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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)
CAPITULO 3
AH!, pero si estáis los dos levantados... —murmuró con una sonrisa—.Llegaba hasta mi cuarto el olor a comida y no he podido resistirme a pesarde la pereza que me daba levantarme.
_____ seguía revolviendo los huevos, a pesar de que ya estaban más que hechos.
—Pues vete sentando —le dijo ____, rogando porque su voz no le sonara a Ada tan temblorosa como le parecía a ella. ¡Maldito Nick...! —, esto estará listo en un periquete.
—Será mejor que me vista —murmuró el ranchero, guiñando un ojo a su hermana al pasar junto a ella—; creo que así pongo nerviosa a «alguien...»
Y salió de la cocina mientras _____ soltaba un improperio entre dientes.
—Ya estáis otra vez por lo que veo... —suspiró Ada con hastío.
—Ha sido él quien ha empezado —masculló su amiga—. Yo no le he pedido que entrara aquí medio desnudo.
—¿Qué? —inquirió Ada parpadeando.____ miró a su amiga y contrajo el rostro.
—Dios, es que tiene un cuerpo tan increíble... — farfulló sin poder reprimirse.Ada se rió divertida.
—Muchas mujeres me han hecho esa confesión, pero nunca la hubiera esperado de ti.
—Se me han debido cruzar los cables; olvídalo — dijo ____ sirviendo los huevos revueltos en una fuente—. Creo que será mejor que yo vaya a vestirme también.
—Bueno, pero no tardes o se enfriará todo.
—No, vuelvo enseguida.
_____ corrió a su habitación y justo cerraba la puerta de su dormitorio cuando Nick salía del suyo. ¡Por que poco!
Aquélla iba a ser una larga semana.Nunca hubiera imaginado que el hermano de Ada pudiera llegar a tener un efecto semejante en ella. En todos esos años jamás había intentado siquiera coquetear con ella, y de repente, en sólo dos días estaba lo grando minar sus defensas, cosa que nadie había logrado en sus veinticinco años de vida.
Cuando regresó a la cocina, Nick y Ada ya estaban sentados a la mesa desayunando.
—Te he dejado leche caliente —le dijo Nick cuando tomó asiento junto a su hermana—. Iba a tomarme una segunda taza de café, pero no quiero aprovecharme sólo por estar de visita.
—Qué amable por tu parte... —masculló ella con una sonrisa forzada,sirviéndose.
—¿A qué se dedica tu novio? —le preguntó Nick de improviso, observándola fijamente.
—Jack no es mi novio, simplemente salimos juntos —le aclaró ella—. Y ya que quieres saberlo, es columnista político en el New York Times.
Nick se recostó en su asiento, y Ada se mordió el labio inferior, mirándolo de un modo aprensivo.
—¿No me digas? —murmuró su hermano—. Pues no parece que haga mucho ejercicio. Porque está un poco enclenque, ¿no?
—No está enclenque —replicó ____ mirándolo airada—, es que trabaja mucho y no tiene tiempo para hacer deporte.
Nick soltó una carcajada despectiva.
—Si yo lo llevara al rancho aprendería el verdadero significado de trabajarduro. No aguantaría ni una semana.
—En eso tienes razón; nadie podría aguantarte más de una semana —respondió ____ con una sonrisa sarcástica—. En cualquier caso, ¿puede saberse qué te importa a ti con quién salga?
—Ésa es una buena pregunta —contestó él. Entornó los ojos, y se dibujó en sus labios una media sonrisa cuyo significado _____ no pudo adivinar—. A lo mejor es que me da pena el pobre. Porque sabe a qué te dedicas, ¿verdad? Debe ser un verdadero infierno para él que todo lo que hace en la cama contigo aparezca publicado en tus libros...
— ¡Nicholas...! —gimió su hermana disgustada, tapándose el rostro con las manos.
—Eres... eres un... —masculló ____, temblando de ira—, ¡eres un miserable, un ruin, y un despreciable! —explotó poniéndose de pie y arrojando la servilleta sobre la mesa.
—Vaya, alguien se ha levantado con el pie izquierdo esta mañana... —comentó Nick burlón—. ¿Dónde están tus modales, _____? Estoy aquí como invitado y...
— ¡No porque yo lo haya querido! —le espetó ella furiosa—. ¡Antes invitaría a una cobra a desayunar!
—Deberías haberlo hecho —murmuró él—. Seguro que a una cobra no le habrían parecido mal tu beicon quemado, tus huevos medio crudos, y tu café aguado.
_____ lo miró boquiabierta de indignación. ¿Cómo se atrevía? Intentó decir algo, pero estaba tan enfadada que no le salían las palabras, así que se dio media vuelta, salió de la cocina como un huracán, y abandonó el piso antes de que Ada pudiera ir tras ella. Necesitaba aire fresco. Sin embargo, no se había puesto chaqueta y hacía algo de frío a esas horas de la mañana, asíque tras dar unas cuantas vueltas tiritando finalmente decidió que tendría que tragarse el orgullo y regresar. No iba a pasar todo el día de ambulando por las calles. «Es por Ada», se repitió antes de entrar en el bloque de pisos, «si hago esto es sólo por Ada».Sin embargo, cuando entró, Nick no estaba allí, y su amiga parecía cansada y avergonzada.
—No lo entiendo, ____, te juro que no entiendo por qué se comporta así —trató de disculparse por su hermano—. Si hubiera sabido que iba a tratarte de esta manera tan odiosa no lo habría invitado.
____ tuvo la prudencia de no decirle que ella ya le había advertido que aquello no resultaría.
—No importa, sólo serán unos días más. Lo soportaré —le dijo dejándose caer en el sofá con un pesado suspiro—. ¿Dónde está, a todo esto?
—Me ha dicho que iba a pasar el día con una amiga —respondió Ada—, y que tal vez regrese tarde.¿Por qué estúpida razón oír el pensar que estuviera con otra mujer hacía que la invadieran pensamientos homicidas?, se preguntó ____, profundamente irritada consigo misma.Para quitarle un poco el mal humor, Ada le propuso que se fueran juntas de compras, y así lo hicieron, e incluso almorzaron fuera, en un pequeño restaurante griego en el centro de la ciudad.
No volvieron hasta pasadas las seis, y estaban tan reventadas que tras dejar las bolsas en sus dormitorios se quitaron los zapatos, se prepararon unos sandwiches y vieron la televisión hasta que decidieron que era hora de irse a dormir porque a ambas se les estaban cerrando los ojos.
Nick no regresó hasta la mañana siguiente. Eran casi las diez y media, y _____ estaba sentado en el suelo del salón, rodeada de papeles, páginas y más páginas de su última novela, cuyas correcciones estaba revisando para enviársela al editor. Ada había salido, porque esa mañana tenía unas pruebas para una obra de teatro que iba a empezar a ensayarse en enero, y aunque le había dicho que esperaba volver para el almuerzo, ____ estaba casi segura de que no sería así, porque se presentaba mucha gente, y las pruebas siempre se alargaban, y estaba temiendo el regreso de Nick.
Una hora más tarde llamaron a la puerta, y cuando fue a abrir se encontró con Nick, con la misma ropa que el día anterior, y una expresión divertida en el rostro, como si algo le hiciera mucha gracia.
—¿Has perdido la llave que te dio Ada? —le preguntó _____.
—No, pero pensé que sería mejor no usarla... no fueras a tener compañía —contestó él.
AH!, pero si estáis los dos levantados... —murmuró con una sonrisa—.Llegaba hasta mi cuarto el olor a comida y no he podido resistirme a pesarde la pereza que me daba levantarme.
_____ seguía revolviendo los huevos, a pesar de que ya estaban más que hechos.
—Pues vete sentando —le dijo ____, rogando porque su voz no le sonara a Ada tan temblorosa como le parecía a ella. ¡Maldito Nick...! —, esto estará listo en un periquete.
—Será mejor que me vista —murmuró el ranchero, guiñando un ojo a su hermana al pasar junto a ella—; creo que así pongo nerviosa a «alguien...»
Y salió de la cocina mientras _____ soltaba un improperio entre dientes.
—Ya estáis otra vez por lo que veo... —suspiró Ada con hastío.
—Ha sido él quien ha empezado —masculló su amiga—. Yo no le he pedido que entrara aquí medio desnudo.
—¿Qué? —inquirió Ada parpadeando.____ miró a su amiga y contrajo el rostro.
—Dios, es que tiene un cuerpo tan increíble... — farfulló sin poder reprimirse.Ada se rió divertida.
—Muchas mujeres me han hecho esa confesión, pero nunca la hubiera esperado de ti.
—Se me han debido cruzar los cables; olvídalo — dijo ____ sirviendo los huevos revueltos en una fuente—. Creo que será mejor que yo vaya a vestirme también.
—Bueno, pero no tardes o se enfriará todo.
—No, vuelvo enseguida.
_____ corrió a su habitación y justo cerraba la puerta de su dormitorio cuando Nick salía del suyo. ¡Por que poco!
Aquélla iba a ser una larga semana.Nunca hubiera imaginado que el hermano de Ada pudiera llegar a tener un efecto semejante en ella. En todos esos años jamás había intentado siquiera coquetear con ella, y de repente, en sólo dos días estaba lo grando minar sus defensas, cosa que nadie había logrado en sus veinticinco años de vida.
Cuando regresó a la cocina, Nick y Ada ya estaban sentados a la mesa desayunando.
—Te he dejado leche caliente —le dijo Nick cuando tomó asiento junto a su hermana—. Iba a tomarme una segunda taza de café, pero no quiero aprovecharme sólo por estar de visita.
—Qué amable por tu parte... —masculló ella con una sonrisa forzada,sirviéndose.
—¿A qué se dedica tu novio? —le preguntó Nick de improviso, observándola fijamente.
—Jack no es mi novio, simplemente salimos juntos —le aclaró ella—. Y ya que quieres saberlo, es columnista político en el New York Times.
Nick se recostó en su asiento, y Ada se mordió el labio inferior, mirándolo de un modo aprensivo.
—¿No me digas? —murmuró su hermano—. Pues no parece que haga mucho ejercicio. Porque está un poco enclenque, ¿no?
—No está enclenque —replicó ____ mirándolo airada—, es que trabaja mucho y no tiene tiempo para hacer deporte.
Nick soltó una carcajada despectiva.
—Si yo lo llevara al rancho aprendería el verdadero significado de trabajarduro. No aguantaría ni una semana.
—En eso tienes razón; nadie podría aguantarte más de una semana —respondió ____ con una sonrisa sarcástica—. En cualquier caso, ¿puede saberse qué te importa a ti con quién salga?
—Ésa es una buena pregunta —contestó él. Entornó los ojos, y se dibujó en sus labios una media sonrisa cuyo significado _____ no pudo adivinar—. A lo mejor es que me da pena el pobre. Porque sabe a qué te dedicas, ¿verdad? Debe ser un verdadero infierno para él que todo lo que hace en la cama contigo aparezca publicado en tus libros...
— ¡Nicholas...! —gimió su hermana disgustada, tapándose el rostro con las manos.
—Eres... eres un... —masculló ____, temblando de ira—, ¡eres un miserable, un ruin, y un despreciable! —explotó poniéndose de pie y arrojando la servilleta sobre la mesa.
—Vaya, alguien se ha levantado con el pie izquierdo esta mañana... —comentó Nick burlón—. ¿Dónde están tus modales, _____? Estoy aquí como invitado y...
— ¡No porque yo lo haya querido! —le espetó ella furiosa—. ¡Antes invitaría a una cobra a desayunar!
—Deberías haberlo hecho —murmuró él—. Seguro que a una cobra no le habrían parecido mal tu beicon quemado, tus huevos medio crudos, y tu café aguado.
_____ lo miró boquiabierta de indignación. ¿Cómo se atrevía? Intentó decir algo, pero estaba tan enfadada que no le salían las palabras, así que se dio media vuelta, salió de la cocina como un huracán, y abandonó el piso antes de que Ada pudiera ir tras ella. Necesitaba aire fresco. Sin embargo, no se había puesto chaqueta y hacía algo de frío a esas horas de la mañana, asíque tras dar unas cuantas vueltas tiritando finalmente decidió que tendría que tragarse el orgullo y regresar. No iba a pasar todo el día de ambulando por las calles. «Es por Ada», se repitió antes de entrar en el bloque de pisos, «si hago esto es sólo por Ada».Sin embargo, cuando entró, Nick no estaba allí, y su amiga parecía cansada y avergonzada.
—No lo entiendo, ____, te juro que no entiendo por qué se comporta así —trató de disculparse por su hermano—. Si hubiera sabido que iba a tratarte de esta manera tan odiosa no lo habría invitado.
____ tuvo la prudencia de no decirle que ella ya le había advertido que aquello no resultaría.
—No importa, sólo serán unos días más. Lo soportaré —le dijo dejándose caer en el sofá con un pesado suspiro—. ¿Dónde está, a todo esto?
—Me ha dicho que iba a pasar el día con una amiga —respondió Ada—, y que tal vez regrese tarde.¿Por qué estúpida razón oír el pensar que estuviera con otra mujer hacía que la invadieran pensamientos homicidas?, se preguntó ____, profundamente irritada consigo misma.Para quitarle un poco el mal humor, Ada le propuso que se fueran juntas de compras, y así lo hicieron, e incluso almorzaron fuera, en un pequeño restaurante griego en el centro de la ciudad.
No volvieron hasta pasadas las seis, y estaban tan reventadas que tras dejar las bolsas en sus dormitorios se quitaron los zapatos, se prepararon unos sandwiches y vieron la televisión hasta que decidieron que era hora de irse a dormir porque a ambas se les estaban cerrando los ojos.
Nick no regresó hasta la mañana siguiente. Eran casi las diez y media, y _____ estaba sentado en el suelo del salón, rodeada de papeles, páginas y más páginas de su última novela, cuyas correcciones estaba revisando para enviársela al editor. Ada había salido, porque esa mañana tenía unas pruebas para una obra de teatro que iba a empezar a ensayarse en enero, y aunque le había dicho que esperaba volver para el almuerzo, ____ estaba casi segura de que no sería así, porque se presentaba mucha gente, y las pruebas siempre se alargaban, y estaba temiendo el regreso de Nick.
Una hora más tarde llamaron a la puerta, y cuando fue a abrir se encontró con Nick, con la misma ropa que el día anterior, y una expresión divertida en el rostro, como si algo le hiciera mucha gracia.
—¿Has perdido la llave que te dio Ada? —le preguntó _____.
—No, pero pensé que sería mejor no usarla... no fueras a tener compañía —contestó él.
MeliGarcia
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
sdfgnaskjgnskla Sigueeeeeeeeeeeeee♥
Seeyouinanotherlife
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
OMJ!
lo he dicho antes y lo repito! :¬¬:
TE GUSTA DEJARME CON EL ALMA EN UN HILO!
:caliente: :caliente2:
Como la dejas ahí!?????
cada día esta mejor! ;)
Esperando el próximo capitulo!
XOXO
lo he dicho antes y lo repito! :¬¬:
TE GUSTA DEJARME CON EL ALMA EN UN HILO!
:caliente: :caliente2:
Como la dejas ahí!?????
cada día esta mejor! ;)
Esperando el próximo capitulo!
XOXO
HeyItsLupitaNJ
Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)
Continuacion....
_____ le habría soltado algo, pero optó por ignorarlo, y tras dejarlo entrar y cerrar de un portazo volvió al suelo con sus papeles.
—Queda café si quieres —le dijo a Nick fríamente sin mirarlo—. Y no me molestes, estoy muy ocupada.
—Oh, no pensaba hacerlo. He venido a darme una ducha y a cambiarme. He quedado para comer.
¿Por qué?, ¿por qué sentía deseos de romper platos?, se preguntó _____ apretando los dientes mientras trataba de concentrarse en lo que estaba haciendo.
Nick se fue por el pasillo y regresó minutos después ataviado con un traje gris perla, corbata a juego, impecables zapatos, y una camisa de seda blanca. Estaba elegante, sexy, increíblemente guapo para ser un hombre tan feo. Si se había vestido así para ir a un almuerzo, pensó ____ frunciendo elceño, debía ir por lo menos al hotel Waldorf, y seguramente con una mujer despampanante de ésas con las que solía salir.
—Ada no se habrá ido preocupada esta mañana, ¿verdad? —le preguntó _____ consultando su reloj de pulsera.
—Oh, no, está acostumbrada: yo paso la noche fuera un montón de veces —mintió ella deliberadamente, alzando la vista.Habría jurado que los ojos grises del ranchero relampaguearon un instante, pero se dijo que debían haber sido imaginaciones suyas.
Nick la recorrió con la mirada, y _____ bajó la vista nerviosa a sus papeles.
El ranchero se acercó a ella, y se inclinó, tomando una hoja al azar y a medida que sus ojos fueron descendiendo de una línea a otra, una sonrisa malévolase dibujó lentamente en sus labios.
—No te cortas nada a la hora de escribir estas escenas de cama —murmuró.____ alargó el brazo y le arrancó la hoja de las manos, sonrojándose profusamente mientras la metía debajo de la que estaba repasando. ¿Porqué había tenido que ser precisamente esa página la que hubiera leído?,gimió para sus adentros.
—¿Es ahí donde te gusta hacerlo? —continuó picándola _____, metiéndose las manos en los bolsillos y mirándola fijamente—. La verdad es que nunca he probado a hacerlo en una bañera, pero supongo que...
—¿Te importaría marcharte a donde tengas que ir y dejarme tranquila? —lo cortó ella bajando más la cabeza—. Me importa un rábano dónde lo hayas hecho o con quién, así que por favor, vete a tu almuerzo y déjame con mis«sórdidas» ocupaciones.
—Me temo que sí tendré que dejarte, porque a los corredores de Bolsa desde luego no les gusta que los hagan esperar.
____ alzó el rostro cuando él se estaba poniendo la chaqueta y dándose la vuelta para dirigirse hacia la puerta.
—¿Corredores de Bolsa? —repitió perpleja.Nick se giró hacia ella con una expresión extraña.
—Soy un hombre de negocios —le recordó—. Un rancho no es productivo todo el año, y necesito hacer fuertes inversiones para mantenerlo a flote.
—Lo sé —se apresuró a contestar ella—. Es sólo que pensé...
—Que porque he pasado la noche fuera... ¿había quedado con una mujer para una comida de placer? — terminó él su frase, en un tono amenazador._____ volvió a lo que estaba haciendo, tratando de ignorarlo, pero no era fácilcuando estaba mirándola fijamente desde sus casi dos metros de altura.
—Te sorprendería saber las razones por las que he pasado la noche fuera,______... —murmuró Nick—. Quizá tengan algo que ver contigo.
Esas últimas palabras hicieron que ____ alzara el rostro hacia él. Sus ojos se encontraron, y sintió como si una corriente eléctrica la recorriera por dentro.
—No esperaba que al tocarte fueras a empezar a temblar —le dijo Nick con voz ronca—. No después de todos estos años siendo enemigos...
—Aún lo somos —le aclaró ella por si acaso, en lo que esperaba fuera un tono convincente de enfado, porque la humillación era demasiado grande.
—Cierto —respondió él fríamente—, y eso es lo que vamos a seguir siendo.No quiero complicaciones.
—Lo mismo digo —masculló ella con aspereza—. Y no te hagas ilusiones —añadió—, si reaccioné así fue sólo porque no me lo esperaba y estaba medio dormida.
En el silencio que siguió los ojos del ranchero escrutaron los suyos.
—¿Tratando de salvar tu orgullo?
Ella lo miró irritada.
—Me gusta mi vida tal y como es, y lo que intentaste ayer por la mañana fue...
—¿Lo que intenté? —se burló él, soltando una carcajada—. ¿Quién está haciéndose ilusiones ahora? ¡Por favor, me gustan las mujeres con una cierta experiencia, pero no las promiscuas!
____ se puso de pie como un resorte, y estaba a punto de levantar la mano para darle una bofetada cuando la furibunda expresión en el rostro de él la dejó paralizada, como si le hubiera echado un sortilegio.
—Te aconsejo que ni lo intentes —le advirtió Nick—. Una vez me diste una bofetada y no hice nada, pero si vuelves a hacerlo, acabaremos en la cama.
____ se estremeció de arriba abajo.
—No me acostaría contigo ni por todo el oro del mundo —masculló.El ranchero sacudió la cabeza.
—¿No te das cuenta de que reaccionamos como un compuesto químico explosivo? Bastaría con un solo beso. Con un único beso saltaría la chispa, y arderíamos en llamas. Es algo que he sabido desde el principio, desde el día que te conocí.
____ estaba roja como una amapola, y contuvo con dificultad un gemido mientras le daba la espalda y se rodeaba la cintura con los brazos en actitud de protección.
—No te preocupes, chica de ciudad, estás a salvo de mis apetitos —le dijo Nick en un tono burlón—. No estoy tan desesperado, pero no me provoques.
_____ no podía dar crédito a lo que estaba sugiriendo. Para ella él siempre había sido el enemigo, y las cosas iban a seguir igual aunque tuviese que morderse la lengua hasta hacerse sangre. Fue hasta la ventana y se quedó allí, dándole la espalda y observando la calle con la mirada perdida.
—¿Y se puede saber a qué viene ahora ese numerito de chica inocente herida en su pundonor? —la pinchó él sarcástico—. Creía que era mi hermana quien había estudiado Arte Dramático y no tú.
No tenía que interpretar el papel de chica inocente, porque verdaderamentelo era, pero aunque se lo dijera, él jamás la creería. Además, la había dejado aturdida, amenazándola con llevársela a la cama por provocarlo, cuando nisiquiera era consciente de haberlo hecho. ¿Lo había hecho, lo había provocado sin darse cuenta? El que la respuesta pudiera ser «sí» y las razones por las que lo habría hecho la aterraron. Dios, aquello no podía estar ocurriendo... ¡No podía sentirse atraída de verdad por Nick Jonas!
—____... —la llamó él en un tono quedo.Ella se puso rígida.
—Vas a llegar tarde a tu cita —farfulló ásperamente sin darse la vuelta.Nick frunció el ceño.
—¿Se puede saber qué diablos he dicho que te ha molestado tanto?
—¿Que qué has dicho? — explotó ____, apretando las manos como garras en el marco de la ventana—. ¿Me amenazas con llevarme a la cama y me preguntas qué me ha molestado?
Nick parpadeó perplejo.
—No era una amenaza.
____ lo ignoró por completo, y dándose la vuelta se dirigió derecha hacia el pasillo.
— ¿Quieres dejar de hacerte la ofendida y mirarme? —gruñó él siguiéndola.Pero ____ había llegado a su dormitorio, cerró y echó el pestillo. Fuera pudo oír una ristra de improperios irrepetibles, antes de que los pasos de Nick se alejaran, se cerrara violentamente la puerta de entrada, y el piso se quedara en silencio.¡Bestia arrogante! ¡Acusarla de ser tan vulnerable a sus encantos que caeríarendida en sus brazos y dejaría que la llevara a su cama sólo con que la besara! Gimió furiosa apretando los dientes al recordar cómo había reaccionado ante el contacto de sus manos en su cintura y sus caderas, y sintió deseos de golpear algo. No podía aguantarle un día más, no podía... Sino se iba él se iría ella.
_____ tenía la mitad de la ropa metida en la maleta cuando Ada regresó de las pruebas. Todavía no sabía a qué hotel iba a ir, pero había tomado la decisión y no iba a dar marcha atrás. Sería incapaz de aguantar a Nick un solo día más.
— ¿Qué estás haciendo? —le preguntó Ada vacilante, deteniéndose en el umbral de la puerta de su dormitorio.
—Sacando algunas cosas de los cajones —contestó ____ sin saber cómodecirle lo que tenía que decirle.
— ¿Vas a tirarlas?
____ sacudió la cabeza y se frotó la nuca.
— ¿Y dónde te las llevas?
—Um... a un hotel.
Ada se apoyó en el marco de la puerta con un suspiro.
—Has vuelto a tener un encontronazo con Nick, ¿no es eso? —murmuró.
— ¿Cómo lo has adivinado? —contestó ____, esbozando una media sonrisa mientras cerraba la maleta.
—_____, yo... Sois adultos —le dijo su amiga—, seguro que no es imposible que os llevéis bien unos días. Además, estamos en Navidad, ya sabes, paz en la Tierra y todo eso.
—Es imposible que haya paz entre tu hermano y yo —replicó ____ convehemencia, apartando un mechón de cabello de su rostro—. De hecho,cuanto más lo pienso, más increíble me parece que tenga a gente trabajando para él en el rancho.Ada volvió a suspirar.
—Pues aunque te parezca mentira, algunos de los peones llevan años con nosotros. Y con las mujeres no se podía llevar mejor. Todas lo encuentran educado, cortés, atento...
— ¿Seguro que estamos hablando del mismo hombre? —inquirió ____ sarcástica—. ¿Ese tipo grande y feo que lleva aquí dos días y una noche?
Ada meneó la cabeza riéndose.
—Oh, ____, _____... Está bien, tú ganas. Me iré contigo. Dejaremos a Nick solo en el piso y yo vendré a verlo. Aunque espero que al menos no te negarás a cenar con nosotros el día veinticinco.
—Pero, Ada —replicó _____ contrariada—, no puedo permitir que hagas eso.Es Navidad, y Nick es tu hermano, y este piso es tan tuyo como mío, y la idea de que viniera aquí...
— ...no era arruinarte las vacaciones, te lo aseguro —la interrumpió Ada suavemente—. _____, eres como una hermana para mí. ¿Cómo voy a dejar que te marches así? Me sentiría fatal.
_____ se mordió el labio inferior, y bajó la vista hacia la maleta. No podía hacerle algo así a su mejor amiga, y, sin embargo...
—Tal vez si hicieses como si no estuviera aquí... —sugirió Ada contrayendo el rostro._____ la miró.
—Resulta algo difícil cuando no hace más que meterse conmigo, lanzándome esas puyas tan crueles. Si supieras las cosas que... —no pudo terminar la frase, y estaba tan azorada que apartó el rostro para rehuir la curiosa mirada de su amiga—. Tiene una idea un tanto... extraña respecto a de dónde saco el material para las escenas de cama de mis libros.
Ada frunció los labios.
—Supon que intento hablar con él —propuso.Pero _____ sacudió la cabeza con vehemencia.
—Eso sólo empeoraría las cosas —dijo bajando la maleta de la cama y sentándose en ella —se quedó un rato callada y exhaló un pesado suspiro
—Me quedaré —murmuró—. No quiero amargarte las navidades.
—Eres un encanto, _____—le dijo su amiga, esbozando una sonrisa y llevándose las manos al corazón en señal de agradecimiento.____ se encogió de hombros y volvió a suspirar.
—No, soy una idiota, pero supongo que es incurable —farfulló—. Si tan sólo me dejara tranquila...
—¿Y si probaras a trararlo como si fuera un completo extraño? —propuso Ada—. A lo mejor funciona. Siempre he creído que el problema es que empezasteis con mal pie.
—Bueno, es una idea —admitió _____, suspirando por tercera vez.
—Pues claro, y no te cuesta nada probar.
_____ le habría soltado algo, pero optó por ignorarlo, y tras dejarlo entrar y cerrar de un portazo volvió al suelo con sus papeles.
—Queda café si quieres —le dijo a Nick fríamente sin mirarlo—. Y no me molestes, estoy muy ocupada.
—Oh, no pensaba hacerlo. He venido a darme una ducha y a cambiarme. He quedado para comer.
¿Por qué?, ¿por qué sentía deseos de romper platos?, se preguntó _____ apretando los dientes mientras trataba de concentrarse en lo que estaba haciendo.
Nick se fue por el pasillo y regresó minutos después ataviado con un traje gris perla, corbata a juego, impecables zapatos, y una camisa de seda blanca. Estaba elegante, sexy, increíblemente guapo para ser un hombre tan feo. Si se había vestido así para ir a un almuerzo, pensó ____ frunciendo elceño, debía ir por lo menos al hotel Waldorf, y seguramente con una mujer despampanante de ésas con las que solía salir.
—Ada no se habrá ido preocupada esta mañana, ¿verdad? —le preguntó _____ consultando su reloj de pulsera.
—Oh, no, está acostumbrada: yo paso la noche fuera un montón de veces —mintió ella deliberadamente, alzando la vista.Habría jurado que los ojos grises del ranchero relampaguearon un instante, pero se dijo que debían haber sido imaginaciones suyas.
Nick la recorrió con la mirada, y _____ bajó la vista nerviosa a sus papeles.
El ranchero se acercó a ella, y se inclinó, tomando una hoja al azar y a medida que sus ojos fueron descendiendo de una línea a otra, una sonrisa malévolase dibujó lentamente en sus labios.
—No te cortas nada a la hora de escribir estas escenas de cama —murmuró.____ alargó el brazo y le arrancó la hoja de las manos, sonrojándose profusamente mientras la metía debajo de la que estaba repasando. ¿Porqué había tenido que ser precisamente esa página la que hubiera leído?,gimió para sus adentros.
—¿Es ahí donde te gusta hacerlo? —continuó picándola _____, metiéndose las manos en los bolsillos y mirándola fijamente—. La verdad es que nunca he probado a hacerlo en una bañera, pero supongo que...
—¿Te importaría marcharte a donde tengas que ir y dejarme tranquila? —lo cortó ella bajando más la cabeza—. Me importa un rábano dónde lo hayas hecho o con quién, así que por favor, vete a tu almuerzo y déjame con mis«sórdidas» ocupaciones.
—Me temo que sí tendré que dejarte, porque a los corredores de Bolsa desde luego no les gusta que los hagan esperar.
____ alzó el rostro cuando él se estaba poniendo la chaqueta y dándose la vuelta para dirigirse hacia la puerta.
—¿Corredores de Bolsa? —repitió perpleja.Nick se giró hacia ella con una expresión extraña.
—Soy un hombre de negocios —le recordó—. Un rancho no es productivo todo el año, y necesito hacer fuertes inversiones para mantenerlo a flote.
—Lo sé —se apresuró a contestar ella—. Es sólo que pensé...
—Que porque he pasado la noche fuera... ¿había quedado con una mujer para una comida de placer? — terminó él su frase, en un tono amenazador._____ volvió a lo que estaba haciendo, tratando de ignorarlo, pero no era fácilcuando estaba mirándola fijamente desde sus casi dos metros de altura.
—Te sorprendería saber las razones por las que he pasado la noche fuera,______... —murmuró Nick—. Quizá tengan algo que ver contigo.
Esas últimas palabras hicieron que ____ alzara el rostro hacia él. Sus ojos se encontraron, y sintió como si una corriente eléctrica la recorriera por dentro.
—No esperaba que al tocarte fueras a empezar a temblar —le dijo Nick con voz ronca—. No después de todos estos años siendo enemigos...
—Aún lo somos —le aclaró ella por si acaso, en lo que esperaba fuera un tono convincente de enfado, porque la humillación era demasiado grande.
—Cierto —respondió él fríamente—, y eso es lo que vamos a seguir siendo.No quiero complicaciones.
—Lo mismo digo —masculló ella con aspereza—. Y no te hagas ilusiones —añadió—, si reaccioné así fue sólo porque no me lo esperaba y estaba medio dormida.
En el silencio que siguió los ojos del ranchero escrutaron los suyos.
—¿Tratando de salvar tu orgullo?
Ella lo miró irritada.
—Me gusta mi vida tal y como es, y lo que intentaste ayer por la mañana fue...
—¿Lo que intenté? —se burló él, soltando una carcajada—. ¿Quién está haciéndose ilusiones ahora? ¡Por favor, me gustan las mujeres con una cierta experiencia, pero no las promiscuas!
____ se puso de pie como un resorte, y estaba a punto de levantar la mano para darle una bofetada cuando la furibunda expresión en el rostro de él la dejó paralizada, como si le hubiera echado un sortilegio.
—Te aconsejo que ni lo intentes —le advirtió Nick—. Una vez me diste una bofetada y no hice nada, pero si vuelves a hacerlo, acabaremos en la cama.
____ se estremeció de arriba abajo.
—No me acostaría contigo ni por todo el oro del mundo —masculló.El ranchero sacudió la cabeza.
—¿No te das cuenta de que reaccionamos como un compuesto químico explosivo? Bastaría con un solo beso. Con un único beso saltaría la chispa, y arderíamos en llamas. Es algo que he sabido desde el principio, desde el día que te conocí.
____ estaba roja como una amapola, y contuvo con dificultad un gemido mientras le daba la espalda y se rodeaba la cintura con los brazos en actitud de protección.
—No te preocupes, chica de ciudad, estás a salvo de mis apetitos —le dijo Nick en un tono burlón—. No estoy tan desesperado, pero no me provoques.
_____ no podía dar crédito a lo que estaba sugiriendo. Para ella él siempre había sido el enemigo, y las cosas iban a seguir igual aunque tuviese que morderse la lengua hasta hacerse sangre. Fue hasta la ventana y se quedó allí, dándole la espalda y observando la calle con la mirada perdida.
—¿Y se puede saber a qué viene ahora ese numerito de chica inocente herida en su pundonor? —la pinchó él sarcástico—. Creía que era mi hermana quien había estudiado Arte Dramático y no tú.
No tenía que interpretar el papel de chica inocente, porque verdaderamentelo era, pero aunque se lo dijera, él jamás la creería. Además, la había dejado aturdida, amenazándola con llevársela a la cama por provocarlo, cuando nisiquiera era consciente de haberlo hecho. ¿Lo había hecho, lo había provocado sin darse cuenta? El que la respuesta pudiera ser «sí» y las razones por las que lo habría hecho la aterraron. Dios, aquello no podía estar ocurriendo... ¡No podía sentirse atraída de verdad por Nick Jonas!
—____... —la llamó él en un tono quedo.Ella se puso rígida.
—Vas a llegar tarde a tu cita —farfulló ásperamente sin darse la vuelta.Nick frunció el ceño.
—¿Se puede saber qué diablos he dicho que te ha molestado tanto?
—¿Que qué has dicho? — explotó ____, apretando las manos como garras en el marco de la ventana—. ¿Me amenazas con llevarme a la cama y me preguntas qué me ha molestado?
Nick parpadeó perplejo.
—No era una amenaza.
____ lo ignoró por completo, y dándose la vuelta se dirigió derecha hacia el pasillo.
— ¿Quieres dejar de hacerte la ofendida y mirarme? —gruñó él siguiéndola.Pero ____ había llegado a su dormitorio, cerró y echó el pestillo. Fuera pudo oír una ristra de improperios irrepetibles, antes de que los pasos de Nick se alejaran, se cerrara violentamente la puerta de entrada, y el piso se quedara en silencio.¡Bestia arrogante! ¡Acusarla de ser tan vulnerable a sus encantos que caeríarendida en sus brazos y dejaría que la llevara a su cama sólo con que la besara! Gimió furiosa apretando los dientes al recordar cómo había reaccionado ante el contacto de sus manos en su cintura y sus caderas, y sintió deseos de golpear algo. No podía aguantarle un día más, no podía... Sino se iba él se iría ella.
_____ tenía la mitad de la ropa metida en la maleta cuando Ada regresó de las pruebas. Todavía no sabía a qué hotel iba a ir, pero había tomado la decisión y no iba a dar marcha atrás. Sería incapaz de aguantar a Nick un solo día más.
— ¿Qué estás haciendo? —le preguntó Ada vacilante, deteniéndose en el umbral de la puerta de su dormitorio.
—Sacando algunas cosas de los cajones —contestó ____ sin saber cómodecirle lo que tenía que decirle.
— ¿Vas a tirarlas?
____ sacudió la cabeza y se frotó la nuca.
— ¿Y dónde te las llevas?
—Um... a un hotel.
Ada se apoyó en el marco de la puerta con un suspiro.
—Has vuelto a tener un encontronazo con Nick, ¿no es eso? —murmuró.
— ¿Cómo lo has adivinado? —contestó ____, esbozando una media sonrisa mientras cerraba la maleta.
—_____, yo... Sois adultos —le dijo su amiga—, seguro que no es imposible que os llevéis bien unos días. Además, estamos en Navidad, ya sabes, paz en la Tierra y todo eso.
—Es imposible que haya paz entre tu hermano y yo —replicó ____ convehemencia, apartando un mechón de cabello de su rostro—. De hecho,cuanto más lo pienso, más increíble me parece que tenga a gente trabajando para él en el rancho.Ada volvió a suspirar.
—Pues aunque te parezca mentira, algunos de los peones llevan años con nosotros. Y con las mujeres no se podía llevar mejor. Todas lo encuentran educado, cortés, atento...
— ¿Seguro que estamos hablando del mismo hombre? —inquirió ____ sarcástica—. ¿Ese tipo grande y feo que lleva aquí dos días y una noche?
Ada meneó la cabeza riéndose.
—Oh, ____, _____... Está bien, tú ganas. Me iré contigo. Dejaremos a Nick solo en el piso y yo vendré a verlo. Aunque espero que al menos no te negarás a cenar con nosotros el día veinticinco.
—Pero, Ada —replicó _____ contrariada—, no puedo permitir que hagas eso.Es Navidad, y Nick es tu hermano, y este piso es tan tuyo como mío, y la idea de que viniera aquí...
— ...no era arruinarte las vacaciones, te lo aseguro —la interrumpió Ada suavemente—. _____, eres como una hermana para mí. ¿Cómo voy a dejar que te marches así? Me sentiría fatal.
_____ se mordió el labio inferior, y bajó la vista hacia la maleta. No podía hacerle algo así a su mejor amiga, y, sin embargo...
—Tal vez si hicieses como si no estuviera aquí... —sugirió Ada contrayendo el rostro._____ la miró.
—Resulta algo difícil cuando no hace más que meterse conmigo, lanzándome esas puyas tan crueles. Si supieras las cosas que... —no pudo terminar la frase, y estaba tan azorada que apartó el rostro para rehuir la curiosa mirada de su amiga—. Tiene una idea un tanto... extraña respecto a de dónde saco el material para las escenas de cama de mis libros.
Ada frunció los labios.
—Supon que intento hablar con él —propuso.Pero _____ sacudió la cabeza con vehemencia.
—Eso sólo empeoraría las cosas —dijo bajando la maleta de la cama y sentándose en ella —se quedó un rato callada y exhaló un pesado suspiro
—Me quedaré —murmuró—. No quiero amargarte las navidades.
—Eres un encanto, _____—le dijo su amiga, esbozando una sonrisa y llevándose las manos al corazón en señal de agradecimiento.____ se encogió de hombros y volvió a suspirar.
—No, soy una idiota, pero supongo que es incurable —farfulló—. Si tan sólo me dejara tranquila...
—¿Y si probaras a trararlo como si fuera un completo extraño? —propuso Ada—. A lo mejor funciona. Siempre he creído que el problema es que empezasteis con mal pie.
—Bueno, es una idea —admitió _____, suspirando por tercera vez.
—Pues claro, y no te cuesta nada probar.
MeliGarcia
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
asgfasjdlbgkasjdbgkjasd SIGUEEEEEEEEEE, ME ENCATA♥
Seeyouinanotherlife
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
mas capitulos.....
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por favor q mas pasara dios como se odian pero esta super interesante dios q angustiante ya quiero mas acción
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ElitzJb
Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)
Capitulo 4. #1
Era ya tarde cuando Nick regresó, con cara de pocos amigos, y nada más entrar lanzó una mirada furibunda a ____, como si ella fuera la culpable de todos los males del mundo.
—Em... te hemos guardado algo de cena, Nick — le dijo Ada.
—No tengo hambre —contestó él malhumorado, sentándose.
—Te traeré un poco de café —dijo _____ con una sonrisa educada, poniéndose de pie.
Nick la siguió con la mirada hasta que desapareció por el pasillito que iba a la cocina.
—¿Se ha dado un golpe en la cabeza? —le preguntó a su hermana.Ada se limitó a reírse, y esbozó una sonrisa misteriosa.Al cabo de un rato regresó _____ con una bandeja en la que había colocado tres tazas, platos de postre, tenedores, servilletas, un plato con bizcocho marmolado, la cafetera, una jarrita con leche, y el azucarero.
—He dicho que no tenía hambre —masculló Nick al ver el bizcocho.
—Oh, no lo he traído por ti —le dijo _____ en un tono empalagoso—. Es para Ada y para mí.
Aquello pareció irritarlo aún más. Se irguió en el asiento y tomó la taza de café solo que _____ le tendió, y dio un sorbo.
—Este café está aguado —le dijo, como si estuviera feliz de haber encontrado una razón para meterse con ella.
_____, sin embargo, no picó el anzuelo.
—¿De veras? —murmuró probando el suyo—. Sí —mintió—, sí que lo está. Iré a hacer más.
—Déjalo, da igual —replicó él con brusquedad._____ reprimió una sonrisilla, y fijó la vista en la pantalla del televisor.Estaban viendo una serie de misterio.
—¿Verdad que el protagonista es guapísimo? — suspiró Ada.
—Ya lo creo —suspiró _____ a su vez, con comicidad—. ¿No te lo parece a ti también, Nick? —le preguntó burlona al ranchero, enarcando una ceja.Nick respondió con un gruñido y tomó otro sorbo de café.
—¿Conseguiste solucionar ese asunto con nuestro agente de Bolsa? —le preguntó Ada cuando hicieron un corte para poner anuncios.
—Sí —contestó él escuetamente. Terminó su café y se puso de pie—. Me voy a la cama, estoy cansado. Buenas noches.
Y se marchó sin mirar siquiera a _____.
—Qué raro, pero si apenas pasan de las nueve... — murmuró Ada mirando sureloj de pulsera—. Nick nunca se va a dormir tan pronto.
—Será que le remuerde la conciencia por el modo en que me ha tratado —dijo _____.
— ¿Nick?, ¿arrepintiéndose de algo? —contestó Ada—. ¡Eso no ocurrirá hasta que las ranas críen pelo!
En ese momento sonó el teléfono, y Ada alargó el brazo para alcanzar el aparato inalámbrico.
—¿Diga? —al oír la voz del interlocutor su rostro se iluminó—. ¡Es Marshal!—le siseó a su amiga._____ se sonrió.
El novio de Ada llevaba varias semanas fuera, y en sus ojos podía leerse la felicidad que sentía en ese momento sólo con escucharlo. Se fue con el teléfono al pasillo para que _____ no tuviera que quitar la televisión, pero al cabo de un rato volvió a entrar en el salón con la mano tapando el teléfono.
—Está en la ciudad, y quiere que salgamos mañana a cenar en el RainbowGrill. ¿Crees que Jack podrá venir? —le preguntó.
—Imposible, sigue en Washington y no regresa hasta el jueves —contestó _____—. ¿no podría ser el viernes?
—Espera, le preguntaré a Marshal si le iría bien.
—¿Si le iría bien qué? —inquirió Nick, apareciendo en ese momento descalzo, con la corbata en la mano y la camisa medio desabrochada.
—Salir a cenar el viernes por la noche —explicó Ada—. ¿Quieres venir tú también? Tengo una amiga soltera que...
—No me hace falta que me busques citas, Ada — la cortó él con un gesto de irritación—. ¿Has dicho el viernes, no? Le preguntaré a Jennie. ¿A qué hora?
A ____ se le cayó el alma a los pies, y debió reflejarse en su rostro, porque Nick esbozó una sonrisa maliciosa.
—¿Qué pasa?, ¿te molesta que vaya? —le preguntó.____ se recordó una vez más que estaba intentando interpretar el papel de anfitriona educada, y que eso implicaba nada de choques, nada de hostilidades, así que apretó los dientes y contestó:
—Por supuesto que no. ¿Por qué habría de molestarme? Cuantos más seamos,mejor lo pasaremos —le dijo con una sonrisa forzada.Nick enarcó las cejas.
—Dios, creo que tiene fiebre —le dijo a Ada—. Deberías llamar a un médico.
_____ aguantó como pudo la sonrisa.
—Bueno, yo también me voy a la cama. La verdad es que me duele un poco la cabeza.
— ¡Pero si es muy temprano! —farfulló Ada—. ¿Vais a iros los dos y me vais a dejar aquí sola?
—¿No querías un poco de paz y tranquilidad? —le dijo Nick.Ada lo miró, y después miró a ____.
—Pues entonces me iré a dormir yo también — suspiró encogiéndose de hombros y yendo a apagar el televisor—. En fin, dicen que si duermes un poco más amaneces con mejor cara.
—A algunos no les vendrá mal desde luego — masculló _____, lanzando una mirada a Nick.El ranchero se rió entre dientes.
—¿Te parezco feo?
_____ se sonrojó, e involuntariamente sus ojos recorrieron los hoscos rasgos de Nick. No, no era atractivo desde luego, pero por alguna razón no podía apartar la vista de su rostro. Sus ojos se encontraron con los de él, y se quedaron mirándose largo rato en un silencio cada vez más tenso.
—Disculpadme —murmuró Ada, reprimiendo a duras penas una sonrisa maliciosa mientras pasaba entre ellos para dirigirse a su dormitorio—. Que durmáis bien.
Nick resopló, y le preguntó a ____, mirándola aún fijamente:
-¿Y bien?
_____, que se notaba la garganta terriblemente seca, tragó saliva. Sus labios se entreabrieron, y Nick los miró ávidamente. Y entonces, de pronto, _____ comprendió que cuando le había dicho que acabarían acostándose si lo provocaba, no había estado amenazándola... ¡la deseaba!
Era ya tarde cuando Nick regresó, con cara de pocos amigos, y nada más entrar lanzó una mirada furibunda a ____, como si ella fuera la culpable de todos los males del mundo.
—Em... te hemos guardado algo de cena, Nick — le dijo Ada.
—No tengo hambre —contestó él malhumorado, sentándose.
—Te traeré un poco de café —dijo _____ con una sonrisa educada, poniéndose de pie.
Nick la siguió con la mirada hasta que desapareció por el pasillito que iba a la cocina.
—¿Se ha dado un golpe en la cabeza? —le preguntó a su hermana.Ada se limitó a reírse, y esbozó una sonrisa misteriosa.Al cabo de un rato regresó _____ con una bandeja en la que había colocado tres tazas, platos de postre, tenedores, servilletas, un plato con bizcocho marmolado, la cafetera, una jarrita con leche, y el azucarero.
—He dicho que no tenía hambre —masculló Nick al ver el bizcocho.
—Oh, no lo he traído por ti —le dijo _____ en un tono empalagoso—. Es para Ada y para mí.
Aquello pareció irritarlo aún más. Se irguió en el asiento y tomó la taza de café solo que _____ le tendió, y dio un sorbo.
—Este café está aguado —le dijo, como si estuviera feliz de haber encontrado una razón para meterse con ella.
_____, sin embargo, no picó el anzuelo.
—¿De veras? —murmuró probando el suyo—. Sí —mintió—, sí que lo está. Iré a hacer más.
—Déjalo, da igual —replicó él con brusquedad._____ reprimió una sonrisilla, y fijó la vista en la pantalla del televisor.Estaban viendo una serie de misterio.
—¿Verdad que el protagonista es guapísimo? — suspiró Ada.
—Ya lo creo —suspiró _____ a su vez, con comicidad—. ¿No te lo parece a ti también, Nick? —le preguntó burlona al ranchero, enarcando una ceja.Nick respondió con un gruñido y tomó otro sorbo de café.
—¿Conseguiste solucionar ese asunto con nuestro agente de Bolsa? —le preguntó Ada cuando hicieron un corte para poner anuncios.
—Sí —contestó él escuetamente. Terminó su café y se puso de pie—. Me voy a la cama, estoy cansado. Buenas noches.
Y se marchó sin mirar siquiera a _____.
—Qué raro, pero si apenas pasan de las nueve... — murmuró Ada mirando sureloj de pulsera—. Nick nunca se va a dormir tan pronto.
—Será que le remuerde la conciencia por el modo en que me ha tratado —dijo _____.
— ¿Nick?, ¿arrepintiéndose de algo? —contestó Ada—. ¡Eso no ocurrirá hasta que las ranas críen pelo!
En ese momento sonó el teléfono, y Ada alargó el brazo para alcanzar el aparato inalámbrico.
—¿Diga? —al oír la voz del interlocutor su rostro se iluminó—. ¡Es Marshal!—le siseó a su amiga._____ se sonrió.
El novio de Ada llevaba varias semanas fuera, y en sus ojos podía leerse la felicidad que sentía en ese momento sólo con escucharlo. Se fue con el teléfono al pasillo para que _____ no tuviera que quitar la televisión, pero al cabo de un rato volvió a entrar en el salón con la mano tapando el teléfono.
—Está en la ciudad, y quiere que salgamos mañana a cenar en el RainbowGrill. ¿Crees que Jack podrá venir? —le preguntó.
—Imposible, sigue en Washington y no regresa hasta el jueves —contestó _____—. ¿no podría ser el viernes?
—Espera, le preguntaré a Marshal si le iría bien.
—¿Si le iría bien qué? —inquirió Nick, apareciendo en ese momento descalzo, con la corbata en la mano y la camisa medio desabrochada.
—Salir a cenar el viernes por la noche —explicó Ada—. ¿Quieres venir tú también? Tengo una amiga soltera que...
—No me hace falta que me busques citas, Ada — la cortó él con un gesto de irritación—. ¿Has dicho el viernes, no? Le preguntaré a Jennie. ¿A qué hora?
A ____ se le cayó el alma a los pies, y debió reflejarse en su rostro, porque Nick esbozó una sonrisa maliciosa.
—¿Qué pasa?, ¿te molesta que vaya? —le preguntó.____ se recordó una vez más que estaba intentando interpretar el papel de anfitriona educada, y que eso implicaba nada de choques, nada de hostilidades, así que apretó los dientes y contestó:
—Por supuesto que no. ¿Por qué habría de molestarme? Cuantos más seamos,mejor lo pasaremos —le dijo con una sonrisa forzada.Nick enarcó las cejas.
—Dios, creo que tiene fiebre —le dijo a Ada—. Deberías llamar a un médico.
_____ aguantó como pudo la sonrisa.
—Bueno, yo también me voy a la cama. La verdad es que me duele un poco la cabeza.
— ¡Pero si es muy temprano! —farfulló Ada—. ¿Vais a iros los dos y me vais a dejar aquí sola?
—¿No querías un poco de paz y tranquilidad? —le dijo Nick.Ada lo miró, y después miró a ____.
—Pues entonces me iré a dormir yo también — suspiró encogiéndose de hombros y yendo a apagar el televisor—. En fin, dicen que si duermes un poco más amaneces con mejor cara.
—A algunos no les vendrá mal desde luego — masculló _____, lanzando una mirada a Nick.El ranchero se rió entre dientes.
—¿Te parezco feo?
_____ se sonrojó, e involuntariamente sus ojos recorrieron los hoscos rasgos de Nick. No, no era atractivo desde luego, pero por alguna razón no podía apartar la vista de su rostro. Sus ojos se encontraron con los de él, y se quedaron mirándose largo rato en un silencio cada vez más tenso.
—Disculpadme —murmuró Ada, reprimiendo a duras penas una sonrisa maliciosa mientras pasaba entre ellos para dirigirse a su dormitorio—. Que durmáis bien.
Nick resopló, y le preguntó a ____, mirándola aún fijamente:
-¿Y bien?
_____, que se notaba la garganta terriblemente seca, tragó saliva. Sus labios se entreabrieron, y Nick los miró ávidamente. Y entonces, de pronto, _____ comprendió que cuando le había dicho que acabarían acostándose si lo provocaba, no había estado amenazándola... ¡la deseaba!
MeliGarcia
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
ME ENCANTA!!! NO LA DEJES ASII SEGUILA :D LA AMO
Invitado
Invitado
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
ahvbdkasjbdfkasjbfkajsbdfkj SIGUEEEEEEEEEEELA, LA AMO. ME ENCANTA♥
Seeyouinanotherlife
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
O por dios nah q espondera la rayis a eso
xq carrizo lo dejas allis siguela por favor esta increíble sigue
xq carrizo lo dejas allis siguela por favor esta increíble sigue
ElitzJb
Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)
Capitulo 4. #2
—Yo... estoy cansada —susurró, dando un paso atrás—. Me voy a dormir.
Se dirigió a su habitación, pero antes de que pudiera alcanzar la puerta,Nick le cortó el paso poniéndose delante, extendiendo el brazo, y apoyandola palma contra la pared.
—Esta tarde no estaba amenazándote —le dijo ásperamente—. Estaba diciéndote lo que ocurriría si volvías a provocarme, cómo sería... Porque no puedes estar tan ciega como para no ver la atracción que hay entre nosotros—añadió con voz ronca—. Y con ese Jack jamás llegarás a sentir nada parecido.
____ se apartó de su brazo.
— Soy feliz con Jack —replicó nerviosa—. Me llevo muy bien con él.
Nick se acercó un poco a ella, lo suficiente como para que pudiera notar el calor de su cuerpo, y su aliento sobre sus cabellos rubicundos.
—Eso no es suficiente —murmuró, la vista fija en los labios de ella.
—¿No... no lo es? —balbució _____, sin saber lo que estaba diciendo.Los dedos de Nick acariciaron el cuello de la joven como un suspiro,deleitándose en su suavidad.
—Hueles a rosas —murmuró._____ intentó apartar la mano de nick, pero éste agarró la suya, y la llevó hasta su pecho, haciendo que la introdujera bajo la tela de la camisa, y colocándole la palma abierta contra su cálida piel. Sus músculos tenían la solidez de un muro de piedra, la mata de vello le hacía cosquillas, y la colonia que llevaba estaba mareándola ligeramente.
—¿Has olvidado lo que tienes que hacer, ____? — inquirió Nick en un tono burlón—. ¿Quieres que te refresque la memoria?
Como si un imán los atrajese, los ojos de ____ subieron hasta en contrarse con los suyos, y ya no pudo apartar la mirada.
— «Ella le arrancó la camisa —murmuró el ranchero—, y pasó los dedos temblorosos por el torso masculino y...»
— ¡No! —lo cortó _____, reconociendo aquellas palabras como un pasaje de uno de sus libros, y poniéndose roja como la grana.Tiró de su mano con fuerza, soltándose, y se apartó de él.Nick se rió, pero había algo extraño en su risa, y sus ojos parecían estar en llamas cuando _____, sin atreverse a darle la espalda, tanteó detrás de sí,tratando de encontrar el picaporte de la puerta de su dormitorio.
—¿No te pide tu amigo el periodista que le hagas eso? —le preguntó en un susurro—, ¿o es que prefiere lo que va después?
____ abrió la puerta y entró en su dormitorio, pero cuando iba a cerrarla él se lo impidió.
—Te odio —masculló _____, temerosa de que Ada pudiera oírlos.
—Eso dices —contestó él con una sonrisa arrogante—, pero salta a la vista que me deseas tanto como yo a ti...
— ¡No soy la clase de mujer que crees que soy! — le espetó _____ furiosa,consiguiendo a duras penas no alzar la voz.
—¿No me digas? —murmuró él en un tono insolente.
— ¡Vete al infierno, vaquero feo y pretencioso!
Nick escrutó divertido su encendido rostro.
—Antes de conocerte siempre pensé que serías una tímida florecilla, porque mi hermana no hacía más que hablarme de su dulce y tranquila amiga. Fue un verdadero shock.
—Tú tampoco me pareciste precisamente el hermano encantador y comprensivo que Ada me describió —replicó ella.Nick se rió suavemente.
—Ninguna mujer ha conseguido engañarme jamás —le dijo—, y aunque no hubiera leído tus libros habría sabido igualmente lo que eres. No apruebo ese comportamiento indulgente, pero como ya te he dicho —añadió entornando los ojos y mirándola de arriba debajo de un modo muy sensual —,la verdad es que me excitan las mujeres con experiencia.
—En ese caso vete a buscar a esa amiguita con la que estuviste anoche —masculló _____ acaloradamente.
Nick enarcó las cejas y sonrió mostrando los dientes.
—Hummm... ¿Es que te molestó?
Aquella arrogancia suprema acabó con la paciencia de ____, que le clavó el tacón en el empeine, y mientras él saltaba agarrándose el pie y maldiciendo entre dientes, aprovechó para darle con las puerta en las narices y echar el pestillo.
— ¡Katriane! —rugió él furioso, olvidándose por completo de que su hermana ya se había acostado.
— ¡Adelante!, ¡echa la puerta abajo si te atreves! —lo desafió ____ desde dentro—. ¡Abriré la ventana y gritaré hasta que venga la policía!
Oyó otra ristra de improperios, una puerta abriéndose al fondo del pasillo,la voz de Ada exaltada, reprendiendo a su hermano, y la de Nick, irritadopero conciliador, y minutos después dos puertas se cerraban casi al mismo tiempo. Resoplando, ____ se desvistió, entró en el cuarto de baño, se metió en la ducha y abrió el grifo. Estaba tan enfadada que ni siquiera le importó que el agua estuviera helada.
Por suerte, a la mañana siguiente, cuando ____ se levantó, cerca de las diez,nick había salido. Jack la llamó para decirle que ya estaba de vuelta, e invitarla a cenar, y ella aceptó encantada. Cuanto menos tiempo tuviera que ver a Nick, mejor
—¿Tú crees que soy escandalosa? —le preguntó a Jack de repente cuando estaban tomando el postre.Él la miró anonadado.
—¿Escandalosa?, ¿tú?
—Quiero decir por la clase de libros que escribo —murmuró ella incómoda—.Necesito saberlo.
—Por supuesto que no, qué tontería —repuso él con sinceridad, esbozando una sonrisa—. Eso sería como decir que los escritores de novela negra son asesinos.
—Y tampoco pensarías que por escribir esos libros llevo una vida disoluta,¿verdad?
Jack se rió.
—Pues claro que no. ¿Qué ocurre?, ¿has estado recibiendo cartas desagradables otra vez? Deberías contratar a un agente que se encargase de leer el correo de tus fans.
—Oh, no, no es eso —replicó ella. Dejó escapar un suspiro y apoyó la barbilla en su mano—. Se trata de Nick.
Jack contrajo el rostro.
—Por favor, no estropees esta noche perfecta — dijo removiéndose en el asiento—. La sola mención de ese hombre haría que a cualquiera se le indigestase la comida. Tiene una mirada capaz de parar un reloj.
—Dímelo a mí —masculló _____—. Es que no hace más que meterse conmigo por lo que escribo.
—¿Acaso no diferencia entre la realidad y la ficción?
—Más bien creo que no quiere —contestó ella soltando una áspera carcajada.Jack se quedó mirándola un instante y le tomó la mano, dándole unas palmaditas.
—Bueno, piensa que se irá dentro de unos días — le dijo para animarla.
—Sí, es el pensamiento al que me aferró —murmuró ella, suspirando y tomando un sorbo de agua—. Estoy deseando que llegue Año Nuevo.
Cuando salieron del restaurante fueron a bailar, y _____ logró olvidarse de sus problemas. Con el vestido negro que se había puesto, atraía las miradas de muchos de los hombres que había en la pista. Tenía el cuello de barco,dejando los hombros al descubierto, y una falda con vuelo; y se complementaba con un chal de tul blanco, pero lo había dejado en el asiento para poder moverse mejor.
Cuando regresó al piso, se sentía como si pudiera volar, pero la sonrisa se borró de sus labios cuando entró por la puerta y se encontró a Nick esperándola en el vestíbulo.
— ¿Dónde has dejado a Romeo? —le preguntó burlón—. ¿No lo has invitado a que pasara para tomar una última copa?
Llevaba una camisa de vestir, con las mangas enrolladas y los primeros botones desabrochados, y unos pantalones negros. Era obvio que también había salido, y quizá hubiera vuelto poco antes que ella.
—Mañana tiene que trabajar —contestó ella, preguntándose por qué tenía que darle explicaciones.Nick levantó la barbilla de un modo arrogante, y fijó sus ojos cafes entornados en sus hombros desnudos.Azorada, ____ se tapó con el chal de tul.
—¿A qué viene esa repentina timidez? —inquirió él, dando un paso adelante._____ sintió deseos de salir corriendo.
—¿Dónde... dónde está Ada? —inquirió.
—En su habitación, hablando con Marshal por teléfono —contestó Nick, sinquitarle los ojos de encima—. ¿Por qué? Ya eres mayorcita. ¿No necesitarás que te proteja?
Nick se acercó más a ella y extendió las manos, colocándolas sobre sus hombros. _____ dio un respingo al sentir el contacto de sus dedos, y se quedó paralizada cuando vio que estaba deslizando la tela hacia abajo-
—Nick... —comenzó.Pero él no le hizo ningún caso. Sus labios cubrieron de besos su hombro izquierdo, dejando a su paso una estela ardiente, y sus dedos la sujetaron por los brazos, hundiéndose en la carne mientras mordisqueaba suavementesu piel de seda.
—Nick, por favor, para... —gimió Nick. Y, a pesar de la protesta, cerró los ojos y arqueó la garganta, como si estuviera invitándole, rogándole que hiciera con ella lo que quisiera.
—¿Por qué quieres que pare? Tú me deseas —le susurró con voz ronca—. Y yo también a ti... Nunca había experimentado nada semejante... ¡Me vuelves loco!
____ sintió la lengua de Nick lamiendo su garganta, y el borde de sus dientes, dándole pequeños mordiscos, para ir descendiendo poco a poco hacia su escote, en un silencio sólo roto por la agitada respiración de ambos.
—Sabes como el más dulce de los caramelos —jadeó Nick.Sus dedos le estaban apretando demasiado fuerte los brazos, pero ____ estaba demasiado perdida en las sensaciones que la invadían como para quejarse.
—Oh, Dios... —farfulló Nick.
Sus labios, cada vez más insistentes, habían empezado a subir de nuevo por el cuello de ____, y en ese momento alcanzaron la mandíbula. Subió las manos, enredando los dedos en sus cabellos, y haciendo que echara la cabeza hacia atrás al tiempo que él se inclinaba hacia ella.
—Te deseo tanto, ____...
Su boca estaba ya sólo a unos centímetros de la de ella, y ____ le habríadado lo que quisiese, pero antes de que el beso se produjera, el ruido de una puerta abriéndose al fondo del pasillo irrumpió en el tenso silencio.
—Diablos... —masculló nick.Sus dedos apretaron la nuca de ____, y había llamaradas en sus ojos antes de que se apartase de ella, dejándola temblando por el deseo insatisfecho.
—No estoy segura de poder aguantar un solo día más sin ver a Marshal —dijo Ada, entrando en el salón con el teléfono inalámbrico en la mano — .¿Por qué tendría que buscarme un novio en la marina? Ah, hola, ____ —saludó a su amiga al verla—. No sabía que habías llegado ya. ¿Lo has pasado bien?
—Oh, sí, muy bien —contestó ____, esbozando una sonrisa con dificultad.Alzó la vista, y al encontrarse sus ojos con los de Nick se puso roja como una amapola. El ranchero bajó la mirada a los labios de la joven, volvió asubirla a sus ojos castaños, maldijo entre dientes y se alejó por el pasillo,entrando en su habitación y cerrando de un portazo.
—¿Qué es lo que le pasa ahora? —inquirió Ada frunciendo el ceño.
—Ni idea —respondió ____, rehuyendo su mirada— . Dios, estoy molida. Me voy a dormir. Jack y yo hemos ido a bailar y los pies me están matando...
—Pues tienes que estar en forma para el viernes por la noche —le dijo su amiga riéndose—. Que descanses. ____.
—Tú también —murmuró ____, dirigiéndose hacia el pasillo de espaldas, y manteniendo a duras penas la sonrisa hasta que por fin se dio la vuelta y entró en su cuarto.
Se dejó caer en la cama porque las piernas ya no la sostenían. Ni siquiera la había besado, y estaba temblando como una hoja. Sólo el cielo sabía lo que podría pasar si volvía a intentarlo y llegaba más lejos. No quería ni pensarlo.
Listo Chicas :) Espero y les guste, gracias por leer.
—Yo... estoy cansada —susurró, dando un paso atrás—. Me voy a dormir.
Se dirigió a su habitación, pero antes de que pudiera alcanzar la puerta,Nick le cortó el paso poniéndose delante, extendiendo el brazo, y apoyandola palma contra la pared.
—Esta tarde no estaba amenazándote —le dijo ásperamente—. Estaba diciéndote lo que ocurriría si volvías a provocarme, cómo sería... Porque no puedes estar tan ciega como para no ver la atracción que hay entre nosotros—añadió con voz ronca—. Y con ese Jack jamás llegarás a sentir nada parecido.
____ se apartó de su brazo.
— Soy feliz con Jack —replicó nerviosa—. Me llevo muy bien con él.
Nick se acercó un poco a ella, lo suficiente como para que pudiera notar el calor de su cuerpo, y su aliento sobre sus cabellos rubicundos.
—Eso no es suficiente —murmuró, la vista fija en los labios de ella.
—¿No... no lo es? —balbució _____, sin saber lo que estaba diciendo.Los dedos de Nick acariciaron el cuello de la joven como un suspiro,deleitándose en su suavidad.
—Hueles a rosas —murmuró._____ intentó apartar la mano de nick, pero éste agarró la suya, y la llevó hasta su pecho, haciendo que la introdujera bajo la tela de la camisa, y colocándole la palma abierta contra su cálida piel. Sus músculos tenían la solidez de un muro de piedra, la mata de vello le hacía cosquillas, y la colonia que llevaba estaba mareándola ligeramente.
—¿Has olvidado lo que tienes que hacer, ____? — inquirió Nick en un tono burlón—. ¿Quieres que te refresque la memoria?
Como si un imán los atrajese, los ojos de ____ subieron hasta en contrarse con los suyos, y ya no pudo apartar la mirada.
— «Ella le arrancó la camisa —murmuró el ranchero—, y pasó los dedos temblorosos por el torso masculino y...»
— ¡No! —lo cortó _____, reconociendo aquellas palabras como un pasaje de uno de sus libros, y poniéndose roja como la grana.Tiró de su mano con fuerza, soltándose, y se apartó de él.Nick se rió, pero había algo extraño en su risa, y sus ojos parecían estar en llamas cuando _____, sin atreverse a darle la espalda, tanteó detrás de sí,tratando de encontrar el picaporte de la puerta de su dormitorio.
—¿No te pide tu amigo el periodista que le hagas eso? —le preguntó en un susurro—, ¿o es que prefiere lo que va después?
____ abrió la puerta y entró en su dormitorio, pero cuando iba a cerrarla él se lo impidió.
—Te odio —masculló _____, temerosa de que Ada pudiera oírlos.
—Eso dices —contestó él con una sonrisa arrogante—, pero salta a la vista que me deseas tanto como yo a ti...
— ¡No soy la clase de mujer que crees que soy! — le espetó _____ furiosa,consiguiendo a duras penas no alzar la voz.
—¿No me digas? —murmuró él en un tono insolente.
— ¡Vete al infierno, vaquero feo y pretencioso!
Nick escrutó divertido su encendido rostro.
—Antes de conocerte siempre pensé que serías una tímida florecilla, porque mi hermana no hacía más que hablarme de su dulce y tranquila amiga. Fue un verdadero shock.
—Tú tampoco me pareciste precisamente el hermano encantador y comprensivo que Ada me describió —replicó ella.Nick se rió suavemente.
—Ninguna mujer ha conseguido engañarme jamás —le dijo—, y aunque no hubiera leído tus libros habría sabido igualmente lo que eres. No apruebo ese comportamiento indulgente, pero como ya te he dicho —añadió entornando los ojos y mirándola de arriba debajo de un modo muy sensual —,la verdad es que me excitan las mujeres con experiencia.
—En ese caso vete a buscar a esa amiguita con la que estuviste anoche —masculló _____ acaloradamente.
Nick enarcó las cejas y sonrió mostrando los dientes.
—Hummm... ¿Es que te molestó?
Aquella arrogancia suprema acabó con la paciencia de ____, que le clavó el tacón en el empeine, y mientras él saltaba agarrándose el pie y maldiciendo entre dientes, aprovechó para darle con las puerta en las narices y echar el pestillo.
— ¡Katriane! —rugió él furioso, olvidándose por completo de que su hermana ya se había acostado.
— ¡Adelante!, ¡echa la puerta abajo si te atreves! —lo desafió ____ desde dentro—. ¡Abriré la ventana y gritaré hasta que venga la policía!
Oyó otra ristra de improperios, una puerta abriéndose al fondo del pasillo,la voz de Ada exaltada, reprendiendo a su hermano, y la de Nick, irritadopero conciliador, y minutos después dos puertas se cerraban casi al mismo tiempo. Resoplando, ____ se desvistió, entró en el cuarto de baño, se metió en la ducha y abrió el grifo. Estaba tan enfadada que ni siquiera le importó que el agua estuviera helada.
Por suerte, a la mañana siguiente, cuando ____ se levantó, cerca de las diez,nick había salido. Jack la llamó para decirle que ya estaba de vuelta, e invitarla a cenar, y ella aceptó encantada. Cuanto menos tiempo tuviera que ver a Nick, mejor
—¿Tú crees que soy escandalosa? —le preguntó a Jack de repente cuando estaban tomando el postre.Él la miró anonadado.
—¿Escandalosa?, ¿tú?
—Quiero decir por la clase de libros que escribo —murmuró ella incómoda—.Necesito saberlo.
—Por supuesto que no, qué tontería —repuso él con sinceridad, esbozando una sonrisa—. Eso sería como decir que los escritores de novela negra son asesinos.
—Y tampoco pensarías que por escribir esos libros llevo una vida disoluta,¿verdad?
Jack se rió.
—Pues claro que no. ¿Qué ocurre?, ¿has estado recibiendo cartas desagradables otra vez? Deberías contratar a un agente que se encargase de leer el correo de tus fans.
—Oh, no, no es eso —replicó ella. Dejó escapar un suspiro y apoyó la barbilla en su mano—. Se trata de Nick.
Jack contrajo el rostro.
—Por favor, no estropees esta noche perfecta — dijo removiéndose en el asiento—. La sola mención de ese hombre haría que a cualquiera se le indigestase la comida. Tiene una mirada capaz de parar un reloj.
—Dímelo a mí —masculló _____—. Es que no hace más que meterse conmigo por lo que escribo.
—¿Acaso no diferencia entre la realidad y la ficción?
—Más bien creo que no quiere —contestó ella soltando una áspera carcajada.Jack se quedó mirándola un instante y le tomó la mano, dándole unas palmaditas.
—Bueno, piensa que se irá dentro de unos días — le dijo para animarla.
—Sí, es el pensamiento al que me aferró —murmuró ella, suspirando y tomando un sorbo de agua—. Estoy deseando que llegue Año Nuevo.
Cuando salieron del restaurante fueron a bailar, y _____ logró olvidarse de sus problemas. Con el vestido negro que se había puesto, atraía las miradas de muchos de los hombres que había en la pista. Tenía el cuello de barco,dejando los hombros al descubierto, y una falda con vuelo; y se complementaba con un chal de tul blanco, pero lo había dejado en el asiento para poder moverse mejor.
Cuando regresó al piso, se sentía como si pudiera volar, pero la sonrisa se borró de sus labios cuando entró por la puerta y se encontró a Nick esperándola en el vestíbulo.
— ¿Dónde has dejado a Romeo? —le preguntó burlón—. ¿No lo has invitado a que pasara para tomar una última copa?
Llevaba una camisa de vestir, con las mangas enrolladas y los primeros botones desabrochados, y unos pantalones negros. Era obvio que también había salido, y quizá hubiera vuelto poco antes que ella.
—Mañana tiene que trabajar —contestó ella, preguntándose por qué tenía que darle explicaciones.Nick levantó la barbilla de un modo arrogante, y fijó sus ojos cafes entornados en sus hombros desnudos.Azorada, ____ se tapó con el chal de tul.
—¿A qué viene esa repentina timidez? —inquirió él, dando un paso adelante._____ sintió deseos de salir corriendo.
—¿Dónde... dónde está Ada? —inquirió.
—En su habitación, hablando con Marshal por teléfono —contestó Nick, sinquitarle los ojos de encima—. ¿Por qué? Ya eres mayorcita. ¿No necesitarás que te proteja?
Nick se acercó más a ella y extendió las manos, colocándolas sobre sus hombros. _____ dio un respingo al sentir el contacto de sus dedos, y se quedó paralizada cuando vio que estaba deslizando la tela hacia abajo-
—Nick... —comenzó.Pero él no le hizo ningún caso. Sus labios cubrieron de besos su hombro izquierdo, dejando a su paso una estela ardiente, y sus dedos la sujetaron por los brazos, hundiéndose en la carne mientras mordisqueaba suavementesu piel de seda.
—Nick, por favor, para... —gimió Nick. Y, a pesar de la protesta, cerró los ojos y arqueó la garganta, como si estuviera invitándole, rogándole que hiciera con ella lo que quisiera.
—¿Por qué quieres que pare? Tú me deseas —le susurró con voz ronca—. Y yo también a ti... Nunca había experimentado nada semejante... ¡Me vuelves loco!
____ sintió la lengua de Nick lamiendo su garganta, y el borde de sus dientes, dándole pequeños mordiscos, para ir descendiendo poco a poco hacia su escote, en un silencio sólo roto por la agitada respiración de ambos.
—Sabes como el más dulce de los caramelos —jadeó Nick.Sus dedos le estaban apretando demasiado fuerte los brazos, pero ____ estaba demasiado perdida en las sensaciones que la invadían como para quejarse.
—Oh, Dios... —farfulló Nick.
Sus labios, cada vez más insistentes, habían empezado a subir de nuevo por el cuello de ____, y en ese momento alcanzaron la mandíbula. Subió las manos, enredando los dedos en sus cabellos, y haciendo que echara la cabeza hacia atrás al tiempo que él se inclinaba hacia ella.
—Te deseo tanto, ____...
Su boca estaba ya sólo a unos centímetros de la de ella, y ____ le habríadado lo que quisiese, pero antes de que el beso se produjera, el ruido de una puerta abriéndose al fondo del pasillo irrumpió en el tenso silencio.
—Diablos... —masculló nick.Sus dedos apretaron la nuca de ____, y había llamaradas en sus ojos antes de que se apartase de ella, dejándola temblando por el deseo insatisfecho.
—No estoy segura de poder aguantar un solo día más sin ver a Marshal —dijo Ada, entrando en el salón con el teléfono inalámbrico en la mano — .¿Por qué tendría que buscarme un novio en la marina? Ah, hola, ____ —saludó a su amiga al verla—. No sabía que habías llegado ya. ¿Lo has pasado bien?
—Oh, sí, muy bien —contestó ____, esbozando una sonrisa con dificultad.Alzó la vista, y al encontrarse sus ojos con los de Nick se puso roja como una amapola. El ranchero bajó la mirada a los labios de la joven, volvió asubirla a sus ojos castaños, maldijo entre dientes y se alejó por el pasillo,entrando en su habitación y cerrando de un portazo.
—¿Qué es lo que le pasa ahora? —inquirió Ada frunciendo el ceño.
—Ni idea —respondió ____, rehuyendo su mirada— . Dios, estoy molida. Me voy a dormir. Jack y yo hemos ido a bailar y los pies me están matando...
—Pues tienes que estar en forma para el viernes por la noche —le dijo su amiga riéndose—. Que descanses. ____.
—Tú también —murmuró ____, dirigiéndose hacia el pasillo de espaldas, y manteniendo a duras penas la sonrisa hasta que por fin se dio la vuelta y entró en su cuarto.
Se dejó caer en la cama porque las piernas ya no la sostenían. Ni siquiera la había besado, y estaba temblando como una hoja. Sólo el cielo sabía lo que podría pasar si volvía a intentarlo y llegaba más lejos. No quería ni pensarlo.
Listo Chicas :) Espero y les guste, gracias por leer.
MeliGarcia
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
LASJDNLAKSDKAJSDN MEE ENCANTO OOOOO: NICKK ME DESEAA KAJSNDJANDKAS :DDD ME ENCANTAA!! SEGUILA :D
Invitado
Invitado
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
SIGUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE, NICK ME DESEA :O ksdjgbksajgb
Seeyouinanotherlife
Re: Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)Terminada.
oh diablos xq ada no pudo ser mas inoportuna
casi lloro xq no se besaron
dios AMO tu novela esta cada vez mas genuial siguela por favor adore le cap
sigue.........
casi lloro xq no se besaron
dios AMO tu novela esta cada vez mas genuial siguela por favor adore le cap
sigue.........
ElitzJb
Corazón Indomable - Nick&Tu (adaptacion)
Capitulo 5.#1
AQUELLA noche ____ tardó muchísimo en dormirse, y a la mañana siguientese despertó con un dolor de cabeza espantoso, y tuvo que tomarse dos aspirinas.Nick, por su parte, estuvo el día entero malhumorado, mientras Ada y ella hacían un poco de limpieza. Se había ofrecido a ayudarlas, pero su hermanase había apresurado a decirle que no era necesario, recordándole que era su invitado, aunque luego le dijo aparte a su amiga que le había dicho que no porque era un manazas que rompía lo que tocaba.
Y, así, Nick se pasó todo el día hojeando periódicos, sentado frente al televisor cambiando todo el tiempo de canal, y caminando arriba y abajo como un león enjaulado. Incluso a ____ estaba empezando a darle algo de lástima.
—Vas a acabar desgastando la alfombra —le dijo después del almuerzo,mientras Ada fregaba los platos.Nick se volvió hacia ella con las manos en los bolsillos y se quedó mirándola.
—Si te la gasto te compraré otra.
—No lo decía por eso —farfulló ella, conteniéndose—. Verdaderamente detestas estar encerrado, ¿eh?
—No te haces una idea. Si tuviera que vivir en la ciudad, me volvería loco.
—Nueva York tiene un montón de cosas que ver —le dijo ____—: CentralPark, la estatua de la Libertad, el Empire State...
—Ya los he visto una vez —contestó Nick—, y me he recorrido todo el centro. Además, lo que quiero no está ahí fuera.
____ alzó la vista, y se miraron a los ojos un instante antes de que Nick se acercara a ella.
—De hecho, lo que quiero está ahora mismo en esta habitación —murmuró con voz ronca—. Te deseo, ____, y no tengo intención alguna de ocultártelo.
—Pues yo no... yo no te deseo —replicó ella sin aliento—. Ya tengo a un hombre que...
—A un hombre que ni siquiera puede competir conmigo —la interrumpió él—.¿De qué tienes miedo? No soy un bruto en la cama. Jamás te haría daño.
_____ se sonrojó profusamente, y tuvo que contenerse para no darle una bofetada.
—Prefería cuando me odiabas —le dijo lanzándole una mirada enfadada.Los ojos de Nick escrutaron los suyos.
—¿Crees que te odiaba? —murmuró.____ abrió la boca para responder, pero antes de que pudiera hacerlo, Ada,que había terminado de fregar, entró el salón, y se pegó a ella como una lapa hasta que Nick se fue a recoger a la tal Jennie para la cena de aquella noche.Jack y Marshal, por su parte, llegaron el uno poco minutos después que el otro.
—Estás preciosa —le dijo Jack a _____, que se había puesto un vestido azul ceñido de terciopelo—. Y me encanta como llevas el cabello.
—Gracias, tú también te has puesto muy elegante. ¿Te acuerdas de Marshal,el prometido de Ada? —le preguntó señalando con la palma abierta al hombre alto y moreno junto a su amiga.
—Sí, claro —dijo Jack tendiéndole la mano—. Me alegra volver a verte,Marshal. ¿Cómo te trata la Marina?
—Bien, bien —contestó el novio de Ada, estrechándole la mano—, no me puedo quejar. Me encanta el mar, aunque a veces echas muchísimo de menos lo que dejas en tierra —añadió, tomando a Ada por el hombro, y atrayéndola hacia sí con una sonrisa en los labios.
—Lo imagino —se rió Jack.
—Bueno —intervino ____ tomándolo del brazo y abriendo la puerta—,pongámonos en marcha o llegaremos tarde.
—¿No esperamos a tu hermano, Ada? Creía que iba a venir con nosotros —preguntó Jack con evidente reticencia.
—Hemos quedado con él y su cita en el restaurante —contestó ella.
—Ah, bien —contestó Jack—. Entonces acabemos con ello cuanto antes —le siseó a ____ con complicidad mientras salían al pasillo—. Los malos tragos es mejor pasarlos pronto.
—No te preocupes —le dijo ____—, si monta un numerito le echaré la botella de vino por la cabeza.
—Pero, no crees que vaya a hacerlo, ¿verdad? — inquirió Jack espantado.____ sonrió y le dio unas palmaditas en el brazo para tranquilizarlo. Jack lo pasaba fatal cuando alguien daba un espectáculo, pero ella desde luego estaría encantada de poder poner a Nick perdido de vino.
—Por supuesto que no, no te preocupes, todo irá bien, ya verás. Lo ignoraremos.
Sin embargo, a _____ le resultó bastante difícil ignorarlo cuando apareció con una despampanante rubia del brazo que iba vestida con un exclusivo y provocador traje de diseño, y cuya primera mirada a Ada y a ella fue como una declaración de guerra.
—Tú debes ser Ada —le dijo dirigiéndose hacia ella con una sonrisa empalagosa.
—Te equivocas de mujer —replicó _____—. Ella es Ada.
La rubia balbució un «oh», pero inmediatamente volvió a esbozar su falsa sonrisa cuando se giró hacia Ada para saludarla.
—No sabes cuánto me alegro de conocerte. Soy Jennie. Nick me ha hablado tanto de ti. Nos conocemos desde hace años, y siempre que viene a Nueva York salimos... si yo no tengo algún desfile o una sesión fotográfica, claro. Es que soy modelo —aclaró«Se moría por decirlo», pensó ____ cuando se sentó a la mesa que habían reservado con Jack a su derecha.
—¿No os parece que este sitio es increíble? —dijo Jennie entusiasmada,sentándose a la izquierda de ____, pero dejando una silla de por medio—. Me encanta el ambiente tan chic que hay. ¿Y verdad que la orquesta esfantástica?
_____ no habría sabido decirle. Estaba demasiado irritada observándola como para prestar atención a la música o a la cantante. Para colmo de males, Nick se sentó en el hueco que la rubia había dejado.
—Permitid que os presente, _____ —le dijo—. Ésta es Jennie Winn. Jennie, ellos son _______ James y su... acompañante.
_____ le lanzó una mirada furibunda.
—Se llama Jack Asher —le recordó.
—Es un placer —murmuró Jennie—. ¿A qué se dedica, señor Asher? —le preguntó pestañeando con coquetería.Jack se irguió rápidamente en la silla, el muy chaquetero...
—Soy columnista político, en el New York Times —respondió.Jennie sonrió.
—¿En serio? Siempre he pensado que no hay nada más sexy que un hombre inteligente.
_____ tuvo que llevarse la servilleta a los labios para ahogar una risita.
—¿Por qué no compartes el chiste con nosotros, _____? —inquirió Nick en un tono gélido.
Kati carraspeó.
—Me estaba atragantado —replicó—, y me he tapado la boca con la servilleta porque no es de buena educación toser en la mesa.
—¿Y con qué te estabas atragantando?, ¿con el aire? Ni siquiera hemos pedido las bebidas.
—Nick, cariño, no te sulfures —intervino Jennie, lanzando una mirada de desprecio a _____—. Después iremos a mi apartamento y te daré uno de esos masajes que tanto te gustan.
_____ sintió deseos de tirarle de los pelos, pero por suerte en ese momento apareció el camarero para tomar nota de lo que querían tomar.
—Yo quiero tomar costillas de primera —dijo Jennie, en su tono de reina de los mares—. Poco hechas.
—Me encantan las mujeres que no tienen remilgos en el comer; no como ésas que sólo toman cuatro hojas de lechuga y agua mineral —comentó Nick, dirigiéndole una sonrisa—. Tomaré lo mismo —le dijo al camarero.
____ estaba segura de que Jennie era de ésas que acababa de mencionar Nick, porque, ¿cómo iba a mantener esa figura sino?, pero seguramente se saltaba su estricta dieta de modelo cuando salía con él, sólo para complacerlo.Pidieron los demás y ella, y minutos después el camarero les traía los entrantes. La cena por fortuna se desarrolló sin incidentes, y mantuvieronuna charla distendida hasta que, cuando estaban ya tomando los postres, el ranchero se inclinó hacia delante y le dijo a Jack:
—Leí su columna sobre el escándalo de Washington.
—¿De veras? —respondió Jack en un tono cortés.Nick asintió.
—Me pareció interesante lo que decías del «pájaro» de ese organismo estatal que ha estado asignando fondos del presupuesto sobre el papel que luego no llegaban a sus destinatarios —comentó—. Cada vez me sorprende más la desvergüenza de los políticos... y la indiferencia de la gente.Jack se irguió en el asiento.
—Sí, bueno, lo que yo no alcanzo a imaginar es cómo esperaba que esto no acabase descubriéndose — dijo, olvidándose de su entrecot a las finas hierbas mientras proseguía con el tema.
Nick estaba tan al tanto como él en el asunto, y todos, excepto Jennie, que parecía más aburrida que una ostra, acabaron escuchando atentamente la interesante conversación entre ambos hombres.
—Está usted muy puesto en política para ser un ranchero, señor Jonas —le dijo Jack riéndose.
—Me licencié en Ciencias Políticas en la universidad —respondió Nick—. En realidad la ganadería me eligió a mí y no yo a ella. Cuando murió nuestro padre tuve que hacerme cargo del rancho —le explicó encogiéndose de hombros—, pero puedo decirle que no me arrepiento. Además, las vacas se parecen mucho a los políticos, señor Asher —añadió con una sonrisa—: son impredecibles, difíciles de manejar, y a veces endiabladamente irritantes.Jack se echó a reír.
—Lo imagino.
—¿Podríais dejar de hablar de cosas tan aburridas, por favor? —saltó Jennie exasperada—. Además, Nick y yo tenemos entradas para un musical de Broadway y llegaremos tarde si os pasáis toda la noche de chachara —farfulló con un mohín.
Nick le lanzó una mirada que habría detenido el tráfico, y ella cerró la boca al instante.
— Claro que tampoco pasa nada si llegamos un poco tarde, cariño —le dijo a Nick en un tono conciliador— ; siempre podemos entrar en el segundo acto.
_____ alzó la barbilla con cierta animosidad. Si hubiera sido ella a quien la hubiese mirado así, lo habría mandado al infierno, en vez de dorarle la pildora para que no se molestase, y Nick debía estar pensando lo mismo,porque la miró, y al ver el brillo beligerante en sus ojos, una chispa salvaje relumbró en los suyos, y esbozó una sonrisa.
AQUELLA noche ____ tardó muchísimo en dormirse, y a la mañana siguientese despertó con un dolor de cabeza espantoso, y tuvo que tomarse dos aspirinas.Nick, por su parte, estuvo el día entero malhumorado, mientras Ada y ella hacían un poco de limpieza. Se había ofrecido a ayudarlas, pero su hermanase había apresurado a decirle que no era necesario, recordándole que era su invitado, aunque luego le dijo aparte a su amiga que le había dicho que no porque era un manazas que rompía lo que tocaba.
Y, así, Nick se pasó todo el día hojeando periódicos, sentado frente al televisor cambiando todo el tiempo de canal, y caminando arriba y abajo como un león enjaulado. Incluso a ____ estaba empezando a darle algo de lástima.
—Vas a acabar desgastando la alfombra —le dijo después del almuerzo,mientras Ada fregaba los platos.Nick se volvió hacia ella con las manos en los bolsillos y se quedó mirándola.
—Si te la gasto te compraré otra.
—No lo decía por eso —farfulló ella, conteniéndose—. Verdaderamente detestas estar encerrado, ¿eh?
—No te haces una idea. Si tuviera que vivir en la ciudad, me volvería loco.
—Nueva York tiene un montón de cosas que ver —le dijo ____—: CentralPark, la estatua de la Libertad, el Empire State...
—Ya los he visto una vez —contestó Nick—, y me he recorrido todo el centro. Además, lo que quiero no está ahí fuera.
____ alzó la vista, y se miraron a los ojos un instante antes de que Nick se acercara a ella.
—De hecho, lo que quiero está ahora mismo en esta habitación —murmuró con voz ronca—. Te deseo, ____, y no tengo intención alguna de ocultártelo.
—Pues yo no... yo no te deseo —replicó ella sin aliento—. Ya tengo a un hombre que...
—A un hombre que ni siquiera puede competir conmigo —la interrumpió él—.¿De qué tienes miedo? No soy un bruto en la cama. Jamás te haría daño.
_____ se sonrojó profusamente, y tuvo que contenerse para no darle una bofetada.
—Prefería cuando me odiabas —le dijo lanzándole una mirada enfadada.Los ojos de Nick escrutaron los suyos.
—¿Crees que te odiaba? —murmuró.____ abrió la boca para responder, pero antes de que pudiera hacerlo, Ada,que había terminado de fregar, entró el salón, y se pegó a ella como una lapa hasta que Nick se fue a recoger a la tal Jennie para la cena de aquella noche.Jack y Marshal, por su parte, llegaron el uno poco minutos después que el otro.
—Estás preciosa —le dijo Jack a _____, que se había puesto un vestido azul ceñido de terciopelo—. Y me encanta como llevas el cabello.
—Gracias, tú también te has puesto muy elegante. ¿Te acuerdas de Marshal,el prometido de Ada? —le preguntó señalando con la palma abierta al hombre alto y moreno junto a su amiga.
—Sí, claro —dijo Jack tendiéndole la mano—. Me alegra volver a verte,Marshal. ¿Cómo te trata la Marina?
—Bien, bien —contestó el novio de Ada, estrechándole la mano—, no me puedo quejar. Me encanta el mar, aunque a veces echas muchísimo de menos lo que dejas en tierra —añadió, tomando a Ada por el hombro, y atrayéndola hacia sí con una sonrisa en los labios.
—Lo imagino —se rió Jack.
—Bueno —intervino ____ tomándolo del brazo y abriendo la puerta—,pongámonos en marcha o llegaremos tarde.
—¿No esperamos a tu hermano, Ada? Creía que iba a venir con nosotros —preguntó Jack con evidente reticencia.
—Hemos quedado con él y su cita en el restaurante —contestó ella.
—Ah, bien —contestó Jack—. Entonces acabemos con ello cuanto antes —le siseó a ____ con complicidad mientras salían al pasillo—. Los malos tragos es mejor pasarlos pronto.
—No te preocupes —le dijo ____—, si monta un numerito le echaré la botella de vino por la cabeza.
—Pero, no crees que vaya a hacerlo, ¿verdad? — inquirió Jack espantado.____ sonrió y le dio unas palmaditas en el brazo para tranquilizarlo. Jack lo pasaba fatal cuando alguien daba un espectáculo, pero ella desde luego estaría encantada de poder poner a Nick perdido de vino.
—Por supuesto que no, no te preocupes, todo irá bien, ya verás. Lo ignoraremos.
Sin embargo, a _____ le resultó bastante difícil ignorarlo cuando apareció con una despampanante rubia del brazo que iba vestida con un exclusivo y provocador traje de diseño, y cuya primera mirada a Ada y a ella fue como una declaración de guerra.
—Tú debes ser Ada —le dijo dirigiéndose hacia ella con una sonrisa empalagosa.
—Te equivocas de mujer —replicó _____—. Ella es Ada.
La rubia balbució un «oh», pero inmediatamente volvió a esbozar su falsa sonrisa cuando se giró hacia Ada para saludarla.
—No sabes cuánto me alegro de conocerte. Soy Jennie. Nick me ha hablado tanto de ti. Nos conocemos desde hace años, y siempre que viene a Nueva York salimos... si yo no tengo algún desfile o una sesión fotográfica, claro. Es que soy modelo —aclaró«Se moría por decirlo», pensó ____ cuando se sentó a la mesa que habían reservado con Jack a su derecha.
—¿No os parece que este sitio es increíble? —dijo Jennie entusiasmada,sentándose a la izquierda de ____, pero dejando una silla de por medio—. Me encanta el ambiente tan chic que hay. ¿Y verdad que la orquesta esfantástica?
_____ no habría sabido decirle. Estaba demasiado irritada observándola como para prestar atención a la música o a la cantante. Para colmo de males, Nick se sentó en el hueco que la rubia había dejado.
—Permitid que os presente, _____ —le dijo—. Ésta es Jennie Winn. Jennie, ellos son _______ James y su... acompañante.
_____ le lanzó una mirada furibunda.
—Se llama Jack Asher —le recordó.
—Es un placer —murmuró Jennie—. ¿A qué se dedica, señor Asher? —le preguntó pestañeando con coquetería.Jack se irguió rápidamente en la silla, el muy chaquetero...
—Soy columnista político, en el New York Times —respondió.Jennie sonrió.
—¿En serio? Siempre he pensado que no hay nada más sexy que un hombre inteligente.
_____ tuvo que llevarse la servilleta a los labios para ahogar una risita.
—¿Por qué no compartes el chiste con nosotros, _____? —inquirió Nick en un tono gélido.
Kati carraspeó.
—Me estaba atragantado —replicó—, y me he tapado la boca con la servilleta porque no es de buena educación toser en la mesa.
—¿Y con qué te estabas atragantando?, ¿con el aire? Ni siquiera hemos pedido las bebidas.
—Nick, cariño, no te sulfures —intervino Jennie, lanzando una mirada de desprecio a _____—. Después iremos a mi apartamento y te daré uno de esos masajes que tanto te gustan.
_____ sintió deseos de tirarle de los pelos, pero por suerte en ese momento apareció el camarero para tomar nota de lo que querían tomar.
—Yo quiero tomar costillas de primera —dijo Jennie, en su tono de reina de los mares—. Poco hechas.
—Me encantan las mujeres que no tienen remilgos en el comer; no como ésas que sólo toman cuatro hojas de lechuga y agua mineral —comentó Nick, dirigiéndole una sonrisa—. Tomaré lo mismo —le dijo al camarero.
____ estaba segura de que Jennie era de ésas que acababa de mencionar Nick, porque, ¿cómo iba a mantener esa figura sino?, pero seguramente se saltaba su estricta dieta de modelo cuando salía con él, sólo para complacerlo.Pidieron los demás y ella, y minutos después el camarero les traía los entrantes. La cena por fortuna se desarrolló sin incidentes, y mantuvieronuna charla distendida hasta que, cuando estaban ya tomando los postres, el ranchero se inclinó hacia delante y le dijo a Jack:
—Leí su columna sobre el escándalo de Washington.
—¿De veras? —respondió Jack en un tono cortés.Nick asintió.
—Me pareció interesante lo que decías del «pájaro» de ese organismo estatal que ha estado asignando fondos del presupuesto sobre el papel que luego no llegaban a sus destinatarios —comentó—. Cada vez me sorprende más la desvergüenza de los políticos... y la indiferencia de la gente.Jack se irguió en el asiento.
—Sí, bueno, lo que yo no alcanzo a imaginar es cómo esperaba que esto no acabase descubriéndose — dijo, olvidándose de su entrecot a las finas hierbas mientras proseguía con el tema.
Nick estaba tan al tanto como él en el asunto, y todos, excepto Jennie, que parecía más aburrida que una ostra, acabaron escuchando atentamente la interesante conversación entre ambos hombres.
—Está usted muy puesto en política para ser un ranchero, señor Jonas —le dijo Jack riéndose.
—Me licencié en Ciencias Políticas en la universidad —respondió Nick—. En realidad la ganadería me eligió a mí y no yo a ella. Cuando murió nuestro padre tuve que hacerme cargo del rancho —le explicó encogiéndose de hombros—, pero puedo decirle que no me arrepiento. Además, las vacas se parecen mucho a los políticos, señor Asher —añadió con una sonrisa—: son impredecibles, difíciles de manejar, y a veces endiabladamente irritantes.Jack se echó a reír.
—Lo imagino.
—¿Podríais dejar de hablar de cosas tan aburridas, por favor? —saltó Jennie exasperada—. Además, Nick y yo tenemos entradas para un musical de Broadway y llegaremos tarde si os pasáis toda la noche de chachara —farfulló con un mohín.
Nick le lanzó una mirada que habría detenido el tráfico, y ella cerró la boca al instante.
— Claro que tampoco pasa nada si llegamos un poco tarde, cariño —le dijo a Nick en un tono conciliador— ; siempre podemos entrar en el segundo acto.
_____ alzó la barbilla con cierta animosidad. Si hubiera sido ella a quien la hubiese mirado así, lo habría mandado al infierno, en vez de dorarle la pildora para que no se molestase, y Nick debía estar pensando lo mismo,porque la miró, y al ver el brillo beligerante en sus ojos, una chispa salvaje relumbró en los suyos, y esbozó una sonrisa.
MeliGarcia
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