Love Letters {Harry Styles}

- ¿Qué has hecho mal? –pregunto el rizado exasperado- ¿En serio no lo sabes? ¿No tienes la menor idea? –pregunto irónico, con poco humor observando cómo los ojos de su madre se comenzaban a humedecer.

Anne examino las facciones de su hijo y la faceta en la que estaba pasando. Ella observaba sus ojos verdes, sus grandes y tristes ojos. Al igual que sus labios, estos se encontraban fruncidos, adoloridos. Ella en ese momento no tenía la menor idea de lo que estaba pasando, Anne sabía que no era la mejor madre pero tan siquiera pensaba que hacia bien su trabajo. Pero en ese momento cuando miro el rostro de Styles supo que todo no sucedía como ella lo pensaba.

- No… no lo entiendo –susurro una madre con poca valentía, intimidada por la mirada de su hijo, de su confundido hijo Harry Styles- no sé de que hablas Harry, yo… yo siempre he tratado de hacer lo mejor por ti y por Gemma, mis dos tesoros. –susurro Anne incomprendida mirando la furia de Harold.

Harry en ese momento deseo ponerse de pie y abofetear a su madre. Pero en el segundo que lo pensó se arrepintió por completo. ¿Qué es lo que estaba haciendo? –Se pregunto al ver su actitud con su madre, con la mujer que lo había creado- el rizado estaba seguro que si seguía así se arrepentiría de su actitud y de sus acciones.

- Sabes… -susurro el rizado cansado y algo anonadado- debo irme, iré a caminar un rato.- a Harry no le importaba que fuera media noche, el simplemente quería ir a caminar y relajarse para no cometer algún error que pudiera marcar su vida.

- ¿A dónde vas? ¡Es media noche! –grito Anne desesperada, algo cansada- ¡Harry! ¡Vuelve!


Pero ya era tarde. Harry ya había salido de la puerta. El rizado comenzó a caminar sin rumbo alguno, en realidad el no tenía idea ni razón su destino, el solo quería seguir caminando hasta que algo bueno sucediese.

Harry se sentó en una banca de un parque cercano. Tomo su móvil y comenzó a hurgar por su lista de contactos, deseaba hablar con alguien que no fuera Louis, Styles necesitaba optar por otra persona que le dé su propio punto de vista sobre la situación en que se encontraba. Harry necesitaba otro amigo con quien hablar.

Y de pronto ahí apareció el nombre de Zayn, Zayn Malik. Su viejo amigo. Harry pensó unas cuantas veces antes de llamarle debido a que era media noche y el rizado dudaba si el moreno se encontrar despierto.

Pero lo hizo, a los segundos el móvil de Harry comenzó a llamar al móvil del moreno. Uno, dos, tres, la llamada fue atendida y el corazón de Harold tuvo calma por unos segundos.

- ¿Qué pasa Hazza? –pregunto Zayn que se encontraba viendo televisión.

- ¿Estás ocupado, dormido o algo parecido? –pregunto Styles mordiendo sus uñas.

- Sí, estoy teniendo sexo con unas gemelas latinas muy sexys –bromeo el moreno, Harold suspiro sarcástico- ¿Qué pasa Hermano?

- Solo… necesito hablar con alguien, estoy en el parque de siempre ¿Puedes venir?


Zayn en ese momento apago el televisor y se puso sus zapatos. Tenía un amigo a quien ayudar.

- ¿Todo bien? Voy para allá.

Harry suspiro y miro la luna antes de contestarle, el rizado no sabía cómo sentirse.

- Gracias Malik.

Zayn colgó su móvil y salió de su casa sin dar aviso, los padres y hermanas del moreno se habían ido de viaje a un crucero, en fin, Malik sabía que no volverían en un par de semanas y el se encontraba totalmente satisfecho, a él le gustaba lidiar con su soledad.

Minutos después Harry sintió una presencia tomándolo del hombro. Era Zayn, el rizado choco nudillos con el moreno y le regalo una media sonrisa. Malik se sentó a su lado y lo observo. El moreno observo el semblante del rizado, se veía triste, cansado y algo aturdido y por primera vez no supo a que se debía, usualmente Zayn era muy bueno averiguando los problemas ajenos pero en esta ocasión el moreno no tenía ni la menor idea.

- ¿Qué pasa Harry? Te miras bastante mal –hablo el moreno mientras sacaba un cigarrillo de su bolsillo y lo encendía.

Harry se alejo un poco del moreno ya que no le agradaba el olor de la nicotina. Zayn rio un poco y después le sonrió al rizado. Harold, confundido comenzó a toser un poco y después suspiro, el rizado tenía mucho que contar.

- Es solo que hace unos momentos discutí con mi madre-Hablo Styles meneando su cabello- pero no fue cualquier discusión, me sentí tan harto y enojado con ella que paso por mi mente golpearla ¿Puedes creerlo? Tuve que salir de mi casa para no hacerlo, no supe que me paso, no sé que me sucede… me siento tan idiota. ¿Cómo pudo pasar eso por mi cabeza? Sé que Anne no es la mejor madre pero ella no merece que la lastimen mucho menos su hijo.

Zayn hizo una mueca para después analizar las palabras de su amigo. El moreno no duro más de dos minutos para darle una respuesta sabía a su amigo.

- No te preocupes Harold, hiciste lo correcto, te alejaste del problema –parloteo el moreno- ya sabes, hiciste lo correcto, pero también debes hablar con tu madre sin exaltarte o hacer otra cosa que te puedas arrepentir, como en lo que pensaste. Tu madre es una buena persona ella solo está demasiado ocupada o tiene demasiados problemas, nadie es perfecto hermano, tú tienes que relajarte y apoyarla, ¿Me dijiste que es divorciada, cierto? –Harry asintió bufando- quizá esté buscando pareja o algo así Harry, las mujeres no deben estar solas mucho menos una madre como la tuya tu sabes… -en ese momento Zayn comenzó a mover sus manos como si moldeara una escultura a lo que Harry molesto- ya, tranquilo, calmado, no diré nada de tu madre. Solo que no está nada mal.

- Cállate idiota –rio Harold mirando el cielo- tienes razón, quizá este enloqueciendo y mire todo mas dramático –susurro el rizado- creo que hablare con ella mañana.

- Así se habla hermano –hablo Zayn postrando su brazo en los hombros de Harry.

- Aléjate Zayn, apestas a cigarrillo –exclamo Harry- como es que puedes fumar, es asqueroso.

- Eres una nena, Styles. –rio Zayn apagando el cigarrillo- ¿Contento? –Harry asintió- Hermano, que harás, ¿Volverás a tu casa?

- No lo sé –respondió Harry mirando nuevamente el cielo- por ahora no quiero ir ahí pero mañana tenemos clases y ahí tengo todas mis cosas… -susurro Harold pensando en las cartas para _____, en ese momento se le hizo un nudo en el estomago, ____, no había pensado en ella en más de treinta minutos y ya la echaba de menos- quizá me quede unos minutos más aquí y después regrese.

Zayn cogió su móvil y después suspiro mirando a Harry.

- Puedes quedarte esta noche en mi casa, estoy solo –Harry abrió sus ojos como platos burlándose- claro que no de esa forma idiota, no soy un marica como tu novio Tomlinson –Harry en ese momento se molesto y frunció el seño sin decir nada- ya, ya, lo siento, ya no hablare de tu amiguito, como sea, puedes quedarte, hay una habitación libre y tengo comida, solo digo para que no te atengas en problemas esta noche ¿Qué dices?

Harry no necesito pensarlo dos veces. Y acepto, cualquier cosa que lo mantuviera lejos de su madre estaba bien en ese momento.
Zayn miro el cielo y observo las estrellas y le parecieron hermosas, después miro a Harry y le ofreció un cigarrillo a lo que el rizado negó.

- Bueno, al menos por ahora déjame fumar un cigarrillo, mirar las estrellas y después vamos a mi casa. ¿De acuerdo?

- Claro, las estrellas me relajan –admitió el rizado acostándose en el césped.