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Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Aws:]qué tierno Harry despues del todo♡;soy nueva lectora. Siguela porfas
Harriet
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Yeah pase de página♡
Harriet
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Awww me encantoooo
Espero el proximo
Besitoooos!
*Franni
[img] [/img]
Espero el proximo
Besitoooos!
*Franni
[img] [/img]
Invitado
Invitado
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Awwwwww, Harry no era tan malo al final! Síguelaaa :)
Justanothergirl
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Capítulo XII.
Holanda. El país de los Tulipanes y los molinos de viento.
Luego de ser besada, literalmente, por Harry en su habitación, lo perdoné con una sola condición. Dejar de beber.
Sabía que ese era su problema desde el principio, además estaba de prueba la fotografía en mi celular, por lo que con solo pedirle que dejase el alcohol y aceptase, estaría perdonado. Aunque la escena de su beso ayudó un poco.
El hotel de Ámsterdam era diferente a los demás, éste tenía solo 5 pisos y las habitaciones había que caminar todo un pasillo entre cada una, aunque eso me daba un poco más de espacio.
Sentí los brazos de Niall sobre mi cintura otra vez, me estaba acostumbrando despertar y ver su rostro cada mañana, era totalmente calmado cuando dormía.
Los toques en mi puerta lo hicieron despertar y de un segundo a otro ya se encontraba abriéndole la puerta al invitado, quién al ver al rubio le indicó que saliese y volteó a mirarme otra vez.
— Te espero en la entrada en 30 minutos. — Dijo Liam.
Con calzas y botas cafés, un vestido blanco hasta los muslos debajo de un chaquetón ancho café claro y una bufanda negra sobre el cuello, bajé a encontrarme con el castaño. (Aquí)
Liam se dejaba influir por los demás, y cuando estaban todos juntos siempre decía cosas que no debía, por lo que sería más difícil de perdonar luego de su frase “Pequeña de 18” siendo que él también tenía esa edad.
Estaba sentado en la banca al lado de la entrada, conversando con el ogro moreno que nunca me quería topar, cuando Zayn me vio hizo un gesto con su ceja y se levantó para volver dentro, me equivocaba, él sería el más difícil de perdonar, pensé.
— ¿Y? ¿Quieres secuestrarme igual que Louis y Harry? — Le pregunté.
Se levantó y más nervioso de lo que creí me estiró su mano.
No quería tocarlo, era demasiado explícito cuando él era una estrella y ya había rumores de ambos como novios o yo con los chicos. Pero al verlo mejor, Lou, al parecerm lo había camuflado muy bien como un chico normal.
Desvié la mirada y por el rabillo del ojo pude ver a tres del grupo observándome desde una pared, esperando por alguna razón mi respuesta hacia Liam.
Dejé salir un suspiro y dije. — Solo esta vez, Payne.
Le acepté la invitación y vi como entrelazaba nuestros dedos con una sonrisa en su rostro, la misma que pude ver al trío de idiotas satisfechos con la iniciativa.
Entonces recordé, “Liam es muy sensible”. Fue dicho por Zayn en una de sus entrevistas, apoyándose en que el castaño solía cerrarse cuando tenía algún problema y dejaba su mente llenarse de ellos sin decirle a nadie, y por estas últimas semanas debió estar abatido en el escenario desde que salió la pregunta de Lou en la pantalla.
Me hizo caminar varias cuadras más allá del hotel donde estábamos y llegamos a un puente ancho donde del otro lado habían 3 pisos llenos de estacionamientos con bicicletas, la mayor colección de bicicletas que nunca antes había visto.
Liam y yo entramos a un local frente a ellas, donde supuestamente se podían arrendar.
— Dos, por favor. — Le dijo al atendedor.
El hombre le asintió y entró por el par de dos ruedas que había pedido, Liam volteó a verme y creí ser otra persona.
— No te enfades por lo que dije, quería disculparme ese día pero…
No lo dejé continuar, separé nuestras manos y miré hacia otro lado que no fuese su rostro, ¿Quería disculparse? ¿Entonces por qué no fue en ese mismo instante?
Volvió a juntar nuestras manos y las miré ahí, unidas y cada vez menos frías por el invierno de Ámsterdam.
— Pensé que era mejor dejarte sola, si subía a tu habitación probablemente estaría con alguna marca de cachetada en mi mejilla o algo, ¿No es así?
Asentí, él tenía razón.
El hombre llegó con las bicicletas, una azul y otra blanca, escogí la segunda por supuesto y salimos del local. Lo que menos quería en ese momento era estar cerca de él y por iniciativa propia comencé a pedalear con fuerza lejos de ahí.
— ¡____! — Escuché mi nombre con su voz. — ¡Espera un momento!
Sonreí, Liam Payne me estaba persiguiendo en bicicleta por las calles de Ámsterdam, nadie lo había visto desesperado en poner resistencia en los pedales y llegar a la misma distancia donde yo me encontraba.
— ¿Puedes decirme algo? ¿Lo que sea? — Rogó.
Reí y para alejarme de él tomé la calle siguiente y giré a la derecha. Liam frenó y se devolvió por la misma calle hacia mí, se estaba convirtiendo en algo divertido.
Giré varias veces en muchas esquinas, y el castaño seguía llamándome y yo solo me sonreía a mí misma.
Cuando intenté girar a la siguiente vuelta, los cordones de mis botas se enroscaron en los pedales y caí directamente al suelo, con las calzas rasgadas en las rodillas y el chaquetón lleno de barro.
Dejé que mi espalda cayera rendida en el piso y me quedé ahí, mirando hacia el cielo gris con una gran sonrisa en mi rostro, por primera vez me sentía como una chica de 18 años aventurera.
— ¿¡Te encuentras bien!? — Preguntó exaltado Liam, mirándome desde arriba mientras bajaba de su bicicleta. Estiró su mano y esperó mi respuesta.
— ¿Puedes acostarte a mi lado? — Dije mirándolo a los ojos.
Su piel se erizó y desvió la palma hacia atrás para decir. — No puedo negarme, ¿O si?
Sonreí y le negué con la cabeza, él suspiró y rendido se recostó a mi derecha.
— Eres extraña.
Reí por su comentario, la gente que pasaba solo nos quedaba observando curiosamente pensando en el que había un par de idiotas tirados en el suelo.
Estiré mis brazos hacia el cielo y cerré los ojos, en todos estos minutos siendo perseguida por fin me había visto libre de hacer lo que quisiera, Liam me había dado uno de los mejores momentos de mi vida.
Dejé caer mis brazos y volteé a ver su rostro, el que si no fuese porque estábamos en el suelo, sería lo único que podría observar.
— Y tú un sobreactuado.
Levantó una de sus cejas y volví a reír, con eso ya estaba más que perdonado, quién pensaría alguna vez que puedes sentirte tan bien en el suelo de Ámsterdam, llena de barro, con tu ropa desecha y con una amplia sonrisa recorriendo tu rostro luego de caer de tu bicicleta.
— ¡Estás horrible! — Gritó Harry al verme sacar las llaves de mi habitación frente a la puerta.
Giré a verlo interrogante y me sonrió, luego se me acercó y besó mi mejilla con más delicadeza que siempre.
— Pero debajo de todo eso sé que hay alguien hermosa.
Sus palabras me hicieron sonrojar y le golpeé el hombro, había cambiado mucho luego de nuestra conversación. Iba a pedirle el espacio libre para entrar a cambiarme cuando sentí un bufido desde atrás.
Volteé y el moreno de los tatuajes se encontraba observándome de la cabeza a los pies, como una rata, pensé.
— Ahora solo faltas tú, Zayn. ¿Qué harás para que te perdone esta belleza? — Dijo Harry abrazándome por detrás de los hombros.
Intenté zafarme de su agarre y el ogro dijo. — No tengo porqué disculparme con una enana entrometida.
Mi rostro cambió con su frase, del polo “Alegre” al opuesto “Furiosa”, todo por culpa de su estúpido odio contra mí, ¿Qué le había hecho para que me tratase como una basura?
Harry acercó sus labios hacia mi oído mientras el moreno entraba a su cuarto y dijo. — Zayn es muy misterioso, ____. De seguro te hará algo mucho más especial que todo lo que nosotros hemos hecho, solo dale un poco de tiempo, es muy orgulloso.
Y vaya que sí era orgulloso, ni si quiera se preocupaba de que mis rodillas se hubiesen pelado con el cemento, que mi cabello estuviese lleno de barro, y que necesitaría un nuevo chaquetón café luego de caerme en bicicleta.
— Vamos, Harold. Deja de asfixiarla por un rato. — Escuché la voz de Louis por nuestra retaguardia.
El escudo humano soltó mi cuerpo y pude ver al castaño acercarse con el irlandés, el trío mismo que espiaba el plan de Liam desde recepción, como si sus supuestos camuflajes funcionasen.
— ¿No te han curado esas heridas? — Preguntó un preocupado Niall apuntando mis rodillas.
Le negué con la cabeza y deslicé la llave por la puerta de mi habitación, entrando con el dolor de la caída en ambas piernas sin inmutarme, a veces había que dejar las cicatrices de la batalla a plena vista para ser reconocido.
— Llamaré a alguien para que te las revise. — Dijo Louis, mientras que el par restante me sonreía y se devolvían a sus cuartos, todos satisfechos por volver a conversar conmigo.
Antes de cerrar la puerta, pude ver la mirada cordero de Liam desde su puerta, esperando que no me enojase por haber caído en su recorrido.
Le sonreí amable y dije. — Gracias por todo, Liam.
Devolviéndome el gesto se relajó, hizo una leve reverencia con su pecho y entró de regreso a su habitación. Sus disculpas habían sido aceptadas.
Luego de ser besada, literalmente, por Harry en su habitación, lo perdoné con una sola condición. Dejar de beber.
Sabía que ese era su problema desde el principio, además estaba de prueba la fotografía en mi celular, por lo que con solo pedirle que dejase el alcohol y aceptase, estaría perdonado. Aunque la escena de su beso ayudó un poco.
El hotel de Ámsterdam era diferente a los demás, éste tenía solo 5 pisos y las habitaciones había que caminar todo un pasillo entre cada una, aunque eso me daba un poco más de espacio.
Sentí los brazos de Niall sobre mi cintura otra vez, me estaba acostumbrando despertar y ver su rostro cada mañana, era totalmente calmado cuando dormía.
Los toques en mi puerta lo hicieron despertar y de un segundo a otro ya se encontraba abriéndole la puerta al invitado, quién al ver al rubio le indicó que saliese y volteó a mirarme otra vez.
— Te espero en la entrada en 30 minutos. — Dijo Liam.
Con calzas y botas cafés, un vestido blanco hasta los muslos debajo de un chaquetón ancho café claro y una bufanda negra sobre el cuello, bajé a encontrarme con el castaño. (Aquí)
Liam se dejaba influir por los demás, y cuando estaban todos juntos siempre decía cosas que no debía, por lo que sería más difícil de perdonar luego de su frase “Pequeña de 18” siendo que él también tenía esa edad.
Estaba sentado en la banca al lado de la entrada, conversando con el ogro moreno que nunca me quería topar, cuando Zayn me vio hizo un gesto con su ceja y se levantó para volver dentro, me equivocaba, él sería el más difícil de perdonar, pensé.
— ¿Y? ¿Quieres secuestrarme igual que Louis y Harry? — Le pregunté.
Se levantó y más nervioso de lo que creí me estiró su mano.
No quería tocarlo, era demasiado explícito cuando él era una estrella y ya había rumores de ambos como novios o yo con los chicos. Pero al verlo mejor, Lou, al parecerm lo había camuflado muy bien como un chico normal.
Desvié la mirada y por el rabillo del ojo pude ver a tres del grupo observándome desde una pared, esperando por alguna razón mi respuesta hacia Liam.
Dejé salir un suspiro y dije. — Solo esta vez, Payne.
Le acepté la invitación y vi como entrelazaba nuestros dedos con una sonrisa en su rostro, la misma que pude ver al trío de idiotas satisfechos con la iniciativa.
Entonces recordé, “Liam es muy sensible”. Fue dicho por Zayn en una de sus entrevistas, apoyándose en que el castaño solía cerrarse cuando tenía algún problema y dejaba su mente llenarse de ellos sin decirle a nadie, y por estas últimas semanas debió estar abatido en el escenario desde que salió la pregunta de Lou en la pantalla.
Me hizo caminar varias cuadras más allá del hotel donde estábamos y llegamos a un puente ancho donde del otro lado habían 3 pisos llenos de estacionamientos con bicicletas, la mayor colección de bicicletas que nunca antes había visto.
Liam y yo entramos a un local frente a ellas, donde supuestamente se podían arrendar.
— Dos, por favor. — Le dijo al atendedor.
El hombre le asintió y entró por el par de dos ruedas que había pedido, Liam volteó a verme y creí ser otra persona.
— No te enfades por lo que dije, quería disculparme ese día pero…
No lo dejé continuar, separé nuestras manos y miré hacia otro lado que no fuese su rostro, ¿Quería disculparse? ¿Entonces por qué no fue en ese mismo instante?
Volvió a juntar nuestras manos y las miré ahí, unidas y cada vez menos frías por el invierno de Ámsterdam.
— Pensé que era mejor dejarte sola, si subía a tu habitación probablemente estaría con alguna marca de cachetada en mi mejilla o algo, ¿No es así?
Asentí, él tenía razón.
El hombre llegó con las bicicletas, una azul y otra blanca, escogí la segunda por supuesto y salimos del local. Lo que menos quería en ese momento era estar cerca de él y por iniciativa propia comencé a pedalear con fuerza lejos de ahí.
— ¡____! — Escuché mi nombre con su voz. — ¡Espera un momento!
Sonreí, Liam Payne me estaba persiguiendo en bicicleta por las calles de Ámsterdam, nadie lo había visto desesperado en poner resistencia en los pedales y llegar a la misma distancia donde yo me encontraba.
— ¿Puedes decirme algo? ¿Lo que sea? — Rogó.
Reí y para alejarme de él tomé la calle siguiente y giré a la derecha. Liam frenó y se devolvió por la misma calle hacia mí, se estaba convirtiendo en algo divertido.
Giré varias veces en muchas esquinas, y el castaño seguía llamándome y yo solo me sonreía a mí misma.
Cuando intenté girar a la siguiente vuelta, los cordones de mis botas se enroscaron en los pedales y caí directamente al suelo, con las calzas rasgadas en las rodillas y el chaquetón lleno de barro.
Dejé que mi espalda cayera rendida en el piso y me quedé ahí, mirando hacia el cielo gris con una gran sonrisa en mi rostro, por primera vez me sentía como una chica de 18 años aventurera.
— ¿¡Te encuentras bien!? — Preguntó exaltado Liam, mirándome desde arriba mientras bajaba de su bicicleta. Estiró su mano y esperó mi respuesta.
— ¿Puedes acostarte a mi lado? — Dije mirándolo a los ojos.
Su piel se erizó y desvió la palma hacia atrás para decir. — No puedo negarme, ¿O si?
Sonreí y le negué con la cabeza, él suspiró y rendido se recostó a mi derecha.
— Eres extraña.
Reí por su comentario, la gente que pasaba solo nos quedaba observando curiosamente pensando en el que había un par de idiotas tirados en el suelo.
Estiré mis brazos hacia el cielo y cerré los ojos, en todos estos minutos siendo perseguida por fin me había visto libre de hacer lo que quisiera, Liam me había dado uno de los mejores momentos de mi vida.
Dejé caer mis brazos y volteé a ver su rostro, el que si no fuese porque estábamos en el suelo, sería lo único que podría observar.
— Y tú un sobreactuado.
Levantó una de sus cejas y volví a reír, con eso ya estaba más que perdonado, quién pensaría alguna vez que puedes sentirte tan bien en el suelo de Ámsterdam, llena de barro, con tu ropa desecha y con una amplia sonrisa recorriendo tu rostro luego de caer de tu bicicleta.
— ¡Estás horrible! — Gritó Harry al verme sacar las llaves de mi habitación frente a la puerta.
Giré a verlo interrogante y me sonrió, luego se me acercó y besó mi mejilla con más delicadeza que siempre.
— Pero debajo de todo eso sé que hay alguien hermosa.
Sus palabras me hicieron sonrojar y le golpeé el hombro, había cambiado mucho luego de nuestra conversación. Iba a pedirle el espacio libre para entrar a cambiarme cuando sentí un bufido desde atrás.
Volteé y el moreno de los tatuajes se encontraba observándome de la cabeza a los pies, como una rata, pensé.
— Ahora solo faltas tú, Zayn. ¿Qué harás para que te perdone esta belleza? — Dijo Harry abrazándome por detrás de los hombros.
Intenté zafarme de su agarre y el ogro dijo. — No tengo porqué disculparme con una enana entrometida.
Mi rostro cambió con su frase, del polo “Alegre” al opuesto “Furiosa”, todo por culpa de su estúpido odio contra mí, ¿Qué le había hecho para que me tratase como una basura?
Harry acercó sus labios hacia mi oído mientras el moreno entraba a su cuarto y dijo. — Zayn es muy misterioso, ____. De seguro te hará algo mucho más especial que todo lo que nosotros hemos hecho, solo dale un poco de tiempo, es muy orgulloso.
Y vaya que sí era orgulloso, ni si quiera se preocupaba de que mis rodillas se hubiesen pelado con el cemento, que mi cabello estuviese lleno de barro, y que necesitaría un nuevo chaquetón café luego de caerme en bicicleta.
— Vamos, Harold. Deja de asfixiarla por un rato. — Escuché la voz de Louis por nuestra retaguardia.
El escudo humano soltó mi cuerpo y pude ver al castaño acercarse con el irlandés, el trío mismo que espiaba el plan de Liam desde recepción, como si sus supuestos camuflajes funcionasen.
— ¿No te han curado esas heridas? — Preguntó un preocupado Niall apuntando mis rodillas.
Le negué con la cabeza y deslicé la llave por la puerta de mi habitación, entrando con el dolor de la caída en ambas piernas sin inmutarme, a veces había que dejar las cicatrices de la batalla a plena vista para ser reconocido.
— Llamaré a alguien para que te las revise. — Dijo Louis, mientras que el par restante me sonreía y se devolvían a sus cuartos, todos satisfechos por volver a conversar conmigo.
Antes de cerrar la puerta, pude ver la mirada cordero de Liam desde su puerta, esperando que no me enojase por haber caído en su recorrido.
Le sonreí amable y dije. — Gracias por todo, Liam.
Devolviéndome el gesto se relajó, hizo una leve reverencia con su pecho y entró de regreso a su habitación. Sus disculpas habían sido aceptadas.
Sin internet en TODO el día por culpa de la compañía :CCCC Ahora les subí capítulo nuevo :P
Cassedy
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Me encanto que rayita se lo halla pasado super
Espero el proximo capitulo
Besitoos
*Franni
ʕ•ᴥ•ʔ
Espero el proximo capitulo
Besitoos
*Franni
ʕ•ᴥ•ʔ
Invitado
Invitado
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
me encantoooo, que tierno Harry hdfgdsf, Zayn orgulloso :evil: para mi que la trata asi porque le gusta(? Na, no se dghh síguelaaaaa!
Justanothergirl
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Srita. Malik ღ escribió: Aws:]qué tierno Harry despues del todo♡;soy nueva lectora. Siguela porfas
¡Bienvenida! Ahí subí un capítulo más :D Mañana subiré el siguiente y haber si puedo escribir un poco para dejar otro listo :) Gracias por comentar!
Cassedy
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Sos genial escribiendo y por Dios, que Zayn deje su lado "forro e incensible" y se opga las pilas. Quiero esa pareja. :)
Theflashes
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Me encanto hahah cuando vaya a Holanda quiero acostarme en el suelo hahahaha suena muy divertido, espero que Zayn se disculpe pronto con la rayis.
Siguela, besos.
Siguela, besos.
ScarlettMurphy
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Hola de nuevo:} primero que nada gracías por la bienvenida, y ya acabo de leer el nuevo capítulo:D. I love it♡; siempre tierno Niall durmiendo conmigo, y que bien que ahora ya cuatro estan disculpados solo falta el orgulloso de Zayn*---*okía, espero con ansias el nuevo cápitulo
Harriet
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Capítulo XIII.
— ¡¡Ahh!!
El grito desesperado de una mujer siendo asesinada por un hombre y una sierra me hizo saltar con miedo, ver una película de terror sola en Frankfurt, Alemania; no era la mejor manera de pasar el tiempo y mucho menos si tenías un resfriado que no te dejaba mover un solo músculo.
Sentí la puerta golpear y con valentía me levanté en pantuflas de la cama a abrirla, dejando a la vista un cabello rubio y perteneciente a mi segunda madre, o más conocida por todos como Lou Teasdale.
Le sonreí de igual manera de la que siempre lo hacía, ella por otra parte acostumbraba abrazarme y acariciar mi cabello, solo que por mi estado contagioso se lo negué.
— Castigaré a Liam por esto. — Dijo al sentarse en el sillón individual.
Le negué con la cabeza. — Él no tiene la culpa de nada, fui yo la que se quedó en el suelo llena de barro con el frío de la mañana. Deberías de castigarme a mí.
Ambas reímos y sacó de su bolso una cámara, me la arrojó y apuntó a su contenido.
— En todos estos días sin verte cerca cambié de trabajo a camarógrafa, si quieres alegrarte un poco ahí hay muchas opciones de hacerlo.
Le sonreí y se levantó tristemente del sofá, arreglándose sus cosas y caminando hacia la puerta anunciaba su ida. Pero antes me arrojó un beso con sus manos y reí por el gesto, Lou siempre era adorable en esos sentidos.
— Mandaré luego un enfermero a cuidarte, es su castigo. — Dijo antes de salir.
¿Castigo? ¿Estará hablando de Liam? Si fuese así me sentiría mal por enviarlo obligatoriamente luego de que les negase verme enferma, ellos eran cantantes estrellas y si se enfermaban por mi culpa sería lo peor que les podría hacer.
Me arrojé boca arriba en la cama después de apagar la película, encendí la cámara y comencé a mirar las fotografías.
La primera de ellas era de Niall, comiendo un plato de comida sin camisa siendo arreglado por Lou, él nunca dejaba de comer. Siguiendo un poco más pude ver a Harry haciendo morisquetas detrás de un Louis cantando arriba del escenario en el concierto de dos días atrás, al que no pude ir obviamente por mi resfriado.
Luego pude divisar a Liam durmiendo profundamente, aunque con muchos dibujos en su rostro hechos por Louis, donde en la siguiente fotografía se le veía pidiéndole perdón al castaño.
Cuando ya llegaba al final de todas, la que más me llamó la atención fue una de Zayn, sonriéndole a la cámara de la misma manera que lo vi sonreír en el video de inicio de sus conciertos.
La puerta sonó, dejé la cámara a un lado y caminé con un fuerte dolor en mi cabeza por el resfriado.
Abrí la puerta y no lo pude creer. El mismo chico que segundos antes estaba viendo sonreír se encontraba frente a mí intentando asesinarme con la mirada, Lou no lo entendió, no necesitaba ser cuidada por él.
— No opines nada. — Dijo molesto.
Me alejó con un leve empuje hacia el lado y entró a mi habitación. Yo me quedé petrificada en la puerta, mirando como el chico con el que menos quería tener momentos a solas, se encontraba sentándose en el sillón de invitados.
— ¿Quieres cerrar de una vez? — Me ordenó criticándome.
Pestañé como tonta y solté la puerta para que se atrancase en su lugar. Luego caminé con precaución hacia mi cama y me senté, sacándome las pantuflas, para finalmente acostarme con todo el cuerpo rígido por el no tan deseado compañero de cuidados.
En ningún momento lo miré a los ojos después que entrara, no quería estar más asustada de lo que me veía y según el dicho, si no lo miras a los ojos no olerá tu miedo. Sentí un suspiro y me tapé con las sábanas hasta por encima de mi cabeza, al parecer el resfriado me hacía ser más sensible de lo que ya era.
— ¿Por qué aceptaste venir con nosotros?
Un escalofrío me recorrió por la espalda al escuchar su voz, era como si fuese un puñal que intentaba enterrarse en mi espina dorsal cada vez que salía a la luz.
Me removí ubicándome boca arriba, mientras lentamente bajaba la sábana de mis ojos para verlo en su posición normal frente a mí. Solo que ya no estaba sentado en el sillón, ahora estaba parado al lado de mi cama con sus brazos cruzados interrogante.
Di un grito ahogado y desvié mi mirada de la de él para decir. — No voy a hablar contigo.
El ceño de su frente se frunció levemente y vi apretar sus puños, se estaba controlando.
— ¿No lo harás? Entonces podría aprovecharme de tu estado para llevarme la fotografía de Harry.
Tomó mi teléfono del velador y me senté con rapidez.
Un leve movimiento en la esquina de sus labios me hicieron creer que sonreiría, pero luego mi celular en sus manos me regresaron al estado alerta y ahora furioso que sentía por su infantil mentalidad.
— Devuélvemela.
Estiré mi mano para tomar el artefacto y lo alejó hábilmente, intentándolo varias veces con el mismo resultado. No tenía muchas fuerzas a mi favor.
Abrió el cierre de su bolsillo derecho del chaquetón y lo guardó ahí, si se lo iba a quitar tendría que acercármele lo suficiente o sacársela por alguna razón.
— Entonces, ¿Responderás mis preguntas?
Comencé a pensar, si aceptaba, él ni siquiera de ha disculpado de manera normal por todas las veces que sacó al aire esas frases y miradas feas, ni mucho menos lo estaba haciendo ahora. Luego vi la otra parte, si podía quitarle la fotografía de su posesión entonces lo echaría de mi cuarto de inmediato, lo que era una mejor opción que la primera.
Suspiré y dije. — Está bien.
Descruzó sus brazos y con pesadez se sentó en mi cama.
— ¿Por qué dijiste que sí al trato de Louis?
— Porque era un trato justo.
Negó con la cabeza cansado y siguió. — ¿Piensas realmente que estás haciendo?
— ¿De qué hablas?
— De tu viaje, con 18. Tu madre se le ve muy preocupada.
Abrí mis ojos más de lo normal, ¿Mi Madre?
— ¿Hablas de la que siempre llama a mi teléfono?
Él asintió un poco confundido y yo reí. Él creía que Helen era mi madre.
— Helen no es mi madre, solo es una amiga de la familia.
Levantó una ceja y siguió. — ¿Y por qué te llama con frecuencia? ¿Por qué se preocupa más que tu verdadera mamá?
Me sorprendieron sus preguntas, no podía responderle que Hel era mi jefa y que solo llamaba para saber si me iba bien en el trabajo, aunque por otro lado, solo recibí una llamada de Kate en todo este tiempo deseándome un feliz cumpleaños atrasado por más de una semana.
— Kate si se preocupa por mí… — Susurré apenas.
— Así que ese es el nombre de tu madre, ¿Ella llamó cuando estabas en la tienda de Madrid?
Di un respingo, yo no le había contado del llamado a nadie, ni si quiera a Lou quién tanto preguntaba ese día por mi estado. ¿Cómo sabía él que había hablado con Kate?
Al parecer esa duda fue muy explícita luego de ver su rostro, él también estaba sorprendido.
Desvió su mirada y dijo. — No opines nada.
Se levantó de mi cama y dejó el teléfono de vuelta en el velador, para caminar hacia la salida y girar la perilla, él estaba huyendo.
Justo cuando abrió la puerta no lo pensé dos veces y grité. — ¡Zayn Malik!
Se detuvo rápidamente y volteó. En su rostro estaba impresa la palabra “Secreto” y yo quería ser la que lo desenmascarase, no importaba ya el enojo y el perdón que me debía.
— ¿Me seguiste acaso cuando me devolví a la tienda?
En sus ojos vi un reflejo y lo tomé como un sí, Zayn me había escuchado hablar con mi madre.
— ¿Qué más sabes que los demás no?
Tenía la opción de que supiese de mi trabajo como columnista en The Next Time, pero al recordar sus primeras preguntas la deseché de inmediato.
— No te agrado.
Vaya, eso era un hecho. Levanté mis cejas y suspiró agotado.
— También sé que tu cumpleaños fue hace 2 meses.
El corazón comenzó a latirme con mayor rapidez que nunca, ¿Él sabía eso? ¿Cómo?
Apuntó un calendario pegado a la pared y entendí todo.
Cuando tenía 12 años, mi padre me obligó a agendar cada cumpleaños en una hoja de papel con todos los importantes escritos, pegado siempre al lado de mi puerta principal. Había olvidado la costumbre de dejar el papel ahí cada vez que entraba a mi habitación, Zayn era muy observador.
— ¿Por qué nunca sonríes al estar conmigo?
Luego de esa pregunta, pensé en que había leído mi mente, yo también iba a consultar lo mismo.
— Por la misma razón por la que tú no lo haces.
— Lo mio es diferente.
— ¿Qué es diferente si no lo sabes?
Me levanté de la cama y caminé hacia él, ya me sentía lo suficientemente valiente para enfrentarlo a la cara.
— Respóndeme, Zayn. ¿Por qué es que sabes más cosas personales de mí que todos los demás?
No me respondió, se quedó ahí parado, mirándome tan fríamente que pensé en que la poca valentía que tenía se iría de un momento a otro.
Se acercó un poco y rosó su nariz con la mía, ¿Qué estaba pasando?
— Me siento celoso de que todos quieran a una persona tan diferente como tú, siendo que solo eres una adolescente viajando por Europa. Niall era muy desinteresado en las chicas y ahora hasta duerme contigo por las noches, Louis te ve como si su única meta fuera preocuparse por ti, Harry solo necesita escuchar tu voz para saber que te quiere y Liam, piensa en ti y ya está con una sonrisa en su rostro. ¿Por qué en mí es todo lo contrario?
Retrocedí y miré sus ojos fijamente. — ¿Todo lo contrario?
Asintió. — No me agradas, ____. Pero lo único en que pienso todo el maldito día es en verte lejos de ellos y cerca de mí.
El grito desesperado de una mujer siendo asesinada por un hombre y una sierra me hizo saltar con miedo, ver una película de terror sola en Frankfurt, Alemania; no era la mejor manera de pasar el tiempo y mucho menos si tenías un resfriado que no te dejaba mover un solo músculo.
Sentí la puerta golpear y con valentía me levanté en pantuflas de la cama a abrirla, dejando a la vista un cabello rubio y perteneciente a mi segunda madre, o más conocida por todos como Lou Teasdale.
Le sonreí de igual manera de la que siempre lo hacía, ella por otra parte acostumbraba abrazarme y acariciar mi cabello, solo que por mi estado contagioso se lo negué.
— Castigaré a Liam por esto. — Dijo al sentarse en el sillón individual.
Le negué con la cabeza. — Él no tiene la culpa de nada, fui yo la que se quedó en el suelo llena de barro con el frío de la mañana. Deberías de castigarme a mí.
Ambas reímos y sacó de su bolso una cámara, me la arrojó y apuntó a su contenido.
— En todos estos días sin verte cerca cambié de trabajo a camarógrafa, si quieres alegrarte un poco ahí hay muchas opciones de hacerlo.
Le sonreí y se levantó tristemente del sofá, arreglándose sus cosas y caminando hacia la puerta anunciaba su ida. Pero antes me arrojó un beso con sus manos y reí por el gesto, Lou siempre era adorable en esos sentidos.
— Mandaré luego un enfermero a cuidarte, es su castigo. — Dijo antes de salir.
¿Castigo? ¿Estará hablando de Liam? Si fuese así me sentiría mal por enviarlo obligatoriamente luego de que les negase verme enferma, ellos eran cantantes estrellas y si se enfermaban por mi culpa sería lo peor que les podría hacer.
Me arrojé boca arriba en la cama después de apagar la película, encendí la cámara y comencé a mirar las fotografías.
La primera de ellas era de Niall, comiendo un plato de comida sin camisa siendo arreglado por Lou, él nunca dejaba de comer. Siguiendo un poco más pude ver a Harry haciendo morisquetas detrás de un Louis cantando arriba del escenario en el concierto de dos días atrás, al que no pude ir obviamente por mi resfriado.
Luego pude divisar a Liam durmiendo profundamente, aunque con muchos dibujos en su rostro hechos por Louis, donde en la siguiente fotografía se le veía pidiéndole perdón al castaño.
Cuando ya llegaba al final de todas, la que más me llamó la atención fue una de Zayn, sonriéndole a la cámara de la misma manera que lo vi sonreír en el video de inicio de sus conciertos.
La puerta sonó, dejé la cámara a un lado y caminé con un fuerte dolor en mi cabeza por el resfriado.
Abrí la puerta y no lo pude creer. El mismo chico que segundos antes estaba viendo sonreír se encontraba frente a mí intentando asesinarme con la mirada, Lou no lo entendió, no necesitaba ser cuidada por él.
— No opines nada. — Dijo molesto.
Me alejó con un leve empuje hacia el lado y entró a mi habitación. Yo me quedé petrificada en la puerta, mirando como el chico con el que menos quería tener momentos a solas, se encontraba sentándose en el sillón de invitados.
— ¿Quieres cerrar de una vez? — Me ordenó criticándome.
Pestañé como tonta y solté la puerta para que se atrancase en su lugar. Luego caminé con precaución hacia mi cama y me senté, sacándome las pantuflas, para finalmente acostarme con todo el cuerpo rígido por el no tan deseado compañero de cuidados.
En ningún momento lo miré a los ojos después que entrara, no quería estar más asustada de lo que me veía y según el dicho, si no lo miras a los ojos no olerá tu miedo. Sentí un suspiro y me tapé con las sábanas hasta por encima de mi cabeza, al parecer el resfriado me hacía ser más sensible de lo que ya era.
— ¿Por qué aceptaste venir con nosotros?
Un escalofrío me recorrió por la espalda al escuchar su voz, era como si fuese un puñal que intentaba enterrarse en mi espina dorsal cada vez que salía a la luz.
Me removí ubicándome boca arriba, mientras lentamente bajaba la sábana de mis ojos para verlo en su posición normal frente a mí. Solo que ya no estaba sentado en el sillón, ahora estaba parado al lado de mi cama con sus brazos cruzados interrogante.
Di un grito ahogado y desvié mi mirada de la de él para decir. — No voy a hablar contigo.
El ceño de su frente se frunció levemente y vi apretar sus puños, se estaba controlando.
— ¿No lo harás? Entonces podría aprovecharme de tu estado para llevarme la fotografía de Harry.
Tomó mi teléfono del velador y me senté con rapidez.
Un leve movimiento en la esquina de sus labios me hicieron creer que sonreiría, pero luego mi celular en sus manos me regresaron al estado alerta y ahora furioso que sentía por su infantil mentalidad.
— Devuélvemela.
Estiré mi mano para tomar el artefacto y lo alejó hábilmente, intentándolo varias veces con el mismo resultado. No tenía muchas fuerzas a mi favor.
Abrió el cierre de su bolsillo derecho del chaquetón y lo guardó ahí, si se lo iba a quitar tendría que acercármele lo suficiente o sacársela por alguna razón.
— Entonces, ¿Responderás mis preguntas?
Comencé a pensar, si aceptaba, él ni siquiera de ha disculpado de manera normal por todas las veces que sacó al aire esas frases y miradas feas, ni mucho menos lo estaba haciendo ahora. Luego vi la otra parte, si podía quitarle la fotografía de su posesión entonces lo echaría de mi cuarto de inmediato, lo que era una mejor opción que la primera.
Suspiré y dije. — Está bien.
Descruzó sus brazos y con pesadez se sentó en mi cama.
— ¿Por qué dijiste que sí al trato de Louis?
— Porque era un trato justo.
Negó con la cabeza cansado y siguió. — ¿Piensas realmente que estás haciendo?
— ¿De qué hablas?
— De tu viaje, con 18. Tu madre se le ve muy preocupada.
Abrí mis ojos más de lo normal, ¿Mi Madre?
— ¿Hablas de la que siempre llama a mi teléfono?
Él asintió un poco confundido y yo reí. Él creía que Helen era mi madre.
— Helen no es mi madre, solo es una amiga de la familia.
Levantó una ceja y siguió. — ¿Y por qué te llama con frecuencia? ¿Por qué se preocupa más que tu verdadera mamá?
Me sorprendieron sus preguntas, no podía responderle que Hel era mi jefa y que solo llamaba para saber si me iba bien en el trabajo, aunque por otro lado, solo recibí una llamada de Kate en todo este tiempo deseándome un feliz cumpleaños atrasado por más de una semana.
— Kate si se preocupa por mí… — Susurré apenas.
— Así que ese es el nombre de tu madre, ¿Ella llamó cuando estabas en la tienda de Madrid?
Di un respingo, yo no le había contado del llamado a nadie, ni si quiera a Lou quién tanto preguntaba ese día por mi estado. ¿Cómo sabía él que había hablado con Kate?
Al parecer esa duda fue muy explícita luego de ver su rostro, él también estaba sorprendido.
Desvió su mirada y dijo. — No opines nada.
Se levantó de mi cama y dejó el teléfono de vuelta en el velador, para caminar hacia la salida y girar la perilla, él estaba huyendo.
Justo cuando abrió la puerta no lo pensé dos veces y grité. — ¡Zayn Malik!
Se detuvo rápidamente y volteó. En su rostro estaba impresa la palabra “Secreto” y yo quería ser la que lo desenmascarase, no importaba ya el enojo y el perdón que me debía.
— ¿Me seguiste acaso cuando me devolví a la tienda?
En sus ojos vi un reflejo y lo tomé como un sí, Zayn me había escuchado hablar con mi madre.
— ¿Qué más sabes que los demás no?
Tenía la opción de que supiese de mi trabajo como columnista en The Next Time, pero al recordar sus primeras preguntas la deseché de inmediato.
— No te agrado.
Vaya, eso era un hecho. Levanté mis cejas y suspiró agotado.
— También sé que tu cumpleaños fue hace 2 meses.
El corazón comenzó a latirme con mayor rapidez que nunca, ¿Él sabía eso? ¿Cómo?
Apuntó un calendario pegado a la pared y entendí todo.
Cuando tenía 12 años, mi padre me obligó a agendar cada cumpleaños en una hoja de papel con todos los importantes escritos, pegado siempre al lado de mi puerta principal. Había olvidado la costumbre de dejar el papel ahí cada vez que entraba a mi habitación, Zayn era muy observador.
— ¿Por qué nunca sonríes al estar conmigo?
Luego de esa pregunta, pensé en que había leído mi mente, yo también iba a consultar lo mismo.
— Por la misma razón por la que tú no lo haces.
— Lo mio es diferente.
— ¿Qué es diferente si no lo sabes?
Me levanté de la cama y caminé hacia él, ya me sentía lo suficientemente valiente para enfrentarlo a la cara.
— Respóndeme, Zayn. ¿Por qué es que sabes más cosas personales de mí que todos los demás?
No me respondió, se quedó ahí parado, mirándome tan fríamente que pensé en que la poca valentía que tenía se iría de un momento a otro.
Se acercó un poco y rosó su nariz con la mía, ¿Qué estaba pasando?
— Me siento celoso de que todos quieran a una persona tan diferente como tú, siendo que solo eres una adolescente viajando por Europa. Niall era muy desinteresado en las chicas y ahora hasta duerme contigo por las noches, Louis te ve como si su única meta fuera preocuparse por ti, Harry solo necesita escuchar tu voz para saber que te quiere y Liam, piensa en ti y ya está con una sonrisa en su rostro. ¿Por qué en mí es todo lo contrario?
Retrocedí y miré sus ojos fijamente. — ¿Todo lo contrario?
Asintió. — No me agradas, ____. Pero lo único en que pienso todo el maldito día es en verte lejos de ellos y cerca de mí.
Les dejo un capítulo algo más largo esta vez :) Estuve toda la noche leyéndome Insurgente y ahora tengo mucha imaginación de por medio, aunque la trama no tenga absolutamente NADA que ver con ésta novela :P Escribiré ahora con más historia los capítulos para que los lean y luego me digan como les fue :) Nos vemos en otra actualización, Adióooooos :3
Cassedy
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
Woooo que capitulo mas increible. Nunca me imagine a Zayn celoso!
Me encanto
Espero el proximo capitulo
Besitooos
*Franni
ʕ•ᴥ•ʔ
Me encanto
Espero el proximo capitulo
Besitooos
*Franni
ʕ•ᴥ•ʔ
Invitado
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Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
WOWO nueva lectora y me encanto *--* ¿crees poder seguirla? esta muy asdfghjkl tu novela
Melanie♥1D
Re: Entrega la Evidencia y nadie saldrá herido. (One Direction y tú) [TERMINADA]
AH!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Me encantarón los capitulos, SIGUELA!!!!!!!
Me encantarón los capitulos, SIGUELA!!!!!!!
Invitado
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