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O W N
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Hola Soy Anny, y como dice el titulo del mensaje necesito a una beta que me diga como voy con una novela que estoy haciendo y con una que planeo hacer.
Resulta que nunca me he tenido fe en cuanto a escritura se trata por eso necesito que alguien me diga como voy con mis novelas y que me de consejos de escritura por eso es que he decidido hacer un tema para buscar una beta.
La primera novela que quiero que me corrijan es una nueva que estoy haciendo se llamara PSICOSIS, aui esta el prólogo
Prólogo Era una noche fría en la ciudad de Los Ángeles, California, el termómetro indicaba que la temperatura era de – 3 grados, las calles estaban casi desiertas, no había mucho tráfico puesto que ya eran alrededor de las 3 de la madrugada, generalmente las personas a esta hora estaban dormidas plácidamente en sus camas, con las cortinas cerradas y las luces de sus casas apagadas, pero, este no era el caso de una casa que estaba en un barrio pobre, de mala muerte. Esta casa se podría decir que era una de las más feas de todo el mundo, apenas si se mantenía en pie, en vez puertas, tenía latas que simulaban ser las puertas. Su dueño, casi nadie lo conoce, solo se sabe que es un chico muy joven, que no tenía padres ya que ellos habían muerto por causas misteriosas. En este preciso momento él se encontraba en el salón frente a una laptop, el interior de la casa era peor que el exterior, estaba hecho un basurero, papeles por todos lados, revistas, diarios, embases de alcohol y pizza vacios, al parecer él no era muy aseado que digamos. Tecleaba las letras de la laptop con mucho afán, era como si estuviera furioso con ella, la realidad era que estaba furioso por otra cosa, esa cosa era su maldita vida, especialmente a unas cuantas personas que le hicieron daño, esas malditas personas, lo único que quería era hacerles daño, tanto física como psicológicamente. En una pared que estaba frente a él habían muchas fotos, todas aquellas fotos eran sus víctimas, no fueron escogidas al azar, de hecho esas personas le hicieron mucho daño en su pasado, por culpa de ellos ahora estaba de esa manera. Los médicos decían que él estaba loco, que necesitaba ser internado en un hospital psicológico, eso fue lo que hicieron con él, esas personas sin saberlo declararon en contra de él para que fuera enviado a un hospital mental, con lo que nunca contaron era con que él escapara del lugar, para poder vengarse de todos ellos. Miró las fotos y se paró, fue hacia donde estaban ellas, del bolsillo trasero de uno de sus pantalones sacó un cigarrillo y una caja de cerillos, se colocó el cigarrillo en los labios, sacó un cerillo y se lo llevó a los labios prendiendo el cigarrillo, le dio una calada para después dejarlo entre sus dedos, nuevamente fue hacia su laptop, pero esta vez se dedico a ver unas imágenes, él había instalado cámaras en todos los lugares donde sus víctimas estaban frecuentemente, incluso hasta en sus propias casas, tenía que saber cada uno de los secretos de todos ellos, hasta incluso los más íntimos. Salió de la zona de videos para ir nuevamente a lo que estaba haciendo antes, pero antes de eso, le dio otra calada a su cigarrillo, tecleo algunas teclas en la laptop y después sonrió triunfante, su plan ya estaba en marcha, miró la pantalla con fascinación y apretó la última tecla que faltaba, en la pantalla salió un enunciado que decía: “Sitio Web Psicosis En Línea” , eso era solamente el primer paso del plan. Se levantó del sillón, terminó de fumar el cigarrillo, tomó una botella de vodka y de ella dio una gran bocarada del alcohol, la dejó en una mesa, tomó su chaqueta y un poco de dinero, iba a un bar a celebrar su gran plan y tal vez encontraría una puta con la cual follar.
La otra novela se llama "SOY UNA ESPÍA Y ME HE ENAMORADO DE UN CRIMINAL" aquí estan los tres capítulos que he escrito.
Prólogo
Hace 2 años atrás… Era una noche un poco diferente a las demás, no se sabe que es lo que ocurría con ella, se sentía que era diferente porque oscureció muy temprano, y además era una noche muy oscura, oscura al igual que la boca de un lobo. Por una calle solitaria, un poco siniestra y decadente caminaba un solitario hombre, iba con un cigarrillo en la mano y de vez en cuando le daba una calada, pero no estaba muy concentrado en eso. En aquella calle a penas si se veía, la única luz que había en ella era la de un solo faro que apenas encendía, la cosa es que este hombre caminaba de manera rápida e impaciente, se notaba muy nervioso, si alguien lo hubiera visto más de cerca se habría fijado que su camisa estaba empapada de sudor, lo que quiere decir que este hombre realmente estaba más que nervioso, estaba impaciente. De repente al otro lado de la calle apareció otro hombre, iba vestido enteramente de negro, caminaba a paso lento, descuidado. El hombre que estaba bajo el faro lo vio, inmediatamente se colocó más nervioso, en especial cuando el hombre de negro paró justo al frente de él. - Qué noche más helada – Dijo el hombre de negro. - Las noches en Canadá son más heladas que las de Londres – Dijo el otro hombre, terminó de darle la última calada a su cigarrillo. - Tienes que saber que para tomar una cerveza necesitas permiso del proveedor, Steph – Dijo el hombre de negro. - Vamos entonces por unos tragos– Dijo Steph mirando al hombre de negro. Los dos comenzaron a caminar por la calle desolada, Steph sacó de su bolsillo otro cigarrillo, estaba muy nervioso, pero no tenía que hacer notar ese nerviosismo porque su vida dependía de ello, con una mano temblorosa sacó una caja de cerillos, al sacar uno probó con encenderlo, pero falló, el cerillo se quebró en su mano temblorosa, probó con otro cerillo, pero sucedió lo mismo, el cerillo de quebró en su mano. De repente el hombre de negro metió su mano en el bolsillo del interior de su cazadora, Steph creía que lo habían descubierto, pero el hombre de negro al sacar la mano de su bolsillo, Steph vio que había sacado un encendedor, se acerco hacia él, y el hombre de negro le prendió el cigarrillo y Steph le dio una calada al cigarrillo con una mano temblorosa. - Hace mucho frío – Dijo Steph para disimular su nerviosismo. - Sí, se te nota, estas tiritando – Le dijo el hombre de negro seriamente, Steph no sabía que el tipo negro sospechaba de él. Ambos subieron a un auto, este pertenecía al hombre de negro, Steph estaba demasiado nervioso, si continuaba así lo iban a descubrir, él había estado por meses infiltrado, ahora todo se iba a echar a perder si él continuaba de esa manera. El hombre de negro arrancó el auto. - Y Dime Marcus (Así se llamaba el hombre de negro) ¿Qué es lo que quiere el jefe que haga esta vez? ¿A quién hay que matar? ¿A un diplomático? ¿Atacar alguna embajada? – Dijo Steph. - Steph no seas impaciente, el jefe en persona te dirá cual es la tarea que te encomendará esta vez - Dijo Marcus un poco fastidiado, no le gustaba que le hicieran preguntas sobre las misiones y mucho menos si esas preguntas eran dichas en lugares que no eran seguros. Marcus condujo hasta un muelle, la reunión con el jefe iba a ser en un almacén en el cual está almacenada toda la droga, Steph creía que la misión que le iba a encomendar el jefe era introducir droga a un país, pero eso no era lo que el jefe quería. Marcus se detuvo justo al frente del almacén, ambos se bajaron del auto, Marcus miraba a Steph muy atentamente, desde hace mucho tiempo que sospechaban de él, sospechaban que Steph era un infiltrado del MI6, de los malditos y jodidos del MI6, esa era la razón por la que el jefe en persona de Scorpia decidió hablar con él o al menos eso era lo que creían todos. En la puerta del almacén habían dos guardias vestidos completamente de negro, al verlos Marcus tomó la manga de su brazo derecho y la descubrió, en ella habían un tatuaje de una serpiente en el dorso de su brazo derecho, al verla los guardias abrieron las puertas para dejarlos pasar. En el interior del almacén se podía respirar el olor a cigarrillo combinado también con el olor del puro, había una mesa redonda muy grande, en la cual habían muchos hombres sentados, cuando Marcus y Steph se acercaron se dieron cuenta de que aquellos hombres estaban jugando Poker. Al sentirlos un hombre de cabello rizado y de ojos color verde los miró, este hombre era Vitorinno Styles, el líder de la organización llamada Scorpia. - Marcus, Steph, tomen asiento - Dijo con una voz ronca – Robert, dales una copa y repárteles cartas. Le dijo mirando al chico que estaba repartiendo las cartas el cual se llamaba Robert, él les repartió a Marcus y a Steph las cartas y les sirvió una copa de Vodka. - Y Dime Steph ¿Cómo te has sentido en este trabajo? – Le preguntó Vitorinno a Steph. - Muy bien señor – Dijo Steph a secas – Vayamos al grano señor ¿Cuál es la tarea que me encomendará esta vez? Todos en la mesa se le quedaron mirando, nunca nadie le había hablado de esa manera al jefe, de esa manera muy frontal. - Me gustan los chicos así – Dijo Vitorinno mirando a todos los presentes – Van directo a lo que tienen que hacer, sin rodeos- Dijo para después reír a carcajadas. Todos los demás en la mesa comenzaron a reír al igual que su jefe, pero con una mirada de reproche de él todos se callaron inmediatamente. - Steph tu misión es muy sencilla – Dijo Vitorinno mirando de manera intimidatoria a Steph – Necesito que mates al Director del MI6. Steph lo miró tratando de que en su mirada no se reflejara el pánico que sentía. Todos en la mesa lo miraron de manera intimidante, ya todos estaban al tanto de que Steph eran un espía del MI6. - Eso es un gran desafío señor, no creo que pueda hacerlo – Dijo Steph ocultando el pánico. - ¿Por qué crees que no lo podrás hacer Steph?- Dijo Vitorinno tratando de ser paciente, pero por dentro lo único que quería era matar a ese canalla que de atrevió a desafiarlo. Steph no sabía que decir, por más entrenamientos que él tuviera, Vitorinno Styles era un hombre muy intimidante. Todos en la mesa esperaban la respuesta, pero ya sabían que Steph no tenía. Tras varios tiempos de silencio, Vitorinno le hizo una señal a dos de sus matones más sanguinarios, inmediatamente ellos tomaron a Steph por ambos brazos y lo tiraron contra la mesa en la que estaban jugando Poker. - Steph, Steph, ¿Ahora le lengua te la comió el ratón? – Le dijo Vitorinno el cual llevaba un arma en la mano – Odio a los espías en especial a los que sean del patético MI6. - ¿De qué está hablando señor?- Dijo Steph tratando de zafarse de los matones. - No Finjas Steph Starck o mejor dicho Steph Momsen - Dijo Vitorinno muy enojado – Sabemos que eres espía del MI6. - ¡ESO ES MENTIRA! – Gritó Steph viendo la hora de su muerte. - No mientas Steph Momsen, es la hora de tu muerte, maldito bastardo - Dijo Vitorinno. Lentamente Vitorinno apuntó su arma justo en el corazón de Steph. - Reza tus últimas palabras maldito – Le dijo Vitorinno a Steph. - Pagarán, otros como yo vendrán y le harán pagar cada una de las cosas malas que ustedes y sus secuaces han hecho – Dijo Steph mirándolo repulsivamente. - Maldito Bastardo – Dijo Vitorinno apuntándolo con el arma. La última cosa que vio Steph fue como la bala iba directamente a su cabeza.
Capitulo 1
Capitulo 1
Dos Años Después. Estaba nevando en la cuidad de Londres, era un día muy frío, algo muy común ya que se estaba acercando en invierno y vaya que iba a ser crudo este invierno. Los copos de nieve caían con mucha delicadeza en las ventanas de las casas y en las terrazas de los edificios en los cuales habían muchos apartamentos. En uno de aquellos apartamentos, específicamente en número 245 en el piso 10 una chica se despertó muy asustada, había tenido una pesadilla muy feroz. Esta chica se llamaba Arianna Momsen. Arianna había despertado muy asustada, había tenido una pesadilla, imaginándose la muerte de su hermano Steph. Estaba recostada en su cama, sentía como el sudor de su frente comenzaba a enfriarse, miró hacia su costado izquierdo y vio el rostro angelical de su novio Justin Bieber que dormía plácidamente. A ella le encantaba que Justin se quedara, desde hace un par de meses que Justin no ha bajado hacia su departamento, él vivía en el piso 9. Ella le acarició lentamente el rostro desde hace 1 año y 3 meses que ellos son novios, él siempre ha sido un apoyo, en especial después de que su hermano Steph murió en aquella misión que nunca debió de haber hecho. Al sentir su toque Justin se movió un poco, pero ella no quería que se despertara cosa que por milagro no sucedió, cada vez que tenía una pesadilla, él se despertaba para poder consolarla, para poder borrar con sus dedos las lágrimas que a veces se le salían de la camisura de sus ojos, todavía para ella la muerte de Steph era un crudo recuerdo que día a día tenía que superar a pesar de que ya han pasado 2 años. Lentamente trató de quitar las manos de Justin, las cuales estaban literalmente pegadas a su estomago, lo consiguió, pero él se movió, creyó que lo había despertado porque sintió que la nombraba, pero no era más que un sueño ya que siguió con sus ojos cerrados. Arianna se levantó de la cama, al lado de ella pudo ver que su perro Akita llamado Hachiko también estaba despierto, se arrodillo a su lado, sabía que al igual que ella Hachiko extrañaba a su antiguo dueño. - Oye, sé que también lo extrañas – Le susurró al oído a Hachiko, él en respuesta le lamió un lado de la cara. Ambos se levantaron, ellos dos se entendían tan perfectamente bien que ninguno de los dos dio algún sonido. Caminaron hasta el salón, pero no se detuvieron allí, si no que siguieron hasta una habitación que estaba justo al lado de aquel, esa era la habitación de Steph, el hermano de Arianna. Al abrir la habitación, todavía se sentía el olor y la calidez de Steph, Arianna y Hachiko entraron a ella, inmediatamente a ella se le llenaron los ojos de lagrimas, por más que hayan pasado 2 años a ella todavía le afectaba la muerte de su hermano. Hachiko fue directamente hasta la cama de Steph, pero ella no pudo moverse, no pudo caminar ni un solo paso más, no tenía el valor de hacerlos, sintió como sus mejillas estaban llenas de lagrimas, las cuales no tenía idea de cuando hayan salido. De repente sintió como unas manos rodeaban su cintura, sabía perfectamente quien era aquella persona, sabía de quien era el calor que la envolvía, era Justin. - Te extraño, ven a la cama – Le susurró Justin al oído. Pero ella no le contestó, de hecho bajó el rostro, sabía que a Justin se le partía en corazón cada vez que la veía llorar. - ¿Arianna que sucede? – Le preguntó Justin muy preocupado. Pero ella no le respondió, pero se dio la vuelta y se abalanzó a los varoniles y sexis brazos de su novio, enterró su pequeña y delicada cabeza en el pecho de aquel chico que da la vida por ella, y comenzó a llorar. - Mi amor, sabes que odio escucharte o verte llorar, se me rompe el corazón cada vez que lo haces – Le dijo Justin acariciando lentamente el rubio cabello de su chica – Dime que es lo que te atormenta. Ella lloró desconsoladamente por unos minutos más, Justin odiaba que ella llorara, pero sabía que tenía que desahogarse de alguna manera. Lloró por algunos minutos hasta que por fin pudo sacar todo lo que tenía por dentro y miró a su amado. - Perdón – Apenas le susurró con la voz un tanto quebrada. - ¡Shh! – Le susurró Justin al oído – No tienes para que pedir perdón, sé que todavía lo extrañas, era tu hermano , si yo perdiera a uno de mis hermanos, sé que tú me apoyarías. Arianna lo miró a los ojos, le gustaba que Justin fuera así de sincero, se acercó lentamente a él y le dio un beso en el pecho, los cuales estaban expuestos ya que a Justin le gustaba dormir solo en bóxer, sintió como él se estremecía cuando se lo dio. - Así que ahora señorita, usted se me va a la cama mientras yo te buscare una rica y tibia leche para que puedas dormir bien, ¿Qué te parece? – Le dijo con una sonrisa encantadora, ella no podía rechazar aquella mirada. - Está bien – Lo miró tiernamente - Siempre sabes lo que necesito, y eso me encanta. Él en respuesta la tomó en brazos, la llevó hacía la habitación, la recostó en la cama y la arropó con las mantas. - Te amo – Dijo Justin besando la coronilla de su cabeza – Para siempre. Dicho esto Justin se levantó para poder ir a buscar el vaso de leche tibia que le había prometido a su amada, pero sintió como la pequeña mano de ella envolvía la suya. - Yo también Te Amo Justin, desde que te caíste encima de mí en aquel entrenamiento – Dijo ella riendo. Hace 2 años en un entrenamiento en el MI6, Justin no sabía cómo acercarse a ella, siempre la estaba vigilando, desde que la vio no pudo no evitar enamorarse de ella, fue como amor a primera vista, planeaba cualquier maniobra para poder hablar con ella, pero nunca pudo hasta que un día sin planearlo él durante un entrenamiento de Karate se cayó encima de ella. - Todavía no entiendo eso – Dijo el irradiando de felicidad – Siempre estaba planeando la manera de hablar contigo, aunque sea un simple “Hola”, pero nunca me resultaba nada, no entiendo como una simple caída me hizo llegar hasta ti. Ella comenzó a reír, recordaba ese día, Justin casi la mata. - Recuerdo que casi me mataste con esa caída, lo peor fue que después Javiera casi te mata – Dijo Arianna descostillándose de la risa, su amiga Javiera siempre la defendía. Él se rió junto con ella, como amaba escucharla reír, le tocó la mejilla y ella inmediatamente dejó de reír, ambos se miraron intensamente, podrían sentir una conexión entre ellos tan fuerte que no había necesidad de decir lo que sentían. Lentamente ambos se acercaron, hasta que quedaron a escasos centímetros, Justin le acarició el cabello mientras Arianna enterraba sus manos en al cabello de él. Y lo que pasó a continuación fue que ellos se besaron, al principio era un beso tímido, Justin todavía se ponían un tanto nervioso cada vez que tocaba los labios de su chica. Después el beso de tornó un poco más pasional cuando dieron paso a sus lenguas, ambas lenguas jugaban a cuál de las dos tenía el control, sus respiraciones comenzaron a agitarse, sus caricias se convirtieron en algo más que solo amor, ambos se deseaban, pero Justin sabía que Arianna no estaba bien después de aquella pesadilla, no la forzaría a nada, por lo tanto cortó el beso de manera delicada. Ambos juntaron sus frentes cuando terminaron aquel beso, estaban muy agitados. - ¿Por qué paraste? – Suspiro Arianna. - No estás bien, por más que me demuestres que estas bien, sé que no lo estas, no quiero forzarte a nada, sabes que eres mi mundo y mi deber es protegerte, incluso de mí – Le recitó Justin como si fuera una promesa. - Entonces Romero, ve a buscar mi leche tibia para poder dormir bien en tus cálidos brazos – Le contestó ella dándole un leve beso en los labios. Él se dirigió a la puerta de la habitación, pero se dio vuelta para ver a su chica la cual se estaba acomodando debajo de las sábanas justo en medio de la cama. Fue hasta la cocina, abrió la alacena para sacar una taza y a continuación el refrigerador, vertió un poco de leche en aquella taza para después colocarla la interior del microondas, para que este se calentara. Después de que la leche se calentó, con la taza en la mano fue directamente hasta la habitación, no se había despegado de ella desde hace como 4 Meses, todavía no era oficial, pero todo el mundo sabía que ellos vivían juntos en el departamento de ella. Entró sigilosamente como buen espía que es, ella estaba dándole la espalda, pero … - Justin por más que te esfuerces sabes que te puedo sentir, conmigo no te resultan los jueguitos de espías - Le dijo ella riendo para después darse la vuelta. Él dejó la taza humeante encima del velador y quitó las mantas de su lado de la cama, se recostó al lado de su chica y se le hinchó el corazón cuando ella fue directamente hacia sus brazos , dejando su cabeza en su pecho. Estuvieron así por mucho tiempo, Justin vio la hora en un reloj que a la vez servía de alarma y vio que eran las 2:30 de la mañana. - ¿Qué es lo que soñaste?- De repente balbuceó Justin el cual le estaba acariciando el cabello a su chica. - No quiero hablar de eso – Dijo Arianna apretándose más a los bíceps de su novio. - Dime, no sacas nada con ocultarlo – Él le insistió loco por saber que era lo que le atormentaba. - Justin por favor, hoy no me atormentes, solo quiero que me cuides – Y cuando ella dijo eso Justin la abrazó más fuerte. Él estiró su otro brazo hasta llegar a la leche que estaba en el velador, la que por suerte todavía no se había enfriado. - Tómala toda – Le dijo pasándosela – Quiero que duermas bien, no me gusta que no duermas bien. - Just – Le dijo ella con cariño – Sabes que a tu lado, se me pasa todo inmediatamente. Justin solo rió, pero esa risa no llegó a manifestarse a sus ojos, Arianna se dio cuenta de eso, él se preocupaba mucho por ella. Rápidamente comenzó a tomarse toda la leche hasta que no quedó nada en el tazón, se estiró y dejó el tazón en el velador el cual estaba al lado de la cama. Inmediatamente se acomodó en los brazos de Justin. - No te preocupes – Le susurró al oído – Sabes que siempre se me pasa, lo que me tiene más preocupada es que a ti te suceda algo, no entiendo porque no me quieres decir en que misión estas trabajando. Él la apretó contra sus brazos, no había querido decirle a Arianna que la misión en la cual él estaba era la misma en la que Steph había perdido la vida. - No quiero que estés preocupada, sabes que siempre me cuido – Le Susurró al oído a su novia – Además pronto lo sabrás. Ella al escuchar eso lo miró directamente a los ojos. - ¿De qué estás hablando? – Preguntó dudosamente. Pero él no le dijo nada más. - Solo duerme mi amor, yo cuidare tus sueños, seré como un ángel guardián – Le dijo dándole un beso en la frente. Se quedaron un buen rato dándose una que otra caricia, besándose o simplemente mirándose a los ojos, hasta que por fin se quedaron dormidos muy juntos.
Capítulo 2
Capítulo 2.
El sol se anunciaba en un amanecer hermoso, se filtraba tras la ventana, bañando el cuerpo de los dos enamorados. Justin comenzó a moverse hasta que finalmente se despertó, tras bostezar un par de veces vio que Arianna todavía dormía plácidamente en su torso el cual estaba desnudo. Cómo amaba a aquella chica, daría hasta su vida por ella, pararía hasta una bala por ella, desde el día que la conoció se juró que la protegería. El problema es que no la podía proteger de su trabajo, por más que trató de convencer a jefe de que ella no entrara en la misión, el no lo escuchó, era una de las misiones más peligrosas, esta vez tendría que cuidarla el doble, no le importaba que fueran agentes infiltrados. Se movió como pudo, no quería despertarla, anoche había sufrido nuevamente una de aquellas terribles pesadillas, siempre son parecidas, ella sueña con la muerte de su hermano Steph, estaba cansado de verla sufrir, por eso la protegía más. Se levantó y dio otro bostezo, sintió como Arianna se movía y al darse vuelta se sorprendió al ver que su chica estaba destapada, pero no era por ese motivo por el cual estaba sorprendido, estaba así porque a ella se le veía todo su magnífico trasero destapado. Su cuerpo se calentó un poco, desde hace 1 semana que ellos no habían hecho el amor, pero a él no le interesaba eso, le interesaba que su chica estuviera bien emocionalmente. Pero no podía quedarse así como así, por lo que estiró su mano hasta el trasero de su chica y le dio un fuerte agarrón. - Hoy amaneciste muy juguetón, mi amor – Escuchó como Arianna le decía riendo. Ella se dio vuelta y lo miró, notó que estaba muy rojo. - No quería despertarte – Le dijo un tanto avergonzado – Lo que pasa es que … - No te pudiste resistir – Dijo ella riéndose del pobre chico para después acercarse a él y sentarse en su regazo – Prometo que no te descuidaré más, sé que tienes necesidades, te he dejado muy abandonado. Él le acarició el cabello lentamente y la miró fijamente a los ojos. - Por ahora la única necesidad que tengo es de verte bien, has estado por muchos días muy pálida, noto que casi no comes y estas más delgada – Justin le rozó la cintura con sus manos – Has estado muy nerviosa, además has tenido muchas pesadillas, por lo menos ahora ya no te despiertas gritando. Ella se tapó los oídos, no quería escuchar eso, ni mucho menos hablar de eso. - Justin por favor, no quiero escuchar eso – Dijo con lágrimas en los ojos. Justin no quería hacerla llorar, por lo que pensó cambiar de tema y le quitó las manos de los oídos. - Iré a hacer el desayuno – Le dijo alegremente - ¿Qué es lo que quieres comer? Porque te obligaré a comer. Ella sonrió, Justin era muy obstinado. - Mmmm… - Ella lo pensó un poco – Quiero algo rico, así que sorpréndeme, por mientras me iré a bañar. Se levantó, antes de irse le dio un fugaz beso a Justin en los labios, pero Justin fue más rápido y le dio una palmada en el trasero. Mientras su amada novia se bañaba, él estaba preparando el desayuno, del refrigerador sacó un par de naranjas y con ellas hizo un jugo delicioso, Arianna no había comido una comida decente desde hace varios días. También preparó unos Hot cakes con mermelada de maple, leche con cereal, algunas frutas, café y fue rápidamente se vistió y fue a comprar rosas de color rojas a una florería que estaba en la esquina del edificio. Esperó a que Arianna saliera de la habitación, cuando ella lo hizo se le iluminaron los ojos, ella estaba mucho más hermosa esa mañana, vestía de manera sencilla, con un vestido de tirantes de color violeta, el cual tenía de detalle un cinturón negro, además de eso, se había colocado unas calzas de color negro y unos botines de taco alto de color negro. Se había dejado el cabello al natural por lo que algunos risos caían en cascada por su pecho, se veía adorable y muy hermosa. Se acercó a ella y le rodeó la cintura con sus brazos. - Que lástima que tengas que cambiarte cuando lleguemos a la agencia – Le dijo Justin mirándola embobado. - ¿Por qué? – Ella le dijo haciéndose la inocente, sabía lo que Justin trataba de decirle. - Estas hermosa – Dijo embobado – Radiante, bella, soy un chico con mucha suerte. - No Justin – Le dijo ella tiernamente – Yo soy una chica con mucha suerte porque tengo a un novio que me ama mucho – Le tocó la punta de la nariz con un dedo y miró el desayuno y las rosas – Y que además que es muy detallista. Tomó una rosa, le cortó el tallo y se la colocó entre el cabello arriba de la oreja derecha. Se sentó en la mesa, Justin se sentó a su lado, le sirvió un poco de café con un poco de leche y Hot cakes. - Esto huele delicioso – Le dijo y lo probó – Y sabe delicioso. Desayunaron entre risas y besos, Justin le daba de comer y Arianna también le daba de comer a él, eran un par de tortolos. Cuando por fin terminaron de desayunar, Justin retiró la mesa mientras que ella lavaba los platos, ambos miraron la hora, eran las 8:45, ellos entraban a las 9:00 por lo que estaban en la hora justa. - ¡Justin! – Le gritó Arianna – vamos a llegar atrasados si seguimos así, ¡Apúrate!. Justin se estaba vistiendo debidamente, llegó a la sala vestido de manera muy guapo, con una ramera musculosa de color blanco, pantalones negros que se ajustaban muy bien a su cuerpo, sus famosas supras blancas y un gorro con visera verde. Atrás de él venía Hachiko el con cual estaba jugando, ellos dos a veces tenían sus diferencias ya que a Hachiko al principio no le gustaba Justin, pero con el tiempo se volvieron fieles amigos. - ¡Ya jefa! Aquí está el pobre esclavo, en vez de ser un perfecto novio, parezco un esclavo – Se quejó en broma – Siempre cargando cosas, yendo de allá para acá con ella y por ella… Pero Arianna no lo dejó terminar ya que lo besó fuertemente. Justin a veces era un tanto reclamón, aunque siempre lo hacía en broma. En aquel beso ella le agradecía todo lo que él hacía por ella, por estar con ella a pesar de todo lo que le había pasado. El beso te tornó un poco más pasional cuando ambos a la vez dieron paso a sus ardientes lenguas, se tocaban como si nunca lo hubieran hecho, se exploraban hasta la más mínima parte de sus bocas. Se tuvieron que separar por la falta de aire de ambos. - Me tienes loco Anny, lo sabes – Le dijo Justin un poco agitado – Siempre has sido tú, siempre. Ella lo miró detenidamente, se veía que él estaba loco por ella, y ella también lo estaba de él. - Justin, también siempre has sido tú – Le dijo sonriendo – Ahora mejor vámonos para la agencia, tenemos entrenamiento con La Roca, sabes que no podemos llegar tarde. - Está bien, Vámonos – Le dijo Justin para después robarle un beso. Ellos salieron del departamento con Hachiko a sus espalas, él estaba entrenado para ser un perro policial. Subieron al ascensor, bajaron hasta el estacionamiento del edificio, buscaron el Lamborgini de color blanco el cual le pertenecía a Justin y se subieron a él. - Siempre me ha gustado este auto – Le dijo Anny sonriendo y acariciando el auto. - Te regalaré uno para navidad o para tu cumpleaños – Le dijo él tiernamente. - Justin no es necesario que gastes tanto dinero en mí – Ella siempre le decía lo mismo, a veces el terco de Justin gastaba mucho dinero en comodidades para ella. Él la miró muy espantado. - Sabes que cuando murió mi abuelo hace 3 años, él me dejó una suculenta fortuna, además de las acciones de la compañía que me heredó – Dijo repitiéndole lo que le decía siempre – Así que gastaré todo lo que quiera y en quien quiera, así que no gastes tu tiempo ni tu saliva en regañarme porque no te haré caso con relación a eso. Ella se quedó callada, siempre discutían por lo mismo, a ella no le gustaba que él gastara su fortuna en ella. Justin notó el cambio de humor que hubo en su chica, así que le tomó la mano. - Lo siento – Le dijo ella susurrando – Sé que es tu dinero y que con él puedes hacer lo que quieras, pero sabes que me incomoda que me mimes tanto. Él le besó la mano. - Eso lo sé, pero tienes que acostumbrarte, yo siempre cuido lo que es mío y además me gusta mimarte – Le dijo sonriendo - No lo sientas, no me gusta verte con esa cara, deme una sonrisa – Le rogó tiernamente. Ella le mostró una gran sonrisa, Justin le beso nuevamente la mano y comenzó a conducir por las calles de Londres. La agencia MI6 estaba en un subterráneo justo en el centro de la gran ciudad.
Capítulo 3
Capítulo 3.
Por otro lado en el centro de Londres había una elegante mansión, era de color blanco como el mármol, por afuera de notaba que era muy amplia, sus cortinas también eran blancas, todo en aquella casa era blanca, pero solo la casa, sus habitantes no lo eran. Estaba rodeada por un portón de oro, muchas cámaras de seguridad, además de muchos guardias y gente extraña entrando y saliendo de aquella casa que parecía el cielo mismo, la casa pertenecía al líder de una banda criminal, es decir de Vitorinno Styles. De una ventana del segundo piso se notaba que alguien estaba mirando hacia el exterior, era un chico el que miraba todo lo que sucedía en aquella casa, su nombre era Harry Styles. Sus ojos verdes como las esmeraldas miraban el patio delantero de la casa, odiaba ser el hijo de un mafioso, odiaba que todo el mundo lo mirara con una sonrisa sínica, solo para ser aprobado por su padre, odiaba a aquellas personas falsas. - Hola Harry – Escuchó que lo saludaban a sus espaldas, se dio la vuelta y notó que era su amigo Louis Tomlinson. - ¿Es que acaso no sabes tocar las puertas, Louis? – Le dijo fastidiado, Louis siempre hacia lo mismo. - No seas aguafiestas Hazza, estoy muy aburrido – Dijo Louis tirándose en la cama de Harry. - ¿Es que acaso no tienes trabajo? – Lo regaño Harry. - No, no tengo nada que hacer – Le dijo Louis y después lo miró - Y tú ¿A caso dime que trabajas? – Estaba riéndose, Harry no trabajaba. Harry le tiró un cojín que le llegó justo en la cara a Louis, de repente la puerta de la habitación de abrió nuevamente y entró otro amigo de Harry y Louis, era Iván Santos. - ¡Harry Trabajar! – Entró riéndose Iván – Eso es como si el fin del mundo hubiera llegado – Se sentó al lado de Louis - ¡Hazme un espacio Louis! Louis se tuvo que correr un poco. - ¡Dejen de molestarme! – Les pidió Harry a los dos – Ustedes saben que mi padre me está entrenando para ser el sucesor de la mafia, por eso es que no trabajo. Tanto Louis como Iván se miraron con cara de no creer lo que estaban escuchando y tras varios segundos de mirarse ellos comenzaron a reír a carcajadas. - ¡Tú! – Dijo Iván descostillándose de la risa - ¿Serás nuestro Jefe?, pero si ni si quiera te puedes sacar de encima a Taylor Swift. - Ni si quiera me la nombres Iván – Dijo Harry tirándose en la cama un poco fastidiado – La maldita chica esta en cada lugar al cual voy, me coquetea, me sigue a todas partes, es un tormento. - Eso te pasó por hacerle ilusiones a aquella chica – Lo retó Louis, a veces él es como un padre para Harry. - Yo ni si quiera le hice ilusiones – Dijo Aún más molesto - Sólo salimos una sola vez sólo fue porque mi hermana me dijo que le diera una oportunidad para conocerla, nunca más vuelvo a escuchar a Gemma. Gemma era la hermana mayor de Harry, no era la heredera del imperio de Vitorinno porque ella era mujer y su padre tenía prejuicios por eso, pero en realidad ese no era el motivo verdadero, el motivo real era que Gemma se había enamorado de Steph, se había enamorado del espía por eso Vitorinno ya no le tenía confianza a su hija mayor. Pero pasemos al tema por el cual Harry estaba molesto con ella, eso era sencillo, Gemma le había presentado a Harry una amiga la cual se llamaba Taylor Swift, Taylor estaba loca por él, él no estaba interesado en ella, pero la chica era muy insistente, estaba en todos lados, no lo dejaba en paz, hasta tuvo que cambiar su número telefónico por culpa de ella. - Ten paciencia – Le dijo Iván riendo – Todo se acabará de un momento a otro, ten fe. - La fe se me está acabando – Dijo Harry desesperado – Sólo quiero encontrar a una chica normal, solo a una, es que a caso en este mundo no puede haber una chica normal. De repente sintieron como alguien tocaba la puerta efusivamente, Louis como era el más cercano a la puerta la abrió y vio que era el padre de Harry, es decir Vitorinno Styles. - Harry, Louis e Iván – Dijo entrando a la habitación - Necesito que los tres vengan a la reunión de ahora, me ayudaran en algo. - ¿Es necesario ir? – Dijo Harry con mucha flojera. - Sí, Justin tiene estos dos días libres – Dijo severamente – Su padre iba a ser operado con urgencia. - ¿Cómo sabes que Justin Mallete te dijo la verdad? Puede ser un espía al igual que lo fue Steph – Dijo Harry muy concentrado, él no confiaba mucho en Justin. - Harry, otra vez con lo mismo de siempre – Le dijo Vitorinno enojado – Lo investigué antes de contratarlo Harry, tienes que confiar en él, mejor vamos a la reunión. Dijo esto los 4 salieron de la habitación, bajaron por las escaleras y se encaminaron a la sala de reuniones, en ella estaban sus demás compañeros, Niall Horan, Liam Payne, Mario Castell, Logan Lerman, Gregg Sulkin, Nick Jonas, Nathan Sykes, Cody Simpson, James Maslow, Ian Somerhalder, Josh Hutcherson, Skandar Keynes y por último Zayn Malik el cual iba a ser el líder de esta misión. Al llegar ellos saludaron a todos sus amigos y se sentaron alrededor de la mesa en la cual estaban reunidos. - Chicos los he reunido a todos ustedes por un motivo muy especial – Dijo Vitorinno mientras se paseaba por la habitación – Tenemos un cliente que requiere de nuestros servicios, nos han contratado para robar un banco, específicamente el banco central de Londres. Al escuchar eso, todos comenzaron a alardear de felicidad, a todos ellos les encantaban todas las misiones en especial las que implicaban robar y valla que era un gran robo. - ¿Cuánto nos van a pagar?- Preguntaron Niall, Liam, Cody e Ian a la misma vez. - Si todo sale bien y no cometen locuras – Vitorinno los miró seriamente - Ganaran aproximadamente 19 mil millones de euros cada uno. Todos comenzaron a aplaudir y a gritar nuevamente, era un trabajo fácil para ellos y la paga era mucha más que buena, era excelente. - El encargado de esta misión es Zayn, así que él tiene la palabra – Dijo Vitorinno para después sentarse en la cabecera de la mesa. Zayn se paró de su asiento, fue hacia una laptop, la cual prendió y de un proyector que estaba en el techo se desplegó una luz que fue directamente hacia un telón que estaba colgado al frente de ellos. - Este – Dijo Zayn señalando el telón – Es el Banco Central De Londres, la bóveda se encuentra en la parte subterránea del banco – Cuando dijo esto las imágenes de la proyección cambiaron llevándolos directamente hasta el subterráneo del banco – Nuestra misión es penetrar los muros del subterráneo, lo haremos con explosivos, por eso esa es tu misión Cody, tu escogerás los mejores explosivos del arsenal. - ¡Por supuesto que si jefe! Soy el chico explosivo – Gritó Cody muy alegre. - No será nada fácil – Prosiguió Zayn – Para poder entrar un grupo tendrá que ir por las alcantarillas las cueles están conectadas al banco, en esta parte de la misión irán, Cody, ya que será en encargado, Liam, Josh, Mario, Nick, Louis, Skandar y yo. - Ok – Dijeron todos los aludidos. - La segunda parte del plan será que mientras nosotros estaremos en el subterráneo, los demás nos estarán esperando a las afueras del banco con sus autos o motos, los que estarán en esta parte del plan son, Niall, Logan, Harry, Gregg, Iván, Nathan, James, e Ian – Estableció Zayn. Les siguió diciendo cosas fundamentales del plan, tenía que ser perfecto, preciso, pero sobretodo que la policía no los detuviera, nunca los han detenido, pero es fundamental que la policía no frustrara sus planes, lo que no sabían era que en ese preciso momento Mario mandaba un mensaje de texto a sus camaradas, es decir a los policías, nadie sabía que él era un infiltrado del MI6, si alguien sabía, su vida corría peligro como ocurrió con Steph. - Entonces – Dijo Zayn muy animado – Plan en marcha. - Antes de que se vayan – Dijo Vitorinno – Los encomendaré al gran dios Manmoon, Dios del dinero y la codicia. Todos sabían que Vitorinno tenía que encomendarlos a su gran dios, él decía que gracias a ese dios eran los mejores. Todos bajaron sus cabezas, esperando la bendición. - Gran Dios Manmoon – Comenzó Vitorinno solemnemente – Dios del dinero y la codicia, bendice a todos estos hijos tuyos, para que su misión sea buena, que no les suceda nada malo y poder celebrar una buena faena, Amén. - Amén – Dijeron todos a la misma vez. Comenzaron a salir todos a hacer lo que Zayn les había dicho, Harry era el último en salir, pero su padre lo detuvo. - Harry, cuídate – Le dijo Vitorinno a su hijo un tanto preocupado. - Padre, me sé defender – Dijo un tanto fastidiado – Deja de preocuparte siempre por mí, cada vez que vamos a hacer algo. - Eres mi hijo Harry, siempre me preocupo por ti – Vitorinno siempre se preocupaba por su hijo. - Eso lo sé, Padre – Dijo Harry para después darle un fuerte abrazo. Dicho esto se fue con los demás, los cuales estaban en el enorme garaje en el cual tenían de todo, es decir, autos, motocicletas, armas de fuego, cuchillos, explosivos, katanas, gases de todo tipo en fin, todo lo necesario para poder hacer todo tipo de cosas malas. - Esta vez mato a muchos policías – Le dijo Iván a Harry tomando unos cuchillos, Iván era el experto en cuchillos – Nos deben unas cuantas, en especial después de lo que sucedió con Steph. - ¡Shh! Cállate Iván – Lo reprendió Harry tomando un arma – Sabes que a nadie le gusta escuchar el nombre de ese espía. Todos los de Scorpia odiaban el nombre de Steph, de hecho odiaban a todos los policías y a los espías del MI6. Cuando estuvieron listos comenzaron el plan, los que debían de ir al subterráneo tenían un mapa para así poder guiarse mejor, mientras los que tenían que estar en la superficie tomaron sus autos, muchas armas y cuchillos. Comenzaron el plan, , Liam, Josh, Mario, Nick, Louis, Skandar y Zayn bajaron hacia las alcantarillas mientras que Niall, Logan, Harry, Gregg, Iván, Nathan, James, e Ian tomaron sus autos y fueron de camino al banco. La señal de encuentro entre ambos grupos era una explosión, la explosión que haría Cody con sus explosivos. ……………………………………………………………………………………………………………………. Pasó media hora después de que los chicos de la superficie llegaron, hasta que hubo un estallido, esa era la señal, todos encendieron nuevamente sus autos a la espera de los demás, los cuales vendrían con el dinero, cuando de repente escucharon una sirena de policía. - ¡LOS MALDITOS POLICIAS! – Gritó Logan - ¿ES QUE A CASO NO NOS PUEDEN DEJAR EN PAZ? - Logan – Dijo Niall riendo y a la vez sacando su arma de su espalda – Se supone que su trabajo es arrestarnos. - Eso es verdad – Refutó Iván sacando un par de cuchillos de su bota. - Me chocan los policías – Dijo Harry sacando un arma de entre sus pantalones. - En especial los espías – Dijeron Nathan, Gregg y James a la misma vez. - ¡Cállense la boca y mejor vamos a buscar a los demás! – Dijo Ian, él era el más centrado en las misiones – Y tomen – Les dijo tirándoles unas máscaras – Es para que no nos reconozcan. Todos se colocaron las máscaras, eran negras y solo dejaban ver los ojos, tomaron sus autos, al salir a la carretera sintieron las sirenas de la policía, esta los venía siguiendo, también sintieron como un helicóptero los perseguía en el aire, ellos disfrutaban las persecuciones. Cuando llegaron al banco vieron a todos los demás, ellos llevaban el dinero en unas maletas grandes de color negro, llevaban armas de fuego en sus manos y también llevaban rehenes. Al salir de los coches Liam prácticamente le tiró a una chica pelirroja a Iván, el cual inmediatamente le colocó un cuchillo en la garganta. Vieron como todos los policías les cerraban el paso. - Señores policías – Dijo riendo Iván, él siempre era el encargado de hacerle frente a la policía – Buenos días – Espero respuesta pero era obio que no le iban a contestar. - ¡SUELTA A LA CHICA Y PONGAS LAS MANOS EN ALTO! – Gritó un policía con un megáfono. - ¿Qué suelte a la chica? – Dijo Iván sonriendo – No, es muy linda, además su cuello también es lindo – Dijo para después profundizar el cuchillo en la garganta de la chica, de ella salió unas leves gotas de sangre. - ¿ESTAN TODOS ACORRALADOS NO TIENEN ESCAPATORIA?- Gritó nuevamente el policía. - ¿ESO ES LO QUE CREEN? – Dijo Nick para después sacar una metralleta y dispararles. En ese momento los policías también comenzaron a disparar, los chicos igual comenzaron, Iván soltó a la chica y ella salió corriendo inmediatamente, él comenzó a tirar cuchillos a diestra y siniestra, mientras los demás disparaban, uno de los disparos de los policías le llegó a Louis en un hombro, Harry al ver a su amigo herido fue inmediatamente en su ayuda, pero antes de eso, mató al policía que le había disparado. - ¿Estás bien hermano? – Le preguntó a Louis ayudándolo a levantarse. - Sí, es sólo un rasguño – Dijo con dificultad. Harry lo llevó inmediatamente a su auto. Vio que los demás seguían disparando pero por lo menos ya tenían el dinero en los autos. - Zayn, ¡Vámonos! - Le gritó a su amigo – Si seguimos aquí nos van a llevar arrestados. - ¡Chicos! – Les gritó Zayn – Vámonos. Ellos obedecieron inmediatamente, estaban felices porque tenían el dinero y además habían matado s muchos policías. Todos subieron a los autos y se fueron inmediatamente, nuevamente la policía y el helicóptero iban detrás de ellos, se dividieron, unos de fueron por el norte y otros se fueron por el sur, sus autos eran modificados a diferencia de los autos de los policías los cuales no lo estaban por lo que a la policía se les hizo difícil seguirles el rastro, por lo tanto, los ladrones nuevamente ganaron.
................................................. Espero que alguien me ayude, me diga como voy, acepto de todo consejos y criticas asi que no me tengan miedo.
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Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
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Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
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Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
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Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
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Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.