Tu allá, y yo aquí. [Zayn y tu]

Narra Ariel:
El camino con Zayn fue muy divertido, hace mucho que no reía a carcajadas, definitivamente después de tantas tormentas en mi vida el sol estaba comenzando a salir. Le quería mostrar a Zayn algo muy importante para mi, se había ganado mi confianza muy rápido, además que no se aparto de mi y me miró como un bicho raro , después de que le dije que no tenía amigos, todo lo contrario, trato de acercarse a mi y volverse mi amigo, eso creo. Llegamos a nuestro destino, según mis cálculos mi padres deberían estar trabajando, y mi hermana debe estar enfadada porque aún no la espere para venir a casa. Eso le diré, que no la espere, porque si le digo que me escape, firmo mi sentencia de muerte.

-Aquí es.-Dije señalando aquella casa de madera blanca.
-Linda casa.-Dijo mientras yo le entregaba el casco y arreglaba mi casco.
-A puesto que la tuya es más linda.-Dije sacando las llaves.
-Depende de tus gustos, si tienes buen gusto yo te gustaría.-Dijo divertido.
-Si tienes buen gusto, sabrías que yo seré la última en enamorarme de ti.-Dije convencida.
-Eso ya lo veremos con el tiempo.- Dijo entrando a la casa.
-A veces creo que el tiempo te hace malas jugadas.-Dije recordando todo mi pasado.-Ven subamos al living.

Cuando subimos, me senté y el imitó mi acción quedando en frente de mi, estaba nerviosa, no sabía como reaccionaría, tal vez le esto le parecería muy estúpido, no lo se, simplemente se que no pierdo nada con intentar. Fui directo hacia mi mochila y saque un pequeño papel ese que me había mantenido con todas las fuerzas hasta el momento, ese que aún no sabía quien lo había escrito, y tampoco había llamado a aquel número que aparecía, me prometí a mi misma llamar, cuando sintiera que ya se había ido la tormenta y estaba llegando la calma, y claramente Zayn, era eso que tanto había esperado, una persona sincera.

-Espero que esto no te parezca estúpido.-Dije mirando aquel papel.
-No, nada de ti me parece estúpido, más eres graciosa, diferente, las mejores chicas son esas que son diferentes, pero sin desviarnos del tema, anda muéstrame ya.-Dijo como un chiquillo de 5 años.
-Esta bien, eres intenso.-Dije sonriendo, mientra daba vuelta a aquel papel.

Cuando le di vuelta al papel, el se quedó pasmado, como si tuviera algo que ver con eso, al principio me preocupe, pero después se escapo una sonrisa de sus labios, y me di cuenta de que todo estaba perfecto.

-De que te ríes.- Pregunté.
-Creo que el destino nos tiene muchas sorpresas Ari.-Sonrío.-¿Sabes? Yo tengo uno igual pero tiene una dirección y esta escrito en la tapa de un libro.
-No me gustan las bromas.-No podía ser sierto, yo escribí eso en mi diario aquel día que estaba tan deprimida, luego invente una dirección, ni yo misma sabía si es existía, solo la escribí esperando algún día poder encontrar algo con aquella ocurrencia mía, pero de pronto ¡BAM! me roban lo más preciado para mi en ese momento.
-Y a mi no me gustan hacerlas.-Dijo tomando mi rostro.-¿Entiendes?

Sentía como nuestras respiraciones se mezclaban, sentía mi corazón acelerarse, cerré mis ojos, quería sentirme siempre así, protegida, quería que el estuviera todo el tiempo conmigo, cuidándome, queriéndome, abrazándome y sobre todo abrazándome. Abrí los ojos lentamente, encontrándome con un Zayn que me aseguraba que todo estaría bien. Levanto su cabeza un poco regalándome un beso en la frente, para luego quitar sus manos de mi cara con suma delicadeza.

-Entonces demuéstramelo, porque aún no te creo.-Dije retándolo.
-Vamos.-Tomo mi mano, me dio el casco y nos encaminamos a que me demostrara si era sierto eso.
-Y en donde lo encontraste .- Desee recibir una respuesta diferente a la que yo pensaba.
-En el bosque donde te encontré.-Gracias a Dios no lo había encontrado cerca de la escuela, ahí si me asustaría.-Y tu ¿Donde lo encontraste? -Me preguntó.
-En la escuela, lo encontré cuando me robaron mi diario.
-Recuerdo cuando me contaste lo del diario, pero no sobre la nota.-Dijo conduciendo.
-Si, no te lo quería contar aún no confiaba en ti.-Dije son importancia.

Frenó en seco quedando en frente una linda mansión, luego sacó un pañuelo lo puso en mis ojos, no pregunte nada sabía que me quería dar una "sorpresa" eso es lo que siempre hacen los chicos.

-¿Para que me lo pones?.-Pregunté, aunque ya sabía su respuesta.
-No quiero que sepas donde vivo.-Dijo en un tono bastante frío.
-Perdón no quería incomodarte.-Dije arrepentida.-Oye Zayn, ¿puedo agarrarme de ti? no veo nada.
-No me incomodas simplemente no quiero que estés conmigo por las apariencias.- Dijo cogiendo mis manos para enrollarlas en su abdomen.
-Si claro, como si yo fuera una cualquiera.-Estaba enojada por aquel comentario.
-No lo eres.-Dijo seguro.-Jamás vuelvas a decir eso.

Volví a sentir como se frenaba la moto, y como Zayn quitaba mis manos de su abdomen, y los enrollaba en mi espalda cuidadosamente para ayudarme a bajar, escuche como sacaba las llaves de su moto y las guardaba es su chaqueta luego me tomo en brazos y sentí como empezó a caminar.

__________________________________________________________
¿Como están criaturas de Dios?

Narra Zayn:
Estaba confundido, no sabía que estaba haciendo, pero con ella todo es diferente, era más...tranquilo, con ella me sentía seguro de mi mismo, no tenía que aparentar ser el "Chico perfecto" el cual todas las chicas se quieren tirar. La llevaba en cargada mientras llegábamos a casa de mis padres, no había nadie allí -Gracias a Dios-pensé. La llevaba en brazos, no quería que se enterara de como vivía, no quería que se aprovechara de mi como todas las demás putas con las que me acostaba, a pesar de que me cayera muy bien, no debía confiar del todo en ella, creo que aún me falta terminar de conocerla.

-Me gustan las sorpresas.-Dijo de repente Ari.-Tu me tienes una ¿verdad?-Aún tenía sus ojos vendados y sus brazos al rededor de mi cuello.
-¿Tu crees?- Dije dejándola con más intriga.
-Claro, porque entonces ¿para que me vendas lo ojos? no creo que sea por las apariencias.
-Yo tampoco lo creo.- Mentí.
-Me confundes, primero me dices que y lego que no.-Rió- Eres un tonto.

Faltaba poco para llegar a mi humilde posada -y valla que de humilde no tiene nada.- donde desahogaba mis "penas", donde me las tiraba a todas, donde lloraba en las noches incontrolable mente, porque nadie me quería, nadie que no fueran mis padres y mis hermanas, todos estaban conmigo por interés, porque era una cara bonita, y sobretodo porque era un buen polvo.

-Llegamos Ari.- Dije en su oído, por sus gestos relajados parecía dormida.
-Preciso me despierta en la mejor parte del sueño.- Sus piernas ya estaba en el suelo, pero sus ojos aún estaban vendados.
-No te quites la banda todavía. ¿Que soñabas?- Yo era como un pequeño curioso que quería saber todo.
-Estupideces, ya sabes... nada importante.-Dijo restandole importancia a lo anterior.
-Para ti nada es importante.-Abrí la puerta de mi casa, y de nuevo la tome en brazos.
-Para mi eres importante ¿con eso te basta?- No me esperaba que para ella fuera importante.
-Creo que con eso me sobra y me basta.-Dije con una gran sonrisa en mi cara

Subí con ella hasta mi cuarto, asegurándome de que no estuviera ninguna de mis hermanas, y mucho menos mis padres, ya me habían pillado con otras, y no quería que pensaran que ella era una de esas zorras.

-¿ZAYN?- Escuche cuando entre a mi cuarto.
-Quien esta aquí.- Preguntó susurrando Ari.
-Mi hermana Doniya, debe estar con mi sobrina.
-¡¿Tienes una sobrina?!- Dijo emocionada.
-Si, es hermosa, después te cuento la historia, iré a saludarla.-Dije saliendo de mi cuarto.-No te quites la benda espérame 5 minutos.
-Si que molestas.

Fui donde mi hermana que estaba en su cuarto, la salude y salude a mi hermosa sobrina que tiene a penas 6 meses, ella es la luz de este hogar, era un ángel, y yo la adoraba como si fuera mi hija, a pesar de que ella no tiene un padre, yo seré como uno, púes Doniya después de todo sufrió mucho, y la pequeña no merece sufrir.

-¿Estas con alguien? Escuche como si hablaras con una chica.-Preguntó.
-Si, está en mi cuarto, le iba a mostrar una cosa.
-Dime la verdad ¿tendrás sexo? soy tu hermana puedes decírmelo.
-No tendré sexo con una chica de 17 ó 18 años ¿estas loca?-Dije jugando con Silvia, si así se llama mi sobrina.
-Nunca, es decir, no te lo creo.-Dijo con sus ojos con platos y una gran sonrisa.
-Es linda, rara, extrovertida, orgullosa, es perfecta pero no es mi tipo.-Dije mirándola.
-La quiero conocer.-Dijo entregándome a silvia para que yo la cargara.
-Claro, vamos.-Dije

Doniya no paraba de preguntas como era Ari, yo solo me limitaba a responder "ya lo veras", definitivamente eso de curiosos era de la familia Malik, entramos a mi cuarto y para mi sorpresa Ari estaba dormida, pero estaba llorando...un momento ¿se puede llorar mientra que duermes?

-Ari ¿estas despierta?- Dije suave.
-Es muy linda.- Susurró Doniya.-¿Porque llora? y peor aún ¿Porque la tienes con los ojos vendados?-Dijo en tono de regaño.
-Si, es linda, segundo, no se porque llora, y tercero, después te lo cuento.
-Me debes muchas explicaciones.-Dijo Doniya.

Me dedique a mirarla por unos segundos mientras me acercaba a mi cama, y trataba de despertarla, pero no, ella no despertaba, solo caían lagrimas , no hacía ruido, solo lloraba en silencio y dormida, le quite la venda, que ya estaba bastante húmeda por sus lagrimas, acaricié su cara, y pareció funcionar por que poco a poco abrió sus oscuros ojos. Se abalanzo rápidamente hacía a mi.

-Zayn, no me dejes por favor.-Dijo sollozando
-Jamas... jamás lo haría.-Bajé mi mirada a silvia quien jugaba con el cabello de Ari.-No llores, te vez horrible, toda ojerosa.
-Gracias, eres tan directo.-Dijo con sarcasmo.
-El siempre, por sierto, soy Doniya Malik, hermana de este idiota.- Dijo mi hermana quien estaba atrás.
-Soy Ariel, Ariel Williams, un gusto conocerte.-Sonrió.
-El gusto es mio linda, y te presento a mi hija silvia.-Se la pase a Ari para que la cargara un rato.
-Es hermosa, ¿cuantos meses tiene?-Dijo mirándola con ternura.
-Tiene 6 meses, ella es mi vida, la adoro.-Dijo dando un suspiro de felicidad.-Espérenme traeré la cámara.
-Zayn, perdóname no quería hacer una escenita.-Dijo arrepentida.
-No seas tonta, seguramente tuviste un mal sueño.
-Créeme fue el peor de todos.-Desvió su mirada.-Cuando me mostraras eso.
-Casi se me olvida, ya te lo muestro.

Saqué la caja donde tenía muchos recuerdos, tenía fotos, cartas, y especialmente aquella tapa de un libro, la saqué y se la mostré a Ari, y ella quedó totalmente impresionada al ver aquel objeto, no le tome importancia, y seguí observando su perfecta cara, trate de encontrarle algún error, y se lo encontré, cuando vi sus ojos, me di cuenta que estaban llenos de sufrimiento, de dolor, de resentimiento, y de secretos...

-Ahora si te creo.-Dijo entregándomela.
-Debes confiar en mi.-Dije seguro.
-Listo chicos ahora posen, Zayn tu carga a Silvia, Ariel abraza a Zayn.- Dijo prendiendo su cámara.
-¿Que pretendes?-Dijo Ariel sonriendo.
-No lo debería decir, pero al diablo con eso.-Dijo haciendo un gesto con sus manos.-Creo que harían una linda familia, claro, con su propia hija por que Silvia es mía he.
-Estas loca mujer.-Le dije a Doniya.
-No estoy loca, solo posen por favor ¿por mi?

Ariel no lo dudo más y me abrazó, yo tampoco lo dude y pasé un brazo por su cintura, y con la otra sostuve a Silvia -Así sería mi familia perfecta- pensé, Ariel es hermosa, pero es demasiado pequeña para mi, debo admitir que es muy madura, pero ¡por favor! tengo 21 años, ella a penas debe tener 17 ó 18 no lo se, pero insisto en que es muy menor para mi.

-La familia perfecta.-Dijo Doniya mostrándome la foto.
-Déjamela ver.-Dijo Ariel.-La única que quedó linda fue Silvia ¿no crees Zayn?
-Tu también sales hermosa.-Le dije.

_____________________________________________________________________
Chicas en Colombia faltan 7min para que sea 29 de Enero, no le falla, tarde lose, pero no les falle, las quiero un montón. Chao porque mi mamá esta que me acosa que apague esto ya.

Besos <333

Decidí que ya era hora de irme, le dije a Zayn, e hicimos el mismo procedimiento, me vendo los ojos y todo eso, cuando llegamos a casa pasó lo que estaba temiendo que pasara.

-¿Donde estabas Ariel?-Dijo mi padre enojado.
-Lo siento señor pero su hija se enfermo y la lleve a mi casa.-Mintió Zayn.
-Ahora te la pasas de zorra en la casa de lo demás valla...-Mis ojos se cristalizaron no podía creer como era mi padre capaz de tratarme así al frente de Zayn. Cerré lo ojos y evite llorar.
-¿Estar enferma es de zorras?¿si? ok ya veo, siempre eres tan...es que ni se como describirte me das asco.-Dije seca, mi tono normal con el.
-No creo que estés enferma, yo te veo perfecta. Mínimo estas enferma de dolor, porque ya te revolcaste con este idiota.
-¡CÁLLATE! No lo conoces, por lo menos me trata mejor que tu. ¡MI PROPIO PADRE!- Ya no aguantaba más, tenía que explotar en algún momento y ahora lo estaba haciendo.

Zayn permanecía callada, sin entender mi mala relación con mis padres.

-No me vuelvas a gritar perra asquerosa, lo dijo tu madre es verdad siempre fuiste un error.-Y no mentía, me di cuenta que estaba diciendo la verdad.
-Usted algún día se arrepentirá, se dará cuenta de que Ariel es la persona más valiosa que usted halla podido perder.- Era claro que Zayn trataba de mantenerse tranquilo.
-¿Valiosa? Valiosa mi hija menor, ella es perfecta, sigue mis ordenes, es la mejor en su clase. Pero esta estúpida a penas sabe leer.-Tenía una sonrisa malvada en su rostro, tenía miedo de que me hiciera daño después de que zayn se fuera.
-¡HIJO DE PU...-Lo interrumpí.
-Ya zayn, es suficiente.-Dije tranquila, con ganas de llorar, pero no aquí.
-No, no es suficiente ahora comprendo todo.-Su mirada puesta en mi padre llena asco, de odio.
-No comprendes nada.-Mi mirada seguía en el suelo.-¿Me acompañas a mi cuarto?

Y así fue, Zayn me siguió llegando hasta mi cuarto, su mirada era de decepción, mucho para un día, mucha confianza para una persona, muchos personas nuevas hoy, pensé. Jamás e confiado en alguien totalmente y este chico solo con un acto logra tener parte de mi confianza, si, definitivamente hoy fue un día demasiado agotador, prefiero los aburridos, prefiero esos día en los que no hago nada.

-Lo siento, no esperaba eso.-Mi mirada era penetrante, estaba recordando.
-Yo tampoco lo esperaba, pero si esperaba que confiaras en mi.-Dijo
-¿Como pretendes que confié en ti? Te conocí hoy.-Dije obvia.
-Solo confía.-Dijo con una sonrisa de medio lado mientras hacía círculos en mi cama.
-¿Como? Para mi eso es muy difícil...-
-Cuéntame algo de ti, un secreto.-Dijo esperanzado.
-No lo se, me da miedo.-Lo seguía mirando.
-¿Porque? -
-¿Que pasa si se lo dices a todo el mundo?-Dije pensando en lo horroroso que sería.
-No lo haré. Confía en mi.

Lo medite por algunos segundos, estaba pensando en que contarle, tendría que elegir un secreto seguro, si el lo cantaba, no me iban a humillar, porque sinceramente no me apenaba de el. Solo con pensar si se hiciera realidad me sacaba una sonrisa.

-Bueno...yo siempre he querido ser madre joven, pero esta claro que no puedo. Con joven me refiero ahora, o quizás el otro año, no lo se, me parece tierno.-Se lo había dicho. ¿Mi secreto? Era raro y estúpido, lo se, pero era mío.

Zayn abrió los ojos exorbitantemente, me causo un poco de risa, y negué divertida.

-Tu ¿quieres ser mamá joven? ¿Y tu vida? ¿Que hay de todas las responsabilidades.-Dijo aún sorprendido.
-Solo necesito dinero, por eso pienso que me tengo que esperar muchos años. Quiero darle el amor, el cariño, los abrazos, los "te amo" que mis padres nunca me han dado, espero darle eso y mucho más.-Dije ilusionada- ¿Te imaginas? me parece muy tierno ser madre joven.
-Dañarías tu vida.-Dijo haciendo con una goma de mascar que recién había metido a su boca.
-No, si tienes dinero, no dañarías tu vida.-
-Mmm puede ser, pero no te puedo imaginar a ti de madre, tienes que tener un esposo.-Dirigió su mirada hacía mi.
-Si, uno que sea bueno conmigo, que jamás sea como mi padre.-Me sentía un poco triste.
-¿Uno como yo?