[Adaptada] вєωιтcнιηg тнє dєνιℓ {HarryStyles&Tu} ❤ (Tema 1)

Tu: Fue el día mas raro de mi vida.

Cat: Lo sé, ese profesor no se puso a enseñarnos historia, se puso a enseñarnos educación sexual!

Estabamos en la puerta de la escuela nos dirigíamos a nuestras casas.

Tu: Al final no pudimos platicar.

Cat: Es verdad, ¿te parece si vamos al cine y luego a tomar un café para contarnos todo?

Tu: Suena muy bien, pero estoy ocupada. Tengo tarea de mate. -Mentí-

Cat: ¿Tarea el primer día? ¡Que mal! ¡Esa profesora debe ser un arpía! -Protesto- ¿Entonces que te parece mañana?

Tu: Si, mañana esta bien.

Cat: Bien, faltan dos cuadras antes de que tengamos que separarnos. Aprovechemos ese tiempo y dime porque saliste de mal humor de clases de historia.

Tu: Fácil, culpa a Harry.

Hubo una pausa.

Cat: ¿Sabes? Harry llama mucho la atención, incluyendome.

No era la única, Harry y yo teniamos una conexión macabra, un magnetismo hacia el peligro, al lado oscuro.

Tu: Bueno, yo…

Cat: Dime que no crees que él es guapo.

Tu: Puede ser guapo pero no soporto su personalidad. Ni por más que tenga toda la belleza del mundo podrá arreglar eso.

Cat: Harry no es guapo, es difícil de definirlo más bien es… sexy.

Puse mis ojos en blanco.

Cat: ¿Qué? ¿No estas de acuerdo? ¿O no es tu tipo?

Tu: No tengo un tipo. No se trata de los chicos, sino de amor, no lo he encontrado.

Cat: No se trata de eso, se trata de divertirse.

Tu: Besar no me parece muy divertido.

Cat: ¿No escuchaste nada en la clase de historia?

Tu: La población humana esta bastante elevada, no me necesitan para ayudar con ello.

Cat: ¿Quieres saber quien creo que seria bueno para eso además de Louis?

Tu: ¿Bueno?

Cat: Bueno -Sonriendo maliciosamente-

Tu: No quiero saberlo, ahorratelo.

Cat: Tu compañero -Dijo sin escucharme-

Tu: No lo llames de ese modo, yo ni siquiera lo considero así.

Cat: ¿Alguna vez fantaseaste con besarlo?

Tu: ¿Tú lo has hecho?

Cat rió con ganas.

Tu: No es suficientemente bueno para ti.

Cat: Cuidado, solo haces que lo desee más.

Tu: Ya callate.

Nos despedimos en una esquina. Ella doblo y yo seguí derecho.
Me tropecé con el parque de juegos al cual venia de pequeña. Me senté en un columpio y me puse a pensar cuando yo era solo una niña inocente que apenas tenia poderes, solo podía ver fantasmas y todos eran buenos, miré el tobogán y vi a mi hermano, si, dije hermano, deslizarse por el y yo le seguía por detrás, ambos con una gran sonrisa y mi mamá sentada en aquel banco vigilando que no nos hiciéramos daño, yo ni siquiera sabía que ella era una bruja, no hasta que le confesé todas las cosas que veía y ella me lo explico todo. También recordé cuando hubo un horrible incidente con los poderes en la familia y papá se fue con mi hermano lejos, dejándome sola y aturdida en un lugar lleno de seres extraños que aún no podia manejar. Fue ahí cuando mi madre se transformo en una persona normal inutilizando sus poderes de manera de castigo por hacer que papá y mi hermano se marchen. Una lágrima caliente rodó por mi mejilla, luego dos, tres y más. Los extrañaba tanto. Me hacian tanta falta en este momento, yo tenia que enfrentarme a un juego desconocido con el rey de las tinieblas, no tenia nadie en quien sostenerme, solo era yo contra el mundo, y contra el inframundo se podria decir tambien. Me abracé y me acurruque contra mis piernas, seguia llorando, tenia un nudo enorme en la garganta que no podia deshacer. Un viento sopló y los columpios a mi lado comenzaron a agitarse como si de verdad hubiera niños allí amacandose. Senti la presencia pesada e intimidante, la presencia del diablo. Era hora de comenzar el juego. Respire hondo y me puse de pie. Di media vuelta y me encontré con Harry a unos metros de distancia.

Tu: ¿Harry? ¿Que haces aquí? Es peligroso -Dije avanzando a él-

Harry: ¿Que tiene de peligroso un parque de juegos?

Tu: No lo sé, dimelo tu Sr Sabelotodo.

Sonrió.

Harry: Quizas una bruja deprimida. Vine antes de que se le ocurriera hacer alguna locura.

Tu: Ok, haré esto sin rodeos. No estoy de humor para tus bromas así que dime que eres y que quieres de mí.

Harry: Tranquila, nena, todo a su tiempo, primero debes saber que tu identidad está a salvo conmigo, y segundo no te haré daño.

Tu: Quiero saber quien eres -Exigí-

Harry: No puedo decírtelo ahora.

Tu: Oh, déjame adivinar. ¡Si me lo dijeras tendrías que matarme!

Harry: Parecido, pero no quiero hacerlo así que se paciente.

Tu: ¡Solo dime a que has venido, estoy muy angustiada con todo lo que está pasando y tu presencia no me ayuda en nada!

Harry: Más adelante te darás cuenta de que soy de mucha ayuda.

Tu: ¡No me interesa lo que pase mas adelante! ¡Quiero saber que puedo hacer ahora para salir de toda esta mier.da! ¡Por favor, dime! ¡Y si tienes que matarme hazlo! ¡Dos vidas se perdieron gracias a mi! ¡Tu no sabes por lo que estoy pasando! ¡Tu no eres responsable de ninguna muerte!

Él rió sin humor.

Harry: Tu no eres responsable de nada, excepto de esa invocación. Pero no mataste a nadie, no te sientas culpable por eso.

Tu: ¿Que no me sienta culpable? ¡Yo misma invoque al diablo! ¿Puedes creerlo? ¡Al diablo! ¡Y fue él quien mato a esos dos inocentes! ¡Ellos pagaron por mi error!

Harry: Bueno, si tu madre hubiera hecho un mejor trabajo en prepararte para estas cosas en vez de de sentarse a llorar por tu padre esto no hubiera pasado. -Dijo secamente-

Ahora si que estaba furiosa.

Tu: ¡Ni siquiera sabes lo que en realidad paso! ¡No puedes opinar! -Le grite-

Harry: Claro que lo se, tu padre se entero de que estaba casado con una bruja con poderes fuera de lo común, la creyó un mounstro, así que decidió irse muy lejos contigo y con tu hermano, pero cuando tu abuela le dijo que tu eras una de ellas te dejo y partió solo con tu hermano, el abandono duele, ¿no?

No me importó como lo sabía ni tampoco me importo cual era su punto de vista de mi situación, sino que además de faltarle el respeto a mi familia, no tenia ni la más diminuta molécula de sensibilidad para darse cuenta de lo mucho que me afectaba esto, también se me apareció de la nada complicándome las cosas y confundiéndome más. No espere más. Avancé con paso firme y rápido hacia él. Levante mi mano para darle una bofetada pero me tomó la muñeca, lo intente con la otra mano e hizo lo mismo. Solo me quedaba darle un cabezaso. Me doleria, pero a él tambien. Además tenía sus manos en mis muñecas no podía cubrirse y por lo tanto tampoco detenerme. Tomé distancia con la cabeza para tener más impulso y cuando me lancé hacia delante me detuvo. No, no tenia un tercer brazo al menos que este sea tierno, carnoso, cálido y expulsara un sabor a menta, no, ¿ya descubrieron con que me detuvo? Si, con un beso, me besó. Yo estaba dura, obviamente no me esperaba para nada esto. Aunque me gusto. No entendía como ni por qué. Pero me gusto. Me relaje y le segui el beso, de pronto su agarre se aflojo y sus manos soltaron mis muñecas para posicionarse en mi cintura, cuando soltó mis muñecas estas cayeron suavemente en su pecho y al rato se escurrieron detrás de su cuello. Se sentía tan bien. Fue como si me hubiera ido, lo bastante lejos como para olvidarme de todo menos de ese exquicito beso.
Con delicadeza Harry fue separando sus labios de los mios, su respiración era normal mientras que la mía se había agitado. Nos miramos a los ojos por un momento, sin decir nada, sin pensar nada. Al rato escondí mi cara en su pecho y me dedique a oler su perfume, era raro pero me gustaba mucho. Me separe.

Tu: Dios, ahora solo me has dado más en que pensar.

Harry: No pienses -Me recomendo- Tienes cosas mejores por las que preocuparte, son más importante que un beso.

Tu: No es el beso. Es de quien era ese beso.

Harry: Ese ya es otro tema -Me mostró otra de sus sonrisas amistosa/burlona-

Tu: Ok, creo que lo discutiremos despues. Tengo que ir a arriesgar mi vida en un estupido juego, con reglas que no están a mi favor y lo mejor de todo es que jugare a solas con el diablo, ¿un privilegio, no? -Dije sarcásticamente-

Harry: Suerte con eso.

Tu: Gracias, creo que ya me voy.

No sabia como despedirme de él, no queria darle un beso en la mejilla pero tampoco uno en la boca, así que no lo bese. Agite mi mano en forma de adiós cuando comencé a alejarme y él inclino su cabeza también en forma de despedida.