Sin ataduras (Harry Styles)

Espero Que La Sigas Pronto !!
Estare Esperando Mas Capitulo...

:lol!:

esperando desesperada cap! :D

Me super mega ultra encanta!!! SIGUELA POR FAVOR

por favor
pasen por mi nueva novela
esta en mi firma
love story

siguela,siguela siguela siguela
besos Sonia

HOLAAA
Nueva Lectora!!! Me llamo Marinaa!!
Siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!
Tania se caera por la ventana misteriosamente creo yo...¬¬

esperrrrrrrrrrrrrrrrrando caps!!

Siguela!! xx

CAPPPPPPPPPPPPP PLEASEE!! (:

—No te vayas… por favor…—su mano atrapó mi muñeca, impidiéndome levantarme. Las lágrimas volvían a rodar por mis ojos, así que aparté la mirada.—Mírame—demandó, aunque su voz era suave. Apreté la mandíbula.
—Tengo que… esto que pasó… yo… ya viste. Simplemente creo que esto no puede ser. Cada vez que sucede… algo… otra cosa mala pasa y yo no quiero…—“no quiero sufrir más…”.
—Pero Val…
—No Harry. Vamos a dejarlo hasta aquí. Yo estoy con Liam, al menos espero, y tú con Tania…
—¡Pero yo no la amo! ¡Yo te a…!
—No, no lo digas, por favor—me limpié las lágrimas con el dorso de la mano. Con cuidado, aparté su mano de alrededor de mi muñeca. Acaricié suavemente su mejilla por pocos segundos y me levanté, me di la vuelta, tomé mi bolso y me dirigí hacia la puerta. Allí en el umbral miré hacia atrás, y me arrepentí al instante de haberlo hecho. Una lágrima se había escapado de su ojo y rodaba libremente por su mejilla. El la retiró casi al instante, medio enojado. Tenía la mandíbula tensa y los ojos delineados con un rosa oscuro, por haber estado llorando.—Adiós, Hazza.

Los vestigios de una traición apretujaban mi corazón. La culpa de haber engañado a Liam me torturaba, haciéndome imposible pensar en un estúpido y sencillo problema matemático. Arrojé la libreta lejos de mí, con lápiz y todo. Había tratado de hacer los deberes con el fin de distraerme, pero no podía concentrarme, de repente me sentía agotada y con dolor de cabeza.
En el pasillo escuché pasos y una voz desconocida. Me levanté de la cama y me limpié las lágrimas rápidamente. Abrí levemente la puerta y asomé la cabeza afuera. En la escalera, Robert se despedía de una mujer rubia, obviamente teñida, aunque no era la misma de la otra vez. Había comenzado a pensar que él tenía una extraña y sucia obsesión con las rubias mucho menores que él. El se quedó allí, parado al pie de la escalera mientras ella lo besaba y bajaba, desapareciendo por la puerta principal segundos después. Cuando aquel hombre se giró, me vio, y sonrió cínicamente.
—¿Revolcándote con otra? ¿Cuántas van, cinco o seis?
—Cállate niña, no seas insolente—en un par de pasos ya estaba frente a mí, había abierto la puerta y su mano se había apretado en el cabello de mi nuca, manteniéndome la vista alzada para mirarle. Su agarre dolía, pero mi mirada desprendía chispas de ira.
—Si no quieres a mi madre, ¿por qué no nos haces un favor a todos y te vas?
—Eres muy maleducada. A ver si aprendes a respetar—de pronto me encontraba en el suelo, con la mejilla ardiendo. Levanté la vista y lo vi sonriendo de nuevo, de aquella misma manera que tanto me atemorizaba. Se dio la vuelta y caminó hacia su habitación.
Las lágrimas no tardaron en salir. Mi mejilla estaba caliente, y podía sentir mi pulso retumbar en mi cabeza como una batería.
—Val… ¡Valerie!—Niall apareció en el umbral de la puerta. Se colocó una camiseta que llevaba en su mano rápidamente y se arrodilló frente a mí. Me abrazó, sin decir nada.—¿Qué pasó?
—Todo paso Niall… todo es un maldito desastre.—Niall me miró fijamente y luego frunció el ceño notoriamente.
—¿Ese maldito te pegó?—sus ojos me analizaron rápidamente y se fueron a mi brazo, donde aún permanecía un viejo moretón que comenzaba a difuminarse.
—Por favor, no le digas a nadie… a nadie—dije casi rogando con la mirada.
—Pero…
—¡Júralo!
—Está bien, lo juro, no le diré a nadie.—El volvió a envolverme en sus brazos suavemente, meciéndome como si fuera una niña pequeña.—Ese tipo nunca me gustó. Nunca durante el tiempo que estuvo casado con mi tía. Durante varios años Tania y yo nos criamos juntos, y él nunca me gustó.
El no dijo nada más, yo no opiné tampoco. Nos quedamos sumidos en un largo silencio. El me rodeaba con un brazo y yo descansaba mi cabeza en su hombro, ya sintiendo menos el dolor en mi mejilla, por ahora.
Su teléfono comenzó a sonar incesantemente, y él, sin dejar de rodearme, lo tomó con su mano libre.
—¿Zayn? Eh… sí… todo está bien—yo había levantado la cabeza y él me dirigió una mirada con el ceño levemente fruncido—. Sí voy para allá. Lo siento…
—No, vete tranquilo, y muchas gracias Nialler—le sonreí casi sin ganas, sentía que ya no podría sonreír más.
—De nada Val—sonrió de lado. Se acercó y dejó un sonoro beso en mi mejilla y me dio un último y apretado abrazo, para irse segundos después cerrando la puerta detrás de él.
Los minutos pasaban uno detrás de otro, y yo le daba vueltas a mi teléfono en mi mano, una y otra vez. ¿Lo llamaba? ¿Y si no quería volver a verme? Porque iba a doler. Yo le quería, de verdad, tal vez no con la misma intensidad con la que él me quería a mí, pero… aún así seguía siento muy importante para mí.
Decidido… lo llamaría…
Marqué el número y mi dedo divagó en el botón verde… y al final, se dirigió al rojo, cancelando la llamada. Me levanté, me vestí decentemente y tras tapar los golpes con el maquillaje, tomé mis llaves y salí de la casa rápidamente.
Ni siquiera los minutos que duré de camino hacia su casa me fueron suficientes para calmarme o aclarar y poner en orden un poco mis pensamientos
Toqué a la puerta un par de veces, antes de que esta, por fin se abriera.
—Sophie…—murmuré, quedándome con la mente en blanco.
—¿Te sientes bien ahora? ¿Lograste lo que querías? ¡Pues ahí lo tienes, has herido a Liam! ¿Te sientes mejor ahora? Por tu culpa se va, se va y no querrá volver. ¡Se va a ir, Valerie!
—Yo no…—las lágrimas que tanto había tratado de aguantar querían salir, y de hecho, habían comenzado a salir a borbotones por mis mejillas. Creí que ella me entendería, ella más que nadie.
—Ya lárgate Valerie. ¡Creí que esta ve todo saldría bien! ¡Que él no sufriría más y se quedaría! Por favor… vete.
—Pero Sophie… eres mi mejor amiga… eres mi hermana… te necesito…
—En este instante, solo necesito a Louis, por favor, vete, Valerie—todo me dio vueltas en aquel instante, si bien era por no haber comido en todo el día o por las crudas palabras de Sophie, no lo sabía.—¡Todo es tu culpa!—y cerró la puerta en mi cara. Si hubiera estado un paso más adelante, segurito que me rompe la cara.
Me subí a mi auto, rebosante en ira.
Todo era mi culpa. Todo era mi culpa, mía y de nadie más.
Herí a Harry, Liam se va por mi culpa, Sophie me odia, Louis probablemente hará lo mismo después de que Sophie le cuente… aunque ni idea de Zayn. Tal vez y haga algo mal y luego él también me odie.
Y para concordar con mi estado de ánimo, un torrencial comenzó a azotar toda superficie con violencia. Era casi imposible ver entre las lágrimas y la lluvia… casi tan imposible como para percatarme del auto que venía en vía contraria. Las luces me cegaron en el último segundo, muy tarde para evitar lo que venía.

diossssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss vas a matar a la rayis:shock: ajajajjaja bueno no tanto asiii pero dioss si tienen mala suerte con los accidentes en coche

siguelaaaaaaaa la amoo