Mi alma gemela. (Harry Styles) [TERMINADA]

A pesar del ofrecimiento de Zayn, de quedarme a dormir, supuse que sería demasiado. Además, aún he de ir a buscar a Louis, quien sabe, puede ser que se entretuvo mirando un conejito. Y que el conejito tuviera la rabia y un instinto homicida, le obligó a morderle. Solo a pensar en las peores de las cosas que le pudiera pasar a Louis, me motivaba a seguir con paso firme hasta el temible bosque oscuro.
Cuando acabamos de cenar (por cierto, nunca, nunca de los nuncas, comáis 1kg de grosellas silvestres, producen efectos laxantes, no me pregunteis como lo sé.) Liam me enseñó un atajo hacía el cielo, y hasta se ofreció en acompañarme. En cambio Harry desapareció, con la excusa de que quería ir a cazar.

-¿De verdad Harry lee la mente?-Pregunté yo aún en shock, en toda la cena no me atreví a mirarlo a los ojos.
-Si, cada demonio tiene un solo poder, yo puedo hacerme invisible.- Comentó Liam. ¿Puede ser que
él nos viera...? No, no lo creo, él llegó después de mí ¿O no?
-Oh, si claro. Yo, puedo transformarme en cualquier animal.- Me respondió Zayn. ¡Anda ya! ¿leer mentes, hacerse invisible y transformarse en animales? eso era mucho mejor que "volar". Supongo que al ser ángeles, los poderes són frágiles y sin maldad. Aunque también un poco aburridos.
-¿Y tu? ¿Qué poder tienes Judy?- Me preguntó Liam. Iba a corregirlo por "Qué poderes.." Aunque recordé que Zayn me dijo que ahora era un demonio, y los demonios solo tienen un poder.
-Puedo volar y hacer volar cosas.-Dije yo sin ánimos. Los dos se petaron de risa.
-¿Que?-Pregunté molesta.
-Normalmente eso sería un poder de ángel, es muy...insignificante.- Me respondió Liam, no sin después estallar a carcajadas. Me empezó ha incomodar los comentarios. Normalmente, no soy desafiante, pero me estaban empezando a sacar de mis "casitas". Localizé una piedra del tamaño de mi puño, cerré los ojos, y tapando mi tatuaje de estrella (ahora azul) con la otra mano, dí un último respiro, antes de que la piedra se lanzara de lleno en la nuca de Liam. Éste se giró, mirándome atónito.
-Yo no creo que sea demasiado "Insignificante"-Dije haciendo comillas con los dedos. Le sonreí maliciosamente, y pensé que, con la ropa rasgada, las botas de cuero sucias de barro y el pelo revuelto, podría hacer mi aparencia de ángel un poco rebelde y desaliñada.


Me despedí de Liam y de Zayn, Harry no, ya que no había llegado aún. Liam me acompañó medio camino, por el profundo y tenebroso bosque. Sentía mis botas negras chocar contra el barro húmedo, eso era lo único que oía. Mis ojos se abrieron como platos, estaba buscando a Louis, como un halcón busca su presa.
Me olvidé de que Liam se había ido hace rato, y que yo estaba sola en el profundo bosque oscuro.
Y ahí fue cuando oí un ruido, más bien el de una branca rota, pero me asusté igual. Caminé sigilosamente por el camino sin hierbajos, aunque la arena se me ponía en las botas y cada vez me molestaba más. Vi una roca más o menos plana, así que me senté en la roca a quitar la arena de los zapatos sin saber lo que estaba hacendo. Solo fue un roce, pero bastó para que me estremeciera por completo. Su perfume varonil ya daba una pista de quién era y justo cuando me giré para verlo cara a cara, no pude evitar que saliera un grito ahogado.

¡¡¡LOUIS WILLIAM TOMLINSON, NO ME VUELVAS A DAR ESOS SUSTOS EN EL RESTO DE TU MISERABLE EXISTENCIA!!!!- Le grité, estaba realmente enfadada, pero algo cambió mis emociones, y estoy segura de que no fue por sus poderes. Louis estaba con la camisa hecha trizas, a parte de los cortes profundos y sangrientos. Aunque eso no fue lo que provocó que palideciera. Tenía una horrible mancha roja en la pierna derecha, que se iba extendiendo poco a poco. Él hizo el débil intento de sonreir, aunque se convertió en una mueca de dolor.
Antes de que pudiera caer, lo sujeté con todas mis fuerzas y lo apoyé a la roca donde había estado minutos antes.
-¿Louis como te has hecho eso?- Pregunté desesperada, aunque él no podía responder. Le quité la camiseta, o lo que quedaba de ella. Él me miró confuso.
-No te preucupes Louis, te lo puedo curar.- Él solo asintió levemente. Le puse la mano por todas las heridas, que iban cicatrizando poco a poco, acompañado de una luz azul. Bien, torso y extramidades superiores, Listo. Ahora solo faltaba la pierna derecha.
-Louis, necesito que te quites los pantalones.- Le dije un poco avergonzada. Él aún sorprendido por mi nuevo don secreto, hizo una mueca picarona y añadió debilmente:
-Vaya...no...p-pensaba que....me lo dijeras....tan rápido...nos a-a-acabamos...de c-con...ocer...- Bromeó y sonrió sin fuerzas. Reí de su broma mientras se quitaba lentamente los pantalones beige, Louis era capaz de bromear hasta en una situación así.
Observé su pierna desnuda, estaba muy mal, me parecía que no lo podía curar con mis poderes. Tenía unos golpes de diferentes colores, morados, azules...Había una herida muy profunda, casi se podía ver el hueso.Y sangre, sangre por todas partes. Me puse blanca, y las náuseas no tardaron en llegar.
-¿To..do va b-bien?- Me preguntó Louis con el pelo revuelto. Yo solo asentí conteniendo él vómito. No me arriesgaba a abrir la boca.
Cogí un poco de musgo para limpiar un poco la carnicería, y pusé mis manos temblorosas sobre la herida. Sentí el líquido espeso y rojo, acarcicar mi mano, y un impulso quiso alejarla, pero había de curar a Louis. Presioné con todas mis fuerzas y la luz azul que tanto conocía, llego más intensamente. Iba curando poco a poco la herida, y parecía que el tiempo no pasaba, pero yo mantení mis manos en su pierna. Al cabo de un rato, de la profunda herida, solo quedó una cicatriz rosada.
Louis me miró feliz, ya había recuperado su color, y parecía más saludable. Aunque todo eso depareció cuando le ayudé a mantenerse en pie. Solo apoyó una pierna, cuando se volvió blanco como la nieve, y sus labios habían perdido color. Se dejó caer en la roca otra vez.
-Porfavor Louis, dime como te has hecho eso.-Le supliqué, era la gran duda que ahora solo ocupaba mi mente.
-Verás, en el camino te perdí de vista, pero fue por una buena razón, no porque estubiera despistado.-Contó mientras se ponía los pantalones manchados de sangre.
-Fue porque tropecé y caí por un camino cuesta abajo, pero me desmayé en el camino. Cuando desperté, estaba de noche y tenía la ropa hecha un desastre, supongo que plantas con púas se enredaron en mí, mientras caía cuesta abajo. Cuando intenté ponerme en pie, tenía fuertes golpes en las piernas, así que descansé un poco encima de una piedra, lo que no vi, esque tenía una punta sobresaliente y afilada que me atrevesó la pierna. Y cuando intenté caminar un poco para buscar algo que parara la hemorragia, solo hice que abrir más la herida, y cuando ya no tenía fuerzas casi, apareciste tu.- Me explicó, pero yo solo pude evitar reirme. Era un poco gafe.
-¿Como no pudiste ver, que tenías justo atrás un camino cuesta abajo, ni que la piedra en que te sentaste tenía una enorme y afilada punta?-Y me reí imaginándolo. Aunque él se molestó un poco.
-Ja-Ja-Ja habló la doña "soylamejordelmundoporquesecurarpersonas"-Se cruzó de brazos dándome la espalda. Genial, lo que me faltaba.
-Venga Louis, lo siento, no quería ofenderte.-Le pasé los brazos por el cuello. él correspondió al abrazo, pero no antes de lanzarme una bola de barro en toda la espalda.
-¡LOUIS! ¡¡TIENES LA BENDITA SUERTE DE TENER LA PIERNA ROTA, PORQUE SINO TE LA ROMPERÍA YO, Y DE UNA FORMA MÁS DESAGRADABLE!!!"-Le grité yo.
Él empezó a reír descontroladamente al lanzarme otra bola de barro por la cara. Y yo le tiré otra por el pelo, y el otra a mi falda y yo otra en su pecho, y así empezamos una guerra de barro, jugando como dos niños pequeños.
Cuando acabamos los dos de cabeza hasta los pies, llenos de barro, empezamos a idear un plan para ir a dormir a algún sitio, ya que Louis se encontraba demasiado débil para caminar más de 2 metros.
Se me ocurrió, que quizás Zayn y...Harry, podrían dejarnos dormir una noche en su casa. Total, no teníamos donde ir, y apenas estaba a unos minutos de donde estábamos, así que yo y Lou, empezamos a movernos lentamente por el suelo rugoso y húmedo del bosque. él se apoyaba fuertemente en mi hombro, mientras dábamos pequeños pasitos, así, llegaría antes a su casa un caracol que nosotros.
Al cabo de 2 terribles horas de quejas, súplicas, chantaje...etc,etc, localizamos una cabañita, que a mi ya me era familiar.

Vale, me parece que no fue demasiado inteligente de mi parte, irrumpir en el hogar de dos demonios, como si fuera mi casa, pero en cambio, ellos nos recibieron con los brazos abiertos, hasta nos dieron ropa limpia.

-Judy, tu dormirás con Harry y Louis conmigo...A no ser que quieran una habitación para ustedes solos, y Harry y yo, en una habitación.-Dijo Zayn. Me mató con su comentario. También podría dormir con él pero recordé que tiene novia, y no quiero ponerle en problemas.

-Dormiré con Harry, no hay ningún problema.-Suspiré resignada. Harry me acompañó donde estaba la habitación.
-Mira Judy, si el beso te incomodó..yo..lo siento.-Dijo sonando culpable, con su voz lenta y ronca. Bajó la mirada, observando su Converse.
Me pareció muy caballeroso por su parte, pedir disculpas, aunque él no hizo nada.
-No pasa nada Harry, tu no tienes la culpa de que esté mal de la cabeza.-Los dos reímos.- No enserio, no me has de pedir perdón. Así que...¿Amigos?.- Pregunté yo, él sonrió de lado, estaba muy adorable.
-Claro, amigos.-Selló mi petición. Después, me dió ropa suya, ya que la mía estaba llena de barro y estaba rota. En verdad Harry era un buen chico, y muy adorable, sobretodo cuando sonríe y se le forman hoyuelos, es tan tierno...
En cuanto me estiré en la cama del lado de la de Harry, solo tuve tiempo de quitarme las botas (lo único que se había salvado de mi ropa) para después quedarme completamente frita en un sueño profundo. Probablemente los chicos habrían de ir a buscar una grua para que me levantase de la cama, la mañana siguiente.