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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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Mensajeros Caídos {LoganLerman}
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Ale Stypayholikson Potter escribió:No hay problema, te entiendo. Me paso algo parecido con mi computadora, terminó toda bloqueada por creo que toda una semana y se me borro prácticamente todo. No te preocupes, toma esto como unas pequeñas vacaciones y concentrate en la escuela. Sinceramente, con saber que vas a seguir esta y tus demas novelas, podre esperar ansiosa por saber que pasara. Y estoy casi segura que se te ocurrirá algo. ¿Sabes? Creo qué todos tenemos que pasar por una situación similar, todos mis conocidos han pasado por una, ¡hasta los amigos de los amigos de mis amigos! So, don't worry. Por mi no hay problema.
Copito de Nieve fuera, ¡Paz!
Ay, callate que me voy a morir D: Igual, pude recuperar solo la novela terminada c: Una amiga la tenia en sus documentos y bueno, SOY FELIZ! al menos por ahora xd.
Algunas novelas se me perdieron :/ pero espero que pueda volver a reescribirlas n.n
Ya la sigo, Copito de nieve!
Jaeger.
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Capitulo Siete.
Se que me tarde demasiado :C Finalmente, pude recuperar la novela :') una de mis mejores amigas la tenía bien guardada y me la paso hoy c: ¡No saben lo feliz que soy por ello! sadasd
Les voy a subir dos capítulos c: Se que tienen varias dudas, pero pronto serán contestado :D
Las quiero <3
Quito mis lágrimas con brusquedad sobre mi rostro, queriendo que todos los gritos y exclamaciones se callen. Quizás, de esa forma, no me sentiría tan culpable por haber provocado varias muertes. Estamos casi en la mitad del pueblo, mi cabaña está más lejos y casi se puede escuchar, pero aquí se escuchan tan claro que mi piel se eriza y el miedo se apodera de mí.
El lugar está lleno de polvo, tierra e incluso bichos que jamás he visto en mi vida, aun así, Liv no grita a pesar de que les tiene terror y mucho asco, parece estar más concentrada en mí que en otra cosa. Josh comienza a caminar sobre el lugar, haciendo la señal de la cruzo, chasqueando los dedos para encender las antorchas que hay en los costados, comenzando a iluminar el lugar. Lola corre hacia un cuadro, el cual lo quita y veo que está tratando de abrir una caja de seguridad.
Las banquetas que hay son de color marrón, desgastadas y algunas están rotas, incluso rayadas y con telarañas al igual que el enorme candelabro que se sitúa arriba mío; las esquinas también contienen la tela de los arácnidos con manchas de humedad y la pintura sobresaliéndose; unas pequeñas aberturas existen en el techo de la Iglesia, dándome la vista perfecta de la noche negra, solo que no están las estrellas.
Una alfombra roja que es desde la entrada hacia casi el del camino - que se forma debido a las bancas - tiene grandes manchas que parece de grasas, de mugre, hongos y excrementos de animales; las cortas escaleras que hay hacia el altar se ven cantidades de rosas marchitas, algunas más viejas que otras, incluso creo que se han hecho polvo cuando veo que esto está cerca de ellas; Una mesa vieja y destartalada es cubierta por un mantel amarillo y sucio, cuando seguramente antes había sido blanco; las estatuas de los ángeles de la guarda al costado están agrietadas, incluso algunas partes están rotas; La virgen situada en un altar más arriba está rota, completamente destrozada y rayada, casi irreconocible.
Mi atención solo se capta en Cristo en la cruz, tallado en madera y pintado con delicadeza: esto es lo único que no parece roto, ni gastado, ni agrietado. Desprende una luz propia brillando aún más que las antorchas.
Josh se dirige hacia él y se pone ante rodillas, comenzando a murmurar palabras que no logro entender debido a la distancia. Unas pequeñas luces salen de su espalda, brillando tanto como Jesucristo.
De repente, este deja de brillar.
Tarde en darme cuenta tres semanas, pero ahora lo veo tan claro: Josh es un ángel, sus alas presentes ahora lo dicen tan claro como el agua. Toda aquella tranquilidad y paz que brinda es por ello mismo, porque para su especie es inevitable no dar esos toques en una persona.
William y Kyle pasan por mi mente al instante; con ellos experimente lo mismo, solo que un poco más leve, pero de todas formas el sentimiento es igual. Entonces, según todo lo que ha pasado y deducido, ¿ellos también…?
- Zoe, necesito que te corras – me dice Liv sacándome de mis pensamientos – Necesito hacer el circulo, sal ya.
A pesar de mi confusión por no saber que circulo habla, me corro hacia donde están las banquetas, con cuidado de no tocarlas por si me ensucio las manos. La rubia saca una navaja de sus pantalones y con fuerza, comienza a hacer un cirulo, rasgando las viejas maderas al igual que la alfombra roja, rompiéndola. Quita el tapizado y lo tira hacia un costado; sigue con su trabajo, haciendo otro circulo más pequeño adentro, donde escribe palabras en aquellas letras que solo ella sabe comprender. Para finalizar, hace una señal de la cruz grande y una estrella de seis puntas.
- ¡Lola! ¡Apúrate! – le grita hacia mi prima, quien aún trata de abrir la caja fuerte.
- ¡Ya la abrí! – avisa y comienza a quitar algo que había dentro de ella. En sus manos, hay un frasco de vidrio que contiene agua con moho y menos clara. ¿Hace cuánto está allí?
- Debes invertirla en el círculo – explica la rubia hacia la morena, quien asiente con rapidez mientras se acerca.
Coloca su mano adentro del frasco y empieza a salpicar con sus dedos sobre el circulo repetidas veces, pero las gotas son absorbidas al instante dejando salir un pequeño humo que se eleva en el aire y van hacia las aberturas del techo, escapándose. Me pregunto porque hacen ello, y me respondo a mí misma que es para bendecir el lugar.
Cuando todo queda empapado y no hay anda que se evapore, Liv me toma de los brazos y me mueve adentro del círculo.
- Escúchame, Zoe – me centro en Josh, quien se ha acercado con las alas extendidas, completamente blancas. Es difícil acatar su orden cuando tengo frente a mí aquella obra maestra. – Zoe, enserio necesito que me escuches.
Me regaño a mí misma y me obligo a centrarme en él, esperando a que mi fascinación por las alas deje de estar presentes. Debería ser absurdo que las alas de Josh me atraigan tanto cuando he visto millones de veces las de Logan, solo que las suyas son mitad negra y mitad blanca.
- Dime – asiento, quitando con brusquedad mis pensamientos sobre el castaño de ojos azules.
- Sabes la profecía bien, ¿verdad? – afirmo positivamente con la cabeza – El día llego, cuando finalmente todos tus guardianes están reunidos, la elección debe ser tomada. Quiero que me prestes bien atención en esto – Acerca unos pasos hacia a mí, pero retrocede haciendo una mueca de dolor. Veo sus pies y observo que sale un pequeño humo que se evapora cuando él se aleja – No importa que destino elijas: Cielo o Infierno, Dios o Diablo, Ángeles o Demonios; nosotros siempre estaremos para cuidarte, pase lo que pase, sea cual sea tu elección, nuestro deber y para lo único que venimos al mundo es para protegerte.
Recuerda todo lo que sucederá si elijes el camino equivocado murmura su dolorosa y dulce voz en mi mente.
Lagrimas se hacen presente; mis ojos se cierra con fuerza y me veo a mi misma corriendo entre los árboles, observando como una cabellera rojiza se acerca, y a pesar de que tiene otros ojos, distinta vestimenta y cuerpo, es Liv corriendo hacia los demonios que están detrás mío; no sé cómo, solo lo sé, también sé que morirá y se despide de mi rozando su mano con la mía. Lo mismo hace Ian, Marcus, Lola y April. Todos ellos mueren. Todos ellos pueden llegar a morir por mi decisión. Todos aquellos que ame con profundidad y los considere lo esencial en mi vida.
¿Acaso voy a permitir que mueran? ¿Voy a dejar que vivan en un mundo gobernado por la maldad y la crueldad? ¿Qué todas las personas allí afuera vivan el infierno viviente cuando tienen la oportunidad de ser felices, de perdonar sus pecados y que sus pecados sean perdonados?
Mis ojos se abren y los veo a todos, sonriéndome dispuestos a aceptar mi elección. También están mi primo, mi hermano y mi tía, quien entrelaza su mano con la de Josh. Me doy cuenta que aunque él sea un ángel, ha decidido ser un protector para estar con mi tía.
Pienso de inmediato en mis padres, a quienes he amado a pesar de nuestras peleas comunes, quienes me han brindado todo el amor y el apoyo posible para que crezca sana y salva, educándome como una persona humilde a pesar de poder tener todas las cosas que quisiera; cosas que papa se hubiera roto la espalda sin pensarlo dos veces para darnos todos los gustos.
Recuerdos de mama cocinando tortas que siempre salen en fracaso, pero que disfrutamos comerlas y reírnos, prometiéndome que la próxima vez saldrá mejor, que aprenderá nuevas recetas por más que no le agrade la idea de cocinar. Me veo de pequeña tomando la mano de papa para llevarme a comprar algún capricho que se me ha dado, regalándome su más sincera sonrisa y diciéndome que soy todo lo que alguna vez ha esperado en su vida, recordándome lo mucho que significo para él y para mi madre y hermano. Veo a Ian cerrándome la puerta de su habitación para que no lo moleste, pero golpeando media hora después la mía para llevarme a donde quiero ir o darme lo que quiero, siempre dándome pequeñas muestras de cariño para recompensar su actitud. Esta Liv, con quien he tenido una rivalidad hasta que nos volvimos mejores amigas, prácticamente hermanas, compartiendo la misma ropa y caminando juntas de la mano los primeros días de escuela; yendo hacia nuestras primeras fiestas; cuidándonos en nuestras primeras borracheras; cantando absurdas canciones de amor al estar idiotizadas por un muchacho con cara bonita; repitiéndonos una a la otra cuanto es lo que nos queremos.
No puedo dejar que mi familia sufra, no voy a permitir que mi madre se hunda en el infierno después de todo lo que ha pasado, o como mi padre sufra en llamas cuando ha sido el mejor padre del mundo.
Asiento con la cabeza, quitándome las lágrimas y asintiendo levemente.
Levanto la cabeza hacia arriba y veo a Logan, elevado en el aire con sus alas majestuosas y diferentes, asintiendo con la cabeza.
<< Yo también te protegeré, sea cual sea tu elección. >>
El círculo donde estoy comienza a brillar a mí alrededor.
- Zoe Heiler – April se para frente mío, sin entrar al círculo. Lagrimas redondean su mejilla, y me doy cuenta, que de todos estos años que compartimos juntas, es la primera vez que la veo llorar – Ha llegado la hora en que tomes tu camino y elijas los dos senderos que tienes. ¿Has decidido unirte a los demonios, otorgándoles el don que has de llevar en tu alma, o a los ángeles, quienes esperan con ansiedad tu elección?
Aclaro mi garganta antes de hablar. En mi mente solo están todos ellos, los que están frente a mí, sobre todo mis padres.
Mi elección ya está hecha.
- Elijo a los ángeles.
El círculo brilla más, y cuando miro hacia mis pies, me doy cuenta de que la estrella ha desaparecido.
Los gritos se dejan de escuchar de repente, trayendo una tranquilidad en todo el lugar mientras que las antorchas son apagadas por una ráfaga de viento, abriendo las puertas del templo y golpeándose contra la pared.
Mis ojos se vuelven a cerrar, sabiendo lo que pasara ahora.
Las personas gritan aún más y piden socorro, veo las llamadas que hay afuera y tengo la intención de ir para tratar de ayudar, sintiendo el miedo y pánico, pero también la adrenalina en mis piernas para comenzar a correr.
- ¡No! – grita Marcus cuando doy solo un paso – Tienes que quedarte aquí, el lugar ha sido bendecido y se les será difícil entrar. Te mataran a penas salgas de ese círculo. Prepárense.
Comienza a llover con fuerza en el pueblo, las gotas caen y caen por las aberturas de la iglesia, mojando la alfombra cada vez más. Los gritos comienzan a disminuir, pero aún siguen pidiendo ayuda y que llamen a la ambulancia para socorrer a los heridos. Siento un gran alivio al escuchar que, al menos, mi elección está salvando a las personas del pueblo, cuando si hubiera decidido el otro camino, arderían con más fuerza.
Ráfagas de viento entran por la puerta, tirando las hacia el suelo y provocando un fuerte golpe de ellas contra el piso. Mis protectores se ponen en guardia, dándome la espalda y mirando hacia la entrada, y dirigiendo su vista hacia todos los puntos de la iglesia.
- Zoe, prométeme que no saldrás de ahí pase lo que pase – dice Ian volteando su cabeza.
- Lo prometo – digo con seguridad, aunque no me crea capaz de cumplir esa promesa.
- Solo hazlo – murmura mi primo en mi dirección.
April les entrega una espada a Marcus e Ian, quienes la toman con agilidad y las mueven con rapidez. Ahora entiendo el por qué había insistiendo en que era bueno que ellos tomaran clases de esgrima cuando eran pequeños; decía que era lo que estaba de moda entre los niños y todos querían, ellos no tardaron en hacerle caso a su tía mas preciada.
Zoe, escúchame la voz de Josh suena en mi cabeza como forma de eco. Dirijo mi mirada hacia él, pero no está viéndome si no que sigue inspeccionando la iglesia. Necesito que cierres los ojos, te arrodilles y reces. Pase lo que pase, no los abras, ¿Si?
Asiento lentamente, preguntándome porque no quiere que lo haga, pero de todas formas, acato sus órdenes y me arrodillo, sintiendo la madera dura y el frio tas pasando mis jeans, sintiendo las piernas heladas. Mis manos se juntan y comienzo a orar, pidiendo que nada malo les pase, que no sean asesinados y que los heridos puedan curarse lo más pronto posible sin tener secuelas graves.
Risas macabras se escuchan mientras sueltan insultos hacia mi dirección, maldiciéndome una otra vez. Sus voces chillonas y agudas comienzan a llegar a mis tímpanos como si estuvieran gritándome en el oído con todas sus fuerzas, pero no puedo comprobarlo; no puedo abrir los ojos, lo he prometido. Tengo miedo a que se rompan y quedarme sorda, siento que no falta mucho para que esto llegue.
Me limito a gemir de dolor y apretar con fuerza mis manos entrelazadas, diciéndome a mí misma que no grite; no pienso darles el gusto de verme sufrir como ellos tanto quieren. Las carcajadas se hacen más fuertes que me cuesta no tirarme al suelo y retorcerme de dolor, tapar mis oídos y rogar porque pare.
Que ni se te ocurra el tono amenazante de la voz de Logan llega a mi cabeza. Sin evitarlo, sonrió porque en este momento está conmigo y se preocupa por mí, me apoya y me protege. Estoy segura que intervendrá si alguno de mis protectores es lastimado, Logan los ayudara antes de que los demonios puedan matarlos.
Una batalla comienza donde estoy ciega, viendo la oscuridad y concentrándome en mis suplicas hacia Dios. Los chillidos de los demonios se detienen, concentrándose más en su batalla que en torturarme, cosa que agradezco; sin embargo, escucho espadas sonar, objetos romperse con brusquedad, gemidos de dolor y exclamaciones; se hablan entre sí en su extraño lenguaje, en el que Liv y Josh – según las voces que reconozco – participan, y puedo notar que por el tono de voz de mi hermana que no está nada contenta.
Mi cuerpo tiembla de terror, el miedo que me comienza a sobar al darme cuenta cuan cerca estoy perdiendo todo lo que amo; pero tengo que aferrarme ante la esperanza que habita en mí, seguir rezando y mantener los ojos cerrados. Trato de ser fuerte y no llorar, una tarea que se me es inevitable cada vez que escucho a mis protectores gritar de dolor, imaginándome cuan heridos deberán estar.
- ¡¿William?! ¡¿Kyle?! – exclama con incredibilidad mi hermana.
Me sorprendo al escuchar los nombres de estos, aun así no hago ningún movimiento, pero esto me confirma mi sospecha de que ellos sean ángeles. Tienen que buenos, no pueden ser demonio; de lo contrario, me hubieran asesinado en cuanto tuvieran la posibilidad, William no me hubiera rescatado del incendio y dejado mi cuerpo morir ante aquel demonio.
Comienzo a sentirme estúpida ante mis rezos, debería estar peleando con ellos, ayudándolos y no hacer esto. Mis peticiones deben ser ignoradas, Dios o Jesucristo tienen cosas más importantes que hacer que escucharme, ¿debería darme por vencida? La idea se me descarta al instante al escuchar un gruñido de Logan en mi mente. Desisto y sigo rezando, orando, pidiendo y agradeciendo.
- ¡No, Ian! – el grito de Lola me descoloca, más cuando su voz está completamente ahogada y desesperada.
Mis ojos se abren al instante, mis piernas se incorporan de por sí mismas mientras que busco con la mirada a mi hermano, con el corazón latiéndome con fuerza y el temblar de todo mi cuerpo. Plumas negras comienzan a caer desde el cielo, dirigiendo mi atención hacia arriba y olvidándome por un momento de Ian; me impresiono al ver docenas de hombres y mujeres con alas, con su piel color gris oscuro, la mirada enrojecida, sus hermosas alas extendidas y sus ropas expuestas; los hombres usan solo unos pantalones negros mientras que las mujeres usan una pequeña pollera pegada al cuerpo y una blusa descotada y cortada hacia la mitad. Todos son hermosos, completamente hermosos; pero son sombríos, oscuros y salta en evidencia su maldad, revolando de sus ojos y de su sonrisa maliciosa.
Los demonios comienzan a pelear con seres blancos de piel, con túnicas blancas al igual que sus hermosas alas como las de Josh, y un brillante resplandor alrededor de ellos. Me brindan tranquilidad, paz, alegría y satisfacción, que no puedo evitar medio sonreír ante ello.
- ¡Zoe! – grita Marcus, captando mi atención hacia él. Está evitando con su espada de que un ángel lo corte - ¡Vete! ¡Corre lejos de aquí y cierra la puerta!
Abro la boca en grande cuando observo las bancas destruidas, la mesa del altar partida al medio mientras que las paredes cada vez están más agrietadas; por lo tanto, estoy segura de que esto se vendrá abajo en cualquier momento.
Recuerdo a mi hermano y el grito de Lola, por lo que los busco con desesperación, pero desgraciadamente, no logro encontrarlos. Mas lagrimas comienzo a derramar, pensando donde podrían estar ahora, si los han matado o que ha sucedido con ellos, sobre todo con mi hermano.
Me siento tan débil el que llore tanto, siempre reprimí mis lágrimas, sabiendo que no lograría nada con llorar como idiota; sin embargo, ahora parecía algo imposible de hacer cuando podía perder todo en cuestiones de segundos.
<< Kyle se los ha llevado a un lugar seguro. ¡Ahora vete!>> me dice Marcus por telepatía. Con esto me tranquilizo y giro sobre mis pies, dispuesta a correr con todas mis fuerzas y cuanto me den las piernas. Sé que en cuanto salga del circulo estaré desprotegida, que son capases de matarme en un segundo; pero si cierro la puerta, todos los que amo podrían morir.
Solo sal del círculo para que pueda protegerte interviene Logan en mis pensamientos. No puedo protegerlos, esa no es mi tarea y ni siquiera me importa; pero tengo que protegerte a ti, pase lo que pase.
No quiero irme sin ellos contesto con seguridad.
De todas formas van a morir, están débiles y los demonios no tardaran en acabar con ellos asegura. Quiero gritarle de que se vaya a la mierda por todas las cosas que está diciéndome, por ser tan egoísta y no pensar siquiera en otras personas. He olvidado cuan insensible y seco podía llegar a ser.
No sé qué hacer, no sé si irme o tirarme al suelo a rezar nuevamente, pero por la expresión que tiene Marcus en el rostro cundo volteo a verlo para verificar, el me niega con la cabeza. Tus rezos ya fueron escuchados, no es necesario que sigas, pero era una buena manera en que ellos no trataran de atacarte. Debes irte y cerrar la puerta, solo así quedaremos encerrado todos y nadie podrá salir.
Finalmente, hago mi elección de quedarme y dar pelea; no voy a abandonarlos si puedo pelear por salvarlos. Ignoro los gritos de Marcus en mi mente, advirtiéndome que siquiera me mueva de mi sitio, pero en cuanto localizo una espada cerca del círculo, salgo de el con rapidez y la tomo entre mis manos, sin saber muy bien que hacer.
Los demonios dejan de pelear con los ángeles y dirigen su mirada hacia a mí, estampando en su rostro una sonrisa malévola. En una fracción de segundo, los veo acercarse a mí con rapidez, dispuestos a asesinarme; pero son detenidos por un par de alas negras y blancas, agitándose frente a mí y deteniendo a los demonios, quienes exclaman ante la aparición de mi ángel.
- Logan – susurro estirando la mano y queriendo tocarlo, pero cuando voltea su mirada hacia atrás y me ve por encima de su cuello, me indica que no lo haga.
Una ráfaga de viento pasa por mi lado y alguien me sujeta por detrás; en vez de alterarme y gritar – como cualquier persona normal haría en una situación así – siento la tranquilidad abrumarme por completo y la paz interior.
- Duerme, Zoe. – susurra en mi oído una voz conocida, y por más que no quiero dormirme, caigo rendida en sus brazos con el cuerpo pesado al igual que los parpados.
Me pregunto cuando volveré a ver a Logan.
<< Pronto>>
Les voy a subir dos capítulos c: Se que tienen varias dudas, pero pronto serán contestado :D
Las quiero <3
Capitulo Siete
Quito mis lágrimas con brusquedad sobre mi rostro, queriendo que todos los gritos y exclamaciones se callen. Quizás, de esa forma, no me sentiría tan culpable por haber provocado varias muertes. Estamos casi en la mitad del pueblo, mi cabaña está más lejos y casi se puede escuchar, pero aquí se escuchan tan claro que mi piel se eriza y el miedo se apodera de mí.
El lugar está lleno de polvo, tierra e incluso bichos que jamás he visto en mi vida, aun así, Liv no grita a pesar de que les tiene terror y mucho asco, parece estar más concentrada en mí que en otra cosa. Josh comienza a caminar sobre el lugar, haciendo la señal de la cruzo, chasqueando los dedos para encender las antorchas que hay en los costados, comenzando a iluminar el lugar. Lola corre hacia un cuadro, el cual lo quita y veo que está tratando de abrir una caja de seguridad.
Las banquetas que hay son de color marrón, desgastadas y algunas están rotas, incluso rayadas y con telarañas al igual que el enorme candelabro que se sitúa arriba mío; las esquinas también contienen la tela de los arácnidos con manchas de humedad y la pintura sobresaliéndose; unas pequeñas aberturas existen en el techo de la Iglesia, dándome la vista perfecta de la noche negra, solo que no están las estrellas.
Una alfombra roja que es desde la entrada hacia casi el del camino - que se forma debido a las bancas - tiene grandes manchas que parece de grasas, de mugre, hongos y excrementos de animales; las cortas escaleras que hay hacia el altar se ven cantidades de rosas marchitas, algunas más viejas que otras, incluso creo que se han hecho polvo cuando veo que esto está cerca de ellas; Una mesa vieja y destartalada es cubierta por un mantel amarillo y sucio, cuando seguramente antes había sido blanco; las estatuas de los ángeles de la guarda al costado están agrietadas, incluso algunas partes están rotas; La virgen situada en un altar más arriba está rota, completamente destrozada y rayada, casi irreconocible.
Mi atención solo se capta en Cristo en la cruz, tallado en madera y pintado con delicadeza: esto es lo único que no parece roto, ni gastado, ni agrietado. Desprende una luz propia brillando aún más que las antorchas.
Josh se dirige hacia él y se pone ante rodillas, comenzando a murmurar palabras que no logro entender debido a la distancia. Unas pequeñas luces salen de su espalda, brillando tanto como Jesucristo.
De repente, este deja de brillar.
Tarde en darme cuenta tres semanas, pero ahora lo veo tan claro: Josh es un ángel, sus alas presentes ahora lo dicen tan claro como el agua. Toda aquella tranquilidad y paz que brinda es por ello mismo, porque para su especie es inevitable no dar esos toques en una persona.
William y Kyle pasan por mi mente al instante; con ellos experimente lo mismo, solo que un poco más leve, pero de todas formas el sentimiento es igual. Entonces, según todo lo que ha pasado y deducido, ¿ellos también…?
- Zoe, necesito que te corras – me dice Liv sacándome de mis pensamientos – Necesito hacer el circulo, sal ya.
A pesar de mi confusión por no saber que circulo habla, me corro hacia donde están las banquetas, con cuidado de no tocarlas por si me ensucio las manos. La rubia saca una navaja de sus pantalones y con fuerza, comienza a hacer un cirulo, rasgando las viejas maderas al igual que la alfombra roja, rompiéndola. Quita el tapizado y lo tira hacia un costado; sigue con su trabajo, haciendo otro circulo más pequeño adentro, donde escribe palabras en aquellas letras que solo ella sabe comprender. Para finalizar, hace una señal de la cruz grande y una estrella de seis puntas.
- ¡Lola! ¡Apúrate! – le grita hacia mi prima, quien aún trata de abrir la caja fuerte.
- ¡Ya la abrí! – avisa y comienza a quitar algo que había dentro de ella. En sus manos, hay un frasco de vidrio que contiene agua con moho y menos clara. ¿Hace cuánto está allí?
- Debes invertirla en el círculo – explica la rubia hacia la morena, quien asiente con rapidez mientras se acerca.
Coloca su mano adentro del frasco y empieza a salpicar con sus dedos sobre el circulo repetidas veces, pero las gotas son absorbidas al instante dejando salir un pequeño humo que se eleva en el aire y van hacia las aberturas del techo, escapándose. Me pregunto porque hacen ello, y me respondo a mí misma que es para bendecir el lugar.
Cuando todo queda empapado y no hay anda que se evapore, Liv me toma de los brazos y me mueve adentro del círculo.
- Escúchame, Zoe – me centro en Josh, quien se ha acercado con las alas extendidas, completamente blancas. Es difícil acatar su orden cuando tengo frente a mí aquella obra maestra. – Zoe, enserio necesito que me escuches.
Me regaño a mí misma y me obligo a centrarme en él, esperando a que mi fascinación por las alas deje de estar presentes. Debería ser absurdo que las alas de Josh me atraigan tanto cuando he visto millones de veces las de Logan, solo que las suyas son mitad negra y mitad blanca.
- Dime – asiento, quitando con brusquedad mis pensamientos sobre el castaño de ojos azules.
- Sabes la profecía bien, ¿verdad? – afirmo positivamente con la cabeza – El día llego, cuando finalmente todos tus guardianes están reunidos, la elección debe ser tomada. Quiero que me prestes bien atención en esto – Acerca unos pasos hacia a mí, pero retrocede haciendo una mueca de dolor. Veo sus pies y observo que sale un pequeño humo que se evapora cuando él se aleja – No importa que destino elijas: Cielo o Infierno, Dios o Diablo, Ángeles o Demonios; nosotros siempre estaremos para cuidarte, pase lo que pase, sea cual sea tu elección, nuestro deber y para lo único que venimos al mundo es para protegerte.
Recuerda todo lo que sucederá si elijes el camino equivocado murmura su dolorosa y dulce voz en mi mente.
Lagrimas se hacen presente; mis ojos se cierra con fuerza y me veo a mi misma corriendo entre los árboles, observando como una cabellera rojiza se acerca, y a pesar de que tiene otros ojos, distinta vestimenta y cuerpo, es Liv corriendo hacia los demonios que están detrás mío; no sé cómo, solo lo sé, también sé que morirá y se despide de mi rozando su mano con la mía. Lo mismo hace Ian, Marcus, Lola y April. Todos ellos mueren. Todos ellos pueden llegar a morir por mi decisión. Todos aquellos que ame con profundidad y los considere lo esencial en mi vida.
¿Acaso voy a permitir que mueran? ¿Voy a dejar que vivan en un mundo gobernado por la maldad y la crueldad? ¿Qué todas las personas allí afuera vivan el infierno viviente cuando tienen la oportunidad de ser felices, de perdonar sus pecados y que sus pecados sean perdonados?
Mis ojos se abren y los veo a todos, sonriéndome dispuestos a aceptar mi elección. También están mi primo, mi hermano y mi tía, quien entrelaza su mano con la de Josh. Me doy cuenta que aunque él sea un ángel, ha decidido ser un protector para estar con mi tía.
Pienso de inmediato en mis padres, a quienes he amado a pesar de nuestras peleas comunes, quienes me han brindado todo el amor y el apoyo posible para que crezca sana y salva, educándome como una persona humilde a pesar de poder tener todas las cosas que quisiera; cosas que papa se hubiera roto la espalda sin pensarlo dos veces para darnos todos los gustos.
Recuerdos de mama cocinando tortas que siempre salen en fracaso, pero que disfrutamos comerlas y reírnos, prometiéndome que la próxima vez saldrá mejor, que aprenderá nuevas recetas por más que no le agrade la idea de cocinar. Me veo de pequeña tomando la mano de papa para llevarme a comprar algún capricho que se me ha dado, regalándome su más sincera sonrisa y diciéndome que soy todo lo que alguna vez ha esperado en su vida, recordándome lo mucho que significo para él y para mi madre y hermano. Veo a Ian cerrándome la puerta de su habitación para que no lo moleste, pero golpeando media hora después la mía para llevarme a donde quiero ir o darme lo que quiero, siempre dándome pequeñas muestras de cariño para recompensar su actitud. Esta Liv, con quien he tenido una rivalidad hasta que nos volvimos mejores amigas, prácticamente hermanas, compartiendo la misma ropa y caminando juntas de la mano los primeros días de escuela; yendo hacia nuestras primeras fiestas; cuidándonos en nuestras primeras borracheras; cantando absurdas canciones de amor al estar idiotizadas por un muchacho con cara bonita; repitiéndonos una a la otra cuanto es lo que nos queremos.
No puedo dejar que mi familia sufra, no voy a permitir que mi madre se hunda en el infierno después de todo lo que ha pasado, o como mi padre sufra en llamas cuando ha sido el mejor padre del mundo.
Asiento con la cabeza, quitándome las lágrimas y asintiendo levemente.
Levanto la cabeza hacia arriba y veo a Logan, elevado en el aire con sus alas majestuosas y diferentes, asintiendo con la cabeza.
<< Yo también te protegeré, sea cual sea tu elección. >>
El círculo donde estoy comienza a brillar a mí alrededor.
- Zoe Heiler – April se para frente mío, sin entrar al círculo. Lagrimas redondean su mejilla, y me doy cuenta, que de todos estos años que compartimos juntas, es la primera vez que la veo llorar – Ha llegado la hora en que tomes tu camino y elijas los dos senderos que tienes. ¿Has decidido unirte a los demonios, otorgándoles el don que has de llevar en tu alma, o a los ángeles, quienes esperan con ansiedad tu elección?
Aclaro mi garganta antes de hablar. En mi mente solo están todos ellos, los que están frente a mí, sobre todo mis padres.
Mi elección ya está hecha.
- Elijo a los ángeles.
El círculo brilla más, y cuando miro hacia mis pies, me doy cuenta de que la estrella ha desaparecido.
Los gritos se dejan de escuchar de repente, trayendo una tranquilidad en todo el lugar mientras que las antorchas son apagadas por una ráfaga de viento, abriendo las puertas del templo y golpeándose contra la pared.
Mis ojos se vuelven a cerrar, sabiendo lo que pasara ahora.
Las personas gritan aún más y piden socorro, veo las llamadas que hay afuera y tengo la intención de ir para tratar de ayudar, sintiendo el miedo y pánico, pero también la adrenalina en mis piernas para comenzar a correr.
- ¡No! – grita Marcus cuando doy solo un paso – Tienes que quedarte aquí, el lugar ha sido bendecido y se les será difícil entrar. Te mataran a penas salgas de ese círculo. Prepárense.
Comienza a llover con fuerza en el pueblo, las gotas caen y caen por las aberturas de la iglesia, mojando la alfombra cada vez más. Los gritos comienzan a disminuir, pero aún siguen pidiendo ayuda y que llamen a la ambulancia para socorrer a los heridos. Siento un gran alivio al escuchar que, al menos, mi elección está salvando a las personas del pueblo, cuando si hubiera decidido el otro camino, arderían con más fuerza.
Ráfagas de viento entran por la puerta, tirando las hacia el suelo y provocando un fuerte golpe de ellas contra el piso. Mis protectores se ponen en guardia, dándome la espalda y mirando hacia la entrada, y dirigiendo su vista hacia todos los puntos de la iglesia.
- Zoe, prométeme que no saldrás de ahí pase lo que pase – dice Ian volteando su cabeza.
- Lo prometo – digo con seguridad, aunque no me crea capaz de cumplir esa promesa.
- Solo hazlo – murmura mi primo en mi dirección.
April les entrega una espada a Marcus e Ian, quienes la toman con agilidad y las mueven con rapidez. Ahora entiendo el por qué había insistiendo en que era bueno que ellos tomaran clases de esgrima cuando eran pequeños; decía que era lo que estaba de moda entre los niños y todos querían, ellos no tardaron en hacerle caso a su tía mas preciada.
Zoe, escúchame la voz de Josh suena en mi cabeza como forma de eco. Dirijo mi mirada hacia él, pero no está viéndome si no que sigue inspeccionando la iglesia. Necesito que cierres los ojos, te arrodilles y reces. Pase lo que pase, no los abras, ¿Si?
Asiento lentamente, preguntándome porque no quiere que lo haga, pero de todas formas, acato sus órdenes y me arrodillo, sintiendo la madera dura y el frio tas pasando mis jeans, sintiendo las piernas heladas. Mis manos se juntan y comienzo a orar, pidiendo que nada malo les pase, que no sean asesinados y que los heridos puedan curarse lo más pronto posible sin tener secuelas graves.
Risas macabras se escuchan mientras sueltan insultos hacia mi dirección, maldiciéndome una otra vez. Sus voces chillonas y agudas comienzan a llegar a mis tímpanos como si estuvieran gritándome en el oído con todas sus fuerzas, pero no puedo comprobarlo; no puedo abrir los ojos, lo he prometido. Tengo miedo a que se rompan y quedarme sorda, siento que no falta mucho para que esto llegue.
Me limito a gemir de dolor y apretar con fuerza mis manos entrelazadas, diciéndome a mí misma que no grite; no pienso darles el gusto de verme sufrir como ellos tanto quieren. Las carcajadas se hacen más fuertes que me cuesta no tirarme al suelo y retorcerme de dolor, tapar mis oídos y rogar porque pare.
Que ni se te ocurra el tono amenazante de la voz de Logan llega a mi cabeza. Sin evitarlo, sonrió porque en este momento está conmigo y se preocupa por mí, me apoya y me protege. Estoy segura que intervendrá si alguno de mis protectores es lastimado, Logan los ayudara antes de que los demonios puedan matarlos.
Una batalla comienza donde estoy ciega, viendo la oscuridad y concentrándome en mis suplicas hacia Dios. Los chillidos de los demonios se detienen, concentrándose más en su batalla que en torturarme, cosa que agradezco; sin embargo, escucho espadas sonar, objetos romperse con brusquedad, gemidos de dolor y exclamaciones; se hablan entre sí en su extraño lenguaje, en el que Liv y Josh – según las voces que reconozco – participan, y puedo notar que por el tono de voz de mi hermana que no está nada contenta.
Mi cuerpo tiembla de terror, el miedo que me comienza a sobar al darme cuenta cuan cerca estoy perdiendo todo lo que amo; pero tengo que aferrarme ante la esperanza que habita en mí, seguir rezando y mantener los ojos cerrados. Trato de ser fuerte y no llorar, una tarea que se me es inevitable cada vez que escucho a mis protectores gritar de dolor, imaginándome cuan heridos deberán estar.
- ¡¿William?! ¡¿Kyle?! – exclama con incredibilidad mi hermana.
Me sorprendo al escuchar los nombres de estos, aun así no hago ningún movimiento, pero esto me confirma mi sospecha de que ellos sean ángeles. Tienen que buenos, no pueden ser demonio; de lo contrario, me hubieran asesinado en cuanto tuvieran la posibilidad, William no me hubiera rescatado del incendio y dejado mi cuerpo morir ante aquel demonio.
Comienzo a sentirme estúpida ante mis rezos, debería estar peleando con ellos, ayudándolos y no hacer esto. Mis peticiones deben ser ignoradas, Dios o Jesucristo tienen cosas más importantes que hacer que escucharme, ¿debería darme por vencida? La idea se me descarta al instante al escuchar un gruñido de Logan en mi mente. Desisto y sigo rezando, orando, pidiendo y agradeciendo.
- ¡No, Ian! – el grito de Lola me descoloca, más cuando su voz está completamente ahogada y desesperada.
Mis ojos se abren al instante, mis piernas se incorporan de por sí mismas mientras que busco con la mirada a mi hermano, con el corazón latiéndome con fuerza y el temblar de todo mi cuerpo. Plumas negras comienzan a caer desde el cielo, dirigiendo mi atención hacia arriba y olvidándome por un momento de Ian; me impresiono al ver docenas de hombres y mujeres con alas, con su piel color gris oscuro, la mirada enrojecida, sus hermosas alas extendidas y sus ropas expuestas; los hombres usan solo unos pantalones negros mientras que las mujeres usan una pequeña pollera pegada al cuerpo y una blusa descotada y cortada hacia la mitad. Todos son hermosos, completamente hermosos; pero son sombríos, oscuros y salta en evidencia su maldad, revolando de sus ojos y de su sonrisa maliciosa.
Los demonios comienzan a pelear con seres blancos de piel, con túnicas blancas al igual que sus hermosas alas como las de Josh, y un brillante resplandor alrededor de ellos. Me brindan tranquilidad, paz, alegría y satisfacción, que no puedo evitar medio sonreír ante ello.
- ¡Zoe! – grita Marcus, captando mi atención hacia él. Está evitando con su espada de que un ángel lo corte - ¡Vete! ¡Corre lejos de aquí y cierra la puerta!
Abro la boca en grande cuando observo las bancas destruidas, la mesa del altar partida al medio mientras que las paredes cada vez están más agrietadas; por lo tanto, estoy segura de que esto se vendrá abajo en cualquier momento.
Recuerdo a mi hermano y el grito de Lola, por lo que los busco con desesperación, pero desgraciadamente, no logro encontrarlos. Mas lagrimas comienzo a derramar, pensando donde podrían estar ahora, si los han matado o que ha sucedido con ellos, sobre todo con mi hermano.
Me siento tan débil el que llore tanto, siempre reprimí mis lágrimas, sabiendo que no lograría nada con llorar como idiota; sin embargo, ahora parecía algo imposible de hacer cuando podía perder todo en cuestiones de segundos.
<< Kyle se los ha llevado a un lugar seguro. ¡Ahora vete!>> me dice Marcus por telepatía. Con esto me tranquilizo y giro sobre mis pies, dispuesta a correr con todas mis fuerzas y cuanto me den las piernas. Sé que en cuanto salga del circulo estaré desprotegida, que son capases de matarme en un segundo; pero si cierro la puerta, todos los que amo podrían morir.
Solo sal del círculo para que pueda protegerte interviene Logan en mis pensamientos. No puedo protegerlos, esa no es mi tarea y ni siquiera me importa; pero tengo que protegerte a ti, pase lo que pase.
No quiero irme sin ellos contesto con seguridad.
De todas formas van a morir, están débiles y los demonios no tardaran en acabar con ellos asegura. Quiero gritarle de que se vaya a la mierda por todas las cosas que está diciéndome, por ser tan egoísta y no pensar siquiera en otras personas. He olvidado cuan insensible y seco podía llegar a ser.
No sé qué hacer, no sé si irme o tirarme al suelo a rezar nuevamente, pero por la expresión que tiene Marcus en el rostro cundo volteo a verlo para verificar, el me niega con la cabeza. Tus rezos ya fueron escuchados, no es necesario que sigas, pero era una buena manera en que ellos no trataran de atacarte. Debes irte y cerrar la puerta, solo así quedaremos encerrado todos y nadie podrá salir.
Finalmente, hago mi elección de quedarme y dar pelea; no voy a abandonarlos si puedo pelear por salvarlos. Ignoro los gritos de Marcus en mi mente, advirtiéndome que siquiera me mueva de mi sitio, pero en cuanto localizo una espada cerca del círculo, salgo de el con rapidez y la tomo entre mis manos, sin saber muy bien que hacer.
Los demonios dejan de pelear con los ángeles y dirigen su mirada hacia a mí, estampando en su rostro una sonrisa malévola. En una fracción de segundo, los veo acercarse a mí con rapidez, dispuestos a asesinarme; pero son detenidos por un par de alas negras y blancas, agitándose frente a mí y deteniendo a los demonios, quienes exclaman ante la aparición de mi ángel.
- Logan – susurro estirando la mano y queriendo tocarlo, pero cuando voltea su mirada hacia atrás y me ve por encima de su cuello, me indica que no lo haga.
Una ráfaga de viento pasa por mi lado y alguien me sujeta por detrás; en vez de alterarme y gritar – como cualquier persona normal haría en una situación así – siento la tranquilidad abrumarme por completo y la paz interior.
- Duerme, Zoe. – susurra en mi oído una voz conocida, y por más que no quiero dormirme, caigo rendida en sus brazos con el cuerpo pesado al igual que los parpados.
Me pregunto cuando volveré a ver a Logan.
<< Pronto>>
Jaeger.
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Capitulo Ocho.
Capitulo Ocho
He despertado hace exactamente veintisiete minutos según el reloj que está colgado en la pared. Minutos desperdiciados por los balbuceos y los intentos de distracción que trata de hacer Marcus, sin éxito, obviamente. Solo he preguntado como he llegado hasta aquí, él me evita la pregunta, y viendo lo nervioso que se encuentra, decido no preguntar nada más hasta que April, Liv o alguno de mis demás protectores aparezcan.
La habitación en la que me encuentro es de metal, las paredes están compuestas por ello y solo hay una ventana que da hacia el pasillo, pero una cortina blanca me impide ver el exterior del cuarto. Se halla una pequeña mesa de madera, donde a su lado hay un sillón negro y bastante cómodo, aunque no creo que sea tanto para dormir; una lámpara blanca nos ilumina desde arriba, pero su luz pareciera no llegar lo suficiente para iluminar toda la sala.
Estoy recostada en una cama como las de hospital, a una altura más alta y el colchón es de lo más cómodo que hay. Las sabanas y frazadas grises me cubren por completo, menos mis brazos que están hacia mi costado siendo conectados por agujas. Levanto la mirada para seguir observando y me sorprendo que esté conectada al suero, también por la cantidad de jarrones con rosas que hay esparcidas por la habitación; recién me doy cuenta que están allí, algunas más recientes que otras. Esto me hace fruncir el ceño y preguntarme cuanto tiempo he dormido.
Hago una mueca de dolor ante una punzada en mi cabeza, suelto un pequeño gemido de dolor y me quejo. Noto como mi cuerpo también está un tanto adolorido y dormido; esta tan pesado y me siento agotada por más que recién me he despertado. Quiero volver a cerrar mis fatigosos parpados y echarme una buena siesta, aun así me mantengo firme en dejarlos abiertos y evitar dormirme. Mi necesidad de saber lo que está pasando puede llegar a otros extremos de desesperarme y levantarme de la camilla, sin importar mis condiciones.
- No vuelvas a pensar una cosa así – dice Marcus, mirándome con desaprobación – Dios sabe que me harían si te descompensaras.
Levanto las cejas en alto, al parecer le preocupa más su trasero que mi propia salud.
- Sabes que no lo decía por eso – replica un tanto ofendido. Revoleo los ojos.
Antes de que pudiera hablar – seguramente, regañándome de nuevo – Ian entra en la habitación, interrumpiendo a mi primo; su rostro deja en evidencia su preocupación y también el alivio al verme despierta. Hace una mueca parecida a una sonrisa torcida, aunque esta no llega a sus ojos y tampoco dura mucho en sus facciones dejándola caer, mostrando nuevamente su rostro serio.
Camina cortos pasos y se sienta en una banqueta cerca, juntando sus manos con las mías en el acto. La cierta frialdad que siento en ellas provoca un escalofríos que me eriza la piel; su temperatura es mucho más baja que la mía, pero lo raro es que no estoy sintiendo algún tipo de calor ni nada parecido. El solo contacto de su mano me hace sentirme en la mismísima Antártida, por lo que quito mi mano de las de él con brusquedad, asustándolo un poco.
- Lo siento – me disculpo de inmediato, temiendo ver el dolor en su rostro – Solo que estas más frió de lo normal.
Ante esto, mi hermano emboza una sonrisa triste en su rostro y mira hacia mi primo, diciéndole algo en su mente y con la mirada, algo a lo que estoy ajena, por lo que me molesta un poco; no me gusta estar fuera de órbita cuando puedo ser algo útil. Marcus asiente y larga un suspiro, se dirige hacia la puerta y la abre de un tirón, dejando en evidencia a los cuerpos de Liv, Lola y April. Las tres mujeres me sonríen de oreja a oreja, con evidente felicidad en su rostro y entran a la habitación antes de que el pelinegro replique algo.
- ¡Estas despierta! – chilla Liv con alegría, pero esto solo causa una punzada más en mi cabeza.
- Rubia, no grites; todavía sus sentidos siguen un poco sensibles – le reprocha mi primo con una mirada acusadora.
- Lo siento, Zoe – me mira apenada, solo asiento con la cabeza y le doy una sonrisa para tranquilizarla.
- ¿Te encuentras bien? ¿Necesitas algo o te duele algo? – pregunta Lola con inquietud marcando su semblante nervioso.
- Estoy bien, no se preocupen – mi voz sale ronca aún más de lo debido. Aclaro mi garganta antes de volver a hablar – Solo quiero saber… donde me encuentro. ¿Dónde estamos?
Las miradas se dirigen hacia la figura de mi tía April de manera automática, como si todo dependiera de ella. Observo como Marcus asiente con disimulo, y me pregunto qué es lo que la hace tener más poder de decisión de las palabras y los actos sobre los demás; sin embargo, estoy segura que es lo que le permite intervenir ante cada problemática que mis familiares han pasado. Pero, ¿entonces por qué no me protegió cuando era constantemente atacada? ¿Sabía de Logan y como me cuidaba? ¿Y cuando él se marchó? ¿Habrá pensado que el ángel seguía conmigo?
Marcus bufa y niega con la cabeza; todos centran su mirada en el de forma interrogante, pero las ignora mirando al techo como si fuera lo más interesante en estos momentos. Está tratando de evitar todas mis preguntas, cuestiono también si él conoce a Logan por mis memorias. Me sonrojo al verlo asentir nuevamente, y maldigo su don por permitirle ver y escuchar cosas que son de mi completa privacidad. Pensar que era una estúpida adolescente que vivía soñando despierta, mirando fijamente y babeando por un ser que jamás podría amarla. Bueno, eso no ha cambiado mucho en el transcurso de estos tres años.
- Zoe – me llama April, por lo que quito la mirada de mi primo y pongo atención solamente a ella. – Estamos en la base de la Organización de Protección y Seguridad Internacional contra los Fenómenos Ficticios, o mejor conocida como la O.P.S.I.F.F
- ¿Fenómenos ficticios? – mi ceño se frunce al escuchar algo tan raro como ello.
- Las personas suelen pensar que es una organización para locos, por lo que llama menos la atención y todos lo ven ridículo – acota Lola con una sonrisa divertida en su rostro.
- Además, es bastante original – dice Liv levantando las manos al aire -¿Qué se puede hacer? Aquí están todos locos, tendrías que verlos.
- Liv – le advierte April con la mirada, dejando a la rubia que ruede los ojos – Zoe, cariño, hay varias cosas que debes saber. ¿Querías saber que era lo que tanto te ocultábamos? Bueno, te lo diremos, pero debo pedirte que te tomes todo con calma y logres entender porque no podíamos decirte antes. Liv debía saber primero para alcanzar el estatus de guardiana, por eso se nos fue imposible contarte la verdad hasta que no estuviera preparada.
Los demás asienten contemplándome con cierta inquietud y pesadumbre en ellos, les dedico una media sonrisa, concediéndoles así la tranquilidad; no estoy enojada, pero si un tanto ansiosa y nerviosa, queriendo saber con ansia todo aquello que hay por detrás y estoy desconociendo. He esperado por esto tanto tiempo que necesito que suelten todo ya, sin importarme si quedo traumada de por vida o alguna cuestión así.
April le toca el hombro a Marcus, brindándole una sonrisa comprensiva donde el solo asiente con la cabeza, de manera un tanto desconcertado. Se acerca hasta una banqueta que está del otro lado de la cama, contrario al que Ian esta justo en este momento. Coloca sus cálidas manos en la mía, acariciándolas con el pulgar al mismo tiempo en que las observa con fijes, absorbido en ellas de una manera que lo hace ver como si estuviera alejado de todos nosotros y su mente en una parte más lejanas de nuestros cuerpos.
- Los protectores experimentan un gran cambio en sus personalidades al cumplir los dieciocho años, debido a que nuestros dones están incorporándose en nuestro cuerpo después de haber permanecido años apagados en nuestro cuerpo, y aun más en nuestra alma, la cual ha sabido bien ocultarlos de nuestros impulsos y de nuestros sueños; pero una vez que comienzan a llegar, los protectores sino están bien entrenados para sobrellevar la situación, podemos caer en la locura.
>>Eso fue lo que nos pasó exactamente a nosotros, sobre todo a mí que era el mayor. Lola también los experimentaba, pero sabía canalizarlos de mejor manera; ella había tenido ataques de ansiedad y desde niña le enseñaron como manejarlos en situaciones más difíciles. Yo no tenía idea como, solo sabía que en mi mente escuchaba voces, comentarios hirientes sobre personas desconocida, personas que eran cercanas y amaba, y también de mí mismo. Escuchaba como las personas podían cuestionarme sin siquiera conocerme, como eran los verdaderos pensamientos de los que solían llamarse mis amigos, o incluso las cosas que pensaba mi madre. Me creía loco, sentía que yo no era alguien… normal, así por decirlo. Creía que lo que me pasaba estaba muy mal. Supuse que si lo contaba, podían ayudarme y quitarme esto que hacía que permitiera escuchar las voces de las mentes. Pero fui diagnosticado esquizofrénico, sabía que iban a mandarme a un centro de rehabilitación y no quería; por lo tanto, tome las pastillas que utilizaba para dormir y deje el frasco vacío. Estuve cuatro años atormentándome a mí mismo, creyendo cada día fielmente en mí, en que no estaba loco y que algún día lograría salir para demostrarle todo a los demás. Ese día nunca llego, obviamente, tuve que escapar<<
Quedo un tanto impactada por la historia de Marcus, tengo el sabor amargo en la garganta al mismo tiempo que un nudo se instala ella, queriendo soltar saladas lagrimas para redondear mi mejilla y plantar caminos sobre ella. Me digo a mi misma que no debo llorar; no va a solucionar las heridas y el resentimiento que mi primo lleva por dentro, ni siquiera podría verme en su misma situación; pero comprendo su miedo, comprendo su necesidad de buscar ayuda y la desgracia de no encontrar una. Yo también creía volverme loca por tener un ángel a mi lado, protegiéndome y cuidándome de los ataques en que volaban alrededor de mí; pero para él, que no tenía a nadie que le explicase que sucedía, debió ser un golpe demasiado duro.
Marcus no dice nada cuando se levanta, solo me brinda un pequeño beso en mi mano y la suelta con delicadez, dejándole el lugar a su melliza, quien está soltando una que otra lagrima escurridiza.
- Mis cambios se provocaron cuando Marcus entro al centro, derrumbando esa gruesa y fuerte barrera de control que tenía por delante de mis sentimientos. Empezaron los cambios con más brusquedad; podía aparecer en Tokio un día en solo pensar en ello, o hasta a veces en Australia con los canguros – formo en sus labios una sonrisa divertida, pero no logro llegar a sus ojos tristes – Era difícil controlarme y no pensar en lugares para no aparecer, temiendo aún más que mi mama me llevara a un centro al igual que mi hermano – hizo una breve pausa donde observo sus manos convirtiéndose en puños – Comencé a tomar drogas hasta casi volverme adicta; estas me distraían y no podía pensar en nada más que en estupideces, pero mi mente siempre bloqueaba la posibilidad de estar en algún lugar o siquiera atrevía a decir el nombre de alguna ciudad o país.
>>Mi mama se enteró de todo esto, ya no podía negarle nada cuando mis ojos estaban rojos e hinchados cada vez que me veían; mi cuerpo estaba completamente alterado igual que mi mente. Me era tan difícil dejarlo y controlar lo que me pasaba; estaba más aterrorizada porque vuelvan esas extrañas apariciones en cualquier lugar, sin saber cómo volver a casa y aparecer en un momento de desesperación. April me ayudo, volviéndome a explicar cómo controlar mis ataques de ansiedad y de nervios<<
Cierro los ojos mientras lagrimas caen sobre mis mejillas, empapándolas; solo que ahora poco me importa, al igual que el frio que siento tomando la mano de mi hermano. Solo quiero que terminen de contar todo, de pedirles que me dejen a solas y ponerme a llorar como idiota por las punzadas de dolor que siento en mi corazón, estrujado y contraído ante las emociones que recibo. Es como si mi alma se volviera tan apática, tan absorbente de emociones ajenas permitiéndome experimentar sentimientos tan fuertes, que no he alcanzado a consentir por mí misma.
Sé que este relato me dolerá aún más que los de mis primos.
- Cuando cumplí dieciocho fue una pesadilla. Semanas después, comencé a ver personas hablándome, preguntándome que podían hacer para solucionar un problema. No entendía con exactitud que querían decirme, pero algunos eran ansíanos, niños pequeños o muchachas de tu misma edad; me rogaban que fuera a tal casa y hablara con los familiares, haciéndoles prometer que estarían bien con su partida, algunos me pedían que busque a personas y entregue objetos, los niños me pedían ayuda para buscar a su mama. Me empecé a dar cuenta que en cuanto más tiempo pasaba hablando con esas personas, la gente a mi alrededor me miraba de una forma extraña. No fue después de darme cuenta que toda esos sujetos eran espíritus, gente simplemente muerta.
>>Comencé a asustar y encerrarme; no quería salir a la calle para encontrármelos, pero le llevaba la sorpresa de que se ponían a esperar en mi balcón, por lo que vivía a oscuras y temiendo a que entrasen. Ellos sabían que podía verlos, que hablaba con algunos y los ayudaba, pero no podía seguir así por mucho más tiempo. Me volvía loco el pensar que era un… un fenómeno – su voz se llenó de repugnancia y negó la cabeza con repetición – Era insoportable sentirme tan distinto a los demás, tanto que comencé a dibujar para descargarme, empecé a odiar el contacto físico porque sabía distinguir de las personas vivas o muertas mediante su tez. Tenía terror a llegar a tocarlas alguna de ustedes y sentir la frialdad en sus pieles, sabiendo que sus corazones dejarían de latir antes que el mío. Enloquecía, dibujaba y me perdía. April también intervino<<
Todo se quedó en absoluto silencio mientras Liv me daba una corta explicación que era inútil explicarme su historia cuando yo sabía de pies a cabeza las constantes pesadillas que tenía desde que había cumplido sus dieciocho. Asentí con brevedad, sintiendo el nudo aún más grande y las inmensas ganas de vomitar, pesar que no había ingerido nada en horas, días o semanas que estuve encerrada aquí.
Marcus leyó mis pensamientos y contesto en forma seca que había estado durmiendo dos semanas y media completa, debido a que los poderes me debilitarían, además de lo tensa y shokeada que estaba por los sucesos que estaban pasando. Me sorprendo un poco al escucharlo, pero no insisto más y me limito a asentir con la cabeza solamente.
Ahora que se todo, puedo descansar en paz. Hay tantas cosas que pensar en este momento, pero solo pienso en dormir bien y despertarme con más energías para ponerme analizar cada una de las historias que he escuchado hoy, recordando las actitudes que solían tener en el pasado y las consecuencias de aquellos dones que parecen ser más maldiciones.
April parece enterarse de mis pensamientos – Me imagino que por culpa de Marcus, y por la expresión de su rostro, deja muy en claro acerté – y se acerca hacia a mí con rapidez; toca el hombro de Ian y este se incorpora, dejándole el asiento libre.
Una vez sentada, junta sus manos con las mías y sonríe medianamente.
- Debes saber algo antes de que te pongas a dormir, perezosa – Otra vez, una expresión de tristeza se posa en sus ojos. Me siento nerviosa y no tengo un buen presentimiento – Es sobre Logan.
Me impacto al escuchar el nombre de sus labios, sorprendiéndome que ella también lo conociera, aunque mi pregunta redondea de cómo y dónde. Entiendo que Marcus lo haga porque divago por mi mente, pero April no puede estar enterada, ¿o sí? ¿Por qué sabe de él sino? ¿Y por qué los demás protectores se están alejando de mí, mirando hacia abajo con una expresión de culpa en sus ojos?
El corazón me está latiendo con tanta fuerza ante una posibilidad de que él no se encuentre con vida, de que hayan creído que era un demonio malvado y lo hayan asesinado, o bueno, al menos a su alma.
Fijo mi vista hacia a mi primo, exigiendo que me dé respuestas ante mis dudas que están carcomiéndome, pero él no asiente ni niega; simplemente, me ignora como si no pudiera leer mis pensamientos. Esto me hace molestarme y querer gritarle por imbécil; poco me importa la mueca de dolor que se transmite en su rostro.
- ¿Qué pasa con él? – inquiero con nervios.
April parece pensárselo por un momento, buscando las palabras exactas para hablar. Finalmente, toma una profunda respiración y la suelta casi al instante.
- Logan es quien traiciono a Adeline, entregándosela a los demonios y provocando su muerte. Ella era tu antepasado, Zoe. Él entrego a los pueblerinos a Liv porque era una bruja; ataco a Marcus hasta quedar paralizado de sus brazos; se internó en la mente de Ian para borrar todos sus recuerdos. Por sus pecados del pasado y mucho más que no puedo revelarte, su alma está encerrado en un cuerpo humano hecho por barro y huesos.
Murmuro lentamente una petición de soledad, que se marchen y me den mi espacio. Ian comienza a negarse, pero Lola lo interrumpe fallando en su contra. April los manda todos a fuera, y antes de que ella saliera, mira hacia a mi dirección, con los ojos llenos de tristeza y pena.
Mi corazón está retorciéndose con tortura expandiendo el dolor en cada parte de él. Por más pesado que siento mi cuerpo y el cansancio que hay en él, no puedo siquiera descansar; mis llantos interrumpen el sueño con los puñales constantes que estoy recibiendo. Jamás pensé sentir algo así, como si me estuvieran consumiendo el alma, devorando mis energías y todo aquel pensamiento positivo.
De repente, me veo a mi misma sonriéndole a un ángel de ojos azules y cabello castaño, con sus facciones tan familiares que me las sé de memoria, su sonrisa ancha y blanca; estamos sentados en un bosque, rodeados de pinos altos y verdes, los césped debajo nuestro mientas que nuestras manos están entrelazadas. Luego veo, como un pequeño video, la forma en que sus brazos redondean mi cuerpo, apretándolo con firmeza y transmitiéndome su vil calidez, instalándose en cada parte de mi ser.
Con finalidad, me veo a mi misma en la mitad del bosque, con demonios viniendo hacia a mí, y entre ellos, esta él; sus ojos rojos me asustan y me echo a llorar mientras lloro, nublando mi vista y provocando varias caídas.
En ese momento lo sabía, sabía que Logan me había traicionado; toda la confianza que había depositado, todo el amor que tenía por dentro y había destruido todos los buenos recuerdos que tenía sobre él.
Había roto mi corazón.
Pasan horas hasta que dejo de llorar y puedo encontrarme por fin en los brazos de Morfeo.
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Oh no Kande!
Que buenos capitulo! Simplemente me encantaron. Ya entendi todo. Igualmente me hiciste sacar muchas concluciones, te juro que nunca habia usado tanto las neuronas ja ja ja. Okno.
No tengo palabras. Es todo tan alkdhajsflkajgdjsgfa. Definitivamente si sacas un libro, yo sere la primera en comprarlo! Yes!
¿Logan la traiciono? Pero por lo que veo y pienso, esta como arrepentido, o mejor aun enamorado. Me callo mejor.
Yo quiero un hombre de barro y huesos asi, definitivamente, no me negaria en absoluto.
Pobre Zoe, me da lastima. El peso que tiene que cargar.
En fin, espero que la sigas pronto. Aqui estare para leerla!
Besos y exitos!
Que buenos capitulo! Simplemente me encantaron. Ya entendi todo. Igualmente me hiciste sacar muchas concluciones, te juro que nunca habia usado tanto las neuronas ja ja ja. Okno.
No tengo palabras. Es todo tan alkdhajsflkajgdjsgfa. Definitivamente si sacas un libro, yo sere la primera en comprarlo! Yes!
¿Logan la traiciono? Pero por lo que veo y pienso, esta como arrepentido, o mejor aun enamorado. Me callo mejor.
Yo quiero un hombre de barro y huesos asi, definitivamente, no me negaria en absoluto.
Pobre Zoe, me da lastima. El peso que tiene que cargar.
En fin, espero que la sigas pronto. Aqui estare para leerla!
Besos y exitos!
Invitado
Invitado
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Hay! Por Dioos!
Paso demaciado! Pobre Zoe!
Tenes que seguirla! Me dejas con demaciada intriga!
Paso demaciado! Pobre Zoe!
Tenes que seguirla! Me dejas con demaciada intriga!
In Love
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
O POR DIOSSSS!!!
Me estas matando, juro que me estas matando...No puedes dejarme así...bueno si puedes pero NO ES JUSTO! Jajaja
Ahora entiendo un poco más la novela, ya no tengo tantas dudas, pero ahora tengo más emoción que nunca de seguir leyendo...
Me encanta tu novela, síguela pronto, no puedo creer que Logan la traicione, te quiero, no puedo creer que Logan la traicione, sigue escribiendo tan genial como hasta ahora, no puedo creer que Logan la traicione, besos
PD: ¿¡QUÉ CARAJOS ESTABA PENSANDO LOGAN CUANDO LA TRAICIONO!? ASHHH no puedo creer que Logan la traicione....Ok eso ya lo dije pero igual, no puedo creer que Logan la traicione jajaja
Me estas matando, juro que me estas matando...No puedes dejarme así...bueno si puedes pero NO ES JUSTO! Jajaja
Ahora entiendo un poco más la novela, ya no tengo tantas dudas, pero ahora tengo más emoción que nunca de seguir leyendo...
Me encanta tu novela, síguela pronto, no puedo creer que Logan la traicione, te quiero, no puedo creer que Logan la traicione, sigue escribiendo tan genial como hasta ahora, no puedo creer que Logan la traicione, besos
PD: ¿¡QUÉ CARAJOS ESTABA PENSANDO LOGAN CUANDO LA TRAICIONO!? ASHHH no puedo creer que Logan la traicione....Ok eso ya lo dije pero igual, no puedo creer que Logan la traicione jajaja
Nutella!
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
TE ODIO!
No es justo. Es como, es horrible, casi hubiera preferido no saber nada. Sho se que mi Logan es bueno, algo bueno tiene que tener, yo quiero escuchar -bueno, leer- su version de la historia. Me quiero hechar a llorar, esto no es de Dios Kande, me has partido el corazon, siempre haces esto, no estoy para esta tension...
Igual, te seguire acosando.
(deberia tener un titulo en acosadora, acoso a muchas aqui.....)
A mi hay algo que no me cierra, pero me da paja poner una gran explicacion so, no mas esperare a que actualices de nuevo.
Y quiero saber si Zoe y Logan terminan juntos, se que no es una historia de amor pero me da tanta curiosidad y los shipeo tanto... Al igual que Marcus y Liv, ahi hay tension :D
La O.P.S.I.F.F Me sono tan ficticia, no se, lo siento pero casi muero de risa escuchando su nombre. Y creo que Ian esta muerto porque esta frio, pero como dijiste que nadie moria y nadie esta triste, no lo creere del todo.
Y eso. Chao espero que actualices pronto y me saques de la tension en la que me tienes con este fic, porque es horrible, como que quiero dejarlo porque tanta cosa me da rabia pero no puedo, es adictiva la cosa esta.
No es justo. Es como, es horrible, casi hubiera preferido no saber nada. Sho se que mi Logan es bueno, algo bueno tiene que tener, yo quiero escuchar -bueno, leer- su version de la historia. Me quiero hechar a llorar, esto no es de Dios Kande, me has partido el corazon, siempre haces esto, no estoy para esta tension...
Igual, te seguire acosando.
(deberia tener un titulo en acosadora, acoso a muchas aqui.....)
A mi hay algo que no me cierra, pero me da paja poner una gran explicacion so, no mas esperare a que actualices de nuevo.
Y quiero saber si Zoe y Logan terminan juntos, se que no es una historia de amor pero me da tanta curiosidad y los shipeo tanto... Al igual que Marcus y Liv, ahi hay tension :D
La O.P.S.I.F.F Me sono tan ficticia, no se, lo siento pero casi muero de risa escuchando su nombre. Y creo que Ian esta muerto porque esta frio, pero como dijiste que nadie moria y nadie esta triste, no lo creere del todo.
Y eso. Chao espero que actualices pronto y me saques de la tension en la que me tienes con este fic, porque es horrible, como que quiero dejarlo porque tanta cosa me da rabia pero no puedo, es adictiva la cosa esta.
Blowing Mind
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Priscilla.- escribió:Oh no Kande!
Que buenos capitulo! Simplemente me encantaron. Ya entendi todo. Igualmente me hiciste sacar muchas concluciones, te juro que nunca habia usado tanto las neuronas ja ja ja. Okno.
No tengo palabras. Es todo tan alkdhajsflkajgdjsgfa. Definitivamente si sacas un libro, yo sere la primera en comprarlo! Yes!
¿Logan la traiciono? Pero por lo que veo y pienso, esta como arrepentido, o mejor aun enamorado. Me callo mejor.
Yo quiero un hombre de barro y huesos asi, definitivamente, no me negaria en absoluto.
Pobre Zoe, me da lastima. El peso que tiene que cargar.
En fin, espero que la sigas pronto. Aqui estare para leerla!
Besos y exitos!
Aww que lindo que te gustara los capitulos c: JAJAJA en esta novela hay que estar atenta a todo(? Bueno, lo de sacar un libro sera en un futuro un tanto lejano xd pero esperemos que no c:
Si, Logguie la traiciono :c Pero ya se resolvera todo c:
Ya la sigo :D
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
In Love escribió:Hay! Por Dioos!
Paso demaciado! Pobre Zoe!
Tenes que seguirla! Me dejas con demaciada intriga!
Si u,u pobrecita Zoe :c todo lo que tuvo que pasar :S Ya sigo!
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Nutella! escribió:O POR DIOSSSS!!!
Me estas matando, juro que me estas matando...No puedes dejarme así...bueno si puedes pero NO ES JUSTO! Jajaja
Ahora entiendo un poco más la novela, ya no tengo tantas dudas, pero ahora tengo más emoción que nunca de seguir leyendo...
Me encanta tu novela, síguela pronto, no puedo creer que Logan la traicione, te quiero, no puedo creer que Logan la traicione, sigue escribiendo tan genial como hasta ahora, no puedo creer que Logan la traicione, besos
PD: ¿¡QUÉ CARAJOS ESTABA PENSANDO LOGAN CUANDO LA TRAICIONO!? ASHHH no puedo creer que Logan la traicione....Ok eso ya lo dije pero igual, no puedo creer que Logan la traicione jajaja
Lo siento por dejarte con la intriga xd Pero era necesario(? xd
Gracias por haber comentado c: pueeeees ya veras sobre la traicion de Logan *-*
Ya la sigo hermosa :3
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Blowing Mind escribió:TE ODIO!
No es justo. Es como, es horrible, casi hubiera preferido no saber nada. Sho se que mi Logan es bueno, algo bueno tiene que tener, yo quiero escuchar -bueno, leer- su version de la historia. Me quiero hechar a llorar, esto no es de Dios Kande, me has partido el corazon, siempre haces esto, no estoy para esta tension...
Igual, te seguire acosando.
(deberia tener un titulo en acosadora, acoso a muchas aqui.....)
A mi hay algo que no me cierra, pero me da paja poner una gran explicacion so, no mas esperare a que actualices de nuevo.
Y quiero saber si Zoe y Logan terminan juntos, se que no es una historia de amor pero me da tanta curiosidad y los shipeo tanto... Al igual que Marcus y Liv, ahi hay tension :D
La O.P.S.I.F.F Me sono tan ficticia, no se, lo siento pero casi muero de risa escuchando su nombre. Y creo que Ian esta muerto porque esta frio, pero como dijiste que nadie moria y nadie esta triste, no lo creere del todo.
Y eso. Chao espero que actualices pronto y me saques de la tension en la que me tienes con este fic, porque es horrible, como que quiero dejarlo porque tanta cosa me da rabia pero no puedo, es adictiva la cosa esta.
No podes odiarme, yo soy un amor aunque les deje con la intriga y sea una malota de primera(?
JAJAJA Todas shipean a Marcus y Liv, pero hay tantas cosas que no saben aun c: pero te prometo que, sea cual sea el final, espero que te guste(?
Ya la sigo c:
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Capitulo Nueve
Mis piernas no dejaban de correr ni un solo segundo cuando tenía entendido de que si paraba, la muerte estaría a mis espaldas para llevarse mi vida, arrancándomela con apenas quince años recién cumplidos. Mi mente procesaba las posibilidades de salir ilesa y con el corazón aun latiendo; más allá de que mi respiración fallaba dejándome jadeante, y sentía mis pulmones arder como mi garganta - agregando las pocas posibilidades de sobrevivir - solo esperaba que Logan apareciera para ayudarme, para rescatarme una vez más y echarme a sus brazos para llorar.
Sabía que no tendría que haber venido con Liv, era una suerte que había salido con su novio aquella noche y debía estar pasándola mejor, mucho mejor que yo. Ian estaba encerrado en su habitación como acostumbraba hace pocos meses; mis padres estaban en una cena y no creían que era tan estúpida como para ir a un cementerio de noche.
Mi curiosidad por saber a dónde se dirigía Logan me llevo a ese lugar tenebroso de noche, donde las lapidas estaban gastadas, algunas recientes y adornadas de buena manera; pero era inevitable a veces no sentir la piel erizarse al estar cerca de allí, por más silencio y tranquilidad que a los demás podía darles – como mis hermanos, mis primos o a mi tía – yo no podía evitar sentirme asustada y nerviosa. Esto solo sucedía de noche, aunque era algo ilógico que haya estado allí antes, experimentaba con afligidos la manera tan familiar que se me hacía.
No debí haber entrado, debí haberme dado vuelta y correr hacia mi casa, mas mi terquedad e indagar sobre la vida que tenía Logan más allá de la que tenía conmigo, protegiéndome y cuidándome a cada instante.
La curiosidad mato al gato, es el dicho. La curiosidad estaba detrás de mí y yo era el gato a quien quiera matar.
Me tropecé con una de las lapidas en un descuido que tuve de voltear hacia atrás para comprobar si la criatura aun me seguía. Me incorpore aun con el cuerpo dolorido, tratando de hacer omiso a las lágrimas que golpeaban por salir; pero no creía el momento adecuado para que me pusiera a lloriquear como estúpida cuando tenía que hacer lo imposible por salir con vida.
Una mano sujeto mi pie con fuerza, provocando que de mis labios saliera un chillido de dolor, sintiendo como mi hueso se rompía. Caí al frio césped con rapidez, golpeándome la cara y demás partes del cuerpo al no poder evitar el impacto con mis manos. Me gire sobre mi misma y observe el hombre de piel gris y ojos rojos, sonriendo con sus dientes en forma de colmillos afilados y blancos, bien relucientes mientras que sus alas negras están extendidas. Su risa malvada y satánica se escuchó con energía en el lugar donde los muertos estaban enterrados.
El terror, la ansiedad y la desesperanza golpearon tan fuerte en mí que quede inmóvil, sin siquiera poder mover un minúsculo musculo de todo mi cuerpo. El nudo en mi garganta no me permitió gritar siquiera, el miedo había echo acto de presencia y no me sentía capaz de liberarme de esa.
Cerré mis ojos firmemente, sabiendo que no saldría de la situación en la que estaba pasado. El demonio iba a asesinarme y solo podía repasar una y otra vez en fracciones de segundos los rostros de quienes amaba. Pero en vez de ser atacada, solo logre escuchar un grito ahogado y un gran golpe. Levanto mis parpados con rapidez y observo el cuerpo del demonio contra una tumba, completamente inconsciente.
- Levántate, Zoe – la voz dura de Logan incito a un escalofríos recorrerme toda la espina dorsal.
Por más que intente llevar a cabo su orden, mis piernas no reaccionaban de ninguna manera, parecía que estaban dormidas al igual que el resto de mi cuerpo; prácticamente, era una completa inútil en esos momentos, y por extraño que parecía, no llegaba a importarme un bledo.
El castaño soltó un gruñido y una maldición por debajo, esperaba que hubiera leído mis pensamientos y entendiera que no podía hacer nada por mí misma, el miedo me había golpeado aún más fuerte y el control sobre mi cuerpo no existía en esos momentos. Me levanto entre sus brazos colocando uno debajo de mis piernas y otro detrás de mi espalda. En forma de reflejo, me acomode en su pecho dejando caer algunas lágrimas, toda asustada aún por el suceso. Por más que lo sentía más frio de lo normal, el solo ser llevada por hacía mi casa y que fuera mi héroe una vez más, llegaba a reconformarte de una manera tan tranquilizadora.
No tenía miedo a la tranquilidad cuando él estaba conmigo, tenía en claro que Logan me protegería por sus razones, unas que desconocía a pesar de los años que había estado a mi lado; de todas formas, ya nada me importaba, solo quería llegar a casa y dormir.
Me dejo recostada en algún instante donde seguía perdida en aquel transe, pensando en sus ojos, su voz, su sonrisa y la extraña calidez/frialdad que podía brindarme. Por más que había estado negándome todo aquello, no debía ni podía seguir negándome que estuviera enamorada de él.
- Deja de pensar esas cosas – farfullo con exasperación en su tono de voz.
Conocía ese humor de perros a la perfección, por lo que no le di importancia a sus palabras y me acomode en mi cama, dejando que me tapara con las frazadas y frotara mi brazo en forma de contención mientras yo comenzaba a soltar algunas lágrimas.
¿Cuánto más debía soportar todas aquellas cosas? Estaba cansada, harta de que todo sucediera y, mierda, todo se me estaba yendo de las manos; yo no podía detener la situación, era como si quisiera detener la lluvia con mis propias manos: inservible y poco razonable. ¿Qué me aguardaba ahora? ¿Esperar hasta mi muerte y rogar a que no fuera tan dolorosa?
“El hombre débil teme a la muerte; el desgraciado lo llama; el valiente la provoca, y el hombre sensato la espera”, el dicho clásico de Franklin.
¿Debo esperar mi muerte sentada exponiendo también en peligro a todos los que están a mí alrededor? Liv había pasado algunas situaciones conmigo como también mi hermano y mis padres; tenía miedo de salir, o incluso de quedarme tanto tiempo en mi casa, temiendo que pudieran incendiarla o provocar que ladrones entraran a robar. Existían tantas probabilidades de que muera tanto afuera y dentro de mi hogar, demasiadas a decir verdad, incluso me atrevía a decir que era un peligro viviendo bajo el mismo techo con cuatro personas más; Sin embargo, no eran simples personas: eran mi familia.
Logan tomo una de mis manos con la suya, comenzando a acariciarla y proporcionarle caricias, las cuales tan pocas veces había recibido de su parte.
El corazón me latió tan fuerte como nunca antes, pero fue aún más cuando me incorpore sobre mi lecho y alcance sus labios con los míos. No sabía que estaba pensando, pero solo sabía que no quería morir sin obtener un solo beso de él.
Lo bese. Me beso. Nos besamos. Y fue tocar el cielo con las manos.
Interrumpo mis recuerdos con brusquedad, maldiciéndome a mí misma por sentirme tan mal; sin embargo, estoy siendo tan masoquista en recordar un pasado que lo recordaba con anhelo y cariño, pero ahora lo veo todo como si fuera una mentira, porque él no me había protegido por que quisiese, si no que había sido para que yo me fuera en el bando contrario en el que estoy. Todo ha sido una estrategia en la que tarde tanto tiempo en darme cuenta.
El dolor, la decepción y el desgarrador sentimiento de traición se están acostumbrando a permanecer, casi llega a darme igual si están o no; tardaran en irse, lo sé, costara dejar de mirar hacia atrás y avanzar hacia un futuro que podría significar la felicidad de muchas personas.
Han pasado dos días desde que supe la verdad, y desde ese entonces he mejorado en forma física, pero no tengo las fuerzas necesarias para levantarme y hacerle frente a todo. Sé que debo ser más fuerte, mama no me hubiera permitido tal berrinche como el de ahora, pero no estoy interesada en hacer otra cosa que pensar, maldecir y llorar.
Hablando de mis padres, April me ha dicho que han enviado a un grupo especial – los cuales son ángeles – para brindarles protección especial por si los demonios quieren vengarse de mí asesinándolos. De solo pensar la idea, me estremezco; ellos aún no saben que soy una mujer de las profecías, creerían que es un cuento de April para fastidiarlos. Ninguna de las dos hemos discutido sobre que diremos, solo sé que Liv los ha llamado varias veces para verificar su estado y que preguntan por mí, por lo que responde que estoy encerrada en el cuarto junto con mis pinturas o durmiendo. Mama ya empezara a sospechar y se tomara un vuelo hacia Wengen, no nos vera en la cabaña que habíamos alquilado –esta hecha polvo por el incendio – y se volverá ligeramente loca.
La puerta de la habitación se abre, ignoro a la persona y me tapo hasta la cabeza, dejando bien en claro que no quiero hablar con nadie. No estoy preparada para salir de la cama, y menos en el maldito estado de depresión en el que me encuentro. Las cobijas son arrancadas, exponiéndome a las luces y a la persona que está enfrente de mí; William me mira con sus ojos azules con total desaprobación, meneando con la cabeza y soltando un suspiro de cansancio.
- ¿Qué quieres? – inquiero con brusquedad, quitándole las mantas y sentándome en mi lecho.
- Que te levantes y te cambies. Conocerás las instalaciones de la organización y ya hemos perdido bastante tiempo en tu entrenamiento.
¿Entrenamiento? ¿Qué entrenamiento? ¿Acaso hay más cosas de las cuales no estoy enterada? De todas formas, ¿de qué me entrenarían? Si es atletismo, pues eso no va conmigo con lo torpe que puedo llegar a ser.
- No es eso – me fulmina con la mirada, mirándome con total desprecio – ¿Piensas que te lanzaremos con personas que han asesinado, violado, secuestrado y robado así nada más? Seria entregarte como carnada a lobos hambrientos.
- ¿Y quién me entrenara?
- Yo lo haré – contesta con obviedad. Mierda, ¿Por qué tiene que ser él? - ¿Hay algún problema con que lo sea?
- No te importara de todas formas…
- Exacto – finaliza y se marcha de la habitación, cerrando de un portazo la puerta.
Lo maldigo internamente, pero no me queda otra que levantarme con pereza y caminar hacia la ducha para refrescarme. Va a ser un día duro.
***
Termino de quitar las sabanas del colchón, dejándola en un canasto cerca. Supongo que este será mi cuarto en la estadía que este aquí. Aun se me hace raro el hecho de que haya una organización como esta, y por lo que se, Adeline existió hace más de trecientos años, ¿Cuándo se creó esto? ¿Fue por mi o por otras razones que aún no se? Tal vez, la finalidad de aquí es ayudar a las personas con ayuda d los ángeles, lo que parece explicar el por qué están aliados. ¿No era que los ángeles cuidaban de los humanos? ¿Entonces por qué me dijeron que si elegía el infierno debería ser asesinada por ángeles?
Tantas preguntas, tantas dudas; pero pocas personas para contestarlas.
Mis pensamientos son interrumpidos en el momento en que la puerta se abre con brusquedad, William me mira de manera dura y con desprecio, una manera que días atrás no me había mirado; sin embargo, esto le quita la paz y tranquilidad que podía transmitirme. Me alegra no sentirlo ahora, mi miedo a estar tranquila suele torturarme a veces, solo debo ocuparme de mantener a Josh y Kyle lejos de mí.
Lo veo revolear los ojos y murmurar algo para sí mismo, y no dudo de que este diciendo lo estúpida que soy. Me gustaría que dejara de oír mis pensamientos, es incómodo y no le veo la gracia que este consiente de todo lo que pasa por mi cabeza. Molesta, camino pasando la puerta mientras le choco mi hombro con el suyo, dándole más velocidad a mis piernas para perderlo de vista, fijando mi mirada en el suelo.
Sus pasos resuenan en el pasillo, siguiéndome casi a la misma distancia, pero sigue encontrándose detrás de mí. Me siento estúpida por no dejarlo caminar a él primero, y tendré que tragarme mi orgullo porque no sé dónde es la instalación, hacía qué dirección me lleva este u otro pasillo. Maldigo tener que ser tan impulsiva como mi madre a veces
- ¿Y ahora por qué te detienes? – pregunta en cuando mis pies dejan de avanzar.
- Creí que lo sabrías, estás leyendo mi mente – frunzo el ceño y me atrevo a mirarlo. La indiferencia marca sus facciones.
- Pediste que deje de hacerlo, prácticamente lo ordenaste. Mi instinto y el de los demás nos obliga a hacerte caso aunque sea en contra de nuestra voluntad – explica.
Aunque me sorprende un poco – pese a que ya me lo habían dicho – me alegra que no estén redondeando en mi mente y mis recuerdos, utilizando cada pensamiento como arma en mi contra; o es así como le veo yo. Soy una paranoica en extremo.
Ahora es el momento en que dejo mi orgullo.
- No se me ubicar, este lugar aún es desconocido para mí…
Suelta un suspiro, de inmediato me señala con la mano que lo siga, caminando por paredes metálicas relucientes, mostrando mi reflejo un tanto distorsionado. El techo de arriba es de igual forma, y lo único que cambia es la cerámica del lugar, negra y un destello redondo por las luces que cuelgan.
A medida de que nuestros pasos siguen el camino doblando por las esquinas unas tres veces; se escuchan las voces y tipos de sonidos de computadoras cada vez más cerca; teléfonos sonar y personas que responden; alarmas advirtiendo y escuadrones preparándose. De repente, me impacto al ver cientos de personas moviéndose de forma acelerada, con sus grandes máquinas de tecnología avanzada, pantallas enormes que muestran actividades por partes del mundo que desconozco.
William me toma del brazo y me obliga a subir unas plataformas, solo que se me es dificultoso subir las pocas escaleras debido a que mis ojos aún se concentran en la enorme habitación y las personas que se mueven de acá para allá a cada rato. Esto es más que impresionante, es típico como una película donde hay una agencia secreta, solo que lo que estoy viendo es completamente real.
- No hay moscas – dice William captando mi atención, hay una sonrisa burlona en su rostro – pero cierra la boca, no se te ve bien.
Lo miro con mala cara y me muerdo el labio para no soltar un par de insultos en su contra; el sigue sonriendo con burla, pero de un momento a otro su expresión cambia a una seria; mira hacia un punto fijo con intensidad, por lo que mi mirada se dirige hacia la dirección en que se concentra: un hombre de tez morena, de estatura alta, que juraría que son dos metros; pelo color castaño oscuro mezclado con canas y bien corto; tiene arrugas que le dan evidencia a los tantos años que tiene; sus ojos marrones al igual que el gran tapado que tiene puesto. Se me hace que Liv insistirá en darle un cambio de look por sus botas de cuero y su pantalón jean negro al igual que su camiseta.
El hombre no es un ángel o algo por el estilo, no desprende tranquilidad, paz o satisfacción como Kyle o William, pero si un respeto y fortaleza.
- Bienvenida, señorita Heiler – la voz gruesa proviene de él, extiende una sonrisa torcida en su rostro. Comienza a acercarse pasos hacia a mí, e instintivamente, me apego hacia William – Yo no le hare algún daño – levanta las manos, parando su paso y dando uno hacia atrás. – Estoy aquí para ayudarla. April.
Busco con la mirada a mi tía, por puro alivio la encuentro con Josh, quien caminando detrás de ella mientras se acercan. Aparto mi mirada e intento ignorar la existencia del hombre, temiendo a que la quietud que me transmite provoque otro evento desafortunado.
<< Aquí estas a salvo >> murmura en mi mente una voz tan familiar que no dudo reconocer que es de Marcus. Su voz me calma un tanto, pero no dejo de estar alerta.
- Estas tensa, no debes preocuparte por anda – dice William susurrando en mi oído, provoca un estremecimiento en mi cuerpo al igual que fuertes latidos, y de verdad, no entiendo el porqué.
Me separo con brusquedad del rubio, sintiéndome incomoda por los sentimientos intensos que tuve por unos segundos; un sabor amargo esta en mi garganta, acompañando a un nudo que esta por desenvolverse mediante mi respiración y mi mente se van tranquilizando cuando siento las manos de mi tía sobre mí, tomando mis brazos y acariciándolas con el pulgar.
- Qué bueno que estés bien, cielo – se abalanza sobre mí, abrazándome con fuerza – Todo saldrá bien, ¿De acuerdo?
No me queda otra que asentir, aunque no quiera hacerlo y contradecirla. El nudo se vuelve a formar en el mismo sitio y me es inevitable recordar nuevamente a Logan.
- ¿Dónde están los demás?
- Entrenando – contesta una voz serena, y sé de quién es perfectamente – Liv necesita controlar sus poderes, Lola está entrenando sus apariciones e Ian está siendo tratado por una psicóloga aquí; le será más fácil aceptar algunas cosas y hablar sobre lo que ve siempre.
Estoy a punto de preguntar por mi primo pero me interrumpo al verlo aparecer detrás de Josh, con una media sonrisa en el rostro. Cuestiono porque él es el único que no está entrenando o recibiendo atención alguna.
- El leer las mentes no se controla, es natural – se encoge de hombros – además, he estado cuatro largos años con pastillas y médicos; ya no quiero mas eso.
Asiento con rapidez, pensando lo difícil que ha sido para él todos estos años, pero al menos ahora estamos todos juntos. El lee mis pensamientos y concuerda conmigo, mostrándome una verdadera sonrisa extendiéndose en su cara.
- Él es el doctor Hallard – April toma mi atención y señala con la mano extendida hacia el hombre moreno, quien coloca sus manos en los bolsillos de su tapado de tela fina, y con una dura expresión su rostro – es uno de los directores y fundadores de esta sociedad.
- ¿Uno de ellos?
- Yo soy la otra, cariño – mi tía me guiña un ojo, con un gesto de orgullo – Como te hemos dicho antes, nos encargamos de casos sobre naturales como exorcismo, peleamos contra uno que otro demonio y ayudamos a los espíritus a descansar en paz, ¿A que no es genial? Y tu madre que me decía que era una buena para nada.
- Yo concuerdo con Marie – bromea el tal Hallard, acercándose nuevamente hacia a mí y extendiendo su mano, la cual miro con desconfianza. – Landon Hallard, director de la Organización de Protección y Seguridad Internacional contra los Fenómenos Ficticios.
- ¿No cree que el nombre es un poco largo? – comento, tratando de quitarle tensión al momento.
April ríe a carcajadas mientras que Hallard sonríe medianamente.
- Eres igual a tu tía, acotando detalles menores – menea la cabeza, volviendo a colocar su rostro serio – Ya elegiste tu camino, ¿te arrepientes?
¿Arrepentirme? Pero, ¿de qué? ¿De mi decisión? Por detrás de él, Marcus me asiente de forma rápida, por lo que contesto una negativa, un tanto insegura y extrañada por su cambio de humor. Eso parece satisfacerlo y vuelve a extender su sonrisa.
- Entonces, no cabe duda que su entrenamiento empezara mañana, ¿cree poder aguantar un mes y medio?
- Eh, eso creo – dudo un poco, no sé en qué consiste el entrenamiento pero decido no replicar nada. –
- Señor William – se dirige hacia el rubio, quien asiente con rapidez mostrando respeto hacia el hombre – Ella está a su cargo, crea conveniente cualquier tipo de trato o preparación.
No sé porque esto último me pone tan nerviosa. No me gusta para nada.
Jaeger.
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Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
O MI SANTISIMO DIOS!
Capitulo nuevo
Estuvo genial y sinceramente cuando ese rubio le hablo cerca del oido fue asi como: "te entiendo nena"
Bueno amor mio, ahora hablando con seriedad, el capitulo estuvo genial, espero sigas escribiendo asi y bueno tambien espero que la sigas porque no se si entiendas esa emocion que me da cuando colocas el capitulo, es como cuando Sombrerero baila luego de haber ganado en el Frabulloso dia ¿entiendes? siempre me pongo asi:
Jajaja bueno el capitulo esta muy genial, siguela!
Nutella! xx
Capitulo nuevo
Estuvo genial y sinceramente cuando ese rubio le hablo cerca del oido fue asi como: "te entiendo nena"
Bueno amor mio, ahora hablando con seriedad, el capitulo estuvo genial, espero sigas escribiendo asi y bueno tambien espero que la sigas porque no se si entiendas esa emocion que me da cuando colocas el capitulo, es como cuando Sombrerero baila luego de haber ganado en el Frabulloso dia ¿entiendes? siempre me pongo asi:
Jajaja bueno el capitulo esta muy genial, siguela!
Nutella! xx
Nutella!
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
Me Encanto! No! Me enamore de este capitulooo! Tenes que seguirlaa!
In Love
Re: Mensajeros Caídos {LoganLerman}
¡Nueva y fiel lectora, Kande! Bueno ya me conoces, dkjfgjd, y acá estoy
porque me enamoré de esta novela. Es original, y espectácular. Esta muy bien
escrita, excelente. Además es me imagino todo, todito:33 es súper :BB
Logan, bueno como Logan, duh. A Josh, iam.. aveces como el de Drake&Joshxd
cualquiera, lo sé. A April como mi prima, pero en grande, ah. A Liv.. ash,
aveces como una chica rubia que conozco, y aveces como una chica castaña
que conozco que se llama Javiera... kjaskja :BB Ian... un chico medio rarita, ah. Lola como Carola no se cuánto, una chilena súper sesi, y genial actuando(:
Marcus, como mi tío, nah, en realidad como .. nosé. Difícil... de explicar como.
jasdkdj bueno shaaaaaaaaaaaaaaú babe! espero que la sigas, encima
la tenes terminada ^^^subiiiii.<3 love u. :ñomñom: no es genial?
porque me enamoré de esta novela. Es original, y espectácular. Esta muy bien
escrita, excelente. Además es me imagino todo, todito:33 es súper :BB
Logan, bueno como Logan, duh. A Josh, iam.. aveces como el de Drake&Joshxd
cualquiera, lo sé. A April como mi prima, pero en grande, ah. A Liv.. ash,
aveces como una chica rubia que conozco, y aveces como una chica castaña
que conozco que se llama Javiera... kjaskja :BB Ian... un chico medio rarita, ah. Lola como Carola no se cuánto, una chilena súper sesi, y genial actuando(:
Marcus, como mi tío, nah, en realidad como .. nosé. Difícil... de explicar como.
jasdkdj bueno shaaaaaaaaaaaaaaú babe! espero que la sigas, encima
la tenes terminada ^^^subiiiii.<3 love u. :ñomñom: no es genial?
Julianne.
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