Perfect Enemies. (Zayn Malik) ~Adaptada~ (Terminada)

Nombre: Perfect Enemies.
Autor: Tigeerlily.
Adaptación: Sí, es de una chica, que no sé especificamente quién es, porque la leí de otra página, adaptada igual.
Género: Tiene un poco de comedia y un poco de romance, en el título no supe por cual irme, así que me fuí por el que mas o menos domina.
Advertencias: ----
Otras páginas:Sí, en facebook.







Cap 1.

Era una tarde esplendida.
Magnifica, realmente perfecta. Había una exquisita brisa calida a eso de las 4 p.m. A esa hora explícita, me encontraba sentada en uno de los cómodos sillones en la boutique donde trabajo. Un local de color blanco —llegando a ser gélido— resultaba el complemento de un monótono lugar de labor. Trabajaba hace unos meses en este localcillo. Desde que termine mis estudios, me habían propuesto este puesto. Como diseñadora de
zapatos; creaba todo tipo de zapatos. Bajos, tacones, sandalias, etc. La dueña de la boutique, es nada más ni nada menos que mi queridísima tía Tati. Tenía un nombre más complicado, pero el de pila era Tati.
Supongo que así se bajaba la edad. Tati, es la hermana de mi madre. Por lo que es mi tía preferida —además que comparto su locura— cosa que me agrada muchísimo. Dentro de la boutique, trabajo en conjunto con Kate y Allie. Hijas de mi tía, por lo tanto mis queridísimas primas. Kate y Allie, no se parecen mucho que digamos —física y psicológicamente— si no te dijeran que son primas, creerías que son amigas de toda la vida. Kate es de pelo castaño oscuro y ojos verdes. Mientras que Allie, es castaña clara con ojos azules. Realmente dos opuestos. Por mi parte, soy simplemente una chica de 20 años —al igual que mis primas— Mi cabellera es castaña clara, con
mechitas rubias. Y mis ojos, son de un sencillo color verde. No soy muy alta, ni muy menuda. Soy una chica normal de 20 años. Pero basta con descripciones.
—Alice, tu mamá esta al teléfono —dijo desde el escritorio Kate.
¿Mamá, llamándome? Eso si era un suceso. Hacía mucho que me había independizado, y desde ese entonces hablaba muy poco con mamá. Solamente nos hablábamos por cosas importantes —y sacando cuentas— eso era
alrededor de un día por cada semana. Me levante mirando extrañada el teléfono, y levante el auricular para escuchar la noticia que me cantaría mi madre.
—Mamá, ¿Qué haces llamándome? —Dije sin tapujos—
(…)
—No haré nada esta tarde, ¿Por?—
(…)
—¿Quieres verme en un café?—
(…)
—¿Es algo importante?—
(…)
—¿Te vas a casar?—
(…)
—Esta bien, me dejo de bromas y te veo.—
(…)
—Adiós, y también te quiero.—
Colgué más confusa de lo que conteste la llamada. Al parecer era algo importante lo que mamá tenía que confesarme. Mi cabeza maquinaba mil cosas. Y deseaba con fervor que una de esas no fuera un ruego de «Eres
mi única hija mujer, no quiero estar sola». En eso, siento una mano que se pone sobre mi hombro izquierdo.
— ¿Estas bien, cariño? —era Tati.
Sus ojos apenas se apreciaban, ya que había optado por la moda del “flequillo recto y cabellera roja”. Cosa de vanidad —según ella— para sentirse más joven.
— ¿Has hablado con tu hermana?—
— ¿Con tu madre? —pregunto extrañada.
—Por supuesto.—
—No…—me miro fijamente y rodó los ojos, como si supiera exactamente lo que rondaba por mi cabeza— Piensas que a tu madre se le ocurrió alguna idea descabellada, ¿No es así?.— Asentí.
—No se en que parada anda tu madre, pero será mejor que lo averigües.—
Me palmeó la espalda, adentrándose al interior del local.
Tenía razón. Si quería saber lo que mi mamá planeaba, era mejor saberlo desde ya. Tome mi cartera y me fui en busca de un taxi.
—Al café Canelette, por favor.—
El taxi partió en primera. Y casi me causa un infarto al miocardio, de lo rápido que salió. Mientras, me iba arreglando la cabellera lisa, además de mi vestuario que constaba de una falda azul de corte a la
cintura y una musculosa blanca.
—Gracias —dije cuando por fin la maquina asesina había parado. Entre tantas mesas, trate de localizar la cabellera castaña de mi progenitora. Al pasar por los arbustos de jazmines, mi memoria se lanzo a volar. Recordé las tardes de verano que yo y mi familia compartíamos.
Recuerdo que papá jugaba mucho conmigo, y eso provocaba que Niall —mi hermano de 26 años— se volviera un poco celoso. Pero mi padre decía que yo era su niñita, por lo que necesitaba más atención. Niall ya no vivía
con nosotras. Se había ido a Irlanda. Desde que viajamos a esas tierras, quedo enamorado perdidamente. Papá murió hace largo tiempo atrás. Pero eso realmente no me gusta recordarlo. Al igual, que las tardes de verano
me traen a la cabeza a mi querido abuelo materno. Su muerte, tampoco me
gusta recordarla. Prefiero olvidarme del olor a jazmín.
—Hasta que apareciste, mi corazón —expreso sonriente mi querida madre. Odiaba que me dijera corazón…pero que más da. A esta altura de la vida no le discutiré.
—Hola Frances —cuando dije esto, mi mamá se levanto de su asiento y me abrazo eufóricamente, casi dejándome sin aire —mamá sabes que te amo, pero realmente me estas dejando sin oxigeno.—
— ¡Ay lo lamento! —me soltó, pero llevo sus manos a mis mejillas— Pero es que te extrañe tanto pequeñita mía.—
—Mamá…tengo 20 años —fulmine con mi mirada.
—Sigues siendo mi pepita de ají.—
Tomamos asiento. Ambas pedimos algo; yo un jugo y mi madre un té verde. Ya después de todo el reencuentro, decidí ir directo al grano.
—Mamá, ¿Qué es lo taaan urgente que no podías decirme por teléfono?—
Al principio lanzo una carcajada realmente sin sentido. Por no decir, realmente estúpida. Eso fue un signo de que algo entre manos se traía.
— ¡Mamá! —levante la voz en una octava.
—Esta bien —inhalo rápidamente— ¿Recuerdas a la familia Malik?—
—Si claro. Pasamos casi todos los veranos con ellos. ¿A que viene la pregunta?—
—Esta noche nos invitaron a cenar —volvió a sonreír resplandecientemente.
— ¿Y…? —inquirí sin entender la noticia aún.
—Quiero que vayas vestida lo más linda que puedas. ¿Entendido?—
—Esto lo haces solo porque no está Niall —refunfuñe, tomando un sorbo de mi jugo— Lo hago solo por que soy buena hija.—
Deposito un sonoro beso en mi frente. Y yo no tardé en colocarme de un color melocotón. Pero aun así, no entendía lo significativo de esta cena a la casa de la familia Malik.

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Ya eran las 8 en punto.
Hice lo que mi madre me pidió. Me vestí lo más linda que pude. Un vestido liviano de seda de color azul marino, con unos hermosos tacones plateados. Mi cabellera, la había arreglado un poco más. Tenía unas pequeñas ondas, y había ordenado mi pelo en una media cola hecha por trenzas. El maquillaje, era bastante normal —pero resaltando los labios— estaba completamente lista para la cena especial. En eso tocaron el timbre de la puerta de mi departamento. Al abrir, vi unos hermosos ojos pardo que me miraron con una luminosidad nunca antes vista. Su sonrisa era realmente adorable, y sus tiernos rulos que descendían por su frente, lo hacían aún más atractivo y dulce.
— ¡Alice! —grito, e inmediatamente me abrazo con alegría— ¿Me recuerdas?—
— ¡Por supuesto! Eres Jawaad, ¿Cómo olvidarte? —dije igualmente de sonriente que él.
— ¡Woah! Mírate, eres toda una mujer —me tomo de la muñeca, y me giro en 360°— Me falto decir lo bonita que también estas.—
Automáticamente me sonroje, y se me escapo una carcajadita.
— ¿Dije algo malo? —su cara se había transformado en una dulzura innata.
—No, no. —sacudí mi cabeza.
Volvimos a sonreír en silencio.
—Al parecer, seré tu chofer por esta noche —me mostró su brazo izquierdo— ¿Me acompaña, madmasoille?
Volví a reír, y me tome del brazo de Jawaad. Bajamos a la primera
planta —ya que vivía en la quinta— En el estacionamiento nos dirigimos a su elegante Audi Negro.
El resto del camino fueron todo tipo de conversaciones. Que habíamos hecho durante estos años, como iban
nuestros proyectos, recordando viejas memorias de las pasadas tardes de verano, etc. Entablar conversaciones con Jawaad, era realmente un agrado de la vida. Era el hombre ideal. Caballero, dulce, preocupado,
carismático…podría seguir. Realmente era un sueño hecho realidad Jawaad Malik.
—Ya llegamos.—
Había olvidado que la familia Malik tenía un gran sustento de dinero. Eran dueños de uno de los mejores viñedos
del país. Y realmente se veía reflejado en la gran casona que tenía enfrente de mis ojos. Una verdadera mansión.
— ¡Familia, ya llegamos! —grito Jawaad, al entrar.
En un par de segundos, apareció toda la familia Malik, y mi madre.
— ¡Ay Alice, que bonita que estás! —Me abrazaba animosamente la dulce Sra. Malik.
—Gracias Fiama —le sonreí tímidamente.
En eso, un joven de cabello rizado castaño claro, se acerco a mí. Chris.
—Déjame darte un fuerte abrazo —me dijo.
Me tomo de la cintura y me dio un gran vuelo. Yo y Chris, habíamos sido realmente buenos amigos. Pero con el tiempo, habíamos perdido un poco
de conexión. Pero bueno, nunca es tarde para retomarla.
— ¡Chris! Estás todo un hombre joven. Y guapo también —sonreí pícaramente.
—Tu también lo estás —me guiñó; siempre con Chris nos devolvíamos las cosas. Éramos muy competitivos.
— ¿Por qué no vamos a cenar? Estuve toda la tarde haciendo esta exquisita cena, especialmente para ti cariño —me tomo del brazo Fiama.
Todos nos desplazamos al comedor. Comenzamos a comer los deliciosos manjares que Fiama había preparado con arduo esfuerzo. Entre la cena, conversábamos todos de diversos temas. Y las carcajadas hacían eco en las paredes de la casona. En eso, todos sentimos un potente rugir de un motor desde afuera. Al parecer, un ostentoso automóvil hacía su llegada.
—Que hora de llegada es esta de Zayn, ¿No? —dijo un poco molesto Jawaad.
Zayn.
El hermano del medio. Juró con todo mí ser, que lo odiaba. No soportaba su presencia. Era una pestilencia para mí. Desde pequeño se había convertido como un pequeño demonio. Alguna vez, me platee la loca idea de que tuviese los tres 6 en la cabeza. Pero nunca lleve el experimento a cabo. La agradable velada iba directo a su fin, cuando Zayn cruzara el portal.
Los ventanales mostraban la sombra de su varonil figura. Mi respiración comenzó a acelerarse, simplemente de la rabia que estaba recorriéndome las venas en esos segundos.
—Ve a abrirle a tu hermano, Chris —dijo Francisco el padre. Mientras continuaba comiendo su plato. Chris —obedeciendo la orden de su progenitor— saco la servilleta de su regazo y fue a la puerta principal. Giro la perilla. En esos momentos, deseaba que el tiempo se tornara más lento.
—Hola peque —dijo la voz masculina.
—Hola —le respondió Chris.
No tomo mucho tiempo, para que ambos hermanos se acercaran al comedor.
Al entrar, fije mi vista en el energúmeno que tenía enfrente. Tez morena, pelo azabache en ondas; con un corte al estilo mohicano, ojos de almendra —con un brillante color miel en el iris. Vestía una chaqueta de cuero negra, y debajo de esta un suéter azul marino. Los pantalones también eran negros, y ocupaba unos botines brunos, también.

Inmediatamente su mirada se dejo concentrar por mi presencia. Era la misma mirada que siempre me había entregado. Inerte, y gritando a gritos un «te odio».
Desvié mi vista hacia mi plato. Era tan desagradable observarlo, que no podía mantener mi visual fija en sus ojos.
—Hola familia, veo que tenemos visita…—
—Es una abominación que hayas llegado a esta hora, Zayn Javvaad —lo regaño su madre.
—Lo siento, no medí el tiempo, y los minutos se me pasaron.—
Excusas baratas.
Para lo único que era bueno Zayn, era para engatusar a las mujeres. Detestaba esa característica de él. Era todo un mujeriego.
—Perdón Sra. Russo, no era mi intención llegar tarde a esta encantadora cena.—
— ¡Ay! No te preocupes Zayn querido. Mientras ya estés aquí todo bien. —sonrió.
No me cabía en mis casillas como mi mamá adoraba a tal ser como él. Realmente no lo entendía.
—Bueno, toma asiento al frente de Alice. Ya te pondré tu plato.—
Cuando Fiama dijo esto, un sentimiento de fatiga se apropio de todo mi ser. Aparte de soportar su presencia en el lugar, estaba obligada a cruzar su visual. Que tragedia.

Desde que llego Zayn, la cena no fue lo mismo. Me sentía completamente perturbada. Podía sentir como su
mirada quemaba sobre mi piel. Sabía —y podía— percibir el análisis que estaba embargando la mente de él. El resto de la familia no se daba cuenta; seguían conversando como si nada. Pero yo y Zayn nos encontrábamos en un mundo paralelo, que solo nosotros dos sabíamos donde era.
— ¿Qué opinas de esto Alice? —me pregunto sonriente Fiama.
Titubee en un principio; no había escuchado nada. Zayn, al verme en ese estado de sorpresa, bajo la cabeza a su plato y bufó malvadamente.
—Lo lamento…no preste atención —baje los hombros, y de seguro había bajado también la mirada.
—No te preocupes linda —me suavizo el hombro.
—Creo que es tiempo de darle el énfasis importante a esta velada, ¿No? —hablo Francisco; donde Fiama & mi madre asintieron.
Los Malik y yo, estábamos en un estado de extrañamiento crónico. Nadie sospechaba, que era lo tan importante.
—Alice…—comenzó Francisco; levante mi mirada—Zayn…—el también levanto su mirada.
— ¿Cuál es el problema? —pregunto con el cejo fruncido, Zayn.
—Hemos tomado la decisión como familia…—carraspeo mi mamá.
—De que ambos contraigan matrimonio —termino Fiama.
En un segundo, la copa de vidrio que tenía en mi mano, descendió al suelo. Golpeando fuertemente contra el mármol. Y provocando a su vez, unos leves cortes en ella. Estaba sangrando.

No hay ningún comentario?, me hacen sentir triste:c

HOOOOOOOLA!!!! PRIMERA LECTORA!!!!! SOY DIANA, Y SI QUIERES CHICA PARA EL SEXY RULITOS STYLES, ME PRESENTO!!! SIGUELA PRONTO!

DIANA XX

N E W R E A D E R!
Hola.
Que te puedo decir :B
Ame tu Novelaa aksja :$
Siguela Pronto :D

Diana Directilieber escribió:HOOOOOOOLA!!!! PRIMERA LECTORA!!!!! SOY DIANA, Y SI QUIERES CHICA PARA EL SEXY RULITOS STYLES, ME PRESENTO!!! SIGUELA PRONTO!

DIANA XX

Sería un honor ponerte con él, sólo que no sale pareja, y él sólo aparece en una partesita, si aparece algo te juro que te pongo;), y gracias por comentar!, la seguiré luego:3

Cap 2.


— ¡Ay, Alice! —exclamo exaltada Fiama.
Todos dirigían su mirada a mi mano ensangrentada. Los hermanos Malik, se miraban entre ellos, buscando una respuesta concreta a la propuesta de nuestros padres.
—Yo me encargo de Alice —dijo Fiama, seguidamente de tomarme de la cintura y llevarme hacia la cocina.

En la cocina, me encamine al lavaplatos y abrí el agua helada. Gemí un poco, al sentir un ardor por las heridas. Pero es que simplemente no lo podía creer… ¿Yo y Zayn? Eso era imposible. ¿De donde habían sacado idea
tan errónea como esa? Nos detestábamos desde que teníamos uso de razón, y ahora quieren que convivamos como una «pareja» las 24 horas y para el resto de nuestras vidas —hasta que felizmente la muerte nos separe. Tan equivocados no podían estar. Pero no iba a permitir casarme con Zayn, no lo iba a permitir, aunque tuviese que irme lejos, lo haría.
—Ven pequeña —me llamo hacia el mesón de la cocina Fiama.
Limpió mi herida con un poco de alcohol —volviendo yo a gemir— luego me realizo un vendaje leve en el área.
—Gracias a dios no fueron cortes profundos —suspiró.
—Fiama…—era mamá en el portal de la cocina— ¿Me dejas unos minutos con ella?—.
—Si, claro. Iré a ver como van las cosas por allá—.
Fiama se fue, y me dejo sola con mi madre. En esos momentos ni siquiera le quería dirigir la mirada o la palabra. Me sentía traicionada y obligada a hacer algo que no deseaba.
—Alice…—susurró.
— ¿Cómo pudiste? —la mire con mi cara más dolorosa, y con la voz a punto de quebrajarse.
—Cariño… no lo decidí yo —extrañamente, lo dijo con un toque de tristeza.
— ¡Que no te das cuenta de que lo odio! —Exclamé fuera de mis casillas— Ni su mirada venenosa puedo soportarla. Él también me odia, lo sé— golpeé el mesón, dándole más énfasis.
—Alice, esta decisión esta tomada hace mucho tiempo…—.
— ¡¿Por quién?! —grité.
— ¡Por los abuelos! —Tomó aire— Ellos quería que yo y Francisco nos uniéramos en matrimonio, pero como siempre fuimos buenos amigos, no nos veíamos como algo más. Así que le prometimos, que nuestros hijos se
unirían en nupcias—.
—No lo haré —dije tajante, y con resentimiento.
—Solo te pido que lo pienses, no te pido una respuesta ahora. Solo piénsalo—.
— ¿Para qué? Si finalmente me vas a obligar, nunca podré tomar la decisión —la interrumpí por que sabía que objetaría— Y sabes que es verdad, no me jures en vano—.
Y la había dejado con las palabras en la boca. Mamá no podía decir nada más, por que en el fondo de su corazón, sabía perfectamente que lo que estaba haciendo estaba muy mal. No quise mantener su vista, así que agache mi cabeza y tape mis ojos con mis manos. Parsimoniosamente, pequeñas gotitas de agua salada
empezaron a florecer por mis ojos. Estaba sollozando. No quería llorar, realmente no. Pero estaba tan encolerizada, que no tenía otra forma de demostrarlo. Quería gritar, pero no era lo adecuado, no quería que toda
la familia se preocupara por mí. Pero simplemente era injusto. No podía casarme con Zayn, de verdad que no podía. Él no era ni un poco del prototipo de hombre que espero. Es un arrogante, un mentiroso, un
verdadero imbécil, un chico guapo que juega con eso a su favor. Ni siquiera era amable, ni caballero; tampoco era carismático, ni agradable para conversar. Era un Don Nadie. Y para colmo, ahora estaba destinada a
casarme con ese Satanás. No podía tener un pesadilla viviente peor de la que estaba por formularse. Algo tenía que hacer para impedir esa boda, algo tenía…
—No sacas nada con llorar—.
Levante mi mirada.
Era él. Estaba cruzado de brazos frente a mí. Me miraba con la misma visual de siempre. Pero estaba segura que por dentro, se estaba burlando de verme tan débil.
No pensaba dirigirle la palabra, mirarlo con desprecio era más que suficiente.
—Ya se que no te agrada la idea; pues para serte sincero a mi tampoco me motiva la situación. Pero no soy cobarde, y si tengo que hacerlo por un capricho familiar lo voy a hacer. Así, que tendrás que acomodarte a
la idea de ser la futura Sra. Malik—.
—Dime, ¿Qué ganas con esto? —libere sin aguantar mi ira interna.
—Pierdo mucho, ganar…solo el antojo de mi familia—.
—No quiero casarme contigo, ¿Qué no lo entiendes? —suspiré profundamente.
—Yo tampoco quiero hacerlo —dijo con vehemencia— Si buscas un príncipe azul, no lo seré yo—.
—Con mayor razón quiero estar lejos de ti. No puedo soportar la idea de casarme sin amor—.
— ¿Es lo único que te importa? —inquirió.
—Veo que a ti no. Eres un inmaduro. Y es por eso que te odio —dije finalmente, levantándome bruscamente del mesón de la cocina.
No pude llegar a la puerta, ya que sentí que mi espalda chocaba contra una de las paredes. Con fuerza bestial, sobre mi se encontraba un Zayn seductor y decidido.
— ¡Suéltame! —exclamé.
— ¿Segura? —dijo casi rozando mis labios.
—Si no lo haces, voy a gritar —le amenacé.
Carcajeo de una manera irónica y victoriosa.
— ¿Qué es lo gracioso? —pregunté.
—Verte en este estado, es realmente tentador —volvía a acortar distancias sobre mi. Ya podía sentir su aroma en mi ambiente.
—Ni se te ocurra tocarme un pelo, Zayn…—.
— Ja-ja-ja —se burlo sonoramente— ¿Un pelo? Vas a ser mía Alice, acostúmbrate a sentir mi calor—.
—Eres un cerdo, déjame ir —miré directamente hacia sus ojos. Él no conocía la faceta de Alice cuando estaba en ira.
—Esta bien —se alejo, dejándome por fin espacio propio— Pero tarde o temprano, tendremos que estar juntos—.
No quise discutirle más. Así que salí de la cocina lo más rápido que pude. Al llegar al living, vi que todos cambiaban sus miradas hacia mí.
— ¿Te encuentras bien, Alice? —pregunto atento, Jawaad.
—Si estoy bien. Pero preferiría irme, estoy un poco cansada —mentí. Quería largarme lo más rápido que pudiera de Zayn.
—Iré a dejarte —se levanto Jawaad del sillón.
Me despedí de toda la familia.
—Mañana iré a verte —susurro mi madre en mi oído.
No hice objeción. Al fin y al cabo, no podía sentir resignación por mi madre.
Salimos de la mansión y volvimos al Audi Negro de Jawaad.
—Esto es demasiado injusto —dijo Jawaad, levemente irritado.
—Lo sé. No quiero Jawaad, odio a tu hermano como él me odia a mí—.
—Zayn sería un verdadero imbécil si te odiara—.
— ¿Y no lo es? —dije tímidamente.
Ambos carcajeamos.
—Supongo —suspire— que las cosas tendrán que ser así. Yo amaba mucho a mi abuelo, y también le tenía mucho cariño al tuyo. Y si ese era realmente su deseo…—.
—Alice. Tienes el poder de decir no. —Me miro fijo— Si no quieres hacerlo, no lo hagas—.
—Siento que si tomo esa decisión, decepcionaré a todos —me encogí de hombros.
— ¿Pero que es lo que realmente quieres tú?—.
Su pregunta me había dejado perpleja. Jawaad siempre encontraba la palabra para dejarte en una encrucijada.
—Casarme por verdadero amor —pause— Se que suena un poco cursi, pero es la verdad—.
—No es cursi —sonrió— Es verdadero—.
—Que suertuda es tu esposa—.
Jawaad volvió a estallar en carcajadas.
—En realidad, el suertudo fui yo al encontrarla. Realmente la amo Alice, es mi vida —decía emocionado. Se notaba que amaba a Doniya.
—Que daría por tener tu suerte…—bisbiseé.
—Ya llegamos—.
Me despedí de Jawaad, y le agradecí su compañía y apoyo incondicional.
Ya en mi departamento, corrí hacia mi dormitorio por mi pijama. Ya cambiada, no dude en lanzarme hacia mi acolchado. Inhale y exhale una gran cantidad de veces. Pero por una extraña razón, el episodio de Zayn
sobre mí se repetía una y otra vez en mi mente. Lo sentía tan propio, como si volviera a ocurrir en ese momento. Me golpee una cachetada, en la mejilla derecha.
—Que alguien me ayude por favor —ansíe.
[/center]

ZAYN!!!!!! LO AMOOOOOO DEMASIADOOO! ME GUSTÓ EL CAP, SIGUE!

nueva lectora :) me encanta me encanta me encanta! la tenes que seguir, genia.

Me encanta sigueloooooo Lo amoooooooo ZAYNNNNNNN JJEJEJEJEJE
ZAYN... JEJEJEJEJE

Cap 3.

— ¡¿QUÉ?!
Ya en mi trabajo, les había
relatado la historia a mi tía y a mis primas. Y como sospechaba, no iban
a reaccionar de la mejor manera posible.
— ¡¿Frances se volvió loca o que?! —gritaba a los cuatro vientos, Tati.

—Según ella, estaba predestinado por los abuelos Malik & Russo.
— ¡Como no se da cuenta que te casará con el mismísimo Zayn Malik!
—volvía a gritar. A la vez, iba de un lado a otro. Era la más histérica
de las cuatro.
— ¿Qué importancia tiene eso? —pregunte dubitativa.
—Es uno de los solteros más codiciados. Es un magnate del viñedo Malik. Lo que significa bastante dinero —dijo Kate.
—Además, de guapo es un arrogante. Y tú lo odias, es como el elemento a esta pesadilla —concluyo Allie.
—No me agrada para nada la idea…Y si no fuera peor, estas obligada a casarte sin amor —exclamo enfurecida mi tía.
—Lo sé, no me lo repitas —sacudí la cabeza— Pero sencillamente, no tengo escapatoria.
—O tal vez si…—Yo y mis primas miramos fijamente a mi Tía— Haz que el bastardo se arrepienta de casarse contigo.
— ¿Cómo?
—Pan comido. ¿Recuerdan las bromas que se hacen el día de los inocentes?
Asentimos las tres.
—Para Zayn, podría durarle un poco más… ¿No creen?
Me daba miedo —pero a la vez— tentación de risa la perversidad de mi
tía. Pero tenía razón, la mejor manera de que Zayn se arrepintiera de
casarse conmigo, era hacerle la vida imposible. Cosa fácil para una
mujer.
— ¿Chris? (…) ¿Cómo estás? (…) Yo bien, pero necesito pedirte
un favor, a ti y a Jawaad. (…) Verás, necesito saber algunas cosas
sobre Zayn.
Eso fue el comenzar del plan. Durante la tarde
restante, yo y mi clan familiar creamos la broma de hoy por la noche.
Jawaad & Chris, me ayudaron a organizar una parte de ella. El plan
No Casamiento, iba viento en popa.

***
—No tengo nada que
hacer esta noche, ¿Por?
(…)
—¿Noche de pocker en mi departamento?
(…)
—Si
ustedes traen las cervezas, yo pongo el lugar
(…)
—Trato hecho viejo, nos
vemos.

Zayn Malik, estaba sentado en su escritorio. Ya se acercaba
la hora de retirarse. Necesitaba un poco de diversión. Apago su
ordenador, y dejo su oficina con llave. Salió al estacionamiento por su
porshe cayman negro. Amaba su auto. Era su objeto de mayor deseo. Pero,
siempre había deseado algo con mucho más fervor. Con más frenesí. Y poco
a poco, ese deseo iba a ser saciado. Torció una mueca seductiva de solo
pensar en ello.

***
—Está todo listo Alice —dijo Lou.
—Déjame entender algo, ¿Cómo vamos a supervisar que todo salga correcto?
—Tú te vendrás conmigo en mi auto. Vamos a espiar afuera de su
departamento. Yo tengo que darle la señal, a ya sabes quienes, y entran
en acción.
—Entiendo. Estoy un poco nerviosa, creo.
—Respira, cariño —deposito una mano sobre mi hombro— piensa que será divertido.
Yo y mi tía salimos del local, y fuimos en busca de su auto. Ya
adentro, enfocamos el rumbo hacia el departamento de Zayn. Teníamos que
estar antes de las 8 pm.

***
— ¡Chicos! —saludaba eufóricamente Zayn, a todos sus amigos.
— ¿Qué tal bro? —preguntaba uno del grupo.
— ¿Trajeron el armamento?
—Eso no se pregunta —levanto otro el pack de cervezas.
Zayn sonrió.
Ya en la mesa, los 6 chicos se pusieron en sus respectivas posiciones
para darle el comienzo a la primera partida de pocker de la noche.
Intermediaba cada jugada, con un sorbo de cerveza. Además, de hablar de
mujeres. Tópico general entre hombres.
—Hablando de mujeres…—comenzó Zayn— Me caso.
Todos sus amigos, casi se atragantan con la cerveza.
—No es para tanto, ¿o sí? —pregunto.
—Viejo,...eres TÚ casándote. Eso no pasa todos los días.
— ¿Y a que se debe esta decisión? ¿Tenías novia oficial y nunca lo dijiste? —pregunto otro chico.
—No, capricho familiar. Por seguirle el deseo a mi difunto abuelo, quieren que me case con Alice.
Todos se quedaron en silencio.
— ¿Con Alice? —uno enfatizo el nombre de la chica.
— ¿Conoces a otra? —inquirió Zayn.
— ¿Cómo se lo tomó?
—Obviamente que mal. Pésimo, es más me odia —sonrió tomando de la
botella de su cerveza— Pero tranquilos chicos, Zayn sabe como domar a
las gatitas.
— ¿Gatitas? Me parece que Alice es una Leona.
—Podrá serlo… —pauso— Pero cuando la este haciendo mía, solo dirá «más» —carcajeo.
Todos le siguieron la burla a Zayn. En eso, tocaron la puerta.
— ¿Esperábamos a alguien más? —vacilo Zayn.
El resto de los chicos negaron con la cabeza. Así que Zayn, se paro de su asiento y fue directamente a abrir.
Craso error.
—POLICÍA NADIE SE MUEVA.
En un par de segundos un batallón de policías ingresaron al departamento, esposándolos a todos, y nadie entendía porque.
— ¡Exijo una explicación! —gritaba Zayn, que estaba en el suelo.
—Están detenidos por posesión de contrabando de drogas y sustancias —dijo uno de los policías.
— ¡Se equivocan! ¡Aquí no existe nada de eso! ¡Es una farsa! —gritaba cada vez más sulfurado Zayn.
Pero no hicieron caso a sus objeciones, y a la fuerza se los llevaron a todos.

***
— ¿Ya ingresaron? —pregunte levemente preocupada.
—Si, al parecer deberíamos estarlos viendo salir —dijo Tati, al consultar la hora en su reloj.
Y no se equivocaba.
Venía un escuadrón, con los 6 jóvenes esposados. Sentía un poco de
presión en el pecho, al hacer esto…pero era lo necesario para que Zayn
no se casara conmigo. No demoré, en ver sus ojos envueltos en una cólera
magnánima. Tenía miedo de que sus ojos, divisaran los míos. Pero al
parecer no podía, él no podía ver otra cosa que a los policías.
Pero algo le llamo la atención. Y giró.
Estoy segura que reconoció mis ojos, ya que se quedo un tiempo estático
y negando con la cabeza. Después no le ví más, ya que lo ingresaron al
auto de policía.

***
—Solo dime si fue Alice, la de esta
burla —Zayn tenía a uno de los policías por el cuello, por poco le
estaba quitando el oxígeno— ¡Habla sabandija! —grito con furia.
—S…í —susurro levemente.
Zayn le soltó el cuello, y lo dejo caer para que se recuperara. Después
se largo a su departamento cuando todo el drama se había terminado.
Abrió la puerta de un solo empujón, estaba hirviendo en cólera.
—Con que quieres jugar Alice… te demostraré que el último siempre es mejor.
Diciendo finalmente esto, se despojo de toda su ropa y se dejo encandilar por el sueño.

Arrrggggg... Zayn... Lo quiero para mí solita... :twisted: Sigue pronto!

No tengo palabras
siguela YAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAa

ajajajaja, esta Alice es una ídola. Me encantó en capítulo! seguila :)

Grrrrrrr... Malik, te quiero debajo de mis sábanas... Ok, estoy loca, es oficial. Síguela!