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La Reina Sin Trono
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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La Reina Sin Trono
por TCastle Lun 16 Jul 2012, 10:56 pm
Nombre: Sin Trono y Corona
Autor: Onetono
Género: Romance/Drama/Ficcion
Adaptación: No. La historia es mia y si me la quieres plagiar " Get out of my kitchen"...
Advertencias: Los capitulos son muy extensos
Otras Paginas: No
CAPITULO 1
Estoy cansada de tanto correr hacia ningún sitio, me detengo por unos instantes poniendo las manos sobre las rodillas sentándome en el aire, jadeo y miro a mi alrededor hasta que percibo de nuevo el "ente" que me ha estado persiguiendo, no tomo ni un segundo más de respiro y corro adentrándome cada vez más en ese bosque gris lleno de árboles secos y sin hojas, quebradizos y sin vida. Todo aquí parece sin vida, salvo lo que me persigue, corro con todas mis fuerzas y logro voltear hacia atrás varias veces para apreciar lo que me persigue pero no distingo muy bien lo que es, ni siquiera sé si es un animal o una persona, tiene una silueta humanoide pero vuela y esta encapuchado, con trozos de tela bajando de sus brazos moviéndose en el aire; emana miedo y un halo gris lleno de obscuridad. Solo escucho el ruido que hacen las hojas secas en el piso que muevo mientras corro. Cansada de tanto correr llego hasta un acantilado que no parece tener fondo, me detengo y volteo lentamente hacia atrás, sabiendo que “eso” estará mas cerca que nunca.
Despierto empapada de sudor. Al parecer he movido hasta la última capa de sabanas de mi cama; me estiro un poco moviendo las piernas y los brazos hacia un lado y otro sin despegarme de la cama. Ya son, con esta, muchas noches en las que el mismo sueño o más bien pesadilla me atormenta y no logro descifrarla, en caso de que fuera una señal o algo que mi subconsciente me quiere dar a conocer. Miro a las paredes con ese papel tapiz verde y sucio con grabados bobos de rosas irreales que me disgusta tanto, pero no más que las enormes cortinas que cuelgan desde el techo hasta enrollarse en el piso. Las odio tanto, desde el día en el que Mrs. Kira las trajo para que las pusiera, es desde entonces que las he querido quemar, tienen un diseño parecido al de la pared pero con menos realidad y el color es opaco y amargo, hacen que mi habitación sea más aburrida que el sótano.
Mrs. Kira, es la persona que me ha criado desde que tengo memoria, o más bien desde que mi madre ya no está con nosotros. Ella, Mrs. Kira, se ha encargado de mis modales, de mi vestimenta y ultimadamente de mis decisiones, y en ninguno de los aspectos se han ido sin que los modifique o en el caso de los modales los rompa sacando de quicio a Mrs. Kira, a estas alturas de mis 16 años se ha rendido y ya no se molesta tanto ni trata de insistir como lo hacia los primeros años, creo que comprendió lo terca y caprichosa que puedo llegar a ser cuando me lo propongo, y no es que lo sea, no es que sea una de esas niñas hijas de condes que quieren que todo salga perfecto y como ellas lo quieren o de lo contrario patalean y si ellas lo consideran necesario se tiran al piso, he visto eso repetitivamente a lo largo de mi vida y nunca lo he hecho, me da coraje y lastima.
Levanto la mitad de mi cuerpo para sentarme en la cama y así bajar los pies y sentarme en la orilla de esta, froto la muñeca de mi mano izquierda sobre el cuenco del ojo de ese lado, y antes de que pueda bajar los pies en el piso, entra sin tocar la puerta con una bandeja de plata en la que carga un tazón con agua, toallas y un jabón grasos el cual no me gusta usar, allí esta, parada y distraída como siempre, Myrtle, la mucama, le digo así porque Mrs. Kira me obliga a hacerlo, pero en realidad es mi mejor amiga, mi confidente y la única persona que sabe mi secreto, más bien es la única que sabe y no forma parte de él, pues mi gran secreto es que estoy enamorada de alguien prohibido para mi, pues el es el hijo del herrero de la "Terna", el área más pobre del pueblo. Él es una gran persona, se llama Ethan; recuerdo cuando lo conocí, era un día de otoño, los vientos eran infames y yo salí a escondidas del castillo junto con mi gata "Noontide" para pasear por el arroyo en la mañana, cuando el sol aún estaba iluminando los bellos campos y los juncos que crecían cerca del riachuelo se mecían al son de los pequeños vientos que corrían a esa hora, yo me recosté en el pasto observando las nubes y tratando de buscar formas en el cielo no tan gris, cuando el ruido del agua corriendo, el croacar de las ranas y el trinar de unos pajarillos silvestres me arrullaron hasta quedarme profundamente dormida, desperté porque unas gotas de lluvia cayeron sobre mi sien, abrí los ojos y vi que las nubes se habían tornado grises y anunciaban una horrible tormenta, me senté sobre el pasto y mire hacia todos los lados buscando a Noontide pero no la encontré, me levanté y empecé a caminar a tientas diciendo: "Noontide", después mi desesperación se incrementó y conforme a esta también el tono de mi voz y mis pasos, hasta llegar a un punto en donde corría y gritaba el nombre de la gata desesperadamente mientras me adentraba a los arbustos, las ligeras gotas se hacían tormenta y ni hablar del suave viento que me arrullaba hace unos minutos o quizás horas, no sé cuanto dormí y los nubarrones no permitían que pudiera ver la posición del sol, ahora el viento era ventarrón y azotaba las ramas sin piedad haciendo flexionar hasta el árbol con el tronco más duro, cuando escuche algo, una voz varonil detrás de mi.
-¿Buscabas esto?- Dijo un joven alto, de facciones no tan toscas, pero finas, suaves y carnosos labios rosados y agrietados por el clima, con una hermosa cabellera miel, sedosa y brillante que se movía por el viento, con unos hipnotizantes ojos azules que podría jurar que brillaban bajo unas cejas perfectamente pobladas -¿Esto es tuyo?- volvió a preguntar mientras cargaba a mi gata entre sus fuertes brazos, yo tarde un poco en contestar, no por la impresión de verlo en el bosque bajo esta tormenta que nos mojaba a los dos, menos a Noontide porque la tenia envuelta en una prenda que seguramente era suya.
-S...Si... si es mi gata, pero, ¿por qué la tienes tu?- Le pregunto tartamudeando, no por frio sino porque no podía quitar la vista de sus ojos.
-La encontré asustada sobre un arbusto antes de que empezara a llover, cuando vi el sello del rey Elliot que en paz descanse en su collar y supuse que no era un gato perdido de la Terna- Explicó.
-Podría dármela, yo le recompensaré...-hice una señal con la mano a la vez que alzaba la cabeza para preguntar su nombre.
-No es necesario que me pague, y mi nombre es Ethan- Me respondió pero cuando dijo su nombre un trueno rugió en el cielo haciendo que yo entendiera que él se llamaba Evan.
-Está bien señor Evan, podría escoltarme hacia el castillo del rey Elliot- Le dije mostrando por primera vez los modales que Mrs. Kira había inculcado en mi sin ningún resultado hasta ahora, y no sé porque en ese momento hablé así.
-Es Ethan, y sería un placer para mi escoltarla- Dijo riéndose, dejando ver una bella sonrisa, no sé si se reía de mi error al confundir su nombre o por mi actitud. -Que tonta-, me digo en mi mente.
Los dos corrimos hacia el pueblo mientras él me cubría con la chaqueta que antes protegía de la lluvia a Noontide, mientras yo sostenía a esta en mis manos, pero aun así no pude protegerla mucho del agua, lo cual ella odia, cuando llegamos al pueblo, noté que era de noche y tendría serios problemas al llegar, si el desaparecerme una hora es ganarme un gran discurso de sermoneos y regaños de Mrs. Kira, no sé que me esperará si me he ausentado por horas y para agregar más problemas la lluvia. Del pueblo fue mas rápido y fácil llegar al castillo además de que dejó de llover en el camino, cuando llegamos a la gran puerta, él se pone frente a mí y me dice:
-Hemos llegado, espero y no tengas problemas por llegar tarde y con el gato mojado, porque supongo que es de alguien de la realeza, y pues... podría... no sé, costarte tu empleo.
Es cierto, no tengo ni tiara ni las ropas y escoltas que alguien de la realeza se supone debería tener y estaba en el bosque, que es un lugar que no se debe de frecuentar por alguien que no tenga escolta o al menos que tenga asuntos de trabajo allí, y ¡claro! cuando mencionó a mi padre, el rey Elliot, yo no dije que era hija de él, no sé si debería decirle o no, que no trabajo aquí, pero no gano nada con mentirle.
-Pues... es que no trabajo aquí, y... No trabajo aquí, soy la hija del Rey Elliot- Digo un poco insegura y espero una reacción de desprecio o de hipocresía, tal vez quiera que le pague.
-Oh, yo... yo no debo estar contigo, aunque el rey y la reina hayan muerto, tú sigues siendo alguien más…- Lo interrumpo
-No, ¿Dónde puedo encontrarte Ethan?- Le pregunto
-Creo que no sería correcto- Contesta
-¿Y que es correcto?- Rebato su respuesta
-Soy el hijo del herrero y trabajo con el todos los días- Dice mientras mira al piso sobándose las manos.
-Rosalie. Un placer y gracias- En eso un rechinido anuncia que la puerta está a punto de abrirse, frente a nosotros, él corre haciéndome una señal con una mano para despedirse mientras se pierde entre la noche y desaparece a la luz de la luna.
No sé porque corrió, supongo que se imaginó que me iría mal si me encontraban con él. Efectivamente esa noche me regañaron hasta que grité basta y corrí a encerrarme en mi alcoba. Solo Myrtle sabe que sucedió realmente esa noche. Al día siguiente, fui a la Terna con la escusa de que compraría algunos frutos que no se consiguen en otros lugares, acepte que Myrtle y un guardia, Chart, el novio de Myrtle, me acompañaran, yo les dije que se "perdieran" por un momento, y fue cuando me encontré de nuevo con Ethan, con el sudor y su perchero de trabajo que lo hacían ver más encantador y fuerte. Muchas visitas a escondidas, paseos y días en el arroyo, que se hizo nuestro lugar favorito, hicieron a Ethan el amor de mi vida y yo lo soy también para él.
-Buenos días Princesa- Dice Myrtle
-No me digas princesa, ya lo sabes- Esbozo una sonrisa, porque sé que Myrtle lo hace en broma.
-Aquí tienes, para que termines de despertarte lavándote la cara- Dice mientras pone la bandeja con el agua, las toallas y el asqueroso jabón sobre el baúl que se encuentra delante de la cama.
De pronto levanta la vista y se pone seria, yo volteo a la puerta y es Bertha, la otra mucama, ella es la mano derecha de Mrs. Kira, la que le cuenta todo y nos ve con envidia u odio a nosotras, ella no soporta que sea tan amiga de Myrtle. Ella entra sin pedir permiso y el aire se torna denso.
-Mrs. Kira te espera en el salón, dice que bajes cuando puedas- Dice mirando a la pared.
Yo volteo a ver a Myrtle y ella mueve levemente la cabeza para indicarme que está casi tan desconcertada como yo. Bajo de inmediato y abro la puerta de madera obscura haciendo un inevitable sonido que se retumba en todo el gran salón, veo por detrás del sillón y sobresale el clásico sombrero de Mrs. Kira quien me dice:
-Siéntate Ross, necesito hablar contigo- Lo dice en un tono lúgubre.
Autor: Onetono
Género: Romance/Drama/Ficcion
Adaptación: No. La historia es mia y si me la quieres plagiar " Get out of my kitchen"...
Advertencias: Los capitulos son muy extensos
Otras Paginas: No
CAPITULO 1
Estoy cansada de tanto correr hacia ningún sitio, me detengo por unos instantes poniendo las manos sobre las rodillas sentándome en el aire, jadeo y miro a mi alrededor hasta que percibo de nuevo el "ente" que me ha estado persiguiendo, no tomo ni un segundo más de respiro y corro adentrándome cada vez más en ese bosque gris lleno de árboles secos y sin hojas, quebradizos y sin vida. Todo aquí parece sin vida, salvo lo que me persigue, corro con todas mis fuerzas y logro voltear hacia atrás varias veces para apreciar lo que me persigue pero no distingo muy bien lo que es, ni siquiera sé si es un animal o una persona, tiene una silueta humanoide pero vuela y esta encapuchado, con trozos de tela bajando de sus brazos moviéndose en el aire; emana miedo y un halo gris lleno de obscuridad. Solo escucho el ruido que hacen las hojas secas en el piso que muevo mientras corro. Cansada de tanto correr llego hasta un acantilado que no parece tener fondo, me detengo y volteo lentamente hacia atrás, sabiendo que “eso” estará mas cerca que nunca.
Despierto empapada de sudor. Al parecer he movido hasta la última capa de sabanas de mi cama; me estiro un poco moviendo las piernas y los brazos hacia un lado y otro sin despegarme de la cama. Ya son, con esta, muchas noches en las que el mismo sueño o más bien pesadilla me atormenta y no logro descifrarla, en caso de que fuera una señal o algo que mi subconsciente me quiere dar a conocer. Miro a las paredes con ese papel tapiz verde y sucio con grabados bobos de rosas irreales que me disgusta tanto, pero no más que las enormes cortinas que cuelgan desde el techo hasta enrollarse en el piso. Las odio tanto, desde el día en el que Mrs. Kira las trajo para que las pusiera, es desde entonces que las he querido quemar, tienen un diseño parecido al de la pared pero con menos realidad y el color es opaco y amargo, hacen que mi habitación sea más aburrida que el sótano.
Mrs. Kira, es la persona que me ha criado desde que tengo memoria, o más bien desde que mi madre ya no está con nosotros. Ella, Mrs. Kira, se ha encargado de mis modales, de mi vestimenta y ultimadamente de mis decisiones, y en ninguno de los aspectos se han ido sin que los modifique o en el caso de los modales los rompa sacando de quicio a Mrs. Kira, a estas alturas de mis 16 años se ha rendido y ya no se molesta tanto ni trata de insistir como lo hacia los primeros años, creo que comprendió lo terca y caprichosa que puedo llegar a ser cuando me lo propongo, y no es que lo sea, no es que sea una de esas niñas hijas de condes que quieren que todo salga perfecto y como ellas lo quieren o de lo contrario patalean y si ellas lo consideran necesario se tiran al piso, he visto eso repetitivamente a lo largo de mi vida y nunca lo he hecho, me da coraje y lastima.
Levanto la mitad de mi cuerpo para sentarme en la cama y así bajar los pies y sentarme en la orilla de esta, froto la muñeca de mi mano izquierda sobre el cuenco del ojo de ese lado, y antes de que pueda bajar los pies en el piso, entra sin tocar la puerta con una bandeja de plata en la que carga un tazón con agua, toallas y un jabón grasos el cual no me gusta usar, allí esta, parada y distraída como siempre, Myrtle, la mucama, le digo así porque Mrs. Kira me obliga a hacerlo, pero en realidad es mi mejor amiga, mi confidente y la única persona que sabe mi secreto, más bien es la única que sabe y no forma parte de él, pues mi gran secreto es que estoy enamorada de alguien prohibido para mi, pues el es el hijo del herrero de la "Terna", el área más pobre del pueblo. Él es una gran persona, se llama Ethan; recuerdo cuando lo conocí, era un día de otoño, los vientos eran infames y yo salí a escondidas del castillo junto con mi gata "Noontide" para pasear por el arroyo en la mañana, cuando el sol aún estaba iluminando los bellos campos y los juncos que crecían cerca del riachuelo se mecían al son de los pequeños vientos que corrían a esa hora, yo me recosté en el pasto observando las nubes y tratando de buscar formas en el cielo no tan gris, cuando el ruido del agua corriendo, el croacar de las ranas y el trinar de unos pajarillos silvestres me arrullaron hasta quedarme profundamente dormida, desperté porque unas gotas de lluvia cayeron sobre mi sien, abrí los ojos y vi que las nubes se habían tornado grises y anunciaban una horrible tormenta, me senté sobre el pasto y mire hacia todos los lados buscando a Noontide pero no la encontré, me levanté y empecé a caminar a tientas diciendo: "Noontide", después mi desesperación se incrementó y conforme a esta también el tono de mi voz y mis pasos, hasta llegar a un punto en donde corría y gritaba el nombre de la gata desesperadamente mientras me adentraba a los arbustos, las ligeras gotas se hacían tormenta y ni hablar del suave viento que me arrullaba hace unos minutos o quizás horas, no sé cuanto dormí y los nubarrones no permitían que pudiera ver la posición del sol, ahora el viento era ventarrón y azotaba las ramas sin piedad haciendo flexionar hasta el árbol con el tronco más duro, cuando escuche algo, una voz varonil detrás de mi.
-¿Buscabas esto?- Dijo un joven alto, de facciones no tan toscas, pero finas, suaves y carnosos labios rosados y agrietados por el clima, con una hermosa cabellera miel, sedosa y brillante que se movía por el viento, con unos hipnotizantes ojos azules que podría jurar que brillaban bajo unas cejas perfectamente pobladas -¿Esto es tuyo?- volvió a preguntar mientras cargaba a mi gata entre sus fuertes brazos, yo tarde un poco en contestar, no por la impresión de verlo en el bosque bajo esta tormenta que nos mojaba a los dos, menos a Noontide porque la tenia envuelta en una prenda que seguramente era suya.
-S...Si... si es mi gata, pero, ¿por qué la tienes tu?- Le pregunto tartamudeando, no por frio sino porque no podía quitar la vista de sus ojos.
-La encontré asustada sobre un arbusto antes de que empezara a llover, cuando vi el sello del rey Elliot que en paz descanse en su collar y supuse que no era un gato perdido de la Terna- Explicó.
-Podría dármela, yo le recompensaré...-hice una señal con la mano a la vez que alzaba la cabeza para preguntar su nombre.
-No es necesario que me pague, y mi nombre es Ethan- Me respondió pero cuando dijo su nombre un trueno rugió en el cielo haciendo que yo entendiera que él se llamaba Evan.
-Está bien señor Evan, podría escoltarme hacia el castillo del rey Elliot- Le dije mostrando por primera vez los modales que Mrs. Kira había inculcado en mi sin ningún resultado hasta ahora, y no sé porque en ese momento hablé así.
-Es Ethan, y sería un placer para mi escoltarla- Dijo riéndose, dejando ver una bella sonrisa, no sé si se reía de mi error al confundir su nombre o por mi actitud. -Que tonta-, me digo en mi mente.
Los dos corrimos hacia el pueblo mientras él me cubría con la chaqueta que antes protegía de la lluvia a Noontide, mientras yo sostenía a esta en mis manos, pero aun así no pude protegerla mucho del agua, lo cual ella odia, cuando llegamos al pueblo, noté que era de noche y tendría serios problemas al llegar, si el desaparecerme una hora es ganarme un gran discurso de sermoneos y regaños de Mrs. Kira, no sé que me esperará si me he ausentado por horas y para agregar más problemas la lluvia. Del pueblo fue mas rápido y fácil llegar al castillo además de que dejó de llover en el camino, cuando llegamos a la gran puerta, él se pone frente a mí y me dice:
-Hemos llegado, espero y no tengas problemas por llegar tarde y con el gato mojado, porque supongo que es de alguien de la realeza, y pues... podría... no sé, costarte tu empleo.
Es cierto, no tengo ni tiara ni las ropas y escoltas que alguien de la realeza se supone debería tener y estaba en el bosque, que es un lugar que no se debe de frecuentar por alguien que no tenga escolta o al menos que tenga asuntos de trabajo allí, y ¡claro! cuando mencionó a mi padre, el rey Elliot, yo no dije que era hija de él, no sé si debería decirle o no, que no trabajo aquí, pero no gano nada con mentirle.
-Pues... es que no trabajo aquí, y... No trabajo aquí, soy la hija del Rey Elliot- Digo un poco insegura y espero una reacción de desprecio o de hipocresía, tal vez quiera que le pague.
-Oh, yo... yo no debo estar contigo, aunque el rey y la reina hayan muerto, tú sigues siendo alguien más…- Lo interrumpo
-No, ¿Dónde puedo encontrarte Ethan?- Le pregunto
-Creo que no sería correcto- Contesta
-¿Y que es correcto?- Rebato su respuesta
-Soy el hijo del herrero y trabajo con el todos los días- Dice mientras mira al piso sobándose las manos.
-Rosalie. Un placer y gracias- En eso un rechinido anuncia que la puerta está a punto de abrirse, frente a nosotros, él corre haciéndome una señal con una mano para despedirse mientras se pierde entre la noche y desaparece a la luz de la luna.
No sé porque corrió, supongo que se imaginó que me iría mal si me encontraban con él. Efectivamente esa noche me regañaron hasta que grité basta y corrí a encerrarme en mi alcoba. Solo Myrtle sabe que sucedió realmente esa noche. Al día siguiente, fui a la Terna con la escusa de que compraría algunos frutos que no se consiguen en otros lugares, acepte que Myrtle y un guardia, Chart, el novio de Myrtle, me acompañaran, yo les dije que se "perdieran" por un momento, y fue cuando me encontré de nuevo con Ethan, con el sudor y su perchero de trabajo que lo hacían ver más encantador y fuerte. Muchas visitas a escondidas, paseos y días en el arroyo, que se hizo nuestro lugar favorito, hicieron a Ethan el amor de mi vida y yo lo soy también para él.
-Buenos días Princesa- Dice Myrtle
-No me digas princesa, ya lo sabes- Esbozo una sonrisa, porque sé que Myrtle lo hace en broma.
-Aquí tienes, para que termines de despertarte lavándote la cara- Dice mientras pone la bandeja con el agua, las toallas y el asqueroso jabón sobre el baúl que se encuentra delante de la cama.
De pronto levanta la vista y se pone seria, yo volteo a la puerta y es Bertha, la otra mucama, ella es la mano derecha de Mrs. Kira, la que le cuenta todo y nos ve con envidia u odio a nosotras, ella no soporta que sea tan amiga de Myrtle. Ella entra sin pedir permiso y el aire se torna denso.
-Mrs. Kira te espera en el salón, dice que bajes cuando puedas- Dice mirando a la pared.
Yo volteo a ver a Myrtle y ella mueve levemente la cabeza para indicarme que está casi tan desconcertada como yo. Bajo de inmediato y abro la puerta de madera obscura haciendo un inevitable sonido que se retumba en todo el gran salón, veo por detrás del sillón y sobresale el clásico sombrero de Mrs. Kira quien me dice:
-Siéntate Ross, necesito hablar contigo- Lo dice en un tono lúgubre.
Última edición por TCastle el Dom 30 Dic 2012, 1:09 am, editado 2 veces
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Chiara_ Lun 16 Jul 2012, 11:12 pm
Hola soy tu nueva y fiel lectora (: Va eso lo dice el destino (? Jjaj bueno me llamo Chiara y soy de Argentina.... Me gusto tu nove, te juro que cuando leí el titulo dije una típica novela pero igual la abrí, y me sorprendí no era así, Asi que aca estare yo esperando un nuevo capitulo.
Chau y saludos desde Argentina :)
PD: podrias cambiar la letra se me complico el tema de leer (:
Never stop being what you are by someone else
Chau y saludos desde Argentina :)
PD: podrias cambiar la letra se me complico el tema de leer (:
Never stop being what you are by someone else
Chiara_
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Lun 16 Jul 2012, 11:29 pm
Gracias por leer!! pensé que nadie mas la leeria, jajaja tienes un nombre hermoso Chiara♥ y perdon por la letra, esta muy brillante y con el fondo negro daña la vista, pero soy nuevo en esto y no sé muy bien como editarlo, trataré de hacerlo:)
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Chiara_ Lun 16 Jul 2012, 11:50 pm
No es nada, yo te tendria que decirte las gracias porque por fin encontre una novela atipica! Jjaja y gracias por lo del nombre...OneTono escribió:Gracias por leer!! pensé que nadie mas la leeria, jajaja tienes un nombre hermoso Chiaray perdon por la letra, esta muy brillante y con el fondo negro daña la vista, pero soy nuevo en esto y no sé muy bien como editarlo, trataré de hacerlo:)
Tengo una curiosidad como te llamas? y de donde sos?
Porque creo que OneTono no te dejarian ponerlo en el documento.. Jjaja
Jjaja y me gusta comoo escribes, el tema de la letra no importa, ya aprenderas como mi abuelita una ves me dijo "de los errores se aprende" (? Jjaja re que saltaba con cualquiera. Y si quieras algun consejo no lo dudes preguntamelo ;)
Saludoss
All have a phrase, I also want have one
Chiara_
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Lun 16 Jul 2012, 11:59 pm
Chiara^^ escribió:No es nada, yo te tendria que decirte las gracias porque por fin encontre una novela atipica! Jjaja y gracias por lo del nombre...OneTono escribió:Gracias por leer!! pensé que nadie mas la leeria, jajaja tienes un nombre hermoso Chiara
Tengo una curiosidad como te llamas? y de donde sos?
Porque creo que OneTono no te dejarian ponerlo en el documento.. Jjaja
Jjaja y me gusta comoo escribes, el tema de la letra no importa, ya aprenderas como mi abuelita una ves me dijo "de los errores se aprende" (? Jjaja re que saltaba con cualquiera. Y si quieras algun consejo no lo dudes preguntamelo ;)
Saludoss
All have a phrase, I also want have one
Gracias y mi nombre es Antonio, y soy de mexico:) dime Tony o Toño como gustes:)
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Chiara_ Mar 17 Jul 2012, 1:10 am
Tony entonces, pensé que había mujeres solamente en el foro, pero me equivoque Jjaj y tambien uno de los primeros chicos que por fin escriben bienn ^^ Jjaja..
Vivis en Mexico, debe ser lindo alla, a mi me gusta la comida de alla (: Pregunta que hora es exactamente alla?
Vivis en Mexico, debe ser lindo alla, a mi me gusta la comida de alla (: Pregunta que hora es exactamente alla?
Chiara_
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Mar 17 Jul 2012, 1:11 am
Chiara^^ escribió:Tony entonces, pensé que había mujeres solamente en el foro, pero me equivoque Jjaj y tambien uno de los primeros chicos que por fin escriben bienn ^^ Jjaja..
Vivis en Mexico, debe ser lindo alla, a mi me gusta la comida de alla (: Pregunta que hora es exactamente alla?
Son las 2:10 y es verano:D
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Chiara_ Mar 17 Jul 2012, 1:42 am
Que verano? Aca es invierno y son las 4:40, Jjaa estoy un poco vicida con la computadora creo que te diste cuenta, pero la cosa es que aca estamos en vacaciones de invierno y ahora mismo esta helando afuera.
Otra pregunta sos Direction boy o como se diga?
Otra pregunta sos Direction boy o como se diga?
Chiara_
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Mar 17 Jul 2012, 1:58 am
Pues nosotros estamos en vacaciones de Verano y si, si soy Directioner boy
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Chiara_ Mar 17 Jul 2012, 2:03 am
Wii por fin conocí a uno Jjaj.. Yo también soy Directioner..
Ah me estaba llendo de mi papel de lectora, Seguila La novela por que quiero saber que segui Jjjaj esta interesante la cosa (?
Ah me estaba llendo de mi papel de lectora, Seguila La novela por que quiero saber que segui Jjjaj esta interesante la cosa (?
Chiara_
Re: La Reina Sin Trono
por Dante_Locke Lun 13 Ago 2012, 3:52 pm
Un gusto saber que no soy el único hombre (ni tampoco mexicano) en este foro, Toño. Y debo decir que escribes muy bien. Seguro que ya llevas experiencia. Bueno, ha sido también carente de errores por qué escribir en presente ahorra muchas tildes. El único error que he encontrado ha sido “escuche” que debió haber sido “escuché”. Fura de eso todo ha sido perfecto. La descripción que manejas en tu narrativa es muy profesional, aunque debes trabajar en un poco en esos diálogos, no terminan de gustarme.
Soy Fan de las novelas épicas. Es muy pronto para asegurarme que esta sea una novela del ese género, así que preguntaré ¿En qué época está ambientada?
Eso es todo por ahora. Debo decirte ¡Animo! A pesar de ser hombres también podemos hacer románticas escenas con personajes femeninas, después de todo Shakespeare fue una hombre, jeje. Te seguiré de cerca, cualquier duda o pregunta con gusto. Escribo desde hace 4 años, así que ya tengo algo de experiencia para compartir. Aunque tú no necesitas casi nada.
Soy Fan de las novelas épicas. Es muy pronto para asegurarme que esta sea una novela del ese género, así que preguntaré ¿En qué época está ambientada?
Eso es todo por ahora. Debo decirte ¡Animo! A pesar de ser hombres también podemos hacer románticas escenas con personajes femeninas, después de todo Shakespeare fue una hombre, jeje. Te seguiré de cerca, cualquier duda o pregunta con gusto. Escribo desde hace 4 años, así que ya tengo algo de experiencia para compartir. Aunque tú no necesitas casi nada.
Dante_Locke
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Dom 30 Dic 2012, 12:42 am
Dante_Locke escribió:Un gusto saber que no soy el único hombre (ni tampoco mexicano) en este foro, Toño. Y debo decir que escribes muy bien. Seguro que ya llevas experiencia. Bueno, ha sido también carente de errores por qué escribir en presente ahorra muchas tildes. El único error que he encontrado ha sido “escuche” que debió haber sido “escuché”. Fura de eso todo ha sido perfecto. La descripción que manejas en tu narrativa es muy profesional, aunque debes trabajar en un poco en esos diálogos, no terminan de gustarme.
Soy Fan de las novelas épicas. Es muy pronto para asegurarme que esta sea una novela del ese género, así que preguntaré ¿En qué época está ambientada?
Eso es todo por ahora. Debo decirte ¡Animo! A pesar de ser hombres también podemos hacer románticas escenas con personajes femeninas, después de todo Shakespeare fue un hombre, jeje. Te seguiré de cerca, cualquier duda o pregunta con gusto. Escribo desde hace 4 años, así que ya tengo algo de experiencia para compartir. Aunque tú no necesitas casi nada.
No sé qué decir ante semejante comentario, la verdad me llena de un " no sé qué" el leer este comentario y lo siento, hasta ahora es que estoy leyendo este comentario, muchas gracias, no sé qué más decir, me dejo sin palabras. Gracias.
Por cierto, la época en la que se desarrolla la historia es a finales del siglo XV.
Última edición por TCastle el Dom 30 Dic 2012, 12:46 am, editado 1 vez
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Dom 30 Dic 2012, 12:45 am
CAPITULO 2
En ese momento mi cabeza era un mar de pensamientos cuyas olas chocaban unas entre otras creándome ideas de lo que Mrs. Kira me quería decir, pensaba que seguro alguien pudo haberle contado lo mío con Ethan, no sospecho de Myrtle, pero sí de Bertha, pero quizá sea de otra cosa como que ha descubierto que he ido a la Terna sola y sin permiso.
-Siéntate, por favor, vamos- Me insiste Mrs. Kira. Yo accedo a sentarme en el polvoriento y viejo sillón frente a ella.
-Y bien, que pasó, ¿de qué me quería hablar?- pregunto un poco nerviosa, mientras miro como esta vestida, con su clásico sombrero blanco con un lazo colgando de él, y un vestido rosa pastel con muchos holanes y muy voluminoso.
-Bertha puedes retirarte, gracias- le dice a la odiosa mucama quien esta parada en la puerta deseando haberse quedado a escuchar toda la conversación, de seguro que se pondrá a escuchar tras la puerta, pero por el grosor de esta no podrá saber de lo que hablamos aquí dentro.
-Ahora si podemos hablar- me dice acomodándose el sombrero. - Como podrás saber, ya se acerca tu aniversario número 18, y por ende, podrías tomar el trono.
-Lo sé, pero usted más que nadie sabe que no tengo trono al cual acceder.- Le contesto mientras recuerdo que cuando mi padre era el rey, se caso con mi mama después de ser coronado, pues como era hombre se le permitió. Era un reino muy feliz, ya que estaban conformes con las cosechas y el reparto de tierras y actividades, mi madre se encargaba de cuidar a los enfermos, y mi padre siempre al mando, pero un día un país vecino le declaró la guerra, nunca supe cual fue la razón, cuando esto sucedió yo tenía 7 años de edad, él en ese entonces era joven y fuerte así que accedió a ir a la guerra, él nunca iba a dejar a sus súbditos solos. Dos semanas después llegaron a las puertas del castillo alrededor de 20 hombres sucios y malheridos, llenos de sangre seca y lodo, recuerdo que uno de ellos entro al castillo y pidió hablar con mi madre, ella me dijo que me regresara al cuarto, fingí irme y me escondí detrás de una cortina enorme que se encontraba al fondo de la habitación cerca de la puerta, cuando vi que el hombre sacó de una bolsa, que colgaba de su hombro, la corona de mi padre y mientras se la mostraba a mi madre se incó y bajó la cabeza, ella llevó su mano derecha al corazón, y volteo la mirada mientras estalló en llanto. Comprendí así que mi padre había muerto a pesar de mi corta edad, pues sabía que un rey nunca se debe separar de su corona y menos dejar que alguien más la traiga consigo al menos que este muera.
Mi madre fue muy fuerte y cuidó de mi y de sus súbditos desahuciados, pues esos 20 hombres fueron los únicos que llegaron con vida de un gran ejercito que partió; ella siguió ayudando a los enfermos y fue así como murió, me imagino que fue a causa de una enfermedad a la que se debió de exponer, en realidad nunca supe por qué murió.
Al morir mi madre yo tenía apenas 10 años y no era lo suficientemente mayor para casarme o para subir al trono, así que uno de los dos hermanos de mi padre tomó el poder. Es la persona más soberbia, déspota y desmoralizada que he conocido, lo odio desde que tengo memoria, siempre envidió a mi padre en todos los aspectos, es todo lo contrario a lo que alguien espera de un buen rey como mi padre. Sin embargo a pesar de ser el rey, mi abuela le pidió que construyera otro castillo lejos, muy lejos de este, él acepto porque es tan altanero que este se le hizo muy poca cosa. Él no pudo tener hijos y ahora que es viejo no sabe a quién heredarle el trono.
-Claro que si hay una corona, y esa te pertenece originalmente- Dice Mrs. Kira sacándome de mis pensamientos y poniéndome de vuelta a la realidad.
-¿De qué habla Mrs. Kira?- Creo que se refiere a mi tío Ezshrael, pero en todo caso los que podrían heredar el trono son sus sobrinos, los hijos del otro hermano de mi padre y no yo que lo odio y lo sabe.
-Mira esto, llegó en la mañana, es del castillo real.- Dice mientras pone una carta sobre la pequeña mesa que está en medio de nosotras, lo tomo y lo saco la carta del sobre con el sello que efectivamente tiene el símbolo de la familia real y no el de mi padre. Lo leo en mi mente:
"Querida Rosalie Lohundreff :
Como hija legítima de Elliot Lohundreff, anterior rey de Neferia, por ende perteneciente a la familia real, se le permite anunciar, que por motivos de fuerza mayor, el rey Ezshrael heredara su trono en vida de no ser así, el trono sería elegido a votación del publico o en una justa.
Enterada de lo dicho, usted, única sobrina del rey Ezshrael, a la par de sus primos William, y su hermano mayor Harold hijos de Eristeneo y James Cornuphic hijo del conde Alejandris de Rathum.
La decisión será tomada dentro de 2 meses, partiendo desde hoy mismo, en ese lapso, el rey tomara en cuenta aspectos valiosos y cruciales para su decisión.
Larga vida al rey Ezshrael."
Dejo la carta, y trago saliva mientras miro hacia ella aún incrédula, en este momento mil preguntas se leen en mi cabeza, tratando de buscar la explicación de lo que acabo de leer; guardo silencio y Mrs. Kira me deja meditar callándose hasta que interrumpe.
-Ahora...- La interrumpo
-¿Por qué yo?, a caso no me odia tanto como yo a él, ¿que no es William el favorito de todo el pueblo inclusive de él? y ¿por qué aparece el nombre del hijo del primer conde?.-Le arrebato las palabras de la boca callándola con mis preguntas.
-Escucha- Dice en tono serio, acomodándose en el sillón- Tu tienes el derecho de disputarte por el trono, tanto como lo tiene William y Harold por ser sobrinos legítimos del Rey, y en cuanto a James, de seguro es porque el conde Alejandris es la mano derecha del rey.- Contesta con un tono de aliento hacia mí.
-Aun así, yo no quiero ser reina y lo más seguro es que no lo logre, no sé ni porque se molestaron en enviarme la maldita carta- En realidad creo tener una idea de el por qué me enviaron la carta, de seguro que fue para hacerme enojar ya que no iba a ganar nada.
-Quien dice que no puedes serlo- Me dice, pero no es pregunta
-¡Yo!- Elevo la voz un poco.
-Serás la reina y tienes que casarte.- Ya veo a donde va todo esto de la fiesta, no es más una excusa para que alguien me pida matrimonio o más bien que me obliguen a casarme con él.
-Por eso es el apuro de la fiesta- Le digo
-No, la fiesta es cosa aparte, pero de seguro casarte es uno de los aspectos que te tomaran en cuenta a ti por ser mujer.- ¡Claro!, pues por ser mujer tengo que casarme para aceptar la corona, todo lo contrario de los privilegios que goza un hombre.
-Pues no quiero fiesta, no quiero boda y no quiero la dichosa corona.- Le digo mientras me levanto molesta del mueble, pero sin irme.
-Pues tendrás fiesta, boda y con eso tendrás la corona, ya que con una fiesta te ganaras al pueblo.- Es cierto, hacer una fiesta es invitar a medio pueblo, y como hace mucho que no hay una.
-No accederé a la fiesta y no tiene caso contraer matrimonio, lo más probable es que no me hereden nada y quede como una estúpida.- Ahora si me dispongo a salir del gran salón.
-Pues como tu decidas, pero quiero que sepas que el dinero de tu padre tarde o temprano se acabara al igual que tu juventud y belleza.- Me dice sin siquiera pararse. Salgo del salón y efectivamente Bertha estaba agachada con una oreja pegada a la puerta y al verme reacciona parándose y poniéndose recta como si nada hubiera pasado.
Al llegar a mi cuarto notó que Myrtle no está, pero ha dejado la charola, mojo una toalla, le retiro el exceso de agua exprimiéndola en el mismo tazón y me la llevo al rostro, la coloco en la bandeja y me dirijo al cuarto de baño donde Myrtle ha dejado la tina con agua y mis objetos de baño, de seguro fue ella, me desvisto dejando caer la bata de seda que llevo puesta, meto un dedo a la tina y el agua aun sigue tibia, me meto despacio a esta y antes de bañarme poso mi cabeza sobre la orilla de la tina y cierro los ojos, no para dormirme sino para meditar sobre todo lo que pasó en este día; lo de mi aniversario de los 18, la disputa por la corona y en William que de seguro ha de estar brincando por todas las habitaciones de la casa real, donde habita mi tío Eristeneo, su esposa, su otro hijo Harold y donde antes vivía mi abuela.
Es más probable que William gané, él es más popular y el preferido del rey Ezshrael, mientras que Harold a pesar de ser el mayor, siempre fue sumiso y lo hacen menos que William, "el Perfecto". Todo eso me da vueltas en la cabeza, cuando abro los ojos, mi cuerpo está hecho una pasa, me salgo del agua que ahora está a temperatura ambiente y me cubro con la bata de la mañana para dirigirme al ropero donde elijo un vestido como los que uso frecuentemente, es verde como el follaje de las hojas de los arboles en plena primavera, con un cordón dorado que rodea mi cintura terminando con un nudo bajo mi espalda, el vestido es de tirantes y no llega al cuello, me trenzo el cabello, y me pongo unas zapatillas sin tacón.
Bajo las escaleras al patio trasero a practicar tiro con arco, desde que tenía 12 años quise enseñarme a disparar, luche mucho contra Mrs. Kira porque según ella no es algo que una mujer deba hacer y menos una princesa. Ya tengo varios años en los que no necesito maestro. Uso el arco para divertirme y en ocasiones como esta olvidarme de los problemas. No disparo a cosas en movimiento, solo a dianas.
Cuando llego, está Myrtle con el arco y el carcaj de flechas sobre una mesa, creo que me conoce tanto que se anticipa a lo que quiero hacer, o quizá yo sea tan predecible o rutinaria. Le cuento todo lo sucedido mientras disparo furiosa.
-Y bien, ¿Por qué no hacer la fiesta?- Dice Myrtle, rompiendo el silencio que reinó durante unos minutos.
-Porque de seguro Mrs. Kira invitará a algún pretendiente y lo obligará a que me pida matrimonio.- Contesto tensando el arco.
-Invita a Ethan.
En ese momento mi cabeza era un mar de pensamientos cuyas olas chocaban unas entre otras creándome ideas de lo que Mrs. Kira me quería decir, pensaba que seguro alguien pudo haberle contado lo mío con Ethan, no sospecho de Myrtle, pero sí de Bertha, pero quizá sea de otra cosa como que ha descubierto que he ido a la Terna sola y sin permiso.
-Siéntate, por favor, vamos- Me insiste Mrs. Kira. Yo accedo a sentarme en el polvoriento y viejo sillón frente a ella.
-Y bien, que pasó, ¿de qué me quería hablar?- pregunto un poco nerviosa, mientras miro como esta vestida, con su clásico sombrero blanco con un lazo colgando de él, y un vestido rosa pastel con muchos holanes y muy voluminoso.
-Bertha puedes retirarte, gracias- le dice a la odiosa mucama quien esta parada en la puerta deseando haberse quedado a escuchar toda la conversación, de seguro que se pondrá a escuchar tras la puerta, pero por el grosor de esta no podrá saber de lo que hablamos aquí dentro.
-Ahora si podemos hablar- me dice acomodándose el sombrero. - Como podrás saber, ya se acerca tu aniversario número 18, y por ende, podrías tomar el trono.
-Lo sé, pero usted más que nadie sabe que no tengo trono al cual acceder.- Le contesto mientras recuerdo que cuando mi padre era el rey, se caso con mi mama después de ser coronado, pues como era hombre se le permitió. Era un reino muy feliz, ya que estaban conformes con las cosechas y el reparto de tierras y actividades, mi madre se encargaba de cuidar a los enfermos, y mi padre siempre al mando, pero un día un país vecino le declaró la guerra, nunca supe cual fue la razón, cuando esto sucedió yo tenía 7 años de edad, él en ese entonces era joven y fuerte así que accedió a ir a la guerra, él nunca iba a dejar a sus súbditos solos. Dos semanas después llegaron a las puertas del castillo alrededor de 20 hombres sucios y malheridos, llenos de sangre seca y lodo, recuerdo que uno de ellos entro al castillo y pidió hablar con mi madre, ella me dijo que me regresara al cuarto, fingí irme y me escondí detrás de una cortina enorme que se encontraba al fondo de la habitación cerca de la puerta, cuando vi que el hombre sacó de una bolsa, que colgaba de su hombro, la corona de mi padre y mientras se la mostraba a mi madre se incó y bajó la cabeza, ella llevó su mano derecha al corazón, y volteo la mirada mientras estalló en llanto. Comprendí así que mi padre había muerto a pesar de mi corta edad, pues sabía que un rey nunca se debe separar de su corona y menos dejar que alguien más la traiga consigo al menos que este muera.
Mi madre fue muy fuerte y cuidó de mi y de sus súbditos desahuciados, pues esos 20 hombres fueron los únicos que llegaron con vida de un gran ejercito que partió; ella siguió ayudando a los enfermos y fue así como murió, me imagino que fue a causa de una enfermedad a la que se debió de exponer, en realidad nunca supe por qué murió.
Al morir mi madre yo tenía apenas 10 años y no era lo suficientemente mayor para casarme o para subir al trono, así que uno de los dos hermanos de mi padre tomó el poder. Es la persona más soberbia, déspota y desmoralizada que he conocido, lo odio desde que tengo memoria, siempre envidió a mi padre en todos los aspectos, es todo lo contrario a lo que alguien espera de un buen rey como mi padre. Sin embargo a pesar de ser el rey, mi abuela le pidió que construyera otro castillo lejos, muy lejos de este, él acepto porque es tan altanero que este se le hizo muy poca cosa. Él no pudo tener hijos y ahora que es viejo no sabe a quién heredarle el trono.
-Claro que si hay una corona, y esa te pertenece originalmente- Dice Mrs. Kira sacándome de mis pensamientos y poniéndome de vuelta a la realidad.
-¿De qué habla Mrs. Kira?- Creo que se refiere a mi tío Ezshrael, pero en todo caso los que podrían heredar el trono son sus sobrinos, los hijos del otro hermano de mi padre y no yo que lo odio y lo sabe.
-Mira esto, llegó en la mañana, es del castillo real.- Dice mientras pone una carta sobre la pequeña mesa que está en medio de nosotras, lo tomo y lo saco la carta del sobre con el sello que efectivamente tiene el símbolo de la familia real y no el de mi padre. Lo leo en mi mente:
"Querida Rosalie Lohundreff :
Como hija legítima de Elliot Lohundreff, anterior rey de Neferia, por ende perteneciente a la familia real, se le permite anunciar, que por motivos de fuerza mayor, el rey Ezshrael heredara su trono en vida de no ser así, el trono sería elegido a votación del publico o en una justa.
Enterada de lo dicho, usted, única sobrina del rey Ezshrael, a la par de sus primos William, y su hermano mayor Harold hijos de Eristeneo y James Cornuphic hijo del conde Alejandris de Rathum.
La decisión será tomada dentro de 2 meses, partiendo desde hoy mismo, en ese lapso, el rey tomara en cuenta aspectos valiosos y cruciales para su decisión.
Larga vida al rey Ezshrael."
Dejo la carta, y trago saliva mientras miro hacia ella aún incrédula, en este momento mil preguntas se leen en mi cabeza, tratando de buscar la explicación de lo que acabo de leer; guardo silencio y Mrs. Kira me deja meditar callándose hasta que interrumpe.
-Ahora...- La interrumpo
-¿Por qué yo?, a caso no me odia tanto como yo a él, ¿que no es William el favorito de todo el pueblo inclusive de él? y ¿por qué aparece el nombre del hijo del primer conde?.-Le arrebato las palabras de la boca callándola con mis preguntas.
-Escucha- Dice en tono serio, acomodándose en el sillón- Tu tienes el derecho de disputarte por el trono, tanto como lo tiene William y Harold por ser sobrinos legítimos del Rey, y en cuanto a James, de seguro es porque el conde Alejandris es la mano derecha del rey.- Contesta con un tono de aliento hacia mí.
-Aun así, yo no quiero ser reina y lo más seguro es que no lo logre, no sé ni porque se molestaron en enviarme la maldita carta- En realidad creo tener una idea de el por qué me enviaron la carta, de seguro que fue para hacerme enojar ya que no iba a ganar nada.
-Quien dice que no puedes serlo- Me dice, pero no es pregunta
-¡Yo!- Elevo la voz un poco.
-Serás la reina y tienes que casarte.- Ya veo a donde va todo esto de la fiesta, no es más una excusa para que alguien me pida matrimonio o más bien que me obliguen a casarme con él.
-Por eso es el apuro de la fiesta- Le digo
-No, la fiesta es cosa aparte, pero de seguro casarte es uno de los aspectos que te tomaran en cuenta a ti por ser mujer.- ¡Claro!, pues por ser mujer tengo que casarme para aceptar la corona, todo lo contrario de los privilegios que goza un hombre.
-Pues no quiero fiesta, no quiero boda y no quiero la dichosa corona.- Le digo mientras me levanto molesta del mueble, pero sin irme.
-Pues tendrás fiesta, boda y con eso tendrás la corona, ya que con una fiesta te ganaras al pueblo.- Es cierto, hacer una fiesta es invitar a medio pueblo, y como hace mucho que no hay una.
-No accederé a la fiesta y no tiene caso contraer matrimonio, lo más probable es que no me hereden nada y quede como una estúpida.- Ahora si me dispongo a salir del gran salón.
-Pues como tu decidas, pero quiero que sepas que el dinero de tu padre tarde o temprano se acabara al igual que tu juventud y belleza.- Me dice sin siquiera pararse. Salgo del salón y efectivamente Bertha estaba agachada con una oreja pegada a la puerta y al verme reacciona parándose y poniéndose recta como si nada hubiera pasado.
Al llegar a mi cuarto notó que Myrtle no está, pero ha dejado la charola, mojo una toalla, le retiro el exceso de agua exprimiéndola en el mismo tazón y me la llevo al rostro, la coloco en la bandeja y me dirijo al cuarto de baño donde Myrtle ha dejado la tina con agua y mis objetos de baño, de seguro fue ella, me desvisto dejando caer la bata de seda que llevo puesta, meto un dedo a la tina y el agua aun sigue tibia, me meto despacio a esta y antes de bañarme poso mi cabeza sobre la orilla de la tina y cierro los ojos, no para dormirme sino para meditar sobre todo lo que pasó en este día; lo de mi aniversario de los 18, la disputa por la corona y en William que de seguro ha de estar brincando por todas las habitaciones de la casa real, donde habita mi tío Eristeneo, su esposa, su otro hijo Harold y donde antes vivía mi abuela.
Es más probable que William gané, él es más popular y el preferido del rey Ezshrael, mientras que Harold a pesar de ser el mayor, siempre fue sumiso y lo hacen menos que William, "el Perfecto". Todo eso me da vueltas en la cabeza, cuando abro los ojos, mi cuerpo está hecho una pasa, me salgo del agua que ahora está a temperatura ambiente y me cubro con la bata de la mañana para dirigirme al ropero donde elijo un vestido como los que uso frecuentemente, es verde como el follaje de las hojas de los arboles en plena primavera, con un cordón dorado que rodea mi cintura terminando con un nudo bajo mi espalda, el vestido es de tirantes y no llega al cuello, me trenzo el cabello, y me pongo unas zapatillas sin tacón.
Bajo las escaleras al patio trasero a practicar tiro con arco, desde que tenía 12 años quise enseñarme a disparar, luche mucho contra Mrs. Kira porque según ella no es algo que una mujer deba hacer y menos una princesa. Ya tengo varios años en los que no necesito maestro. Uso el arco para divertirme y en ocasiones como esta olvidarme de los problemas. No disparo a cosas en movimiento, solo a dianas.
Cuando llego, está Myrtle con el arco y el carcaj de flechas sobre una mesa, creo que me conoce tanto que se anticipa a lo que quiero hacer, o quizá yo sea tan predecible o rutinaria. Le cuento todo lo sucedido mientras disparo furiosa.
-Y bien, ¿Por qué no hacer la fiesta?- Dice Myrtle, rompiendo el silencio que reinó durante unos minutos.
-Porque de seguro Mrs. Kira invitará a algún pretendiente y lo obligará a que me pida matrimonio.- Contesto tensando el arco.
-Invita a Ethan.
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por TCastle Miér 02 Ene 2013, 1:26 am
CAPITULO 3
La flecha se soltó de mi mano y salió disparada del arco clavándose en un árbol, mientras volteo a ver a Myrtle.
-¿Estás loca o qué?-Le digo- Todos se darían cuenta de que no pertenece a la alta sociedad y no podría estar con él sin levantar sospechas.
-Solo digo que si nadie logra conocer a nadie...-En ese momento llega Mrs. Kira.
-Necesito que te decidas sobre si harás la fiesta o no- Dice Mrs. Kira quien espera mi respuesta.
-Dame unos cuantos minutos a solas en mi habitación.- Le digo, pongo el arco y el carcaj en la mesa- Nos vemos Myrtle.- Ella solo mueve la mano despidiéndose y yo entro al castillo sin que Mrs. Kira me siga, seguro se quedara hablando con Myrtle, espero que no haya escuchado la conversación y quiera sacarle la sopa, de ser así debo preocuparme, Mrs. Kira tiene métodos infalibles para hacer que las personas hablen, además se trata de Myrtle, será fácil hacer que cante como un canario.
En el camino pienso en lo que me dijo Myrtle, sobre que nadie logré conocer a nadie, quizá quiera que la fiesta sea sin luz o que todos estén... ¡Claro! Antifaces, sí todos tienen antifaces nadie sabrá quien es quien, pienso en agradecerle a Myrtle, pero me detengo antes de entrar a mi cuarto y regreso a decirle a Mrs. Kira que si acepto la fiesta pero con mis condiciones.
-Mrs. Kira-Le digo mientras entro al gran salón donde se encuentra ella.- Solo quería decirle que si acepto la fiesta- le digo y ella que se encontraba mirando los retratos de mis padres voltea a verme.
-Me parece excelso, empecemos a planificarla- Dice y empieza a caminar de un lado a otro diciendo una lista de lo que hay que planear mientras yo me quedo parada siguiéndola con la vista.
-Pero con una condición- Interrumpo su lista de quehaceres.
-¿Cuál es?- Dice mientras se detiene a verme.
-Que la fiesta sea de antifaces.- Le digo esperando un "no" por respuesta.
-Me encanta, es más, ahora mismo le enviaré una carta a Finick, el pintor para que haga los antifaces y las decoraciones, ¡Todo será excelso!-Dice mientras sale del gran salón.
Me quedo para admirar los retratos, en especial el de mi madre. Pienso en que si ella viviera estaría de acuerdo en lo mío con Ethan.
Cuando era niña, mi abuela me contaba muchas anécdotas, una vez yo le pregunté cómo se habían conocido mis padres, ella suspiró y me conto una historia.
"Un día de primavera, un apuesto príncipe salió a cazar aves por diversión, cuando se acercó al bosque escucho una mujer cantar con una voz melodiosa, mientras los pájaros se detenían por miles en las ramas de los arboles a escucharla cantar, el preparó su ballesta detrás de unos arbustos para disparar a una calandria que gustosa trinaba al unisonó con aquella joven, cuando la mujer se puso en medio de aquella ave y la punta de la ballesta, el bajo el arma y la miro a los ojos, verdes como el plumaje de algunos pájaros que allí se encontraban, se enamoro de inmediato de ella y ella de él", desde ese entonces mi papa le decía como una forma de cariño a mi mamá "Mi pequeña calandria".
Mi abuela me decía que mi padre nunca aceptó casarse con las hijas de los condes o princesas de otros reinos, él sólo tenía ojos para una solo persona, mi madre. Ella era hija de una curandera del pueblo; se quedó huérfana cuando tenía aproximadamente mi edad, mi padre casi pierde el trono por casarse con ella, pero él fue muy ingenioso y al lado de mi abuela le enseñaron modales y la hicieron pasar por una princesa, no fue difícil por la belleza de mi madre.
Yo me parezco mucho a ella, el pelo castaño y ondulado, su rostro y piel aperlada, salvo sus ojos porque los míos son color café obscuro. Quien diría que la historia se repite.
-No pude evitar escuchar la conversación-Dice Myrtle
-Oh, qué bueno que estas aquí, necesito hablar contigo- Le digo después de voltear a verla y dejar de mirar el retrato.
-Pues creo que tendrá que esperar querida, necesito hablar con Rosalie- Le dice Mrs. Kira a Myrtle y esta se va de la habitación- Debemos ir a la Casa real, para personalmente invitar a todos, con esto les lanzaras un dardo a la yugular.
-Tienes razón, yo personalmente quiero hablar con William.- Le digo y ella se sorprende al ver mi reacción.
-Me perece excelso, dile a Myrtle para que nos acompañe.- Dice sin poder ocultar una sonrisa, hace mucho que no veía una en su cara, supongo que le alegra saber que no me rendiré y daré mi lucha por ganar la corona.
Le digo a Myrtle y subo para entrar a mi cuarto, ella ha alistado mi bata de seda para dormir, decido tomar un baño antes de acostarme en la cama. Supongo que iremos en la mañana, así que dejo que el movimiento de las cortinas, las cuales mueve el aire me duerma.
Una vez en la entrada, al día siguiente, ya lista con mi pelo suelto y ondulado que me llega hasta la mitad de la espalda, un vestido no tan esponjado pero lujoso en un tono amarillo claro y sin mangas, espero a Mrs. Kira junto con Myrtle. Después de unos minutos baja con un vestido exageradamente esponjado, lleno de holanes y a juego con el lazo de su sombrero que tapa parte de su peinado pero dejando escapar sus caireles, lleva puesto un collar de oro con incrustaciones de rubí que mi madre le regaló en una cena de navidad. Combina con los aretes, pero no podría faltar su excesivo maquillaje, tiene los labios más rojos que manzanas y siempre se pinta un lunar falso en el pómulo izquierdo.
-A las 10:00 en punto estará el carruaje- Dice bajando el ultimo escalón.
-¿No pasaremos a ningún lugar antes?- Digo aunque sé la respuesta, pero hace 4 días que no veo a Ethan.
-¿Se supone que lo deberíamos de hacer?- Dice un poco hostil, Myrtle y yo solo cruzamos miradas- Andando, que Chart nos espera.- En Myrtle se dibuja una sonrisa picara y baja la mirada.
Pasamos por la zona de casas de Neferia, es un lugar donde los comerciantes ricos, condes, duques y personas adineradas viven, al final de la calle principal esta la Casa real, no es un castillo pero es lo suficientemente grande y lujosa para que vivan hermanos de reyes y sus familias.
-¿Me permite?- Le dice Chart con una sonrisa de amor en la cara a Myrtle al mismo tiempo que le ofrece su mano para ayudarla a bajar.
-Usted también mi señora- Me dice Chart después de ayudar a Myrtle, yo muevo mi mano y hago a un lado la de Chart y doy un salto del carruaje al suelo haciendo enojar a Mrs. Kira, quien solo bufa y acepta la ayuda de él.
-Tienes que dejar de ser menos burda y más absurda- Me dice Mrs. Kira al oído. Que querrá decir con más absurda, quizá deba actuar más falsa e hipócrita para simpatizar más con todos aquí en la casa,
Cuando entramos todos estaban mirándonos, mi tío Eristeneo, su esposa Suzanne, mis primos William y Harold y este último con su novia Amanda, noto como William me miraba con un poco de odio con media sonrisa pintada en su bello rostro.
Después de todo ese desfile de miradas acosadoras pasamos a la cena donde Mrs. Kira soltó la noticia.
-Como sabrán se acerca el aniversario número 18 de Rosalie, y pues planeábamos hacer una fiesta.-Dice y Suzanne se atraganta un poco con la comida tosiendo varias veces.
-Me parece perfecto, nosotros podríamos aportar algo de ser necesario- Dice mi tío.
-Genial, conoceremos a los amigos de Ross- Dice Harold en un tono alegre
-¿Te refieres a la sirvienta, el chofer y a toda la servidumbre del castillo?- Dice William en un tono sarcástico y burlón.
-Sí me permiten, yo iré al baño- Digo y me levanto de la silla dejando la servilleta que estaba en mis piernas sobre el plato con comida.
Al salir del baño estaba William recargado a un lado de la puerta, él es muy apuesto, sus ojos verdes y su hermoso cabello con rizos y una sonrisa perversa pero encantadora, si no fuera porque es mi primo y estoy enamorada de Ethan de seguro también estaría tras de él.
-Pasemos al cuarto, necesito hablar contigo.- Me dice y abre una puerta del que quizá sea su cuarto.
-Sobre qué quieres hablar- Le digo y me siento en un sofá que esta frente su cama. Él cierra la puerta.
-Mira Niñita, ni te molestes en hacer tu estúpida fiesta- Se dirige a mí en un tono molesto
-En primera yo hago lo que quiero, y en segunda tienes mi edad así que nunca más me vuelvas a decir niñita.- Le contesto levantándome del sillón.
-Como sea, solo quiero que...- Lo interrumpe alguien que toca la puerta, él la abre y sale para ver quién es.- Esto no se ha quedado así.- Se va de la habitación y luego entra Myrtle sin que la vea William.
-Aquí traigo la bolsa, seguro de que tardara-Dice Myrtle mientras abre un pequeño morral apresuradamente.
Yo meto varios trajes de William, zapatos y gorros con plumas rojas, lo hago tan rápido que no veo como son.
-¿Segura que le quedaran a Ethan?- Dice Myrtle volteando a la puerta mientras sostiene la bolsa.
La flecha se soltó de mi mano y salió disparada del arco clavándose en un árbol, mientras volteo a ver a Myrtle.
-¿Estás loca o qué?-Le digo- Todos se darían cuenta de que no pertenece a la alta sociedad y no podría estar con él sin levantar sospechas.
-Solo digo que si nadie logra conocer a nadie...-En ese momento llega Mrs. Kira.
-Necesito que te decidas sobre si harás la fiesta o no- Dice Mrs. Kira quien espera mi respuesta.
-Dame unos cuantos minutos a solas en mi habitación.- Le digo, pongo el arco y el carcaj en la mesa- Nos vemos Myrtle.- Ella solo mueve la mano despidiéndose y yo entro al castillo sin que Mrs. Kira me siga, seguro se quedara hablando con Myrtle, espero que no haya escuchado la conversación y quiera sacarle la sopa, de ser así debo preocuparme, Mrs. Kira tiene métodos infalibles para hacer que las personas hablen, además se trata de Myrtle, será fácil hacer que cante como un canario.
En el camino pienso en lo que me dijo Myrtle, sobre que nadie logré conocer a nadie, quizá quiera que la fiesta sea sin luz o que todos estén... ¡Claro! Antifaces, sí todos tienen antifaces nadie sabrá quien es quien, pienso en agradecerle a Myrtle, pero me detengo antes de entrar a mi cuarto y regreso a decirle a Mrs. Kira que si acepto la fiesta pero con mis condiciones.
-Mrs. Kira-Le digo mientras entro al gran salón donde se encuentra ella.- Solo quería decirle que si acepto la fiesta- le digo y ella que se encontraba mirando los retratos de mis padres voltea a verme.
-Me parece excelso, empecemos a planificarla- Dice y empieza a caminar de un lado a otro diciendo una lista de lo que hay que planear mientras yo me quedo parada siguiéndola con la vista.
-Pero con una condición- Interrumpo su lista de quehaceres.
-¿Cuál es?- Dice mientras se detiene a verme.
-Que la fiesta sea de antifaces.- Le digo esperando un "no" por respuesta.
-Me encanta, es más, ahora mismo le enviaré una carta a Finick, el pintor para que haga los antifaces y las decoraciones, ¡Todo será excelso!-Dice mientras sale del gran salón.
Me quedo para admirar los retratos, en especial el de mi madre. Pienso en que si ella viviera estaría de acuerdo en lo mío con Ethan.
Cuando era niña, mi abuela me contaba muchas anécdotas, una vez yo le pregunté cómo se habían conocido mis padres, ella suspiró y me conto una historia.
"Un día de primavera, un apuesto príncipe salió a cazar aves por diversión, cuando se acercó al bosque escucho una mujer cantar con una voz melodiosa, mientras los pájaros se detenían por miles en las ramas de los arboles a escucharla cantar, el preparó su ballesta detrás de unos arbustos para disparar a una calandria que gustosa trinaba al unisonó con aquella joven, cuando la mujer se puso en medio de aquella ave y la punta de la ballesta, el bajo el arma y la miro a los ojos, verdes como el plumaje de algunos pájaros que allí se encontraban, se enamoro de inmediato de ella y ella de él", desde ese entonces mi papa le decía como una forma de cariño a mi mamá "Mi pequeña calandria".
Mi abuela me decía que mi padre nunca aceptó casarse con las hijas de los condes o princesas de otros reinos, él sólo tenía ojos para una solo persona, mi madre. Ella era hija de una curandera del pueblo; se quedó huérfana cuando tenía aproximadamente mi edad, mi padre casi pierde el trono por casarse con ella, pero él fue muy ingenioso y al lado de mi abuela le enseñaron modales y la hicieron pasar por una princesa, no fue difícil por la belleza de mi madre.
Yo me parezco mucho a ella, el pelo castaño y ondulado, su rostro y piel aperlada, salvo sus ojos porque los míos son color café obscuro. Quien diría que la historia se repite.
-No pude evitar escuchar la conversación-Dice Myrtle
-Oh, qué bueno que estas aquí, necesito hablar contigo- Le digo después de voltear a verla y dejar de mirar el retrato.
-Pues creo que tendrá que esperar querida, necesito hablar con Rosalie- Le dice Mrs. Kira a Myrtle y esta se va de la habitación- Debemos ir a la Casa real, para personalmente invitar a todos, con esto les lanzaras un dardo a la yugular.
-Tienes razón, yo personalmente quiero hablar con William.- Le digo y ella se sorprende al ver mi reacción.
-Me perece excelso, dile a Myrtle para que nos acompañe.- Dice sin poder ocultar una sonrisa, hace mucho que no veía una en su cara, supongo que le alegra saber que no me rendiré y daré mi lucha por ganar la corona.
Le digo a Myrtle y subo para entrar a mi cuarto, ella ha alistado mi bata de seda para dormir, decido tomar un baño antes de acostarme en la cama. Supongo que iremos en la mañana, así que dejo que el movimiento de las cortinas, las cuales mueve el aire me duerma.
Una vez en la entrada, al día siguiente, ya lista con mi pelo suelto y ondulado que me llega hasta la mitad de la espalda, un vestido no tan esponjado pero lujoso en un tono amarillo claro y sin mangas, espero a Mrs. Kira junto con Myrtle. Después de unos minutos baja con un vestido exageradamente esponjado, lleno de holanes y a juego con el lazo de su sombrero que tapa parte de su peinado pero dejando escapar sus caireles, lleva puesto un collar de oro con incrustaciones de rubí que mi madre le regaló en una cena de navidad. Combina con los aretes, pero no podría faltar su excesivo maquillaje, tiene los labios más rojos que manzanas y siempre se pinta un lunar falso en el pómulo izquierdo.
-A las 10:00 en punto estará el carruaje- Dice bajando el ultimo escalón.
-¿No pasaremos a ningún lugar antes?- Digo aunque sé la respuesta, pero hace 4 días que no veo a Ethan.
-¿Se supone que lo deberíamos de hacer?- Dice un poco hostil, Myrtle y yo solo cruzamos miradas- Andando, que Chart nos espera.- En Myrtle se dibuja una sonrisa picara y baja la mirada.
Pasamos por la zona de casas de Neferia, es un lugar donde los comerciantes ricos, condes, duques y personas adineradas viven, al final de la calle principal esta la Casa real, no es un castillo pero es lo suficientemente grande y lujosa para que vivan hermanos de reyes y sus familias.
-¿Me permite?- Le dice Chart con una sonrisa de amor en la cara a Myrtle al mismo tiempo que le ofrece su mano para ayudarla a bajar.
-Usted también mi señora- Me dice Chart después de ayudar a Myrtle, yo muevo mi mano y hago a un lado la de Chart y doy un salto del carruaje al suelo haciendo enojar a Mrs. Kira, quien solo bufa y acepta la ayuda de él.
-Tienes que dejar de ser menos burda y más absurda- Me dice Mrs. Kira al oído. Que querrá decir con más absurda, quizá deba actuar más falsa e hipócrita para simpatizar más con todos aquí en la casa,
Cuando entramos todos estaban mirándonos, mi tío Eristeneo, su esposa Suzanne, mis primos William y Harold y este último con su novia Amanda, noto como William me miraba con un poco de odio con media sonrisa pintada en su bello rostro.
Después de todo ese desfile de miradas acosadoras pasamos a la cena donde Mrs. Kira soltó la noticia.
-Como sabrán se acerca el aniversario número 18 de Rosalie, y pues planeábamos hacer una fiesta.-Dice y Suzanne se atraganta un poco con la comida tosiendo varias veces.
-Me parece perfecto, nosotros podríamos aportar algo de ser necesario- Dice mi tío.
-Genial, conoceremos a los amigos de Ross- Dice Harold en un tono alegre
-¿Te refieres a la sirvienta, el chofer y a toda la servidumbre del castillo?- Dice William en un tono sarcástico y burlón.
-Sí me permiten, yo iré al baño- Digo y me levanto de la silla dejando la servilleta que estaba en mis piernas sobre el plato con comida.
Al salir del baño estaba William recargado a un lado de la puerta, él es muy apuesto, sus ojos verdes y su hermoso cabello con rizos y una sonrisa perversa pero encantadora, si no fuera porque es mi primo y estoy enamorada de Ethan de seguro también estaría tras de él.
-Pasemos al cuarto, necesito hablar contigo.- Me dice y abre una puerta del que quizá sea su cuarto.
-Sobre qué quieres hablar- Le digo y me siento en un sofá que esta frente su cama. Él cierra la puerta.
-Mira Niñita, ni te molestes en hacer tu estúpida fiesta- Se dirige a mí en un tono molesto
-En primera yo hago lo que quiero, y en segunda tienes mi edad así que nunca más me vuelvas a decir niñita.- Le contesto levantándome del sillón.
-Como sea, solo quiero que...- Lo interrumpe alguien que toca la puerta, él la abre y sale para ver quién es.- Esto no se ha quedado así.- Se va de la habitación y luego entra Myrtle sin que la vea William.
-Aquí traigo la bolsa, seguro de que tardara-Dice Myrtle mientras abre un pequeño morral apresuradamente.
Yo meto varios trajes de William, zapatos y gorros con plumas rojas, lo hago tan rápido que no veo como son.
-¿Segura que le quedaran a Ethan?- Dice Myrtle volteando a la puerta mientras sostiene la bolsa.
TCastle
Re: La Reina Sin Trono
por Filadelfia Jue 27 Mar 2014, 8:26 am
Me gusta la historia, escribís muy bien. Aunque es un poco la típica historia de la chica de clase alta que se enamora de un campesino y se rebela ante la vida que le imponen, la forma en la que presentas a los personajes es muy buena.
Creo que Mrs. Kira tiene una obsesión con la palabra "excelso".
Creo que Mrs. Kira tiene una obsesión con la palabra "excelso".
Filadelfia
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