucia perra, sólo estaba con ella porque me deja follarla a la hora que yo quiera, donde yo quiera y como yo quiera pero ya no me interesa, su vida es un desastre, sus padres se divorciarán porque se están quedando sin dinero, venderán la mansión, los autos, las joyas…en fin, te la regalo, toda tuya.
Harry estaba asqueado. «Tonto, no quiero a tu novia, nadie quiere a tu novia, es por eso que está contigo» tenía tantas ganas de decirle, pero no lo hizo.
El fresco y amargo olor a pasto recién cortado se colaba en las fosas nasales de Harry. En el centro del campo se encontraban las parejas formando una fila irregular mientras el entrenador Callahan les hacía preguntas y luego introducía la llave maestra en las esposas para liberarlos.
Harry y Brandon intercambiaron una mirada cómplice y asintieron con la cabeza.
Escuché cómo gruñías por hacer fuerzas.
―¡Ya basta! ¡Maldición! ¡Ya basta!― Callahan los separó, alzó sus muñecas unidas y con torpeza por la imperiosa prisa, introdujo la llave en la ranura y los liberó.― Ustedes dos nunca entienden, ya me tienen harto hasta la médula. ¡No se tolerarían ni aunque fueran hermanos siameses y compartieran todos los órganos! ¡Fuera de aquí!
Pero Brandon ya se había ido completamente exasperado. Harry miró a Callahan con ojos de sincera disculpa, el entrenador sostuvo esa mirada un rato y luego la desvió dándole una palmada en el hombro antes de irse para recoger los balones desperdigados por el campo.
A lo lejos la campana chirrió y Harry salió a paso apresurado hacia el árbol del estacionamiento, pero cuando llegó allí, ______ no lo esperaba.
Miró alrededor, sólo por si acaso, hasta que sus ojos pasaron superficialmente por la entrada y luego regresaron a ese lugar bruscamente…
Había visto la mitad delantera de un Jaguar negro estacionado junto a la banqueta. La puerta del copiloto se abrió y una melena rojiza soltó un destello dorado al contacto con el sol.
Harry se dispuso a dar un paso en su dirección, pero su pie se detuvo suspendido en el aire.
Un hombre alto, con lentes de sol y vestido de traje se apresuraba a rodear el auto para terminar de abrir la puerta de _____ y luego le ofrecía una mano para ayudarla a apearse.
«Pero… ¡¿Qué _____ no estaba en la escuela?!» A Harry se le hizo un amargo y doloroso nudo en la garganta.
Sin pensarlo más, avanzó con paso sereno hasta ahí mientras observaba cómo _____ conversaba animadamente con el hombre y ella se reía de algo que él le decía. Esa risa dulce y melodiosa viajó en una ráfaga de viento hasta oídos de Harry y no pudo evitar sentir el molesto mosquito de los celos picándole el corazón.
De repente, el hombre volteó a su derecha como si estuviera hablando con otra persona, aunque Harry no la podía ver y luego pasó algo que lo obligó a quedarse tieso ahí donde estaba: ______ se paró de puntitas y abrazó al tipo enredando los brazos en su cuello.
No fueron más que unos segundos de contacto, pero a Harry le parecieron milenios y avanzó, casi corriendo, la distancia que le faltaba.
Cuando hubo llegado, lo primero en que se fijó era que Magda estaba ahí, había visto lo mismo que él y aun así permanecía muy sonriente. Supo con seguridad que la mataría después de ______.
―Adiós― se despedía _____ dando un brinquito alegre mientras el tipo se daba la vuelta.
―-______…
Magda fue la primera en ver la cara de furia verde que se cargaba Harry, _____ volteó después mirándolo con una sonrisa mientras ignoraba su furibunda expresión, y por último volteó el tipo, que echó un vistazo sobre su hombro y observó a Harry.
Magda tuvo que taparse la boca para contener una exclamación, luego _____ se acercó a Harry y le tomó la mano para jalarlo, pero él no se movió, se notaba la tensión en su inmovilidad. Además, seguía mirándola de aquella forma, entonces ¿por qué ella parecía ignorar lo enojado que estaba? Ni siquiera él mismo sabía por qué le había pegado tan duro, ¡Sólo fue un maldito abrazo!
―______ … Ella le sonrió y se paró de puntitas frente a él.
―Tienes que conocer a alguien―le susurró en el oído y Harry casi se rinde ahí mismo.
―No ―la tomó de los hombros clavándole los ojos― yo sólo quiero que me expliques qué hacías con ese…
― ¿Harry?
― ¿Qué?
Harry levantó bruscamente la mirada hacia la voz masculina que lo llamaba y se encontró con el hombre, que se había girado por completo y lo miraba tras los lentes oscuros con una creciente sonrisa en los labios.
Avanzó medio paso deslizándose los lentes hacia arriba… y Harry soltó los hombros de _____ en el acto. Ella sonrió satisfecha y se colocó junto a Magda, que tenía vista panorámica de la escena, sólo le faltaban las palomitas en vez de las uñas que se estaba mordisqueando.
______ pasó los ojos de Harry a Gerald y viceversa, ambos tenían la misma expresión de indudable desconcierto en sus rostros, eran lo mismo. Tuvo que apretar la mano de Magda para evitar gritar « ¡Vamos, díganse algo, lo que sea!»
Por un momento se quedaron mirando sin parpadear con esos dos pares de ojos perfectamente verdes y esos angulosos rasgos casi perfectamente parecidos.
Era como si se estuvieran estudiando el rostro, como quien ve su reflejo por primera vez en la vida, o como quien descubre el fuego por primera vez y escruta con los ojos cada curva, cada zona iluminada, cada sombra, cada relieve y cada forma.
Por fin, Gerald fue el primero en dar un paso hacia adelante, el mismo paso que Harry retrocedió.
― ¿Harry?―volvió a repetir, esta vez con algo de emoción contenida en la voz.
Harry abrió la boca pero no logró emitir sonido alguno.
― ¡Harry!― Gerald comenzó a acercarse bruscamente y Harry retrocedió tanto que pisó mal y cayó al suelo, pero Gerald lo sostuvo del brazo antes de que cayera completamente.
Por Dios, Harry estaba tan pálido que parecía enfermo. Sin pensarlo, sólo con sentirlo, Gerald enderezó a Harry como pudo y lo envolvió en un asombrosamente fraternal, fuerte y conmovedor abrazo. Y que mirara el que mirara, porque a él no le importaba.
Harry tenía la mirada perdida sobre el hombro de Gerald y sus brazos colgaban lánguidamente a los costados, _____ tenía ganas de aporrearlo para que reaccionara, se esperaba algo así como una escena de postal en la que los dos se abrazan y lloran juntos mientras se dicen “Hermano, hermanito, ha pasado tanto tiempo” pero no estaba pasando nada de eso y no era capaz de comprender el estado de shock en el que se encontraba Harry.
« ¿Qué está pasando? ¿Por qué sabe mi nombre? ¿Por qué se parece a mí? ¿Por qué abrazó a _____? ¿Por qué…? ¡¿Por qué me está abrazando a mí?!»
Harry volvió en sí y apartó a Gerald todo lo que la extensión de sus brazos le permitió. Se estiró la camisa arrugada por el abrazo y lo miró.
Sí, bueno, era medio parecido a él…ya, está bien, era muy parecido a él ¿Y qué? ¿Eso le daba el derecho de abrazar a cuanto se le cruzara en el camino? ¿Le veía cara de peluche? Además, lo miraba como enloquecido por la alegría.
― ¿Quién eres tú? Gerald abrió la boca pero _____ contestó por él: ―Es Gerald Styles, Harry . Él la miró, tenía la misma mirada brillante por la euforia…Dios, también Magda, ¡todos estaban en una especie de complot del que él no formaba parte pero sí era el objetivo!
Saberlo le dejaban unas imperiosas ganas de escapar, pero el recuerdo de quién era el tal Gerald Styles atravesó su mente como un rayo.
Gerald Styles, el abogado.
―¿Quién eres tú?― preguntó a media voz con los ojos fijos en él.
_________ puso los ojos en blanco.
―Por Dios, ya te lo dije, es Gerald.
― No pregunté su nombre, dije: ¿Quién eres tú?
_____ iba a contestar de nueva cuenta, pero Gerald no lo permitiría esta vez y levantó una mano en el aire para detenerla.
―Harry , soy Gerald Styles― introdujo una mano en su camisa y sacó la cadena con el medallón mostrándosela como si fuera una placa de policía― soy, tu hermano.
Si había algo más impactante que ver el mismo collar que Harry había estado cargando en el cuello por diecinueve años sin explicación lógica alguna, era ver el mismo collar en el cuello de otro tipo que, no sólo compartía un insoportable parecido físico con él, sino que, encima de todo ¡decía que era su hermano!
¿Bastante coincidencia? Quien sabe, a quién le importa, Harry sólo tenía segura una cosa, y era que quería desmayarse ahí mismo. La cabeza ya le daba vueltas y la bilis reptaba por su esófago. Se sentía tan mareado, la impresión había hecho de su estómago una revolución y amenazaba con vomitar una bomba. Sólo quería sentarse en la banqueta un momento…
―¿Harry estás bien?
¿Esa era_____? A saber. Sólo se tomaría un momento de descanso y estaría como nuevo, sólo…
―¡Harry!
Harry puso los ojos en blanco y se desplomó sobre sus rodillas para luego caer al suelo de la banqueta.
______ se arrodilló junto a él y comenzó a sacudir su hombro y a gritar su nombre frenéticamente, pero Harry no respondía a ningún sonido, ni cachetada, ni sacudida.
Los que salían por esa puerta llamaron a sus amigos para que vieran al típico desmayado que aglomera a las masas a la hora de salida.
Las chicas del “club de fans de Harry” se abrieron paso y soltaron chillidos alarmados.
―Dios ¿ese es Harry? ¡Chicas, es Harry! Dios mío, ¡¿Harry, estás bien?!
― ¡Cállense la boca! ¿Qué no ven que no las escucha, bola de pajarracas en celo?― repuso Magda empujando el círculo de curiosos que se había juntado.
______ levantó la mirada y miró a Gerald con los ojos cargados de preocupación.
―Gerald…―susurró, y Gerald comprendió al instante. Se agachó como un rayo para cargar a Harry en sus brazos. _____ se adelantó para abrir la puerta trasera del Jaguar y Gerald se inclinó sobre el asiento para depositar a Harry, luego ella entró y ubicó la cabeza de él sobre su regazo.
―Magda ¿vienes?― gritó Gerald mientras corría a la puerta del piloto.
―No te preocupes por mí, no quiero interferir en asuntos familiares, debo irme a casa.
― ¿Estás segura?-Ella asintió.
―Sí, pero llámame cuando reaccione el desmayado.
―Lo haré- Y sin más, entró en el auto, jaló la palanca de velocidades y salió disparado de ahí.
―Gerald, acabas de pasarte el hospital.― dijo _____ mirando hacia atrás el hospital que se hacía más pequeño con la distancia.
― ¿Ah sí? ―Sí. Pasaron varios retornos pero no tomaron ninguno. ______ comenzaba a desesperarse.
―Gerald, acabas de pasarte varios retornos.
― ¿Ah sí?
―Sí. ―Silencio. ―Gerald ¿A dónde diablos vas? Harry necesita ir a un hospital. ¿Por qué no haces caso de lo que te digo?
Él la miró por el rectángulo del retrovisor que le enmarcaba los ojos perfectamente.
―Porque no vamos al hospital, por eso.
― ¿A no? ¿Y a dónde piensas llevarlo? Pregunto yo. ¿Al basurero?
Él soltó una risita ronca.
―No, no.― se detuvo en un rojo y volteó para ver a _____ ― lo llevo a casa.
_______ no había parado ni un segundo de pasar los dedos por el cabello de Harry, pero se detuvo cuando lo sintió moverse ligeramente.
―Oh, creo que ya está despertando― lo miró con una especie de ternura maternal y luego se dirigió a Gerald― No creo que sea buena idea llevarlo a casa. Es demasiada información para una sola persona en un solo día ¿Qué tal si vuelve a desmayarse? Seguro que lo haría.
― ¡Que se desmaye, hay muchas camas! ______, llevo diecinueve años creyendo que Harry estaba muerto― miró a Harry de soslayo antes de apretar las manos en el volante y seguir el camino.― diecinueve años de mentira.
Eso llamó poderosamente la atención de ______.
―Mentira dices, ¿qué mentira?
Antes de contestar, Gerald dejó escapar un suspiro.
―Eso es lo que eh tratado de explicarte.― repuso con voz seca― Hay muchas cosas que mis padres me ocultaron esa noche, y me las siguen ocultando.―le propinó un ligero golpe al volante― tengo veinte dos años y me tratan como de dos. Por favor, ¡soy abogado!, mi padre en persona se encargó de enseñarme todos los trucos para saber cuándo alguien está mintiendo y me doy perfecta cuenta de esa mirada extraña que intercambian cuando sacó el tema.
―¿Te refieres a Harry?
―Sí, a Harry.
A juzgar por lo que acababa de escuchar, ______ dedujo que Gerald no sabía del defectito de Harry. Esa era una de las cosas (y quizá la más importante) que sus padres le habían vedado de su conocimiento.
«Los padres de Gerald» «Los padres de Harry» Dios Santo, hasta ese momento se daba cuenta de que los padres de Harry y Gerald eran los Styles.
Gregory Styles era un abogado muy popular en Londres, lo sabía porque la clase de clientes que atraía eran en su mayoría celebridades. No podía evitar aparecer en los titulares escandalosos de los periódicos o en las revistas especializadas en chismes.
O sea que… ¡O sea que tenía muchísimo dinero! ______ miró a Harry. Ahora ella era la que tenía ganas de desmayarse. En su regazo tenía a un heredero con bastante metal en el banco como para poder vivir sin trabajar, sentarse en el flotante de la piscina y sonarle la campanita a un mayordomo llamado Alfred para pedirle otro Martini con sombrillita incluida. Por la noche ver una película en el cine privado del sótano y al otro día abordar el jate privado para ir de tour por toda Asia.
_______ se sentía abrumada. Se odió por sentirse egoísta, pero no quería una vida así para Harry.
Algo le decía que, si él no hubiera sido abandonado, seguramente se estaría pudriendo en dinero en ese momento, asistiría a una escuela elitista como Eton y nunca de los nunca la hubiera conocido.
No se hubieran conocido. Y si lo hacían, jamás se hubiera fijado en ella. Dios… Sacudió de su cabeza esos pensamientos que llegaban a su corazón como una daga.
―Gerald, ¿qué fue lo que pasó?― preguntó agradecida por que su voz siguiera con ella.
―Larga historia.
― ¿Crees que diciendo eso me detendré?
HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Capitulo 26 continuación
Él sonrió mirándola de soslayo por el retrovisor.
―No, claro que no. Sólo trataba de ganar tiempo para desenterrar todo, de nuevo.― luego de una pausa continuó― El día en que Harry nació yo debía tener tres años y no me dejaron ir al hospital con mamá, ella llevaba dos días internada y me quedé con una de las sirvientas― soltó una risita por lo bajo― creo que nunca en mi vida había recibido tantos regaños como esa noche por no irme a dormir, me sentía un machote y traté de quedarme despierto toda la noche para conocer a mi hermano, estaba demasiado emocionado, incluso entré varias veces su habitación para cerciorarme de que los peluches estuvieran alineados. Pero tanta acción me agotó y me quedé dormido…
Un grito desgarró el sueño del pequeño Gerald. « ¡Ya llegó el bebé!» Con grandes ojos somnolientos y una sonrisa llena de infantiles hoyuelos, se bajó con dificultad del enorme sillón mecedora y corrió torpemente hasta precipitarse contra los barrotes de la cuna. Hizo falta pararse de puntitas y estirar el cuello para alcanzar a ver dentro de ella.
Pero la manta seguía pulcramente extendida, el juguete móvil que pendía de un soporte seguía estático y los peluches permanecían alrededor, custodiando sin ninguna alteración.
De nuevo ese grito hizo saltar a Gerald. Miró alrededor, se encontraba solo en esa habitación a oscuras, la vaporosa cortina se levantaba fantasmalmente con el viento que entraba silbando por la ventana abierta, los gritos provenían de otro lado y luego un trueno hizo cimbrar el suelo y las paredes. Gerald se encogió tapándose los oídos con sus pequeñas manos y apretó los ojos.
― ¡Nooo!... no― se escuchó un lamento. Gerald comenzaba a asustarse, la voz parecía ser de su madre.
¿Habían entrado a su casa para robarse a Harry?
Se armó de valor…Bueno, primero jaló un peluche para abrazar y luego se armó de valor, se acercó a la puerta dando los traspiés típicos de la prematura edad y entreabrió la puerta lo justo para asomarse.
― ¿Mami? El pasillo estaba tenuemente iluminado por apliques distribuidos a lo largo de la pared entre puerta y puerta.
―Papi… Desde ahí podía oír leves sollozos, pero no se atrevía a salir y comprobar de qué puerta provenían.
Pasos. Escuchó muchos pasos apresurados subiendo por la alfombra de las escaleras y cerró un poco más la puerta para que no descubrieran su posición.
Todos los sirvientes en pijama corrieron a la puerta continua de donde se encontraba Gerald y el mayordomo comenzó a aporrearla. Era la puerta del baño principal ¿acaso todos querían hacer pis en el mismo baño habiendo tantos?
La puerta se abrió formando un charco rectangular de luz en el suelo, el mayordomo dio un paso atrás y a continuación, Gerald vio a su madre que apenas podía caminar salir a toda prisa mientras sus sollozos hacían eco a lo largo y ancho del pasillo y las lágrimas habían arrasado con su dulce rostro deformándolo en una expresión de dolor.
Las sirvientas trataron de sostenerla pero ella se liberó y huyó escaleras abajo, tapándose la boca para ahogar los sollozos que de todas formas reverberaron en el circular vestíbulo.
Llegó a la puerta principal y tiró con fuerza de ella hasta abrirla por completo y salir sin cerrarla.
Eso exasperó a Gerald porque su madre siempre lo regañaba cuando no cerraba la puerta después de entrar o salir, ahora ya no podía reprenderlo si ella no seguía sus propias reglas.
Su atención volvió a la puerta del baño donde su padre salía corriendo con un bultito completamente envuelto en una manta.
Sus ojos se iluminaron. «¡Harry! Sí, sí, ¡sí!» Por fin conocería a su hermano menor. Y como hermano mayor sentía la cosquilleante emoción de enseñarle todas las complicadas maniobras de la vida: armar un castillo con piezas de Lego, jugar a los superhéroes, construirle un refugio a las hormigas para luego ahogarlas y ver cómo salían del aprieto, presumir lo bien que sabía usar el orinal… ¿Pero a dónde se lo llevaba?
Inconscientemente, Gerald apretó el osito de peluche contra su costado al ver que su padre se dirigía hacia las escaleras. Se detuvo en seco y volteó a ver a la sirvienta que cuidaba de Gerald.
― ¿Dónde está Gerald?― preguntó bruscamente con ojos enrojecidos, era imposible saber si por el cansancio o por las lágrimas, tal vez fueran ambas cosas.
La sirvienta vaciló y lanzó una mirada al pasillo.
―Aaah…dormido, señor― en realidad no tenía ni idea de dónde se había metido ese pequeño diablillo, se había cansado de buscarlo y se fue a dormir.
La mente de Gregory Styles estaba tan lejos de ahí que no se percató de la mentira de la mujer. Simplemente asintió y salió de la casa tras su esposa, con el bulto en los brazos.
Qué extraño. Gerald no recordaba oír llanto de bebé. _____ no lo había interrumpido ni una sola vez. Su mente estaba a mil por hora procesando cada palabra que Gerald había dicho. Atando cabos, llenando lagunas, reparando baches.
Ahora las cosas parecían más claras para ella, pero había algo que la seguía picando.
Gerald dio un giro en una calle privada, bajó la ventanilla y sólo bastó con un saludo al guardia para que éste abriera la reja automática de acceso a otra calle flanqueada de mansiones a cada medio kilómetro de distancia entre ellas. Todas con diferentes estilos y fachadas, desde la que era imitación de un castillo medieval, hasta la moderna hecha de cristal.
______ se obligó a concentrarse en lo que tenía que preguntar, era difícil con tanto lujo abrumando sus ojos.
―Gerald ¿Acaso viste lo que había dentro de esa manta?―inquirió.
Él no dijo nada por un momento, sopesó la pregunta tratando de encontrar el mensaje oculto en ella. _____ sentía un escáner dentro de su cerebro, era como si Gerald estuviera ejerciendo en ella todos sus trucos de abogado.
Luego de un momento de infructuoso escrutinio dijo: ―No, la verdad es que sólo vi que era un bulto no más grande que…no más grande que… No lo sé, se veía muy raro ahora que lo recuerdo.
_____ se tensó.
― ¿Qué te dijeron tus padres? Gerald hizo una extraña mueca.
―La explicación que me dieron en ese entonces fue ridícula: “A veces Dios se equivoca cuando envía bebés a la Tierra y decide reenviarlos al Cielo para que no sufran”
―Eso es… ¿Te lo creíste?
―¡Tenía tres años! ¿Sí?― se exaltó― Me creía cualquier estupidez. Si me hubieran dicho una verdad como que el ratoncito Pérez no existía, rompería en llanto un mes. Nunca me han dicho la verdad como tal. Yo siempre hacía preguntas sobre Harry pero ellos siempre las esquivaban, mi madre se ponía tan mal de que se lo recordara que papá me prohibió enérgicamente volver a sacar el tema, hasta que el tiempo curara la pérdida… pero el tiempo no curó nada, mamá se volvió…difícil de tratar, ya ni siquiera toleraba abrazarme a mí o hablar con papá porque cada vez que nos veía rompía en llanto― miró a Harry― ahora entiendo por qué. Es idéntico a nosotros, le recordábamos a él.
― ¿Nosotros?
―Papá, Harry y yo nos parecemos bastante.
_______ nunca había visto una foto de Gregory Styles, pero con esa descripción, seguro debía ser un señor muy apuesto, con una fila de chicas que morían por ser su secretaria personal.
Dios, más personas con la cara de Harry ¿cómo podría no sentirse encantada?
Harry abrió los ojos. Lo primero que sintió fue el calor de una mano entre sus cabellos y encontró a ______ al alzar la mirada.
Soltó un gemido al cuando trató de moverse, le dolía la cabeza. _______ de inmediato lo ayudó a colocarse en una posición más cómoda, apoyando su espalda en el respaldo del asiento.
El movimiento tan repentino hizo que se activara un taladro que le perforó la cabeza con un agudo dolor. Hizo una mueca llevándose una mano a la frente.
―Ya era hora de que despertara el Bello Durmiente. Harry alzó la vista y sus ojos se encontraron con los de Gerald en el retrovisor, por un momento le pareció estar viendo su propio reflejo.
Dejó escapar una exclamación de sorpresa y comenzó a mirar alrededor con frenesí.
― ¿Qué hago aquí?―preguntó sosteniéndose la cabeza. Sintió la mano de _____ posarse en la suya sobre el asiento, desviando toda su atención hacia ella.
―¿Cómo te sientes?― preguntó dulcemente pasando una mano su mejilla. Ese tacto siempre reconfortaba a Harry.
―Como si un elefante me hubiera pasado encima y luego me hubiera meado.
Gerald rio y los dos voltearon a verlo desconcertados. ―Tiene el sentido del humor de mamá, sin duda. «Mamá» Esa palabrita reverberó en la mente de Harry y su corazón dio un vuelco.
_______ le apretó la mano, era la única en ese auto que se percató de los sentimientos que fluían en los ojos de Harry.
Subieron la cuesta en tenso silencio hasta que la calle terminó. Frente a ellos se alzaba una alta balaustrada de piedra en cuyo centro se encontraba una imponente reja de metal negro que seguía un intricado patrón de formas espirales, rematando con puntas en forma de flor de lis.
Harry no tuvo que preguntar dónde estaban. El escudo del centro en la parte superior de la reja lo delataba. Era el escudo grabado en su collar.
Gerald se identificó con el hombre al otro lado del interfon y de inmediato, el escudo se partió en dos cuando la reja se abrió hacia adentro emitiendo un zumbido electrónico.
Gerald avanzó lentamente por la calzada y lo que había tras la fuente central era, simplemente magnífico.
Una mansión salida de alguna revista de decoración. Estaba distribuida en dos alas y parecía un castillo de arena por su color. El porche lo flanqueaban dos gruesas columnas blancas que soportaban el balcón principal de la segunda planta. Todas las ventanas brillaban con el reflejo del sol y estaban cubiertas con suaves cortinas blancas de tela vaporosa que dejaban ver un poco los muebles del interior de cada habitación y detrás de tanto espectáculo arquitectónico se alcanzaban a ver las puntas cubiertas de nieve de los pinos.
Gerald aparcó el Jaguar cerca del garaje. _____ estaba alucinada. Volteó la cabeza hacia Harry pero él no compartía la misma emoción.
Tenía los dientes apretados y su mirada estaba clavada en la
Nuca de Gerald como un cuchillo.
― ¿Por qué me trajiste aquí?― inquirió en tono grave.
― ¿Y por qué no?― Gerald lo miró por encima de su hombro.
―No te pedí que me trajeras.
― ¿Cuál es tu problema?― entornó los ojos― eres mi hermano, ¡estás vivo! Te traigo a casa― hizo un gesto con la mano hacia la fachada― ¡Mira tu casa! ¡Fíjate en todo lo que tienes! ¿Por qué no estás feliz? ¿No te da pena que tu novia te vea haciendo berrinche? No seas crío, Harry…
La voz de Gerald se fue apaciguando hasta callarse. Harry se quedó inmóvil.
Ambos se miraron y se dieron cuenta de que le estaba reprendiendo como un hermano mayor reprendería a su hermano menor.
Gerald no se lo podía creer. Estaba enojado y al mismo tiempo feliz, era la primera pelea entre hermanos que tenía y nunca se imaginó que fuera en esas circunstancias. Su boca pasó de ser una línea recta a formar un arco que terminó en carcajada.
Harry alzó una ceja.
― ¿Qué te pasa?― preguntó desconcertado mientras se cruzaba de brazos.
―Oh, esto es genial.― apenas podía hablar con tanta risa.
― ¿Te da placer discutir conmigo? _____ se tapó la boca sorprendida y Gerald sólo se partió más en la locura de la carcajada.
―Espera a que te oiga mamá, te dará un manotazo en la boca, aunque ella también habla así.
En ese preciso momento, una brillante Suburban blanca de lujo se acercó con un leve ronroneo de motor.
Se estacionó un poco más lejos de donde estaban ellos y Gerald cuadró los hombros.
― ¿Quién llegó?― preguntó _____ estirando el cuello para buscar el mejor ángulo de visualización.
La puerta de copiloto se abrió del otro lado limitando la vista sólo a una cabeza rubia y una frente amplia y limpia.
―Mamá.― contestó Gerald. Sarah Styles se colocó los lentes oscuros en la cabeza, soltó un suspiro de cansancio tras un largo día de compras y se dirigió a la cajuela de la camioneta.
El impulso que atacó a Harry por salir del auto se acrecentaba a cada segundo, y como poseído, abrió la puerta y salió.
―Harry …― susurró _____ dejando su mano en el aire cuando intentó tomarlo del brazo.
Gerald estaba helado ¿qué pensaba hacer Harry? Avanzaba a paso lento, felino, discreto, silencioso, mientras observaba cómo Sarah se inclinaba en el interior de la cajuela hasta tener medio cuerpo dentro.
Era una mujer de mediana estatura que debía tener cuarenta y tantos años, pero lucía un cuerpo increíble bajo un atuendo sport. Su cabello estaba recogido en un sofisticado moño y su perfil era tan delicado y definido como un camafeo.
Cuando Harry estuvo lo suficientemente cerca, ella sacó un par de bolsas de papel de súper mercado en sus brazos pero una de ellas se le resbaló con el peso cayendo al suelo. Sarah soltó una maldición cuando las frutas rodaron por el suelo hasta chocar con los zapatos de Harry.
―Oh, ¿te importaría ayudarme? Cariño.― dijo sin mirarlo y luego siguió sacando más cosas de la cajuela.
El corazón de Harry latía tan fuerte que retumbaba en sus oídos. ¿Qué no lo escuchaba ella también?
Se inclinó para recoger las cosas y meterlas en la bolsa. Sarah estiró un brazo y cerró la cajuela de un portazo mientras que cargaba varias bolsas con el otro, luego se giró y miró a Harry a los ojos…
Los ojos de Harry, eran los mismos que los de su madre. verdes. verde esmeralda. Y se miraron por primera vez. Ella con ternura, apenas tenía arrugas en su cremosa piel. Él luchando por no temblar, luchando porque sus ojos permanecieran en sus órbitas, tratando de negar todo aquello, porque el hecho de encontrar algo de él en ella debía ser sólo un sueño.
Sarah sonrió y en la mente de Harry, se derritió la nieve de los pinos.
Ella se acercó un paso y extendió el brazo libre.
―Gracias, Gerald― tomó la bolsa de manos de él. “Gerald”, dijo Gerald. Harry trató de ignorar la punzada de dolor en su corazón.
―Mamá…― llamó la voz grave― yo estoy aquí― Gerald levantó una mano en ademán de saludo y puso una cara de disculpa.
Sarah se inclinó a un lado para ver a Gerald que estaba a cinco metros de ellos y luego volvió a mirar a Harry bruscamente.
Gerald. Harry. Gerald. Harry. Cuando se sintió mareada de tanto girar la cabeza tan bruscamente, sus brazos dejaron caer todas las bolsas al suelo emitiendo el sonido de cristal quebrándose, latas aplastándose, huevos rompiéndose entre otras cosas.
Se llevó una mano a la boca y otra al corazón mientras su respiración parecía dolorosa y agitada.
Harry se puso nervioso y dio un paso al frente, justo cuando Sarah Styles se desvanecía.
Él logró atraparla en el aire mientras que Gerald y ______se acercaban a toda prisa.
―¡Señora Styles!― dijo _____ alarmada.
―No te preocupes, los desmayos a la intemperie vienen de familia.
Harry le lanzó una mirada de advertencia a su hermano.
―Cállate y ayúdame a levantarla. Ambos sostuvieron a su madre de cada brazo y ella despertó. Le llevó unos segundos ubicarse y luego miró a los dos hombres que la sostenían.
Soltó un grito reprimido cuando volvió a ver a Harry y dio un salto hacia atrás.
―G―Ge―Ge―Gerald…él es…― tartamudeó aferrándose a las solapas de la camisa de Gerald.
―Harry― contestó el propio Harry.
Una película de imágenes rápidas y eco de voces de aquella noche acudieron a la mente de Sarah. Era como ver pasar esa parte de su vida frente a sus ojos.
Poco a poco, fue perdiendo fuerza en el agarre que ejercía sobre la camisa de Gerald hasta que sus brazos bajaron lentamente a sus costados.
Se quedó mirando a Harry lo que le pareció una eternidad, fue como si no hubiera nadie aparte de ellos dos, ni cielo, ni tierra, ni cosas, sólo un espacio en blanco donde se miraban el uno al otro por primera vez en un abismo de años.
Los ojos felinos y verdes de Sarah se empañaron hasta brillar y una lágrima rodó por su mejilla, luego otra, y otra, una tras otra.
Quería acercarse a él, quería moverse, no podía. Quería decirle que viniera, quería llamarlo, no podía.
Agachó la cabeza soltando un agudo y fuerte sollozo que le sacudió los hombros y sus lágrimas cayeron al suelo formando diminutos círculos húmedos.
Sintió que alguien se abalanzaba sobre ella haciéndola retroceder y envolviéndola con ambos brazos, fuerte, muy fuerte, cerrando los puños en su espalda hasta fruncirle el suéter. Un sollozo sonó en su oído y luego sintió su cuello húmedo.
Levantó la cabeza y vio a abrazándola, con la cara enterrada en su cuello.
Harry ahogó otro sollozo en la tela de su hombro, Sarah movió los brazos y le rodeó la cintura con ellos mientras rompía a llorar nuevamente.
_____ estaba de pie junto a Gerald, con la sensación de un nudo en su garganta y las lágrimas saliendo silenciosas.
Era la primera vez que veía a Harry llorar. Era la primera vez que lo veía derrumbarse de esa manera.
Un momento tan feliz como aquel… y sin embargo se sentía tan triste, era muy triste.
Volteó hacia Gerald, tenía las manos en los bolsillos, parpadeando constantemente como si quisiera ahuyentar las lágrimas, y a pesar de que lo logró, no pudo evitar dejar sus ojos empañados y sorberse la nariz. Cuando las lágrimas volvieron a reclamar por salir, optó por esconder la cabeza al agacharla, y su boca formó una sonrisa.
_____ lo observó y también sonrió antes de dirigir la atención hacia Sarah y Harry.
Ambos se separaron para mirarse a los ojos y descubrieron con una sonrisa que tenían la cara hecha un desastre.
Sarah enmarcó el rostro de Harry en sus pequeñas manos y observó cada milímetro de él, su pedazo de ser. Le apartó un mechón negro que le caía sobre los ojos y pasó los dedos por su cabello como si estuviera comprobando que fuera real. Lo primero que hace una madre luego de que nace su bebé es revisar que esté entero.
―Harry… mi niño ―le dijo con infinita dulzura―. No sabes cómo he llorado. No sabes cómo te he extrañado ni cómo te he querido…
―Oye…
―Quise buscarte, pero ya no estabas y yo…
―…Mamá― saboreó la palabra en su lengua, era una sensación tan extraña materializarla cuando nunca en su vida la había usado.
―…estoy tan arrepentida.
HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Omg my feelings
Shoro :'(
Tienes que seguirla súper pronto
Me encanta
Shoro :'(
Tienes que seguirla súper pronto
Me encanta
AnneleStyles
Página 15 de 19. • 1 ... 9 ... 14, 15, 16, 17, 18, 19
Temas similares
» Lo que todo gato quiere (Zayn Malik y tú)
» No todo es lo que parece {Harry styles} TERMINADA
» Todo Puede Pasar Harry Styles y TU [TERMINADA]
» Mi Gato ANGUS, Las TANGAS y EL BESO PERFECTO (HARRY STYLES Y TU)
» Lo que ella quiere.{harry styles.
» No todo es lo que parece {Harry styles} TERMINADA
» Todo Puede Pasar Harry Styles y TU [TERMINADA]
» Mi Gato ANGUS, Las TANGAS y EL BESO PERFECTO (HARRY STYLES Y TU)
» Lo que ella quiere.{harry styles.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 15 de 19.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.