~Never Gonna Be Alone [Nicholas Jonas]

CAP CAP CAP CAP CAP CAP CAP CAP CAP CAP (?

ccaaap porfavor

sigue plis

sigue

OMJ!!!

SEGUILA!!!

SEGUILA!!

:D

.!

SEGUILA!!!

SEGUILA!!!

.

SIGUUUUUUE

Nueva lectora:

Tu Nove es muy bonita...

Ya quiero que sigas

cuidate, besito

mar

SIGUUUE

¡Volví!

Antes de todo: bienvenidísima maar_jonas! Gracias por leer a tí y a todas las demás :D
Yo misma me he sorprendido cuando he escrito el capítulo en un cuarto de hora y aunque aquí ya es un poquito tarde (la 1 de la mañana casi) no podía esperar para dejaroslo. If You Belive de Rachael Lampa que sale en la banda sonora de A Walk To Remember (en España, Un Paseo Para Recordar)me ha inspirado así que lo pondré para que leáis con su música de fondo aunque la letra no tenga nada que ver con la situación de Cassie y Nick.
Gracias por seguir siempre ahí! Un besazo! Os quiero! :love:

16.-

—¿Puedes darme tu número de teléfono? —insistió, ignorándome.
—No —contesté tajante—. ¿Para qué lo necesitas?
—Normalmente y que yo sepa, los números de teléfono se necesitan para llamar a alguien —dejó escapar una risita graciosa que amenazaba con hacerme perder la cordura en cualquier momento—. Además, estoy ocupado esta semana y tendré llamarte si hay cambios de última hora.
—Claro, ese es el problema de las bodas, que las cosas de última hora se te echan encima.
—Has dado en el clavo —dijo sin una pizca de humor en su tono. Carraspeó, volviendo a recuperarlo—. ¿Me lo darás ahora?
—No —repetí—. Además, yo no he cedido a esa artimaña que has planeado.
—Te equivocas. Digamos que es un «hoy por ti, mañana por mí».
—¡Así que esto es por lo del avión! —Exclamé, desprendiéndome súbitamente de él, finalizando el contacto corporal, algo que de pronto me hizo sentirme desprotegida. Decidiendo que no pintábamos nada en una pista de gente bailando acarameladamente, Nicholas me tomó suavemente del brazo llevándonos a un sitio donde pudiéramos conversar—. No voy a devolverte el favor porque nadie te obligó a ayudarme.
—Como tú dijiste, eres un poco latosa y estoy seguro que no me habrías dejado dormir como pretendía hacer.

Mi boca formó una perfecta O de sorpresa inicial ante el comentario, que quité inmediatamente para substituirla por, confié, una de absoluto desprecio.

—Eres un impresentable —espeté.

Se pasó una mano por el pelo, mirando hacia otro lado antes de volver a posarlos de nuevo sobre los míos.

—Lo siento, Cassie. Era mi idea de una broma que te garantizo, en mi cabeza sonaba mejor. De hecho, me pareció uno de los mejores viajes que he tenido. La mayoría son aburridos pero contigo… estuvo bastante bien.
—Tu táctica no está funcionando en absoluto —mentí, preguntándome cuanto duraría de pie si me seguían temblando las piernas de aquella manera. Disimuladamente, me apoyé en la pared, cruzándome de brazos.

Rió armoniosamente, mostrando una impecable dentadura.

—No estamos en igualdad de condiciones —observó—. Yo te di mi número de teléfono y, sin embargo, no tengo el tuyo.
—Lo hiciste por pura casualidad y solo para quedar bien.
—¿Y lo conseguí?
—Sí —admití, forzada por su mirada—. Y pensé en llamarte dos segundos antes de enterarme que estabas a punto de casarte con Jane. Supongo que algo me detuvo, porque si no, habría echo el ridículo de una forma nunca vista —sonreí sin gracia, encogiéndome de hombros.
—¿No crees que podemos ser amigos? —preguntó inocentemente.

Claro, amigos. Mi corazón palpitó furioso en el pecho, renegando de aquel tipo de relación porque desde un principio se había sentido de otra manera.

—Eh —titubeé, sintiéndome muy incómoda de repente—. Es sólo que Jane…
—¿Por qué sólo ves el lado malo de las cosas? —Dijo en un tono increíblemente dulce—. En la época del instituto todos queremos ser populares y jactarnos de los demás por creernos el no va más, pero te puedo asegurar que Jane no es así. Por lo menos ya no. Si fuera como tú realmente crees no me habría enamorado de ella y le hubiese pedido matrimonio… ¿No te parece? —inquirió, buscando mi mirada.
—No lo entiendes, Nicholas.
—Nick —corrigió.
—Lo que sea.
—Por que no me lo explicas más tranquilamente, digamos… ¿sábado a las siete?

Analicé los pros y los contras en contados segundos y llegué a la conclusión de quería verle de nuevo. Lo necesitaba y mi corazón no me daba motivos suficientes para no dejar de verle, ni siquiera Jane era una razón de peso. Aunque solo fuera una última vez, lo había decidido.

—De acuerdo —cedí, contrariada por los pensamientos que amenazaban ahora por haber aceptado—. Tengo tú número de móvil en casa. Te mandaré un mensaje para que sepas quien soy.
—Perfecto —sonrió angelicalmente por haberse salido con la suya sin casi dificultades. Besó mi mejilla como lo había echo la última vez en el aeropuerto y me dejó ir después de decirme— Entonces, nos vemos el sábado.

Mi hermana, con una sonrisita triunfante acababa de arreglarme una cita casi sin saberlo y, para colmo, ahora debía enfrentarme a mi padre, que tenía la mandíbula tensa como un perro rabioso a punto de morder y me temía que ni el regalo que le había traído de Francia (puros de importación, muy difíciles de conseguir) pudiese bajarle los humos, que fue exactamente lo que sucedió.

OMJ!!!... deos!! Nicholas!!

cmom lo AMO!!!! :L:

SEGUILA!!!

SEGUILA!!!

:D

.!

SEGUILA!!!

SEGUILA!!!

:D

.!

oh wow , nicholas nunca te cansas de seguir encantadome? aish este niño ..
bueno espero leer pronto nuestra salida del sabado
haha
un beso
bye

Seguila!!!

:D

.!

SIGUUUUUUE