Re: Novela I'll be here, by your side. (ZAYN y Tú)

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:30 pm

pachula escribió:Pobre Zayn :'( bueno rayis tambien peroal final se hizo la viva y besó a los dos jajaja
Seguila! :)

Estás queriendo decir que rayis es una perris? JAJAJAJAJA okay no. Gracias por pasarte. Ya la sigo! Un besooo!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:32 pm

LaureenLoves1D escribió: :lloro: Así como cuando lloras con un capítulo, bueno así. Síguela pronto, un beso vecina :hug:

Todo se arreglará. Ya lo verás. Gracias por pasarte vecina! Un besooooo! Ya la sigoooooo

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:33 pm

Serenity escribió:Hola bombona! Oficialmente volví, y ahora de nuevo no me despego de las noves! Espero que tengas muchos capítulos para subir, porque yo tengo MUCHAS ganas de leer!
Te cuento que hoy hice algo que vos misma me recomendaste, empece a escribir mi propia novela, no tengo nada todavía, y tengo miedo que no me salga, o la imaginación se me valla, o algo así, pero voy a hacer el intento igual. Espero que subas capitulos.
Besotes tatiii!

Que bueno que seguiste mi consejo. Mándame el link de tu novela cuando la subas!!! :) Besoooos!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:34 pm

MaaiiZM escribió:OMG :O seguilaaaa!!! :wut:

Ya la sigooooo! :)

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:36 pm

Patty'Directioner escribió:SIGUELA PORFAVOOOORR!! D: HACELO POR MI :( :( :( SIII???!?!? PORFAVOR *o* ME ENCANTA ESTA NOVE

YA LA SIGOOOOOO! :D Muchas gracias por pasarte!!! Tranquila todo se arreglará ;)

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:40 pm

Nerea99gt escribió:siguelaaaa quiero ver como sigueeeeeee esta perfecta!

Ya la sigooo! Gracias por pensar eso de la novela! Un besoooo!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:40 pm

pachula escribió:seguila :)

Ya la sigo!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:41 pm

KathaMena escribió:Porque la dejas ahi? me haces sufrir :c

Lo siento :( no es mi intención, pero he estado ocupada. Ya la sigoooo!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 5:42 pm

Nerea99gt escribió:siguelaaa

Ya la sigoooo!

por **TatiStoran** Sáb 16 Feb 2013, 6:04 pm

Capítulo 28:

Sigues narrando tú:

¿Podría Zayn perdonarme por aquel beso? ¿Era infidelidad? No, me dije. Aquel beso no fue un beso entre dos amantes. Louis podría decir que me amaba, pero mis sentimientos por él eran claros. Simplemente éramos amigos. Aquel beso sólo era una salida para que él no se fuera. Si Louis decidía al final que sus sentimientos eran intensos por mi todo terminaría. Rogaba para que no fuera así y el tiempo iba a pasar lentamente.

Ahora tenía un problema más Zayn junto con todo su paquete. Celos, ira e irracionalidad. Eran las tres de la mañana y seguía sin poder dormir. No sabía nada de Zayn. Había llamado a Harry, Niall, Liam y a Danny, pero ninguno de ellos tenía idea de dónde estaba. Me levanté de la cama por un café. Cuando volvía a mi habitación con la tasa de café escuché unos golpes en la puerta.

Dejé la taza en una mesa y salí corriendo. Podía ser Zayn.

-¿Quién es? – pregunté del otro lado. No hubo respuesta y de nuevo golpearon la puerta – ¿Quién es?
-Soy… yo – habló alguien. Podía reconocer esa voz, pero… ¡Demonios! – ábreme.

Abrí la puerta algo insegura y ahí estaba él. Vestía unos jeans gastados, una camisa blanca y su chaqueta negra. Maldición se veía endemoniadamente sexy y chico malo así. Dio un paso y tambaleó. Estaba borracho. Al verme de los pies a la cabeza sonrió de medio lado.

-Yo no le veo la gracia – dije disgustada en el marco de la puerta.
-Yo tampoco – hipó – le veo la gracia de que beses a Louis – respondió con el ceño fruncido.
-Desde aquí hueles a cigarro – sigue sin entender o por lo menos hacer el intento, pensé.
-Sí, estuve fumando – se encogió de hombros – ¿Algún problema?
-Eres un grosero – musité – entra, báñate y tomaras un poco de café que hice para que se te pase la puta borrachera.
-Y luego el grosero soy yo – soltó una risita.
-Lo eres – dije seria – entra.

Zayn se tambaleó un poco y chocó con el marcó de la puerta. Suspiré. Hice que se apoyara en mí y caminamos hasta el baño de mi habitación.

-Siéntate – le dije bajando la tapa del inodoro.
-Puedo hacerlo solo – dijo mientras daba un paso y tambaleaba.
-Sí, claro. Siéntate – le indique de nuevo. Suspiró y se sentó. Comencé a quitarle los zapatos – ¿Por qué no eres capaz de escuchar mis razones? – quité sus medias – sales como un loco a la calle. Te podría haber pasado algo.
-Hiciste lo que más temía – levanté mi vista y tenía el ceño fruncido. Me levanté para quitarle la camisa – ¿Sentiste algo?
-Alza los brazos – lo hizo y le saqué la camisa – ponte de pie.
-¿Por qué no me… respondes? – preguntó mientras se ponía de pie.
-Hablaremos cuando se te pase la borrachera – dije mirándolo a los ojos.
-No quiero que seas de nadie – me tomó de la cintura y me acercó a él – eres mía.

Por extraño que pareciera sus palabras me hacían flotar en una nube y claro que era de él. Estaba total y profundamente enamorada de él. Me deshice de sus manos sobre mi cintura. Estaba enojada con él… Bueno un poco.

-Hablaremos cuando te duches y tomes café – comencé a desabrochar su pantalón y a quitárselo.
-Bien – hipó – reflexionaremos en la cama.

Levanté la mirada y subí una ceja.

-No sueñes con eso – musité. Zayn salió del pantalón y quedó en boxers – entra a la ducha. Cuando salgas te estará esperando un café bien cargado.
-¿Por qué no te duchas conmigo? – preguntó acercándose y con una sonrisa de medio lado. ¡Maldito! Sabía cómo me sentía al sonreírme así.
-No – coloqué las manos en mi cadera y fruncí el ceño – deja de portarte como un niño y entra – señalé una ducha.
-Odio que te comportes como una aburrida – frunció el ceño – por cierto se te olvidó mi bóxer – tomó la cinturilla del bóxer y lo bajó.
-Bien, te espero afuera – dije insegura.

Recogí su ropa y salí del baño. Verlo desnudo era una hermosa fantasía y peligrosa, a la vez. Teníamos que arreglar todo. Zayn sólo decía esas cosas porque estaba ebrio, nada más. Fui hasta el cuarto de lavado y eché su ropa en la canasta para lavar. Olía terrible a cigarrillo y a alcohol. Salí del cuarto de lavado y fui a la cocina para servir una taza de café. Esperaba que la ducha y el café le despejaran la mente a Zayn.

Cuando volví a mi habitación Zayn salía del baño con una toalla alrededor de su cintura y con el dorso cubierto de gotas de agua. Algunos mechones de cabello caían sobre su frente. Tragué saliva. ¿Acaso nunca me iba a acostumbrar a su cuerpo?

-Aquí tienes – dije tendiéndole la taza de café. No me respondió nada, pero tomó la taza. Bebió – ¿Quieres que hablemos ahora o más tarde?
-Ahora – volvió a tomar más café – no puedo esperar a escuchar ese razonamiento que te llevó a hacer lo que hiciste.
-No seas grosero o altanero – musité – sólo quiero que me escuches. Por lo que veo la borrachera ya se te pasó.
-Sigo enojado contigo – me acerqué un poco.
-Por favor, no lo estés – di un paso más hacia él – deja que te explique las cosas.
-Está bien. Explícate.

Se sentó en el borde de la cama y yo hice lo mismo. Todavía tenía la taza de café en las manos. Miré el reloj y eran casi las cuatro de la mañana.

-Zayn… Lo que pasó entre Louis y yo no fue nada – abrió la boca para protestar, pero yo seguí – yo lo hice porque estaba mal. No todos los días o siempre te enteras que tu mejor amigo está enamorado de ti desde la infancia y luego en una arranque de celos le pega a tu novio. Viene y se disculpa, pero dice que se tiene que alejar de mí después de tantos años de amistad – paré un momento pensando que iba a decir algo, pero no. Así que seguí – A tu pregunta en el baño – me acerqué y tomé su mano – no se sentí nada. Yo te amo es a ti, no a él. Para Louis es difícil esto, por favor entiéndelo. Yo no quería que se alejara así que pensé que si lo besaba se iba a quedar conmigo, pero no. Él tiene muchas cosas que pensar como su relación con Eleanor y nuestra amistad. Él tiene muy claro mis sentimientos por él – tomé su rostro en mis manos – sé que te disgustó lo que hice, pero ¿Podrías ponerte en mi lugar y entender que para mí era difícil aceptar que por un tiempo me tenía que alejar de mi mejor amigo?
-Tengo miedo de perderte – susurró – nunca me había importado alguien tanto como tú.
-No me perderás – aseguré – te repito que sólo te quiero y te amo a ti. El beso con Louis fue un acto egoísta de mi parte y puede que pague las consecuencias más adelante con su decisión.
-¿Qué quieres decir?
-Puede que ese beso sea el final de una amistad o la aclaración de sus sentimientos hacia a mí – contesté – ahora lo que me importas eres tú. Zayn, no puedes enojarte y salir así. Me sentí mal.
-Te dije que era celoso – respondió – créeme que estoy haciendo un esfuerzo muy grande por no ir y romperle la cara a Louis. Entiendo lo mal que lo puede estar pasando Louis, pero… – quitó mis manos de su rostro y dejó la taza de café en la mesa de noche – tus besos son míos, tu mirada es mía, tus caricias son mías, tus gemidos son míos… Tus orgasmos son míos.
-Hablas como si fuera de tu propiedad – hice una mueca de disgusto.
-No te he comprado para decir que “eres de mi propiedad”, sólo digo que estamos en una relación en donde aquellas cosas me pertenecen a mí. No creo en la poligamia. ¿Acaso tú sí?
-No – contesté.
-Bueno quiero que tú entiendas que me sentí mal… traicionado, cuando me dijiste lo del beso aunque me gustó el hecho de que me hallas contado y no me lo hubieras ocultado.
-No quiero que nos tengamos nada oculto y nos digamos mentiras.
-Ni yo – acercó su mano a mi rostro – gracias por decírmelo.
-¿Me puedes perdonar? – pregunté cerrando los ojos mientras disfrutaba de la caricia de su mano contra mi mejilla.
-Si me perdonas tú también a mí – susurró. Abrí los ojos y su cara estaba sólo a unos centímetros – ¿Me perdonas?
-Sí, perdono tu ataque de ira – musité.
-Y yo perdono tu acto egoísta, – musitó – pero no lo vuelvas a hacer.
-No creo que exista otro hombre al que yo quisiera besar – llevé mi pulgar a su labio inferior – porque el hombre del que estoy enamorada tiene los labios más carnosos, dulces y adictivos que conozco.
-Mmm… – ronroneó mi Adonis – me pregunto quién será.
-¿Por qué no lo averiguas?
-Quizá debería hacerlo.
-Sí… – concordé – deberías.

Y juntó nuestros labios. Era un beso suave y de reconciliación. Después de la tormenta viene la calma, me dije. Sus manos se posaron en mi espalda y las mías en su pecho mojado. Su lengua rápidamente buscó la mía. Había pasado tantos días sin que nos besáramos así. Zayn me atrajo más hacia él. Sus manos rápidamente se metieron debajo de mi camisa y empezó a subírmela.

-He extrañado esto – murmuró agitado mientras sacaba la camisa por mi cabeza dejando mis senos al aire.
-Yo también – volví a tomar sus labios.

Me senté a ahorcadas sobre él y me apreté más a su pecho. Lo necesitaba y él a mí. Tenía que borrar todo el dolor que había sentido horas atrás. Comencé a mover mis caderas incitándolo. Zayn gimió y me apretó más contra él. Liberó mi boca e hizo que inclinara un poco el cuello. Comenzó repartir besos húmedos y a chupar mi piel.

-Te he extrañado, amor – susurré agitada con los ojos cerrados mientras me deleitaba con sus besos sobre mi cuello – oh sí, cuanto he extrañado esto.
-No más que yo – murmuró.
-Hazme el amor, Zayn – gemí. Tomé su rostro en mis manos. Mi Adonis abrió los ojos – fóllame duro y suave. Hazme el amor y no lo hagas.
-Pequeña…
-Volvámonos locos, Zayn – musité – volvámonos locos juntos.
-Creo que te entiendo – posó un dedo sobre mi labio inferior – y voy a disfrutar volverte loca – moví mis caderas en un lento círculo sobre la ingle de Zayn. Gimió – pequeña diablilla – sonrió de medio lado – te gusta provocarme…
-Me encanta – musité interrumpiéndolo con un media sonrisa.
-¿Ah sí? – asentí. Entonces giró e hizo que quedará debajo de él – ya que me has empalmado vas a tener a las consecuencias – dijo mientras sonreía.

Tomó mi boca en un rudo y sonoro beso. Despegó nuestros labios y bajó de la cama.

-¿A dónde vas? – pregunté con pánico en la voz. No me podía dejar así excitada.
-Voy a quitarme la toalla – respondió sonriendo mientras veía como me tranquilizaba – no creo que haga falta, ¿O sí?
-No, creo que no – dije aliviada.

Tomó el nudo de la toalla y lentamente lo fue soltando. Sus ojos me miraban a mí, pero yo no podía despegar mi vista de su ingle y de aquel bulto que se veía bajo la tolla. Abrió un lado de la toalla y mordí mis labios al ver la decepción de que su miembro seguía tapado. Soltó una carcajada y miré sus ojos. Lentamente abrió el otro lado de la toalla y un gemido de fascinación escapó de mis labios. Mordí mis labios y Zayn dejó caer la toalla al piso. Sentí mis senos ponerse duros con sólo ver su cuerpo desnudo al frente mío. Sonrió y se acercó a la cama. Me tendió la mano y la tomé.

-Ven – me dijo.

Bajé de la cama y me quitó el short de pijama y la tanga rosa que llevaba. Ahora ambos estábamos completamente desnudos y menos mal que días antes había decidido depilarme.

-Zayn, qué…
-Shh – musitó – intentaremos cosas nuevas – susurró a mi oído – sube de nuevo a la cama.

Hice lo que me dijo. Luego él subió, pero se puso atrás de mí. Quitó la goma que tenía en mi cabello y comenzó a despeinarme un poco. Exhaló su aliento sobre mi oído derecho. Mi cuerpo sintió un cosquilleo y sentí mi piel erizarse.

-Quiero que te toques, ___ – abrí mis ojos sorprendida. ¡¿Qué?!, pensé. Giré para verlo, pero me detuvo – me iré por dos semanas y quiero que descubras que puedes tener placer sin que yo esté aquí – susurró. Un dedo empezó a bajar por mi columna vertebral.
-No sé cómo se hace – musité roja de la vergüenza.
-Lo podemos arreglar – murmuró a mi oído izquierdo con una media sonrisa – me encantaría instruirte – pegó su pecho a mi espalda.
-Sí…

Sentí una mano tomar mi seno izquierdo. Mordí mis labios cuando empezó a incitar con su tacto mi seno.

-Toma el otro – susurró – y tócate. Así como lo estoy haciendo.

Vacilé un momento. ¿Por qué Zayn quería que hiciera eso? ¿Probar cosas nuevas? ¿Eso lo excitaba a él? ¿En verdad llegaría a darme placer? Tomé mi seno derecho y empecé a imitar lo que Zayn hacía con el mí otro seno.

-Más lento – me dio un beso en el hombro – no hay prisa.
-¿Te gusta que haga esto? – murmuré un poco agitada.
-Sí – respondió a mi oído – me excita ver que te das placer gracias a mí y por mí – tiró de mi pezón, lo imité y gemí – ve más abajo.

Detuve mi mano. ¿Mi Adonis había dicho “abajo”? Soltó una risita.

-No seas tímida – musitó. Tomó mi mano derecha, sin dejar atender a mi seno, y la fue bajando lentamente por mi torso – esta parte de tu cuerpo la conozco más que tu – abrió la palma de mi mano y la puso sobre mi vagina – abre más las piernas – hice lo que dijo – siente lo húmeda que estás – bajó mi mano hasta la parte inferior y la hizo subir nuevamente – ¿Por qué estás húmeda, nena?
-Por ti – respondí. Me dio un beso en el otro hombro.
-Espero que te agrade saber que mi miembro está cada vez más duro – susurró sobre mi oído.
-Mmm…
-Abre las piernas un poco más – abrí un poco más las piernas. Dejó mis dedos índice y medio sobre la parte superior. Comenzó a moverlos de arriba a abajo y luego en círculo – aquí es – dijo – tócate aquí, nena. Siente tu cuerpo.

Su mano soltó la mía y dejó que se moviera libremente. Tomó mis senos con ambas manos y empezó a masajearlos. Oh, esto era muy gratificante. Con que así se siente las mujeres cuando quieren escapar un rato de la soledad, pensé. Mis dedos se movían arriba y abajo provocando un calor en mí ya poco a poco conocido. Comencé a imaginar a Zayn las veces que me ha tocado y como me sentía; sin embargo luego a mi mente llegaron vagas imágenes de cómo sería ver a Zayn masturbándose. Aquella idea hizo que hundiera mis dedos sobre mi clítoris. Cerré mis ojos extasiada y comencé con movimientos en círculos. Luego de cinco minutos escuché la respiración agitada de Zayn sobre mi oído izquierdo.

-¿En qué piensas? – preguntó.
-En ti – gemí y apreté más mis parpados cuando apretó la punta de mis senos por mi respuesta.
-Exactamente en qué – preguntó agitado.
-En las veces que me has tocado y… – callé. No podía decirle aquellas imaginaciones mías.
-¿Y qué? – ladeó mi cuello. Empezó a besarlo y a chuparlo.
-Y en… – tragué saliva – como serías tú haciendo esto – un gemido escapó de mi boca cuando sentí un calor encenderse en mi vientre. Hubo un silencio.
-¿Te gustaría verme mientras me toco?
-Sí – gemí – ¡Ah! – solté un grito cuando Zayn apretó, de nuevo y más fuerte, mis senos.
-Oh nena – susurró con voz agitada – esas cosas que piensas.
-Vino esa idea a mi mente – susurré y hundí más mis dedos al imaginar aquella imagen de nuevo – y me excita… Me excita mucho.
-Usa esa fantasía para correrte entre mis brazos.
-Lo hago – musité desesperada – lo hago… ¡Ah!

Me retorcí buscando liberación, pero nada que llegaba. Seguí moviendo mis dedos en círculos mientras oía la respiración de Zayn. Enterré mi cabeza entre su cuello y comencé a respirar por la boca. Mis piernas estaban tensas, mis senos pesados, mi pecho subía y bajaba aceleradamente y cada célula de mi cuerpo estaba contraía. Mis gemidos empezaron a salir sin restricción alguna y con una mano agarré la sabana.

-Me verás – rompió el silencio Zayn.

Abrí los ojos maravillada y eso fue lo que necesité para encontrar aquella liberación que tanto necesitaba y mi cuerpo rogaba. Gemí con fuerza, arqueando mi espalda y cerrando mis piernas aún con mi mano masajeando. Mi pecho subía y bajaba, ahora de una manera controlada.
Sentí los labios de Zayn sobre mi cara. Dejaba pequeños besos. Subí mi mano hasta mi estómago y traté de comenzar a calmar mi respiración.

-Eso ha sido precioso, nena – lamió mis dos dedos.
-Mmm… – soltó una risita. Abrí mis ojos y mi su rostro estaba cerca del mío – ¿Qué tal lo hice? – pregunté con perezosa.
-Excelente – dijo sonriendo de medio lado.

Me volví y me senté a ahorcadas. Solté un grito cuando sentí su miembro. Bajé mi cabeza y mis ojos se abrieron como platos. Nunca había visto su miembro así tan grande. ¿Se debía a lo que acababa de hacer o a los días que nos abstuvimos del sexo? Subí mi vista y Zayn soltó una carcajada.

-Te dije que estaba duro – se excusó encogiéndose de hombros.
-¡¿Pero así de grande?! – Zayn de nuevo rió.
-Tenemos tiempo…
-No – dije interrumpiéndolo. Hice un puchero – te vas mañana… por dos semanas.
-No pensemos ahora en eso.

Tomó mi boca con la suya con un ruidoso gemido. Pasé mis manos por su cabello y lo tomé de atrás jalándolo. Mi Adonis pasó sus manos a mi espalda. Las bajó hasta mi culo y me apretó ambas nalgas. Giró hacia un lado haciendo que quedáramos de lado. Tomó mi pierna derecha y la subió a su costado.

-¿Qué estás haciendo?
-La cucharita – murmuró.
-¿La qué…? – solté una risita.
-Calla, amor… – me besó el lóbulo de mi oreja – y disfruta.

Llevó su mano hacía mi clítoris y empezó a masajear. Era extraño como mi cuerpo volvía encenderse en tan poco tiempo, pero sabía la respuesta. Todo era por Zayn y su estimulación.

-Mmm… que húmeda estás.

Sentí mi piel erizarse y la respiración acelerarse. Su tacto desapareció un momento, pero luego sentí la punta de miembro sobre mi entrada.

-Oh – gemí al contacto.
-Lo sé…

Sentí como metía su miembro, pero lo volvía a sacar… ¿Qué? ¡No! ¡Lo quiero dentro!, pensé.

-Zayn…
-Así es. Es para estimularte. Siente, nena… – musitó interrumpiéndome – siente.

Y podía sentirlo. Su miembro entraba y salía estimulando y acariciando mis paredes internas y externas. Era muy, pero muy erótico estar en aquella posición. Posiciones, pensé. Habían tantas, pero yo no sabía ninguna. Giré un poco la cabeza y tomé los labios de mi Adonis. Mordí su labio inferior y él gimió. Se apretó más a mí. Volvió a meter y a sacar su miembro varias veces estimulando.

-___ no puedo más. Tengo que meterlo – susurró agitado.
-Hazlo, hazlo.

Con un grito por parte de ambos metió su miembro y empezó a moverse. ¡Sí!, pensé. Esto era lo que quería. Tenerlo dentro de mí. Oh… En aquella posición Zayn se movía lentamente.

-Mmm – murmuré extasiada. Lo sentía completo. Grande y duro.
-Oh amor – murmuró mientras volvía a entrar.

Alcé mi pierna un poco más para sentirlo más. Sus movimientos aumentaron un poco el ritmo. Empecé a moverme junto a él.

-Sí, sí, sí – gemía agradecida de haber descubierto aquella nueva faceta – más, más, más – Zayn gruñó – Dame más… ¡Ah! – grité cuando un embate de Zayn fue duro y arrollador.
-Más y duro – aseguró con los dientes apretados sobre mi oído.

Sus embestidas ahora eran más rápidas y duras.

-Sí, sí… así… ¡Oh Zayn!
-Ni pienses que después de esto habremos acabado – musitó – haremos mucho más.
-Todo lo que quieras, nene – le dije – ahora quiero que me hagas correr y que tú también lo hagas.

Mordió mi cuello y solté un pequeño grito. Tomó mis labios mientras seguía embistiendo. Sentí mi cuerpo caliente, parecía que se estuviera quemando. Luego de unos embates más sentí mis piernas tensarse.

-Córrete conmigo – pidió Zayn.
-Yo…
-Vamos nena – empujó de nuevo duro.
-¡Ah!
-No aguanto más – gruñó y empujó de nuevo.
-¡Zayn!
-Córrete ___, córrete conmigo – siguió empujando duro y rápido – me voy a correr, nena… ¡Oh! ¡___!

Gritó mi nombre mientras se corría. Yo lo seguí unos segundos después. Zayn se apretó a mí y yo agarré las sábanas mientras el orgasmo pasaba y volvía a controlar mi respiración. Minutos después sentí como sacaba su miembro y bajaba mi pierna. Se abrazó a mí.

-¿Qué tal estás?
-Bien – sonreí con los ojos cerrados.
-¿Sólo bien? – solté una risita.
-Embriagada…
-Y eso que aún falta – susurró.
-¿Qué tienes en mente?
-Mmm… muchas cosas, pero sólo unas cuantas más esta noche…
-Querrás decir amanecer – abrí mis ojos y giré mi cuerpo entre sus brazos – son las cinco de la mañana.
-Mmm – posó un dedo sobre mi nariz – nunca he hecho el amor mientras amanece – bajó el dedo lentamente hasta mi boca – es excitante – reí a su comentario – creo que esta es la mejor reconciliación de la historia. Deberíamos pelearnos más seguido… pero por cosas tontas.
-Sí, creo que las reconciliaciones son buenas – me dio un beso corto.

De pronto un celular sonó. Alcé la vista para buscar el celular.

-Déjalo – dijo Zayn – ha de ser un mensaje.

Luego Zayn se levantó y me tomó en brazos. Chillé y solté una carcajada.

-¡Pero, ¿qué haces?!
-Vamos por ese amanecer – dijo saliendo de la habitación.

Sus palabras provocaron mariposas en mi estómago. Solté una risita y él río conmigo. ¿Qué iba a hacer cuando él se fuera por esas dos semanas a otro continente lejos de mí? La amaba y él a mí. Todo su ser me embriagaba.

Ya la seguí. Espero que les guste y si es así ya saben lo que deben hacer. Gracias por sus comentarios y a las que no comentan, pero se pasan a leer también. Perdón por subir hasta ahora, pero por el horario de este semestre me queda pesado y tengo la novela de Harry. Quiero decirles que pronto esta novela llegará a su final, pero no se alarmen. Será el final de la primera temporada. No se olviden pasarse por mi novela "Pequeñas cosas". Vayan a mi galería. Pronto subiré una nueva novela con Niall. Recuerden que pueden seguirme a mi twitter @tavagutierrez Si hay nuevas lectoras: Bienvenidas! Las quiero xxxx y perdón por el retraso del cap

por **natalee horan styles** Sáb 16 Feb 2013, 7:46 pm

Me encantoooooooooo siguela cuando puedas linda amo esta noveeee

Luego me paso por tus otras noves

Besitos

por **ali&styles** Dom 17 Feb 2013, 6:06 am

Hola guapa!!! que bien que ya la seguiste!!!! Me encanto el capítulo super-meha-hiper-largo; como los de siempre :)
Me encanto y la parte en la que le dice Zayn lo de que se tendrian que enfadar mas veces para tener esas reconciliaciones me mato, enserio, me empece a reir como una loca :jojojo: y mi hermana con cara de :pokerface: jajaja me encanto, y no sabia que Zayn era tan pervertido ¬¬ jajaaja síguela cuando puedas y tambien sigue la de pequeñas cosas plis!!! te kiero muchisimo guapa

por **LaureenLoves1D** Mar 19 Feb 2013, 9:41 am

Oh Dios mi inocencia Novela I'll be here, by your side. (ZAYN y Tú) - Página 25 1926951358

. Si quedaba algo de ella con este capi ya murió! Síguela pronto vecina, un besoo :hug:

por **babbiiy** Miér 20 Feb 2013, 11:35 am

Me encanta esta novela osea no es HOT SIEMPRE PERO CUANDO SALE ALGO HOT ES MUY HOT & NOSE ES MUY TIERNA ME IMAGINO ASI COMO UNA PELICULA ME ENCANTA TU NOVE

por **Max:DD** Jue 21 Feb 2013, 6:57 pm

O.O primera vez qe algo me deja traumada pero tengo que admitir que me gusto el cap. siguela asdfghjklñ

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