[Terminada] A Primera Vista... [Larry Stylinson] Epílogo. Publicado :D

Mi pobre Zayn :( no pensé que a ambos les gustara Liam (que Zayn se quede con Niall ya que Liam aparentemente no quiere XD) Harry y Louis son la cosita más tierna del mundo... Siguelaaaaaaaa

Siiiiiii ziall

Debby1D escribió:Awwww gracias por dedicarmelo
Okay, voy a empezar con mi fangirleo extremo (?
Son taaaaaan tiernos :') al fin estan definitivamente bien y juntos y que bueno que Lou entendio que no tiene que interesarle lo que piensen los demas. Ellos tienen todo el derecho a ser felices juntos, y nada mas importa aww
Ahora con lo que me quede sorprendida fue con Zayn.
Desde el capitulo anterior ya se sospechaba, si.. pero no creia que fuera a algo tan fuerte ni que viniera desde hace tanto.
Por dios pobre Zayn :'( esta sufriendo demasiado por no poder tener a Liam.
Lo peor del caso es que Danielle tiene cara de mono (?) Liam deberia darse cuenta de eso, y ver al hombre perfecto que esta muriendo por su amor :/
es tan triste :'(
me encanto tanto el capitulo como el especial de Zayn :)
Seguila pronto!
Un beso

pd: sigo escuchando la misma canción JAJAJ, no creo que la cambie, es como la canción que identifica el fic entero para mi (?) no particularmente porque la letra coincida exactamente con la situación, sino porque asi me nace, ah JAJAJAJ. Es medio ilogico pero no puedo escuchar otro tema, no me sale xD

Jajajaja Danielle con cara de mono jajaja que risa, te amé en este comentario.
Un abrazo enormee! :hug:

melopaga escribió:Mi pobre Zayn :( no pensé que a ambos les gustara Liam (que Zayn se quede con Niall ya que Liam aparentemente no quiere XD) Harry y Louis son la cosita más tierna del mundo... Siguelaaaaaaaa

Ya veremos que pasa entre ese trío de enamorados.
Yo sé que Harry y Louis son la cosa más hermosa del mundooo!
Un abrazo :hug:

•Luciana•unicornia• escribió:Siiiiiii ziall

¡Ziall! ¡Ziall! ¡Ziall!
¿Cómo le hacen para leerme la mente? :misery:

- ¿Entonces no nos veremos hoy? – preguntó la voz de Harry demasiado desanimada al otro lado de la línea.


Louis sintió como si su corazón se rompiera pero simplemente no podía, tenía que quedarse ese día en casa, era tradición familiar.


- No lo creo Hazz – dijo él con el mismo tono.
- Pero…
- Es día de las madres – detuvo la réplica de su novio – es mi costumbre quedarme a su lado todo el día festejándola.
- Yo no celebro ese día Lou…


Su estomago sintió como si lo golpearan de una forma muy fuerte sacándole todo el aire que había en sus pulmones. ¿Cómo podía Harry causarle tantos sentimientos con tan solo decirle unas palabras en un tono triste? Era increíble.


- S- si… si tu quieres – se maldijo por lo que estaba a punto de decir – puedes venir a pasar este día con mi pequeña familia, ya sabes… para que no estés solo en casa.


Muchas cosas pasaron por su mente, principalmente que su madre y sus hermanas no lo dejarían de molestar por un largo tiempo si llevaba a Harry a su casa, pero estaba dispuesto a aguantar todo aquello con tal de no saber que el rizado estaba solo en casa mientras él se divertía con su familia, era en cierta manera un poco injusto.


- ¿De verdad? – escuchó esa voz ronca con un toque de esperanza al hacer aquella pregunta como si no callera en cuenta de la proposición que el de ojos azules le acababa de hacer.
- Si, de verdad – sonrió para sí a pesar de saber que su novio no podía verlo.
- Tengo que llevar un obsequio para tu mamá – dijo como si acabara de caer en cuenta de aquello - ¿Qué le gusta?


Louis soltó una pequeña risita por tanta ternura.


- No es necesario Harry, con tu presencia será mucho más que suficiente.


Después de intercambiar unas cuantas palabras más, se despidieron con un “te quiero” mientras su corazón latía alegre y con fuerza. Louis sonrió como tonto enamorado viendo su móvil como siempre lo hacía después de hablar con Harry y se sintió extrañamente completo. Salió de su habitación y bajó las escaleras hasta llegar a la sala donde su madre y sus pequeñas hermanas se encontraban hablando animadamente sobre todos los regalos que le habían dado ese día.


- Pero el mejor regalo que recibió mamá fueron mis dibujos – se quejó Daisy de una forma molesta que a Louis le pareció de lo más graciosa.
- Aja, lo que tú digas – dijo Charlotte moviendo la mano como si le restara importancia a lo que la pequeña había dicho.


Louis no se extrañó de nada. Estaba demasiado acostumbrado a esas discusiones sin sentido que solían tener sus hermanas las cuales normalmente eran durante 12 horas del día y para variar, eran durante las 12 horas en las que él se encontraba en casa.


- Vamos, no empiecen con eso – dijo poniendo los ojos en blanco – le arruinarán el día a mamá.


Vio a su madre sonreír tranquila mientras los observaba, se veía realmente contenta de pasar ese momento con ellos puesto que se la pasaba trabajando y no tenían mucho de eso.


- Yo creo que todos los regalos han sido increíbles – habló Jay llamando la atención de sus hijas que seguían discutiendo.
- Opino lo mismo que mamá – dijo Louis acercándose a ella para sentarse a su lado – deberían de tomar una ducha antes de la hora de la comida – ordenó tan mandón como siempre como si fuera el padre de las cuatro.


Después de quejarse un poco, al final las cuatro cedieron y subieron las escaleras a sus respectivas habitaciones dejando a Louis solo con su madre. Aquella era la oportunidad perfecta para decirle lo que sucedía con Harry.


- Tengo que agradecerte – inició Jay tomando la mano de su hijo – pensé que cuando me quedé sin su padre no podría con todo, pero me has ayudado demasiado y has asumido esa figura paterna que ellas tanto necesitan.


Louis sintió su corazón sacudirse como si de un terremoto se tratase y sonrió a su madre sin saber cómo transmitir todo lo que estaba sintiendo en ese momento.


- No tienes por qué agradecerme – dijo sin más – sabes que todo lo hago de corazón, las amo demasiado.


Jay sonrió satisfecha por aquella respuesta.


- Ahora dime, ¿Por qué las has mandado a bañarse? Supongo que quieres hablar sobre algo importante.


Como siempre su madre había leído su mente. Le hubiera extrañado unos años atrás pero después de tanto ya se había acostumbrado y había asumido que su madre era su mejor amiga, siempre sabía cuando algo sucedía, cuando algo lo atormentaba.


- Es solo… - dijo nervioso - ¿Recuerdas aquel chico con el que me viste aquel día en la puerta de la casa.
- Oh si – dijo entusiasmada – aquel guapo y alto de ojos verdes.
- Eh… si, ese mismo
- ¿Qué sucede con él?
- Bueno… él vendrá a pasar la tarde con nosotros.
- ¿Comerá aquí? – preguntó con picardía su madre.
- S-si, supongo – soltó una risita – eh… una cosa más.
- Adelante – lo animó sin dejar de sonreír.
- Él – boqueó sin encontrar las palabras correctas – es mi novio.


Jay soltó una sonora carcajada que inundó toda la sala de estar donde se encontraban sentados ambos causando que Louis la mirara extrañado y enojado al mismo tiempo.


- ¿Qué? – preguntó frunciendo el entrecejo.
- Es sólo… - a su madre le costaba trabajo hablar por la risa – oh Dios – rió nuevamente – es que hubieras visto tu cara al decirlo – se limpió una lágrima que se le había escapado por la risa – eso ya lo sabía cariño.
- Pero… ¿Cómo? – preguntó sorprendido.
- Es obvio, los encontré a punto de besarse – Louis bajó la mirada avergonzado y jugueteó con sus manos – Louis – lo llamó logrando que este levantara la mirada – lo que me importa es que seas feliz – sonrió dulcemente – no importa con quien – acarició su rostro de una forma cariñosa y comprensiva.


El de ojos azules sonrió y pensó que la vida no pudo haber sido mejor con él, le había dado una madre hermosa y extraordinaria con la que sabía que podía contar en todo momento, realmente la amaba y esperaba que Harry pudiera amarla de la misma forma.

Después de unos minutos de charlas sin sentido para matar el tiempo, el timbre de la casa sonó anunciando la llegada de alguien. Louis se sintió nervioso pero aun así se levantó de su asiento como si este tuviera un resorte y se dirigió rápidamente a abrir encontrándose con un Harry completamente sonriente que con trabajo sostenía dos enormes bolsas.


- ¿Pero qué es esto? – preguntó Louis sonriendo mientras lo ayudaba con una de ellas.
- Bueno, aquí – levantó la bolsa que se había quedado en sus manos – traigo un pastel de chocolate – sonrió – y en esa otra – señaló la que se encontraba en las manos de Louis – bueno… fui a comprar un obsequio para tu madre, quería comprarle algunos chocolates – dijo con un poco de frustración – pero no sé cuales le gustan así que compré de todos los que vi.


Louis abrió la bolsa y vio que lo que Harry le había dicho era verdad, en su interior habían chocolates de todos los tipos, hasta algunos que jamás había visto en su vida y eso hizo que abriera los ojos en forma de sorpresa.


- ¡Dios Harry! Es demasiado – dijo mirándolo de nuevo.
- ¿Qué es demasiado? – preguntó la voz de su madre a sus espaldas.
- Eh… buenas tardes – dijo Harry nervioso al verla – felicidades – sonrió levemente – le traje un pastel y un pequeño obsequio.
- ¿Un obsequio? – preguntó curiosa mientras recibía la gran bolsa de regalo por parte de Louis.


Jay no soportó la curiosidad y sin más abrió aquella bolsa topándose con lo mismo que había visto su hijo minutos atrás.


- Por Dios cariño – dijo mirando a Harry – por ti romperé la dieta – dijo divertida causando risa en los dos chicos – por favor pasa.


Los tres se adentraron a la casa y caminaron directamente a la cocina de esta. Claramente aquella casa no era tan grande como la de la familia de Harry, pero él no pudo evitar pensar que era de lo más acogedora del mundo. Se sentó en una silla del comedor que estaba dentro de la cocina ya que Jay se lo ofreció y después de eso el rizado le extendió el pastel que había llevado con él.


- Eres tan dulce – dijo la mujer con una sonrisa mirando el pastel – parece casero.
- La verdad es que quería impresionarla diciéndole que yo lo hice – dijo el de ojos verdes – pero después sentí temor al pensar que tal vez me pediría la receta, así que le diré la verdad, lo hizo una empleada de mi casa.


Jay rió animada ante el comentario y el de ojos azules se sintió feliz al notar que tal vez a su madre le estaba agradando demasiado el chico que tanto amaba y eso lo tranquilizaba ya que ella era una parte demasiado importante en su vida y si no aceptaba a Harry simplemente no sabría que hacer, se encontraría entre la espada y la pared.

Una hora después sus hermanas hicieron acto de presencia y conocieron a Harry. Louis sonrió al ver que aquel chico había buscado agradarle a las dos más grandes hablándoles de cosas que les interesaban y después de había encargado de las pequeñas gemelas que habían jugado con él durante un largo tiempo.

La comida había sido demasiado agradable, no paraban de hablar entre ellos y notaba que Harry se sentía de lo más cómodo estando rodeado de aquellas personas que Louis tanto amaba.


- Y dime cariño – empezó Jay mientras picaba un poco de ensalada con su tenedor para después llevárselo a la boca - ¿Cómo festejó tu madre este día – preguntó después de tragar.


Louis miró a Harry preocupado por aquella pregunta que su madre le había lanzado pues él lo sabía todo, sabía la verdad acerca de la madre del rizado.


- Eh… - titubeó jugando un momento con su comida – dudo que ella lo haya festejado.


La madre de Louis paró de comer y miró a Harry con sorpresa para después esperar a que él siguiera hablando, tal vez simplemente porque no quería presionarlo.


- Ella pasa mucho tiempo fuera – continuó – tiene una empresa y como está en un proceso de divorcio supongo que todo es más complicado – susurró más como si se estuviera convenciendo a sí mismo – por eso no está hoy aquí.
- Pero estoy segura de que te está extrañando – lo animó la mujer – para todas las madres este es un día muy especial y por eso te agradezco que hayas decidido pasarlo aquí conmigo.
- Al contrario – dijo un poco más animado – gracias por recibirme.
- Harry – se escuchó la voz de una de las pequeñas interrumpiendo esa conversación que él había empezado a entablar con la madre de su novio.


Todos miraron en dirección a las gemelas y se dieron cuenta de que era Phoebe la que le había llamado.


- Dime – la animó él
- Cuando te lleves a Boo Bear a vivir contigo, ¿Lo dejarás visitarnos?


Louis se sonrojó al escuchar aquel apodo y vio como su novio contenía la risa para mirar a la pequeña con ternura.


- ¿Por qué me lo llevaría? – preguntó el rizado.
- Porque los novios se casan y se van a vivir juntos


Todos soltaron una tremenda risa ante ese comentario sintiéndose sorprendidos por la inocencia y la inteligencia de la pequeña.


- Te prometo que siempre traeré a Boo Bear a visitarlas.


Después de esas horas tan agradables en familia, Harry se tuvo que ir y al despedirse de Louis le dio un gran abrazo y un beso que les pareció eterno a ambos convenciéndose así de que tal vez eso era lo que querían para su futuro, estar juntos siempre.


 

Ame el capítulo fue muy hermoso
Son tan adorables
Oww Harry me imagine la bolsota con chocolates haha
Síguela cuando puedas
PD: por que estas deprimida? Si no quieres decir no importa esque aveses es mejor desahogares así que si te quieres desahogar con migo no importa no me gusta que la gente este triste ;)

•Luciana•unicornia• escribió:Ame el capítulo fue muy hermoso
Son tan adorables
Oww Harry me imagine la bolsota con chocolates haha
Síguela cuando puedas
PD: por que estas deprimida? Si no quieres decir no importa esque aveses es mejor desahogares así que si te quieres desahogar con migo no importa no me gusta que la gente este triste ;)

Es que se me vienen muchos recuerdos a la mente! y siento que extraño al tipo que me robó el corazón y saber que no le puedo hablar me frustra :(
Son cosas que pasaron hace dos años, pero como nunca se solucionaron no las puedo superar como se debe, de repente vienen de regreso y todo mi estado de ánimo se viene abajo.
Gracias por preocuparte y preguntarme :hug: siempre hace falta alguien que escuche lo que tu mente quiere gritar.

No te preocupes se que no nos conocemos pero si te sientes mal alguna vez y te quieres desahogar mi Twitter es luciana_lobes1D

Perdón es luciana_loves1D

•Luciana•unicornia• escribió:No te preocupes se que no nos conocemos pero si te sientes mal alguna vez y te quieres desahogar mi Twitter es luciana_lobes1D

Te comenzaré a seguir mañana mismo! ahora es muy tarde, pero créeme que lo haré sin falta.
Un gran abrazo. :hug:
GRACIAS!

Debby1D escribió:Awww fue un capitulo tan tierno :')
La madre de Harry es una perra, no la quiero ni recordar (?)
Y la de Lou es tan buena y comprensiva.
Es cierto que Lou tiene suerte en ese aspecto, y es genial que Harry les haya caido tan bien a todas.
omg me dio tantos feels, los novios se casan y se van a vivir juntos, dfhghkjdgdkjd
Ojala, estoy esperando eso, tanto aca en el fic, como en la vida real (? JAJAJ.
En fin, ame este capitulo!
Seguila pronto por favorrrrr!
Un beso

Jaja creo que todas desearíamos que esto fuera en la vida real, pero ya el tiempo lo dirá.
Derramé toda la miel que había en mi corazón en este capítulo así que me alegra bastante que te haya gustado :D
Un abrazo enormeeee. :hug: :hug:

Era lunes por la tarde y Liam se la había pasado sonriendo durante toda la mañana a pesar de que las clases habían tenido su transcurso natural y les habían puesto una montaña de deberes de un día para otro, pero la verdad era que nada podía arruinar su felicidad, hasta podía haber una guerra en ese mismo instante y él moriría irremediablemente feliz y es que el fin de semana que desafortunadamente había llegado a su fin, su madre por fin había conocido a Danielle. La había presentado a su familia oficialmente como su novia y a todos les había caído más que bien la noticia ya que llevaban mucho sin conocerle alguna chica y no es que fuera poco atractivo o algo parecido, simplemente era demasiado nervioso, responsable y callado, razones por las cuales se le hacia demasiado complicado entablar una larga y coherente conversación con alguien.

Cuando él la había conocido simplemente se había perdido en esa sonrisa hermosa que siempre le regalaba a cualquier persona que se le cruzara por el camino, era preciosa y creía que cuando sonreía se veía mejor, era como su mejor accesorio, con eso no necesitaba más, ni siquiera maquillarse… era perfecta.

Tuvo que esperar para poder armarse de valor y hablarle por fin así que cuando vio la oportunidad la tomó sin pensárselo demasiado. Era un día de esos en los que la gente se decide a salir de repente y todo se ve más lleno de lo normal. Él ya había avanzado lo suficiente en la fila para pedir su desayuno gracias a que Zayn siempre salía casi corriendo del aula de clases y lo arrastraba consigo, nunca se lo había agradecido, pero ese día al ver el montón de gente simplemente lo hizo. Ella había llegado tarde y miraba todo el lugar preocupada, como si por su mente sólo pasara la idea de que tal vez nunca iba a salir de ahí. Resignada empezó a caminar recorriendo la larga fila dispuesta a ubicarse en el final pero él la detuvo dejándola ponerse delante de sí cosa que ella agradeció con una de esas sonrisas que él había amado cuando ni siquiera habían cruzado palabras. Desde ese día, el que llegara primero le guardaba lugar al otro… lo demás simplemente se había dado con el tiempo.


- ¡Hey! – una voz que no le resulto familiar resonó en su mente sacándolo de sus pensamientos enamorados acerca de su novia.


Volteó al lugar de donde había provenido aquella voz y se encontró con aquel rubio agradable, amigo del novio de Louis, que se acercaba a él con una enorme sonrisa la cual él correspondió al instante.

Realmente le había agradado ese chico desde que habían cruzado palabras por primera vez, era agradable y por lo que notaba, era buen amigo.


- Hola – le respondió Liam el saludo amablemente.
- Te buscaba – dijo Niall ya frente a él con una enorme sonrisa.
- ¿A mí? – preguntó extrañado - ¿En qué puedo ayudarte? – corrigió al recordar sus modales.
- Si – se notó un poco nervioso – creo que te debo unos chocolates.


Liam abrió los ojos como platos ante aquello y simplemente sonrió al recordar aquella conversación que habían tenido hacia un tiempo atrás, la cual Zayn había interrumpido con ese humor de perros que se cargaba todos los días.


- Ahora recuerdo – dijo el castaño sin más manteniendo esa sonrisa.


El chico rubio miró a todos lados mientras Liam se divertía al imaginar que tal vez se estaba asegurando de que Zayn no estuviera cerca esta vez.


- ¿Quieres ir ahora? – preguntó el chico después de notar que todo a su alrededor estaba tranquilo.


Liam miró su reloj de muñeca dudando debido a que tenía que ir por Danielle a su academia de danza más tarde para después llevarla a cenar, pero al levantar la mirada y toparse con esos ojos azules suplicantes simplemente no pudo negarse.

Ambos caminaron por las calles hacia una tienda que Niall le había asegurado “era la mejor” mientras hablaban de distintas cosas que realmente carecían de sentido para cualquier persona ajena a ellos, pero daba igual, eran nuevos amigos y eso era normal, encontrarle sentido a las cosas que carecían de este.


- Entonces dices que Harry es un loco por los libros al igual que Louis – preguntó Liam divertido.
- Así es – dijo aguantando la risa – es un maniaco.


Ambos soltaron una carcajada limpia ante ese comentario mientras entraban a una enorme tienda que contaba con una gran cantidad de productos de distintos tipos de chocolate, lo que dejó a Liam sorprendido debido a que él nunca en su vida había visto aquel lugar.


- ¡Vaya! – dijo sorprendido - ¿Cómo es que conoces este lugar?
- Mi hambre me ha llevado a lugares inimaginables.


Volvieron a reír mientras la mente de Liam trabajaba dándose cuenta de que pasar tiempo con el rubio no era perder, simplemente era ganar. Ya había reído hasta casi llorar en dos ocasiones debido a las ocurrencias de Niall y eso simplemente le agradaba.

No era que no se divirtiera con Louis y Zayn, al contrario, se divertía demasiado, pero últimamente había sentido el ambiente algo cambiado, demasiado diferente. No había llamado la atención de Zayn en forma de regaño desde hacía unos días, cosa que no era normal porque una de sus cualidades era sacarlo de sus casillas y Louis… él simplemente se comportaba como diariamente, a él ni siquiera una tormenta lo derrumbaba.


- Zayn amaría esto – dijo en voz alta al recordar a su amigo.
- ¿Es especial para ti? – preguntó Niall al escucharlo decir aquello.


Liam miró atento a aquel chico razonando esa pregunta. ¿Zayn era especial para él? Claro que lo era, sólo que no compartían demasiadas cosas, eran muy contrarios y por eso discutían a cada rato pero eso no quería decir que no lo quisiera, si lo quería y mucho, era de sus mejores amigos, incluso él había vivido a su lado todo el transcurso de su relación con Danielle.


- Tanto él como Louis son especiales para mí – dijo con una enorme sonrisa pensando en ellos.


Niall sonrió un poco y después simplemente cambió de tema empezándole a mostrar todos y cada uno de los chocolates que ya había probado de aquella tienda, los cuales eran demasiados, de hecho Liam había dejado de contarlos cuando había llegado al número veinte.

Mientras el rubio hablaba pasó por su mente comprar chocolates de más, quería llevarle a su novia a pesar de que sabía que aquello sería romper con su estricta dieta, pero la conocía tanto que sabía que ella los comería sin decir nada malo, regalándole una de esas sonrisas encantadoras que lograban que ella pareciera un hermoso angel.


- Piensas mucho – dijo Niall.
- Bueno, creo que me pasan muchas cosas buenas y siempre las pienso – respondió sonriendo amable – creo que hay detalles que vale la pena recordar.


Niall se quedó pasmado debido a que nunca en su vida había escuchado a una persona hablar de esa manera, de hecho, normalmente escuchaba que las personas simplemente se quejaban de todo y se torturaban con los recuerdos malos en lugar de valorar lo bueno que la vida les ofrecía y eso de Liam simplemente logró que su corazón latiera con intensidad. Esperaba llegar a ser uno de esos buenos recuerdos que de repente llegaban a su mente robándole sonrisas bobas, eso era lo que más deseaba en el mundo en ese momento.


- Admirable – atinó a decir.


Liam soltó una sonora carcajada. Jamás lo había escuchado reírse, tampoco era que lo conociera desde hacía mucho tiempo, pero estaba seguro de que quería verlo reír de esa forma muchas veces más.


- ¿De qué te ríes? – preguntó Niall sin poder evitar contagiarse.
- Es solo que – rió un poco más – tu cara de sorpresa es realmente divertida.
- ¿Cuál?, ¿Esta? – dijo el rubio para después poner la cara que había puesto anteriormente.


El castaño rió con ganas al volver a ver esa expresión en su rostro y el de ojos azules simplemente pudo sonreír al darse cuenta de que tal vez… sólo tal vez, tenía enfrente a la mejor persona que jamás había podido conocer y no sólo físicamente hablando, también tenía una personalidad llena de bondad.

Después de comprar una gran cantidad de chocolates ambos salieron de la tienda y caminaron hacia un parque cercano donde se sentaron a hablar de distintas cosas las cuales en ocasiones simplemente no tenían coherencia alguna, pero con esto Niall al final se había dado cuenta de que de la boca de Liam nunca hacía falta la mención de “Zayn”, siempre decía algo sobre él y si no lo hacía se encontraba algo que hacía que lo recordara, pero siempre estaba. Tal vez eso era un golpe bajo, tal vez simplemente con eso se daba cuenta de que si había una persona que tenía una oportunidad con aquel castaño encantador era aquel que tenía pinta de chico malo, de mal carácter y estilo urbano.

Hablaban mientras comían un poco de todo lo que habían comprado hasta que de repente el móvil de Liam empezó a sonar interrumpiéndolos con una melodía que Niall conocía, “Torn”.


- ¿Sí? – contestó el castaño disculpándose con la mirada.


Niall hizo un movimiento con la mano indicándole que no era tan importante y sin más miró a su acompañante que no apartaba el móvil de su oído.


- Oh… lo siento Dani – miró el reloj – no me di cuenta de la hora – sonó realmente arrepentido – pues… - pensó un momento – si me pudieras esperar unos minutos me apresuraría para llegar por ti, ¿Qué te parece? Si no pues nos veríamos hasta la hora de la cena – dijo tranquilo sonriendo – de acuerdo – soltó una pequeña risa – voy para allá entonces.


Después de eso el chico castaño cortó aquella llamada que al parecer lo había dejado demasiado alegre puesto que no había dejado de sonreír ni en el más mínimo segundo.


- Era…


Iba a decirle a Niall que aquella llamada había sido de su novia pero se vio interrumpido nuevamente por el sonido insistente de su móvil, volviéndose a disculpar, contestó.


- ¿Si? – dijo con un poco más de fastidio – no, Zayn – giró los ojos como si no le agradara lo que sea que el moreno le estuviera diciendo – te eh dicho que no – volvió a decir frunciendo ligeramente el entrecejo – son cosas que tienes que hacer tu solo – insistió cansado – sólo concéntrate Zayn, sé que puedes – le alentó con lo que fuera que le estaba diciendo – confío en ti – dijo en un tono suave – de acuerdo – sonrió aliviado – yo también.


Al terminar aquella llamada Liam miró su reloj dándose cuenta de que desafortunadamente no podía perder más tiempo así que sin más se comenzó a levantar.


- Me tengo que ir Niall – dijo con una sonrisa – me la pasé muy bien contigo.
- Yo también – forzó una sonrisa.
- Espero poderlo repetir algún día que no tenga pendientes - suspiró – nos vemos.


Sin más salió corriendo dejando a Niall con el corazón confundido. No sabía exactamente a quien iba a ver, si a Zayn o a “Dani”, pero simplemente sentía que quería ser algún día la razón de su prisa y simplemente la razón por la que dejara a alguien botado.