Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 18 de 30. • Comparte
Página 18 de 30. • 1 ... 10 ... 17, 18, 19 ... 24 ... 30
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
Holaaaa Nueva Lectora!
Me encanta la nove esta muy buena!
Aun me estoy poniendo al día en los capitulos pero ya la amo! (:
Me encanta la nove esta muy buena!
Aun me estoy poniendo al día en los capitulos pero ya la amo! (:
Mire
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
NO TE PREOCUPES TODO ENTENDIDO =)
TRAQUILA TODO SALDRA BIEN YA LO VERAS.
SIGUELAA CUANDO PUEDAS =)
TRAQUILA TODO SALDRA BIEN YA LO VERAS.
SIGUELAA CUANDO PUEDAS =)
Dorin
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
Ayer no pude comentaaaaaar, amo a esa Doctoraaaaaaaaaaaaaaaa es una grosaaaaaaaaaa mirá en las cosas que se fijó! espero que el instinto a Nicholas no le falle y encuentre al o a la desgraciada/ado
Amo demasiado la Nove Andi, no t preocupes por el estudio suele pasar y es entendible :) Sube cuando puedas,
Amo demasiado la Nove Andi, no t preocupes por el estudio suele pasar y es entendible :) Sube cuando puedas,
WhoIam13
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
okvamos por parte 1° la rayis se arregloporfincon su familia lo cual es genial despues todo mundo ya sabe lo de la rayis con nick lo cual es mas genial y tercero quien es maldito desgraciado idiota que hace todo esto quele pasa a caso esta estupido o que siguela pronto y cuidate
haydeejOnaz
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
Pamm Jonas escribió:OMJ!!!!
Que miedo el tipo que lo hizo está bien loco!!!
Siguelaa!!
Y vas a ver que quedaste en la Uni!! Niñas listas entran!!
Siguelaa!!
No te estreses tómalo todo con calma una tortura linda jaja!!
jajaja si esta un poco safadito el chico :P
oww gracias por darme apoyo! estoy muy nerviosa :pale:
jejeje creo que no hay torturas lindas! pero tomare tu consejo :P
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
chelis escribió:wuuuaaauuu es bueno ..... arrreglar las cosas con la famiiiliiiiaaaaa!!!!!!!
y wuuuaauu esa forence es una geniiioooooo!!!!!!
aaaiiiiiii.. asi sere yo cuando descubra quien a sido!!!!!!!....
jejeje
suerte en todo y ya veras que tu si te quedaaaasss en la uni!!!!!!
mis mas sincera suerteeeee para tiiii!!!!!!!.......
jajaja :P seras toda una detective detectivesca!!!
gracias :D ojala!!!! agamos todas changuitos!!!
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
Mire escribió:Holaaaa Nueva Lectora!
Me encanta la nove esta muy buena!
Aun me estoy poniendo al día en los capitulos pero ya la amo! (:
Bienvenida!!!!! :cheers:
gracias por leer la nove!!! y me alegra mucho que tes guste! :D espero que pronto te pongas al dia!!!
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
Dorin escribió:NO TE PREOCUPES TODO ENTENDIDO =)
TRAQUILA TODO SALDRA BIEN YA LO VERAS.
SIGUELAA CUANDO PUEDAS =)
Gracias!!! por tu apoyo!!! :D ahorita mismo la sigo!!!
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
WhoIam13 escribió:Ayer no pude comentaaaaaar, amo a esa Doctoraaaaaaaaaaaaaaaa es una grosaaaaaaaaaa mirá en las cosas que se fijó! espero que el instinto a Nicholas no le falle y encuentre al o a la desgraciada/ado
Amo demasiado la Nove Andi, no t preocupes por el estudio suele pasar y es entendible :) Sube cuando puedas,
no te preocupes!!! :D yo no pude subir ayer!! estamos a mano! :P
ya veremos que pronto nick resolvera todo!!!
me alegra mucho que ames la nove!!!! y gracias por entenderme!!! :D
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
haydeejOnaz escribió:okvamos por parte 1° la rayis se arregloporfincon su familia lo cual es genial despues todo mundo ya sabe lo de la rayis con nick lo cual es mas genial y tercero quien es maldito desgraciado idiota que hace todo esto quele pasa a caso esta estupido o que siguela pronto y cuidate
siii!!! por fin se arreglo con su papa y su mama! es bueno tener una buena relacion con la familia!!! y bueno el tercer punto no te lo puedo decir! :P si no pues ya no tendria sentido la nove!!! pero prontooo!!!! ten un poco mas de paciencia!!! :D
Andrea P. Jonas:)
Re: No Te Escondas (N. Jonas y Tu)
heyy girls!! como estan???
siento no subir ayer!! pero como les dije tenia un monton de proyectos :roll: y ya termine la mayoria y ya tengo un poco mas de tiempo!! :D ya solo me quedan lo examenes y pronto sere libre!!!! :cheers: y bueno tambien lo de la uni pero no quiero pensar mucho en eso! :P por cierto gracias por su apoyo!!! de verdad que me ayuda mucho!!! :D espero pronto darles la noticia de que si quede!! pero bueno vamos a lo que nos interesa... la nove!! espero que les guste el cap de hoy!!! las quiero! :hug:
siento no subir ayer!! pero como les dije tenia un monton de proyectos :roll: y ya termine la mayoria y ya tengo un poco mas de tiempo!! :D ya solo me quedan lo examenes y pronto sere libre!!!! :cheers: y bueno tambien lo de la uni pero no quiero pensar mucho en eso! :P por cierto gracias por su apoyo!!! de verdad que me ayuda mucho!!! :D espero pronto darles la noticia de que si quede!! pero bueno vamos a lo que nos interesa... la nove!! espero que les guste el cap de hoy!!! las quiero! :hug:
Capitulo 17
Jueves, 16 de marzo, 9.35 horas.
Jack se encontró con Nicholas y con Miller en el piso de Bacon.
—Rick dice que tenemos que seguir buscando el escondite de los vídeos, que tiene que tenerlos guardados en el piso.
—Pues lo buscaremos. Pero antes vamos a deducir qué rayos pasó aquí.
Nicholas se dirigió de nuevo al cuarto de baño y se plantó delante de la puerta.
—Le dispararon, le cortaron las venas, lo envenenaron y lo ahogaron. ¿Cómo?
—Sabemos que lo último que hicieron fue ahogarlo —dijo Miller—. Tuvieron que envenenarlo antes de cortarle las venas, si no las heridas no habrían sido tan regulares. Solo nos queda por situar el disparo.
Nicholas observó el escenario.
—Creo que el disparo fue lo primero de todo.
—¿Por qué? —preguntó Miller.
—¿Recuerdas su ropa?
—Estaba aquí. —Miller señaló a sus pies—. Camisa, corbata, pantalones, calzoncillos y calcetines. La americana estaba en el salón.
—La americana olía a naftalina y a humo de cigarro.
—Igual que en casa de su madre.
—Pero no a meados de gato. No se me ocurrió pensarlo, pero me parece imposible que en esa casa hubiera guardado un traje y que no absorbiera el olor ni siquiera un poco. Los polos de Wires-N-Widgets sí que olían a gato.
—Ayer encontramos cajas con ropa en el salón —explicó Jack—. Olían mucho a naftalina, pero no noté para nada que olieran a meado de gato.
—Tiene un trastero —dedujo Miller, e hizo un gesto de asentimiento—. Pero ¿por qué dices que el disparo fue lo primero?
—Porque el traje olía a sudor, pero la camisa olía a una mezcla de humo de cigarro y suavizante.
Miller arqueó las cejas.
—Era una camisa limpia.
—Tienes buen olfato —bromeó Jack—. Pues yo tengo buena vista. Miren ahí.
Nicholas miró en la dirección en la que Jack apuntaba y posó los ojos en la pared del fondo del cuarto de baño.
—Hay un agujero. —El día anterior, absortos como estaban en las pistas que habían dejado para engañarlos, no lo habían visto.
Jack se adelantó y examinó el pequeño agujero.
—Podría ser de una bala. Si es así, alguien la extrajo. Dentro solo hay mortero deshecho. —Se volvió y miró a Miller—. Sitúate en el recibidor. —Miller le obedeció y Jack se colocó en la puerta, de espaldas a las bisagras—. Imagínate que soy Bacon y que tú tienes la pistola —dijo, y dibujó una trayectoria imaginaria en el aire—. Por la altura del agujero y teniendo en cuenta la estatura de Bacon y que la bala le hirió en el hombro, tenías que estar más o menos ahí; y eres más bajo que Bacon, entre cinco y diez centímetros. Bacon medía un metro setenta y cinco. Tú mides un metro sesenta y cinco; setenta como mucho.
Nicholas sonrió con ironía.
—Así que nuestro voyeur antisocial tiene complejo de Napoleón. Muy bien. Te sitúas detrás de Bacon, le disparas en el brazo. ¿Por qué?
—¿Para obligarle a entrar en la bañera o a inhalar el veneno? —apuntó Miller.
—O las dos cosas —dijo Nicholas—. Te han disparado en el hombro derecho, Jack. ¿Qué haces tú?
Jack se llevó la mano izquierda al hombro derecho.
—Ay —dijo con voz inexpresiva.
Nicholas se rió entre dientes.
—Y ahora tienes la mano izquierda ensangrentada.
Jack asintió.
—Voy a por el Luminol.
Treinta minutos más tarde, Jack apagó la luz y reveló unas cuantas huellas de zapatos en el suelo y la forma completa de una mano en la pared, entre el inodoro y el lavabo.
Nicholas colocó el pie por encima de una de las huellas.
—Yo calzo un cuarenta y seis. Este pie debe ser... ¿un cuarenta y uno?
—Más o menos —convino Jack—. Parecen zapatos de vestir. Así que nuestro hombre mide sobre un metro setenta y calza un cuarenta y uno. Por algo se empieza. Me despierta curiosidad la huella de la mano.
El baño tenía una cenefa de flores azules. Por encima la pared estaba pintada y por debajo, empapelada de color azul liso. La huella estaba en la mitad inferior.
—Imaginaos que soy Bacon y me estoy tambaleando; si apoyara la mano en la pared lo haría más arriba, por encima de la cenefa. Vamos a ver por qué no fue así.
Jack pasó una lima metálica por debajo de la cenefa y tiró suavemente del papel azul hasta despegarlo entero.
—No está pegado con cola —se extrañó Miller.
Jack se volvió a mirarlo.
—Los bordes están deteriorados. Alguien ha hecho esto mismo varias veces.
El pulso de Nicholas se aceleró un poco.
—El escondite de las grabaciones. —Iban a ahorrarle a _____ muchas situaciones violentas—. Deprisa, Jack.
—¿Qué quieres, que lo hagamos rápido o bien?
—Las dos cosas —replicó Nicholas.
—Ya habla igual que Spinnelli —soltó Jack, y Miller se echó a reír.
—En este caso, sí. Date prisa, Jack.
Jack introdujo el dedo en un agujero de la pared.
—Enciende la luz, Nicholas.
Entonces Jack separó una placa de yeso de sesenta por noventa y dejó al descubierto unas viguetas de madera.
—¿Y bien? —preguntó Nicholas cuando Jack enfocó con la linterna alrededor.
Jack se dio media vuelta, negando con la cabeza.
—Está vacío.
Nicholas levantó la barbilla con evidente decepción.
—No quiero tener que decirle a _____ que no hemos encontrado la grabación. —Una vez más deseó que Bacon viviera para poder matarlo con sus propias manos.
Jack suspiró.
—_____ es una gran persona. Es capaz de sobrellevar muchas más cosas de las que crees.
Nicholas irguió la espalda, consciente de lo cierta que era la afirmación. _____ era una mujer muy fuerte, esperaba que lo bastante para soportar aquello.
—Tienes razón. —Su boca se curvó con tristeza—. Me ha dicho que si las imágenes salían a la luz haría un calendario y un viaje para firmar autógrafos.
Jack se pasó la lengua por los dientes.
—Pues yo no pienso acercarme a menos de tres metros, Jonas. Estimo mucho mi matrimonio y... —miró los puños de Nicholas fijamente— mi cara.
Miller tosió.
—Acabemos con esto de una vez, Sherlock —añadió con ironía.
—Muy bien. Soy Bacon. —Nicholas se centró—. Llego a casa después de intentar venderle el vídeo a Lynne Pope... y espero que _____ me pague cien mil dólares. Me sorprende una visita. —Miró a Miller, y de pronto cayó en la cuenta—. El asesino vino a por los vídeos.
—Y vino preparado. Dejó todas las pruebas escondidas en el falso techo porque sabía que buscaríamos allí las cámaras. ¿Qué debe de haber en esos vídeos para que a nuestro hombre le preocupen tanto?
—Tenemos que descubrirlo. Tú me dices "dame los vídeos" y yo te contesto "vete a la mierda".
—Yo te disparo para obligarte a mostrarme dónde están. La bala te roza el brazo. "Dime dónde están", te grito.
Jack dio unos golpecitos en la pared.
—Cuando lo haces tienes las manos ensangrentadas.
Miller señaló la bañera.
—"Ahora métete en la bañera", te ordeno, todavía empuñando la pistola.
—Yo lo hago, y tú me obligas a inhalar el veneno.
—En la bañera encontramos colillas —dijo Jack—. Pediré que las analicen cuanto antes.
Nicholas asintió.
—No puedo moverme, y tú me cortas las venas, abres el grifo y contemplas cómo me desangro.
—Pero tardas mucho, o es que soy un sádico. Por eso te hundo la cabeza en el agua hasta ahogarte y te dejo ahí para que los imbéciles de los policías te encuentren —concluyó Miller.
Nicholas se quedó mirando la bañera.
—Luego limpias la pared, cambias la camisa y colocas las pruebas en su sitio para despistar a los imbéciles de los policías. Así te dejan el terreno libre para planear el siguiente asesinato. —Se volvió hacia Miller con expresión grave—. Dime con quién andas.
—Rick dice que tenemos que seguir buscando el escondite de los vídeos, que tiene que tenerlos guardados en el piso.
—Pues lo buscaremos. Pero antes vamos a deducir qué rayos pasó aquí.
Nicholas se dirigió de nuevo al cuarto de baño y se plantó delante de la puerta.
—Le dispararon, le cortaron las venas, lo envenenaron y lo ahogaron. ¿Cómo?
—Sabemos que lo último que hicieron fue ahogarlo —dijo Miller—. Tuvieron que envenenarlo antes de cortarle las venas, si no las heridas no habrían sido tan regulares. Solo nos queda por situar el disparo.
Nicholas observó el escenario.
—Creo que el disparo fue lo primero de todo.
—¿Por qué? —preguntó Miller.
—¿Recuerdas su ropa?
—Estaba aquí. —Miller señaló a sus pies—. Camisa, corbata, pantalones, calzoncillos y calcetines. La americana estaba en el salón.
—La americana olía a naftalina y a humo de cigarro.
—Igual que en casa de su madre.
—Pero no a meados de gato. No se me ocurrió pensarlo, pero me parece imposible que en esa casa hubiera guardado un traje y que no absorbiera el olor ni siquiera un poco. Los polos de Wires-N-Widgets sí que olían a gato.
—Ayer encontramos cajas con ropa en el salón —explicó Jack—. Olían mucho a naftalina, pero no noté para nada que olieran a meado de gato.
—Tiene un trastero —dedujo Miller, e hizo un gesto de asentimiento—. Pero ¿por qué dices que el disparo fue lo primero?
—Porque el traje olía a sudor, pero la camisa olía a una mezcla de humo de cigarro y suavizante.
Miller arqueó las cejas.
—Era una camisa limpia.
—Tienes buen olfato —bromeó Jack—. Pues yo tengo buena vista. Miren ahí.
Nicholas miró en la dirección en la que Jack apuntaba y posó los ojos en la pared del fondo del cuarto de baño.
—Hay un agujero. —El día anterior, absortos como estaban en las pistas que habían dejado para engañarlos, no lo habían visto.
Jack se adelantó y examinó el pequeño agujero.
—Podría ser de una bala. Si es así, alguien la extrajo. Dentro solo hay mortero deshecho. —Se volvió y miró a Miller—. Sitúate en el recibidor. —Miller le obedeció y Jack se colocó en la puerta, de espaldas a las bisagras—. Imagínate que soy Bacon y que tú tienes la pistola —dijo, y dibujó una trayectoria imaginaria en el aire—. Por la altura del agujero y teniendo en cuenta la estatura de Bacon y que la bala le hirió en el hombro, tenías que estar más o menos ahí; y eres más bajo que Bacon, entre cinco y diez centímetros. Bacon medía un metro setenta y cinco. Tú mides un metro sesenta y cinco; setenta como mucho.
Nicholas sonrió con ironía.
—Así que nuestro voyeur antisocial tiene complejo de Napoleón. Muy bien. Te sitúas detrás de Bacon, le disparas en el brazo. ¿Por qué?
—¿Para obligarle a entrar en la bañera o a inhalar el veneno? —apuntó Miller.
—O las dos cosas —dijo Nicholas—. Te han disparado en el hombro derecho, Jack. ¿Qué haces tú?
Jack se llevó la mano izquierda al hombro derecho.
—Ay —dijo con voz inexpresiva.
Nicholas se rió entre dientes.
—Y ahora tienes la mano izquierda ensangrentada.
Jack asintió.
—Voy a por el Luminol.
Treinta minutos más tarde, Jack apagó la luz y reveló unas cuantas huellas de zapatos en el suelo y la forma completa de una mano en la pared, entre el inodoro y el lavabo.
Nicholas colocó el pie por encima de una de las huellas.
—Yo calzo un cuarenta y seis. Este pie debe ser... ¿un cuarenta y uno?
—Más o menos —convino Jack—. Parecen zapatos de vestir. Así que nuestro hombre mide sobre un metro setenta y calza un cuarenta y uno. Por algo se empieza. Me despierta curiosidad la huella de la mano.
El baño tenía una cenefa de flores azules. Por encima la pared estaba pintada y por debajo, empapelada de color azul liso. La huella estaba en la mitad inferior.
—Imaginaos que soy Bacon y me estoy tambaleando; si apoyara la mano en la pared lo haría más arriba, por encima de la cenefa. Vamos a ver por qué no fue así.
Jack pasó una lima metálica por debajo de la cenefa y tiró suavemente del papel azul hasta despegarlo entero.
—No está pegado con cola —se extrañó Miller.
Jack se volvió a mirarlo.
—Los bordes están deteriorados. Alguien ha hecho esto mismo varias veces.
El pulso de Nicholas se aceleró un poco.
—El escondite de las grabaciones. —Iban a ahorrarle a _____ muchas situaciones violentas—. Deprisa, Jack.
—¿Qué quieres, que lo hagamos rápido o bien?
—Las dos cosas —replicó Nicholas.
—Ya habla igual que Spinnelli —soltó Jack, y Miller se echó a reír.
—En este caso, sí. Date prisa, Jack.
Jack introdujo el dedo en un agujero de la pared.
—Enciende la luz, Nicholas.
Entonces Jack separó una placa de yeso de sesenta por noventa y dejó al descubierto unas viguetas de madera.
—¿Y bien? —preguntó Nicholas cuando Jack enfocó con la linterna alrededor.
Jack se dio media vuelta, negando con la cabeza.
—Está vacío.
Nicholas levantó la barbilla con evidente decepción.
—No quiero tener que decirle a _____ que no hemos encontrado la grabación. —Una vez más deseó que Bacon viviera para poder matarlo con sus propias manos.
Jack suspiró.
—_____ es una gran persona. Es capaz de sobrellevar muchas más cosas de las que crees.
Nicholas irguió la espalda, consciente de lo cierta que era la afirmación. _____ era una mujer muy fuerte, esperaba que lo bastante para soportar aquello.
—Tienes razón. —Su boca se curvó con tristeza—. Me ha dicho que si las imágenes salían a la luz haría un calendario y un viaje para firmar autógrafos.
Jack se pasó la lengua por los dientes.
—Pues yo no pienso acercarme a menos de tres metros, Jonas. Estimo mucho mi matrimonio y... —miró los puños de Nicholas fijamente— mi cara.
Miller tosió.
—Acabemos con esto de una vez, Sherlock —añadió con ironía.
—Muy bien. Soy Bacon. —Nicholas se centró—. Llego a casa después de intentar venderle el vídeo a Lynne Pope... y espero que _____ me pague cien mil dólares. Me sorprende una visita. —Miró a Miller, y de pronto cayó en la cuenta—. El asesino vino a por los vídeos.
—Y vino preparado. Dejó todas las pruebas escondidas en el falso techo porque sabía que buscaríamos allí las cámaras. ¿Qué debe de haber en esos vídeos para que a nuestro hombre le preocupen tanto?
—Tenemos que descubrirlo. Tú me dices "dame los vídeos" y yo te contesto "vete a la mierda".
—Yo te disparo para obligarte a mostrarme dónde están. La bala te roza el brazo. "Dime dónde están", te grito.
Jack dio unos golpecitos en la pared.
—Cuando lo haces tienes las manos ensangrentadas.
Miller señaló la bañera.
—"Ahora métete en la bañera", te ordeno, todavía empuñando la pistola.
—Yo lo hago, y tú me obligas a inhalar el veneno.
—En la bañera encontramos colillas —dijo Jack—. Pediré que las analicen cuanto antes.
Nicholas asintió.
—No puedo moverme, y tú me cortas las venas, abres el grifo y contemplas cómo me desangro.
—Pero tardas mucho, o es que soy un sádico. Por eso te hundo la cabeza en el agua hasta ahogarte y te dejo ahí para que los imbéciles de los policías te encuentren —concluyó Miller.
Nicholas se quedó mirando la bañera.
—Luego limpias la pared, cambias la camisa y colocas las pruebas en su sitio para despistar a los imbéciles de los policías. Así te dejan el terreno libre para planear el siguiente asesinato. —Se volvió hacia Miller con expresión grave—. Dime con quién andas.
Jueves, 16 de marzo, 11.00 horas.
—¡Uau! —exclamó Miller al entrar en el despacho de _____—. Clayborn debió de armar una buena aquí.
—Sí —convino Nicholas—. Y anoche estuvo a punto de hacerle una buena a _____.
Miller se sonrió.
—Me gustaría haber visto cuando lo atrapo por su cuenta.
Samantha, la recepcionista, salió del despacho de Harrison con una caja llena de basura. Al encontrarlos allí los miró sin dar crédito.
—¿Puedo ayudarles?
—Hemos venido a ver a _____ —anunció Nicholas mientras la escrutaba. Samantha estaba sorprendida y un poco asustada. Nicholas se preguntó por qué.
—Lleva toda la mañana en su despacho. —Con la cabeza, señaló la puerta ligeramente entreabierta—. Entren.
Nicholas empujó la puerta y descubrió a _____ de pie en medio de la sala con una carpeta sujetapapeles en la mano y el pelo recogido en una coleta que le confería un aspecto juvenil y sexy. Se volvió a mirarlos y el momentáneo sobresalto dio paso a la agradable sorpresa.
—¡Nicholas! Y Miller —añadió cuando este último hizo un mohín.
—Veo que has avanzado —observó Nicholas.
—Al menos ya hemos retirado los muebles rotos. —Extendió el brazo, del cual colgaba una pequeña cámara—. Estoy tomando nota de los daños para el seguro.
—¿Estás sola? —preguntó Nicholas arrugando la frente.
—Samantha está en el despacho de Harrison. Vito ha bajado a la calle con los transportistas que se han llevado los trastos más grandes. Zac ha pasado a verme hace un rato y me ha traído sopa de Robin. —Sonrió.
Nicholas le devolvió la sonrisa.
—Para ti no habrá sopa.
_____ se rió en silencio y sus mejillas se sonrosaron un poco, y Nicholas se percató de que estaba acordándose de la noche anterior, cuando tumbado encima de ella le había dicho lo mismo mientras ella le ceñía las caderas con los muslos y sus senos le rozaban la cara cada vez que la volvía. Se removió un poco tratando de acomodar la súbita presión que se ejercía en la bragueta.
Ella se aclaró la garganta.
—Amy me ha traído una planta. Ella sabe cuidarlas pero a mí probablemente se me morirá. —Se mordió el labio—. ¿Qué ha ocurrido?
—Bacon no se suicidó, _____ —respondió Nicholas—. Lo asesinaron.
Ella exhaló un lento suspiro.
—Ya. Entonces... la cosa no ha terminado, ¿verdad?
—No. Quiero que tengas cuidado. Ve siempre acompañada, no te quedes sola, ¿de acuerdo?
—Ya me parecía a mí demasiado bonito para ser cierto. Y a ti también. Avisaré a Amy, a Zac y a Robin para que sigan alerta.
Nicholas sintió ganas de besar la mueca de temor de sus labios.
—¿Se lo dirás a Vito?
—¿Qué es lo que tiene que decirme? —preguntó Vito tras ellos.
—Que la epopeya continúa. Al de las cámaras lo asesinaron. Mis amigos siguen corriendo peligro.
Vito enarcó las cejas.
—Qué horror. ¿Y qué piensan hacer, chicos?
—Investigar —respondió Nicholas con calma—. ¿Cuándo te marchas?
La sonrisa de Vito fue solo un amago.
—No tan pronto como te gustaría, campeón.
_____ alzó los ojos en señal de exasperación.
—Vito. Nicholas, mis padres quieren que nos veamos esta noche. ¿Puedo utilizar tu cocina? Pensaba cocinar yo.
A Nicholas le entraron unas ganas inmensas de toquetearla, pero la mirada de Vito hizo que mantuviera las manos en los bolsillos.
—¿Tienes la llave?
—Sí. ¿Y Elvis qué? ¿Me comerá?
—No lo creo. Si se pone a gruñir, ve a buscar a Demi. Vuelve del colegio a las tres. Yo te veré en mi casa sobre las siete, ¿de acuerdo?
—Que sea a las ocho. —Sus ojos se ensombrecieron—. A las siete tengo que ir al tanatorio.
—Te acompañaré. Ahora tenemos que marcharnos. —Se volvió a mirar a Vito—. Tenemos que investigar.
Mientras se dirigían al ascensor, Miller lo miró de reojo y se sonrió.
—Así que vas a conocer a sus padres.
—Dona el dinero de mi seguro de vida a una organización benéfica, ¿de acuerdo?
Miller se echó a reír.
—Muy bien, campeón.
—Sí —convino Nicholas—. Y anoche estuvo a punto de hacerle una buena a _____.
Miller se sonrió.
—Me gustaría haber visto cuando lo atrapo por su cuenta.
Samantha, la recepcionista, salió del despacho de Harrison con una caja llena de basura. Al encontrarlos allí los miró sin dar crédito.
—¿Puedo ayudarles?
—Hemos venido a ver a _____ —anunció Nicholas mientras la escrutaba. Samantha estaba sorprendida y un poco asustada. Nicholas se preguntó por qué.
—Lleva toda la mañana en su despacho. —Con la cabeza, señaló la puerta ligeramente entreabierta—. Entren.
Nicholas empujó la puerta y descubrió a _____ de pie en medio de la sala con una carpeta sujetapapeles en la mano y el pelo recogido en una coleta que le confería un aspecto juvenil y sexy. Se volvió a mirarlos y el momentáneo sobresalto dio paso a la agradable sorpresa.
—¡Nicholas! Y Miller —añadió cuando este último hizo un mohín.
—Veo que has avanzado —observó Nicholas.
—Al menos ya hemos retirado los muebles rotos. —Extendió el brazo, del cual colgaba una pequeña cámara—. Estoy tomando nota de los daños para el seguro.
—¿Estás sola? —preguntó Nicholas arrugando la frente.
—Samantha está en el despacho de Harrison. Vito ha bajado a la calle con los transportistas que se han llevado los trastos más grandes. Zac ha pasado a verme hace un rato y me ha traído sopa de Robin. —Sonrió.
Nicholas le devolvió la sonrisa.
—Para ti no habrá sopa.
_____ se rió en silencio y sus mejillas se sonrosaron un poco, y Nicholas se percató de que estaba acordándose de la noche anterior, cuando tumbado encima de ella le había dicho lo mismo mientras ella le ceñía las caderas con los muslos y sus senos le rozaban la cara cada vez que la volvía. Se removió un poco tratando de acomodar la súbita presión que se ejercía en la bragueta.
Ella se aclaró la garganta.
—Amy me ha traído una planta. Ella sabe cuidarlas pero a mí probablemente se me morirá. —Se mordió el labio—. ¿Qué ha ocurrido?
—Bacon no se suicidó, _____ —respondió Nicholas—. Lo asesinaron.
Ella exhaló un lento suspiro.
—Ya. Entonces... la cosa no ha terminado, ¿verdad?
—No. Quiero que tengas cuidado. Ve siempre acompañada, no te quedes sola, ¿de acuerdo?
—Ya me parecía a mí demasiado bonito para ser cierto. Y a ti también. Avisaré a Amy, a Zac y a Robin para que sigan alerta.
Nicholas sintió ganas de besar la mueca de temor de sus labios.
—¿Se lo dirás a Vito?
—¿Qué es lo que tiene que decirme? —preguntó Vito tras ellos.
—Que la epopeya continúa. Al de las cámaras lo asesinaron. Mis amigos siguen corriendo peligro.
Vito enarcó las cejas.
—Qué horror. ¿Y qué piensan hacer, chicos?
—Investigar —respondió Nicholas con calma—. ¿Cuándo te marchas?
La sonrisa de Vito fue solo un amago.
—No tan pronto como te gustaría, campeón.
_____ alzó los ojos en señal de exasperación.
—Vito. Nicholas, mis padres quieren que nos veamos esta noche. ¿Puedo utilizar tu cocina? Pensaba cocinar yo.
A Nicholas le entraron unas ganas inmensas de toquetearla, pero la mirada de Vito hizo que mantuviera las manos en los bolsillos.
—¿Tienes la llave?
—Sí. ¿Y Elvis qué? ¿Me comerá?
—No lo creo. Si se pone a gruñir, ve a buscar a Demi. Vuelve del colegio a las tres. Yo te veré en mi casa sobre las siete, ¿de acuerdo?
—Que sea a las ocho. —Sus ojos se ensombrecieron—. A las siete tengo que ir al tanatorio.
—Te acompañaré. Ahora tenemos que marcharnos. —Se volvió a mirar a Vito—. Tenemos que investigar.
Mientras se dirigían al ascensor, Miller lo miró de reojo y se sonrió.
—Así que vas a conocer a sus padres.
—Dona el dinero de mi seguro de vida a una organización benéfica, ¿de acuerdo?
Miller se echó a reír.
—Muy bien, campeón.
Jueves, 16 de marzo, 11.00 horas.
Andrew Poston era el hijo del juez de uno de los tribunales del distrito y por eso estaba en libertad bajo fianza mientras los otros chicos que habían violado a Marie Koutrell, de familias más pobres, se consumían en la prisión del condado. Cuando leyeron el acta de acusación se había dirigido al juez con un lacónico "inocente", y luego entre dientes lo oyeron decir que si atrapaba a la persona que lo había denunciado la destriparía con sus propias manos.
Poston tenía unas manos enormes, así que la amenaza no era para tomársela a la ligera. Su abogado le había aconsejado que mantuviera la boca cerrada, y él había dado una respuesta muy ilustrativa indicándole los sitios por donde podía meterse su consejo. Bien mirado, el chico tenía cierto estilo. En unos años podría llegar a tener una influencia tremenda, siempre y cuando lograra librarse de las garras de la justicia, lo cual iba a costarle lo suyo. La víctima lo había acusado a él en concreto, aunque eso no era determinante; a fin de cuentas había media docena de chicos dispuestos a declarar que el acto había sido consentido. Sin embargo, otro testigo anónimo había confirmado por su cuenta y riesgo la identificación, y había dicho que él se encontraba en casa de la víctima, bebido, desenfrenado y haciéndole insinuaciones sexuales indebidas.
El testigo anónimo tenía que desaparecer o era muy probable que Andrew Poston acabara siendo acusado de cometer un delito grave. La vida del joven podía verse arruinada por una sola noche de diversión con una p*uta que no paraba de provocarlo. Decididamente, el testigo tenía que desaparecer.
Claro que el hecho de que atacar al testigo fuera la manera más rápida de llegar hasta Nicholas Jonas era pura casualidad. Kismet. No cabía duda de que tenía un buen karma. Porque Nicholas Jonas también tenía que desaparecer, se había acercado demasiado a Rossi. Y ella, por primera vez desde que su novio la abandonara, tenía... relaciones sexuales.
Había que acabar con ello. Jonas tenía que desaparecer. Pero asesinar a un policía era peligroso y no podría escapar sin que lo descubrieran y lo condenaran. Resultaba más factible asustarlo.
Ahora Andrew estaba llegando a casa con su padre, el juez. Recorrían el camino de entrada en un todoterreno Lexus. La señora Poston había salido a recibirlos a la puerta, con semblante preocupado y un sobre acolchado en la mano.
Lo habían entregado esa misma mañana e iba dirigido a Andrew. Si su madre lo hubiera abierto, habría echado a perder la sorpresa. Ella le habría explicado lo que contenía. O tal vez no. En cualquier caso, ahora el sobre estaba en manos de Andrew y, por lo que captaba gracias al micrófono colocado dentro del acolchado, lo estaba abriendo y descubriendo el CD con el post-it pegado. "Escúchame", rezaba. Hubo una larga pausa. La calidad de la grabación era mala, confusa, pero le revelaría todo lo que quería saber. Un violento y original insulto brotó de los labios de Andrew. Lo había descubierto. Fantástico. Se oyeron unos cuantos ruidos más y por fin el chico habló.
—Hola, soy yo —dijo con voz apagada—. Ya sé quién me ha denunciado... Demi Jonas. Esa zorra nos estaba espiando.
Escuchó, y luego se echó a reír.
—En eso tienes razón. Debe de ser bastante mejor tirársela a ella que a Marie. Hazme un favor. Agradécele de mi parte que llamara a la policía. Asegúrate de que sepa que sabemos que fue ella y que si no se retracta, lo sentirá. Y hazlo hoy. Gracias, hermano. Me encargaría yo mismo pero tengo que estarme quietecito unos cuantos días hasta que todo esto pase.
Al final de la conversación sonó rock duro a todo volumen. El estruendo cesó al accionar un interruptor en el interior del coche. El motor estaba en marcha, tanto en sentido literal como figurado. Una ligera presión en el pedal del gas hizo que el vehículo estacionado en la calle de los Poston se desplazara hasta la carretera principal. Había llegado el momento de volver al trabajo. Y también de conectar la emisora local para ver si ya habían encontrado a Marge Hooper.
Ciertamente la noticia alteraría a Rossi. «Estupendo.» Ya había perdido a su amigo Hughes, y ahora perdía a Hooper, una conocida. Muy pronto perdería también a su amor: Jonas.
No habría manera de retenerle a su lado cuando supiera que la seguridad de su hermana estaba en peligro. Una vez que la joven Demi hubiera sido convenientemente advertida por parte de los amigos de Poston, el detective Jonas recibiría un mensaje amenazando con que a su hermana le sucederían cosas mucho peores por andar él con quien andaba. Como era listo, elegiría bien.
El siguiente golpe sería contra alguien mucho más lejano. Se trataba de un completo extraño que había tenido la desgracia de que su camino se cruzara casualmente con el de _____ Rossi. Eso la sacaría de quicio. Se sentiría muy culpable y tendría miedo de salir de casa. No se atrevería a dirigirle la palabra a ningún ser viviente. Qué pensamiento más alentador.
Por supuesto, el golpe de gracia tendría lugar mucho más cerca. En la familia. Las opciones habían aumentado con la llegada de su hermano y sus padres desde Filadelfia. No formaba parte del plan original, y era un arma de doble filo. Por una parte los problemas familiares se habían resuelto, así que ya no estaba sola en la gran ciudad. Eso era malo. Por la otra, constituía una deliciosa ironía. Justo cuando la familia volvía a estar unida, comenzarían a caer. ¿A quién le tocaría? ¿A su hermano o a sus padres? ¿Quién le dolería más?
Pero antes... un extraño.
Poston tenía unas manos enormes, así que la amenaza no era para tomársela a la ligera. Su abogado le había aconsejado que mantuviera la boca cerrada, y él había dado una respuesta muy ilustrativa indicándole los sitios por donde podía meterse su consejo. Bien mirado, el chico tenía cierto estilo. En unos años podría llegar a tener una influencia tremenda, siempre y cuando lograra librarse de las garras de la justicia, lo cual iba a costarle lo suyo. La víctima lo había acusado a él en concreto, aunque eso no era determinante; a fin de cuentas había media docena de chicos dispuestos a declarar que el acto había sido consentido. Sin embargo, otro testigo anónimo había confirmado por su cuenta y riesgo la identificación, y había dicho que él se encontraba en casa de la víctima, bebido, desenfrenado y haciéndole insinuaciones sexuales indebidas.
El testigo anónimo tenía que desaparecer o era muy probable que Andrew Poston acabara siendo acusado de cometer un delito grave. La vida del joven podía verse arruinada por una sola noche de diversión con una p*uta que no paraba de provocarlo. Decididamente, el testigo tenía que desaparecer.
Claro que el hecho de que atacar al testigo fuera la manera más rápida de llegar hasta Nicholas Jonas era pura casualidad. Kismet. No cabía duda de que tenía un buen karma. Porque Nicholas Jonas también tenía que desaparecer, se había acercado demasiado a Rossi. Y ella, por primera vez desde que su novio la abandonara, tenía... relaciones sexuales.
Había que acabar con ello. Jonas tenía que desaparecer. Pero asesinar a un policía era peligroso y no podría escapar sin que lo descubrieran y lo condenaran. Resultaba más factible asustarlo.
Ahora Andrew estaba llegando a casa con su padre, el juez. Recorrían el camino de entrada en un todoterreno Lexus. La señora Poston había salido a recibirlos a la puerta, con semblante preocupado y un sobre acolchado en la mano.
Lo habían entregado esa misma mañana e iba dirigido a Andrew. Si su madre lo hubiera abierto, habría echado a perder la sorpresa. Ella le habría explicado lo que contenía. O tal vez no. En cualquier caso, ahora el sobre estaba en manos de Andrew y, por lo que captaba gracias al micrófono colocado dentro del acolchado, lo estaba abriendo y descubriendo el CD con el post-it pegado. "Escúchame", rezaba. Hubo una larga pausa. La calidad de la grabación era mala, confusa, pero le revelaría todo lo que quería saber. Un violento y original insulto brotó de los labios de Andrew. Lo había descubierto. Fantástico. Se oyeron unos cuantos ruidos más y por fin el chico habló.
—Hola, soy yo —dijo con voz apagada—. Ya sé quién me ha denunciado... Demi Jonas. Esa zorra nos estaba espiando.
Escuchó, y luego se echó a reír.
—En eso tienes razón. Debe de ser bastante mejor tirársela a ella que a Marie. Hazme un favor. Agradécele de mi parte que llamara a la policía. Asegúrate de que sepa que sabemos que fue ella y que si no se retracta, lo sentirá. Y hazlo hoy. Gracias, hermano. Me encargaría yo mismo pero tengo que estarme quietecito unos cuantos días hasta que todo esto pase.
Al final de la conversación sonó rock duro a todo volumen. El estruendo cesó al accionar un interruptor en el interior del coche. El motor estaba en marcha, tanto en sentido literal como figurado. Una ligera presión en el pedal del gas hizo que el vehículo estacionado en la calle de los Poston se desplazara hasta la carretera principal. Había llegado el momento de volver al trabajo. Y también de conectar la emisora local para ver si ya habían encontrado a Marge Hooper.
Ciertamente la noticia alteraría a Rossi. «Estupendo.» Ya había perdido a su amigo Hughes, y ahora perdía a Hooper, una conocida. Muy pronto perdería también a su amor: Jonas.
No habría manera de retenerle a su lado cuando supiera que la seguridad de su hermana estaba en peligro. Una vez que la joven Demi hubiera sido convenientemente advertida por parte de los amigos de Poston, el detective Jonas recibiría un mensaje amenazando con que a su hermana le sucederían cosas mucho peores por andar él con quien andaba. Como era listo, elegiría bien.
El siguiente golpe sería contra alguien mucho más lejano. Se trataba de un completo extraño que había tenido la desgracia de que su camino se cruzara casualmente con el de _____ Rossi. Eso la sacaría de quicio. Se sentiría muy culpable y tendría miedo de salir de casa. No se atrevería a dirigirle la palabra a ningún ser viviente. Qué pensamiento más alentador.
Por supuesto, el golpe de gracia tendría lugar mucho más cerca. En la familia. Las opciones habían aumentado con la llegada de su hermano y sus padres desde Filadelfia. No formaba parte del plan original, y era un arma de doble filo. Por una parte los problemas familiares se habían resuelto, así que ya no estaba sola en la gran ciudad. Eso era malo. Por la otra, constituía una deliciosa ironía. Justo cuando la familia volvía a estar unida, comenzarían a caer. ¿A quién le tocaría? ¿A su hermano o a sus padres? ¿Quién le dolería más?
Pero antes... un extraño.
Andrea P. Jonas:)
Página 18 de 30. • 1 ... 10 ... 17, 18, 19 ... 24 ... 30
Temas similares
» Novela "Leopard" (Joseph Jonas, Nicholas Jonas & Kevin Jonas)
» Un Día Como Hoy - Joe Jonas & {USERNAME} - Nick Jonas & Magali -
» Nick Jonas el playboy enamorado de...¿La niñera? (Nick Jonas &Tu)
» ~Enamorada de Nick Jonas~ (Nick Jonas & tú)
» All Because of you (tn y Joe Jonas)
» Un Día Como Hoy - Joe Jonas & {USERNAME} - Nick Jonas & Magali -
» Nick Jonas el playboy enamorado de...¿La niñera? (Nick Jonas &Tu)
» ~Enamorada de Nick Jonas~ (Nick Jonas & tú)
» All Because of you (tn y Joe Jonas)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 18 de 30.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.