Lazos inexplicables... Nick J. y Tu

Manejaba camino a casa, con mi mamá recién salida del hospital, la veía por el retrovisor estaba adormilada era lógico estaba cansada la acaban de operar
― Bien llegamos― dije bajando del carro y ayudándola a bajar a ella también, entramos a la casa con cuidado comencé a ayudarla a ir a su habitación, la casa estaba vacía, Nick ya se había ido a la facultad, la acosté en su cama, ― ¿Necesitas algo? ―
― Solo quiero dormir― dijo acomodándose en la almohada
― Estaré arriba, si necesitas algo llámame por el celular― Salí rápido y del mismo modo subí las escaleras, la puerta de la habitación de Nick estaba cerrada.
Abrí mi puerta, estaba cansada quería dormir anoche se me había ido el sueño pensando en la plática que tuve con Nick, me quite los zapatos y los avente por ahí, alce mi mirada hacia la cama y vi algo que hizo que sonriera de nuevo, una rosa, la tome entre mis manos y aspire su aroma, era más que obvio que Nick la había puesto

Nick le hacía curaciones a la rodilla de mi mamá, se veía tan lindo, solo veía a como hacia reír a mi mamá y eso me llenaba de ternura.

Me puse a limpiar exhaustivamente mi habitación, quería borrar los últimos recuerdos de Joe, barrí todo el piso, tire todo lo que me recordaba a él, quería empezar de nuevo, no importaba si fuera con Nick o con alguien más, incluso no me importaba si era sola, solo sé que quería comenzar una nueva etapa, alejada de la tristeza y melancolía

Me levante hasta tarde, tenía demasiado sueño además no había mucho que hacer en la casa, ya había limpiado todo solo quedaba hacer la comida, me levante de la cama ni siquiera me cambie, seguía con mi pijama, un short y una playera de tirantes, no me quería bañar, no aun, las 12 del medio día, de seguro Nick y mi mamá ya se fueron. Baje las escaleras para ir por un poco de leche mi cara de modorres me pesaba, abrí el refrigerador y lo primero que vi fue una rebanada de pastel, así que tome un bocado
― Que sexy― escuche la voz de Nick, causándome un susto, eso hizo que el pedazo de pastel se atorara en mi garganta, comencé a toser, sentía que moriría, los ojos comenzaban a lagrimear ― Vamos sabes que con eso no llamaras mi atención― trataba de pegarme en el pecho para que el pastel pasara pasara ― Vamos no juegues― dijo quedándose viendo ― ¿No estás jugando verdad? ― no podía respirar, el rodeo mi cintura con sus brazos haciendo presión en mi ombligo y comenzó a apretar, sentía aun el trozo de pastel en mi garganta, él comenzaba a apretarme más fuerte, no sé como pasó pero el pedazo de pastel salió disparado, y ya podía respirar
― ¿Estás bien? ― Me pregunto preocupado, yo solo asentí con la cabeza, tocaba mi garganta que me dolía mucho ― Lo siento― me dijo muy apenado y triste

Me quede toda la tarde encerrada en mi cuarto, alistaba mi papelería para mañana mi primer día de trabajo, la hora de la cena llego así que baje las escaleras, pero encontré una escena que me llenaba de pánico, mi mamá estaba sentada en la sala con Nick, y traía el álbum de fotografías de cuando yo estaba bebé, mi cara comenzó a ruborizarse
― Entonces esta bebé enseñando las pompis es ________― dijo Nick señalando la bebé regordeta que para infortuna era yo
― Sí ― dijo mi madre llena de orgullo
Nick volteo hacia las escaleras y me vio
― Hola ______ tu madre me enseña fotos tuyas de bebé― dijo con una sonrisa picara

Me bañaba para mi primer día de trabajo, mi mamá ya había retomado su trabajo, estaba un poco nerviosa por esta nueva etapa,
― Ya me voy― escuche el grito de Nick que iba a sus clases, salí del baño ya casi lista y hambrienta, entre a mi habitación mire mi escritorio y ahí estaba un delicioso desayuno, preparado por Nick

Llegue a mi casa después del trabajo, hoy fue un día un poco estresante así que solo quería llegar a dormir
― Hola― me dijo Nick quien estaba sentado a las afueras de mi casa ―Te estaba esperando― dijo poniéndose de pie
― ¿Para qué? ― pregunte con un poco de ilusión no imaginaba para que me esperaba
― Solo quería cerciorarme que llegaras bien ― dijo sentándose de nuevo, su falta de conversación me dejo inquieta
― Bueno pues si llegue bien― dije mientras me sentaba a su lado
― Sabes hace mucho que no nos ponemos a platicar, yo creo que desde…―
― Desde que se fue la luz ―
― Si desde ese día― dijo triste, me sentía un poco mal, pero no quería tocar el tema del beso ― ¿Cómo te fue en el trabajo? ―
― Bien, aunque hubo mucho― le confesé
― Y eso es bueno verdad― dijo viéndome a los ojos
― Si― dije mirando a otro lado, es que sus ojos me derriten como el fuego funde al oro ― Solo que me canso mas―
― Pues yo estoy lleno de tareas― dijo aun mirándome ― pero bueno todo sea por aprender―
― Si todo sea por eso― dije poniéndome de pie ― Bueno me ire a dormir que muero de sueño, adiós Nick―

Hoy no estoy tan cansada, hasta decidí regresar a mi casa caminando, el trabajo no había sido tan pesado como otros días, seguro hoy era una buen día lo presentía.
Comencé a buscar mis llaves en mi bolso, abrí la puerta y comencé a caminar despacio, escuche voces y fue la razón por la cual no apresure mi paso, camine hacia el comedor, ahí estaba sentada mi mamá, Nick y… otra chica, con una gran sonrisa cabello rizado, y unos grande ojos cafés, demonios es bonita, mi sangre empezó a subir a mi cabeza, los celos no se alejaban de mi mente, cielos, ¿será que a Nick le gusta? Mi día bueno se había convertido a malo, pésimo diría yo ¿Cómo se atreve a traer a una chica a mi casa? El no tiene derecho de traer a nadie, necesitaba calmarme, respire hondo
― Hola― dije sonriendo, atrayendo las miradas de todos, Nick quien me daba la espalda rápidamente se volteo
― Hola hija, llegaste temprano― dijo mi mamá con una gran sonrisa, parece que se divertían con la visita ― _____ hija ella es Gaby, es…―
― Soy compañera de Nick, de la facultad y de tareas ― dijo muy amable, solo sonreía y sentía la mirada de Nick en todo momento
― Hola soy _______― dije por amabilidad
― Así que tu eres ________ he escuchado tanto de ti― yo solo le sonreí ― Bien Nick ya es tarde será mejor que me vaya― dijo poniéndose de pie, cielos tiene un buen cuerpo, aun que es unos centímetros más bajita que yo, se despidió de mi mamá de beso y después de mí
― No te irás sola, ya es tarde te acompañare a la parada del bus― dijo Nick poniéndose de pie
― Bueno― dijo ella, Dios que sínica
― No ¿cómo que en bus? ― repuso mi madre ― Llévala hasta su casa en el carro te lo presto― las palabras que dijo mi madre me dejaron boquiabierta
― Bueno está bien, así no me preocupare si le pasa algo a Gaby en el camino― Nick la abrazo por los hombros, sentía fuego en mi mirada
― Acompáñalo ______ para que no se regrese solo ― opino mi madre, claro que los acompaño, así veré lo que hacen
― No hace falta, ______ debe de estar muy cansa del trabajo― Nick contesto por mí, se estaba vengando por dejarlo anoche solo cuando estábamos platicando, fingí sonreír. Con furia pero disimulándola subía a mi habitación

Eran las 8 de la noche llegue muy cansada del trabajo, lo único que quería era dormir, mire hacia la cocina y vi a Nick con un delantal para cocinar, la casa olía deliciosa por la comida que estaba preparando Nick, repentinamente el sueño se me quito, quería probar aquellos tacos de carne molida que había hecho Nick

Me desperté en la mañana muy relajada dormí como hace tiempo que no lo hacía, me sentía fresca me estire un poco, y me gire de lado, sobre una almohada había una pequeña nota

Tal vez no te hayas dado cuenta pero dormí contigo y hasta bese tus labios