I knew you were trouble {Larry Stylinson y tu}

Cuando llegué a mi casa, te vi ahí en la puerta, sentado en la pequeña barda con tu rostro oculto por tus cabellos mojados de color castaño más oscuro de lo normal.
Estaba confundida. El clima era horrible, llovía a cántaros y tú estabas ahí, esperándome fuera, aun sabiendo dónde guardaba las llaves de repuesto para ti—las cuales no aceptaste de muy buena manera cuando te las ofrecí ya años atrás, antes de que mi carrera comenzara a tomar vuelo. Me acerqué a pasos rápidos a ti y me di cuenta entonces de que tus mejillas estaban mojadas y sonrojadas, y no era exactamente por la lluvia.
Estabas llorando.
Cuando iba a hablar para preguntarte lo que pasaba, tú te adelantaste.
—Ya está más que hecho, ¿no? —tu voz estaba ronca y rota, y mi corazón se encogió como no te imaginas—. Supongo que jamás debí de hacerlo, _____. Me debí de alejar en cuanto podía, pero no lo hice—seguiste hablando mientras yo abría la puerta con rapidez. Maldije con lo bajo cuando me acerqué a ti de nuevo y prácticamente te obligué a que te pusieras de pie. Tú seguías balbuceando—. Se convirtió en un verdadero problema, _____. Lo sabía, mas no me alejé.
Últimamente Louis había estado muy decaído y no comía demasiado. Cierto día en que fui a visitarlo lo encontré inconsciente en el suelo. Para cuando lo llevé a consultar, dijo que no se alimentaba bien; luego el doctor me sacó de su consultorio para hablar en privado con mi querido amigo. Cuando Louis salió no dijo nada, pero sentí que quería evitar el tema. Con el tiempo ya no seguí insistiéndole aunque aún mantenía esa espinilla en el corazón.
A pesar de eso yo no sabía de qué hablaba.
Sin importarme que estuviera mojado lo llevé al sillón y lo dejé caer. Seguía balbuceando cosas y, temerosa de que tuviera fiebre, fui corriendo al baño más cercano para tomar la toalla más grande y regresé rápidamente, envolviéndolo en ella. Se detuvo por unos momentos y me susurró un tembloroso «Gracias», para luego cerrar los ojos y tomarme de la mano.
—_____, me siento roto. Solo.
Yo negué efusivamente y me arrodillé frente a él, tomándolo del rostro. El abrió los ojos y vi en esos ocelos azules que algo le pasaba. Algo que lo tenía así.
—No estás solo, Tommo. Me tienes a mí—le dije sonriéndole con ternura—, lo sabes.
Él forzó una sonrisa apenas visible, y yo simplemente alcé una ceja. Lancé un suspiro algo desilusionado al no recibir respuesta alguna de su parte; generalmente, él sonreía abiertamente mostrándome sus dientes blancos y perfectos, me daba un «abrazo de oso» y me cargaba, dándome vuelta por los aires. Pero ahora no fue así, y sinceramente eso me extrañó. Me puse de pie debido al dolor que tuve en mis piernas y a continuación me senté a su lado. Él seguía mirando al suelo.
Cuando por unos breves segundos se me cruzó la idea de darme por vencida y simplemente abrazarlo, él habló.
—Harry me dijo que no siente nada por mí, _____. Dolió—se llevó su mano a su pecho y comenzó a darle leves golpes—. Duele. —corrigió.
Ya no lo pude soportar la duda que me carcomía por dentro, simplemente no. Me armé de valor y, hablando de manera algo rápida, formulé la pregunta que quizá debí de haberla hecho desde un principio.
—¿Quién es Harry, Louis? —cuando usaba su nombre de pila, él sabía que quería la verdad. Le obligaba a que me dijera la verdad.
Sus ojos azules volvieron a tomar ese brillo particular, dándome a entender que lloraría de nuevo. Negué con la cabeza de manera efusiva y de nuevo le obligué a que me mirara a la cara, directamente a mis ojos. Fruncí los labios en una mueca triste y Louis simplemente soltó todo. Supongo que fue demasiado peso para él el no decirme nada y callarlo todo este tiempo.
—Lo conocí hace seis meses—me quedé boquiabierta al entender que quizá nunca me hubiese dicho nada si no le obligaba prácticamente—en uno de esos bares gay a los que voy, ya sabes… para divertirme—tragó en seco y supe que sería demasiado duro para él. Le di un apretón en sus manos y comencé a acariciarle los cabellos—. Llegué como siempre, feliz, con dos copas de whisky que tomé en la casa de Liam antes de ir ahí. Caminé con mi paso decidido, como siempre, mirando todo el lugar para ver quién sería el chico con el que pasaría la noche… entonces lo vi ahí, en la barra, mirándome.
»No sabes el deseo que sentí con solo verlo, _____. Simplemente no me pude controlar. Claramente despisté un poco el interés sexual que me despertaron sus cabellos rizados, sus apasionados ojos esmeraldas y su cuerpo delgado pero bien trabajado—suspiró pesadamente mientras me sonreía—. Mientras bebía con varios chicos y una que otra lesbiana no pude evitar buscarlo con la mirada un millón de veces. Seguía ahí en la barra, mirando aleatoriamente a distintos puntos del bar, como buscando algo o, en todo caso, a alguien. Bajé la mirada porque he de admitir que me avergoncé un poco… es extraño, ¿no? Me acerqué a Liam y, susurrándole al oído, le dije:
—Hey, Leeyum—él me miró algo dudoso, separándose un poco de un chico que me dijo que se llamaba Niall—, ¿él es nuevo? —le pregunté, apuntando de manera despistada al chico de la barra.
Vi que Liam le miraba de arriba abajo y he de admitir también que una punzada de celos llenó todo mi ser. Lanzó una de esas risillas que lo caracterizan y me tocó el hombro, dándome leves golpes para tranquilizarme.
—Oh, campeón, no lo he visto por aquí—admitió mientras aceptaba otra copa que el rubio Niall le ofreció—, pero supongo que sí. Está guapo, eh. Y mira, te está mirando justo a ti.
Me sonrojé de nuevo. Sabes también que es extraño sonrojarme, _____, pero supongo que simplemente no lo pude evitar. Y sucedió. Supongo que ahora me maldigo internamente el voltear a observarlo y mantenerle la mirada con deseo y algo de pena, porque me sonrió coquetamente y comenzó a caminar hacia mí. Tengo que admitir que el mundo desapareció de mi cabeza cuando estuvo frente a mí y pude oler por primera vez su colonia masculina, tan penetrante y seductora, que llenó cada uno de mis sentidos.
No supe qué hacer luego. Sólo supe que quería que me hiciera suyo, no hacerlo yo mío como era lo normal en mi persona. Y simplemente sucedió.
—Por un momento pensé que sería sólo una noche, pero no… Supe su nombre solamente porque le obligué a que me lo dijera; de no ser así, estoy más que seguro de que jamás me lo diría. Desde que me quitó la camisa dijo que sólo mantenía sexo con una persona una vez, no repetía jamás. Pero yo no quería eso, _____. Yo quería más. Y eso no le gustó, pero supongo que al final cayó… y yo con él, porque me enamoré como un idiota. Pero él no. Y dudo que alguna vez lo haga; me lo dejó muy claro hoy—vi cómo suspiraba de manera exhausta—. Lo encontré en su apartamento con otro hombre... me miraba a los ojos mientras lo penetraba, _____, y no le importó. Luego, después de llegar más de un millón de veces al orgasmo, se acercó a mí y simplemente me lo dijo... me corrió.
Le miré con tristeza al saber que en verdad estaba sufriendo, a la vez que una furia tremenda se apoderaba de mí. ¿Quién era ese tal Harry, el estúpido, y por qué le hacía daño a mi amado mejor amigo?, no lograba comprenderlo. Mi corazón dio un vuelco lleno de melancolía al ver otra lágrima caer por su mejilla. Le besé en los labios con ternura y le miré a los ojos, los cuales brillaban debido a la capa de lágrimas que se amontonaban en ellos. Le susurré palabras tiernas, tratando de que se sintiera bien, pero no funcionó, al menos no demasiado.
Lo consolé hasta que se quedó dormido, no sé cuánto fue. Lo recosté con cuidado en el sillón y me puse de pie con dolor, ya que estar en la misma posición por un buen tiempo dolía. Cerré los ojos y traté de comprender a mi mejor amigo mientras lo miraba con ternura incontenida y sin saber aún muy bien qué hacer. No había vivido jamás una historia como la suya. Desde que lo conocí, supe que era gay ya que él mismo me lo dijo con temor—supongo que pensando que lo rechazaría. Pero por suerte no fue así.
Miré con atención el mueble que estaba a mis espaldas, viendo a lo lejos la edición especial de mi más reciente disco—más específicamente, el segundo. Tenía buen éxito y mi nombre ya se estaba haciendo más reconocido por el mundo, y eso me hacía feliz. Pero todo se terminaba cuando Louis se ponía mal, y ni siquiera los chicos que dicen amarme me ponen feliz. Cuando iba a caminar para tomar mi CD y poner algo de música, el celular de Louis comenzó a sonar y llegó a mis oídos. Lo reconocería en cualquier parte, ya que sólo él tiene mis canciones en vivo como tono de llamada. Me acerqué sin dudarlo a él porque tenía miedo de que el sonido fuerte le despertara.
Lo saqué de su chaqueta, la cual le había quitado cuando comenzó a cabecear, y en la pantalla venía un nombre que recién acabo de saber a quién le pertenecía. Mis ojos se abrieron de par en par debido a la sorpresa y en mi mente comenzaron a rodar palabras que podría decirle por la furia que me despertó en esos momentos.
Harry Styles.




Y aquí finaliza el primer capítulo, y con esto da comienzo la historia.
Uhm... espero y no sea confuso con los recuerdos de Louis. He de admitir que en su tiempo, fui de las chicas que utilizaban el 'Flashback'/'Fin de Flashback', para luego pasar a hacer todo lo del pasado en itálica, así que se podría decir que ésta es la primera vez en que lo hago... pues así. Así que en verdad espero y no se confundan con que si está relatando Rayita o Boo Bear. Si es así, dejaré de escribir para siempre (?). Mierda, es por eso que no me gusta recordar el pasado, al menos no con exactitud.
Ya sabemos más o menos cómo es que ambos se conocieron. Claramente Louis trató de hacerle la historia lo más breve posible a su mejor amiga y, para darles spoilers (?), les diré que le ocultó un montón de cosas, demasiadas. Así que no crean que esto se acabó aquí, MUAHAHAHAHAHA.
Mi imaginación está tan bien trabajadora que, en lugar de darme imaginación e inspiración para las demás novelas que tengo que actualizar—que en realidad son dos, se me ha dado el hacer dos One-shot's, ambos Larry, por supuesto (Mi hermana me obliga a hacer el de Zayn, pero estoy metida en ellos dos. LOL): [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] y [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]; así que, como es de costumbre, las invito a que pasen a leer... si quieren, no les obligo a nada.
Uhm... ¿qué más iba a decir? ¡Ah, sí, la carrera de Rayis! Pues aún no he decidido profundizar muuuuuy bien en ella, pero al menos ya saben que ya lleva dos discos y que ya está tomando nombre en el mundo de la música. Ya más adelante hablaré más de ella.
Tomatazos, sugerencias, quejas y/o reclamaciones, favor de mandar... no, mejor escríbanlo aquí.
Ojalá y les guste.
Saludos xx :bye:

PD. Cada que veo a mi amado Britin en mi firma, me desmayo. Ah.