Summer Love - {Louis Tomlinson y tu} (Terminada)

CAPITULO 34

-¿Extrañas ser un niño, Harry? -dudó.
-Simplemente extraño el no tener deberes, el jugar, el besar a una niña porque te gusta y salir corriendo de la vergüenza, el hecho de ser amigo de alguien solo porque le diste un dulce, extraño cuando llorabas por algo y enseguida ese problema estaba resuelto, cuando la atención estaba puesta en ti, cuando de tanto reír te duele la panza, eso solo le pasa a un niño, entonces... Sí, extraño mucho, muchísimo el ser un niño.

---------------------------------------------------------

Louis se sentó al lado de su hermana después de llegar de la plaza y la abrazó sin decir nada mientras ella lloraba desconsoladamente en su cama y sus padres se preguntaban qué era lo que habían dicho que se salió de contexto. Parecía que todo se había ido de sus manos cuando pensaron que sus hijos serían los más emocionados y felices con todo eso; pero simplemente supusieron que no los conocían tanto como creían que lo hacían.
Alba no podía ni siquiera respirar bien; sus ojos estaban completamente hinchados. ¿Qué sería de ella ahora? Miró a Louis quien parecía estar igual o más devastado que ella.
-No me quiero marchar, Louis -le dijo ella. Louis la acercó un poco más a él y le acarició el cabello; sabía que sus opiniones pocas veces valían la pena cuando se trataban de decisiones grandes como esa.
-Yo tampoco me quiero marchar, Alba -le dijo él.
-No quiero dejar a Niall, si nos vamos no lo volveré a ver... -dijo ella mientras lo apretaba con fuerza. Tenía ganas de romper todo. Louis la soltó durante unos momentos; Alba no aguantó más. Estaba segura que Louis se lo guardaría porque quería disfrutar del poco tiempo que le quedaba con su chica; pero ella simplemente no podía.
Salió corriendo de allí con las lágrimas en su cara; vio a sus padres sentados en el comedor que le preguntaron qué sucedía y ella simplemente se marchó de allí dando un enorme portazo.
Corrió y corrió por la calle sin importar que sus pies dolieran con los tacones altos que traía; solamente quería llegar a él, advertirle, abrazarlo.
Se paró en frente de su puerta y tocó con desesperación mientras sentía que las lágrimas eran tan monótonas como la lluvia y tan interminables en días de tormenta.
Sus nervios aumentaban cada vez más; su cuerpo entero estaba temblando y ya no le importaba parecer un desastre en frente del chico que le gustaba. Sintió los pasos acercarse y un "ya voy" de su hermosa voz que provocó que la chica rompa aún más en llanto poniendo su rostro entre sus manos. No lo podía creer; ¡cuánto odiaba a sus padres en esos momentos y cuanto los estaba maldiciendo por sacar fuera de ella todo lo que alguna vez realmente le perteneció.
La manilla de la puerta giró; la puerta se abrió, y allí apareció él con una sonrisa y una camisa blanca con unos pantalones cortos. Sonrisa que inmediatamente se desvaneció por completo al ver a la chica de esa manera; su rostro entero se deformó y frunció el ceño mientras se acercaba a ella y la abrazaba con el corazón latiendo con fuerza; no sabía lo que le había pasado, pero sabía que era capaz de matar al culpable de que sus hermosos ojos lagrimeen de esa manera tan malvada para una chica tan hermosa como ella.
-¿Que te ha pasado mi niña? -le preguntó preocupado mientras Alba se agarraba de su camiseta con fuerza y comenzaba a llorar como si la estuvieran matando; pero lo hacían; por dentro. No podía soportar más el dolor que entraba en su corazón como el cuchillo más filoso del mundo entero.
La camisa de Niall no tardó en mojarse y él tampoco tardó en desesperarse aún más; la chica no podía hablar y se esperaba lo peor.
-¿Louis está bien? -preguntó de inmediato. La chica asintió sin parar de llorar y la madre de Niall apareció detrás de él con la misma sonrisa pero luego la misma cara de preocupación; y le dijo a Niall que la haga pasar, que le dé un vaso de agua.
Niall hizo caso; la única razón por la que no lo había hecho antes era porque estaba tratando de comprender lo que pasaba. Alba se sentó en el sillón sollozando todavía y tomando el vaso de agua que la madre de Niall llevó y tan rápido como se lo entregó desapareció de allí.
Sintió la voz de Liam hablar con su madre y a él asomarse por una puerta. Se acercó pero Niall lo miró esperando que se largue nuevamente; quería hablar a solas con ella. Él inmediatamente se alejó un poco preocupado y el silencio reinó en el lugar; lo único que se escuchaba era lo difícil que Alba podía respirar.
Niall no podía; simplemente era imposible; el ver a Alba llorar lo hacía desear a él llorar el doble para que se calme un poco. Si tan solo todo ese dolor que tenía en su corazón por alguna manera se lo pudiera haber traspasado a él para que la muchacha no sufra pues entonces lo habría aceptado sin pensarlo dos veces.
-¡Maldición, Alba! Dime que te pasa, por favor, no soporto verte llorar... -exigió él; mientras Alba intentaba; de veras juro que creía hacer su mejor esfuerzo por dejar de llorar.
-Yo… -intentó decir ella, pero nuevamente rompió en llanto. Niall decidió esperar a que se le pase un poco para luego preguntar que le pasaba y la abrazó tierno mientras acariciaba su cabello sin saber qué hacer. Su corazón latía con fuerza; lo único que quería era que la chica se encuentre bien. Era lo único que necesitaba.
Después de un rato de varias lágrimas; de varias maldiciones y de varias gotas caídas, de varias decepciones, de varios corazones rotos y de varios nudos en la garganta; la chica decidió hablar.
- Mis papás han decidido mudarse -dijo. Niall sintió como un nudo enorme se le hacía en todo el estómago y lo retorcía sin piedad alguna. Abrió los ojos y la miró. No sabía que decirle.
-¿A dónde? -preguntó asustado.
-Los ángeles... -Niall abrió más aún los ojos, ¿al otro lado del país?
-¿Por cuánto tiempo?
-Por siempre… -dijo finalmente. Niall puso su rostro entre sus manos y suspiró; no podía ser débil porque lo único que conseguiría era poner a Alba más triste y eso era lo único que no quería hacer.
La abrazó tan rápido como pudo y le dio un beso como si fuera el último.
-No te preocupes mi niña…
-¿Que no me preocupe? -preguntó ella alterada- ¡Niall, quizás no te veré más!
-La distancia separa cuerpos, Alba, no corazones.

Estos caps son un poquito tristes... + tarde cuelgo otro cap ;)

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA pobre albaaaa no me imagino que pasara cuando louis se lo diga a rays!!!!!!!!!!
siguelaaa

Te lo juro que he llorado...no se si es pork de verdad me ha afectado o pork soy demasiado sensible jajaj
SIGUELA!!
PLIIIISS!!!

No llorare
No llorare
No Llorare
iPero me es imposible!
Esta preciosooo :c

CAPITULO 35

-¿Que no me preocupe? -preguntó ella alterada- ¡Niall, quizás no te veré más!
-La distancia separa cuerpos, Alba, no corazones.

---------------------------------------------------

Alba le hizo prometer a Niall que no diría nada, pues ella sabía perfectamente que eso podía significar un quiebre en la relación de Louis y ____; y él... Bueno, él simplemente pensaba mantenerla lo menos informada del tema e intentaba actuar normal y solo llorar por las noches para que la chica no se diera cuenta del tema; pero ella no era tonta y en más de una ocasión le había preguntado qué era lo que sucedía, a lo que Louis contestaba que nada, que quizás le seguía doliendo un poco la cabeza; el problema era que la cabeza le llevaba doliendo un mes entero y todavía no podía encontrar una explicación u otra excusa.
Los chicos salían cada vez que tenían oportunidad; y no perdían la ocasión para hacer bromas, para disfrutar el verano, para besarse; besarse mucho. Para bailar hasta que los pies les duelan; cantar sin que nadie los mirara; saltar como si el suelo estuviera hecho de fuego y luego bajar como si el cielo estuviera echo de agua; pero así también Louis y su hermana lloraban en las noches; así como también lo hacía Niall; como si las penas nunca se fueran a acabar. Como si no hubiera un mañana para llorar; como si fuera todo lo que realmente supieran hacer durante esas horas de melancolía en las cuales el mundo parece querer desaparecer de sus vidas; y quieren existir tan solo ellos y el otro para no tener que sufrir por absolutamente nadie; pero la vida les corría de la mano tan rápido como nunca.
El 1 de febrero sería el cumpleaños de Harry y todos estaban atentos a la fecha; querían hacerle una fiesta sorpresa. El problema que el día del cumpleaños de Harry; terminaba todo también.
A principios de febrero la chica tendría que volver a su ciudad; y la peor noticia le esperaba.
Louis no buscaba la oportunidad para poder detener el tiempo. Compraría un reloj; uno que tenga la hora fijamente en un solo número, para así ver como el tiempo se detiene en toda su literalidad.
Y así no se tendrían que preocupar de nada; no se tendrían que preocupar de querer desaparecer ni de querer besarse porque simplemente lo harían; no se tendrían que preocupar de querer al otro más de lo que podría tenerlo y no se tendrían que preocupar de que se marcharían tan lejos como nadie nunca los podría ver. No se tendrían que preocupar del mundo, y el mundo a cambio, no se tendría que preocupar por ellos. Era el mejor negocio que podrían hacer.
Se encontraban en casa de Karolina; esta vez se encontraban allí con la chica. Zayn ya no miraba tanto a Alba y Niall estaba un poco más relajado con eso porque no quería tener que pasar sus últimos días con la chica pendiente de ese hombre.
Ya no jugaban a verdad o reto; pero se quedarían a dormir allí; en esa pequeña casa.
Karolina ya no era tan inferior para ellas; incluso ____ le sonreía cada vez que tenía la oportunidad; y es que ella la entendía más de lo que alguien podría entenderla allí. Entendía todo ese deseo de querer besar a Louis; porque ella también lo deseaba. Entendía todo ese empeño en querer gustarle a Louis; porque ella también se empeñaba. Entendía todo ese coqueteo con Louis; porque ella también coqueteaba. Entendía todas esas sonrisas que le daba a Louis; porque ella también le sonreía. Y entendía todo ese sentimiento que tenía hacía Louis; porque ella sentía el doble, del triple, y el cuádruple, quizás por él.
Se encontraban viendo una película de terror; y ahora Liam era quien estaba bien apegado a Karolina. Harry se encontraba junto a Ari; Louis junto a ___, Alba junto a Niall, y Zayn… Bueno, él recogía las palomitas que le tiraban mientras acariciaba a pelusa, el perro que era hombre y tenía un nombre de mujer.
-¿Por qué la chica mala de las películas siempre tiene que ser millonaria y la chica buena siempre es mala y le termina gustando al chico más popular? -preguntó Niall de repente mientras todos tenían la vista fija en la película.
-¿Acaso eso importa? ¡Es una película de terror! -rió Louis. Todos se unieron a las risas y Niall simplemente abrazó a Alba más fuerte como si nunca fuera a soltarla.
-¿Tienes miedo? -le preguntó ella. Alba no era miedosa en respecto a las películas de terror; pues se pasaba la película entera imaginando que es lo que hicieron para provocar todos esos efectos especiales o si los actores sintieron miedo al hacer cada escena; a diferencia de sus amigos que se encontraban temblando todos en el sillón.
De pequeña solía tirarle los pies a Louis cada vez que veía una película de terror y éste se ponía a saltar como una pequeña niña asustada lo que mantenía a Alba alegre durante una semana; o quizás más.
Niall negó y dos segundos después se tapó la cara con las manos asustado mientras lanzaba las palomitas que le caían a Zayn en toda la cabeza.
-Más para mí -dijo él sarcástico.
-¿No es divertido que con ustedes no se pueda ver ni siquiera una película de terror sin tener risas? -preguntó Ari divertida mientras Harry acariciaba su cabello y soltaba pequeñas risitas al ver la de ella.
-Es lo que los hace únicos… -aportó Louis.
-¡awwww, basta! -exclamó Niall mientras le besaba la mejilla y Louis lo apartaba divertido. _____ se acomodó en su asiento y le dio un rápido a beso a Louis en los labios.
-Juguemos a las escondidas -propuso Karolina.
-¡Ay Karo! tu eres un peligro proponiendo juegos -rió Ari. _____ frunció el ceño sin entender mucho; obviamente, ella no se encontraba la noche en la que sucedió todo; ella solamente sabía lo del beso y le alegraba infinitamente que Louis se lo hubiera dicho, pues así se aseguraba de que no era nada malo. Louis nunca le diría algo que la hiciera sentir mal.
-¡Vamos, será divertido! -dijo ella.
-Es que hay unos aquí a los cuales les gusta hacerse los escondidos durante mucho rato... -Dijo Liam mirando a Niall y Alba mientras estos se ponían rojos y todos reían a carcajadas; ahora eran Karolina y Zayn quienes no entendían.
-¿Qué tal si jugamos a la ouija? -preguntó Niall. Alba se estremeció un poco y rió.
-No puedes ni siquiera ver una película de terror y vas a jugar a la ouija…
-¡Ay Alba! tu siempre tan pesimista mi niña…
-Me gusta la idea -interrumpió Liam serio mientras todos asentían; la ouija estaba bien…

¡¡Feliz año nuevo!!

NO LO PUEDES DEJAR AY!!
SIGUELA!!
PLIIIISS!!!
QUIERO SABER QUE PASARA!!
PORFAAAA!!
CONTINUALA!!!
SI SUBES OTRO CAP HOY YO SUBO UNO DE CUANQUIER NOVELA DE LAS MIAS QUE QUIERAS!!!

Atte: señorita unicornia rosa!!

CAPITULO 36

-¡Ay Alba! tu siempre tan pesimista mi niña…
-Me gusta la idea -interrumpió Liam serio mientras todos asentían; la ouija estaba bien…

-------------------------------------------------------

Se sentaron todos alrededor del pedazo de cartón en el que Liam estaba escribiendo; después de varios intentos fallidos. Todos se encontraban mirando con atención como el plumón negro rozaba la superficie color café dibujando una luna y Karolina le daba las indicaciones respectivas.
-Bien, entonces -dijo ella para repasar- es el sí a un lado, el no al otro el hola, el adiós, el abecedario la luna y el sol...
-Todo eso -asintió él mirando su dibujo como si fuera la más perfecta obra de arte. Ella sonrió satisfecha; Niall tenía más miedo que todos juntos allí.
Sus pelos se pusieron de punta en cuanto escucho lo que se trataba. Nunca había jugado; pero había escuchado que lo habían hecho amigos suyos y no había acabado de una forma bonita. No sabía si lo hacían para asustarlo o porque era verdad; pero si era para asustarlo entonces actuaban realmente bien porque la actuación les salía de maravilla; como si el miedo que aparentaban se lo transmitieran a él. Aunque no era muy difícil hacer que él sienta miedo.
-Oigan, oí que esto es peligroso -dijo cuándo Karolina se acercaba después de ver las instrucciones por internet; habían diversas páginas. Según aquella, se podía hacer con una moneda mientras que esta sea lo suficientemente grande como para que todos los dedos quepan allí. Se sentó justo en medio de Louis y Liam. ____ la miró; pero no dijo nada. Ella se encontraba al lado de Louis y Alba; quien estaba al lado de Niall; quien estaba al lado de Zayn -para que éste no se siente al lado de ella- quien estaba al lado de Harry quien se encontraba al lado de Ari- para que no fuera Niall quien esté a su lado- y luego nuevamente volvía a Liam. Todos suspiraron al oír a Niall una vez más; era la milésima vez que repetía lo peligroso que podía llegar a ser durante todo ese rato
-No les he dicho esto, pero una amiga me contó que ella tenía un amigo con el que jugó a esto y al otro día… él... él...- miró a todos, que lo observaban y escuchaban con atención- él se transformó en un diablo... -todos comenzaron a reír. Niall frunció el ceño a la defensiva- ¡Es verdad!- reclamó.
-Te quería asustar, hombre -le dijo Harry- ¿Qué es lo que puede pasar? Será divertido, si alguien se nos manifiesta, pues entonces, ¡a por nosotros!
-No lo entienden -se levantó Niall del sillón- no jugaré
-Bien, jugaremos nosotros -dijo Liam. Todos asintieron; excepto Alba que últimamente no encontraba nada divertido si no lo hacía con Niall. Eso dejó espacio para que se acomoden más y el círculo se haga más pequeño.
Alba y Niall se sentaron en el sillón para observar como jugaban.
Pusieron su mano encima de la moneda y cerraron los ojos; pero Harry no podía evitar hacerle gracia todo eso y cada vez que intentaban hacer algo él estallaba en carcajadas.
-¡Si te ríes vendrán los espíritus! -le dijo Niall. Harry lo miró y trató de concentrarse.
-¿Hay alguien ahí…? -comenzó a preguntar Liam; pero Harry comenzó a reír con mucha fuerza. Todos lo miraron fulminantes.
-Es todo -dijo Ari- Harry, no juegas
-¿Qué?
-Que no juegas, hombre -le repitió ella- vete, chu..
-A menos que ni quería -contestó el frunciendo el ceño mientras se iba a sentar con Niall y Alba.
Nuevamente comenzaron a poner su dedo encima. Liam comenzó a llamar a alguien nuevamente; pero no se movía. Miraban la moneda de cien pesos fijamente en frente de ellos. Redonda y de color dorado con el dedo de todos rozando un poco; a centímetros de cada una exponiéndose a una clase de manifestaciones diabólicas de las que ellos no eran conscientes.
Dicen que cuando eres joven solo quieres pasarla bien y no piensas en las consecuencias. Yo creo que es mentira. Piensas en las consecuencias o pasan por tu mente porque no puedes pensar en algo sin que pase una solución a menos que no tenga una; pero no piensas en ellos.
Es como ver un monstruo debajo de tu cama cuando eres un niño pequeño; y en vez de avisar a tus padres te das la vuelta y sigues durmiendo porque te parece divertida la idea de que tu cama sea tan genial como para que hayan monstruos debajo de ella. Claro, que nunca ha sido el caso.
Nuevamente se concentraron. Esta vez cerraron los ojos con más fuerza y dejaron en su mente una enorme tela color blanco para que nada más se pusiera delante de ella. Obviamente; eso no sucedía.
En la tela blanca de Liam aparecía lo bonita que se veía Karolina buscando la información sobre el juego. En la tela blanca de Karolina aparecía Louis y Liam peleando por su amor. En la de Louis aparecía _____; miles y miles de la misma chica para que nunca se pudiera cansar de ella. En la de Ari aparecía el rostro de Harry dando vueltas con un plato de comida, lleno de comida, ¡solo para ella! y en la de ____-sí, esa que estaba pintada un poco de rosa- aparecía Louis con un ramo de rosas.
Nada de espíritus, fantasmas, ni nada.
-Nada, no funciona esta mierda -comentó Liam. Zayn frunció el ceño y dijo:
-Vamos a intentarlo una vez más, ¿vale? -preguntó. Todos asintieron. Pusieron el dedo nuevamente en la moneda y preguntaron si había algún espíritu en presencia de ellos.
Iban a renunciar cuando la moneda se comenzó a mover lentamente hasta el sí. El corazón de ____ se detuvo al igual que el de todos; miró a sus compañeros que tenían un rostro de preocupación e intentó buscar un escape. Algo que le dijera que uno de ellos estaba moviendo la moneda. Miró a Louis pensando que era él; pero no.
Un dos, tres... Oscuridad. La luz se cortó y lo único que escucharon fue un grito.


Mañana cuelgo + ;)

PRECIOSAAAAAAAAA! me encanta c*:

No me puedes dejar asi, PORFAVOR!!

GRACIAS POR EL CAP PERO AHORA ESTOY CON MAS INTRIGA QUE ANTES! JAJJAA
SIGUELA LINDA ME ENCANTA!!!

Acabo de comentar tu otra novela: Harry's girl y he venido a leer los nuevos caps de esta... ¡Me encantaron! Me dejaste con la duda... SIGUELAA

CAPITULO 37

Iban a renunciar cuando la moneda se comenzó a mover lentamente hasta el sí. El corazón de ____ se detuvo al igual que el de todos; miró a sus compañeros que tenían un rostro de preocupación e intentó buscar un escape. Algo que le dijera que uno de ellos estaba moviendo la moneda. Miró a Louis pensando que era él; pero no.
Un dos, tres... Oscuridad. La luz se cortó y lo único que escucharon fue un grito.

------------------------------------------------------------

_____ apretó con fuerza la mano de Louis intentando buscar un lugar en el cual haya protección. Inmediatamente suspiró una y otra vez asustada y le miró; este conocía la voz. Sabía de quien se trataba e inmediatamente fue a la habitación en la que lo había escuchado, mientras todos se quedaron atrás jugando y Karolina le pedía que por favor no vaya; que estaba asustada.
_____ apretó los ojos con fuerza y cuando los abrió notó que Niall, Alba y Harry no se encontraban allí. Frunció el ceño, algo le olía mal, ¿cómo era posible?
Se fijó en Ari que tenía una leve sonrisa en los labios; como si quisiera reír, pero quería aparentar miedo. Era obvio. Entonces comprendió todo cuando se comenzaron a escuchar las risas de Niall; era imposible que no riera. Salió del baño mientras apuntaba a la chica y le repetía una y otra vez que había estado realmente mal. Ella lo miró molesta.
-Idiota -le dijo- Me asuste… -miró a Ari- Y ya se entonces quien fue la que movió la moneda -ella se encogió de hombros. Como diciendo que era ella; no cambiaría y perdón. Rieron.
Durante el resto de la tarde se dedicaron a contar historias divertidas; nada de juegos de terror. Estaban sentados alrededor de una mesa llena de comida contando cosas y recordado. Y Zayn no era tan tímido como aparentaba; tenía varias historias para contar. De hecho; fue quien más habló en ese lapso de tiempo y quien más dio risa.
Louis abrazaba a la chica; Enero estaba acabando.
Puso eso en su mente, ¿cuándo le diría que se tendría que ir? Ya llevaban tiempo de esa hermosa relación y no quería que se acabe tan pronto; y es que si él hubiera sabido que todo eso pasaría nunca le habría pedido que fuera su novia. No porque no quisiera; simplemente porque le provocaba un tanto de tristeza- un tanto, mucho al decir verdad- el hecho de no verla más. Le partía el corazón en mil pedazos y esos pedazos en más pedazos y esos pequeños pedazos en pedazos aún más chicos.
Añicos; Y con esos añicos él podría hacer una enorme torre en donde todos sus sueños se nublen de repente y podría irse con ella para no volver a aparecer nunca más en la realidad.
Él había oído escuchar acerca de controlar los sueños. Aquello que tú puedes hacer lo que tú quieras con tu mente y crear las más fantásticas historias. Y como eran sueños; te metías en ellos de una manera tan real que parecía que fuera tu vida misma.
Pero había sólo un problema; no eran reales.
No lo vivías y siempre había un momento en el que por obligación de ti mismo tenías que despertar; y era entonces cuando te dabas cuenta de que lo controlabas todo sin darte cuenta.
Pero era también el momento en el que comprendías que no podías soñar algo por siempre sin hacer algo por conseguirlo y luego quejarte de que no lo tienes.
La noche se hizo larga; mucho más larga que en otras ocasiones. Porque ahora así lo decidió el chico; porque ahora la tenía abrazada y se olvidó del mundo y de todo lo demás. Dejó de escuchar a todos; excepto la dulce risa que salía de su boca cada vez que decían algo divertido.
Y eso era todo lo que él necesitaba para ser feliz; al menos por el momento no necesitaba un beso. La necesitaba a ella; junto a él, su risa. El echo simple de saber que ella es feliz por lo menos en esos segundos y de que él puede disfrutar de eso; porque la felicidad de ella se convierte en la felicidad de él.
Y entonces la comenzó a observar; tan hermosa. Con su cabello en su brazo; ya que la tenía completamente rodeada como si nunca la quisiera soltar; y aun que su mente inocente piense lo contrario era así. Si fuera por él nunca la soltaría; porque era tan perfecta ante sus ojos.
Aun que a ella no le gustara el ruido que hacía su risa. Aun que a ella no le gustara la manera en la que se veían sus brazos al descubierto. Aun que a ella no le gustara el olor a su perfume y el olor a ella misma. Aun que a ella no le gustara la manera en la que sus mejillas se levantaban para sonreír. Aun que a ella no le gustara la forma en la que caminaba cuando estaba cansada; cuando no lo estaba y cuando tenía ánimo. Cuando estaba aburrida y cuando estaba entretenida; aunque a ella no le gustara nada de lo que hacía, ni de lo que para era buena y para lo que no.
Pero para él ella era buena en todo; y todo eso era perfecto, porque lo hacía ella.
Cada parte de su cuerpo era completamente perfecta. Desde la punta de sus pies hasta el último cabello que habitaba en su cabeza. Y nunca se le había pasado por la mente tener sexo con ella. Frunció el ceño mientras ese pensamiento le invadió la mente. La observó aún durante más rato y se la imaginó desnuda, porque eso es lo que las personas piensan cuando aparece sexo en su mente, ¿no?
Pero él pensaba que tener sexo era eso; simplemente verse desnudo al otro. Divertirse durante un rato. Pues él no quería tener sexo con ella; él quería hacer el amor con ella.
Pero entonces se cuestiona, ¿qué es hacer el amor para él, y que es hacer el amor para algunas personas?
Porque para las personas hacer el amor es tener sexo; pero cuando al mismo tiempo amas a esa persona. Hay una diferencia grande entre ambas definiciones y es amar.
Hacer el amor para él era otra cosa distinta; hacer el amor era el simple hecho de verla cada mañana y que su corazón comience a latir con fuerza.
El hecho de tomar su mano; besar su mejilla.
Él podría hacerle el amor ahí mismo delante de todos, con tan solo tomar su mano.

ME ENCANTA!!
EN SERIO AUNK SIEMPRE DIGA LO MISMO ME ENCANTA TU NOVELA!!
SIGUELA!!
PLIIIISS!!!!