Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 13 de 19. • Comparte
Página 13 de 19. • 1 ... 8 ... 12, 13, 14 ... 19
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
capitulo 20
Maraton parte 1
El entrenador Callahan se detuvo frente a la puerta de la dirección, se quitó la gorra y se alisó los tres pelos que aún le quedaban en su calva y pulida cabeza.
Otra vez tenía que ir a la madriguera de esa vieja y no se imaginaba porqué.
El entrenador y la directora no se llevaban bien por razones universalmente desconocidas, siempre diferían en todo, se la pasaban al dale que te pego y era muy consciente de que la única razón por la cual todavía no lo había despedido era porque a la Dragona alias directora Foutley le daba placer verlo sufrir.
Entornó los dedos alrededor del picaporte y abrió la puerta componiendo su “mejor” sonrisa de treinta y un dientes amarillentos y uno de plata.
― ¿Me llamaba, profesora Foutley? La directora no apartó la mirada de los papeles que estaba firmando.
―Sí, sí, entrenador Callahan, siéntese.― dijo a media voz haciendo un gesto con la mano hacia una silla.
Él inclinó la cabeza y caminó con sus toscos pasos hasta una de las sillas de cuero negro frente al gran escritorio de caoba y esperó un largo momento tamborileando los dedos en su pierna mientras la directora firmaba y firmaba papeles como una autómata.
Por un momento creyó que se había olvidado de él y estuvo a punto de carraspear cuando la directora levantó sus pálidos ojos haciéndole tragar la saliva con la que rasparía su garganta.
―Entrenador Callahan― se quitó sus gafas y dobló cuidadosamente las patillas― como bien sabe, no me complace llamarlo para que consuma mi aire con su flatulento olor a cera para pulirse la cabeza, pero tengo entendido que varios de sus jugadores se lesionaron durante los entrenamientos.
Callahan puso cara de desamparado.
―Me temo que sí…
― ¿Cuántos?― la pregunta sonó agresiva, se notaba el mal humor de la directora
―Cinco.― contestó Callahan en tono contrito.
― ¿Y cuántos tienen que ser en total?
―Once.
La profesora Foutley se levantó de su gran silla giratoria con propiedad y las manos enlazadas tras su espalda, caminó hasta el ventanal con vista al patio de Dancey High y soltó un suspiro mientras miraba al exterior.
―Entrenador― empezó con aires de superioridad― tanto usted como yo sabemos que el equipo de Dancey High aplasta a todas las escuelas de Londres, una por una…― dijo entre dientes, saboreando las palabras. El entrenador se hundió en su silla― Hasta que esos desgraciados y estirados de Eton nos aplastan a nosotros en la final― se giró bruscamente y miró a Callahan― y usted― lo apuntó con un dedo huesudo― todavía osa darse el lujo de perder a casi a la mitad del equipo― se inclinó sobre el escritorio clavando las mano en él y sus siguientes palabras fueron masculladas lentamente para que el entrenador las entendiera bien― Le dejo bien claro que a mí no me importa quién sea el mejor equipo, pero es el último año y si los Escorpiones de Dancey High no ganan jamás obtendrán una beca para la universidad y a usted no le voy a dar el placer de verme atareada con una fila enorme de padres protestantes tras mi puerta.― apuntó la puerta. ― ¿Y bien? ¿Qué tiene que decir en su defensa?
Callahan ya se había hartado hace diez minutos desde que entró y no lo soportaba más.
Se puso de pie arrastrando la silla hacia atrás y alzó la cabeza para encararse con la directora, porque hasta eso: ella era más alta que él (todos en la escuela lo eran)
― ¿Por qué cree que todo lo malo que le pasa a usted se debe a mí? Foutley entornó los ojos.
― ¡Yo entreno a cada uno de mis jugadores para ser campeones!―continuó el entrenador― ¿Irán a la universidad? No sé, no me interesa, pero al menos disfrutan en el campo de juego y este año les prometí que patearíamos los perfumados traseros de Eton.
La directora se cruzó de brazos y soltó una risa sarcástica.
―Ya, debería ver su cara. ¿Y cómo demonios piensa hacerlo si su elenco del Lago de los Cisnes está incompleto?
Callahan hizo una mueca
. ―Ya pensaré en algo, más tarde.
―No. Va a pensar en algo ahora.
Él puso los ojos en blanco.
―Bueno, podría hacer “audiciones” al resto de los alumnos… La directora agitó una mano para descartar la idea. ―Nah… ¡oh, ya sé! Haga audiciones al resto de los alumnos y seleccione los mejores.― repuso sonriente.
― ¡Es lo que acabo…!
―No me levante la voz, igualado.― Volvió a tomar asiento y se recolocó las gafas― ahora, esfúmese de mi vista, está apestando mi oficina, shú, shú.
Callahan la fulminó con la mirada, se puso su gorra y antes de que la puerta se cerrara tras él…
―Ah, y, entrenador…Que las audiciones también estén abiertas para las chicas.
A Callahan se le fue el alma a los pies.
―¿Qué? De ninguna forma. Este es un terreno de hombres― se dio una palmada en el pecho― las mujeres no soportarían una vuelta al campo.
―Ya le he dicho― enarcó una ceja― las quiero dentro del circo. Y tras esas palabras, el entrenador se fue escupiendo a todas
Las criaturas del infierno por la boca.
Un par de horas más tarde, el entrenador se ocultaba tras la Puerta donde se guardaban las cosas del conserje.
Había cambiado de modo entrenador a modo entrenador infraganti; con ropa deportiva negra, lentes oscuros y gorra negra.
Se asomaba por el resquicio de la puerta entreabierta mientras observaba a los adolescentes transitar por el pasillo.
Llevaba a la mano una lista escrita a mano con su indescifrable y fea letra acerca de las características que debía tener un posible jugador de futbol.
«Cosas que se deben tener para patear un trasero de Eton:
1. Medir de 1.80 en adelante.
2. No tener antecedente de haber estudiado en Eton.
3. Poseer masa muscular notable.
4. No ser gay (investigar esta cuestión si es suficientemente guapo y no tiene novia)
5. No ser gordo.
6. Tener ancha espalda.
7. Odiar a la directora Foutley (opcional)
8. No usar braquets.
9. Tener cara de matón (opcional) »
Después de dar una revisión a su lista y sonreír satisfecho, observó. Pero luego de cinco minutos su entusiasmo se vio mermado ¿Cómo era posible que Dancey High tuviera puro fenómeno? Si no era demasiado bajito, era demasiado flaco. Si no era demasiado flaco… era demasiado gordo. Si no era demasiado gordo, era demasiado gay, si no era demasiado gay, era demasiado nerd.
Callahan se rindió y estuvo a punto de abortar la misión cuando la luz que entraba por las ventanas hizo destellar un lustroso cabello negro azabache.
Hacía él iba un chico que a simple vista cubría los requisitos.
Era perfecto con pe mayúscula.
Revisó su lista: «Uno ochenta, listo. Antecedentes en Eton, bueno ¿a quién le importaba? Masa muscular notable: listo. No ser gay:…mmm demasiado guapo, habría que investigar. Ancha espalda: listo. Odio a la directora: pendiente. No usar braquets: pendiente. Cara de matón: sí, pero sólo un poco.»
Harry se dirigía al casillero de ______, tenía planeado sorprenderla. Pero justo cuando pasaba junto al cuarto del conserje sintió una mano llena de callos asirse a su muñeca y jalarlo hacia adentro con una fuerza tal que casi le arranca el brazo.
― ¿Pero qué…? Escuchó una puerta cerrarse en su espalda. Estaba muy oscuro y olía a químicos limpiadores.
De repente se hizo la luz y vio un niño arrugado frente a él… bueno no era exactamente un niño, era…
― ¿Entrenador Callahan?
―Shhh― siseó el entrenador y extendió las manos al rostro de Harry.
―Oiga, no ¿qué está haciendo? El entrenador le abrió la boca para examinarle los dientes. No, no usaba braquets.
Siguió examinándole la cara girándosela para todos lados y luego le dio un golpe bajo la barbilla.
― ¡Auch! Oiga…
― ¿Eres gay?
― ¡¿Qué?!― exclamó Harry sobándose la barbilla. Callahan entornó los ojos.
― ¿Tienes novia?
―Sí…
― ¿Quién?
― ¡Qué le importa!
―Muy bien, hijo― le dio unas varoniles y sonoras palmadas en el hombro― pasaste la prueba, bienvenido al equipo de Dancey High.
― ¿Eh? ¿Qué? ¿Cuándo?―Harry estaba más confundido que nada. Miró a su alrededor; el lugar estaba rodeado de estantes llenos de papel higiénico, limpiadores, escobas y apenas cabían dos cuerpos― ¿Y por qué estamos encerrados aquí?
― ¿Qué más da? ¿Estarás en el equipo sí o sí?― sonrió y extendió la mano para cerrar el trato, pero la dejó suspendida en el aire porque Harry lo miró con suspicacia.
―Si no me dice qué es todo esto, olvídelo. Callahan soltó un resoplido y se sentó pesadamente en una caja, recargando los codos en sus rodillas mientras se sobaba la tensión tras la nuca.
―Tengo a un recibidor, un guardia, un fullback, un corredor y un halfback lesionados ¿me oyes? Lesionados.―hundió su rostro entre las manos. Harry vaciló antes de poner una mano sobre su hombro y le dio una palmadita.
― ¿Y bueno? ―Necesito esos reemplazos pero no hay nadie en esta escuela que cumpla con los requisitos― sacudió la hoja garabateada frente a la nariz de Harry y él la tomó para leerla.
« ¿No ser gay? » Ah, ahora todo estaba claro en su vida. Miró al patético hombre que se lamentaba.
―Oiga, si quiere mi consejo médico; olvídese de esta lista y haga una prueba a todos ¿Cómo sabe si un gay no da el ancho hasta que lo prueba?
―Oh, te sorprenderías― miró a Harry con ironía― ¡Cuidan más sus uñas de lo que tu novia lo hará en toda su vida!
Harry frunció el ceño. La verdad era que _____ ni siquiera tenía uñas, se las mordía cuando estaba frente a la computadora y Harry procuraba darle un manotazo para que dejara de hacerlo.
―Tal vez pero aun así, hay muchos chicos con potencial allá afuera― señaló la puerta.
Callahan lo jaló de la camisa y lo miró como un indigente suplicando por una moneda.
―Por favor muchacho, ayúdame ¿Quieres una prueba decente? Está bien, hoy a la salida quédate. Es la hora en la que entrenamos… por favor.
Harry vaciló, pero no podía decirle que no a un viejo desesperado. Suspiró.
―Está bien.
―¡Esa es la actitud!― le dio un puñetazo en el brazo. Harry logró componer una sonrisa más o menos convincente y justo cuando estaba en el umbral de la puerta escuchó a Callahan decir:
―Ah, otra cosa― murmuró― mantén esto en secreto. Harry puso ceño y miró sobre su hombro.
― ¿Por qué? Callahan puso los ojos en blanco.
―La Drago…digo, la directora Foutley quiere que las chicas también participen, pero ya sabes cómo son las mujeres. No les digas nada de las pruebas. Además ¿a qué mujer le gusta la idea de revolcarse en el lodo mientras una tonelada de sudor te aplasta?
― ¡Me encanta! ―De ninguna manera. Dijeron Magda y ______ al unísono después de enterarse de la Noticia de las pruebas.
―Eh, nenas ¿qué no ven que están en el baño de hombres?― se les acercó un chico lleno de acné que acababa de entrar. _____ se pegó a la pared y Magda se irguió― a menos que busquen otra cosa― dijo el tipo lamiéndose asquerosamente los labios.
―Magda…― murmuró _____ con voz temblorosa jalando a Magda de la manga.
El lugar donde estaban ya era de por sí inapropiado para una dama; estaba lleno de garabatos y palabras obscenas en las paredes. Y todo era culpa de Harry quien se estaba cambiando dentro de un cubículo del baño de hombres.
Según él, nadie entraría a la hora de la salida y podrían acompañarlo. Sí, como no.
Magda se puso frente a ______, emanando seguridad.
―Oye tú, cara de volcán. Te golpearía en este momento, pero eso sería abuso animal así que ― le dio un golpecito en la punta de la nariz que lo desestabilizó – lárgate de aquí antes de que te pulverice las albóndigas.― lo acorraló contra la puerta y él buscó desesperado el picaporte a su espalda.
― ¿Qué te pasa? Es el baño de hombres. En ese momento salió Harry y miró la escena ante sus ojos: _______ mordiéndose los labios conteniendo la risa y Magda…Bueno, Magda siendo Magda.
―Eh, ya basta. Magda, no lo molestes. El chico aprovechó que la orangután se distraía para salir corriendo.
―Aguafiestas― puso cara de inocencia― yo sólo quería jugar con él.
______ se acercó a Harry deslizando sus dedos entre los de él y salieron mientras Magda les sostenía la puerta.
La escuela parecía un lugar completamente distinto sin sus estudiantes; el conserje silbaba una canción mientras fregaba los pisos y sus pasos resonaban con eco.
― ¿Enserio piensas hacer la prueba de Callahan?― preguntó ______ a Magda. ―¡Pero claro! Me encanta el futbol y no sabes las ganas que tengo de patear culos musculosos.― contestó con un dejo de emoción contenido en la voz.
―Yo no me emocionaría tanto.― canturreó Harry. Magda borró su sonrisa y se colocó entre Harry y ______rodeándolos con sus pesados brazos.
― ¿Por qué no, Romeo?
―Se supone que prometí no decirle nada a las mujeres…Callahan no las quiere en el equipo.
― ¡¿Qué?!― Magda los soltó de golpe y siguió con paso airado― maldito bastardo ¿quién se cree para decir eso? Le voy a enseñar…
Magda echó a correr.
―¡No!― gritaron ______ y Harry saliendo detrás de ella, agarrándola de los antebrazos antes de que cruzara las puertas del campo de futbol.
―Suéltenme ¡suéltenme! Le voy a dar una paliza bien puesta.
―Magda― jadeó ______ del esfuerzo por forcejear― Magda contrólate.
―Hemos creado un monstruo― dijo Harry mientras miraba a _______.
De repente, Magda dejó de forcejear y se quedó mirando la puerta.
―Ya, estoy bien― se zafó del agarre de ambos con una sacudida― lo siento, no controlo los impulsos― se volteó y encontró a un par de tórtolos jadeando, con las manos en las rodillas tratándose de recuperar.
―Ay, por favor, no exageren.
_______ tiritaba desde su posición secreta tras las gradas del campo mientras que Magda aún seguía mascullando malhumorada; al parecer ni el insoportable frío la inmutaba.
― ¿No ti―ti―tienes frío?― tartamudeó ______ con los dientes congelados. Hasta podía ver el vaho salir de su boca cada vez que hablaba.
Magda chasqueó la lengua.
―Nah, tengo calor, es más― se empezó a quitar la chamarra con un movimiento de hombros― toma, te la presto, yo me estoy rostizando en esa cosa.
______ la aceptó gustosa y se arrebujó en la enorme chamarra como si fuera una capa.
Desde donde estaban podían ver a los jugadores de futbol reunidos con el entrenador en un extremo del campo, y a las animadoras con Keyra en otro. Éstas últimas lanzaban miraditas ocultas tras los pompones y chillidos contenidos mientras que Harry pasaba junto a ellas.
Desde ese ángulo panorámico, ________ se sintió libre de observarlo a conciencia mientras caminaba con su gracia lenta y felina hacia el entrenador.
Callahan dio media vuelta masticando su goma de mascar y vio a Harry.
―Eh, decidiste venir, emmm…
―Harry. «Me obligó a venir»
―Sí, como sea― le dio una palmada en la espalda y lo acercó al círculo de grandulones ― Chicos― anunció alzando orgullosamente la voz― este es nuestro nuevo juguete. Denle la bienvenida.
Bonita bienvenida; seis pares de rudos ojos y expresiones de asesinos se clavaron en Harry acorralándolo.
Un chico alto y rubio dio un paso al frente.
―Entrenador, no necesitamos a esta nena bonita― apuntó a Harry― Podemos vencer a Eton con los que estamos.
Harryle dirigió una mirada que equivalía a sacar la lengua.
―Brandon, no seas estúpido.― repuso Callahan― De ser así ni siquiera jugaríamos, nos descalificarían por default― le golpeó la sien con un dedo― piensa un poco con ese cerebro de pollo que tienes.
Brandon se veía confundido, incapaz de entender el concepto, pero aun así asintió de mala gana.
Callahan dio un paso atrás y juntó las manos dando un par de palmadas alentadoras.
―¡Muy bien, señoritas! Quiero verlos sudar sangre. ¡Veinte vueltas al campo, ahora!― tras soltar la penitencia, acomodó su plateado y frio silbato entre los labios y lo hizo sonar con todas sus fuerzas pulmonares.
―¡Veinte vueltas!― exclamó _____ temiendo por la vida de Harry― Si a mí me dan ataques de asma sólo de subir las escaleras de mi casa.
―Uh la lá, mira esos traseros pegándose a los pantalones.― Dijo Magda ignorando completamente a ______.
―Como lo ensayamos chicas― animó Keyra agitando sus pompones en rojo y amarillo.
Se veía fabulosa. Todas llevaban un pantalón deportivo de esos súper―mega ajustados y blusas de manga larga igual de ceñidas en los brazos, cintura y pecho.
Keyra Se inclinó sobre la grabadora y puso play a HollabackGirl de GwenStefani.
De inmediato Keyra encabezó la formación en triángulo y comenzó a marcar el paso mientras las demás la seguían confiando en que recordaban la coreografía.
Keyra dio media vuelta y observó a sus secuaces con los brazos en jarras y marcando el ritmo con la punta de su zapato Puma.
―¡Brittany!, mueve más el trasero, tendrás que bajar de peso, querida, toda la grasa se te está yendo atrás. Katy, te atrasaste un tiempo. ¡Sigan la maldita música! ¿Tan difícil es de entender?
Los jugadores que pasaban corriendo en fila por ahí ralentizaron el paso para ver a las señoritas mover el trasero. Harry se iba dando tumbos con todos hasta que llegó hasta el principio de la fila encabezada por Brandon.
― ¡Oigan ustedes! ¿Por qué aflojan el paso? ¡Descansen el día en que mueran!― ladró el entrenador haciendo chillar su silbato.
Harry entornó los ojos, resopló y rebasó a Brandon. Él no lo podía creer; nadie se atrevía a rebasarlo sabiendo que se llevaría una paliza por eso.
Brandon tensó los poderosos músculos de sus piernas y le dio alcance a Harry empujándolo con el hombro. Harry lo fulminó con la mirada y le regresó el golpe.
Pasaron corriendo a una velocidad increíble junto al escondite de ______ y ella se recreó en la vista que tenía: cada uno de los músculos de Harry se tensaba e hinchaba bajo la ropa deportiva.
Magda soltó un silbido de admiración. Callahan tenía los ojos desorbitados y la mandíbula desencajada dejando colgando el silbato de su correa.
―¡Miren eso, bola de niñas! Así se corre― escupía y señalaba a Harry y Brandon que se rebasaban intermitentemente por milímetros mientras levantaban el pasto sintético tras ellos― ¡Eso es potencia! ¡Quiero ver tanto entusiasmo que sean capaces de curar el cáncer!
Keyra gruñó y dio una patada en el pasto.
―¡Vamos Brandon, tu puedes!― saltó levantando los pompones. Eso no era justo. Keyra podía animar a su novio pero ______ no al suyo. Pensándolo bien… ¿quién rayos se lo impedía?
Se apartó de la calidez de la chamarra de Magda tirándola al suelo y se levantó decididamente.
―Hey, ___ ¿A dónde vas?...Oh, al diablo.― La siguió Magda hasta salir de la parte posterior de las gradas.
El larguirucho y menudito cuerpo de _______ temblaba de pies a cabeza por el frío y una ráfaga le ondeó el cabello haciéndola estremecer.
Puso sus manos alrededor de su boca haciendo un megáfono y gritó lo más fuerte que pudo:
―¡TÚ PUEDES HARRRYYYY!- grite todo lo que puede.
Harry, aunque no podía distraerse y mirarla, la escuchó y su corazón fue al doble consiguiendo sacarle una cabeza de distancia a Brandon. Corría con ligereza y rapidez, como un gato.
Keyra vio a ______ desde el otro extremo y decidió que ella también podía hacerle competencia.
―¡BRANDOOOON VAS A GANAAAR, VAMOS! ―grito euforica
TU CALLATE PERRAAAA― esta vez el grito provenía de Magda quien arremetía contra Keyra― NOS VAS A DEJAR SORDOS A TODOS.
―CÁLLATE TÚ ESTUPIDAAA. ―VEN Y DÍMELO EN MI CARAAAA. ―Magda― advirtió _____. ―Oh, sí, casi lo olvido.― dirigió su megáfono improvisado a otro lado― ¡TU PUEDES HARRY! PATÉALE SU RUBIO CULOOO.
Pronto ya no se supo qué competencia se llevaba a cabo: si de gritos o de velocidad, probablemente ambas. Pero todo cambió cuando el brabucón de Brandon metió un pie intencionalmente en el camino de Harry y este cayó al suelo rodando con mucha velocidad.
El grito de _____ atravesó el aire y la risa malvada de Keyra flotó.
―Vaya, vaya― dijo Brandon burlándose― al fin estás a donde perteneces― levantó tierra húmeda con la punta de su zapato y se la arrojó a Harry de una patada― en el lodo. Harry tosió y abrió un ojo para mirar a Brandon… tomó impulsó y se abalanzó sobre él tirándolo al suelo.
Giraron en la tierra hasta que Harry estaba encima de él y le propinó un puñetazo en la mejilla. Brandon maldijo y maniobró para que fuera él quien ahora quedara encima y estaba a punto de golpear a Harry en la nariz pero éste encogió las piernas y las usó para empujar a Brandon aun lado. Se enzarzaron de nuevo en la trifulca y el silbato del entrenador sonó con energía.
―¡Ya basta!― se interpuso entre los dos y los separó empujándolos a los lados hasta que cayeron en sus traseros.― ¡No quiero volver a verlos pelear o los sacaré del equipo!
Ambos rivales se miraron jadeantes, llenos de lodo y con sus respectivas miradas cargadas de odio y resentimiento.
―Brandooon― llegó Keyra chillando e hincándose a su lado.― Oh, por Dios, tienes la cara echa un asco― puso cara de repulsión y detuvo sus manos justo al ver el lodo que le resbalaba por la mejilla, tenía que cuidar su manicure.― Uggh, estás horrorosamente sucio.
______ llegó con un poco de atraso (sus piernas no eran muy coordinadas para correr que digamos) y sin importarle el sudor, la mugre o el lodo, se hincó frente a Harry y tomó su rostro con dulzura entre las manos.
―¡Te está sangrando la frente!
Harry Se llevó los dedos a la mejilla donde sentía algo cálido y húmedo resbalando y luego los miró embarrados de un líquido brillante y escarlata.
―Maldición.
― ¿Te duele algo? ¿Ves doble? ¿Sabes quién soy? ¿Cómo te llamas?
―_____…
―¿Te rompiste un hueso? Porque si te rompiste un hueso sé primeros auxilios, mamá me enseñó, sólo que te va a doler un poco… bueno te va a doler mucho, lo sé por experiencia, a mí en realidad me lo hicieron cuando…
―¡_____! Estoy bien.
______ se calló al instante y clavó la mirada en los ojos de Harry que parecían más verdes rodeados de tierra.
―Lo siento, es que― vaciló― estaba preocupada― sin poder evitarlo lanzó sus brazos al cuello de Harry y éste se sorprendió, pero inmediatamente después de agradable shock compuso una lenta sonrisa y envolvió a ______ con el brazo que no le dolía tanto.
Brandon los observó con cierta mezcla de resentimiento ¿y quizá celos? Miró a su flamante novia de pie junto a él, mirándose las uñas desde diferentes ángulos para comprobar que estuvieran intactas cuando ni siquiera lo había tocado.
Masculló unas palabras y se puso de pie como pudo.
―Oye, Harry ¿A qué sabe la tierra?
―A tu trasero-dijo Magda
-Magda. Cállate y ayúdame-_____ se apartó y Magda pasó un brazo de Harry sobre sus hombros para que pudiera apoyarse.
Hizo el favor de escoltarlos hasta un taxi que los llevaría de regreso a la casa de _______.
Capitulo 21
Maraton parte 2
______ sabía que ese día nadie la esperaba en casa, así que entró con Harry por la puerta principal, lo metió a la ducha, cerró la cortina y esperó a oír el ruido del peso de la ropa al caer en señal de que había cambiado de forma.
Suspiró, descorrió la cortina y miró al interior de la enorme tina. Bajo la ropa enlodada salió un gatito negro que la miraba desde abajo con esa tierna y dilatada mirada suya.
―Miauu. «prr, prr, prr» comenzó a ronronear con fuerza y ______ sonrió con ternura mientras se agachaba y recargaba una mejilla en el frío borde de porcelana y acariciaba a Harry bajo el mentón.
―Te extraño cuando eres así. Siento como si te perdiera y estuviera hablando con un gato común y corriente.
Adoptó una expresión seria, no había pensado en esa perspectiva. Su novio era ese gato. Literalmente estaba enamorada de un animal.
Quien no la conociera diría que es una zoofílica en potencia. Harry restregó su hocico en la mano de _______ reclamando más mimos. De repente sentía unas estúpidas ganas de llorar, pero las contuvo a toda costa mientras trataba de bañar a Harry como si estuviera bañando a Honey.
―Diablos, quédate quieto.
― ¡Miauuu! Trató de lavarle con cuidado la herida alargada que tenía en la base de la oreja izquierda y una vez limpio y con aroma a flores exóticas del paraíso (así decía la botella del shampoo) lo envolvió en una toalla llevándolo a su habitación.
_______ se arrodilló frente a la calefacción y depositó a Harry en la alfombra. Él se sacudió bamboleándose desde la cabeza hasta la cola y luego se contorsionó para lamerse el pecho.
_______ se había agachado hasta que su cara quedó a la altura de él.
Harry la miró con su sonrosada lengua asomándose en su hocico y olisqueó la mejilla de _______.
Ella notaba el vibrato del ronroneo en su oído y cerró los ojos recreándose en la paz que le transmitía. Luego sintió la rasposa lengua de él lamiéndole la mejilla.
______ soltó una risita ronca.
― ¿Eso es un beso?
―Miauu. «Sí» ______ se imaginó la voz de Harry en su cabeza.
Le dejó ropa que ponerse pulcramente doblada en el suelo y la pelota de Honey para que se entretuviera mientras ella esperaba con ansiedad.
Se tumbó en la cama y abrió la computadora como fuente de distracción. Hasta que sus ojos comenzaron a cerrarse y se dejó caer boca abajo en la cama.
Debió haber dormido varias horas pues tenía la sensación de que sólo había transcurrido un minuto desde que cerró los ojos hasta que sintió el tacto caliente de una yema de dedo trazando un camino desde el entrecejo hasta la punta de la nariz.
Se despertó entre parpadeos y vio a Harry acostado a su lado, con una mejilla contra la colcha de modo que sólo la miraba con un ojo verde. Un mechón castaño caía sobre su ceja.
―Ha…
―Shhh.― la silenció con un suave siseo mientras ______ sentía golpecitos de su dedo contra la nariz y parte de las mejillas.
― ¿Qué haces?
―Te cuento las pecas.
______ enarcó una ceja ¿quién contaba pecas?
― ¿Para qué?
Harry detuvo el dedo un momento para mirarla a los ojos con diversión y componer una lenta media sonrisa. Luego siguió contando.
―Para saber cuántos besos tengo que darte. Ella abrió la boca pare decir algo pero la volvió a cerrar. Sentía una sonrisa bailarle en las comisuras de los labios.
―Dices cosas un poco…
―Siete.― la interrumpió él.
― ¿Siete?
―Siete besos. Ahora, si me disculpas…― se acercó lentamente a ella con los ojos cerrados y buscando a tientas sus labios. Cuando los encontró, giró lentamente hasta situarse encima de _______, pero sin echar todo su peso sobre ella; apoyado sus manos a cada lado de su cabeza y las rodillas a cada lado de las caderas.
Harry despegó sus labios de los de ella y la miró. _____ estaba desorientada, perdida en las profundidades de sus ojos verdes de esos felinos ojos. En esa posición sentía que la dominaba, la sometía, la reclamaba… dejó de pensar, tuvo que hacerlo con los labios de Harry acercándose de nuevo.
La besó otra vez, se separó un momento y regresó. Una y otra y otra vez. Era como tratar de encontrar equilibrio en un torbellino. La llevaba al paraíso y luego la volvía a abandonar en la Tierra.
La siguiente vez que Harry volvió a inclinarse hacia ella, _____ susurró:
―Ya van ocho.― ni siquiera sabía cómo era que llevaba la cuenta.
―Calladita― susurró contra sus labios y luego los tomó posesivamente, los saboreó ávidamente, como un hambriento que se le arroja un pedazo de pan.
______ era una total inocente, pero descubrió que le encantaba que la besara de esa manera.
Tal vez era porque veía mucha televisión pero siempre había imaginado a un millón de mini _____’s viviendo en el interior de su cuerpo y cada una representaba una fase de su personalidad. Harry despertaba a la mini ______ atrevida que había descansado en ella diecisiete años enteros y así se apoderaba de la _______ grande haciéndola deslizar las manos desde los hombros de Harry hasta los pilares duros y firmes que eran sus brazos alrededor de ella. Eran brazos asombrosos y mientras se los sujetaba devolvió el beso con la misma intensidad.
Inclinando la cabeza para ahondar más, Harry tomó el labio inferior de ______ entre sus dientes con el más suave y resbaladizo de los mordiscos haciendo que se le derritieran las terminaciones nerviosas.
Ella se revolvió y él la mantuvo quieta posando una mano en su cadera. _______ sintió cosquilleos cálidos en esa parte y se vieron intensificados cuando Harry deslizó una mano por su costado, abriéndose paso a través del suéter y adentrándose por debajo de la blusa, donde la suave piel de _______ quedaba sin protección.
Se quedó sin respiración mientras la mano intrusa le trepaba lentamente curveándose a la forma de la cintura.
―Eres… ― susurró Harry contra su sien― lo más hermoso que eh tenido en la vida.
Se estaba volviendo loco y sabía que si no se detenía de una buena vez, la cordura lo abandonaría y lo lamentaría el resto de sus días pero ¿Cómo saberlo?
Sólo había una forma. Tenía que conocer cuál era su límite porque no se perdonaría hacer daño a _______, pensarlo ya era demasiado insoportable.
Debía tener cuidado… Entonces _______ soltó un pequeño gemido de placer tomando a Harry con la guardia baja y provocando que cada uno de sus músculos se tensaran. ¿Qué le estaba haciendo? Ya ni siquiera podía terminar sus propios pensamientos.
Se pegó más a _______ y su mano subió un poco más encontrando las costillas y palpando la prohibida tela de su brasiere.
_______ no sintió esto hasta que la varilla se levantaba y un cálido toque rozó la piel extra sensible de la base de su pecho.
Alarmas de alerta sonaron en su cabeza, se tensó, abrió los ojos de golpe y se apartó bruscamente de Harry empujándolo sin fuerzas de los hombros.
Respiraba tan agitadamente que no inhalaba nada de aire, se había asustado mucho. Era como si las sensaciones fueran a engullírsela completa, no estaba lista para ese grado de entrega. Eran terrenos totalmente desconocidos, como llegar a la parte oscura de una cueva y no llevar linterna.
―___…
Y la verdad era que le atraía tanto esa oscuridad, que le asustaba. No sabía en qué se estaba convirtiendo.
―___. La mano de Harry sobre la suya la sobresaltó y levantó la cabeza encontrándose con una mirada azul cargada de preocupación y el pecho subiendo y bajando con la respiración acelerada. Se sintió culpable.
―Perdón― comenzó Harry con un dejo de pasión en la voz―, no sé qué… no pude detenerme, lo siento. No tiene que ocurrir de nuevo.
―No.― _____ sonó más fría de lo que ella hubiera querido y Harry no pudo disimular su tristeza y decepción en los ojos.
Ella se apresuró a componer una sonrisa tranquilizadora y acarició los dedos de él.
―Me refiero a no ahora-dijo tranquila. Harry sonrió pero la sonrisa no alcanzó a sus ojos. ―No, no me mires así― ______ le cubrió la mejilla con una mano y fue entonces cuando pudo ver el brillo en sus ojos crepitar de nuevo.
HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
capitulo 22
Maraton parte 3
― ¡Oye, bestia! Me duele.― se quejó Harry propinándole un manotazo a Magda para que apartara sus malignas garras de la curita sobre su ceja izquierda.
Esta se río burlonamente.
―Eres una niña chillona.
Harry entornó los ojos y meneó la cabeza. _____ se reía cuando se fastidiaban, era como ver a dos amigos de toda la vida pelearse amistosamente porque, la verdad era que Magda trataba a Harry como si fuera mujer y Harry trataba a Magda como si fuera hombre. Ella tenía esa facilidad de entrar en confianza y _______ le fue agarrando cariño muy rápido.
Eran el grupito más raro y no normal de la cafetería. Comenzando con Harry; el chico de la belleza exquisitamente exótica que encajaría en cualquier mesa si quisiera por su popularidad instantánea y al que saludaban coquetamente todas las chicas que pasaban a su lado, como si se conocieran de toda la vida. _____; la nerd inadaptada con quien nadie hablaba ni conocía salvo por su papel de mascota del equipo, el cuál le reducía la reputación a una célula de garrapata que, estaba todavía más reducida después de su incidente en la fiesta de Keyra. Se había creado algo de fama (mala fama en realidad) pero no tardó en que se borrara de las mentes de todos, dejándola de nuevo sin nombre. Magda; la más reciente adquisición, corazón de oro, lengua de fuego, cara de asesina serial y actitud castigadora. Hubiera tenido a varios aliados de no ser porque alguien hablaba pestes de ella quitándole público. Si bien era cierto que nadie le dirigía la palabra, también nadie osaba entrometerse en su camino si no querían acabar con una enorme patada en su trasero que lo mandaria sindua alguna a Groenlandia
Ese día, en la mesa junto al baño de la cafetería (que sin saber cómo, esa sería la mesa permanente que los identificaría) Magda estaba a punto de llevarse su monumental sándwich de dos pisos a la boca cuando levantó los ojos y vio una escena de película de terror: Harry y _______ a punto de besarse.
―Eh, eh. Oigan, estoy comiendo― advirtió agitando su sándwich, salpicando la mesa con gotitas de mostaza.
Harry hizo como que miraba a otro lado y _______ escondió su sonrojo entre las manos.
―Pecadores― se burló Magda― son como sanguijuelas; nada más se juntan y quieren succionarse todo. Si quieren follar, enfrente vi un hotel.
Harry estalló en una carcajada. Ni siquiera existía dicho hotel.
―Ya cállate y trágate eso-dije sonrojada
Magda sonrió satisfecha y estaba a punto de dar la primera mordida cuando sintió un empujón en el hombro seguido de una mucosidad resbalándole por el cabello hasta la sien.
Levantó los ojos hacia _____ y Harry, tenían cara de estupefacción y miraban algo más allá de ella.
Magda volteó sobre su hombro y vio a Keyra con toda su bola de sirvientes burlándose y apuntándola con el dedo. Algunos incluso hasta chocaron los puños. Le había tirado el puré de papas encima.
― ¿Ya ven?― comenzó Keyra― les dije que encontraría un sombrero que fuera bien con su cabezota.― dijo con su voz de pajarraca.
Magda se levantó amenazante con el sándwich en la mano. Todos en la cafetería estaban en silencio con cara de querer esconderse bajo las mesas como en un tiroteo de cantina. _______ se tensó y Harry, a su lado se preparó por si había que intervenir.
Keyra tenía un poco de miedo… Bueno, mucho miedo en realidad, pero para eso se previno llevándose a todo el equipo de futbol tras ella.
Magda se pasó los dedos por la frente y los sacudió salpicando el piso de puré.
―Entonces― empezó dando un paso hacia adelante― tu eres la perra que le dijo a todos que yo era una perra ¿no?― otro paso adelante. Keyra se irguió y levantó la barbilla con desafío. Cerró las manos en apretados puños para evitar que le temblaran― Bueno, escucha, perra: tú no me conoces, y estoy harta de toda esa mierda que tiras contra mí, así que― abrió el sándwich y lo estampó contra la cara de Keyra girándolo y embarrándoselo mientras le decía― hazme el favor de tirarte en un tanque de tiburones con tu periodo quieres.
Keyra chillaba y daba manotazos al aire tratándose de librar mientras sus “guardaespaldas “dieron un paso atrás y miraban embobados. Cuando por fin se apartó tenía la cara llena de una mezcla asquerosa entre mostaza, mayonesa, Ketchup, guacamole, una rodaja de tomate resbalándole por la mejilla y una pieza de lechuga en el ojo.
La cafetería estalló en risas. Hasta la cocinera se reía.
―Eres― su voz tembló― ¡Eres una perra!-Magda sonrió diabólicamente. ―Sí, sí, llórame un maldito río.
Un sonido chillante interrumpió el barullo seguido de la voz severa de la directora Foutley a través de los altavoces.
―Magdalena Howell, a la dirección. Repito; Magdalena Howell, a la dirección.
― ¿Magda…lena?― pensó Harry en voz alta.
―¡Ja!― se burló Keyra― Muere, perra, muere. Magda tiró el sándwich (o lo que quedaba de él) al suelo, disimuló tragar saliva, levantó la barbilla y salió dignamente de la cafetería.
―Cierre la puerta después de entrar, señorita… ¿Qué tiene en la cabeza?― la cara de Foutley era de desconcierto.
Magda se tocó el cabello como si no supiera de qué estaba hablando.
―Oh, la última moda en parís ¿no le gusta? También hay de otros sabores.
―No sea irrespetuosa con sus superiores y tome asiento. Magda esbozó una sonrisa sarcástica y se sentó con fingida y exagerada elegancia.
La directora le dirigió una mirada hosca y prosiguió: ―Hay una persona afuera que quiere verte. ― ¡Oh!― fingió sorpresa llevándose una mano a la boca― vaya ¿quién podrá ser? Estoy tan interesada.
―Pues debería estarlo, señorita Howell―advirtió― es un judicial y viene a buscarla específicamente a usted por lo tanto no puedo dejarlo pasar sin su consentimiento.
La expresión de Magda fue perdiendo sarcasmo hasta volverse dura. ¿Un judicial? Aún no comprendía de qué se trataba. Se tensó.
―¿Enserio iré a la cárcel sólo por embutirle el sándwich a la odiosa de Keyra?
― ¡¿Qué usted qué?!...― Foutley se dejó caer en el respaldo de su asiento llevándose una mano a la sien y masajeándosela en círculos― oh, bueno, no importa. El abogado la está esperando en la entrada de la escuela, si quiere que la acompañe…
Magda se levantó de un salto y negó con un gesto de mano. ―No, no… creo que ya recordé de que se trata el cuento. Al salir de la dirección se dirigió al baño, abrió la puerta de un empujón, giró la llave del grifo y se inclinó metiendo toda la cabeza en el chorro. El agua estaba helada, pero al menos servía para despejarle los pensamientos, aunque no ahuyentaba los más escabrosos que había estado cargando sobre sus hombros durante meses enteros. Meses en los que no podía dormir, en los que al más mínimo ruido tenía que desvelarse, mirar bajo la cama, por las ventanas hacia la oscuridad y comprobar decenas de veces que los cerrojos de las puertas estuvieran bien puestos. Sólo estaba consiguiendo volverse más paranoica e irritante.
Y por fin, después de una larga y tortuosa espera, sus suplicas habían sido escuchadas, era como si el Cielo decidiera sonreírle por primera vez desde que las cosas empezaron a salir mal en su vida.
Una chica salía de un cubículo y la miró con ceño cuando se acercó a lavarse las manos, pero Magda la ignoró y varios minutos después de que estuvo de sola de nuevo, cerró el grifo e irguió la cabeza encontrando su reflejo en el espejo.
Los ojos le quedaron rojos por las lágrimas, su ensortijado cabello se le había alisado apelmazándose en sus mejillas, tenía decenas de gotitas diminutas alrededor de toda la cara y parte del cuello de la camiseta empapado. Trató de limpiarse con el antebrazo y salió del baño con paso airado.
El exterior estaba cubierto por un cielo gris y un domo de nubes blancas preparándose para la próxima nevada. Por primera vez sentía frío y la desnuda piel de sus brazos se erizó.
Bajó las escalinatas y atravesó el estacionamiento zigzagueando entre los autos en vez de irse por la calzada despejada.
Cuando estuvo a unos cuantos metros de la reja abierta vio a un hombre alto y pulcramente vestido en un costoso traje gris metálico recargado sobre un auto negro de lujo.
El ondulado cabello del hombre se movía con el viento mientras este miraba a otro lado mostrando su perfil tallado en piedra. Cuando él advirtió la presencia de Magda por el rabillo del ojo y volteó… ella se quedó petrificada.
Luego del desastre en la cafetería, Magda no volvió en todo el día a ninguna clase y ________ supo que la habían castigado.
Generalmente los castigos de Foutley consistían en mandar a limpiar los baños y fue ahí donde la buscó inmediatamente después del toque de salida. Hasta le pidió a Harry que buscara en el baño de hombres pero cuando salió de ahí sin Magda, la sonrisa esperanzada de _______ se esfumó.
―No estaba ahí. _______ se encogió de hombros. ―Bueno, tal vez ya se fue a casa― tomó a Harry de la mano― ¿nos vamos?
―Adelántate, tengo que hablar algo con el entrenador― le dio un beso en la frente y se apartó gentilmente.
Afuera caían los primeros copos de nieve con lentitud. ______ exhalaba vaho mientras se arrebujaba con su suéter verde esmeralda.
Antes de llegar al árbol donde siempre esperaba a Harry, le pareció ver un ensortijado y rebelde cabello negro bambolearse con el viento.
―¡Mag…!― se interrumpió al verla hablando con un hombre fornido embutido en un atractivo traje hecho a la medida.
Corrió el tramo que le faltaba para llegar al tronco y se escondió tras él para observar con más libertad.
Magda reía de algo que él le había dicho, parecía como si estuviera coqueteando con él. Tenía un perfil increíble; una perfecta nariz recta, pestañas largas y espesas y el cabello tan oscuro como Londres en la noche.
_______ sintió una extraña punzada de familiaridad en el pecho y entonces… el hombre levantó a cabeza mirando hacia el techo de la escuela mientras sonreía de una forma lenta, destellando la blancura de sus dientes que resultaba casi cegadora.
Y ______ se paralizó. Casi se caía de rodillas por la impresión. «¿Harry?» ¡¿Era Harry?! La sorpresa no cabía en su cuerpo. Apretó los dedos contra el relieve irregular del tronco.
¿Cómo podía ser Harry si acababa de verlo? ¿Cómo? Entornó los ojos y se ajustó los lentes. Maldita miopía. Era igualitito a Harry, pero a menos de que se pudiera clonar a él mismo, no había razón lógica para creer que fuera él, además, parecía una versión mayor.
Aun así, su corazón iba a la velocidad del aleteo de un colibrí. Alguien le sopló en la oreja y ______ saltó con un horrible estremecimiento recorriéndole la espina dorsal.
― ¿Nos vamos? Volteó aturdida y vio a Harry…o a uno de ellos. Miró por encima de su hombro y vio al otro Harry rodear un flamante Jaguar negro y meterse en asiento del piloto mientras Magda lo despedía con la mano.
― ¿A quién estamos espiando exactamente? _______ volteó la cabeza y vio la barbilla de Harry recargada sobre so hombro mientras la rodeaba con los brazos por detrás.
Ella giró sobre sus talones hasta estar frente a él, lo apartó empujándolo del pecho, pero no la soltó.
― ¿Qué no estabas…? Te vi… ¿Creí que…? Él alzó una ceja.
―Lo siento, yo―no―hablar―tu―idioma-dijo gracioso, _____ logró zafarse.
―Hablo en serio, había un tipo igualito a ti, allá― señaló vagamente hacia la entrada― hablando con Magda.
Harry se asomó sobre la cabeza pelirroja pero no vio ni al tipo ni a Magda.
―Y dime― se tomó su propia barbilla entre el índice y el pulgar― ¿era igual de apuesto que el chico que tienes enfrente?― le bailó una ceja de arriba a abajo.
______ sonrió juguetonamente. ―Oh, sí, sí, sí. Estuve a punto de arrojarme a sus brazos.
―De acuerdo, eso ya no me gustó.
A la mañana siguiente fue casi imposible salir de casa, la nieve enterraba todo y las botas de ______ se hundían al tratar de caminar, sólo esperaba que no cayera en una alcantarilla abierta.
Miró a Harry con recelo, él iba muy quitado de la pena caminando sobre el filo de una barda con un equilibrio de demostración de circo. Ni siquiera miraba por dónde iba, tenía la vista fija al frente.
―Ojalá que te caigas.― le dijo sin deseárselo realmente. Harry lanzó un resoplido desdeñoso.
―Oh, ¿estás enojada, mi amor? Te dije que subieras conmigo y yo te sostenía por si te caías pero no quisiste.
―Me dan miedo las altu… tropezó con algo y cayó de bruces sobre la nieve dejando su silueta hundida como un ángel de nieve sin alas.
Harry saltó sin esfuerzo alguno cayendo con parsimonia sobre sus dos pies y levantó a _______ de las axilas.
―Tu vida peligra hasta en el suelo. ¿Has probado vivir en el mar?
―Hmmp.― escupió una bola de nieve, se estiró la bufanda hasta taparse la nariz y siguió caminando con la elegancia de un pato.
Magda no había ido ese día y _____ se lo atribuyó a la nieve. Tal vez su casa estuviera enterrada hasta el techo sólo con la chimenea visible y ella era muy gruesa como para salir por ahí… Pero tampoco se apareció al día siguiente, ni al siguiente, ni al siguiente a ese. No se apareció en toda la semana y ______ comenzaba a preocuparse. Su mente repasó una y otra vez el día en que la vio hablando con aquel hombre, como si psíquicamente fuera a dar con la respuesta de su paradero.
En lunes, por la mañana, ______ se sorprendió de ver a Magda tras la puerta de su casillero.
―¡Magda! ¿Dónde te habías metido? Estaba a punto de buscar
en la lista de personas desaparecidas pero Harry me dijo que…
Magda cerró el casillero de golpe y miró a _______ con una expresión que nunca le había visto dirigida hacia ella, estaba seria y tenía un moretón espantoso alrededor del ojo.
―Qué te… ¡¿Qué te pasó?! ―Me caí.― fue toda su respuesta y empezó a caminar abriéndose paso entre los alumnos que se le quedaban viendo a su hematoma, pero ella no parecía darle importancia.
Algo andaba mal, Magda no era de las que se caían y se dejaban un ojo morado si podía evitarlo.
―Magda… ¡Magda!― Magda no volteó. Sólo le dio alcance cuando entraron en el salón de química y se sentaron juntas.
― ¿Por qué no hablas conmigo?
―Porque no me has preguntado nada.― contestó sin mirarla.
―De acuerdo― _____ giró en su silla hasta estar frente a su perfil― ¿Quién era el hombre con el que estabas hablando la semana pasada?
Magda soltó un resoplido desdeñoso y la miró por primera vez mostrando de nuevo ese ojo morado y encogido por la hinchazón.
―Dios, ______ ¿Quieres ser más específica? Eh hablado con una docena de hombres durante toda la semana, cómo quieres que sepa a cuál te refieres.
No estaba muy segura de creerle. Algo en su brusco cambio de expresión le había dicho que sabía a lo que ______se refería, pero guardó la calma en su tono neutro.
― El que se parecía a Harry. Magda palideció un momento «¿cómo sabe de él?» pensó.
Recuperó la compostura y se reclinó en su asiento.
― Es un amigo que vino a saludar.― dijo luego de una pausa. _____ entornó los ojos, ya no le creía nada.
― ¿Y cómo se llama?
―Ah, eso no importa. Estaba a punto de preguntar otra cosa cuando Flitcherzilla llegó con su rutina mata oídos.
En el almuerzo, sonó el celular de Magda, ______ ignoraba que tuviera uno y la decepcionó que no se hubiera molestado en darle su número cuando ella le había dado hasta el de sus padres.
Sacó un reluciente celular pantalla táctil último modelo de su bolsillo trasero y salió apresuradamente de la cafetería para contestar.
― ¿Viste eso?― preguntó ______ a Harry dándole un ligero codazo.
―Sí, lindo celular.
―No, me refiero a que ha estado muy extraña. Harry se encogió de hombros y ____ puso ceño. ―No te habrás creído la historia barata de que se cayó ¿verdad?
―No, pero si quisiera contarnos algo lo haría. ______ se cruzó de brazos.
―Es que creí que la amistad no funcionaba así.
―Claro que sí. ¿Acaso te gustaría que Magda se enterara de cada cosa que hacemos?
_______ notó que toda la sangre de sus pies conspiraba en sus mejillas.
―No… ¡Ay! Eso es diferente, Harry.
Él se rió y le apartó un mechón de la cara.
―Eres linda cuando se te pone la nariz toda roja. Pareces Rodolfo el reno.
―Que… ¿halago?
Magda no volvió a aparecer en lo que quedaba del receso ni el resto de las clases.
En la salida, Harry se quedó a entrenamiento. Era asombroso que todavía no renunciara al club de los gorilas rabiosos de Callahan.
El pobre viejo había perdido dos mechones de cabello ¡Dos! Quedándole sólo uno al cual cuidaba con recelo bajo su gorra como si cargara el Santo Grial en la mollera.
______ estaba sentada en la grada de hasta abajo observando a Callahan refunfuñar y lanzar los brazos al aire señalando para todos lados como si el planeta tuviera la culpa de sus problemas.
―Tres semanas. Faltan tres semanas para el juego y todavía no estamos completos. ¡¿Qué diablos vamos a hacer?!
Harry parpadeó cuando sintió una gota de saliva saltar a su mejilla. Callahan mostraba todos sus antiestéticos dientes cuando gritaba de esa manera y en ese momento tenía un pedazo de lechuga entre los dientes. Un “lechugazo” que lo hacía ver chimuelo.
―¿Cómo quiere que lo sepamos?― Salió Brandon en defensa. Vaya, por primera vez en su vida _______ lo veía encarar las cosas como un hombre.― Usted es el entrenador, debería saber qué hacer. Estoy harto― miró alrededor con un gesto que obligaba a sus compañeros a apoyarlo― no se ustedes chicos, pero deberíamos dejar pasar la final. Siempre nos aplastan como lombrices. Y todo por su culpa.― apuntó al entrenador con frialdad.
Los demás asintieron débilmente luego de una vacilación. Callahan entornó los ojos arrugado el entrecejo. Parecía rata egipcia.
―Mírense, actuando como nenas. Si les patean el trasero hacia el Támesis es porque ustedes se bajan el pantalón y lo permiten.― Los miró de hito a hito.― Estoy rodeado de ineptos― se quitó la gorra y la arrojó al lodo quedándose sin su único pelo― inútiles― aplastó la gorra con el pie― cobardes― y la pisoteó hasta enterrarla― ¿Creen que es duro?― por último le lanzó un escupitajo a lo que quedaba de gorra― no saben lo que es tener problemas de próstata ¡Eso si es duro!.
Los corpulentos chicos se miraron entre ellos con un dejo de asco y dolor. Dios, Callahan había hecho fuertes declaraciones acerca de su próstata. Nadie quería saber eso.
Estaba rojo de furia, puso una mano en su cadera y con la otra hizo un gesto vago.
―Váyanse de aquí, no tiene caso, no estamos completos― al ver que vacilaban entre irse o quedarse y ganar puntos por ser mártires gritó: ― ¡Largo!
― ¡Cielo santo, sus gritos se oyen hasta el palacio de Buckingham, entrenador!― escuchó una voz femeninamente horrible a su espalda que lo tensó.
Volteó con cautela y vio a la directora Foutley a dos metros de él con los brazos en jarras y los tacones de aguja totalmente enterrados en el lodo.
― ¿Y a quién le dice que se largue? Callahan echó la cabeza hacia atrás, mirando afligidamente al cielo y levantó las manos como si fuera a recibir un meteorito.
―Oh, no, ¿ahora qué quiere usted? Foutley soltó un resoplido desdeñoso y se llevó una mano al pecho.
―Después de que estoy salvando su desagradable pellejo en el magisterio ¿es así como me agradece?
―Oh, sí claro, cómo no. ¿De qué diablos habla? La directora sonrió satisfecha, esperaba que le preguntara eso, aunque no estaba muy segura de por qué se molestaba en ayudarlo, tal vez los años la estuvieran ablandando.
Con gestos teatrales, Foutley se hizo a un lado dejando ver a un grupo de tres escuálidos y patéticos chicos mientras los abarcaba en un gesto de brazos abiertos como cuando revelan que te acabas de ganar un auto en los teleconcursos.
―Ta―daaaa.
A _____ le colgó la mandíbula, los del equipo de futbol pusieron cara de estar viendo al mismísimo Jorobado de Notredame multiplicado por tres. Y Harry contuvo una risa al ver sus expresiones horrorizadas.
Callahan apuntó al trio con un dedo tembloroso.
―¿Qué es eso?
―Extraterrestres de Ningunolandia― Puso los ojos en blanco
―¿qué no ve? Son sus reemplazos― caminó a trompicones detrás de los chicos y los rodeó con sus brazos. Eran tan flacos que cabían perfectamente.― Entrenador Callahan,―dijo con orgullo―estos son los elementos que llevarán a los Escorpiones de Dancey High a ¡la victoria!
En ese momento, el entrenador perdió totalmente la capacidad para parpadear, era como si sus ojos estuvieran a medio milímetro de distanciarse de las órbitas. El resto del equipo estaba igual.
Observó a sus “campeones”: al primero lo conocía, era Edmund Straford; el presidente del club de ajedrez, tenía una cara que le recordaba a la de un ratoncito con orejas grandes y enrojecidas, nariz extra larga y respingona y grandes lentes redondos que le cubrían toda la mitad de su pequeña cabeza; se peinaba con la raya a un lado embarrándose grandes cantidades de gel para el cabello era como si su madre fuera una camella y lo lamiera antes de salir. Siempre vestía camisas a cuadros escoceses con corbatas negras y usaba mocasines ¡Mocasines! Los abuelos usaban mocasines; además usaba unos horribles braquets exteriores que lo hacían sorber saliva constantemente. Parecía inquieto por el movimiento nervioso de sus manos, como si quisiera esconderlas y no encontrara dónde. El segundo chico era toda una reina, así es… un gay; con el cabello teñido de rubio cenizo caoba y mechoncitos en rubio platinado; era obvio que se había aplicado dos capas de rímel y un poco de polvo rosa para las mejillas; su camiseta era fucsia y se le ceñía a su peculiar cuerpo: era delgado pero tenía un poco de pecho y cintura pequeña; sus vaqueros eran de esos leggins que se le pegaban tanto dando la sensación de romperse si se tiraba un pedo. Y qué decir del tercer chico; era de una altura superior al metro noventa, tan alto que se encorvaba hacia adelante; su largo cabello pelirrojo estaba recogido en una coleta, sobre su cabeza traía un gorro hippie desteñido, tejido en los colores del arcoíris; se veía desaseado y su pelirroja barba parecía la de un náufrago; sus ropas eran tan andrajosas y holgadas como las de un vagabundo y su camisa decía «Pscicodelico―trans―alternativo, hermano»; se balanceaba ligeramente sobre sus pies al ritmo de una canción qué sólo él podía oír en su cabeza; era como si estuviera bajo el efecto de los hongos mágicos cultivados por los duendes del bosque encantado.
A Callahan le tembló una comisura del labio. Y luego la otra.
―Ja, ja…. ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA…!―le dio un violento ataque de risa que lo hacía echar la cabeza hacia adelante y hacia atrás; se le podía ver toda la dentadura hasta la garganta.
La directora se cruzó de brazos, enarcando una ceja y esperó un buen rato hasta que el entrenador terminara de retorcerse.
―Ay…ay…― se sostuvo el estómago con una mano y con la otra se limpiaba una lagrimita.
―¿Ya terminó? Callahan se incorporó con el brillo de la risa aun destellando en sus ojos de topo.
―Escuche, escuche, agradezco su…―miró a los tres chicos―gesto. Pero no puede comparar carne de toro― se dirigió a Harry dándole sonoras palmadas en los músculos del brazo― con carne de pollito bebé― señaló al trio dinámico.
La directora levantó los brazos exasperada.
―Es usted peor que mula. Estos chicos quieren estar en el equipo y como directora de esta institución le ordeno que los acepte.
No, no era cierto. En realidad los chicos habían sido secuestrados de sus salones y llevados ahí en una emboscada.
Callahan hizo una mueca de derrota.
―Pero… ¡Pero aún con ellos no nos completamos!― protestó en un último intento de defensa.
La directora abrió la boca para decir algo pero antes de que pronunciara una sola palabra, una voz se sumó desde atrás.
―Yo jugaré― trece cabezas se giraron y vieron a Magda de pie sobre el césped del campo, con su ojo morado y las manos en los bolsillos de su chamarra. ― Diez más uno son once. Ya estamos completos― dijo encogiéndose de hombros.
_______ no podía creer que estuviera ahí ¿a dónde se había metido todo este tiempo? Estaba muy feliz de verla y que llegara con la iniciativa de participar por su cuenta.
Pero Callahan opinaba diferente.
―Oh, no. Nada de chicas.
―Oiga entrenador― dijo Harry hablándole discretamente a su oído― déjela jugar, ya nos completamos y es muy buena dando golpes…se lo aseguro.
Brandon no contuvo las ganas de intervenir y apartó a Harry de un empujón.
―Oye tú, esto es futbol, no el juego de la casita. Si tanto quieres jugar con muñecas cómprate una Barbie.― Brandon sintió que lo jalaban del brazo con unos flacuchos dedos.
―¿Quién te crees que eres? ¿Eh? Harryes más hombre que tú y Magda más fuerte que tú.
Dios Santísimo ¡____! ¿Qué estaba haciendo _____ en medio de la pelea?
A Harry le empezaba a dar algo, se puso completamente pálido.
―¿Tú que te metes?― le contestó Brandon― Como te llames, ¡eres la mascota! Vamos, ve a rascarte las pulgas a otro lado.― Sintió un dedo golpeteando en su hombro y cuando volteó se encontró con el puño de Harry contra su nariz.
Brandon se tambaleó sosteniéndose la nariz y luego miró a Harry con furia de perro pitbull. Se abalanzó sobre él agarrándolo de los hombros y _____ jaló a Brandon hacia atrás para que lo soltara, inmediatamente después se enzarzaron el resto del equipo hasta formar un círculo totalmente cerrado. Magda corrió a separarlos a golpes haciendo más grande el círculo. Todo era un enredo de brazos y piernas.
―¡Por el amor de Dios, entrenador, haga algo!― le ordenó Foutley.
Edmund se abrazó a sí mismo, el chico gay chilló y el hippie: ―Pero qué fuerte acontecimiento acontecido está aconteciendo…paz hermanos, paz.― dijo con una voz entre aguardentosa y adormilada.
El sonido sostenido del silbato se hizo sonar con fuerza y el entrenador metió los brazos entre la mini guerra.
―¡Ya basta todos! ¡Parecen perros rabiosos de callejón!― los dispersó hasta que se pudo ver a Brandon y Harry en el suelo.― ¡Ustedes dos, de pie! ¡Y formen una fila!― su voz era tan potente y severa como la de un militar, ya sólo faltaba el “Señor, sí señor”
Poco a poco la fila tomó forma, Callahan iba recorriendo cada una de las caras. Harry jadeaba junto a Brandon que tenía el labio partido.
Iba apuntando a cada uno con el dedo mientras decía: ―Te quedas, te quedas, te quedas, te quedas, te quedas, te quedas, te quedas― llegó a Magda― te quedas― llegó a _____ y dejó el dedo suspendido― tú, fuera de aquí― ella abrazó a Magda quien estaba conteniendo su emoción al ser aceptada y salió de la fila.― Y ustedes― Dijo esta vez dirigiéndose al trio― también se quedan. ¡Todos se quedan! Estoy arruinado.
La directora sonrió con malicia y satisfacción. Edmund se encogió de hombros.
―Oh, no, mis uñas― murmuró el gay.
―Que buenos hongos, hermano― dijo el hippie. Los jugadores “legítimos” chocaron las palmas. ________ le dio un breve beso a Harry mientras él chocaba el puño con el de Magda.
Era, sin lugar a dudas, la derrota segura, pero al menos estaban juntos.
- CHICAAAS:
- aqui les dejo el maraton espero que les guste..!!!!
HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
wujuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu amo tanto tu novela ajjajajaajajajaja encerio tu con tus capitulos uffff rayis y hazza son un amorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr wiii y magdaaaaaaa ahi dios esa ujer esta loka pero muy chistosa ajajajajajajajaj siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
pinata123
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
O DIOS TANTOS CAPS ES UN SUEÑO????
pues amo este sueño
GRACIAS!!!
WIIIIIIII LOS CAPS QUE TE DIGO INCREIBLES COMO SIEMPRE!!
*---*
SIGUELAAAAAA
besos honey
xxAndyxx
pues amo este sueño
GRACIAS!!!
WIIIIIIII LOS CAPS QUE TE DIGO INCREIBLES COMO SIEMPRE!!
*---*
SIGUELAAAAAA
besos honey
xxAndyxx
.Sweet Angel.
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Me encantó
Te i loveooo
Siguela pronto
Te i loveooo
Siguela pronto
AnneleStyles
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Hola!
Buenisimo el maraton :D
Seguila pronto!
Besos :)
Buenisimo el maraton :D
Seguila pronto!
Besos :)
Invitado
Invitado
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Me encantó síguela pronto y aaaaaaah no puedo creer que rayis y Harry sean novios:3, y que trae Magda heee?
^_^pocitoLatigable:33
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Amo a Rayita y a Harry
te juro son un amor juntos
Tienes que seguirla
Por cierto, new reader here
Tienes que seguirla eh
O te voy a golpear muy duro
nah no es cierto
Pero si siguela
Besoos
te juro son un amor juntos
Tienes que seguirla
Por cierto, new reader here
Tienes que seguirla eh
O te voy a golpear muy duro
nah no es cierto
Pero si siguela
Besoos
Bianch
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
Ok, estuvo SUPERDUPERFANTABULOSO! :o
sigue que ya quiero saber de doble de Harry y el juego x.x
sigue que ya quiero saber de doble de Harry y el juego x.x
carla
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
mañana la sigo chicas que bueno que les guto el capitulo :3..!!!!
HeavenlyAngel♡
Re: Lo que todo gato quiere (Harry styles y tu) TERMINADA
te esperoHeavenlyAngel♡ escribió:mañana la sigo chicas que bueno que les guto el capitulo :3..!!!!
besos
Bianch
Página 13 de 19. • 1 ... 8 ... 12, 13, 14 ... 19
Temas similares
» Lo que todo gato quiere (Zayn Malik y tú)
» No todo es lo que parece {Harry styles} TERMINADA
» Todo Puede Pasar Harry Styles y TU [TERMINADA]
» Mi Gato ANGUS, Las TANGAS y EL BESO PERFECTO (HARRY STYLES Y TU)
» Lo que ella quiere.{harry styles.
» No todo es lo que parece {Harry styles} TERMINADA
» Todo Puede Pasar Harry Styles y TU [TERMINADA]
» Mi Gato ANGUS, Las TANGAS y EL BESO PERFECTO (HARRY STYLES Y TU)
» Lo que ella quiere.{harry styles.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 13 de 19.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.