Re: Enamorada de Un Criminal [Harry y Tu]

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 4:59 pm

CAPITULO 38 :

NARRA NIALL:

No me había contestado la llamada, de nuevo. La haría reír diciéndole que su desayuno ahora era más importante
que yo. Estacioné el auto afuera de su casa, caminé hacia su puerta y toqué, no había señas o rastros de que ella
estuviese dentro. Toque una vez más, esta vez, con los nudillos. Nada. Miré alrededor, estaba todo muy quieto,
excepto por el ruido de algunas aves. Caminé por su jardín, ¿hoy no me ladrará Leo? Miré alrededor, vi un bat de
metal en el suelo.

— ¡Leo!

Salté la cerca y corrí hacia el perro, lo habían golpeado con algo. Leo lamió mi mano mientras lloraba, se
escuchaban sus aullidos. Caminé hacia donde estaba el bate, había algo de sangre esparcida en el suelo. Llegue a
pensar que (tn) estuviese involucrada con alguna pandilla de criminales, pero, eso no podía ser. No, de ninguna
forma. Mi estomago comenzó a revolverse, sintiendo una gran ansiedad. ¿Dónde estaba (tn)?

Me dirigí hacia la puerta trasera para echar un vistazo hacia adentro, por la ventana. Abrí la puerta, no tenía
seguro puesto, entré y no vi nada fuera de lo normal. Caminé hacia la cocina, imaginando que (tn) estaría
desayunando ahí, pero no había nadie. Miré alrededor, había una taza rota en el suelo con algunos platos rotos
alrededor. Qué extraño.

Subí las escaleras, su habitación lucía normal y tranquila como siempre, la busqué en todo el lugar, hasta debajo
de la cama, pero ella no estaba. Sólo su teléfono estaba ahí, indicando en la pantalla mis llamadas perdidas.
Salía de su habitación para comenzarla a buscar en las calles cercanas, cuando su teléfono comenzó a vibrar sobre
su escritorio. Me regresé, era un número que ella no tenía registrado, dudé un poco. Contesté.

— ¿Hola? — Esa voz, se me hacía tan conocida.
—¿Quién habla?

Entonces, al otro lado de la línea, colgaron. ¿Qué? ¿Quién era ese chico? Ésta voz, sabía que la había escuchado
antes.

Salí de la casa y caminé hacia Leo, lo cargué y lo llevé hacia mi auto. Esto no era nada normal, lo recosté en el
asiento de atrás y me fui a mi casa, tenia que hacer por ése pequeño. Mientras conducía, no paraba de mirar
alrededor por algún rastro de (tn)

NARRA HARRY:

Llamé y llamé. ¿Quién m¡erda contestó mi última llamada? Sabía que no era alguien que conocía.
Mi memoria recordó el día en que había visto a (tn) con... Niall Sí, ése era su nombre, él había contestado.
¿Por qué? ¿Acaso estaba con él?

Le daba vueltas a mi habitación, no había rastros de mi hermano después de que llegué de comer de Mc’Donals.
Me veía tan estúpido e infantil en ese tonto lugar, pero no puedo hacer nada cuando se me antoja una hamburguesa.
Me preocupaba que mi hermano estuviera haciendo una locura.

Tiré las pocas decoraciones que había en la mesa, cayeron todas rotas en el suelo. Estaba preparado para matar
a mi hermano y a todos esos mar¡cas que él hacía llamar 'sus hombres'.
Había ideado un plan que no me fallaría ahora ni nunca, me senté en el sillón mirando hacia la ventana por alguna
señal de la camioneta, salí de la casa buscando alguna manera de detener todo esto que estaba pasando. No podía
llamar a eso una pesadilla, ya que mi vida entera ya era una pesadilla. Maldito Alex, si creía que lastimarla
estaba totalmente equivocado.

Caminé alrededor por las calles por casi dos horas y finalmente decidí regresar a 'casa' o también llamada el
peor lugar del mundo. Di vuelta en la esquina de la calle, vi nuestra camioneta. Me hubiera detenido pero no
quería captar la atención de nadie. En vez de eso desaparecí rápidamente hacia la casa que estaba en venta.
Salté las cercas de varias casas y caí de pie. Me quité el cabello negro que me estorbaba del rostro, había
sido una buena idea pintármelo.

Me acerqué al área, de cuclillas, y saqué mi pistola. Saldría vivo de esto, con (tn). Incluso si era la última
cosa que haría en mi vida.

NARRA (tn):

Sentí un dolor horrible en mi columna, moví un poco mi cuerpo, estaba tirada en el suelo. Todo mi cuerpo se
sentía como si me hubiese quemado en el horno, estaba muy adolorida y no era capaz de moverme.

Mi memoria trataba de recordar lo que había pasado hace un momento, y el miedo se apoderó de mi mente, me
habían secuestrado... no quería saber de quién se trataba. Estaba tan asustada, más que aquella vez en la
que trataron de violarme en aquel callejón. Me sorprendió un poco que pensara en Harry. En verdad amaba a
Harry, aún más de lo que amaba a Niall, la verdad dolía.

De repente, sentí una pequeña patada en mi estomago, traté de no abrir mis ojos, no quería ver la cara de
las personas que se encontraban ahí.

— ¿Está despierta? — Preguntó una voz desde el pasillo.
— Todavía no. — Otra voz cercana respondió.
— Bueno, tiene que despertar, la inyección solo dura dos horas. — Dijo el chico del pasillo.
— ¿Encontraste a Harry? — Preguntó el chico que estaba cerca de mí, contuve la respiración.
— Aún no, le irá mal al imbécil cuando la vea.

Traté de no emitir ningún sonido o tratar de escapar, ésos chicos me habían traído hasta aquí. ¿Los habrá
enviado Harry? Entonces una palabra llegó a mi mente, NO. El habría ido por mí por él mismo.

— ¿Qué le pasara a la chica? — Hubo un poco de silencio.
— Morirá hoy en la noche, cuando encuentre a Harry.

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 4:59 pm

CAPITULO 39 :

Mi cuerpo casi me obligaba a gritar y salir corriendo, nunca me iban a encontrar, entonces un sentimiento se
apoderó de mí, preguntándome... ¿A quién le importaría si muero? No debía de temerle a la muerte, es solo el
principio de un pacífico descanso.

Ya no escuchaba a nadie más. Abrí un ojo, la habitación estaba vacía. Lentamente me levanté, miré alrededor...
estaba en una cochera vacía. Busqué alrededor por algo que me pudiera ayudar, pero no había nada.

– Hola nena.

Giré mi cabeza bruscamente, lo cual me dolió, vi a un chico de pie recargado contra la puerta, él no traía
mascara. Su voz me decía que él era el chico que estaba en el pasillo, el mismo que dijo que iba a morir.
Tenía cabello castaño obscuro y estaba casi igual de largo que el de Harry. Caminé hacia atrás un poco, topé
con un mostrador, él me sonrió con maldad. No era tan grande de edad, se veía alrededor de los veinte tantos.

– Creo que tu nombre es...– Dijo – (tn). – No contesté. Entró y cerró la puerta, mi corazón comenzó a latir con
fuerza cuando le paso el seguro a la puerta. – ¡No te asustes!, nos vamos a divertir un rato.

Me miraba de arriba hacia abajo mordiéndose los labios y lamiéndolos un poco, mientras hacía una cara totalmente
disgustante. Me quedé inmóvil, entonces mi mano se encontró con un objeto de metal que había sobre el mostrador,
un desarmador.

NARRA HARRY:

Me faltaba poco para llegar a la casa. Mi plan no funcionaría muy bien, necesitaba estar para que resultara. Me
agaché y me acerqué, mientras pensaba en todas las respuestas aún antes de que comenzara a preguntarme cosas.

Seguramente (tn) estaba en la cochera, esos bastardos estaban alrededor de la casa revisándola y buscándome.
Todas mis armas estaban escondidas alrededor de la casa, esperándome para que las encontrara. Llevaba una pistola
con silenciador. Encontré a mi primera víctima, había olvidado su nombre.

Corrí rápido y sin hacer ruido hacia él, saqué mi navaja y la clavé en su cuello, gritó. Lo arrastré hacia una
esquina, lo escondí en los arbustos y regresé a lo mío. No quería que Alex me viera y en ese momento acabara
con (tn), presentía lo que iba a hacer, estaba seguro de que quería matar a (tn) ante mis ojos.

Pasaron algunos segundos, mi coraje aumentó tanto que me dio fuerzas suficientes para matarlos a todos. Escondí
los cuerpos a los alrededores de la casa y entré. Vi un puño frente a mí. ¡ZAS! Alguien me había sacado el aire,
corrí hacia el chico, él cayó al suelo. Abrí la boca para tomar un poco de aire, y poco a poco volví a respirar.
En ese momento escuché un grito que venía del garaje.

NARRA (TN):

Le clavé el desarmador que había tomado hacia su pecho cuando estaba a escasos centímetros de mí. Ahora estaba
inmóvil mientras me deshacía de sus brazos. Se arrancó el desarmador de su pecho, no había sangre, traía puesto
un chaleco. Su rostro se veía más furioso. Corrí hacia la puerta, logre quitarle el seguro. Lo escuche caminar
hacia mí.

— ¡Perra! — Me gritó.

Me tomó por atrás, grité con fuerza, me golpeé con la puerta. Me tiró al suelo, grité tan fuerte que sentí ese
mismo dolor de hace un rato recorrer mi espalda hasta mi cabeza. Él solo se reía, traté de arrastrarme en el
suelo. Me agarro de las caderas, tomando mis pantalones, y se acercó a mí, grité otra vez y de repente escuché
disparos. El tipo trataba de bajarme los jeans, pero se detuvo cuando los escuchó. Se levantó rápidamente y
caminó hacia la puerta. Se asomó hacia afuera y regresó hacia el garaje dejando la puerta sin seguro. Me agarró
del cabello arrastrándome en el suelo. Me acercó más hacia él y me susurró al oído: — Lo verás por última vez.

Sentí mis ojos derramar lagrimas, entonces la puerta se abrió, mi cuerpo estaba paralizado de ansiedad. Lo quería
ver, tan siquiera por última vez. Mi cuerpo estaba quieto, y podía escuchar a mi corazón latir fuerte contra mi
pecho.

NARRA HARRY:

Vamos, ¡no me pueden atacar tres al mismo tiempo! Uno me dio un puñetazo en la espalda, otro se aferró a mi
rodilla, y el último enredó las manos alrededor de mi cuello. En una milésima de segundo, saqué mi pistola de
debajo de mi camisa, apuñalando al más cercano, y le disparé a los otros dos en la cabeza, no fallé ningún tiro.
Cayeron al suelo. Escuché otro grito, los pateé hacia un lado y corrí. Estaba cada vez más cerca de (tn).

Otro estúpido bastardo apareció detrás de mí jalándome del codo, le disparé en la cabeza y continué corriendo.
Sentí otra persona detrás, volteé y salté, avanzando más hacia el garaje, en segundos de nuevo me di la vuelta,
disparándole al tipo en el pecho en lo que él sacaba su pistola, no le di tiempo siquiera de apuntar. Caí de
rodillas, y vi un destello a un lado. Giré mi cabeza a tiempo, la puerta del garaje se cerró, corrí hacia ella.
Tenía tan solo unos minutos antes de que la policía apareciera, lo sabía. Pero ésta parte de la ciudad era donde
cosas como éstas ocurren y nadie encuentra a los culpables.

Tomé el cerrojo de la puerta, me detuve antes de entrar. Todo eso había sido tan fácil, entonces, me di cuenta de
lo que él estaba planeado. Alex quería que matara a todos sus cómplices, pero no había visto a John, él era su
mejor hombre. Me pregunto qué pretendía hacer si yo lo mataba, de nuevo mi mente me dio todas las respuestas. Él
no planeaba morir, John hubiera venido hasta acá y detenerme... y matarme probablemente. Me quedé inmóvil.

Tenía que salir de aquí vivo y con (tn). Y ya estaba a pocos metros, de pie y completamente inmóvil. Una parte
de mí quería correr, derrumbar la puerta y dispararle a Alex para después salir corriendo con (tn) en mis brazos,
la mantendría a salvo. Era una promesa que estaba seguro de cumplir. Sus gritos se escucharon otra vez, sabía que
Alex quería que entrara, todos esos terribles pensamientos, imaginándolo lastimando a (tn). Junte las fuerzas
necesarias para hacerlo, y abrí la puerta del garaje

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 5:00 pm

CAPITULO 40 :

NARRA (TN):

Jaló fuertemente mi cabello, y me azoto contra el suelo una vez más.

— ¡Grita! — Me ordenó. Apreté mis labios y traté de levantarme pero el dolor se había apoderado nuevamente de mi
espalda.Apenas y lograba gritar.

Me pateó en las costillas haciendo que me faltara el aire, de nuevo, caí al suelo. En ese momento el coraje me
invadió. ¿Quiere golpes? Bien, le daría algunos golpes.Pretendí que estaba totalmente adolorida, grité un poco
y me detuve sabiendo que eso era lo que quería.

— ¡Bastardo! — Le grité, tosí al final.
— ¿Eso es todo?

Me golpeó en la cara, en la mejilla. Caí de nuevo, pero no grité. Me pateó el estomago, no paraba de toser.
Escupí algo rojo, lo que sólo podía ser sangre. Recargué mi espalda contra la pared, y respiré tratando de que
el aire regresara a mis pulmones. El sujeto miraba hacia alrededor como si algo anduviera mal, al parecer él era
el líder de todos esos soquetes. Me miraba con disgusto. Caminó hacia la puerta, con cuidado, recargó su oreja
contra la puerta, tratando de escuchar. Echó un vistazo hacia afuera y salió. Con todas mis fuerzas, corrí hacia
la puerta y salí, mientras lo vi mirando hacia abajo, mirando hacia sus hombres... estaban muertos en el suelo.
Me vio y sacó su pistola mientras corría hacia la esquina.

*¡BAM! ¡BAM!*

Caí al suelo, me alejé un poco de él. Había fallado, en silencio le agradecí a Dios. Corrí hacia una ventana
cercana y escuché otro disparo.

*¡BAM!*

Un dolor paralizante ahora se situaba en mi hombro, mientras caía al suelo. No podía mover mi cuerpo, intentaba
mientras luchaba para levantarme. Vi a un sujeto de pie a mi lado, él fue el que me disparó. Me detuve, incapaz
de controlar el dolor de la parte superior de mi cuerpo, respiré profundo. Sentía como si estuviera cayendo hacia
un agujero sin final mientras imaginaba ver aves volando en el cielo.

— Alex... — Mi cuerpo sintió una descarga al escuchar su nombre... se llamaba Alex, ¡él era Alex!
— John, trae a Harry.

El sujeto que me disparó se llama John, él caminó hacia no sé dónde. Alex era... ¡el hermano de Harry! Miré de
reojo mi hombro, y luego a lo lejos rápidamente. Pude ver un agujero en mi cuerpo de donde presumo provenía el
intenso dolor. Me quedé tirada en el suelo. Este horrible dolor, prefería morir. Apenas y me pude dar cuenta de
que mi boca estaba abierta, había estado gritando. Escuché pasos hacia mí, sentí una respiración a un lado de mi
oreja.

— Te mereces esto y más. — Me susurraron al oído.

Cerré mi boca, sorprendentemente, me reí entre dientes por lo que Alex me había dicho, luego comencé a reírme
más fuerte, escuché disparos, yo seguía riéndome.

— Estas completamente loca, ¡qué estúpida eres!

Dejé de reírme, mi hombro y mi cuerpo entraron en calor y sentía un poco más cómodo. Sentí como si me estuviera
quedando dormida.

— ¡Maldita sea! Hijo de... — Un sonido lo interrumpió.

*¡BAM!* *¡BAM!* *¡BAM!* *¡¡BAM!!*

Abrí mis ojos de par en par, no vi a nadie. Miré a un lado, Alex estaba tirado en el suelo. Escuché un paso,
después otro, mis ojos parpadeaban mucho, era casi imposible mantenerlos abiertos. De repente vi un brazo salir
de donde daba la vuelta en la esquina. Y lo vi a él. Harry miró hacia su hermano con tanto desprecio, luego miró
hacia las cosas que había alrededor y finalmente, sus ojos se dirigieron a mí.

Harry estaba en shock, inmóvil. Luego su rostro cambió y se veía... triste. Caminó como zombie hacia mí, mis ojos
apenas podían estar abiertos, el peso de mis parpados se hacía cada vez más fuerte.

Estaba a un lado de mí, abrí los ojos de nuevo, Harry estaba llorando. Sus lágrimas eran tan claras como un
cristal. Me estaba tomando el brazo, aún no me había dado cuenta de eso ya que todo mi cuerpo estaba entumido.

— Harry... — Dije entrecortadamente, parecía un suspiro.
— El trataba de decir algo, se perdía en sus palabras. — Lo siento tanto (tn). — Me cargó en sus brazos.—Yo te
ayudaré, te voy a proteger, voy a estar aquí... te.. prometo que haré todo lo que no he hecho hasta
ahora. — Tartamudeaba, con los ojos aun repletos de lágrimas.
—Te amo también...— Susurré, no tenía fuerza para nada más. No podía seguir luchando contra la obscuridad que
se apoderaba de mí desde el disparo.
— ¡(tn)! ¿(tn)? Vamos, por favor, ¡Por favor no me dejes!.

Dibuje una pequeña sonrisa en mi rostro y le susurré de nuevo: — Te amo...

NARRA HARRY:

– Oh, no... ¡(tn)! ¿(tn)? Vamos, por favor, ¡Por favor no me dejes! – Le decía con lagrimas saliendo de mis
ojos. Ella no podía irse, no podía dejarme ahí solo. Aquí en este mundo que no preparaba nada para mí, ella era
la única persona en este mundo que amaba. No había nadie más.
– Te amo... – Susurró de repente mientras sus ojos se cerraban pacíficamente.

Cuando sus ojos se cerraron, yo casi volaba. Corrí tan rápido desde la maldita casa que para mí era un infierno,
corrí por el pasillo y tomé las llaves que estaban colgadas, tomé también un pañuelo que estaba en la sala y lo
até a su hombro para detener la sangre que derramaba. Me acerqué a su pecho, sus latidos aún se escuchaban. Cada
latido me daba la fuerza para no detenerme.

Corrí hacia la camioneta y la encendí, cargué a (tn) en mis brazos y la dejé en el asiento trasero, la acomodé
bien, tratando de que no se sintiera incomoda. Me subí al asiento delantero y conduje a toda velocidad, seguía
mirando de reojo hacia ella. Esto no podía estar pasando.Presionaba cada vez más el acelerador, todo esto había
sido mi culpa, ahora ella estaba muriendo... todo por mí. ¿Cómo pudo pasar? Seguí conduciendo rápido... (tn).
La amaba demasiado, no iba a dejar que su vida se escurriera entre mis dedos solo porque... porque... porque le
fallé. No me importaba quién encontrara la casa llena de cadáveres o de paredes con sangre. Incluso sabía que
podía ir a la cárcel por todo eso. Pero de algo estaba seguro, (tn) sobrevivirá.

Me limpié la cara con mi mano, había estado llorando, como nunca lo había hecho desde que mi madre murió. No
podría repetirse la historia, no con (tn). Escuché una respiración entrecortada, era (tn), me detuve en la
gasolinera. Tenía que ir con la última persona que podría ir, mi dignidad no me importaba. Seguí conduciendo
acercando y di la vuelta ignorando todo alrededor, esto era por (tn).

NARRA (TN):

Una obscuridad se acercaba cada vez mas. La obscuridad era cálida, pero sabía que me estaba muriendo, me sentía
como si estuviera ebria, me estaba quedando dormida.Sabía que no podía aceptar que la obscuridad me llamaba, no
podía. La voz de Harry resonó en mi cabeza. "–Vamos, por favor, ¡Por favor no me dejes! –"

Su voz me mantuvo un poco despierta, traté de alejarme de la obscuridad cada vez que lo escuchaba, tenía que...
vivir. Sentí mareos, me sentí drogada. Luchaba para mantenerme con los ojos abiertos, pero no era un súper héroe
o algo así. Estaba totalmente desconectada del mundo real. Ahora vivía en el tornado que atormentaba mi
conciencia. No podía sentir mi cuerpo, todo era como si estuviera soñando. Donde quiera que estuviera dentro
de mi sueño, la obscuridad me acompañaba y me llamaba para entrar en ella y no preocuparme del mundo de nuevo.
Recordé la voz de Harry y la obscuridad se debilitaba, pero después volvía a regresar.

De repente escuché una voz resonando fuerte, Harry estaba hablándome.

– (tn), por favor espera. Estarás bien, te lo prometo, ésta vez cumpliré.

El eco de su voz me hizo mirar alrededor buscándolo, había escuchado su voz susurrándome al oído. Ansiaba
escuchar más, pero al parecer eso había sido todo. La estúpida obscuridad que me atormentaba se acercaba a mí
llamándome, pero yo seguía pensando en Harry, la estaba evitando con la mejor de mis armas... Harry. Continuaba
haciéndolo, tenía que seguir respirando.

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 5:01 pm

CAPITULO 41 :

NARRA HARRY:

Su cuerpo caía en mis brazos mientras corría detrás de mi tío. Había venido con él. Ahora sabrá que no estoy
muerto, lo que básicamente arruinará todo. Me aferré a la mano de (tn) todo el tiempo, sintiendo su corazón
latir cada vez más lento. Su piel se sentía casi como un hielo, la miré a sus ojos, tenía toda una vida por
vivir aún, pero su rostro parecía estarme dejando.

Mi estomago se revolvía, le grité a mi tío para que fuera más rápido, ahora íbamos en camino hacia el
hospital. Estaba ahora con ella pero sabía que llegaría el momento en el que no podría entrar acompañándola,
y eso me mataba. ¡Todo había sido mi culpa por no llegar antes! Sentía que las lágrimas volvían a aparecer.
Mi tío aparco la camioneta y se bajo de ella en cuestión de segundos, corrió hacia la puerta trasera para
abrirme. La tomo en sus brazos, solté su mano, sintiendo un calor correr en mí mientras me ponía cada vez
más pálido. Mi tío Ben corría hacia las puertas del hospital con (tn) en brazos. Todo lo que sabía, era
que la volvería a ver.

Mi tío pedía ayuda a quien pasaba. Sabía lo que iba a hacer si ella no sobrevivía. ¿Qué otra cosa haría?
Me quitaría la vida, por quitarle la suya. Me quedé en el auto mirando hacia dentro del hospital, hasta que
mi tío desapareció de mi vista. Abrí la puerta del auto y salí, quería sentir cada centímetro de la piel
de (tn), quería sentirla una vez más. Miré hacia el cielo mientras el sol se desvanecía. No hacía esto
seguido, pero le recé a Dios para que ella estuviera bien.

NARRA (TN):

Esperé de nuevo, quería escuchar la voz de Harry, pero no había nada, me sentía mareada. La obscuridad
aumentaba, se sentía como una eternidad estar en ella, pero supongo que solo habían pasado un par de horas.
Sentí que jalaban mis brazos de los lados, no podía abrir mis ojos para ver qué era, de repente, sentí una
corriente de aire frío pasar a través de mí. La calidez que sentía antes, se había ido. Ahora escuchaba gente
murmurando en voz baja, como un zumbido, crecía, cada vez se escuchaba más fuerte. Quería estar cálida otra
vez, como antes, pero eso había desaparecido junto con la tormentosa obscuridad.

Me empujaban hacia una superficie de agua, como si me quisieran ahogarme. Luché contra todo, pero no podía
abrir los ojos. Estaba tan incómoda. Sentí un dolor recorrer todo mi cuerpo, algo me jalaba el hombro. No
podía llorar fuerte, ya que mi cuerpo no me lo permitía. Los murmullos se escuchaban más fuertes, tanto que
me permitieron escuchar una voz más clara.

— Dame las pinzas.

Traté de no dejar ese pacífico lugar que de repente había aparecido en mis pensamientos, estaba debajo del
agua, traté de relajarme pero algo me estaba jalando hacia arriba. El agua se esparcía y la superficie estaba
tan cerca. De repente, un tirón doloroso me hizo abrir los ojos bruscamente, me aterroricé. Me alejaron de la
muerte. Parpadeé, vi algunas figuras color azul cielo alrededor de mí, de repente, las imágenes comenzaron a
distorsionarse.

— ¡Tráeme el desfibrilador, ahora! La paciente responde.

Comencé a caer en mi sueño cuando de nuevo sentí un jalón muy doloroso.

— ¡Anestesia! — Solté un grito de dolor mientras abría mis ojos.
— Quédate con nosotros, pequeña. — Me dijo un hombre, supuse que era el doctor.

Parpadeó varias veces y me miró, alcancé a ver algo que estaban inyectando en mis venas y comencé a respirar
de nuevo. Traté de mantener la calma, pero mi cuerpo se estremecía, estaba entumido, no podía moverme.

— Descansa.

Lentamente cerré mis ojos, el único sonido que se escuchaba en la habitación era del electrocardiógrafo.

NARRA HARRY:

Estaba viva.

Su respiración era tan pacífica y tranquila, estaba viva.Sus mejillas retomaron el color, sus labios ya no
se veían azules como antes, ahora tenían aquel color coral que amaba besar. Su cabello caía detrás de ella
ondulado, sus manos eran de nuevo suaves como si fueran pétalos de rosas.

Miré por encima de mi hombro, la luz de la luna entraba por la ventana, estaba obscuro en la habitación del
hospital, ella seguía dormida. Retiré los mechones de cabello negro que caían sobre mi cara, había crecido
rápido, tenía que cortarlo.

Miré hacia afuera, hacia la camioneta de Alex. Me había colado en el hospital sin que nadie se diera cuenta,
no podía ser reconocido por nadie, ni mucho menos pasearme por donde había cámaras. Ya había entrado, entonces
tenía que permanecer invisible. Regresé hacia un lado de (tn) y me senté en una silla que estaba a un lado de
su cama, no me había atrevido a tocarla aún, suspiré y me pregunte. ¿Por qué? Se veía tan frágil ahora.
Tenía miedo de hacerle más daño aún, me sentía culpable y triste. Todo había sido mi culpa.

Traté de controlarme e intenté no gritar, estaba en un hospital, miré a mí alrededor y luego miré a (tn). Una
ola de felicidad se esparció en mí, como apagar un incendio en un segundo. Lentamente me estiré para tomar su
mano y puse la mía encima.

– Te amo. – Le susurré, no tenía otra cosa que decirle.

Apreté un poco su mano y puse mi cabeza junto a la suya, pronto me grabé su respiración. Con cuidado acaricié
su suave mejilla y sonreí. De repente, antes de que pudiera pensar algo más, ella abrió los ojos. Sus
hermosos ojos hicieron que sintiera una descarga eléctrica a través de mi cuerpo. Su mirada estaba conectada
a la mía, tenía tantas ansias de abrazarla fuerte y besarla... y pedirle perdón.

– Te amo, Harry.

Me quedé inmóvil unos segundos, sorprendentemente ella aún me amaba después de todo esto que le había pasado,
era mi culpa. No pude hacer nada solo me aparté un poco. El coraje y la culpa me comían por dentro.

– ¡¿Cómo puedes...?! – Baje la mirada hacia el suelo.
– ¿Qué? – Preguntó, su voz se entrecortaba

¿Qué estaba haciendo? Ella no estaba en el estado para escuchar mis estupideces.

– Es solo que, me duele. Me duele que me ames todavía... después de lo que te he hecho. – Le contesté,
tratando de sonar tranquilo. Sus ojos se veían tristes. – Lo siento.

Su mano subió hasta mi rostro. Me detuve, sus manos se veían tan delicadas y hermosas, su mano subió a mi
cabello y yo cerré mis ojos.

– ¿Hace cuanto te teñiste el cabello? – Preguntó.

Abrí mis ojos y la vi sonriendo débilmente, se que quería cambiarme el tema.

– No tiene mucho... – Le respondí.

Lo enredó entre sus dedos y lo sacudió, se sentía tan bien. Me recargué en su mano, ella soltó una dulce
risita. Abrí mis ojos y me acerqué a ella, tanto que podía sentir su respiración en mi rostro, hasta que
nuestros labios hicieron conexión.

La besé tratando de controlarme para no tomarla tan fuerte. Tomé su rostro con mis manos y la besé con un
poco más de ansias. Entonces me di cuenta de que su corazón latía más fuerte cuando escuché el pitido del
electrocardiógrafo que estaba del otro lado. Me separé de ella aún teniendo su rostro en mis manos,
una sonrisa se dibujó en mi rostro, no había sonreído en un buen rato y se sentía muy bien volver a hacerlo.

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 5:01 pm

CAPITULO 42 :

NARRA (TN):

Sentí que mi corazón estallaba de felicidad mientras me besaba. De repente, aquel molesto sonido comenzó a
sonar, Harry se apartó un poco sonriendo mirando la pantalla del electrocardiógrafo. Mi ritmo cardiaco se
estaba volviendo loco, mi corazón latía con fuerzas. La sonrisa de Harry me hizo sonreír de igual forma al
ver sus perfectos dientes brillar a la luz de la luna. Mi ritmo cardiaco comenzó a calmarse, fruncí el ceño.

— ¿Qué pasa?
— El sonido es algo molesto... — Dije — alguien pudo haberlo escuchado, tal vez.

Harry entendió a lo que me refería y se dirigió hacia la puerta, recargó su oído contra ésta y contuvo la
respiración, estúpido electrocardiógrafo, estúpido bip, bip, bip.

— Harry... — Lo llamé.

Me tendió su mano para hacerme entender que me detuviera por unos segundos, su rostro se arrugó como si se
estuviera tratando de concentrar, lentamente se alejó de la puerta y caminó hacia mí. Harry puso su dedo
índice sobre sus labios, en señal de que debía hacer silencio.

— Hay algunas enfermeras ahí afuera, — Susurró. — vendrán a verte en un rato, debo irme.

Tomó mi rostro sobre sus manos, me besó tiernamente. Su rostro se veía triste, traté de no llorar, así que
parpadeé y suspiré.

— Te amo. — Dijo de repente, luego me abrazó. — Volveré mañana.

Y con eso último, soltó con delicadeza mis manos y se alejó. Me envió un beso en el aire, se recargó en la
puerta rápidamente, de nuevo. Luego volvió a mirarme, me sonrió y salió por la puerta. Escuché el sonido al
cerrarse y en ese momento todo volvió a estar en completo silencio.

Miré hacia la silla donde Harry había estado sentado hace unos minutos, gire hacia la ventana y miré la luna.
Minutos después, ya estaba dormida, cuando escuché al doctor y a la enfermera entrar, mantuve mis ojos
cerrados mientras sentía que me inyectaban la jeringa intravenosa en el brazo.

NARRA HARRY:

Cerré la puerta de la habitación detrás de mí. Los pasillos del hospital se iluminaban con la luz de los focos
en el techo. Consulte la hora en el reloj de pared, ya casi era media noche. Miré a mí alrededor después de
escuchar algo acercarse. Un carrito de medicinas circulaba por los pasillos, giro por mi izquierda, así que
corrí en sentido contrario. Traté de ser sigiloso y caminé por una esquina, me asomé, vi un conserje
caminando cerca de los basureros.

Di vuelta en otra esquina y me escondí detrás de un mostrador a tiempo. Un doctor pasó con una enfermera
a su lado revisando una carpeta. Se dirigían a la habitación de (tn). Salí de detrás del mostrador y me
dirigí hacia las escaleras, bajé cuatro pisos en segundos y salí de repente por la puerta de la planta baja.
Me puse la capucha de mi sudadera y seguí caminando.

Salí del hospital y me eché a correr rápido hacia los arbustos, me escondí en ellos y esperé a ver si alguien
me seguía. Me estaba comenzando a alejar cuando de repente vi a un sujeto saliendo del hospital, iba vestido
de negro. Me estaban siguiendo.

NARRA (TN):

El doctor ojeo algunas cosas y le habló a la enfermera en un lenguaje que al parecer sólo los médicos
entienden. Pretendí estar dormida.

— Su ritmo cardiaco se aceleró mucho, revisa las otras gráficas.

No me reí por su comentario, pero ganas no me faltaban. Finalmente, revisó mi hombro, traté de no hacer
gestos mientras me limpiaba, en verdad dolía. Finalmente el doctor salió de la habitación, abrí los ojos
y miré alrededor, todo era tan quieto y un poco espeluznante. Quería que Harry estuviera aquí. Casi amanecía,
suspiré y cerré mis ojos, deseando que Harry volviera para besarme.

NARRA HARRY:

Mientras veía al sujeto que caminaba hacia mí, me preparaba para saltar sobre él, pero en un segundo,
su rostro se volvía más claro. Se parecía a un...

Sacó de su bolsillo un walkie talkie y se puso sus gafas obscuras. ¿F.B.I? Lo miré mientras se alejaba, me
estaba siguiendo, me di la vuelta y me alejé de ése lugar. El sujeto se alejaba también, lo observe hasta
perderlo de vista.

Corrí hacia la camioneta, entré en ella y me dirigí hacia el hotel más cercano. Aparque y entré, me dirigí
hacia la recepción, entré como si fuera dueño del lugar. Subí al elevador hasta el sexto piso. Caminé en el
pasillo, mi tío me había dejado una habitación por ahí, la encontré, habitación F16. Saqué la tarjeta y la
deslicé en la puerta, había un botón, lo presioné y la puerta se abrió. Una mochila abierta con ropa estaba
sobre la cama, le había dicho a mi tío todo sobre mi escape y las cosas que habían pasado. Sorprendentemente,
él me había ayudado.

Tome una ducha y me relajé un poco, debían haber agentes de F.B.I buscándome. ¿Por qué? Traté de recordar
alguna vez que hubiera fracasado en algo, pero nada vino a mi mente. ¿Qué hay de (tn)? ¿La encontrarían y
se la llevarían? Golpeé mi puño contra la pared, no me había podido enfocar en estos días. Puse una toalla
alrededor de mi cintura y volví a la cama, hacia la mochila que estaba sobre esta. Saqué una camiseta
blanca, encontré también unos jeans casi de mi talla, metí la mano en los bolsillos y encontré algunas
tarjetas de crédito. Mi tío había pensado en todo.
Me cambié y encendí la televisión, ordené de cenar del piso de abajo.

"Entonces, ¿Dices que han habido homicidios en esta casa?" - Preguntó un reportero en la televisión.

Levanté la mirada, era la casa de Alex.

"Un total de 14 asesinatos en ésa casa. La policía cree que quizás tenga algo que ver con la mafia."

Miré fijamente la pantalla del televisor, vi algunos cuerpos cubiertos con mantas. Recuerdo cuando yo
estaba bajo esas mantas. Miré por la ventana, estaba amaneciendo, el sol salía sobre las colinas y montañas.
Volví a la realidad cuando escuché un toc-toc a la puerta. La abrí y tomé mi comida, le di una propina al
sujeto que la trajo. Cerré la puerta y caminé hacia una mesa, comencé a comer.

Qué fácil sería encontrar a todos ésos bastardos haciendo este tipo de trabajo, me imaginé a mi mismo como
un policía... me golpeé en el rostro. Era demasiado, luego recordé una película que vi hace algún tiempo en
mi casa, era sobre un criminal que se volvía un policía para robar un diamante, ésta vez, no había un
diamante ni manera de tener una vida normal, esta vez eran (tn) y mi vida con ella.

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 5:02 pm

CAPITULO 43:

NARRA HARRY:

Caminé alrededor de mi habitación, mantenía la vista fija en la ventana, hacia una bonita mañana. Necesitaba
ver a (tn).

Tomé el mando a distancia del televisor y lo tiré, no se me antojaba encenderlo. Me dirigí al baño y me miré
en el espejo. Ya eran bastante visibles los círculos obscuros alrededor de mis ojos, no había dormido nada
ahora que sabía que no podía cerrar los ojos siquiera un segundo, ya no era seguro.

Mi cabello estaba bastante despeinado y mi rostro se veía muy pálido. Sacudí mi cabello, ya podían
distinguirse algunas raíces color marrón que comenzaban a aparecer. Tenía que teñirme otra vez. Caminé hacia
la cama, saqué la mochila de debajo de esta y la abrí, había escondido algunas pistolas ahí y el resto estaban
en algún lugar lejos de mí, donde había escondido cosas toda mi vida. Cargué una pistola sabiendo que no podía
tener más oportunidades de no ser visto de nuevo, me detuve y recordé al sujeto del F.B.I. ¿Me habrán
delatado? Entonces mi memoria retrocedió hacia mi tío... ¿Pudo él haber hecho eso? De nuevo, no podía
confiar ni creerle a nadie, nunca más. Caminaba hacia el baño de nuevo cuando se escuchó sonar el teléfono.
Regresé y lo tomé, tratando de disfrazar mi voz.

— ¿Hola? — Contesté, haciendo un estúp¡do intento de hablar con acento español.
— Styles, me temo que ya no podrás seguir viviendo... tu noviecita llegará a su fin también.. — Dijo un
sujeto. Me tensé, sintiendo mí sangre hervir, literalmente.
— ¿Ah sí? No creo que te moleste si me aparezco dónde estás, tal vez podríamos arreglar esto.
— No sabes con quien estás tratando.
— ¿Estás seguro, imbéc¡l? — El hombre rio.
— Se acabo el tiempo, Harry.

Entonces, cortaron del otro lado de la línea. Me congelé en la misma posición en la que estaba, el teléfono
se me resbalo de las manos y cayó en el suelo, no me tome la molestia de recogerlo. Colgué la mochila en mi
hombro. Tomé las llaves de mi camioneta y corrí hacia el pasillo fuera de la habitación, hacia las escaleras

Salí del edificio conduciendo mi camioneta a máxima velocidad. Ésa voz se me hacía tan familiar, le daba
vueltas a mi cabeza tratando de recordar su identidad. Conduje por Los Angeles y finalmente salí de la ciudad.
Me estacioné y salí de la camioneta, rápidamente abrí la puerta trasera y bajé algunas de mis armas. Las
cargué y las escondí en mi mochila. Necesitaba un nuevo auto, pero más que nada, necesitaba llegar
con (tn).

NARRA (TN):

Estaba profundamente dormida, abrí mis ojos, imagine que ya seria medio día. Pensé en Harry y en qué estaría
haciendo, traté de mover mi cuerpo y finalmente lo pude hacer. Mi hombro ya no dolía tanto como el día
anterior, eso me sorprendió, luego, mi sonrisa desapareció cuando recordé todas ésas jeringas en mi brazo.
Miré alrededor y escuché la puerta abrirse, giré rápido mi cabeza y vi al doctor entrar.

— Que agradable es verla despierta, Señorita Styles.

Lo miré con curiosidad. ¿Qué había dicho? Entonces recordé que el tío de Harry había dicho que yo era su
hija para no levantar sospechas.

— Tus radiografías me indican que te recuperarás más rápido de lo esperado ahora que lo más grave ya
pasó. — Continuó diciendo. Asentí con la cabeza, el doctor miró hacia su tabla e hizo algunas
notas. — ¿Cómo te sientes? — Preguntó.
— No lo sé, — Titubeé. — la intravenosa no me deja sentir nada.
— Bien, eso no es tan malo. Vendré a revisarte luego, hablaré con tu padre. — Y dicho eso salió por
la puerta.

Me sentía tan incómoda con toda ésta mentira, miré alrededor y vi un libro sobre una pequeña mesa a un
lado de mi cama. Extendí mi brazo sano para alcanzarlo y lo tomé, leí el título y luego lo comencé a hojear
las paginas siguientes.Escuché de nuevo la puerta abrirse, bajé el libro y una enfermera entró con comida.

— Gracias. — Le dije

Ella asintió sonriente mientras cerraba la puerta detrás de sí. Comencé a comer, el pan y la sopa bajaban
por mi garganta que, hasta ése momento, estaba bastante seca. Comí hasta que acabé con todo, volví a tomar
el libro y vi una nota dentro de él. Había una razón por la que no había visto ése libro antes, hice un lado
la bandeja de mi comida y abrí la nota; estaba escrita a mano y con tinta negra. La leí.

"Lo siento mucho, tendrás que morir en éste lugar. Harry no podrá salvarte ahora ni nunca."

Mi mano comenzó a temblar, pronto perdí el control de la nota entre mis dedos, esta cayó sobre las sabanas
de mi cama. De nuevo sentí que quizás moriría más rápido de lo planeado. ¿Qué estaba pasando? ¿Ahora sí iba
a morir? Presioné el botón que estaba a un lado para que una enfermera viniera a verme.

NARRA HARRY:

Pisé el acelerador, apresurándome cada vez más para llegar al hospital. Casi un segundo después, escuché una
fuerte explosión. Me detuve, un edificio voló en mil pedazos a no mucha distancia de mí. Ahí era donde había
estado hace algunos minutos, el hotel en el que mi tío hizo hospedarme.

Todo fue igual que en cámara lenta mientras empujaba las puertas fuera de mi camino, había dado apenas algunos
pasos cuando de repente sentí un destello por detrás, seguí corriendo, mientras pensaba en cubrir a (tn)
con mis brazos, pero ella no estaba conmigo.

Conduje lo más rápido posible, abandonaría el carro, pero tenía que deshacerme de él primero. Sentí mi
corazón latir cada vez más fuerte, iba a salvar a (tn) así fuera lo último que hiciera. Sentí mi coraje
hacerse más pesado. Ella había estado al borde de muerte, y todo porque yo decidí no haber estado ahí.

Quisiera o no, su vida estaría en constante peligro, la había contaminado con mi presencia. Pisé el acelerador
más fuerte, escuchando al motor ronronear fuertemente.

Giré en una esquina y conduje hacia el estacionamiento del hospital, apagué el motor y de inmediato
empezaba la carrera contra el reloj hacia las puertas de la habitación de (tn). Pronto llegué a las
escaleras, corrí tan rápido como pude hasta arriba. Mucha gente se quedaba viéndome, pero para cuando
se dieron cuenta yo ya me había ido del lugar. Llegué al piso donde estaba (tn) y corrí hacia su
habitación, llegué haca su puerta y la abrí.

(tn) presionaba un botón, cerré la puerta detrás de mí e inmediatamente la ayudé a levantarse.

— Rápido, salgamos de aquí. — Le dije.

Poco a poco le desconecté las jeringas y mangueras que estaban en su intravenosa y se las quité, (tn)
estaba inmóvil en la cama. La abrasé. Ella sabía, y estaba asustada.

— Tengo miedo. — Logro pronunciar, con algunas dificultades.

Besé su cabello, olí su suave esencia y suspiré, ella absorbía todas mis fuerzas, poco a poco la solté.

— Lo lograremos, te lo prometo.

Su mirada preocupada cambió de repente a una mirada con más segura. Se levantó de la cama, la ayudé a
llegar a la silla donde estaba su ropa, comenzó a quitarse el camisón blanco que le habían dado.

Oh, Dios. Si no estuviéramos tan cortos de tiempo... Dios bendito, que cuerpo que tenía. No podía dejar de
mirarla, traía puesto un brasier negro, la ayudé a ponerse una camiseta. Hizo un gesto, le dolía, seguí
ayudándola a vestirse. Sentía mis manos quemarse cada vez que tocaba su piel. Quería besarla y hacerle saber
todo lo que siento por ella... pero no era el momento.

La ayudé a atarse sus zapatos y en un instante arranqué la bolsa de suero y la aguja para guardarlas en mi
mochila, las necesitaría luego. Rápidamente salimos hacia el pasillo del hospital, comenzamos a darnos prisa,
íbamos de la mano. Me detuve en las escaleras ya que sabía que (tn) aún estaba débil. Me colgué la mochila
en el hombro y cargué a (tn) en mis brazos. Bajé todos los escalones rápidamente como si no trajera nada,
golpeé la puerta y corrí con (tn) en mis brazos a través de las puertas del hospital

por **MileeEscriba** Jue 28 Feb 2013, 5:03 pm

CAPITULO 44 :

NARRA (TN):

Con eso último, me ayudó a levantarme y entendí lo que significaban sus
palabras. Me levanté de la cama. Caminé lentamente hacia la silla y
sentí sus brazos abrazarme
mientras me ayudaba a caminar. Me quité
el camisón blanco y le permití a Harry ayudarme poner mi camiseta sobre
mi torso. Me puse mis viejos jeans, Harry me ayudaba a
atarme las agujetas.

Escondí la nota en mi bolsillo mientras Harry guardaba la bolsa de
suero en su mochila. Tomó mi mano y salimos a los pasillos y comenzamos a
correr por nuestras vidas.
Llegamos a las escaleras y apenas me di
cuenta cuando Harry ya me tenía en sus brazos y corría bajando las
escaleras. Mi corazón latía a mil por hora. Harry era muy
fuerte, y
rápido, empujó la puerta para abrirla mientras corría hacia la puerta
principal. Finalmente salimos y sentí que Harry corría aún más rápido
mientras me
cargaba en sus brazos.

En ese momento, sentí
una explosión por detrás, vi a Harry cerrar sus ojos con fuerza mientras
corríamos alejándonos del hospital. Harry cerró los ojos y cayó al
suelo. Sentimos caer en unos arbustos altos y ásperos, hundí mi cara
entre su pecho mientras sentía una brisa del viento despeinar mi
cabello.

Harry me movió un poco y me cubrió, protegiéndome por
el impacto. Sentí mi cabello azotar contra mi cara y mi cuerpo temblar
mientras a mi pecho comenzaba a faltarle
aire. Traté de respirar y
sentí las manos de Harry sobre mí, luego presiono sus labios contra los
míos. Me di cuenta entonces que estaba haciéndome respirar de nuevo.
Segundos después, Harry se separó lentamente de mí. Miré hacia arriba y vi una densa nube de humo negro, obscureciendo todo.

Me puse de pie y miré hacia el hospital. Vi fuego en todo alrededor, no
había nada más que escombros de lo que solía ser el hospital. En el
momento, no creí lo que
estaba pasando. Harry tenía marcas obscuras sobre su ropa y su cuerpo, me miré los brazos y estaba igual o peor que él.

Mi respiración era muy pesada. Ya sabía que el humo me causaba
problemas para respirar, pero nada de eso me importaba. Solo pensaba en
el hecho de que muchas personas
habían muerto bajo mi
consentimiento. Miré mis manos, Harry lentamente se levantaba y miró a
nuestro alrededor. Sus ojos se posaron sobre mí.

— (tn). — Pronunció con dificultad mi nombre. Me tomó y me acercó a él para abrazarme.
— ¿Cómo pudo pasar esto? — Dije entrecortadamente. Harry no respondió,
levanté la mirada para ver su rostro lleno de tristeza. — Pudimos salvar
muchas vidas.
Lentamente negó con su cabeza, sentí que mi garganta se hinchaba.
— No había manera que pudiéramos salvar a nadie. — Nos separamos un
poco y escuché sirenas acercarse la ciudad. — Tenemos que detener esto
antes de que se ponga
peor.

Me llevó a su camioneta, me
estremecí cuando la vi. Era la misma camioneta donde Alex me había
secuestrado, Harry me apretó el brazo, tranquilizándome.

— Es todo lo que tenemos, por el momento.

Trague grueso y finalmente subí al asiento del copiloto mientras Harry
se subía también y comenzaba a conducir antes de que algún policía se
apareciera en la escena.
Miré el hospital de nuevo, entendí que mi
fin hubiera podido llegar de nuevo. Miré a Harry y lo vi concentrado en
la velocidad y en la carretera, me habia salvado la
vida otra vez.

El, solo él era la razón por la que aún seguía caminando en este mundo,
y dentro de toda esta locura. Me estiré para alcanzar su mano, Harry me
miró y me dejó tomarla.
La tomé con las dos manos, la llevé hacia mi rostro y la besé.

— Yo... — Comenzaba a decirle aún con mi voz débil. Entonces Harry me acercó hacia sí, me recargué en él.
— Lo sé. — Dijo antes de que prosiguiera. — Sé cómo te sientes, como si
no debieras estar viva, pero estas feliz… y triste al mismo tiempo. —
Pronunció lo que yo no
podía y luego besó mi frente.

Se detuvo, estábamos ya fuera de la ciudad, en una carretera vacía y solitaria frente a la costa.
Me hice a un lado lentamente, mientras Harry tomaba su mochila y salía de la camioneta.
Salí también y lo vi sacando las placas del carro para después
romperlas en pedazos. Se acercó a donde había una montaña de hojas y
tierra, y sacó un encendedor.
Quemo los trozos de placas,
lentamente los recogió y los tiró al río, ambos los vimos hundirse.
Caminé a un lado de él y entrelacé mi brazo con el suyo, ambos
quedamos en silencio después de unos segundos.

— Ahora, a deshacernos de la mald¡ta camioneta. — Susurro.

Se metió a la camioneta y la encendió, la acercó a la orilla del agua y
salió, después la empujó al rio viéndola flotar, casi hundiéndose. Sacó
su encendedor y
quemó un pedazo de tronco, lo arrojo hacia lo que
aún se veía de la camioneta, continuó hundiéndose hasta que vimos sólo
algunas burbujas en la superficie. Harry
se dio la vuelta y caminó
hacia mí, su rostro se veía pasivo, no hacía ninguna expresión
realmente. Presionó sus labios contra los míos mientras me abrazaba
fuertemente.

— No sabes lo feliz que estoy de que estés aquí... — “Y no en el
hospital” pensé. Sabía que justo de eso se trataba. Suspiró y me sonrió
débilmente.

Comenzamos a caminar tomados de la mano hacia la carretera.

NARRA LA ESCRITORA:

Los padres de (tn) discutían el asunto con los policías detrás de la
puerta de vidrio, pronto ya se cumplirían tres días de su desaparición.
Sentado en la sala de
espera, las manos de Niall temblaban, y
estaban técnicamente heladas. Miro hacia los folletos pegados en la
pared de las personas perdidas. Por su lado, él había
colaborado
con su parte; diciéndole a los policías todo lo que sabía y todo lo que
pensaba que probablemente había pasado. Le tomó casi una hora ser capaz
de respirar
bien fuera de una habitación llena de policías, ellos
le ponían nervioso sin razón alguna. Los padres de (tn) estaban
realmente preocupados, más que nunca.

Todos querían
encontrarla, pero ninguno tanto como él. Recordaba muy bien cómo alguna
vez le colgaron después de llamar al teléfono de (tn), algo dentro de él
seguía
diciéndole que ésa voz era la clave de todo, una pieza
importante del rompecabezas. Casi dio un brinco en el asiento cuando la
puerta de aquella oficina se abrió. La
madre de (tn) salió echa un mar de lágrimas junto a su esposo, quien trataba de consolarla.

— ¿Cómo les fue? — Preguntó.
— Harán todo lo que puedan.— Asintió y sonrió con tristeza a Niall. —
Te agradezco que estés aquí Niall, si no hubiera sido por el hecho de
que descubriste que mi
hija se había ido, créeme que no sé qué hubiera pasado.

Le palmeo el hombro con la mano, luego Gerard tendió su mano y Niall la
tomo sin importarle que la suya aún estuviese temblando. Le agradeció
una vez más, y salieron
del departamento de policías. Seguía
atrapado en sus propios pensamientos, lo cual odiaba porque siempre eso
le impedía concentrarse en otras cosas, odiaba estar así
con su propia mente, le volvía loco. La vida simplemente no podía hacerle esto.

por **Devon.** Vie 01 Mar 2013, 2:38 am

[quotme encanta la nove siguela Enamorada de Un Criminal [Harry y Tu] - Página 4 2312883081

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:34 pm

Holaaaa C:Hermosuras Que cuentan? Hoy les dejare 10 capitulos ya que en esta semana no creo que sea posible que me conecte mucho debido al Colegio ¬¬' Siganme en Twitter [@MileeEscriba] C: Las Loveo :3
Enamorada de Un Criminal [Harry y Tu] - Página 4 541612_493287577396334_454100602_n

Enamorada de Un Criminal [Harry y Tu] - Página 4 541612_493287577396334_454100602_n

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:37 pm

CAPITULO 45:

NARRA (TN):

Harry y yo nos habíamos ido destruyendo cualquier evidencia de la
camioneta. Caminábamos de la mano hacia la estación del autobús que
estaba cerca de la gasolinera.
Nos cambiamos de ropa y aseamos un poco antes de tomar el autobús.

Harry me dijo que tomaríamos un autobús a la casa de su tío y luego
conseguiríamos un auto, estuve de acuerdo con él. Recargué mi cabeza en
su hombro mientras
esperábamos que el autobús arrancara, el dolor
en mi hombro comenzó a palpitar en mi torrente sanguíneo usando toda la
anestesia. Comenzó a dolerme y yo solo
intenté relajarme, Harry
estaba alerta todo el tiempo, revisándome cada cinco segundos como un
gato esperando a que el perro apareciera. Me sentía segura mientras
sentía que su cabeza se movía y revisaba si yo estaba bien, él me
tocaba la cabeza de vez en cuando. Me estaba quedando dormida hasta que
me susurró una pregunta
que ya había hecho alrededor de veinte veces en todo el camino.

— ¿Cómo está tu hombro?

Abrí mis ojos y le sonreí débilmente. Harry extendió su mano y sacó su
mochila, estaba a punto de sacar la bolsa de suero y la anestesia.

— No, Harry, mi hombro puede esperar, aquí hay cámaras y no sé qué
pueda parecer…— Harry bajó su mochila, suspiró profundamente y miró
hacia el conductor del
autobús, quien estaba leyendo un mapa.

— Tenemos que llegar pronto. — Dijo Harry con tono de preocupación.

Recargué mi hombro contra él por un rato hasta que sentí el autobús
moverse. Conté las veces que Harry inhalaba y exhalaba, y trataba de que
la mía sonara igual,
ambos nos escuchábamos agitados. De repente
sentí que Harry me sacudía el brazo, me había quedado dormida. Antes de
que pudiera abrir mis ojos sentí un inmenso
dolor que recorría todo
mi cuerpo, presioné con fuerza mis labios y miré a Harry. Me cargó en
sus brazos mientras salíamos del autobús.

— Aquí. — Me indicó
Harry. Se colgó su mochila en su hombro y me cargó sin ningún esfuerzo
como si fuera simplemente una caja vacía. — Mi tío nos recogerá en un
rato.

Se sentó en una banca conmigo, ya había obscurecido por
completo. Harry miró alrededor mientras acariciaba delicadamente mi
cabello con la yema de sus dedos.

— Ya debería estar aquí. —
Exclamó Harry, frunció su ceño. Luego miró hacia alrededor y no volvió a
verme a los ojos. — Algo no está bien. — Continuó.

Rápidamente
se levantó y caminó hacia una esquina, cerca de unos baños y me sentó
en un banco. Harry sacó de su mochila una pistola, la miró por un rato y
la
extendió hacia mí. Me congelé.

— Solo por si las
dudas, por favor. —Gire la cabeza en dirección contraria a él, apreté
los ojos y finalmente tome el arma. Sentí mis manos temblar mientras
Harry
la ponía en mis manos, él sacó la suya de su mochila.

— Tenemos que irnos de aquí, ya podrían haber matado a mi tío. — Dijo con voz débil.

NARRA HARRY:

Algo estaba mal. Mi tío me recibía totalmente comprensivo, dándome todo
lo que necesito. Un maniaco venía detrás de mí y (tn) , sabía dónde
estábamos. Sentí que
mi columna se congelaba hasta llegar aquel
frio a mi cráneo. Alex estaba muerto y todos trabajaban para él,
entonces Alex trabajaba para...

— Harry... hay alguien caminando por el edificio.

Regresé a la realidad y vi a (tn) mirándome a mí y al extraño que
estaba por el edificio, traté de que el hombre no me viera y tomé a (tn)
por la cintura, entré
con ella al baño de mujeres de la gasolinera
y nos metimos al más amplio, al que es especial para personas
inválidas. Dejé la puerta abierta y me paré en la esquina.
Vacié mi
mochila y un pequeño cuadrado negro con una luz roja apareció del
fondo... un dispositivo de localización. (tn) estaba sentada en el piso
recargada contra la pared, parpadeó débilmente.

— ¿Qué es eso? — Preguntó. Suspiré con enojo.
— Un rastreador. — Gruñí.

Se estremeció cuando lo tiré en el inodoro. Estaba a punto de tirarle a
la cadena pero sabía que no era el momento indicado. Me arrodillé junto
a (tn) y tomé su mano.
Su rostro se volvía cada vez más pálido.

— Ya es hora de tu anestesia. — Abrí mi mochila, saqué la bolsa de suero y la jeringa.
— Harry, — susurro, — siento que te estoy atrasando. — Clavé la aguja en la vena de su brazo.
— Nunca, (tn). ¿Escuchaste? No repitas eso. — Saqué la intravenosa de su brazo… — Te sentirás mejor en unos minutos.

Me levanté y caminé hacia la puerta, miré hacia afuera y no ví a nadie. Regresé por (tn).

— Sé quién está detrás de esto, detrás de Alex, detrás de todo. Pero
primero, necesito que tires la cadena para que el rastreador se valla,
te daré una señal. — Le
susurré a (tn). Me di la vuelta de nuevo y
traté de escuchar hacia afuera... nada. — Dispararé tres veces al aire,
ésa será la señal. Estaremos a salvo
después. — Ella me miraba anonadada.
— ¿Quién está detrás de esto? — Tragué saliva.
— Podemos hablar de eso después. — Le contesté, todo era silencio. — Solo haz lo que te diga ¿está bien?

Ella asintió. Quise levantarme, pero (tn) tenía sus brazos aun aferrados a mi cintura, me acomode junto a ella de nuevo.

— Harry... por favor regresa. — Decía entrecortadamente.
— ¿Acaso no lo hago siempre?

Ella sonrió y yo me levanté, saqué mi pistola y me di la vuelta de
nuevo hacia ella. La miré antes de salir, llegué a la entrada del baño y
vi a un hombre caminando
alrededor mirando todo detalladamente... secuaz del maniaco.
Rápidamente salí del baño y fui gateando hasta los arbustos, estaba
seguro que había más de ésos bastardos. Un auto negro estaba mal
estacionado a distancia, enfrente
de la gasolinera. Me arrastré y
en un par de segundos ya estaba muy cerca de los pies de aquel tipo.
Esperé a que se fuera de la vista del coche, silenciosamente me
seguí gateando lentamente.

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:39 pm

CAPITULO 46:

Saqué mi navaja y salí de los arbustos, cubrí su boca y clavé la navaja
en su cuello. Instantáneamente dejó de moverse. Abrí una puerta, estaba
obscuro adentro y
al parecer guardaba las cosas del conserje.
Arrastre el cuerpo y lo tiré dentro. Rápidamente corrí por los edificios
y fui detrás del coche, que estaba aproximadamente

a unos 50 metros de la gasolinera, y de (tn), que seguía en el baño.
Podía ver algunas sombras de personas dentro del carro. Me arrastré más
cerca y clavé la navaja
en los neumáticos traseros, me moví y le quité las placas sabiendo que no se darían cuenta... Nadie iba a salir vivo de esto.

Rápidamente caí al piso cuando escuché la puerta trasera abrirse, dos
hombres aparecieron en la escena donde habían visto por última vez a su
acompañante, tenía solo
unos minutos. Esperé a que se alejaran un
poco. Saqué mi encendedor y abrí el tanque de gas, me quité la camiseta
quedándome solo con la que traía por debajo. Encendí
mi camiseta y esperé a que el fuego se esparciera y cuando por fin se hacía más grande, corrí a toda velocidad lejos del coche.

Los hombres dentro del auto apenas y se dieron cuenta de que su
víctima... se estaba alejando rápidamente de ellos. Salieron del auto y
en ese momento explotó, me
cubrí y rápidamente miré hacia atrás, lo que quedaba de ellos eran solo cenizas.

Los otros dos hombres ahora estaban corriendo hacia donde estaba su
auto destrozado. Uno de ellos sacó un teléfono y en ese momento yo saqué
mi pistola y le apunté a
su rostro, le disparé en la nariz. Cayó
al suelo disparando sangre de su rostro. El otro hombre sacó su pistola
mientras el primero caía al suelo, le disparé directo
al corazón
mientras él disparaba hacia el cielo, cayó al suelo sujetándose el
pecho. El gerente de la gasolinera que estaba cerca y sus trabajadores
se veían
asustados. No había dejado que me vieran, así que todo iba bien.

Disparé al aire tres veces, me di la vuelta y corrí hacia donde estaba
(tn). Corrí hacia el baño, llegué y la vi de pié a punto de salir, en
cuanto entré se dejó
caer sobre mí, me tambaleé un poco sorprendido
ya que me abrazaba con mucha fuerza. Sentí el calor de su cuerpo llegar
a mi alma.

— Te amo.-susurró ella.
— También te amo. —
Mire sus ojos tratando de encontrar algo de esperanza en los míos. —
Tenemos que irnos de aquí antes de que la policía llegue.

Tomé mi mochila del suelo, (tn) había metido en ella su bolsa de anestesia que ya tenía menos de la mitad.

— Y tenemos que conseguir más de esto. — Le dije mientras señalaba la bolsa.

Sus mejillas ya no se veían tan pálidas, la tomé de la mano y salimos
del baño. Llegamos a la puerta y rápidamente nos mezclamos con la
multitud de gente que había
afuera. Mucha gente estaba corriendo a
ver la escena pero la policía los detuvo. Me las arreglé para permanecer
lejos de los policías mientras llegábamos a un auto
estacionado
lejos de todas aquellas personas. Saqué mi navaja y la introduje en el
pestillo de la puerta del auto. Me tomó dos minutos, pero finalmente la
puerta
cedió. Entre, y le quité el seguro a la puerta del pasajero
para que (tn) entrara. Ella entro mientras yo inspeccionaba con cuidado
el auto, lo encendí y comencé a
alejarme de aquella escena, después volteé a ver y recordé algo... había olvidado deshacerme de las videocámaras de seguridad.

NARRA (TN):

Harry comenzó a decir y gritar malas palabras, pasó su mano por su cabeza, jalándose el cabello desesperadamente.

– M¡erda... ¡M¡erda! – Lo miré con curiosidad. – Olvidé las cámaras.

Me recargué contra el asiento e hice mi cabeza hacia atrás, eso no era nada bueno. Harry permaneció en silencio y condujo.

– Bueno, voy a encontrar al maniaco que está detrás de todo esto antes
de que la policía encuentre algo en contra mía. – Dijo un poco más
tranquilo. Me sonrió y
volvió a enfocarse en la carretera.
– Harry... ¿Es tu tío? – Asintió… grandioso.
– Es él. Me siento tan estúpido por no haberme dado cuenta antes, él
estaba detrás de Alex y de todo lo que él hizo. Alex te quería matar
bajo las órdenes de mi
tío. – Hizo una pausa y tomó aire. – Ben, él me quería para empezar negocios con ellos, él sabía sobre ti.
– Lo siento...
– Por favor (tn). Nunca digas eso otra vez. Esto es solo mi culpa.

Estiro su mano para tomar la mía. Siguió conduciendo aproximadamente
unos 35 minutos, luego llegamos a un pueblo a escasos minutos de mi
casa.

– Tengo una base aquí – Sonrió –, luego... – Algo lo interrumpió.

Miró a lo lejos. Solo había silencio. ¿Qué tenía en mente? Me sentía a
salvo donde quiera que fuéramos, sabiendo que Harry estaba a mi lado.
Llegamos a una pequeña
casa, salimos del auto cuando el motor se
detuvo. Caminé detrás de Harry mientras él veía alrededor, entramos,
Harry se detuvo en la puerta.

Miró alrededor mientras yo me
quedé de pie. Abrió los armarios y algunas cajas, finalmente me tomó de
la mano haciéndome pasar, y cerró la puerta. Aquella casa era
una
pequeña versión de un departamento, me senté en una silla contra la
pared. Harry dejó caer su mochila sobre la mesa y caminó alrededor
abriendo algunos armarios.

– Tengo cosas aquí. – Me dijo Harry.

Eche un vistazo, no había nada dentro de esos armarios, todo estaba
vacío y cubierto de polvo. Harry me miró con curiosidad, después tomó
una llave, me sonrió.

– Vamos, iremos afuera. – Me indicó.

Me levanté mientras Harry estaba en la puerta esperándome, salí y lo seguí hacia una pequeña colina, cerca de un gran árbol.

– Espero que tenga algo que pueda servirte. – Me dijo.

Tomó mi mano mientras nos dirigíamos hacia el gran árbol, detrás de él
podía verse una pared. Me soltó la mano para quitar un tronco
brutalmente, en la pared había
una pieza de metal con una
cerradura, metió la llave y la giró, la puerta se abrió. Entramos, y
dentro de veía algo muy parecido a un sótano. Sacó una bolsa, y
dentro de ella tenía dinero, Harry guardo cosas a su mochila mientras yo observaba el lugar.

– Sí… – Dijo Harry con una sonrisa. Volteé a verlo y él me miraba a mí,
había algunas bolsas de ese líquido milagroso que tanto necesitaba ahí.
– Harry, tú piensas en todo ¿no es así? – Dije entre risas.

Harry me sonrió y siguió llenando su mochila. Finalmente cerró aquél
sótano y puso de nuevo el tronco en donde estaba. Se colgó su mochila al
hombro y caminamos de
regreso, Harry escondió su llave y nos
dirigimos hacia el auto. Entramos y él puso su mochila en el asiento
trasero. Se quedó en silencio.

– Ahora, ¿qué pasa? – Le pregunté. Lo miré mientras él veía su camiseta y luego levantaba la mirada, suspiró y giró hacia mí.
– Tengo que preguntarte si... ¿Te quieres quedar conmigo? – Preguntó en voz baja, apenas auditible. Luego bajó su cabeza.

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:40 pm

CAPITULO 47 :

— Claro que sí, por supuesto que me quedo. — Las palabras salieron de
mi boca incluso antes de cruzarme de brazos. No iba a dejar a Harry, no
otra vez. Me miró y yo
solo sonreí mientras él me sonreía también.

— Gracias, pero... ¿No tienes una familia a la que tienes que regresar? — Miré a lo lejos, y de nuevo a sus ojos verdes.
— Me necesitas más de lo que yo a ti.
— Pero ellos pronto sabrán que estás conmigo, — Dijo, preocupado. — y… cuando sepan que estoy vivo…
— No me importa. — Interrumpí, con una leve e insegura sonrisa, el me dedico una a medias.

Con un movimiento rápido logro estrecharme entre sus brazos, aspire su esencia y correspondí el abrazo.
— Yo te mantendré a salvo. — Beso mi cabeza al tiempo que acariciaba mi
cabello. — Lo haré, así sea la última cosa que haga. — Levanté mi
mirada, aquello me desato
una pequeña risa.
— Eso no pasará pronto.

Se acercó más a mi rostro y besó mis labios. Me aferré a su cuello
mientras escuchaba los latidos de nuestros corazones a la misma
velocidad. Era como si estuviéramos
hechos el uno para el otro.

NARRA HARRY:

Sentía ansiedad, la deseaba. Lentamente la separé un poco ya que sabía
que no era el momento, ni el lugar, adecuado. Además, nos habíamos
fugado. Miré alrededor, para
darme cuenta de que nadie nos hubiera visto.

— Entre la herencia de mis padres, antes de morir, dejaron una casa por aquí. Nos podríamos quedar ahí.

Estaba cansado, llevaba horas sin dormir, pero me importaba más (tn).
Se veía cansada también, tenía sombras oscuras debajo de sus ojos, no me
agradaba la idea de que
se quedaran permanentemente.

— ¿Qué haremos? — Preguntó.

Mi cerebro inmediatamente lo interpreto como un ‘¿qué vamos a hacer?’
Tenía que deshacerme de Ben. No iba a ser nada fácil. Continué
conduciendo, me tomó un par de
segundos contestarle.

— Terminaremos con esto. — Finalmente, le respondí.

Estábamos en esto juntos. Finalmente reconocí la casa y me dirigí hacia ella, me estacioné afuera.

— Espera aquí, abriré la cochera y entrarás. — Le indique a (tn). Sabía que ella sabía conducir.

Salí del auto y mantuve la mirada en el lugar mientras caminaba hacia
la puerta, traía las llaves de la casa ya que las había sacado del
sótano donde estábamos antes.
La abrí y entré, estaba algo
iluminado por las ventanas y la luz que entraba por ellas, ésta casa
seria lo suficientemente buena; por ahora.
Entré al garaje, lo abrí,
(tn) condujo el auto hacia adentro y cerré la puerta, asegurarme de que
la cerradura aun estuviese en buen estado. Ella se bajó con la
mochila.

– Vamos a comer algo. – Propuse.

Caminé hacia ella y tomé su mano mientras nos dirigíamos hacia la
cocina; se sentó en el comedor mientras yo revisaba las alacenas y el
resto de la cocina... nada.
¿En qué estaba pensando? Ha estado vacía por años.

(tn) miraba hacia afuera frunciendo sus labios, tomé mi mochila y saqué
la anestesia con la jeringa intravenosa. Ella era más importante que la
comida, por el
momento. Llegué hacia donde estaba, la tome en
brazos y la llevé hacia un sofá largo que estaba en la sala. (tn) se
recargó mientras yo la inyectaba.

– Déjame limpiar tu hombro. – Le dije.

Entré a la cocina y busqué en mi mochila el botiquín de primeros
auxilios, lo abrí y saqué vendas limpias y otras cosas que necesitaría,
regresé con ella. Se había
quitado su camiseta. Traté de no mirar
“tanto” hacia sus pechos mientras vendaba su hombro; pronto observe su
herida y mi estómago se contrajo. Inmediatamente sentí
la culpa inundarme completamente en un segundo, traté de alejarla de mi mente.

Limpié su herida cuidadosamente tratando de que no le doliera, ella
tenía sus ojos cerrados mientras luchaba contra el dolor como una
verdadera guerrera, me sentí
orgulloso en ese momento. Finalmente terminé de vendarla.

– Iré a conseguir comida para los dos. Quiero que te quedes en la casa,
lejos de las ventanas. – Le dije – Extendí un brazo, invitándola a que
tomara mi pistola.
Se dio cuenta de que la necesitaría más que yo, así que la tomó mientras me arrodillaba para abrazarla.
– Regresaras ¿verdad?
– Claro, amor.

NARRA (TN):

Inmediatamente sentí que me inundaba la soledad. Sentí miedo, solo quería que Harry regresara.
Tonterías. Ya es hora de que deje de actuar como bebé, me dije.

Miré mi brazo mientras sentía como el dolor de mi hombro se desvanecía
poco a poco. Mirando alrededor, comencé a pensar en algo que no había
razonado antes; era
la casa donde Harry creció, la misma donde
vivió el mismo sufrimiento de su madre al morir. Sentí tristeza por
Harry, debió ser difícil para él soportar estar en la
casa, después de tanto.

La casa que estaba a la vuelta se la había conseguido su tío Ben, ahora recordaba.

Estaba todo tan vacío, excepto por los muebles y una pequeña mesa para
el café. Me quité la aguja intravenosa y guarde el resto en la mochila
para más tarde.
Introduje la pistola detrás de mis pantalones, como lo hacía Harry.

Camine unos pasos lejos de aquel sofá, me topé con las escalera que
llevaban a un segundo piso; las subí y caminé por el pasillo que
conectaba tres habitaciones.
Entré a la primera, no vi absolutamente nada, completamente vacía.

Revisé las otras habitaciones. Entré a una segunda habitación mucho más
pequeña que sabía que era la de Harry, miré dentro de ella; solo había
una pequeña cama,
más bien una cuna, y, en algún rincón de la habitación, un único juguete, pequeño y descuidado.

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:43 pm

CAPITULO 48:

NARRA HARRY:

Caminé de regreso a la casa sin nadie siguiendome, supongo que la
policía aún no había encontrado ninguna pista de que estaba vivo.

Me imaginaba a los policías mirando videos, tratando de reconocer mi
identidad, o revisando mi supuesto 'cadaver' creyendo que estaba muerto.
Sonreí. Eso les tomaría
días, así que estaba bien por otro par de horas.
Pero... (tn). Mi sonrisa se desvaneció, aún no estaba seguro de lo que
haría si la policía nos encuentra juntos. Supongo que... tendría que
hacerla pasar como mi
víctima, élla no podría ir a la carcel conmigo...
Mi corazón me dolía al pensar eso, pero lo haría. Al final de todo sabía que éso me esperaría.

Entré a la casa, miré hacia el sofá, (tn) no estaba ahí. Caminé hacia
la cocina dejando las bolsas en la mesa. Oh por favor, no me digan que
algo malo pasó.
Saqué mi pistola y caminé alrededor para ver si
había algo sospechoso o señales de algo. Subí las escaleras sabiendo que
élla debía estar ahí, caminaba lentamente
y en silencio, revisé la
primera habitación... nada. De repente, escuché un ruido en la
habitación mas retirada... mi antigua habitacion.
Me acerqué a la
habitación, los latidos de mi corazón se hacían mas fuertes, (tn) tenía
que estar a salvo. Abrí la puerta y con mi pistola apunté hacia dentro,
eché un vistazo rápido y apunté. Inmediatamente bajé el arma cuando sentí mi respiración calmarse.
(tn) estaba mirando mi habitación, me tranquilizé y traté de que calmar
mis fuertes latidos. Mis corazón nunca latía tanto a menos que fuera
por (tn). Me acerqué
y élla me escuchó, giró rápidamente y me apuntó con el arma. Cuando me vió se sonrojó.

- Lo siento, me asustaste.- me dijo y bajó la pisola. Sonreí, no pude evitarlo.
- Estoy orgulloso, de que no tuviste miedo de sacar el arma.- le contesté, élla me sonrió y la abrazé por la cintura.
- Fuiste rápido a la tienda, me alegra que estés aquí.

La abrazé fuertemente y sentí mi corazón latir mas rápido, su
respiración chocaba con mi cuello mientras las contaba, amaba la manera
en que élla se sentía segura
junto a mí.

- Hay que darnos una ducha, traje algo de ropa que encontré.- le dije, la aparté un poco, ahora estabamos de frente.
- Tú primero..- me dijo, yo negué con la cabeza.
- No, prefiero que tu vallas primero.

Me miró a los ojos y asintió, bajamos las escaleras y le dí algunas cosas.

- Yo revisaré aquí.- le dije.

Me besó la mejilla y subió las escaleras para ducharse, la escuché
cerrar la puerta cuando entró al baño. Caminaba alrededor de la casa
cerrando las ventanas.
Ésta casa me daba una sensacion vacía de emociones, no me importaba lo que pasó aquí, éso no me asustaba.
De repente mi memoria regresó al día que salvé a (tn). Ella me había
prometido estar ahí por mí, y yo le había mostrado mi otro yo, el lado
que nadie en el mundo
había conocido de mí. Talvéz su presencia mantenía todos mis sentimientos y mi odio fuera de mí.
Sonreí y cerré otra ventana, revisé la mochila checando qué cosas
tenía, miré alrededor, tenía que conseguir algo cálido para dormir. Subí
las escaleras y abrí
algunos armarios buscando mantas y cobijas,
entré a una habitación y encontré dos sábanas y una cobija, las bajé y
las puse sobre el sofá.
Escuché a (tn) abrir la puerta del baño.

- Ya terminé amor.- me gritó desde arriba.

Bajó las escaleras con una camiseta gris que encontré para ella y jeans
negros, su cuerpo encajaba perfectamente en ellos, mordí mi labio y
élla me abrazó por
detrás, recargó su cabeza en mi hombro y sentí su cabello aún mojado tocar mi piel
Sentí sus labios susurrar en mi oído y en ése momento giré para atraparla en mis labios y recargarla contra la pared.

- Creo que su ducha lo está esperando Señor Styles.- me dijo.

Lo susurró de una manera tan sexy. Dios mío. Ella hacía que sintiera
ésas ganas incontrolables de comérmela a besos, la aparté un poco y ví
que élla sonreía
mientras veía hacia mis pantalones, de los cuales se alcanzaba a asomar algo que élla había causado. Me reí.

- Oh oh...- dijo sonrojada.

Tosió y caminó hacia las bolsas que había traído, le sonreí y subí las
escaleras con mi ropa, me metí al baño y ví la toalla que había dejado
(tn) para mí.
Tomé mi ropa y me recargué en la puerta, escuché a (tn) tararear una canción en la planta baja.
Me metí a duchar y relajé mi cuerpo con el agua tibia, se sentía tan
bien... en verdad necesitaba esto. Sentí mis musculos relajarse mientras
el agua caía sobre mí.
Después de unos minutos salí del cielo, o de la ducha que es casi lo mismo. Me cambié y sequé mi cabello con la toalla.
Salí del baño apresurandome para estar con (tn). De repente... sentí
algo parecido a una descarga electrica por mi columna mientras llegaba a
las escalerasC.

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:44 pm

CAPITULO 49 :

NARRA (TN):

Miré a Harry subir las escaleras y dirigirse hacia la ducha, amaba la
forma en que sus musculos encajaban perfectamene a su cuerpo como un
rompecabezas, mordí mi
labio cuando
recordé el pecho desnudo de Harry. Me gustaba cuando traía poca ropa,
sonreí y me dí la vuelta hacia donde estaba la comida.
Tomé algo de
lo que Harry había traído, preguntandome lo que podía preparar, había
pollo, tocino, ensalada, verdura en lata. Saqué un plato, cuando de
repente
algo pasó por mi vista.
Me dí la vuelta y ví una sombra
pasar por la luz del sol en la ventana de la sala, lentamente miré
hacia la ventana de la cocina y no ví nada. Dirigí mi vista
hacia las escaleras, Harry aún estaba arriba duchandose. Caminé hacia la sala cuando de repente noté la presencia de alguien.
Giré tratando de sacar mi pistola, sentí un par de manos alcanzarme y
agarrarme de mi garganta. Luché para sacar el arma, pero el sujeto me
golpeó en el hombro
haciendome caer, estaba ensima de mí y me
faltaba el aire. Mi garganta protestaba por oxígeno mientras yo luchaba
tratando de empujarlo antes de que muriera, lo
golpeé en el cuello y el se atragantó un poco, aproveché la oportunidad y me alejé de él jadeando.
Traté de seguir respirando mientras trataba de dejar salir un grito, pero mi garganta no me dejaba.
De repente ví a los ojos al sujeto mientras él me tomaba de nuevo del
cuello, sus ojos estaban llenos de malicia y odio, me quedé en shock y
recordé a Harry...
recordé la manera en que su mirada cambiaba cuando asesinaba a alguien.
Sentí caer mi arma por detrás y el sujeto la tomó. Me apuntó con élla y
me quedé inmovil, luego me empujó hacia el suelo quedando encima de mí
mientras trataba de
quitarmelo de encima, él siguió tratando de
bajar mis pantalones y yo lo golpeé en la nariz, estaba empujando su
cuerpo con todas mis fuerzas hasta que cayó hacia
atrás.

NARRA HARRY:

Me detuve completamente cuando sentí una descarga electrica por mi
columna vertebral, expandiendose a todo mi cuerpo. (tn) estaba en el
suelo con un sujeto encima
de élla, apunto de ... violara.
Saqué mi pistola y le disparé mientras (tn) se lo quitaba de encima, mi chica era fuerte

*¡BAM!*

Mi cuerpo estaba tenso y frío, sentí que la calidez que había
conseguido en la ducha se había ido por completo cuando miré hacia aquel
hombre. Una serie de
sentimientos de odio vinieron a mi mente, quería hacerlo sufrir, quería torturarlo hasta morir, quería matarlo una y otra vez.

*¡BAM!*

Me acerqué a él y seguí apuntandolo con mi pistola.

*¡BAM!* -Porque te odio- *¡BAM!* - Porque quisiste herir a (tn)- *¡BAM!* - Porque quiero.- *¡BAM!* - Porque mi tío va a morir.-

- ¡HARRY!-me dijo (tn).

Estaba enfrente de mí, la miré fijamente, no quitaba su mirada de la
mía. Sentí su mano tomar la mía y quitar mis dedos de la pistola. Con
cuidado entrelazó sus
dedos con los míos y me abrazó por la cintura. ¿Cómo pude bajar la guardia en la ducha?

- Estoy aquí Harry.- me dijo élla tranquilizandome.

Lentamente la abrazé, nunca seré capaz de perdonarme, (tn) tomó mi
rostro en sus manos y la miré con ternura. Inmediatamente parpardeé al
sentir mi cuerpo cálido
de nuevo.

- Yo... lo... lo siento.- le dije.

Nunca, nunca, NUNCA JAMÁS bajaré mi guardia de nuevo, (tn) me besó en
los labios mientras yo tomaba con mis manos su cabello ondulado, la besé
y élla tambien lo
hizo de la misma forma, mis deseos hacia élla podían esperar.
Ahora tenía que encargarme del nuevo cadáver.
las cosas a un lado y busqué alguna otra señal sobre quién podria ser éste hombre.
No encontré nada y miré hacia (tn) quien comenzaba a tomar la comida,
volteé de nuevo a ver el rostro del hombre muerto y comenzé a
estudiarlo... no se parecía a
ningun hombre que trabajara con mi
tío Ben. No solían ser drogadictos como éste, él tenía marcas de agujas
por todo sus brazos, hize un gesto de disgusto, Ben
escogía gente inteligente y potencial.
Dejé de buscar mas pistas cuando una idea llegó a mi mente. ¿Y si él lo
había enviado a revisar la casa? o... ¿Y si éste hombre era en realidad
un violador y por
casualidad vió a (tn)?

Miré hacia élla
quien había dejado la comida, simplemente miraba hacia la alacena, me
levanté y caminé hacia élla. (tn) estaba llorando y miró hacia lo lejos;
la
abrazé por detrás y soltó en llanto. Cada lágrima que élla derramaba enviaba hacia mí un mar de culpa y depresión.
Sentí su cuerpo agitarse mientras lloraba más, recuerdo cómo aquel
estúpido sujeto trató de violarla, fué horrible, más que eso. El hecho
de que yo no estaba ahí
para matarlo en primer lugar.
Traté de que mis ojos no me delataran, como lo hacen siempre cuando estoy con (tn).
En realidad no me avergonzaba mostrar mi lado interior con ella, porque me ama. Pero en ese momento, tenía que ser fuerte.

- Tenía tanto miedo Harry....- me dijo (tn) con lagrimas saliendo de sus ojos. Volteé a verla y la abrazé mas fuerte.
- Yo, lo... lo siento.- mi voz se quebró. - No volverá a pasar de nuevo, te lo prometo.

Ella levantó su mirada dejando ver claramente su hermoso rostro, me sonrió un poco y miró hacia abajo.

- Pareciera que estás enfrentandote al destino Harry, talvez se suponía que debería estar muerta.- me dijo.

No podía aceptar esas palabras, no sabía qué sería de mí sin ella en mi
vida. Miré hacia el cadaver, talvez yo también debería estar muerto...
pero por mi propia
decisión.

- O... talvez fué el destino haberte conocido.- le contesté con un susurro.

Levantó su mirada curiosamente, entendiendo mis palabras, tomé su
rostro y la besé mientras ella cerraba sus ojos, la solté un poco y me
sonrió.
Podía ver atravéz de sus ojos que había hecho su día mejor, como élla había hecho el mío.
Volteé de nuevo a ver el cadaver en el suelo. Traté de imaginarme quién
era el hombre, tomé al cuerpo y lo arrastré a una habitación arriba de
las escaleras y
esperé un poco a que anocheciera.
Miré hacia
las paredes de la casa, me preguntaba si estariamos a salvo ésta noche;
escondí al hombre en una habitación solitaria y lo cubrí con una manta,
miré por
la ventana, por tercera vez en mi vida miré hacia el cielo, y en silencio rezé para que pudieramos descansar ésta noche.
Miré al cuerpo y bajé las escaleras, miré a (tn) quien estaba
cocinando, llegué por detrás y la besé en el cuello, la ayudé con la
comida y en 5 minutos ya
estabamos comiendo en la mesa.

- ¿En donde dormiremos?.- me preguntó. Terminé mi bocado y la miré.
- En mi antigua habitación.

Por alguna razón, aquella habitación no me traía malos recuerdos o
emociones, más bien, me recordaba cuando mi mamá solía quedarse ahí
conmigo en las noches.
Recordaba lo seguro que me sentía, todo el tiempo.
(tn) me sonrió y puso su mano sobre la mía y terminamos de comer.

Seguí revisando por las ventanas por alguna pista de alguien
sospechoso, finalmente tuve una idea, usar uno de los "walkie talkies"
que ponen en los cuartos de
los niños para que escuchen cuando lloran, tenía un par de ésos en mi habitación.
Subí las escaleras para buscarlo, salí de la casa en la noche y lo
escondí en un arbusto cerca de la banqueta, por suerte se escuchaba
fuerte aún, así que podía
escuchar cualquier cosa que se acercara.

Volví a mi habitación y ví a (tn) casi con la cama lista, la ayudé y dejé el walkie talkie a un lado de la cama.
(tn) tenía la intravenosa en su brazo así que con cuidado se la quité,
élla puso dos almohadas, una para ella y otra para mí, se recostó y me
miró, me acerqué a
ella y la miré tambien.
No había cosa más hermosa e interesante que mirar sus ojos.

por **MileeEscriba** Lun 04 Mar 2013, 2:45 pm

CAPITULO 50:

NARRA (TN):

Me recosté boca arriba mientras Harry se recostaba alado mío, parecía relajarse cuando me miró a los ojos.
Recuerdo la última vez que dormí en los brazos de Harry, había pasado
ya tiempo, pero aquí estabamos de nuevo. Contemplé su perfecto rostro.

- Sólo te lo he dicho una vez, al principio... - dijo Harry, levanté mi
mirada para verlo. - ... que tienes unos ojos hermosos, lo pienso
siempre que los miro.

Me susurró y me moví para poner mi cabeza
sobre su pecho, justo encima de su corazón, escuchando sus tranquilos
latidos que hacían de mi vida una perfecta melodía.

- Gracias por entrar en mi destino.- le susurré.

Lo decía enserio, estaba viva y estaba feliz alado de Harry. Él me
dedicó una pequeña risita haciendo que su cuerpo se sacudiera un poco.
No lo había visto tan
relajado en un buen tiempo. Sonreí y lo miré, estaba sonriendo lo cual enviaba a mi estomago millones de mariposas.
Supongo que nunca llegaré a entender el porqué es tan increíblemente
perfecto, me acerqué más a él y juntamos nuestros labios, sentí las
orillas de sus labios
formar una sonrisa la cual desaparecía mientras me besaba con más pasión.
Con cuidado tomé su camisa desabrochándola mientras sus manos bajaban
por mi cintura, a mis caderas, y más abajo. Respiré lentamente, luego
besé el cuello de
Harry lo cual le puso la piel de gallina, lo
sentí temblar un poco, y antes de que pudiera besarlo más él ya estaba
encima de mí. Me sorprendí de lo rápido que
fué y me sonrió por mi reacción mientras me besaba de nuevo.
Aún estaba tomando mis caderas y yo me aferré a él, seguía quedandome
sin aire, sentí algo por mi muslo y sonreí. Me hizo recordar la vez
cuando le dí
a Harry el regalo más preciado e intocable de todos. Él éra el unico hombre con el que había hecho el amor y él será el último.
Harry me separó un poco y me miró a los ojos mientras jadeabamos.

- Serás la única (tn). Te juro que lo serás...- dijo entre jadeos.

Luego juntamos de nuevo nuestros labios en un beso demasiado
apasionado, juntamos nuestros cuerpos con fuerza mientras me tomaba del
cabello y se quitaba su camiseta,
miré como la aventaba hacia el
suelo y me besaba de nuevo, me quité también la mía, Harry se recargó en
mí mientras sentía sus manos bajar por mis Jeans mientras me
los quitaba. En un momento ambos ya estabamos desnudos.
Fué como si Harry hubiera bajado del cielo como una estrella fugaz estrellandose en mi mundo.

Después, respiré profundamente y me recargué en su pecho, nuestros
latidos coinsidían y nos quedamos profundamente dormidos, luego de
mostrarnos amor carnalmente de
nuevo. Caí en el sueño con una sonrisa en mi rostro mientras Harry me acariciaba el cabello.

NARRA HARRY:

Me despertó un ruido fuerte, inmediatamente abrí mis ojos recordando lo
que había pasado la noche anterior, con (tn) dormida en mis brazos.
Busqué mi pistola y la encontré, la agarré. Luego me dí cuenta de que el ruido no había provenido de aquí adentro.
Busqué el walkie talkie, me tensé, con cuidado moví a (tn) mientras dormía con una sonrisa en su rostro.

- ¿(tn)?.- le susurré. Ella parpadeó y se talló los ojos.
- ¿Mhhmm?.

Se despertó y luego me miró, me levanté y tomé su ropa y se la dí. (tn)
se dió cuenta de lo que me refería y se vistió rápido. Me puse mis
boxers y mis pantalones.
Me asomé con cuidado hacia afuera y ví sigilosos movimientos... teníamos que salir de aquí.

- (tn) escúchame bien, quiero que te quedes aquí hasta que venga por
tí.- le dije. La abrazé mientras élla se asomaba, salí de ahí hacia las
escaleras y ví unas
sombras pasar por las ventanas. - ¡Mierda!.- exclamé.

Me dí la vuelta hacia la cocina, dejé las demás cosas arriba con (tn)
pero tenía mi pistola conmigo. Me arrastré por el suelo mientras me
asomaba sigilosamente hacia
afuera. Varias figuras desconocidas
caminaban alrededor de la casa y ví a una de ellas preparar una bomba,
rápidamente me arrastré hasta llegar al garage.
Tenía que hacer algo rápido, llegué al garage, estaba oscuro, llegué y pise el temporizador en el garage, sonaría en 3 minutos.
Cerré la puerta para entrar a la casa, abrí la otra puerta de la
cochera para salir, me arrastré por los arbustos de alado, no había
ningun carro a la vista...
no había plan A.
Conté a los hombres, y en total éran 6.
6 profesionales, se podría decir que se repartieron el trabajo, unos
analizaban todo, caminaban por los lados mientras dos de éllos
preparaban la bomba, yo la
desactivaría una vez que haya acabado con éstos.
De repente, la puerta del garage se abrió, los hombres sacaron sus
pistolas y dispararon, de repente dejaron de mirar alrededor, entraron y
yo corrí hacia dentro
antes de que cerraran, entré arrastrandome, todo éra obscuro.

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