Finding Myself (Harry Styles, One Direction)

Oh I can’t believe that its so simple
It feels so natural to me - McFly

Habían pasado dos semanas y Nora no había vuelto a ver ni a Tom, ni a su banda, había terminado su ensayo, había ido a clases y sí, había averiguado quienes eran los de la canción.

Resultó ser que sí los conocía solo que no los había reconocido porque en carne y hueso se veían diferentes, eran una de las bandas favoritas de Brooke: McFly. Una vez que Nora los identificó, los nervios habían empezado a consumirla, ellos eran muy conocidos en todo el mundo, eran famosos y talentosos y ¿Quién era ella? Una universitaria sin amigos y sin nada memorable.

Por enésima vez limpió sus manos en su delantal tratando de mantenerse calmada, pero no podía evitarlo, empezó a juguetear con su pelo, el cual tenía amarrado en una coleta para despejarlo de su rostro, ya que odiaba trabajar y que se le viniera encima.

La campana de la puerta sonó y Nora se sobresaltó, pero tan solo era una señora con su hija. Apenas se ubicaron, ella se acercó con premura atenderlas y tomó su orden, dirigiéndose ya con más calma a preparar sus tés. Estaba concentrada en eso que no notó cuando la puerta se abrió de nuevo y dos hombres entraron, ellos la miraron con curiosidad, pero Nora no se dio cuenta, estaba sirviéndoles a las clientas y estaba muy concentrada, así evitaba derramar algo. Cuando terminó les sonrió con dulzura y se dirigía a sentarse en su lugar habitual tras la barra principal, cuando alguien dijo su nombre:

-Hola Nora – Ella se giró bruscamente ante el reconocimiento de la voz y se enfrentó cara a cara con Tom quien estaba sentado en una de las mesas con ¿Dougie? ¿Danny?, Nora había olvidado quien era quien a pesar de que había tratado de memorizar sus nombres y rostros, para no ser la única idiota que no los conociera.
-Oh h-hola – Ella tartamudeó sintiendo sus mejillas enrojecer, trató de cubrirlo sacando su libreta para tomar sus pedidos.
-Mmm, tienen claro que van a ordenar o… - Ella dejó la frase colgando con temor a qué iban a responder ellos y que habían pensado de las ideas al azar que ella había escrito.
-Mmm – dijo Tom - ¿Tienes una carta que nos prestes? – Tranquilizando un poco su acelerado corazón, Nora les sonrió y apuntó la pared tras el mostrador.
-Todo lo que servimos está escrito ahí – los miró sin dejar de sonreír, finalmente, esto era algo que podía hacer sin temor a equivocarse – Y al lado están los precios.
-Ah gracias – dijo el otro hombre, el que estaba sentado frente a Tom – Por qué no te sientas con nosotros mientras tomamos una decisión.
-¿Q-qué? – preguntó Nora con su corazón corriendo salvaje nuevamente. Él mismo le arrastró una silla para que se sentara a su lado y luego le sonrió:
-Soy Danny – Nora estrechó su mano esperando que él no notara que temblaba.
-Y yo soy Tom – dijo él estrechándole su mano también – Espero que recuerdes que fuimos quienes nos robamos tus ideas.
-Por supuesto… – ella empezó a decir y Danny rió.
-¿Ves hombre? Te dije que lo consideraría plagio.
-Quiero decir – añadió rápidamente Nora negando con su cabeza y como consecuencia moviendo su coleta de lado a lado –los recuerdo y no se las robaron, yo las facilité.
-Me alegro de oír eso – dijo Tom echándole una mirada a Danny – Porque gracias a ti pudimos finalizar la canción en la que estábamos trabajando.
-¿En serio? – preguntó Nora feliz de poder haberlos ayudado de alguna manera.
-Sí – respondió Danny – Por lo general escribimos todo nosotros mismos sin recurrir a nadie, pero teníamos un bloqueo.
-Los he tenido también – admitió Nora sonriendo y recordando el día que los conoció, ahora sintiéndose mucho más relajada – Me alegro de haber podido ser de ayuda.
-Por supuesto que sí – dijo Tom sonriendo – Por eso nos estábamos preguntando, si estarías interesada en escribir algunas canciones con nosotros.
-Tú sabes, tus ideas son frescas – la codeó Danny – Y siempre está bien escuchar la opinión de una joven mujer – Ante esto Nora sintió que no solo sus mejillas enrojecían, sino que también su cuello y sus orejas.
-P-pero ustedes son famosos, no necesitan que alguien como yo, que aún estudia, los ayude.
-¿Entonces nos conoces? – Preguntó Tom – el primer día tuve la sensación de que no sabías quiénes éramos.
-No los reconocí al principio, pero luego fui a casa y…
-¿Nos googleaste? – río Danny.
-Sí – respondió Nora compartiendo la sonrisa – Mi amig… Um, una conocida mía los ama.
-Bueno dile gracias de nuestra parte – dijo Danny.

En eso la señora que había venido con su hija y que estaba sentada mesas más allá, la llamó y ella fue a dejarles la cuenta. Nora no podía creer lo que le habían dicho ¿Escribir canciones con ello? Ella nunca había escrito canciones antes, sinceramente ni siquiera sabía cómo hacerlo, no sabía tocar ningún instrumento y ella no era nada especial.

Cuando volvió a acercarse a ellos, Tom y Danny ordenaron un jugo cada uno y una torta de milhojas; y Nora los atendió con calma, Tom hizo que ella se sentara nuevamente con ellos e incluso había comprado esa torta para ella, y Nora simplemente no lo pudo resistir.

-Me quedé pensando en algo – Tom mencionó mientras ella comía - ¿Aún estás en la escuela? – Las mejillas de Nora brillaron escarlata.
-Ehm, no, de hecho estoy en la universidad, este es mi primer año.
-Ah ¿Y qué cursos tomaste? – preguntó Danny sonando curioso.
-Casi puros de literatura y escritura – ella sonrió mientras les contaba – Aún no estoy segura de en qué me quiero especializar.
-Interesante – dijo Tom – Creo que realmente deberías trabajar con nosotros, es una oportunidad para que veas si te gusta, es divertido…
-Y te pagaríamos bien – añadió Danny levantando sus cejas.
Nora los miró pensando en los relajados que ellos eran y cómo esto podría ser realmente una oportunidad para aprender de ellos.
-Mira no tienes que decidirlo ahora, te dejaremos esto – Tom agarró una bolsa del piso – Son todos nuestros discos, libros y la canción que terminamos gracias a ti – terminó apuntándole un disco plateado.
-Eso sí esta última es secreta, porque aún no las hemos lanzado – le dijo Danny guiñándole un ojo.
-Tenemos que irnos ahora – añadió Tom mirando su teléfono – Pero te dejo mi número – lo anoto en una servilleta – Cuando tomes la decisión, sea cual sea, llámame y házmelo saber.
-Ah sido un real placer Nora… - empezó Danny, pero ella nunca les había dicho su apellido.
-Graham – completó ella – Y sí, um, gracias lo pensaré.
-De nada – sonrió Tom – Y guarda el cambio, ¡ah sí! casi me olvido, aquí está tu libreta – añadió poniéndosela en las manos.

Nora los vio caminar, hacerle un gesto de despedida a ella y salir por la puerta hacia el nevado exterior, ella aún sentada en la mesa atónita, sin entender muy bien qué acababa de pasar. Parecía que tan solo así como así, había conocido a dos de los cuatro miembros de McFly, e igual de rápido ellos se habían ido, dejando a Nora confundida y con muchas decisiones que tomar.

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¡Chicas! Espero que les haya gustado el capítulo ;) Espero que comenten para que yo pueda saber si les gusto, qué les gustó, etc.
Besito y espero subir pronto el capítulo 3.

Nora cerró la puerta del taxi después de haberle dado las gracias y con su bolso firmemente apretado contra ella se encaminó hacia una gran casa frente a ella.

Hace un mes nunca pensó que estaría aquí, caminando hacia la casa de Tom Fletcher para escribir una canción con él pero ahí estaba, y para ser sincera le había resultado emocionante. Esta era la segunda vez que se reunían, la primera vez solo con Tom y Danny quienes mayormente conversaron con ella y le mostraron lo que tenían, además de explicarle el concepto del álbum y acordar el pago (cosa que a ella la tenía sin cuidado, porque no estaba ahí por eso), pero hoy también trabajarían con Harry y Dougie, Nora esperaba que fueran tan fáciles de tratar como Danny y Tom.

Había requerido de toda su valentía para llamar a Tom, pero después de escuchar todos sus discos y leer su biografía, decidió que valía la pena trabajar con personas que eran capaces de crear canciones tan hermosas, esperaba que pudiera aprender al máximo de ellos. Así que lo había llamado, con las piernas temblando y con una voz vacilante, pero él parecía haber estado feliz de que lo llamara y de que hubiera aceptado.

La primera vez no habían avanzado mucho, pero Nora había conocido a la esposa de Tom, Giovanna quien había sido tan dulce con ella, que no había sido para nada incómodo y pronto se había acostumbrado a ellos. Sin embargo, Nora seguía nerviosa porque después de todo ellos eran famosos ¿Quién no se pondría nerviosa?

Tocó el timbre y esperó a que le abrieran, una mujer rubia, alta y delgada apareció tras la puerta abierta y le sonrió, dejándola pasar.

-Tú debes ser Nora – le estrechó la mano sin dejar de sonreír y agregó – Soy Georgia, la novia de Danny, Gi me ha hablado mucho de ti, bueno todos en realidad, así que estaba ansiosa por conocerte. – Cerró la puerta y Nora solo sonrió avergonzada, antes de decir:
-Mucho gusto – Después de todo ¿Qué se decía en estos casos? Nora ubicaba a Georgia porque había sido uno de las ídolas de Brooke, ella amaba a McFly y a la novia de Danny en específico, por haber sido miss.
-Los chicos están en el estudio ¿Sabes dónde es o prefieres que te lleve?
-Sí sé, no te preocupes.
-Bien entonces, ya hablaremos cuando se tomen un descanso.

Nora asintió y se dirigió por el pasillo a una pieza del fondo, podía sentir los acordes de las guitarras y la letra de la canción fluyendo: “Because I love you even now, but now you made all things go wrong…” Dudó si golpear o no antes de entrar, ya no quería interrumpirlos en medio de la canción, así que tan solo abrió la puerta en silencio; pero aún así la música se detuvo y Harry abrió más la puerta.

-Hola Nora, soy Harry Judd, mucho gusto – le dijo haciéndola pasar. Ella observó a su alrededor, Danny y Tom estaban sentados uno frente al otro con sus guitarras sonriéndole y Dougie, se hallaba de pie al costado de una de las ventanas.
-Hola – saludo ella y Dougie le estrechó la mano presentándose.
-Entonces ¿Estás lista para hacer esto? – preguntó Danny haciendo sonar su guitarra, ante lo que Nora asintió con entusiasmo, su corazón se sentía acelerado de estar participando en algo como esto.
-Bien, estábamos justo mostrándole la canción a Harry para que revisara que la percusión estuviera finalizada – agregó Tom – Toma asiento ahí, te puse una mesa, así te va a resultar más fácil escribir – Nora se sentó en un esquina de la habitación, al otro costado de la ventana frente a la que estaba parado Dougie. Era una mesa pequeña, pero más que suficiente para escribir, y por ende para lo que la necesitaban, la vez anterior no había estado allí, y a Nora se le complicó un poco al tomar notas, trató de ocultarlo, pero al parecer Tom lo había notado.
-¿Empecemos? – dijo Dougie sentándose en una silla frente a Tom y Danny, formando un triángulo.
-T-traje algo – tartamudeó Nora – Sé que hay que ir haciéndolo con la música, pero pensé que podría, no sé… - dudó al ver sus caras de sorpresa – escribir algo. A v-veces no sé qué hacer con las ideas que tengo y…
-Está bien – dijo Tom, luego de que se recompusieron de la sorpresa, con una sonrisa añadió – Eres demasiado aplicada, a ver léelo.
Nora se relajó un poco y leyó una frase al azar de lo que había traído escrito.
-“Wherever you say, still warm my heart, I still worried ‘bout you, don´t leave me alone” – Ella se detuvo y añadió – Tengo más pero estoy pensando, que quizás es muy deprimente. No tanto su estilo, creo.
-Siempre podemos musicalizarlo alegremente – dijo Tom.
-Pero sí es deprimente – río Danny - ¿Qué tal si trabajamos esa alegría?
-Lo siento – dijo Nora bajando la cabeza y con sus mejillas sonrosadas – Creo que puedo trabajar en ello.
-Hey, no te sientas mal – dijo Dougie tocando su hombro - ¿Qué te parece si tocamos You Bring Me Down?
-Seguro – respondió ella sonriendo ampliamente – Quiero oír cómo suena finalizada.

Tom empezó a rasguear la guitarra y pronto se les unió Danny, escucharlos a todos tocar y cantar algo que ella había ayudado a crear hizo que sus ojos se llenaran de lágrimas.

-¿Es tan terrible? – preguntó Tom preocupado.
-¡Oh no, no, no! – Dijo Nora con desesperación mientras secaba sus lágrimas – Es perfecta, gracias por permitirme participar en esto.
-Lo dices como si esto no fuera un trabajo – río Harry – Recuerda que recibes paga – añadió guiñándole el ojo.
-Lo siento, lo siento – río Nora – ¿Ya tienen algo para la siguiente canción? – preguntó para desviar la atención de ella.
-Sí – respondió Danny, y por las siguientes cinco horas trabajaron sin descanso, Nora empezó a acostumbrarse a ellos cada vez más, a reírse y sentirse más relajada; realmente agradecía que ellos fueran como eran porque no habría soportado que la trataran mal o la miraran en menos.

Cuando a Danny le crujió el estómago fue cuando decidieron que era momento de parar y comer algo. Georgia y Giovanna tenían comida hecha y servida para todos ellos, Nora se sentó junto a Giovanna y Danny, y procuró disfrutar su comida, no había comido desde el almuerzo y eso parecía tan lejano.

-¿Te divertiste? – Le preguntó Giovanna.
-Sí – dijo Nora tragando rápidamente lo que estaba comiendo – Es divertido y he podido aprender algunas cosas. No pensé que me gustaría tanto – finalizó sonriendo.
Tom miró a los chicos y Harry alzó las cejas.
-Nora hay una cosa que tenemos qué hablar – dijo Tom – Es acerca del pago. Como tú bien sabes nosotros tenemos nuestra propia discográfica llamada “Super Records”, si bien somos los únicos músicos en la discográfica, nos gustaría hacer todo este arreglo de nosotros de la forma más legal posible, de manera que puedas ponerlo como un trabajo en tu currículum.
-P-pero no es necesario – tartamudeó Nora abriendo muchos los ojos – Ustedes no necesitan hacer esto, yo no necesito nada más que aprendizaje…
-Pero a nosotros nos gusta hacer las cosas bien – la interrumpió Harry – Y si eso requiere contratarte, entonces…
-¡Estás dentro! – Gritó Dougie levantando los brazos ante lo que todos rieron.
-Exacto – agregó Danny – Eres buena, que mejor que partas con nosotros, que somos simpáticos, talentosos y sexys… - Se detuvo cuando Georgia lo golpeó ligeramente en el brazo – Bien, bien, te queremos en nuestro equipo por todas las cosas que ya hemos dicho y como dijo Tom, que mejor para tu currículum.
-No sé qué decir – dijo Nora mirándolos a todos sin creerlo.
-¡Di que sí! – dijeron Giovanna y Georgia riendo.
-Bueno entonces, sí – sonrió ella, mientras todos chocaban sus vasos.

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Perdón por la demoraaa, espero que les haya gustado, no estaba muy inspirada que digamos. En fin, un besito <3