Dare to Dream 2: La historia continúa (One Direction)

OMG ola!!!!!
Haha balla historia :)
Yo nunca e tenido unas amigas así :) tan unidas
Que lindo bueno
Haha me dio risa con lo de la foto haha

Jajajaja fue una buena mini-historia para mitigar la desesperación de la gran historia a la que insisten en subir lentamente -.-'

Suelo ser un poco curiosa y por eso quise saber como se conocieron.. Gracias por saciar mi curiosidad :3 y por el mini-adelantito que vino añadido a la mini-historia, creo que hay muchos 'minis' xD (Adivino que el chico que tendrá una vida imposible será... Harry!)

kgñlgagj las leo luego :)

Redoble de tambor (?
Tengo el honor de traerles el primer capítulo de Dare to Dream 2: La historia continua.
Espero que lo disfruten :)

Me miré por última vez en el espejo, controlando que todo estuviese en orden. Salí del cuarto de baño corriendo y entre a mi habitación donde mis mejores amigas me esperaban. Al verlas charlando ansiosamente y dirigiéndole miradas de exasperación a la pequeña netbook supe que no me había perdido de mucho.

- ¿No han dado señales de vida?- pregunte aun sabiendo cual era la respuesta, tome a mi Rupert de la repisa verde y me acomode en la cama, justo en medio de Flor y Naty.

-No, siguen sin aparecer- Suspiro Flor colocando la computadora en mi regazo para facilitarnos la vista a todas. Naty reviso su celular y negó con la cabeza.

- 15 minutos retrasados- anuncio mostrándonos el aparato- Y Liam dijo que era importante.

-MUY importante- Dije haciendo énfasis en la palabra "Muy" justo como lo había hecho Liam en nuestra conversación por twitter- Odio que se hagan los misteriosos-

-¡Los misteriosos se conectaron!- Exclamo Flor corriendo mis manos. Apoyo los dedos en el pequeño cuadradito táctil de la computadora y se apresuro a darle "llamar".

Presione a mi unicornio mas fuerte contra mi pecho y las chicas se acercaron aun más a mis costados dejándome apretujada en el medio. Las tres miramos expectantes la pantalla y sonreímos ampliamente al ver a nuestros chicos aparecer en ella.

Liam, Louis, Harry, Niall, y Zayn nos observaron con enormes sonrisas y unos cuantos gritos de alegría, los últimos dos estaban inclinados detrás de los demás.

-¿Que les sucedió? -Pregunto Naty con tono acusador- Pensé que ustedes eran los puntuales- No pude evitar soltar una carcajada recordando que, en efecto, los chicos se habían proclamado los "puntuales" después de que en la última video llamada nos habíamos retrasado un poco.

-Silencio- exigió Louis con una sonrisa traviesa- … que podríamos cancelar el viaje-

- No me vengas con amenazas Tomlinson- Contraataco Flor aguantando la risa. Fijo su mirada en Zayn y este le guiño el ojo- Tu sabes que no lo harían-

- ¡Oh! El amor- Exclamo Louis negando con la cabeza y ganándose las miradas reprobatorias de todos allí.

-¿Cómo han estado chicas?- Se adelanto Harry empujando a Louis para acaparar la cámara.

-Muy bien, extrañándolos- contesto Naty algo ruborizada, Harry le sonrió con dulzura y al instante fue empujado por Niall desde el fondo.

-¡Niall!- Le regañe, mi irlandés solamente me sonrió inocentemente.

-Es mi turno frente la cámara- se justifico manteniéndose al frente a pesar de los empujones de los chicos- ¿Dónde están? ¿En tu cuarto?-

Al instante fue empujado por Louis y Zayn quienes se sonrieron victoriosos. Mis amigas y yo no pudimos más que soltar un chillido de espanto al ver que Niall contraatacaba tirando a Zayn bruscamente al piso. Y Harry se tiro con ellos para separarlos.

-¡Paren!- Gritaba Flor entre divertida y preocupada por su novio. Naty y yo no podíamos parar de reír, y cuando Louis se tiro con todos ellos mi carcajada se volvió más estridente.

-¡Harry suéltalo! ¡Zayn no! ¡Diablos! ¡Louis ya estas grande! ¡Niall suéltale los pantalones!- Liam gritaba fuera de sí, y con una mirada desesperada tomo la computadora y camino con ella a un lugar apartado de la habitación en la que estaban.

-Liam, quería saber cómo terminaba- le reproche.

-Lo siento, pero hasta que no se calmen no los dejare volver- echó una mirada por encima de la computadora y negó con la cabeza. Luego miro a la cámara de nuevo y nos sonrió - Les tenemos una sorpresa, pero tendré que esperar a que se calmen-

-Oh, -Naty borró la sonrisa.- van a tardar siglos, no es justo.

Pasamos unos 10 minutos hablando tranquilamente con Liam hasta que los chicos terminaron con su batalla en el suelo. Comenzaron a llegar uno a uno y Zayn, que fue el último, venia con la mejilla roja.

-¡Oh dios Zayn! ¿Qué te hicieron?- Flor prácticamente me quito la computadora de las manos y analizo la imagen de su novio para asegurarse de que no tenia mas heridas.

-Son unos animales- les acuso Naty quitándole la computadora a Flor y poniéndola en el medio otra vez- ¿Quién lo hizo?-

Al instante Zayn fulmino con la mirada a Niall, quien inocentemente se encogió de hombros.

-Niall te golpeare- Flor lo miro tan fríamente que hasta a mí se me helo la sangre, pobre de mi novio.

-¿No vas a salvarlo?- Me pregunto Harry. Mire a Niall que me miraba suplicante y luego a mi amiga que no me dirigió una mirada precisamente simpática.

-Niall, te quiero demasiado… pero Flor me da miedo- le dije sonriendo ante las carcajadas del resto. Me acomode en mi lugar y apretuje mas a Rupert contra mi pecho- pero Flor recuerda que esta Rup, no debe quedarse sin padre tan joven-

Flor puso los ojos en blanco, seguramente recordando el hecho de que mi pequeño unicornio era su ahijado y que no podía hacerle daño. Discutimos acerca de eso un rato, en el cual Louis no pudo resistir hacer bromas sobre el nacimiento del pequeño Rupert.

-Suficiente- Liam corto la discusión sobre mi hijo y miro el reloj de su muñeca- nos queda poco tiempo y no les hemos dado la sorpresa, ¿O ya se olvidaron?-

Los chicos se miraron entre ellos y negaron rápidamente. Me puse nerviosa por lo que tenían para decir por lo visto era algo bueno, al menos sus caras me lo demostraban.

-Vamos, hablen- Los apuro Naty apretando mi brazo. Las tres nos miramos y descubrimos la misma ansiedad en los ojos de las otras.

- Bueno resulta que el viaje se adelanto- comenzó Harry con su típica voz pausada. Las tres nos quedamos sin aire. Flor se tapo la boca con la mano- llegamos el 20 de octubre-

Pasaron unos 3 segundos en los que mi mente comenzó a repasar las fechas. Y me quede petrificada hasta que el grito de Flor confirmo mis sospechas.

-¡Es en dos días!- exclame me voltee buscando la mirada de mis amigas. Las tres nos miramos y comenzamos a gritar.

La habitación no se calmo hasta que mi mamá se asomo por la puerta con una expresión de espanto y enojo. Nos calmamos al instante, y mágicamente los chicos también del otro lado de la pantalla. Hablamos por un par de minutos donde nos contaron los detalles del viaje y el hotel donde se hospedarían, el cual quedaba a solo unas calles de la escuela de Flor.

Cuando se termino la conversación, los despedimos un poco más felices de lo que lo habíamos hecho las veces anteriores. Las siguientes horas que las chicas permanecieron en mi casa nos la pasamos haciendo planes para la estadía de los chicos en Argentina. Analizamos los pros y los contras de los lugares a los que los llevaríamos, las personas que les presentaríamos y los horarios en los que podríamos estar con ellos.

Me arroje en la cama y cerré los ojos. Las chicas se habían ido pero podía escucharlas aun y sobretodo podía adivinar lo que estaban pensando en ese momento. Lo mismo que yo. Dos días.


La mañana del sábado fue una de las más largas de mi vida. Arreglando mi cuarto, tomando el desayuno, bañándome. Mientras las malditas horas pasaban cada vez más lentas. Faltaba muy poco tiempo para ver a mis chicos pisando el suelo mendocino, y como regalo sorpresa los encontraríamos en el aeropuerto. El padre de Naty nos llevaría a las tres, no quedaba muy lejos de mi casa, así que iba a ser la última en ser recogida. Me daba tiempo para arreglarme más veces y entrar en desesperación.

Finalmente el timbre de mi casa sonó y me apresuré a despedirme de mi madre y mi hermana. El frente de mi casa era un pasillo largo y terminaba en el enorme portón grisáceo-azulado con ventanillas naranjas. Asome mi cabeza por una de las ventanas para confirmar que era mi amiga y no un asesino serial. Como imaginé Naty me sonreí desde el otro lado y de fondo puede ver al auto esperando por nosotras. No tarde mucho en salir y entrar al auto con Naty, donde Flor ya estaba acomodada. Un saludo al padre de Naty y el auto arranco hacia donde sería el encuentro más esperado del año.

Media hora. Media hora de espera en aquel enorme lugar.
Ya estaba más que acostumbrada a las esperas, sobre todo en aquel aeropuerto mendocino al que conocía de punta a punta, mi padre viajaba un año por medio a Alemania y había ido tantas veces a despedirlo y a recibirlo que aquel lugar ya era una segunda casa para mí.

Flor estaba impaciente, por supuesto sin perder la compostura pero impaciente de cualquier modo. Naty también lo estaba se movía de lado a lado en el asiento de espera.

Comencé a dar vueltas alrededor de las filas de asientos, ganándome una mirada de reproche de parte de mis amigas. La tensión era notoria sobre todo al pensar que ni siquiera sabíamos en que vendrías. Si, en avión. Pero ¿Vendrían en un avión normal? ¿En un jet privado como en las películas? Aun siendo novia de Niall el mundo de la fama era totalmente desconocido para mi, y n dudaba que lo mismo les pasaba a Flor y Naty.

De repente anunciaron que el vuelo de las 14.15 estaba aterrizando en ese momento. Era el de los chicos, o al menos era la hora en la que Paul nos anuncio que iban a llegar. Los chicos no sabían que estaríamos allí.

Mis amigas se pararon bruscamente y fijaron la vista en la puerta en la que saldría la gente que llegaba, me acerque a ellas.

-Todavía hay que esperar a que bajen del avión, si es que están en el- anuncie, las dos voltearon al escucharme, Flor hizo una mueca de fastidio.

-Lo sé tonta, espero que vengan en ese- estrujo la tira del bolso floreado que había traído, se lo quite de las manos y me fije en el contenido.

-Todavía no los vamos a sacar- me advirtió Naty con una sonrisa, había adivinado mis intenciones.

-Si, pero…- mire ansiosa a mis amigas- ¡Ya quiero que lo vean!- di unos saltos de emoción

- Yo también, nos van a odiar- rio Flor recuperando su bolso y colgándoselo en el hombro.

-Fue toda idea de ustedes- Como siempre que hacíamos una travesura, Naty salía a defenderse antes de tiempo. Las tres nos reímos. Y entonces la gente se amontono alrededor de una de las puertas. Dejamos de reír.

Flor se adelanto a donde estaba la gente y estiro el cuello para ver mejor. Se volteo y nos hizo una seña para que fueranos. Al parecer la gente estaba llegando.

Pasaron 15 minutos hasta que la gente comenzó a salir, sacamos los carteles que habíamos preparado para los chicos y los sostuvimos en el aire. Mi corazón latía muy rápido, no podía dejar de mover mis pies y ni siquiera podía hablar con mis amigas, la espera estaba siendo insoportable. Veía caras de gente extraña salir y rencontrarse con sus respectivas familias o amigos. Y cuando estaba a punto de decirle a Flor lo impaciente que estaba, vi una cabellera rubia, seguida de rulos, y otras tres cabelleras que jamás podría confundir.

Los chicos lucia renovados, casi como espejismos entre la gente, me parecieron mas jóvenes, mas imposibles que la última vez. Podría jurar que Niall estaba más guapo que antes, si es que era posible.

Ellos sin saber de nosotras caminaron entre la gente, haciéndose paso hacia la salida.

-¡Chicas se nos van!- exclamo Flor de repente. Desperté del ensoñamiento y me di cuenta de que las tres nos quedamos en shock y los chicos ya se disponían a irse.

Las tres largamos una carcajada ante nuestra torpeza y corrimos hacia ellos más felices que nunca. Hasta que los alcanzamos y vimos que se habían detenido a firmar algunos autógrafos a un grupo de chicas que los habían interceptado en su huida. Las estudie con la mirada y sentí rechazo al ver las sonrisas poco inocentes que les dedicaban.

-¿¡No nos van a saludar!?- Exclame con una sonrisa exageradamente grande. Los cinco y las cuatro chicas se voltearon.

Las caras de los chicos al vernos fue de inmenso shock, sin duda no se lo vieron venir, luego soltaron un grito de alegría. Niall, Zayn, Harry corrieron a nuestro encuentro. Louis y Liam terminaron de autografiar rápidamente a las no muy contentas chicas.

Me abalancé a los brazos de Niall olvidando por completo el cartel y dejándolo caer al suelo. Sentir el calor de sus brazos alrededor de mi cuerpo no tenia precio. Sus labios no tardaron en posarse sobre los míos, y apenas lo hicieron sentí que se detenía el tiempo, que los meses que pase sin el eran un sueño y que por fin regresaba a mi realidad. Sentí como acariciaba mi cabello y nos separamos un poco.

-Te dije que nos veríamos- me susurro mientras estudiaba mi rostro. No pude contestarle, la emoción era más fuerte de lo que pensé y no me dejaba hablar.

Nos besamos una vez más y sin deshacer el abrazo nos volteamos a ver al resto.

Naty y Harry estaban enzarzados en un beso en el que podía apostar que era Harry el que no la dejaba separarse. Flor abrazaba a Liam y le besaba la mejilla a Louis, Zayn le sostenía la mano fuertemente. Le indique a Niall que me soltase para ir a saludar, de mala gana lo hizo.

Prácticamente salte sobre Zayn en un abrazo asfixiante y despeine su cabello violentamente por lo que me gané unas cuantas maldiciones del moreno y un beso en la mejilla un poco más doloroso de lo que podría haber imaginado.

-Matador de mejillas- le acuse con voz de niña pequeña. Hizo un gesto de burla y le saque la lengua. Luego abrace a Liam y le bese la mejilla cariñosamente e hice lo mismo con Louis, solo que esta vez me elevo un poco del suelo con el abrazo.

-¿Qué es esto?- Volteamos para ver a Niall que se acercaba con el ceño fruncido, sostenía el cartel que deje caer en nuestro encuentro y lo extendió para que lo leyéramos. El cartel era verde y en el centro tenía en letras grandes “Te amamos Liam” y en letras peñas en la parte inferior “¿Quién demonios es Harry?”

No pude aguantar la carcajada y Flor tampoco así que estallamos al mismo tiempo. Zayn saco del bolso de Flor su cartel que decía “Liam es el mejor” en lentejuelas brillantes. Todos reímos excepto Niall y Zayn que negaban con las cabezas exasperados.

-¿Qué sucede?- pregunto Harry llegando con Naty tomada de la cintura y sonriendo de oreja a oreja.

-¿Terminaron con la luna de miel? ¡Ahora dámela!- Naty rio y se arrojo a los brazos de Louis media llorosa.

-No te emociones tanto porque… ¡Hey! ¿Quién hizo ese cartel?- Los ojos de Harry se posaron en la cartulina verde que Niall aun sostenía- ¿¡Como que “¿Quién es Harry?”?! -Y de inmediato me miro acusadoramente.

-¿Por qué piensas que fui yo?- exclamé ofendida, al instante todos me miraron fijamente- son malvados.

Las risas y juegos siguieron el resto del día, sin duda este sería otro verano perfecto.



- ¿No han dado señales de vida?

Katy entró a su habitación y Naty y yo la miramos con resignación. Esperábamos a que los chicos se conectaran en skype. Ellos mismo habían organizado que hiciéramos esa video-llamada y ya me estaba estresando el hecho de que ellos estuvieran llegando tarde.

-No, siguen sin aparecer.- Dije finalmente con un suspiro, mirando fijamente el logo en gris de sus cuentas. Tal vez así lograría que mágicamente se tornaran verde y los chicos se conectaran.

- Quince minutos retrasados… y Liam dijo que era importante.- “Gracias Naty por el recordatorio”, aquello tan sólo me ponía más nervosa.

-MUY importante.- Repitió Katy remarcando la primera palabra justo como Liam lo había hecho.-Odio que se hagan los misteriosos.

Me preparaba para coincidir con mi mejor amiga cuando de pronto vi que, efectivamente, la cuenta de Liam cambiaba su color y aparecía como conectada. La adrenalina me subió de golpe y se me aceleró el pulso.

-¡Los misteriosos se conectaron!- Exclamé sin previo aviso y al momento hice clic en “llamar”. Apenas unos segundos después veíamos en la pantalla a nuestros chicos.

Les di una mirada a todos, fijándome en cualquier tipo de cambio que hubiera ocurrido en su imagen y luego me dediqué de lleno a observar a Zayn. Tenerlo así, tan cerca y tan lejos a la vez dolía aún más de lo que había imaginado.

Como adivinando mi pensamiento me sonrió y eso bastó para hacerme sentir un poco mejor

-¿Que les sucedió? Pensé que ustedes eran los puntuales.- Fue el saludo de Naty.

-Silencio, que podríamos cancelar el viaje.- Creo que las tres miramos a Louis con la misma incredulidad.

- No me vengas con amenazas Tomlinson. Tú sabes que no lo harían- Le eché en cara, al tiempo que miraba una vez más a Zayn y él ampliaba su sonrisa y me guiñaba un ojo. Sentí que me derretía por dentro.

- ¡Oh! ¡El amor!- Exclamó Louis, ganándose la mirada de reprobación de todos.

-¿Cómo han estado chicas?- Harry se acercó más a la cámara y sonrió encantadoramente.

-Muy bien, extrañándolos.- Natalí se puso un poco roja y sus ojos se mantuvieron fijos en las facciones de su novio que la miraba de igual forma.

Pero de pronto Niall empujó a Harry, tomando su lugar frente a la cámara.

-¡Niall!- Katy lo regañó mientras los chicos y yo nos reíamos.

-Es mi turno frente la cámara- Fue toda su justificación.- ¿Dónde están? ¿En tu cuarto?

No nos dieron tiempo de responderle que Louis y Zayn ya lo habían empujado fuera de nuestra vista. El irlandés se levantó y contraatacó a mi novio, tirándolo al suelo y haciendo que nosotras gritáramos un poco asustadas. Luego Harry se tiró al piso también, para separarlos, pero de alguna manera terminó también en la pelea.

-¡Paren!- Gritaba sintiéndome bastante impotente y bastante preocupada por el resultada de aquella pequeña lucha.

-¡Harry suéltalo! ¡Zayn no! ¡Diablos! ¡Louis ya estás grande! ¡Niall suéltale los pantalones!- En otra situación los gritos de Liam habrían sido totalmente divertidos, pero supongo que la preocupación era mayor en ese momento, aunque por parte de Katy pude escuchar que reía un poco.

Apenas unos segundos después, Liam tomó la computadora y la alejó de sus amigos, quitando la pelea de nuestra vista.

-Liam, quería saber cómo terminaba.- Miré a Katy no justamente con cariño y ella sólo se encogió de hombros.

-Lo siento, pero hasta que no se calmen no los dejare volver.- Suspiró un poco frustrado.-Les tenemos una sorpresa, pero tendré que esperar a que se calmen…

-Oh, van a tardar siglos, no es justo.- Se quejó Naty y Liam rió con nosotras.

Estuvimos hablando por un buen rato hasta que los chicos comenzaron a volver de a uno luego de la batalla. El último en volver a escena fue Zayn y mis ojos se abrieron de par en par al ver su mejilla enrojecida por algún golpe o algo por el estilo.

-¡Oh dios Zayn! ¿Qué te hicieron?- La quité la computadora a Katy y acerqué mi rostro a la pantalla, en busca de cualquier otro tipo de herida.

-Son unos animales- Naty me quitó la computadora y la volvió a colocar en el medio. Por mi parte seguía mirando a Zayn esperando encontrar algún otro golpe.- ¿Quién lo hizo?

Al momento mi novio miró asesinamente a Niall y me encargué de fulminarlo con la mirada.

-Niall te golpeare.

-¿No vas a salvarlo?- Preguntó Harry probablemente refiriéndose a Katy.

- Niall, te quiero demasiado… pero Flor me da miedo.- Miré a mi amiga con enojo, aunque en realidad había sido un intento de mirada cómplice. – Pero Flor recuerda que está Rup, no debe quedarse sin padre tan joven.- Puse los ojos en blanco. Supongo que quedaría mal que una madrina dejara sin padre a su ahijado.

El comentario de Katy desató una ronda de bromas sobre la concepción y el nacimiento del pequeño peluche unicornio, la cual fue cortada finalmente por Liam.

-Suficiente, nos queda poco tiempo y no les hemos dado la sorpresa, ¿O ya se olvidaron?- Ese comentario bastó para volver a ponernos nerviosas.

-Vamos, hablen.- Los apuró Naty.

- Bueno resulta que el viaje se adelanto.- Comenzó Harry. Sentí como mi corazón martilleó fuertemente contra mis costillas.- Llegamos el 20 de octubre.

Creo que me tomó apenas unos segundos caer en la cuenta de que estábamos a 18 de octubre y en ese momento el shock de lo que Harry acababa de decirnos me dejó sin habla. Dejé finalmente escapar un grito de emoción.

-¡Es en dos días!- Gritó Katherina totalmente fuera de si y al momento todos nos sumamos al festejo.

Comenzamos a gritar y a festejar y a hacer escándalo y no nos hubiéramos callado de no ser por la madre de Katy que vino a pedirnos que hiciéramos silencio con cierta cara de preocupación.

Para intentar calmarnos comenzamos a preguntar cosas sobre el vuelo y dónde se hospedarían. Casi muero cuando me dijeron que se quedarían en el Hotel Diplomatic, que estaba a tan solo cuatro cuadras de mi escuela. Mi cabeza no paraba de maquinar ideas para aprovechar lo más posible mis horarios.

Cuando la conversación con los chicos terminó nos quedamos largas horas planeando con las chicas mil cosas para hacer, mi lugares que mostrarles a los chicos y recordándonos a cada minuto que aquello no era un sueño.

Cuando a fin mi papá me fue a buscar me preguntó por qué estaba tan feliz y lo único que pude hacer fue reír, aquello era tan increíble que temía que si lo ponía en palabras mágicamente despertara de un sueño.



La noche antes de que llegaran los chicos me las pasé dando vueltas en mi cama. La ansiedad, los nervios, la alegría y muchas otras emociones eran demasiado intensas como para que pudiera dormir tranquilamente.

Finalmente logré dormir unas pocas horas y al levantarme el ambiente un poco tenso en mi casa me hiso recordar de alguna forma al día en que viajamos hacia Londres, el día donde comenzó toda aquella locura.

Pero por supuesto, el nerviosismo de mi madre esa mañana no se relacionaba en nada con el de casi un año atrás. Ahora no le preocupaba que fuera a alejarme sino que se trataba la idea de que mi novio inglés por fin pasaría de ser más meras conversaciones virtuales para ser un novio real, presente, que podía venir a visitarme todos los días.

Y supongo que el mayor problema de todo no era que Zayn fuera mi novio y los chicos mis amigos. A mi madre lo que le picaba era el hecho de que fueran ingleses, y a mí me constaba que eso era así desde que me hice directioner.

Mi mamá, como casi todos en mi familia materna, tenía un desagrado (si no es que odio) por los ingleses. Una vieja “costumbre” de gran parte de mi país, producto de una guerra entre Argentina e Inglaterra allí por el 1982.

Aunque sabía lo terrible que había sido la guerra de Malvinas para mi país, no entendía ese odio y ese rechazo, aún menos a personas que ni siquiera tenían planes de nacer en la época de la guerra.

Pero esa era la realidad, y yo no podía hacer nada para cambiar ni el pasado de mi país ni lo que sentía por Zayn y los chicos. Así que básicamente olvidé el tema, ignoré el trato frío de mi madre y me concentré en distraerme para que el tiempo hasta la hora de irme se me pasara más rápido.

El papá de Naty nos llevaría al aeropuerto. Por lo que luego de una interminable mañana donde intenté releer todos mis libros sin éxito, casi salté de alegría a escuchar el timbre y al ver a mi amiga esperándome en la vereda.

Me despedí de todos rápidamente y en cuanto subí al auto arrancamos y fuimos a buscar a Katy que era la que vivía más cerca del aeropuerto. Supongo que fue debido a los nervios y la ansiedad, pero apenas si cruzamos palabras con Naty en toda es aparte del viaje. Aunque cada tanto nos mirábamos cómplices y reíamos por bromas subliminales que sólo nosotras (y Katy) entenderíamos.

Pocas veces había ido al aeropuerto y aún menos habían sido las veces en las que esperara a alguien que llegara en un vuelo desde tan lejos y por una ocasión tan importante.

Tenía los nervios de punta y revisaba como posesa el celular cada dos minutos sólo para comprobar que los segundos habían decidido correr más lento sólo para desesperarme aún más. Trataba de respirar profundo y tranquilizarme, concentrarme en una revista cualquiera que había traído para pasar el rato y simular que no estaba tan ansiosa como me sentía.

Natalí a mi lado parecía estar en igual estado y se movía cada tanto en su asiento, como si no pudiera aguantarse el quedarse quieta esperando.

De pronto Katy se levantó y comenzó a caminar alrededor de los asientos y cada vez más lejos. Le dediqué una mirada de reproche, advirtiéndole que no se alejara mucho. Sí, era Mendoza y estábamos en un pequeño y estúpido aeropuerto, pero aún así necesitaba saber que tenía a mis amigas a la vista, sanas y salvas.
De pronto anunciaron la llegada de un vuelo. Mi corazón se aceleró un poco. Paul había dicho que llegarían alrededor de las catorce horas. Ese podría ser el avión de los chicos.

Al momento me puse en pie y me acerqué a la puerta por la que saldrían los pasajeros. Naty se levantó casi a mi vez y un segundo después se nos sumó Katy.

-Todavía hay que esperar a que bajen del avión, si es que están en el- Miré a Katy con fastidio.

-Lo sé tonta, espero que vengan en ese.- Mentalizarse era el primer paso para atraer las cosas que quieres a la realidad. Si me paraba a esperar a los pasajeros de ese vuelo tal vez tendría la suerte de que el destino quisiera que ese fuera su vuelo. Sentí de nuevo la ansiedad apremiando a mi pobre corazón y para tranquilizarme apreté la correa de mi bolso, el cual Katy me quitó.

-Todavía no los vamos a sacar.- Le advirtió Naty sonriendo.

-Sí, pero…-Nos miró con una sonrisa traviesa.- ¡Ya quiero que lo vean!- Las tres reímos.

- Yo también, nos van a odiar.- Recuperé mi bolso y volví a acomodarlo sobre mi hombro derecho.

-Fue toda idea de ustedes.- Y allí salía Natalí defendiéndose incluso antes de que hubiéramos hecho nuestra pequeña broma y haciéndonos reír a carcajadas.

De pronto vimos como la gente se amontonaba junto a la puerta de arribo y al momento quedamos completamente serias. Me adelanté estirando el cuello para ver algo por sobre las cabezas de todas las personas. Les hice una seña a las chicas para que se acercaran.

Cuando los pasajeros empezaron a salir tomamos nuestros carteles de mi bolso e intentamos con todas nuestras fuerzas parecer normales.

Nos habíamos quedado en completo silencio, demasiado nerviosas y ansiosas como para destrabar cualquier palabra de nuestras gargantas. Tomó un buen rato que el tumulto de gente comenzara a disiparse, y justo cuando comenzaba a sentirme decepcionada porque los chicos no venían, mi corazón pegó un saltó y comenzó una carrera de latidos como si quisiera salirse de mi pecho.

Allí estaban, los cinco, tan guapos y tan irreales que no parecían encajar en la desteñida realidad de Mendoza. Era como si los hubieran recortado de los posters de las revistas y los hubieran pegado por la fuerza en aquél diminuto aeropuerto. No tenía sentido, no terminaban de encajar, pero allí estaban ellos. Y eran tan reales que me costaba respirar y procesar que no estaba soñando. Tan reales que mis músculos dejaron de responder y mi corazón incluso amenazó con detenerse agobiado por tantas emociones.

Pero de pronto vi como sus siluetas seguían avanzando y como los cinco hablaban entre risas y caras de sueño, derecho hacia la salida. No nos habían visto y estaban por irse. De un golpe desperté de mi ensoñación.

-¡Chicas se nos van!- Grité desesperada, haciendo que mis amigas saltaran y volvieran también a la realidad.

Al momento reímos como tontas al darnos cuenta que seguíamos siendo unas fanáticas sin remedio y comenzamos a correr hasta ellos.

Los alcanzamos cerca de las puerta de vidrio de entrada, donde se habían detenido a firmar unos autógrafos a unas chicas un poco menores que nosotras. Las miré un segundo y sus expresiones me causaron risa y también un poco de celos al ver como la más alta miraba a Zayn.

-¿¡No nos van a saludar!?- Gritó Katy de pronto, haciendo que los chicos voltearan sin entender nada y las fans nos miraran con cara no muy amistosa.

Me habría gustado poder grabar las caras de los chicos al vernos, no tenían precio alguno. Verdaderamente los habíamos sorprendido. Cuando salieron del shock inicial gritaron en forma de festejo.

Pero por mi parte no podía esperar más. Eché a correr y en menos de dos segundos deshice los pocos metros que me separaban de Zayn, colgándome de su cuello y enterrando mi rostro en su cuello. Al momento sus brazos rodearon mi cintura con fuerza y fue como si después de muchos meses me volviera a sentir cien por ciento completa.

No supe cuándo ni por qué empecé a llorar, pero cuando alcé mi rostro para besar a Zayn, él primero se tomó el trabajo de secar mis lágrimas con una sonrisita embobada, como si tampoco creyera que al fin nos estábamos viendo después de tanto tiempo.

Luego tomó mi rostro entre sus manos y me besó, suavemente al principio y luego más y más desesperadamente. Era un beso que sabía salado a lágrimas de alegría y dulce a reencuentro. Dejé vagar mis manos por su cabello azabache y cuando nos separamos recorrí con las yemas de los dedos cada centímetro de su rostro, para asegurarme de que de verdad estaba conmigo y no era otro sueño.

Nos sonreímos un momento y luego volví a abrazarlo fuertemente. No necesitábamos palabras, de hecho estaba harta de escribirlas y pronunciarlas. Tan sólo necesitaba sentir su abrazo y ya podía estar en paz.

Más por educación que por querer apartarme de mi novio, terminé el abrazó y me acerqué a saludar a Liam y Louis. Al primero lo abracé con fuerza y éste me levantó un poco del suelo entre risas. Luego me acerqué a Louis y mientras bromeábamos y decíamos estupideces, como si los meses de separación nunca hubieran existido, Zayn tomó con fuerza mi mano y yo le devolví un suave apretón.

Al momento vi como mi mejor amiga básicamente saltaba sobre mi novio y lo solté para que pudieran saludarse más cómodamente. Al momento me giré hacia Niall que me sonreía como un niño pequeño. Hundí mi cara en su pecho y él rodeó mis hombros con fuerza.

En cuanto nos separamos empezamos a hablar de cualquier cosa hasta que el rubio se distrajo con el cartel verde de Katy que había quedado en el suelo.

-¿Qué es esto?- Niall tomó el cartel y al extenderlo se leía “Te amamos Liam” y en letras peñas en la parte inferior “¿Quién demonios es Harry?”

No pudimos contener la risa y los chicos nos miraron sin entender qué había sucedido. Zayn tomó el cartel que había guardado en mi bolso el cual era morado y decía “Liam es el mejor” en lentejuelas brillantes. Allí todos explotamos en risas menos Niall y Zayn que nos miraban exasperados.

-¿Qué sucede?- Harry y Naty llegaban con sendas sonrisas y el primero abrazando por la cintura a mi amiga.

-¿Terminaron con la luna de miel? ¡Ahora dámela!- Naty rió y dejó que Louis la abrazara fuertemente.

-No te emociones tanto porque… ¡Hey! ¿Quién hizo ese cartel?- Harry miraba el cartel en manos de Niall y luego a nosotras acusadoramente- ¿¡Como que “¿Quién es Harry?”?!

Finalmente le dedicó una mirada de odio a Katy.

-¿Por qué piensas que fui yo?- Exclamó mi amiga ofendida y todos la miramos burlonamente. Saltaba a la vista quién había ideado la broma.- Son malvados.

Luego nos marchamos en la camioneta que había contratado Paul y el viaje hasta le hotel fue exactamente como si aún estuviéramos en Londres, como si nunca hubiera pasado un invierno desde la última vez que nos vimos. Todo volvía a ser como antes, y sería otro verano perfecto.



Trataba de no mirar demasiado la pantalla para no impacientarme más de lo que ya estaba, pero era inevitable: mis ojos volaban a esta constantemente esperando encontrarse con alguna especie de señal o lo que sea.

-¿No han dado señales de vida? –dijo Katy entrando en su cuarto, tomando de pasada a Rupert.

-No, siguen sin aparecer –le contestó Flor y puso la computadora en las piernas de Katy, que se había sentado en medio de nosotras. Revisé el celular por millonésima vez.

-Quince minutos retrasados. Y Liam dijo que era importante –comenté un poco para mí misma, pero no pude evitar decirlo en voz alta, como si eso fuera a apresurar a los chicos.

-MUY importante –Katy enfatizó el “muy” lo que sólo sirvió para que volviera a fijar la vista en la pantalla –Odio que se hagan los misteriosos.

-¡Los misteriosos se conectaron! –exclamó Flor de repente y a la velocidad de la luz presionó la opción de llamar.

Apenas unos segundos después, los cinco aparecieron en la pantalla. Me quedé congelada por medio segundo demasiado emocionada por verlos de nuevo, aunque fuera a través de la pantalla, y luego me sumé a los gritos de entusiasmo de mis amigas.

Los miré sonriente a cada uno, mirándolos a todos al mismo tiempo tratando de abarcarlo todo, hasta que me quedé más tiempo del necesario mirando la sonrisa de Harry en cuanto me topé con él, quien me observaba fijamente, lo que hizo que apartara un poco la vista y volviera a fijar mi atención en los cinco al mismo tiempo.

-¿Que les sucedió? Pensé que ustedes eran los puntuales –los acusé. Lo dije sin pensar, pero se merecían el comentario después de que en la última charla se habían divertido tanto con nuestra tardanza.

-Silencio, que podríamos cancelar el viaje –dijo Louis amenazadoramente. Puse los ojos en blanco: cada vez que hablaba con él decía lo mismo, al principio lo miraba enojada por siquiera atreverse a decir eso pero ahora ya no le daba importancia.

-No me vengas con amenazas, Tomlinson. Tú sabes que no lo harían –le recordó Flor y buscó la confirmación en Zayn, quien le guiñó un ojo cómplice.

-¡Oh! ¡El amor! –exclamó Louis exageradamente.

-¿Cómo han estado, chicas? –preguntó Harry empujando a Louis para ubicarse frente a la cámara.

-Muy bien, extrañándolos –contesté con sinceridad. Harry me sonrió dulcemente y se quedó mirándome por un segundo. Literalmente, fue sólo un segundo, ya que en ese instante Niall lo apartó de nuestro campo de visión y nos sonrió inocentemente desde el otro lado de la pantalla.

-¡Niall! –lo regañó Katy.

-Es mi turno frente a la cámara –se excusó él -¿Dónde están? ¿En tu cuarto?

Y entonces Niall desapareció empujado por Louis y Zayn, quienes creyéndose victoriosos, bajaron la guardia. Niall se aprovechó de esto y se abalanzó sobre Zayn tirándolo al piso. Harry se arrojó sobre ellos con intención de “separarlos” –aunque estaba segura de que simplemente no quería quedar fuera del juego– y se nos escapó un grito al escuchar el ruido sordo de ellos chocando contra el piso cuando Louis se lanzó sobre ellos.

-¡Paren! –exclamó Flor en un intento de desviar la atención de los chicos hacia otra cosa que no fuera su pelea.

-¡Harry suéltalo! ¡Zayn no! ¡Diablos! ¡Louis ya estas grande! ¡Niall suéltale los pantalones! –Liam les gritaba tratando de hacer uso de su autoridad como el responsable de esos cuatro, pero los ellos ni siquiera se detuvieron a mirarlo.

Al final, resignado a que no se detendrían hasta parar, Liam tomó la computadora y se alejó de ellos, quitando de nuestra vista lo poco que podíamos ver de la confusa pelea.

-Liam, quería saber cómo terminaba –reprochó Katy yo asentí de acuerdo con ella.

-Lo siento, pero hasta que no se calmen no los dejaré volver –Liam miró por encima de la computadora entre indignado y divertido y luego negó con la cabeza–. Les tenemos una sorpresa, pero tendré que esperar a que se calmen.

-Oh –mi expresión cambió en menos de un segundo –No es justo, tardarán siglos –me quejé.

Nos quedamos charlando con Liam hasta que luego de unos diez minutos, uno a uno los chicos empezaron a llegar. Zayn fue el último en aparecer, me fijé bien y noté que venía con una marca roja en la mejilla, iba a preguntarle qué fue lo que le habían hecho pero para entonces Flor también lo había notado y le había arrebatado la computadora a Katy.

-¡Oh Dios Zayn! ¿Qué te hicieron? –Flor tenía el rostro cerca de la pantalla, buscando cualquier otra clase de herida en Zayn.

-Son unos animales –declaré. Le quité a Flor la computadora y la volví a dejar en el regazo de Katy– ¿Quién lo hizo? –pregunté, aunque no sé por qué, ya tenía una sospecha.

Zayn miró a Niall en toda respuesta y yo celebré mentalmente mi acertada conjetura, mientras que Flor miraba al rubio de una manera no precisamente bonita.

-Niall te golpearé –fue todo lo que dijo.

-¿No vas a salvarlo? – le preguntó Harry a Katy. Ella le devolvió la mirada a su novio con un poco de resignación al notar la mirada molesta de Flor sobre ella.

-Niall, te quiero demasiado… pero Flor me da miedo –dijo Katy provocando la risa general y luego añadió:– Pero Flor recuerda que esta Rup, no debe quedarse sin padre tan joven.

Flor puso los ojos en blanco y mi mirada voló hacia la sonrisa traviesa de Louis, quien ya había notado la oportunidad que se le presentaba de poder molestar un poco a la parejita, y naturalmente, se desató el debate sobre el nacimiento del pequeño unicornio, que Liam tuvo que dar finalizado luego de un rato.

-Suficiente, nos queda poco tiempo y no les hemos dado la sorpresa, ¿O ya se olvidaron? –dijo él mirando su reloj.

Los chicos negaron con la cabeza, mirándose entre ellos con complicidad, mientras que la ansiedad volvió a apoderarse de nosotras.

-Vamos, hablen –dije impaciente. Miré a las chicas y estaban igual de expectantes que yo.

-Bueno resulta que el viaje se adelantó… -comenzó a decir Harry a una velocidad equiparable a la de un caracol. Ya me burlaría de él luego. Las tres contuvimos la respiración–: Llegamos el 20 de octubre.

Dos días.

Eso era en dos días.

¡Dos días!

Eso era imposible.

Si pudiera describir ese momento en un tweet sólo sería: asdfghjkl.

Dos días.

-¡Es en dos días! –Katy por fin lo dijo en voz alta.

No pudimos evitarlo. Nos pusimos a gritar, reír e interrogarlos todo al mismo tiempo, tanto fue el escándalo que la madre de Katy tuvo que venir a ver qué nos sucedía y decirnos que hiciéramos silencio.

En cuanto nos despedimos de los chicos hicimos mil planes para su llegada, casi parecía como si fueran a cruzar nuestra puerta como tantas veces habían hecho en Londres.

En nada volverían a estar de nuevo con nosotras.

Sólo faltaban dos días.



Como suele pasar cada vez que sucede algo importante –y casi todos los días, en realidad– yo soy la primera en despertar en casa.

Mi mamá se levantó un momento después de mí y me ayudó con el desayuno. Estaba tan tranquila. No la entendía. O mejor dicho, ella no me entendía en ese momento. Como si yo no estuviera haciendo el desayuno para todos simplemente porque en un par de horas iríamos al aeropuerto a buscar a buscar cinco chicos, entre ellos uno que resultaba ser mi novio, que eran nada más y nada menos que una banda mundialmente conocida.

Lo que pasaba todos los días, claro.

La monótona tranquilidad de mi familia me alteraba, así que me alejé de todos para terminar de prepararme. Para ellos nada pasaba, lo único que los preocupó fue lo de Harry, (a lo que mi padre se mostraba todavía un poco receloso, porque, bueno era famoso y todo eso… básicamente me dieron “la charla”), pero más allá de eso, todo seguía igual.

El vuelo de los chicos llegaba a las 2.15pm, así que con mi papá salimos un rato antes de la una a buscar a las chicas. Él sólo nos llevaría al aeropuerto, porque según habíamos hablado con Paul, podríamos volver con ellos y probablemente acompañarlos al hotel un rato.

Primero fuimos por Flor y luego por Katy –al fin me encontraba con gente que comprendía por lo que estaba pasando– y todo el viaje estuvo lleno de silencios, miradas y sonrisas cómplices y apenas un par de comentarios en voz baja, todo lo contrario a lo que mi papá esperaba.

Nos despedimos de él en el aeropuerto, un lugar totalmente desconocido para mí. Sólo faltaba media hora para que anunciaran el vuelo. Media hora.

Cada una se impacientó cómo más le gustaba: Katy daba vueltas alrededor de las sillas, alejándose cada vez más de nosotras, Flor miraba el celular cada medio segundo y cada tanto se removía inquieta en su asiento, yo estaba igual que ella sólo que la añadía el cruce compulsivo de dedos, las respiraciones honda y contenidas, y mover las piernas como si tuviera alguna clase de tic nervioso.

Anunciaron la llegada del vuelo. Flor y yo nos paramos como resortes y Katy apareció junto a nosotras en un segundo, pero yo tenía la vista puesta en la puerta por la que llegarían los pasajeros.

-Todavía hay que esperar a que bajen del avión, si es que están en él –dijo Katy. Flor la miró e hizo una mueca.

-Lo sé tonta, espero que vengan en ese –respondió apretando la tira de su enorme bolso. Katy se lo arrebató de las manos y vi en su cara todos sus planes.

-Todavía no los vamos a sacar –le recordé divertida.

-Sí pero… ¡Ya quiero que los vean! –Katy dio un par de saltos. Esta era la segunda cosa que más la entusiasmaba de la llegada de los chicos.

-Yo también, nos van a odiar –dijo Flor. Eso tenía bastante de cierto.

-Fue todo idea de ustedes –mascullé. Era la constatación de un hecho. Ellas se rieron de mí como siempre que me ponía a la defensiva ante sus planes, y al final terminé por reírme con ellas.

Entonces la gente comenzó a amontonarse en las puertas. Flor se acercó a la muchedumbre para ver mejor y nos hizo señas para que fuéramos con ella. La impaciencia me ponía los nervios de punta. Esperaba verlos aparecer detrás de alguna persona pero por un rato que pareció eterno sólo nos vimos rodeadas de desconocidos.

Entonces los vimos, y todo pareció borrarse. Por un segundo todo lo vivido pareció una fantasía y volvieron a parecerme tan imposibles como antes. En ese segundo de duda llegué a preguntarme qué estaban haciendo allí, tan o más atractivos que en mis posters, en ese aeropuerto en Mendoza. No parecía encajar de ninguna forma, hasta que algo en mi cabeza volvió a recordarme que estaba despierta y que estaban allí por nosotras.

Verlos nos paralizó de tal manera que no pudimos movernos, y ellos no tenían ni idea de que estábamos allí, así que sin más comenzaron a alejarse.

Pero yo parecía incapaz de moverme hasta que Flor dijo:

-¡Chicas, se nos van!

Reímos ante el descuido y salimos corriendo detrás de ellos. No fue una gran persecución, ya que se habían detenido a firmar autógrafos a un par de chicas a las que apenas les vi los rostros. Ellos estaban de espaldas a nosotras y entonces Katy exclamó:

-¿¡No nos van a saludar!?

Los chicos se dieron vuelta en un instante y yo hubiera querido tener una cámara en ese momento. Las expresiones de sorpresa en sus rostros eran inmensas. De verdad que no se lo habían esperado. Una vez superado el shock se pusieron a gritar todos al mismo tiempo. Como había extrañado eso también, a pesar de no entender nada de lo que decían.

Ya perdido el elemento sorpresa, Harry no demoró un segundo, o eso me pareció en acercarse a mí. Por fin, fue todo lo que pude pensar y me lancé a abrazarlo. De repente todo parecía en su lugar, correcto. Nada había cambiado. Seguíamos siendo dos idiotas que discutían por cualquier cosa, se burlaban del otro y decían ser una pareja. Y así era como quería que se quedara.

Me dio un par de vueltas en el aire y en cuanto me dejó en el suelo buscó mis labios en largo beso, demasiado añorado como para que yo le reprochase algo. No me importaba. No me importaba estar en un superpoblado aeropuerto, no me importaban las cuatro chicas que a lo mejor podrían estar viendo, no me importaban las bromas que Louis podría hacernos luego –aunque sí me importarían más tarde, cuando me sacara de quicio– en ese momento, no quería que se acabase.

-No puede ser, no eres una revista barata –le dije abrazándolo fuertemente. Se río de mi comentario y lo sentí respirar hondo –No puedo creer que estén aquí.

Se quedó abrazándome por otro momento y entonces me abrazó por la cintura y nos dirigimos con los demás.

A un par de pasos de distancia podía ver las lentejuelas del cartel de Flor. Me reí internamente al imaginarme a los chicos.

-¿Qué sucede? –preguntó Harry cuando llegamos con ellos.

-¿Terminaron con la luna de miel? ¡Ahora dámela! –comentó Louis. Me separé de Harry y lo abracé fuertemente, anotando mentalmente que me debería ese comentario.

-No te emociones tanto porque… ¡Hey! ¿Quién hizo ese cartel?- Harry miraba el cartel que tenía Niall. Puse los ojos en blanco y solté una carcajada -¿¡Como que “¿Quién es Harry?”?!

Nos miró a las tres por un segundo y luego fijó su vista en Katy.

-¿Por qué piensas que fui yo? –todos la miraron fijo, era bastante obvio –Son malvados.

Seguíamos siendo los mismos. Los meses que estuvimos separados sólo parecieron habernos unido más. Estaba demasiado contenta con todo lo que ese verano parecía prometernos.

Otro verano perfecto.


I'm going to cry.
Bueno niñas, aquí comienza otra aventura. Gracias por haber estado ya durante la espera y esperamos tenerlas durante el resto de la "temporada" Las queremos MUCHO!

Ahkagskshw por mi pan!!!
Estuve esperando tanto este capítulo!!
Y fue tan genial!!
En serio que si!!
Awww hahah el nacimiento de un peluche?
Hahahaha me matan
Hahaha yy el cartel haha y liam acá de
Wujajaja soy el mejor
A verdad haha naaa
Pff eso chicos si unos niños :)
Awww están juntao de nuevo!!
No puedo creerlo !!
Pff no puedo esperar al siguiente!!!
Lo AME!!

OMG OH MY DEAAAR LORD! fue tan perfecto ese inicio, me he emocionado demasiado con la ulitma parte de cada uno de los points of view, osea los besos y las descripciones de los sentimientos que sintieron al tenerlos de nuevo alli, aaaaaaaaah ahora estoy en shock yo jajajaja
Me ha encantado dioos, que mejor inicio que este? yo pensaba que me harian esperar y taraaaan se aparecen con este adelanto (y me refiero tanto al capitulo como tal, que ya no sabia cuando subirian y tambien a la llegada de los chicos dentro del capi jiji) son demasiado hermosas como para ponerlo en palabras, no aguanto la emocion jaja es como si fuera yo la que estuviera viviendo esto xd
You blow me away, absolutely stunning, estoy enamorada de nuevo jajaja
Me ha encantado todos chicas, espero suban mas pronto:/ ya no me quiero imaginar las esperas de capitulos y las rogadas que les voy a dar por tw para que suban jajaja no saben en que se han metido conmigo xd
Besoooooooos, las adoro chicas

HOLA!!!
kgasdjhgakshgd me encanto el primer capitulo!!! :D
Amo su nove Chicas, espero que la sigan pronto, beso grande!

Clau .xx :)

Poooooooooor fin! *-*
Ahhh estuvo geniaaaaal!
Me encantaron los carteles! jajaja pobre Hazza jaja
KJkKGJAKS Ojala también vinieran por mi, acá en Colombia :3
Ay chicas, estuvo genial este capítulote! y me reí mucho con las fans del aeropuerto.. creo que los chisme se regaran jaja

Espero el sgte capítulo! que sea igual de largo!!! ¿Quién es la que sigue con la historia? gkjaskfak las leo luego :corre:

Ahkagskshw por mi pan!!!
Estuve esperando tanto este capítulo!!
Y fue tan genial!!
En serio que si!!
Awww hahah el nacimiento de un peluche? 
Hahahaha me matan 
Hahaha yy el cartel haha y liam acá de 
Wujajaja soy el mejor 
A verdad haha naaa
Pff eso chicos si unos niños :)
Awww están juntao de nuevo!!
No puedo creerlo !!
Pff no puedo esperar al siguiente!!! 
Lo AME!!

Me alegro mucho de que lo hayas amado! jaja y sobre todo de que te hayas reído tanto... sobre lo del nacimiento del peluche... pues, sí, son las cosas que se le ocurren a Katy jaja Mañana subo el nuevo capi :)

OMG OH MY DEAAAR LORD! fue tan perfecto ese inicio, me he emocionado demasiado con la ulitma parte de cada uno de los points of view, osea los besos y las descripciones de los sentimientos que sintieron al tenerlos de nuevo alli, aaaaaaaaah ahora estoy en shock yo jajajaja
Me ha encantado dioos, que mejor inicio que este? yo pensaba que me harian esperar y taraaaan se aparecen con este adelanto (y me refiero tanto al capitulo como tal, que ya no sabia cuando subirian y tambien a la llegada de los chicos dentro del capi jiji) son demasiado hermosas como para ponerlo en palabras, no aguanto la emocion jaja es como si fuera yo la que estuviera viviendo esto xd
You blow me away, absolutely stunning, estoy enamorada de nuevo jajaja 
Me ha encantado todos chicas, espero suban mas pronto:/ ya no me quiero imaginar las esperas de capitulos y las rogadas que les voy a dar por tw para que suban jajaja no saben en que se han metido conmigo xd 
Besoooooooos, las adoro chicas

VIV! Hay Dios lo que extrañaba tus comentarios! Mira que tengo hace mucho este capítulo listo pero sinceramente hasta que tu no comentas no está listo jajajaja
Me encanta que te haya encantado y bueno, sobre los capítulos... no puedo prometerte nada. El mío lo tengo hace como mil años pero bueno... somos chicas ocupadas (? y quería esperar a que las chicas tuvieran sus capítulos más avanzados así la espera no es tan eterna. Btw, muy feliz de tenerte de vuelta en nuestros comentarios hermosa, te queremos mucho!

*Fiesta de 5...10...20...30...50... y más segundos* *Lágrimas* *Se prepara para escribir decentemente* 
¡PRIMER CAPÍTULOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! SDKLSJAKLDHSKJHDJSHDJKSHDJSDSJKDA holito :3
Fue tan perfecto, muero, revivo, vuelvo a morir, y vuelvo a morir...
Es que de verdad lo amé.
Cuando se ponen a pelear los chicos, y Liam se aleja con la computadora, me dio tanta risa.
Y cuando se les fueron los chicos, como que se quedaron en shock *no me digas* y después reaccionaron, fue hermoso.
Y con los carteles, igual me reí mucho... ¡Escriben perfecto!
Me emocione tanto cuando vi que subieron el capítulo, mi cara fue tan sdjksljdksla.

Bueno, ojalá pronto suban el segundo capítulo (:
Saludos <3

MAKA! HOLA PRECIOSA! Me he reído mucho con tu comentario jaja y estoy enamorada de tu nueva firma A poco que no morimos todos de amor con ese video tan hermoso? alsdkjvhabfdlk. Me alegro muchísimo de que te haya gustado el capi y trata de revivir preciosa que si te extrañaríamos mucho jaja
Mañana subo el segundo capi!
Un beso!

HOLA!!! 
kgasdjhgakshgd me encanto el primer capitulo!!! :D
Amo su nove Chicas, espero que la sigan pronto, beso grande! 

Clau .xx :)

Muchas gracias por comentar linda! Y que bueno que te gusto el capi, mañana mismo subo el siguiente, un beso grande y gracias por seguir con nosotras!

Poooooooooor fin! *-*
Ahhh estuvo geniaaaaal! 
Me encantaron los carteles! jajaja pobre Hazza jaja
KJkKGJAKS Ojala también vinieran por mi, acá en Colombia :3
Ay chicas, estuvo genial este capítulote! y me reí mucho con las fans del aeropuerto.. creo que los chisme se regaran jaja

Espero el sgte capítulo! que sea igual de largo!!! ¿Quién es la que sigue con la historia? gkjaskfak las leo luego 

Pobres niñas del aeropuerto [seguro las muy chismosas andarán hablando por allí (?] jaja Ermm... no sé si igual pero es bastante largo el siguiente capi, mañana lo vas a ver... igual ya nos estamos acostumbrando a escribir mucho... lo cual no sé si es bueno o malo jaja.
Anyway, gracias por comentar Clau, nos estamos leyendo, un beso!

Luego del repentino encuentro en el aeropuerto ayudamos a los chicos con sus equipajes y nos subimos a la camioneta que Paul había contratado (con chofer y todo) para que nos llevara a todos lados. Era casi igual a la que habíamos usado durante toda nuestra estadía en Londres así que al subirnos ocupamos nuestros lugares habituales.

Hablábamos animadamente sobre el vuelo, sobre lo que teníamos planeado para que hicieran durante su estadía en Mendoza, sobre las últimas noticias relevantes en la vida de los ocho. Pero aún así no lograba creerme que aquella escena fuera real. Mi mente no lograba cuadrar aquellos cinco rostros tan queridos con las montañas, árboles y casas mendocinas que se sucedían al otro lado de la ventana de la camioneta.

-¿Y ustedes saben llegar hasta nuestro hotel?- Las tres nos miramos y reímos ante la pregunta de Liam.

-Está a cuatro calles de mi escuela, para darte una idea.- Contenté con una gran sonrisa.

-¿En serio?- Zayn me miró sorprendido y asentí, leyendo varias de sus ideas en sus ojos color ámbar.

-Si hubieran elegido el Intercontinental habrían estado cerca de mi casa.- Comentó Naty más que nada para discutirme, como hacíamos desde que supimos que los chicos se hospedarían en el Diplomatic.

-Creo que Paul preguntó por ese hotel…- Comentó Louis.- Pero el que elegimos era el único que nos podía reservar un piso completo.

-¿Tienen un piso completo?- Saltamos todas al momento y los chicos se rieron de nuestra reacción.

-Algo así…- Comenzó a explicar Liam.- Este hotel era el único que tiene como una recepción antes de la sala con las entradas a las habitaciones. Así que Paul reservó las seis habitaciones de un piso y le pondrán seguro a la puerta de la recepción.

-Tendrán todo un piso como habitación, básicamente.- Fue el resumen de Katy, todos asintieron. Se encogió de hombros y se dejó caer hacia atrás mientras Niall la abrazaba.- Ventajas de ser ricos y famosos.

Reímos y seguimos charlando hasta que recordamos que los chicos habían estado tomando clases de español y comenzamos a molestarlos hablando nuestro idioma entre nosotras. Liam y Niall entendían un poco pero el resto parecían totalmente perdidos. Nos reímos usando expresiones típicas argentinas haciendo confundir mucho a los chicos y cuando finalmente llegamos al hotel todos sentían que eran uno completos inútiles en el idioma.

-Tranquilos.- Intenté consolarlos apiadándome de ellos.- Estábamos exagerando y hablando más rápido de lo necesario.

-Aunque me hablaran a la velocidad que lo hace Harry no creo que pueda entender nada de lo que me digan en español.- Bromeó Louis.

-Oye.- Se defendió unos cuantos segundos después Hazza.

Bajamos de la camioneta entre risas y bromas. Dos botones se acercaron para ayudar al chofer de los chicos a bajar el equipaje mientras nosotros nos dedicamos a contemplar por un segundo el imponente edificio del Hotel Diplomatic.

Una vez en la recepción todos parecieron olvidarse de que debían registrarse y subir a las habitaciones por lo que busqué con la mirada a Liam, el cual me hizo una seña para que lo acompañara.

-¿Tienes…?

-Todos los papeles de los chicos.- Asintió señalándome un bolso marrón que traía al hombro.- De todos modos Paul hizo la reserva a mi nombre.

-Sabia decisión.- Los dos reímos al tiempo que llegábamos al gran mostrador.

Había notado como las personas de la recepción nos observaban desde que habíamos entrado. El señor que nos atendió nos habló desde el principio con un perfecto inglés y no hizo más preguntas que las necesarias, pero no dejaba de desviar su vista de nosotros a nuestros amigos al fondo.

-¿Le informaron de la lista de personas que pueden ingresar a nuestra habitación?- El hombre asintió y de una pequeña carpeta de papel madera sacó una hoja impresa y leyó cuidadosamente.

-Florencia Gimenez, Natalí Arroyo y Katherina Zavala. Con posibilidad de traer dos acompañante por persona.- Miró a Liam esperando su confirmación y este asintió dando el visto bueno.- Bien, si todos los datos anteriores están en orden.- Revisó un segundo más sus papeles y luego tomó cinco tarjetas magnéticas de una caja a su lado.- Aquí están sus llaves.

-Muchas gracias.- Respondimos los dos a dúo y luego volvimos con nuestros amigos.- ¿Qué piso les tocó?

-Dieciséis, y bueno, como ya te expliqué no tenemos número.- Nos detuvimos a unos pasos del resto del grupo y los miramos por un rato. Todos estaban sonrientes, reían cada pocos segundos y se veían ir venir abrazos, bromas y uno que otro golpe.- No te imaginas lo feliz que estamos de haber podido venir.

-Multiplícalo por cien y así de emocionada estamos nosotras.- Me sonrió ampliamente y no me resistí más y volví a abrazarlo con fuerza.

-¿Está todo bien chicos?- Se acercó Zayn, seguido del resto.

-Todo perfecto, ya tenemos sus llaves y ahora tienen que ir a su piso.

Al instante todos tomaron maletas, bolsos y demás y se encaminaron a los ascensores. Yo no había vuelto a subirme a uno desde el viaje por lo que valientemente decidí subir los dieciséis pisos por las escaleras aunque nadie me quiso acompañar. Llegué con las piernas tan adormecidas que me juré que intentaría acostumbrarme un poco al ascensor o de lo contrario moriría subiendo esas escaleras una y otra vez.

El piso, tal y como lo había descripto Liam tenía un pequeño saloncito semicircular y una doble puerta a la cual se le había agregado uno de estos aparatos para leer las llaves magnéticas. La misma estaba entreabierta y se escuchaba todo el barullo que estábamos armando dentro.

El living de las habitaciones era una estancia rectangular bastante amplia, con un gran ventanal al fondo que daba sobre el costado del hotel, varios sillones, una mesa con sillas y un televisor plasma.

Dejé el pequeño bolso que traía sobre una mesita ratona junto a todo lo demás. Suponía que en algún momento los chicos guardarían la ropa, pero en ese instante estaban todos más concentrados en hacer planes para la mañana.

Busqué a Zayn por la habitación sin éxito, hasta que me percaté de que faltaba su equipaje y que la puerta de una de las habitaciones, la del fondo, estaba entreabierta. Crucé la estancia con rápidas zancadas y me quedé parada en el marco de la puerta, observando la espalada de mi novio mientras él acomodaba camisetas y camisas en el placard.

-¿Necesitas ayuda?- Lo tomé por sorpresa haciendo que se sobresaltara un poco. Me miró fijamente por un segundo.

-La verdad, señorita, usted podría ayudarme con algo de suma importancia.-Me miró con una sonrisa e hizo una seña para que me acercara. Cerré la puerta tras de mí y caminé hasta donde estaba con el corazón latiéndome con más fuerza.

-¿Qué se le ofrece, señor?- Volvió a sonreír y colocó sus manos en mi espalda, poniendo mi cuerpo más cerca del suyo.

-Estaba buscando a una chica mendocina, muy linda. Es mi novia y hace mucho que no la veo.- Bajé la vista sintiendo como se me ponían las mejillas rojas sin ningún sentido.- No sé si podría ayudarme a encontrarla.

-¿Y cómo se llama su novia?- Casi imperceptiblemente comenzamos a movernos, yo caminando hacia atrás, Zayn hacia adelante. No estaba segura pero podría jurar que nos estábamos acercando a la cama.

-Florencia.- Acortó el espacio para besarme pero me aparté un segundo antes. Hice un mohín de descontento.

-Qué pena, señor, con tantas Florencias en este país no creo que la encuentre pronto.

-Creo que me las arreglaré para identificarla.- Entonces mis piernas chocaron contra el borde del ancho colchón y me tomé de los hombros de Zayn para recobrar el equilibrio.

Nos quedamos en esa posición unos segundos que bien podrían haber durado años. Finalmente Zayn me besó suavemente y al colgarme de su cuello perdimos el equilibrio y caímos en la cama. Nos seguimos besando por un rato hasta que tuvimos que tomar un poco de aire. Me senté en la cama y decidí seguir un poco más con el juego.

-¿Y qué pasa si yo no soy la Florencia que estás buscando?- Se sentó justó frente a mí y presionó sus labios sobre los míos un segundo.

-Creo que llegados a este punto poco me importaría.- Abrí la boca en fingido gesto de indignación y tomé el almohadón más cercano para arrojárselo. Pero Zayn me adivinó las intenciones y tomó la almohada antes de que pudiera hacer nada. Nos miramos un segundo desafiantemente y luego se arrojó sobre mí, tumbándome en el colchón y comenzándome a hacer cosquilla por todo el estómago.

-Zayn… no… BASTA… BASTA…- Apenas si tenía tiempo de tomar aire y cada vez que lograba incorporarme un poco el volvía a tumbarme de espalda y seguía con la tortura. Cada tanto me besaba fugazmente en los labios, las mejillas y un par de veces en el cuello, pero apenas si me daba cuenta con tanta risa.- Detente, por favor…

Se detuvo quedando recostado sobre mí, aguantando su peso sobre sus brazos. Estábamos tan cerca que nuestras narices se rozaban.

-¿Me quieres?- La pregunta me sonó tan infantil que se me escapó una risa al escucharla. Aún agitada llevé mis manos a su cuello y lo acerqué más a mí.

-Claro que sí tonto, te amo.- Las últimas palabras dichas en español fueron tan involuntarias que casi no me di cuenta cuando las dije. Zayn me miró sorprendido. Bastante tiempo atrás le había explicado la importancia que yo le daba a la palabra amor y creo que ninguno de los dos se esperaba semejante confesión en ese momento.

-Y yo te amo a ti.-Reí ante su español pero mi risa se vio interrumpida por sus labios y un beso mucho más pasional de lo que me hubiera atrevido a admitir.

-No se ve como si quisieras que Zayn se detenga, a decir verdad.- La voz de Niall me llegó como desde otro mundo, me costó conectar las palabras con sus significados y para cuando lo conseguí, mi novio ya le había arrojado una almohada para que se marchara.- Le diré a Liam.

Nos seguimos besando otro rato largo, como si nada nos hubiera interrumpido y al final terminamos los dos recostados en la cama, concentrados en la respiración del otro como si fuera lo más interesante del mundo.

Eso era algo que amaba de mi relación con Zayn. No necesitábamos estar hablando todo el tiempo ni llenando todos los espacios vacíos con besos o palabras vanas. Los dos disfrutábamos del silencio, de la simple presencia del otro. Y por eso mismo también había sido terriblemente duro tenerlo al otro lado del océano.

Tenía mi cabeza recostada sobre su pecho así que cada tanto contaba los latidos de su corazón pero comenzaba a sentir como el sueño se iba apoderando de mí y, ciertamente, no me quería dormir en ese momento.

Me incorporé de golpe y besé cortamente a Zayn.- Vamos a socializar.
Bajé de la cama y fui hasta su lado, tendiéndole las dos manos pero él se dio media vuelta y escondió su rostro en la almohada.

-¿Cuál es la necesidad?- Negué con la cabeza sintiéndome como su madre y comencé a sacudirlo y moverlo.

-Vamos, Malik, quiero ver cómo los chicos destruyen el hotel. Muévete.- Seguí molestándolo un rato hasta que finalmente gané por cansancio. Se puso en pie y tomó mi rostro con ambas manos.

-¿Te quedarás a dormir conmigo de vez en cuando?- Abrí la boca un segundo sin saber cómo responder. Es decir, si hubiera sido por mí me mudaba al hotel con los chicos…

-Pero mi mamá…- Me miró un segundo y después asintió comprendiendo todo de pronto. Besó mi frente.

-No te preocupes.

-Pero…

-Sh, ya veremos que hacer.- Lo besé un segundo y luego tomé su mano y salimos del cuarto.

Desastre se quedaba corto para lo que era el living que hasta hacía unos minutos era un palacio del orden. Todos y cada uno de los almohadones de la estancia estaban desperdigados por cualquier lado; la maleta del que me pareció Louis había sido abierta y había prendas de él por todas partes. Miré  a mi alrededor y pude ver como Liam y Niall salían corriendo de una de las habitaciones con almohadas y detrás de ellos Katy que luchaba contra Louis. Presenciamos por un momento una guerra de almohadas, hasta que la que cargaba Harry se rompió y comenzaron a volar plumas por todos lados, y allí fue cuando me decidí a interrumpirlos.

-¡Tiempo fuera!- Me puse al medio de los seis con los brazos extendidos.- Declaro empate. Hazza, Naty, levanten las plumas, por favor.

-¿Y yo por qué?- Mi amiga me miró más divertida que enfadada.
-Eres su novia, ayuda al pobre chico.- Todos rieron y traté de desviar la atención de ellos cuando Harry la tomó por la cintura y le dijo quien sabe qué al oído, haciendo que mi amiga riera y al momento se pudiera a ayudarlo.

Chasqueé mis dedos un par de veces para que me miraran.- Katy, Nialler, Lou, acomoden el desastre de living.- Me miraron todos con cara de pocos amigos.

-¿Y Liam? El también participó de la guerra.- Me recriminó Katherina. Miré a mi compañero de “responsabilidad” y negué con la cabeza como si estuviera decepcionada.

-Te hemos perdido.- Liam rió y levantó sus manos como si lo estuviera deteniendo la policía.

-Culpable.- Dijo finalmente.- Yo llevaré estas almohadas a la habitación y pediré el almuerzo.

-Me parece perfecto.- Consentí y recibí un beso en la mejilla de parte de mi amigo en su camino a la habitación del fondo.

Miré a mi alrededor, todos estaban haciendo algo y estaban medianamente tranquilos así que tomé la mano de Zayn y lo acerqué hasta el ventanal al fondo de la habitación. Estuvimos un rato mirando la ciudad y tratando de señalar algunos lugares cuando se desató la tercera guerra mundial por la elección de la comida.

En medios de risas, gritos que pedían pizza, bromas de dobles sentidos, quejas porque en Argentina no existía Nando’s, voces que querían hamburguesas y el pobre de Liam que trataba de ordenarnos, me di cuenta de que seguíamos siendo exactamente el mismo grupo de idiotas que habían pasado el verano (invierno allí) en Londres, sólo que en una nueva locación. Y aquél pensamiento me bastó para que el resto del día me lo pasara con una sonrisa gigante en el rostro.
 

Al final, de un modo u otro terminamos pasando todo el sábado metidos en la habitación del hotel. Cuando mi mamá me llamó al celular para avisarme que me irían a buscar eran las siete y media de la tarde y por poco me muero de a decepción cuando llegó el mensaje diciendo que estaba afuera.

A las chicas las vendrían a buscar un poco después, así que me despedí de ellas y de los chicos a regañadientes y al final Niall me terminó acompañando en el ascensor, donde  me hubiera desmayado de no haberlo tenido para sujetarme de él.

-Vamos a tener que trabajar en esto.- Me dijo ayudándome a salir del maldito cuadrado de metal. Me sostuvo por la cintura un segundo y luego me abracé fuertemente a su torso.

-Te extrañé mucho, Nialler.- La confianza que había tomado con el irlandés había sido sorprendente, pero creo que en parte se debió a que hablar con él era casi como estar con Katherina.

-Y yo a ti, Flor.- Nos separamos y me acompañó hasta la entrada donde me despedí de él con un beso en la mejilla.- Y más te vale que vengas mañana, no quiero tener a Zayn hecho un estropajo todo el día.- Golpeé su hombro antes de comenzar a correr hasta mi auto.

-No digas estupideces.- Grité sobre mi hombro justo antes de que se me escapara una carcajada.

Mi mamá me preguntó que tal todo en cuanto subí y traté de resumirle el día de tal forma que los chicos le cayeran mejor pero no estoy muy segura si lo logré. De cualquier forma, me daba más o menos igual. Los teníamos allí con nosotras, nada podía ser mejor que eso.

 
El domingo me desperté y lo primero que hice fue llamar a Katy. Como todos los fines de semana me había levantado pasado el mediodía así que estaba segura de que encontraría a mi amiga despierta.

Hablamos apenas un poco, le pregunté cuánto habían tardado en irlas a buscar y si habían quedado en algo especial con los chicos. Como no habían arreglado nada quedamos en encontrarnos a eso de las tres en el hotel.

-Yo le aviso a los chicos.- Se apresuró a aclarar Katy causándome una carcajada.- -Dale, yo le digo a Naty, nos vemos.

Llamé a Natalí y me atendió, según creo, su abuelo. Pregunté por ella y luego de largos minutos sin nadie al otro lado de la línea me atendió su madre diciéndome que se había ido a acompañar a una de sus tías no sé adónde, temprano en la mañana y aún no regresaba. Le pedí que le avisara de que había llamado y colgué deseando tener crédito para mandarle un mensaje de texto a mi amiga.

No recordaba si tenía algo para la escuela y si era así tampoco me interesaba. Fui a comprobar que nadie en mi familia necesitara ayuda y al ver que estaban todos en sus asuntos volví a mi habitación y encendí la portátil.

Apenas unos minutos después bajaba por el inicio de twitter. Había muchas personas hablando sobre el paradero de los chicos y sobre el rumor de que estaban en Argentina. Abrí mis interacciones como por acto reflejo, olvidando que ya no me servían para hablar con mis amigas de twitter. Aproveché para leer algunos tweets y responder algunos que eran bastante dulces, sin responder ningún tipo de pregunta sobre los chicos.

Como siempre me ocurre, el tiempo voló y sin darme cuenta ya estaba lavando los platos, contando los minutos para ir a tomarme al micro.

Apenas si le expliqué a mi mamá a dónde iba y para qué, e ignoré rotundamente su cara de disgusto. La saludé con un beso en la mejilla y me fui casi corriendo hasta la parada.

Entré a la recepción del hotel a las tres menos veinte. Descubrí a un grupo de chicas que pretendían pasar por desapercibido, las saludé con una mano y al momento se alejaron un poco, aunque estoy segura que después se volverían a acercar.

La mujer que me atendió me miró con escepticismo y se negó a revisar la lista donde le aseguraba que estaba mi nombre. En su lugar llamó a la habitación y por supuesto, sea quien sea el que respondió, le dijeron que me dejara pasar. Me fue imposible borrar la sonrisa de burla de mis labios mientras me decía que pasara.

Subí al ascensor y me concentré en contar hasta cincuenta mientras subía y afortunadamente no me mareé tanto como el día anterior. Finalmente llegué al piso y no alcancé a tocar la puerta que ya me la habían abierto.

-¡Flor!

-¡Tommo!- Lo abracé fuertemente y luego entramos a la habitación. Comenzó a comentarme al momento el calor que hacía y me reí en su cara.- Estamos recién a principios de noviembre, Lou. Para diciembre se van a morir derretidos.
Saludé a Niall y Liam sentados en el sofá y me quedé un segundo viendo como tonteaban con la guitarra del primero.

-Hey y ¿dónde se supone que están Zayn y Hazza?

-Harry fue a la terraza a tomar una foto o algo así.- Me informó Liam levantando la vista hacia mí. Negué divertida, recordando la obsesión del menor de la banda por instagram.- Y tu novio está…

-Justo aquí.- Al mismo tiempo que escuchaba esas palabras sentí los brazos de Zayn rodeándome la cintura. Besó mi hombro y luego apoyó allí su barbilla.- ¿Cuánto tardarán en llegar las chicas?

Tomé su mano derecha donde tenía un reloj de pulsera y me fijé que ya eran las tres y unos minutos.

-Ya tendrían que estar por llegar.- Y luego me distraje repasando los tatuajes del brazo de Zayn, a los cuales ya les había perdido la cuenta hacía mucho.
Nos terminamos tirando todos sobre los sillones y no nos movimos más, ni siquiera cuando entraron Harry en compañía de las chicas a contarnos de que había un grupo bastante grande de fans en la entrada del hotel.

-¿No sé suponía que esta tarde íbamos a salir o algo así?- Preguntó Naty echa un ovillo junto a Harry.

-Podemos llevarlos al centro si quieren.- Sugerí y volví a pedirle a Niall que me explicara cómo era el acorde de la guitarra que me acababa de enseñar.

-Pero van a empezar a perseguirlos todas las chicas que están en la entrada.- Se quejó Katy.

-Podemos saludarlas a todas y después irnos. Si se lo pedimos no creo que nos acosen.- Las tres miramos  Harry incrédulamente pero al final terminamos accediendo a la idea.

Nos preparamos, bajamos a la recepción y en cuanto los chicos pusieron un pie en la vereda se nos vinieron encima casi treinta directioners que gritaban entre las risas y las lágrimas. Les dimos espacio a los chicos para que las saludaran a todas y después Liam le explicó a una de las chicas que hablaba inglés si por favor nos podían dejar tranquilos. Al momento todas accedieron, se sacaron un par de fotos más y nos dejaron marcharnos.

-Eso fue más fácil de lo que pensé.- Admití mientras me aferraba a la mano de Zayn antes de cruzar una calle.

-Bien, ¿y ahora qué?

No era como si tuviéramos muchas ganas de pasear, más que nada era que ninguno aguantaba mucho el encierro y con semejante día soleado daba pena desperdiciarlo. Así que terminamos en una heladería bastante conocida, sentados en las mesas de afuera y continuando con el repaso de los últimos ocho meses.

Cuando comenzó a oscurecer recibí una llamada de mi mamá pidiendo que volviera a casa y recordándome que al día siguiente tenía clases.

Volvimos al hotel a regañadientes y luego de despedirme de todos Zayn me acompañó hasta la entrada del edificio.

-Vas mejor con el ascensor.- Me felicitó al ver que al menos me podía mantener en pie durante toda la bajada.

-Hago lo que puedo.- Nos detuvimos unos pasos antes de las puertas de vidrio. Acaricié su mejilla y él cerró los ojos al contacto.- Mañana voy a venir, salgo de la escuela como a las cinco.

-Te voy a estar esperando.- Nos besamos olvidando que estábamos en el medio de la recepción del hotel y de que nos podía ver básicamente todo el mundo.- Te quiero.

-Yo más.- Lo volví a besarlo cortamente y me fui casi corriendo para no alargar más el momento.

Casi me quedé dormida en el viaje en micro hasta mi casa y cuando llegué me encerré en mi cuarto porque de pronto había recordado que tenía que entregar un trabajo práctico al día siguiente.


Parecía increíblemente ridículo que Zayn, Liam, Louis, Niall y Harry estuvieran en Mendoza y el mundo siguiera su curso habitual como si nada hubiera ocurrido. Por lo menos el mío y el de mis amigas ese fin de semana había cambiado al cien por ciento.

kshgdkajhsgdkajhsgd :D Me encanto el capiiitulo!!! 
Es genial, me encantan Glor y Zayn juntos ♥

Beso grande chicas :) 

Clau .xx

Estuvo hermoso este capítulo :3
Y me muero de la envidia con que Niall les enseñe a tocar guitarra!

Ay Flor eres tan afortunada :3 Zayn es *-* 
Ahora falta presentarles a tus papás a Zayn... ¿Quién puede resistirse a este chico? 
Espero el próximo cap
Las leo luego :happuy:
Dani :)
(Pongo mi nombre porque en el anterior respuesta al comentario terminé llamándome 'Clau' xD)