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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

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Mensaje por Moonstar Vie 03 Ago 2018, 4:33 pm

Ficha requerida:

 
  Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Tumblr_p05t6gZDqD1vtwrluo1_400
Prólogo


La escuela intermedia siempre fue una de las mejores experiencias que habrá tenido aunque quizá sólo fue un pequeño lapso dentro de ella que había sucedido, después de ello regresó a casi todos sus hábitos comunes.

Desde que tenía memoria nunca le importaron las cosas comunes como las reuniones entre amigas y mucho menos los chicos, creía que eran imprudentes e idiotas. Siempre estaba metida en algún libro que terminaba al final de la semana para evitar hablar con alguien que no fuera ella misma, ni siquiera había tenido un solo amigo antes de eso aunque por ello sus calificaciones eran las mejores de la clase. Sabía que su vida sería perfecta si seguía al pie de la letra su protocolo de vida, un protocolo que ella misma creo subiendo sus barreras para que nunca fueran destruidas. Vistiendo siempre con el uniforme escolar; una falda más abajo de las rodillas, sus distintivas coletas por ambos lados o en ocasiones sólo una, lograba adquirir apodos tontos «la Virgen María» «Monja» «La chica biblia» aunque el último nunca logró entenderlo, es decir ¿Cuándo a leído una biblia? Nunca lo hizo y dudaba de hacerlo alguna vez. Pese a los apodos nadie se metía a hacerle bromas pesadas por el hecho de que quizá sería peor, algunas veces incluso llegaban a pensar que tenía una especie de pacto con el señor rojo debido a su expresión siempre neutral.

Su vida era tal y como ella deseo, o eso creía hasta que aquella mañana de invierno un tonto chico llegó de intercambio desde Inglaterra. No entendía como todas estaban que morían sabiendo que sólo era otro chico más, ese día ella había llegado tarde debido a un problema con la tienda de su padre así que ayudó en lo que podía.

-¿Qué es eso que tienes en tus manos?-pregunto desde el otro banco aquel castaño. Tenía su mano sobre si mentón observandola.
-Se llama libro, deberías usarlo una vez.-habló sin más.
No tenía ni el mínimo interés en un chico tan patético y hablador, aún más sabiendo que sería el típico popular amado por todas. Asqueroso.
-Eres algo ruda, deberías ser más amable o nunca tendrás amigos.-sonrió mostrando unos pequeños oyuelos a ambos lados.
-De hecho, no tengo ningún amigo y ni siquiera me preocupa.-dijo sin apartar la vista del libro. Lo bajo y se giró por primera vez al castaño.-¿Por qué a ti si?


Eso lo había sorprendido un poco haciendo que su sonrisa se esfumara. Era una chica realmente rara pero lograba agradarle de una u otra forma, su extraña forma de vestir y sus múltiples suéters neutros sin color, debía averiguar más sobre ella. Quería saber quién era ella.


Ese día fue el más molestó de todos debido a sus insistentes alborios sobre estar juntos, ella negó a su petición repentinas veces pero nunca pudo despegarse de aquel chico pues parecía un tipo de chicle pegado a ella. Los últimos meses se volvió aún peor cuando no podía estar quieto, si algo amaba ella era su tranquilidad pero Harry siempre lograba sacarla de quicio ya estuviera moviéndose en su silla, hablando, cantando o simplemente a su alrededor le parecía una vil molestia. Tanto que a veces quería ahorcarlo ahí mismo. Por lo menos en la cárcel había una biblioteca, aunque ese no era el caso.
Incluso comenzó a burlarla para compararla con un tonto dibujo animado antiguo, si bien la personalidad de esa chica era más ruda y amigable Harry no tardaba en decir que su vestimenta era la misma.
 Estando en una ciudad como Canadá era común notar que muchas chicas vestían a la moda, esa castaña sólo vestía blusas algo anchas y viejas junto a faldas largas, o en todo caso pantalones sin color, siempre estaba con sus tenis blancos y nunca faltaban sus únicos dos peinados en ella. A veces se preguntaba si no quedaría calva estando así todos los días. Tiempo después de conocer a ese dolor de cabeza «unos tres meses aproximadamente» tuvo que llegar a su vida otros dos dolores de cabeza.

-Por favor, prometo nunca más hablarte si me ayudas.


Frente a ella, en medio de la escuela estaba una chica castaña de mechones rojos, eran casi del mismo tamaño a excepción de que ella vestía unas prendas llamativas y era asiática. Le había pedido ayuda con su proyecto de artes debido a que era patéticamente cero creativa.


-Deja de molestar Hye.
-ya estaba bastante molesta.
-Por favor, por favor, por favor.
-No.
-¡Oh vamos, ayúdame! ¡Me pondré de rodillas! ¡Te alabare! ¡Te haré un rico postre!-exclamó a punto de llorar.
-¿De qué postre estamos hablando?-pregunto sin verla a los ojos. Amaba los postres pero era pésima cocinera.
-¡El que quieras! ¡Será todo tuyo!-exclamó contenta, tenía un brillo en sus pequeños ojos marrones.
-Bien, aceptó entonces.


Sin pensarlo dos veces se lanzó contra ella para abrazarla. Park Bae Hye era una chica muy energética como distraída pero cálida y buena amiga. Después de ayudarla otra pequeña persona decidió pedirle un favor, esa vez se trataba del mejor amigo de aquel idiota, Louis. Ese sería un día largo.


-Por favor, por favor, por favor.-la seguía haciendo caras raras.
-¡Esta bien! ¡Para ya Tomlinson!-exclamó parando de golpe haciendo que chocara con el castaño.


Nunca pensó que conocer a alguien como aquel castaño le iba a traer grandes problemas, aunque de esos grandes problemas tan bien habían venido cosas buenas y entre ellas estaban los amigos que logró crear pese a su mala actitud contra todos. Siempre que los recordaba una sonrisa se plasmaba en su rostro, incluso sabía que pese a todo la confesión de Harry por ella la volvió loca, ningún chico había gustado de ella hasta ese día, después de casi cinco meses de conocerlo.

Las flores estaban machistas en su mayoría, aquella brisa flotaba por el aire como si quisiera causar un frío pequeño. Habían hojas que caían de los robles junto a un poco de pasto ya verde a su vista, las clases habían acabado ya y en cuanto terminaron de comer en aquella cafetería que Louis dijo se marcharon cada quien en su dirección, pronto acabaría la escuela y eso le daba miedo ahora.
Harry decidió acompañarla a su casa mientras aún podía, estaban caminando sin hablar el uno con el otro en un silencio cómodo. Era raro que Harry no quisiera hablar o que estuviera haciendo una tontería pero ahora también eso era agradable pues por primera vez en bastante tiempo pudo obtener un poco de silencio luego de que en su vida se metieran repentinamente cuatro chicos y una chica molesta. 


Cerca del parque a un costado caminaban, ese día él llevaba su cabello esponjado siendo revuelto junto a sus rizos, una chaqueta marrón lo acompañaba junto a su uniforme y una mochila azul gastada que colgaba de su hombro derecho. Ella sólo tenía un pequeño suéter rosa de lana que era de su mamá junto a su uniforme y su mochila gris del lado izquierdo de su hombro, en ella estaba atada una vieja carpeta con sus dibujos. Habían llegado a la puerta de una casa verde, del lado costado claro pues del frente estaba la tan amada tienda de su padre.


-Aguarda, antes que entres.-habló el castaño estirando su mano para bajarla lentamente.
-¿Pasa algo?
Lo miro algo confundida. Era raro que no estuviera con su carisma común en esos momentos.
-Sabes, entre todas las estrellas que hay en el cielo siempre habrá una que destaca más.-alzó la vista.-esa estrella no se esmera por querer ser mejor, no. Ella es tan valiente que brilla para si misma y eso la hace ser la estrella que podría enamorar a quien quisiera si se lo propone. Sólo debían conocerla..-murmuró lo último.
-Pero aún no hay ninguna estrella, Harry si estás haciendo una de tus bromas juro que...-fue interrumpida.


Volteó su vista hacia ella y en ese momento creyó que había sido una cruel imaginación, el aire comenzó a hacer un recorrido haciendo que su cabello revoloteara, aquel chico de ojos esmeralda soltó una sonrisa mostrando sus dientes. Parecía una clase de modelo. Por primera vez, en tantos años sus mejillas tomaron un color rojo, llevo una mano a ellas sin quitar la vista del chico.


-Lo sé.-sonrió aún más.-pero esa fue una perfecta descripción de lo que eres. Me gustas. Tú realmente me gustas, y mucho.
-¿Pero que dic..?-otra vez su interrupción.
-Me gustas tanto como cualquier estrella, me gustas que creo..solo creo podría morir por ti.


Un viento hizo que su cabello revolotiara. Aquella sonrisa se quedaría plasmada en ella por mucho tiempo, su perfecto estilo y perfecto rostro, sabía que sus mejillas estaban más rojas que antes e incluso no sabía que decir con certeza.
"Aquella tarde de otoño había recibido mi primera confesión". Aquella tarde su corazón empezó a palpitar, aquella tarde se sonrojo por primera vez, aquella tarde sabía que algo nuevo se estaba formando en ella «¿Quizá esto era amor?» «¿Qué es el amor?».


Un suspiro desalentador salió de sus labios. No sabía ni siquiera porque había decidido hacerlo pero ahí estaba, por noventa y siete vez estaba justo ahí. Miro detenidamente la parte frontal de la tienda de su padre, ahora era una librería. ¿Por qué seguía conduciendo al mismo lugar? ¿Por qué seguía pensando en él? ¿Por qué se preguntaba como estaría él?
Sus sentimientos se hicieron presentes pero siempre hubo algo que los distanciaba, después de tanto tiempo tuvo que regresar a Inglaterra y se fue. Se fue junto a su corazón y sus recuerdos, sabía que era lo mejor para los dos pero ahora mismo le pedía a dios una explicación de porque. Habían pasado ya muchos años desde eso, ahora con veintitrés años no sabía exactamente que hacía sólo tenía preguntas en su mente. "¿Acaso el amor puede mover una montaña? ¿Por qué no fui la indicada para ti?" Se preguntaba.
«tonta» su mente respondía.
Quizá si sólo algún día pueda volver a ser la misma chica que era sería feliz, sería verdaderamente feliz si sus respuestas pudieran ser resueltas y no estar conduciendo por el lugar donde se confesó la primera vez en su viejo carro azul, que no quisiera ya ni pensar en él. Harry Styles se convirtió en un problemas desde el momento que lo conoció, y que lo amo.


personajes:
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Mensaje por Ponse23 Sáb 04 Ago 2018, 2:31 pm

Debo admitir que no estoy acostumbrada a leer Harry hetero pero me gusta  :rhianpls:
Ponse23
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Mensaje por Moonstar Sáb 04 Ago 2018, 4:59 pm

Ponse23 escribió:Debo admitir que no estoy acostumbrada a leer Harry hetero pero me gusta  :rhianpls:
Oww me alegra que te haya gustado, no esperaba tener ni un comentario realmente es una sorpresa jaja n.n
Moonstar
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Mensaje por Ponse23 Dom 05 Ago 2018, 11:13 am

Gabrielle12 escribió:
Ponse23 escribió:Debo admitir que no estoy acostumbrada a leer Harry hetero pero me gusta  :rhianpls:
Oww me alegra que te haya gustado, no esperaba tener ni un comentario realmente es una sorpresa jaja n.n
Síguela en cuanto puedas, me encanta  Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 3275125450
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Mensaje por Moonstar Dom 05 Ago 2018, 3:35 pm

Ponse23 escribió:
Gabrielle12 escribió:
Ponse23 escribió:Debo admitir que no estoy acostumbrada a leer Harry hetero pero me gusta  :rhianpls:
Oww me alegra que te haya gustado, no esperaba tener ni un comentario realmente es una sorpresa jaja n.n
Síguela en cuanto puedas, me encanta  Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 3275125450
La seguiré pronto no te preocupes :'3
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Mensaje por Moonstar Lun 06 Ago 2018, 12:57 pm

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 20180826172408


No era como si sólo pensará en la posibilidad de encontrar algo que hiciera que sus recuerdos volvieran a ella como una película, pero tampoco quería tener que ir para verse obligada por su conciencia a querer visitar cualquier lugar en el que pasaron juntos.

Después de estarse debatiendo mentalmente que debía hacer aceptó la propuesta de su mejor amiga por regresar a vivirse a Canadá, la pequeña historia radica en que al terminar aquel lapso que deseaba superar Jody insistió en irse a la universidad que estaba en Carolina del Norte, tiempo más tarde aceptó regresar a Canadá viviendo en un pequeño departamento junto a la enana. Amabas se habían conocido en la preparatoria cuando pasó el acontecimiento debido a que al igual que ella Jody amaba la lectura, después de irse nunca supo más de sus viejos amigos y eso lograba hacerla sentir un poco mal. Había logrado conseguir un trabajo prometedor como diseñadora gráfica, si bien no entraba en su lista de trabajos deseados al final terminó diseñando para que así pudiera dibujar continuamente obteniendo un lindo empleo en una revista conocida, por otra parte Jody trabajaba como fotógrafa en una gran agencia de grupos, amaba su trabajo.

—¡Por fin acabamos!—exclamó elevando sus brazos para tirarse en su cama. Habían alquilado un lugar con dos cuartos.

—Dirás que tú, desde hace ratos acabe con mi lugar.—habló levantando la vista de su libro.

—¿Cuándo dejaras de echarme en cara tu perfecta limpieza?—se recargo sobre sus codos viendo a la castaña.

—Cuando no tenga que obligarte a ordenar tu cuarto. Parezco más tu mamá que tu mejor amiga.

—Eso nos hace aún más unidas.—sonrió ampliamente.

Si bien su actitud sería seguía siendo parte de su vida diaria había logrado calmar un poco su manojo de emociones para ser un poco más reflexiva y tolerante, incluso se animaba a hablar de chicos con Jody lo que jamás imagino hacer en sus jóvenes dieciocho años, era increíble su cambio. Jody era mucho más pequeña que ella lo que a veces hacia que la tomarán como su hermana menor aunque si bien tenía cara de bebé era todo lo contrario, era una rebelde sin causa.

—Vamos, quiero ir a comprar algo y dudo mucho que quieras quedarte aquí sola.

—Mi soledad es perfecta. Gracias.—dijo a lo que la menor rodeó los ojos y le arrebató el libro.—¡Oye estaba leyendo!

—A este paso quedarás soltera por toda la vida, vamos~sii.—hizo un puchero. No podía negar que quizá estar sola era su destino.

—Si eso te hace feliz.—rodeó los ojos.

—¡Yeih! ¡Eres la mejor!—la tomó entre sus brazos lanzando el libro en algún sitio.

—¡Oye mi libro!—le reprochó señalando donde había caído.

—A quien le importa, vámonos.

La tomó de la mano obligandola a salir del departamento para ir al supermercado que estaba a cinco cuadras. Ese día sólo tenía puesto un short junto a una camisa el triple de su tamaño acompañandola junto a un suéter viejo y sus pantuflas. Vaya idea se lo ocurrió.
Jody caminaba emocionada sin soltar su mano por lo que unas miradas no lograron aparecer, no sabía si se trataba del hecho de que vistiera como vagabunda o que parecieran una pareja homosexual, creía que era más por la segunda que la primera. Al entrar tomó un carrito siguiendo a su castaña e imperativa amiga por todos los sitios que encontraba. Era agotador tener que seguirla como si fuera una niña pequeña, aunque su estatura hacia que eso fuera así.

—¿Qué tal? Escuché que son deliciosos.—le mostró un paquete de bombones con chocolate.

—¿Por qué no tomas el que tiene fresas adentro? Es rico.—murmuró.

—¡Eso es mejor!

Se volteó para correr al pasillo de dulces. Suspiro y camino para ver donde se metió, ya tenían casi lleno todo y la mayoría se debía a las golosinas que Jody ingresaba y una que otra comida instantánea. Aún debían comprar carne, frutas y verduras para que sobrevivan la semana ya que con sólo frituras morirían de hambre, además debía dejarle comida a su amiga debido a que llegaría tarde toda la semana por los nuevos proyectos de su trabajo y como ella era quien debía estar a cargo de los diseños aunque la que tenía mayor superioridad era su jefa. Volteó un momento golpeando a alguien frente a ella.

—¡Oh por dios! ¡Lo siento!—corrió en dirección al chico que casi aplasta, literalmente porque tenía una parte del carrito sobre él.—No me eh fijado, y bueno no te vi, ¡Oh por dios!

—Auch..

Como pudo intentó que se levantará así que corrió para quitar el carrito y ver que tan mal dejó a aquel hombre. Entonces cuando por fin pudo levantarse «adolorido» pareció conocerlo de algún lado, no sabía de donde pero su rostro era familiar.

—Tanto tiempo para que me aplastes con un carrito en el supermercado.—fruncio el ceño sobando su brazo derecho.—¿Acaso no me recuerdas Margot?

—Quisiera poder decir que si pero no, no lo se.

—Oh vaya, que desdicha.—rio mostrando sus dientes.

—¡Oh por dios, Liam! ¡¿Qué pasó?!—una voz se hizo presente. Ambos voltearon encontrándose con una chica bajita de cabello rubio.

—Tranquila Hye, eh sido atropellado por una vieja amiga.—sonrió volteando a la castaña.—es lindo verte otra vez, Margot.

No sabía que decir ante ellos pues estaba completamente muda y un tanto avergonzada por no haberlo reconocido, claro que se trataba de Liam Payne el amigo de él. Además frente a ella estaba su primera mejor amiga, Park Bae Hye. Qué tonta se vio.

—¿Margot?—su pregunta sonó más a duda que nada. Seguía igual que siempre.

—Hola.—sonrió de lado.—ah pasado tanto tiempo desde que nos vimos.

—¡Margot! ¡Te extrañe!—exclamó llendo hacia ella pero en cuanto llegó la golpeó en el brazo.—¡¿Por qué nunca llamaste?!

—Auch, creo que me lo merezco.—sonrió ante los dos chicos.

—Ven te ayudo.—sonrió Liam ante ella. Se sentía bien volver a ver a sus viejos amigos, de algún modo eso hacia que se sintiera más cómoda al estar nuevamente en Canadá.



Última edición por Gabrielle12 el Dom 26 Ago 2018, 4:25 pm, editado 1 vez
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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty Re: Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

Mensaje por Moonstar Miér 08 Ago 2018, 8:13 pm

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Picsar10
Hace dos días se había encontrado con dos de sus viejos amigos y aunque eso la hacia relativamente feliz tenía temor, temor a lo que pudieran pensar sobre ella ahora. No quería que ninguno supiera sobre lo que estaba sintiendo su pobre corazón en esos momentos, ni siquiera Jody lograba saberlo aunque tenía sus sospechas pues casi siempre su castaña amiga vivía apegada a cosas de hace años como si quisiera aferrarse a algo, Mar se aferraba a sus recuerdos.

Ese día se había levantado temprano para poder terminar el diseño preliminar de la nueva revista de ese mes, ella era algo así como una ayudante novata pero su trabajo era igual de importante que el de la jefa ejecutiva de su área. Amaba trabajar en el área de diseño y aunque no era su trabajo soñado le favorecía puesto que siempre amo dibujar cualquier cosa, solamente trazó unas líneas más y agregó márgenes mediante unos códigos, su inteligencia había tenido sus frutos. Cuando terminó de teclear lo último lo guardo y cerró su laptop.

—Jody, me bañare para ir al trabajo te dejaré unos huevos con tocino y café en la mesa.—movió un poco a la chica en la cama.

—Mmm.. de acuerdo. Suerte en el trabajo.

—Gracias.

Camino hacia el baño para poder darse una ducha debido a que anoche no siquiera se cambio al dormir, el trabajo de la revista de ese mes tenía a todos en la empresa atareados así que pasó la noche entera modificando unos diseños que Luke le envió. Todavía faltaban dos horas para irse pero quería apuntarse debido al tránsito y que tenía que esperar el bus, su carro seguía en reparación así que no tenía opciones.

(...)

—¡Hayle si eso es una portada último modelo más te vale que la modelo sea famosa!

—¡Rick ni siquiera pienses en comer y piensa en un nuevo artículo, holgazan!

Ahí estaba la señorita Anderson mandando a todos como siempre, sus días diarios se basaban de decirle a todos que debían hacer y eso lograba estresarla porque casi nadie la escuchaba nunca, o más bien nadie escuchaba. Si algo no salía como ella quería no dudaría ni un segundo en gritarte que estaba mal contigo. Era la más grande de todos debido a que contaba con la edad de cuarenta y tres años a diferencia de los demás, tenía cabello pelinegro lacio que siempre llevaba amarrado en una cola de caballo, flecos por ambos lados, de piel pálida y midiendo menos del metro sesenta y seis, era bonita y siempre llevaba prendas "escolarizadas" pero su carácter era algo rudo y necio.

—Margot, ¿Lograste acabar el diseño que envió Luke?—pregunto inclinandose en su escritorio.

—Si señorita Anderson. Costo algo terminar de ejecutarlo pero este fue el resultado.—señaló la pantalla.

Sonrió a medias asintiendo.—Es perfecto. Imprime las hojas y luego mandaselo a Miranda.

—De acuerdo jefa.
—una vez lejos hizo caso a lo que le indicó la mujer.

Ese día todos estaban alborotados por lo que debía ser rápida sino quería ser regañada por una mujer ya bastante estresada. Tomo un sorbo de su café matutino para seguir tecleando. Una vez las once copias salieron de la impresora a un lado suyo le mando el prototipo digital a la chica pelirroja, agarró las hojas y se levantó para llevarle las impresas a otra de las chicas, más bien la última. En su área sólo trabajaban alrededor de cuatro chicos y tres chicas incluyéndose, la jefa no contaba tanto.

—Hayle aquí están las hojas del diseño de página, ya se las eh mandado a Miranda así que sólo debes checarlas para achirvarlas junto a lo que falta.—explicó.

La chica castaña asintió. Hayle fue la última en ingresar al área y también era novata puesto que apenas había salido de la universidad con sus cortos veintiún años, de cabello castaño en trenzas, lentes y cara de bebé era una chica inteligente que además vestía a la moda.
—De acuerdo. Empezaré analizando los resultados.—sonrió tomando las hojas.

(...)

—¡Voy a morir!—exclamó retirándose un castaño.

—Teóricamente no podrías morir al menos que pasará un accidente Luke.—habló Hayle observando al castaño.

—Era un decir niña, no iba enserio.

Habían terminado la primera parte de la revista, por pequeña parte se referían a las cinco primeras hojas así que todavía debían seguir trabajando pero se tomaron un receso para comer en el restaurante que estaba a sólo dos cuadras del edificio, todo fue idea de Rick y su gran apetito. Incluso la jefa decidió acompañarlos.
Una vez ingresaron el olor a comida no se hizo de esperar, todo estaba bonito y bien decorado por una tableta de colores llamativos, habían pequeñas imágenes en varios lados y frases igual, las mesas eran de madera pero estaban cubiertas por un mandil decorado a mano según se podía apreciar. Tomaron una de las mesas de medio que tenía más sillas para que pudieran caber todos.

—¿Podrían dejar de comportarse como dos niños pequeños?—los miro seriamente haciendo que Hayle y Luke dejarán de pelear.

La castaña rio ante eso pues pensaba que ambos terminarían juntos a pesar de que la diferencia de edades era notoria pues Luke era cuatro años más grande que la pequeña castaña.

—Yo pediré un batido de fresa y para comer la orden de hamburguesa con papas fritas.—dijo observando el menú. La camarera había llegado ya.

—Yo quiero la ensalada cesar con jugo de limón.—habló Miri.

—¿Estaría bien si pido la orden de nachos?

—Luke cariño, sólo pide tu estúpida comida ya.—habló la jefa mirando enojada al castaño, llevaba pensando que comer durante diez minutos.

—Bien, bien. Traeme una hamburguesa también pero con un refresco.

La chica anotó todo y decidió a irse llevándose los menús con ella. El ambiente era agradable y pese a que habría una semana estresada todos parecían estar felices con la comida de ese día, incluso ella aunque no era de hablar demasiado con sus compañeros y rara vez reía por uno de los comentarios idiotas de Jace o las acciones de Rick ante su comida.

—¡No, basta Luke!

—Buah, ¡Sorpresa Hayle!

—¡Hayle!—exclamó Miranda una vez la menor cayó sobre ella aplastandola.

—Chicos acaban de tirarle la mostaza en la cara a Mar.—dijo llamando la atención de todos Milo.

La castaña sólo suspiro y sonrió de lado ante su cara embarrada de mostaza que Luke avento para Hayle fallando por completo su puntería. Quería asesinarlo con sus propias manos pero decidió mejor contar hasta diez las ovejitas invisibles, no quería ir a la cárcel.

—Juro que te asesinare con mis propias manos.—murmuró viendo con odio al castaño.


Liam, yo que tu empezaba a correr.—sonrió el pelinegro hacia su amigo.


—¿Eh? Aguarda Margot, fue un error.—se levantó observando como la castaña de coletas iba amenazante a él.-¡Margot no!


—¡Vuelve aquí Payne! ¡Exilio!


Entonces comenzó a perseguirlo para poder colocar sus manos en su cuello y apretarlo hasta que su cara quedará completamente morada, o hasta que ya no respirara. Estaba enfada por el hecho de que jugando con Louis le avento un plato de avena en la cabeza, juraría que esa chica lo iba a matar ahí mismo.
En eso una mano la tomó por detrás de su cuello haciendo que se detuviera dejando correr al castaño lejos. Enojada volteó para ver de quien se trataba y ahí estaba, tomandola. Se sorprendió ante la cercanía que mantenían lo que hizo que por segunda vez en su vida se sonrojara. Harry le sonrió ampliamente mientras ella intentaba reaccionar.


—Deberías dejar de seguirlo de esa manera harás que me ponga celoso y quiera molestarte más.


—¿Ah? ¡Cierra la boca Styles! ¡Sueltame!—intentó zafarse pero simplemente no podía, o quizá no quería.


—Te quiero Margot.—dijo cerca de su mejilla haciendo que ella reaccionará mal y se separará.


Lo miraba realmente sorprendida y algo apenada. No sabía que hacer ante esa situación y Harry sólo se dedicaba a mirarla con una sonrisa, su sonrisa tan linda y cálida que podría derretir a cualquiera.


Movió su cabeza por ambos lados intentando no recordar eso debido a que cada vez que pensaba en Harry su corazón se apretaba como si quisiera salir de ella, apretó con fuerza una pequeña bufanda que llevaba ese día pues había un poco de fresco así que optó por tomarla, una bufanda casi vieja de color marrón y que sabía perfectamente de quien era.  Les había dicho a los demás que regresaría a la oficina para poder avanzar un poco mientras ellos se quedaban conversando, tomó el último sorbo de su batido que pidió en un vaso de plástico y lo deposito en la basura de la entrada. Entonces al levantar la vista para salir la puerta se abrió dejando ver una complexión masculina entrar por esta. Junto a un abrigo beige cerrado llevaba un pantalón de mezclilla junto a unas botas, su sonrisa fue lo que cautivó su atención. No sabía que decir o que hacer, ella estaba estática frente a él vistiendo un simple suéter de lana rosado, abajo sabía que llevaba una blusa quizá blanca junto a sus jeans de mezclilla y unas botas beige, además traía esa bufanda marrón en su cuello. Ambos estaban sorprendidos.

—¿Margot?—pregunto una vez reaccionó ante ella. No se había movido.

—Harry...—susurró sin quitar su vista de él. Si en una situación donde podías encontrarte con tu amor del pasado y sólo sucedía de uno en un millón, ella era ese uno en un millón y ahora estaba queriendo correr de ahí.—¿Haz regresado?—pregunto.


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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty Re: Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

Mensaje por Moonstar Lun 13 Ago 2018, 7:26 pm

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Picsar11

 
Miedo, nervios y asombro. Esas tres palabras lograban definir como era que aquel aura lograba sentirse tan incómodo en esos momentos, simplemente ninguno de los dos se dignó a responder ante la pregunta de la castaña. Llevo su mano al bolso marrón apretandolo con fuerza que hizo que sus nudillos tomarán un pequeño color rojo, incluso pensó que le faltaba la respiración.

—Al..algo así, no es como que hubiera venido de vacaciones.—habló después de un tiempo.

—Eso parece bueno, es decir me alegra saber que te la pasas bien.

—¿Cómo sabes que realmente me la estoy pasando bien?—cuestionó frunciendo el ceño.

Quiso que la tierra la tragara en ese mismo instante, sabía que su pequeño comentario fue improvisado.

—Oh si. Imagine que sería de ese modo, supongo claro.—sonrió a medias. Sus nervios eran cada vez más grandes.

—Bueno supones de una forma bien, creo que... es lindo verte de nuevo.—sonrió a medias.

Antes de que pudiera decir algo más un alegra chico de cabello castaño tomó al primero en un abrazo haciendo que casi pierda el equilibrio.

—¡Niall!—lo miro molestó ante la acción del irlandés.

—¡Harry!—se empezó a reír como foca retrasada soltando al menor. Volteando su vista al frente pudo reconocer a la pequeña chica castaña frente a sus ojos.—¿Margot?

—¿Qué tal? Ah pasado un tiempo.—sonrió tímida elevando una mano para saludarlo. Estaba algo impresionada.

No podía creer que frente a sus ojos habían dos chicos completamente diferentes ahora a como los conocía, ni siquiera estaba segura de que tanta belleza fuera legal «pensamientos sucios» se dijo. Nunca había dicho o pensado algo así, no hasta ahora.

—¡Wow, que bien te vez—se lanzó a abrazar a la pequeña sonriendo. 

—Niall... oye, me asfixias...no respiro—murmuraba ante el abrazo tan apretado de el chico.

—Niall la vas a matar si sigues así—tomó de la chaqueta al mayor y lo jalo para apartarlo.

—Lo siento pero volver a ver a Mar hace que quiera abrazarla hasta que se muera—dijo sin quitar su sonrisa.

—¿Acaso perdiste la cabeza? —¿Por qué verme hace que quieras matarme?— preguntaron al uniso.

Rio bajando un poco la vista.—vengan debemos quitarnos de medio puede venir alguien—camino lejos de la puerta hacia una mesa vacía.

Los dos castaños lo siguieron imitando su acción.

Los nervios, la incomodidad, el miedo. Estaban presentes en cada parte de su ser mientras observaba con detenimiento a Harry, no quería expresar lo que verdaderamente sentía porque sabía que se vería como una completa idiota, o peor. Por otro lado, Niall hablaba de muchas cosas como su viaje por las calles de Londres, que había vuelto un tiempo a irlanda. Sabía que aquel castaño se había ido dos meses después de la partida de Harry así que perdió comunicación con él dejando todo en el olvido, aún seguía siendo tan genuino como cuando era adolescente.

Sonrió ante su comentario.—Me alegra saber que te la hayas pasado muy bien ahí.

—¡Oh si, Harry se puso como loco con aquellas botas! ¡Incluso le coqueteo a la vendedora para que le bajará el precio!—exclamó divertido.—¿Verdad?—pregunto esa vez al castaño.

—No creo que sea necesario explicarle a detalle todo lo que hicimos los últimos años Niall—dijo tomando su café que pidió.

—Uh, ¿Mar?—una voz llamo la atención de la castaña haciéndola girar la cabeza. Era Hayle.—debemos volver a la oficina.

Había olvidado ese detalle. Estaba en ese restaurante para descansar un momento, aún debían terminar la revista. Sonrió asintiendo y volteó hacia Niall.

—Debo irme el trabajo llama, espero verlos en otra ocasión—sonrió a punto de levantarse.

—Claro, alguna ocasión—dijo Harry viendo por la ventana. Su comportamiento era bastante maduro para tratarse de él, incluso juraría que ella fue así.

—¡Obvio! ¿Me das tu número Mar? Así estaremos en contacto—la tomó por la mano el castaño, ella volteó a verlo sorprendida.

—Uh, por supuesto Niall.

(...)

Lo que resto del día se la paso caminando de un lado a otro, el trabajo duraría más de lo que esperaban pues aún debían conseguir aquella entrevista para el primer puesto. Su cabeza seguía analizando a Harry, se veía más apuesto que como la última vez que pudo estar así de cerca de él. Se sentía un poco patética para pensar que siguiera sintiendo algo por ella después de haber sido tan dura y fría tras su ruptura.

Suspiro quitando la vista de la nada para tomar suavemente su bolsa, aún estaba encima de la mesa abierta para meter unas cosas que faltaban, ya eran pasadas las seis de la tarde y debía apurarse para caminar. Quizá estaba loca teniendo en cuenta que su departamento estaba a media hora a pie pero era mejor, necesitaba pensar.

Terminó de meter su cartera para cerrar el bolso, tomó la bufanda y la enrollo en este para después salir por la puerta gigante.

—Hasta mañana Mar—dijo Rick desde su escritorio.

—Hasta mañana.

El viento todavía estaba presente dándole una pizca de frío pero tampoco le importaba mucho. Metió ambas manos dentro de los bolsillos de su pantalón, el delgado suéter no hacia gran ayuda en cuanto a cubrirla del frío. Entonces su celular sonó haciendo que parará para buscarlo dentro de sus cosas, estaba hasta el fondo y era difícil de sacar. Una vez lo encontró deslizó su dedo por la pantalla.

—¿Si—pregunto.

—¿Mar? ¿Podrías pasar por un poco de leche y galletas de animalitos en una tienda?

—¿Cómo porque debería hacerlo?
—comenzó a caminar mientras hablaba, había menos gente que de costumbre.

—Tengo hambre pero me da flojera salir, sabes que te amo.

—Eres una pequeña holgazana, Jody enserio te asesinare acabó de pasar dos malditas tiendas ya.

—Oh vamos...

Entonces fue ahí cuando un cuerpo más alto que ella empujó su hombro haciendo que tirará su celular al piso por el impacto, volteó enojada para agacharse por su celular. Aquel hombre imitó su acto tomandolo primero para poder dárselo, aquel hombre de ojos color miel estaba frente a sus ojos sorprendido al igual que ella.

Ambas manos, una sobre otra, tomando aquel aparato que aún estaba en llamada. Ninguno decía nada.

—¿Mar me estás escuchando?—se oyó del otro lado del celular. Ese día algo había salido mal.




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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty Re: Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

Mensaje por Moonstar Lun 20 Ago 2018, 8:47 pm

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Picsar12


Canadá
Escuela intermedia.

Después de un tiempo las flores comenzaban a salir, habían pequeños animales saliendo de su escondite después de haber invernado un tiempo.

Tomo el peine que estaba sobre el tocador para cepillar su cabello seguido de dividirlo en dos partes iguales y atacar cada uno con las pequeñas ligas que tenía. Peino su fleco y tomó la mochila que estaba en una silla junto a la puerta. Ese día su papá había ido temprano a la tienda para hacerle competencia a un bobo comerciante que llegó de asia, su padre podía llegar a ser tan competitivo que al final terminaba gastando todas sus fuerzas en eso. No desayuno pues no tenía hambre por lo que sólo tomó la chaqueta que era de la escuela y salió camino a esta, esperaba no encontrarse con ninguno de los chicos pues sería ya muy molesto saber que estaban cerca así que intentó apresurarse aunque no duro mucho.

—Vaya que caminas rápido—era una castaña muy cansada, le había gritado desde hace dos cuadras atrás.

—No entiendo porque corriste si viste que estaba lejos ya, es tonto—suspiro algo cansada. Volteó su vista y comenzó su andar nuevamente.

—Omo, eres tan cortante Unnie—expresó junto a un puchero digno de Hye.

—Primero que nada Hye ya te dije que no me digas "Unnie"—lo último lo dijo haciendo referencia a las comillas.—segundo, tus palabras coreanas no las entiendo.

—¿Eh? Pero es divertido hacerlo, además eres más grande que yo por un año.

—Eso no significa que puedas hablarme como si supiera que dices.

La menor sólo hizo otros pucheros seguidos de muchos Unnie eso hacia que Mar perdiera la paciencia y quisiera haberla arrojado contra algún coche, para ser una chica asiática era bastante molesta y melosa, odiaba tanto empalago de parte de Hye pero no podía negársele, ella era como una niña pequeña. Una pequeña niña con déficit de atención «Sonrió para si misma».

La escuela estaba a sólo dos cuadras ya por lo que agradecía intensamente que Hye hubiera cerrado su boca para no escuchar sus alaridos más, habían ya varios entrando así que se dispuso a hacer lo mismo pero algo la detuvo, la jalo tapando su boca hasta un sitio apartado. Intento hablar pero fue un fracaso.

—¿Eh? Oh ya entiendo—rio un poco soltandola.
Respiro algo agitada gracias a ese imbécil que tapó igual su nariz, volteó enojada hacia el castaño.

—¡¿Eres un idiota o que?! ¡Casi muero asfixiada!

—De haber muerto me hubiera encantado que lo último que veas fuera a mi—se acercó hasta su rostro con esa sonrisa de príncipe encantador.

Sus mejillas ardieron por su cercanía.—Qui..quieres callarte, sería lo peor que vería.

—Deberías pensar lo contrario, yo me casare contigo Mar—se señaló.

—¿Eh? ¡No! ¡Esta claro que eso no!—lo miro enojada para darse la media vuelta y caminar a la entrada.

—¡Oh vamos, vuelve aquí esposa!

(...)

La clase de historia parecía muy emocionante para la castaña puesto que había leído casi la mitad del libro que seguía al que tenían ellos, no era aburrido pero su calma lograba ser llamada por el chico de al lado, estaba con ambas piernas sobre su silla y se movía cual gusano de lado a lado, era estresante. Volteó a verlo algo enojada pues si de por si su bobo asiento estaba al fondo ese idiota no dejaba que escuchara la clase.

—¿Podrías dejar de hacer eso?—preguntó con molestia en susurro.

—¿Qué cosa? ¿Esto?—comenzó de nuevo con su ruido en burla a la chica de coletas.

—¡Basta!—gritó en un pequeño susurro para no llamar la atención.

—¿Por qué? Diviértete Mar.

—Te voy a sacar los ojos con sólo este lápiz—tomó el pequeño lápiz sobre su banca para apuntarlo a lo que él rió con gracia.

—Mejor sacame otra cosa—sonrió coqueto haciendo que todo el ser de ella lo mirara mal, otra vez se sonrojo.

—¡Idiota!—le tiro un libro en la cara haciendo que cayera de su silla.

—¡Roberts, Styles! ¡A la dirección ahora mismo!

(...)

Después de aquella gran charla que aquel hombre de traje gordo les dio decidió ponerles un pequeño escarmiento para que no volvieran a gritar en clases, un castigo. Ambos debían quedarse mañana después de que finalizarán las clases para limpiar tres salones ellos solos más los dos baños de chicas y chicos, era lo peor pero no había forma de que pudieran negarse pues sería peor.

Tomo su mochila para meter dentro los libros de la clase de ciencias, otra clase donde terminó con algún químico sobre su bata gracias a que la maestra Torres decidió que sería una gran idea hacer equipo con Harry, que error tan grande. Suspiro y cerró la mochila para colocarsela en el hombro y salir, aunque una figura se lo impidió.

—¿Qué quieres Niall?

—Eh, bueno..—balbuceo un poco pensando que decir, eso le molestó.

—Cuándo pienses que saldrá por tu boca me buscas ¿de acuerdo?—dijo para poder salir de ahí.

—Espera—la tomó del brazo haciendo que girará, su cara de odio hizo que tragara en seco.—debo decirte algo

—¿Podrías soltarme antes?—preguntó y eso hizo.—gracias, ahora dime que es eso que dirás.

—Quería invitarte a la fiesta de cumpleaños que le haremos a Harry.

—Olvidalo, ahora si me permites—pensaba caminar pero aquel chico se puso frente a ella impidiendo su paso.—¡Oye!

—Por favor Mar, seré tu esclavo una semana—alzo la ceja.—tres semanas—se cruzó de brazos.—bien bien, dos meses y eso es todo.

—Bien, aceptó. Mándame donde será y, supongo que ahí estaré.

—¡Gracias!

—¡Ah! ¡Me asfixias, basta!

—Lo siento—la tomó por los hombros sonriendo, ese rubio era todo un dilema.

Camino algo molesta por el comportamiento de Niall, desde que lo conoció sabía bien que estaba pegado a ella como chicle pues era igual a un niño pequeño aunque al principio las chicas lograban hacerle burla por una cosa en específico, tiempo después tras ella darle un poco de "ánimo" y un consejo llegó a los dos días luciendo sus brackets nuevos, desde ahí estaba pegado a ella como chicle, claro que cuando Harry no le reclamaba y la jalaba para abrazarla sin su permiso.

Negó levemente con su cabeza decidida a caminar al salón de lenguas aunque aún faltaban veinte minutos para ello. Quería evitar a toda costa a alguien más, su suerte era del asco.

—¡Margot!—la abrazo por la espalda aunque sabía que odiaba eso.—te extrañe.

—Harry, nos vimos hace apenas media hora.

—Aún así, es fácil extrañarte cuando no tengo a nadie para molestar. Tu compañía logra hacerme feliz, tan feliz con un helado, como cantar, como simplemente mirar las hojas caer—la volteó haciendo que quedará frente a él.—te extraño porque verdaderamente eres lo que más quiero.

—¿Ah? ¡Basta! ¡Cállate!—gritó soltandose y pegándole con una mano.

—Oye eso duele—entonces tomó su mano y la acercó a él.—debería decirte cuán hermosa estas hoy.

Una idea se cruzó por su mente en ese momento.
—Podrías. Tú verdaderamente luces genial, debería decirte que me besaras, sería aún más genial—se acercó a su rostro como si fuera a besarlo.

No sabía cómo diablos se había comportado así, por otro lado Harry no dijo nada y cuando estaba cerca de sus labios se empezó a reír jalando su mano a lo que él la soltó, se dio la vuelta para ir nuevamente al salón mientras aquel castaño se quedaba parado ahí en medio de todos. Entonces por alguna razón se volteó.

—¡Oye Syles!—habló llamando su atención.—¡Gracias!

Entonces por primera vez ella sonrió, sonrió seguido de una pequeña risa lo que hizo que el corazón de Harry comenzará a sonar desesperadamente debido a lo que veía, sentía que Margot sonrió para él, sólo para él. Sus mejillas comenzaron a arder así que apenado llevo una mano tapando su boca y una parte de sus mejillas, volteó a otro lado avergonzado. Ella era realmente única, ella debía ser suya.



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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty Re: Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

Mensaje por Moonstar Lun 27 Ago 2018, 10:06 pm

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 20180827230243


Margot


De acuerdo, estaba intentando procesar todo lo que sucedía ante mis propios ojos, me sentía algo, algo incómoda si podría llamarlo así además mi corazón parecía querer salirse de su lugar. Simplemente no pensaba que pudiera ser aquella persona que conocía por el hecho de que sería tan irónica mi suerte este día ya, sus ojos miel querían atravesar por dentro de mi como siempre lo hizo, llevaba diferente su cabello a como siempre lo recordé y aquella expresión de confusión en su rostro hacia que se viera mucho más serio de lo que parecía ser.

Parpadee un par de veces y me dispuse a tomar el celular mientras lo llevaba a mi oído sin apartar la vista del chico, él tampoco la quitaba.

—¡Margot!—exclamó molesta del otro lado lo que parecía ser una Jody abrumada por la espera.

—Jody, te compraré eso hablamos cuando llegue a la casa, te quiero—colgué.

Ambos nos levantamos como pudimos y ahí me di cuenta de la diferencia notable de estatura, vestía algo cómodo y casual diferente de lo que yo recordaba, esta vez tenía más tatuajes que la última y lucia muy bien. Él también lograba examinarme con su vista, aclare mi garganta llamando su atención.

—Gracias por intentar ayudar—bajé mi vista lejos de él, con una mano tenía mi celular y de la otra sostenía mi bolso.

Di media vuelta intentando huir lejos de ahí o al menos hasta que llegará a una tienda por la boba comida de Jody, ya le había dicho que si no podía retratarme, no iba eso conmigo. Pero antes de dar mi segundo paso una mano tomó la parte posterior de mi bolso haciéndome girar confusa, era él quien lo hizo.

—¿Acaso te eh visto en algún lado?—pregunta con una sonrisa.—tu rostro me resulta familiar.

—Dudo mucho que eso fuera así, chico no te conozco—mentí queriendo escapar.

—Oh, en ese caso me encantaría hacerlo eres muy bonita.

—Deberías preocuparte por tus cosas en vez de coquetear conmigo, no me interesas—dije mirándolo sería.

Entonces comenzó a reír lo que hizo que lo mirara aún más confundida de lo que ya estaba, arquee una ceja.

—¿Acaso tengo cara de payaso?—pregunté.

—Nada de eso preciosa—rió.—es sólo que está es la segunda vez en mi vida que una chica bonita me rechaza.

¿Segunda? Oh claro, olvidé que siempre intentaba coquetearme en el instituto pero siempre lo evadia, incluso cuando aquella chica de cabello platinado salía con él seguía insistiendo, en broma claro pero me molestaba. Voltee avergonzada y quise que algo me salvará.

—¿Zayn? ¡Zayn!—exclamó una voz detrás de nosotros.
Joder, no me refería a esta clase de salvación ¡Joder no! ¿Dios que te eh hecho para que me odies? Apreté la mandíbula intentando que eso me hiciera invisible, o que me arrollara un bus, literalmente.

—¿Pero que..? ¿Duende? Vaya, cuanto tiempo luces menos infantil de esa menera—se burló cruzando sus brazos.

—¡Eso es hiriente!

—¿Qué es hiriente Niall?—y ahí estaba mi perdición.—Oh, Zayn...

—Qué hay de nuevo Harry—sonrió a medias. Ambos no terminaron bien después de su partida.

Pasaba mis ojos de Harry a Zayn, de Zayn a Niall, debía huir como sea de aquí antes de que me metieran en su pequeña gran reunión después de varios años. Di la media vuelta con sigilo para dar pequeños pasos antes de mi gran huida a una tienda donde no me encontrarán, pero mi fracaso era tan enorme como mi hambre y dios me odiaba por la vida entera. Un jalón de bolsa hizo que le fuera para atrás haciendo que mi vista divisara el piso de concreto, cerré mis ojos por inercia pero nunca sentí el golpe, los abrí poco a poco encpntrandome con un par de ojos verdes, acurrucada en unos brazos con ambas manos sobre mi casi cerradas estaba confundida.

—Ten más cuidado Zayn, casi tiras de un golpe a Margot—habló mirándolo.

—¿Margot? Oh vaya eres tú, me haz rechazado dos veces ya eso si es hiriente—rió observando.

—Dicen que la tercera siempre es la vencida—Niall habló haciendo una pose graciosa.

—Bueno, yo... ¿Puedes soltarme?—pregunté hacia Harry, él me miro.

—Si eso es lo que quieres—entonces me soltó y caí al frío piso de concreto.

—¡Margot!—Niall corrió hacia mi junto a Zayn para ayudarme.
—¡Harry eso fue grosero!

—Ella pidió que la soltara y eso hice—se encogió de hombros desinteresado.

(...)

Narrador omnisciente


No sabe cómo ni cuándo terminó entrando a un restaurante de comida rápida junto a esos tres chicos, todos la miraban algo sorprendidos, bueno casi todos. Aquel rubio y pelinegro hablaban de cosas sin importancia sobre sus vidas, el como la habían pasado después de la preparatoria en cambio, Harry sólo se disponía a darle miradas para nada bonitas a Mar mientras probaba su ración de papas fritas, recargado en la silla de madera con una mano sobre su pectoral y la otra tomando las papas aquella chica se sentía incómoda comiendo de su espagueti con relleno de queso.

—¿Podrías dejar de mirarme?—preguntó volteando a la venta junto a ellos.

—¿Por qué? ¿Te incómoda? Todos somos libres de hacer lo que queramos, en este caso verte—habló sin importancia.

Margot solamente suspiro exhausta ante el comentario del castaño, no era que le encantará que dijera ese tipo de cosas pero esperaba más que sólo cosas feas de parte suya aunque era obvio y sentía que lo merecía, lo había dañado como nunca imagino sabiendo por encima de todo que su corazón estaba dispuesto para ella, creyó que siempre lo tendría a su lado sin importar nada y cuando menos lo quiso, ella lo abandonó. Igual a un juguete viejo, igual a una ropa sucia, se sentía tan mal. Si dios podía escuchar sus plegarias no quiso que se cumplieran así.

—Chicos—llamo la atención de los dos que jugaban con unas papas.—debo irme olvidé que mi amiga necesitaba algo, ella se rompió una pierna esquiando así que debo cuidarla.

—Oh.. no quisiera que te vayas Mar—hizo un puchero adorable.—Pero entiendo, ve a cuidarla.

—Sería genial reunirnos todos de nuevo un día ¿No les parece?—preguntó y aquel castaño asintió feliz.

—¿No querías ser alguien normal Zayn? Recuerdo que te alejaste porque no querías ser parte de un grupo de idiotas adolescentes—lo miro con una sonrisa burlona.

¿Desde cuando Harry se comportaba así? Ese no era él y estaba segura de eso, además nunca fue el tipo de chico serio menos que tomará los errores de un pasado amargo para usarlos en contra de esa persona, no ¿Quién era esa persona? Nadie dijo nada después de eso, arrimo su silla provocando ruido.

—Bueno, nos vemos.

—Claro, cuídate bonita—esta vez Zayn habló algo cabizbajo, pobre chico.

Se levantó intentando huir de ahí, cada minuto que pasaba cerca de ellos o de alguno más sentía como esos recuerdos que intentaba reprimir se liberaban poco a poco haciendo que su corazón empezará a doler, nadie podía morir de amor y menos decir cómo realmente era su propio corazón al romperse en pedazos pero los sentimientos hacían que se sintiera como si se rompiera, no era lindo.

—Aguarda—su voz la detuvo.—iré contigo, es mejor que estar aquí.

—Yo no...—volteó para excusarse pero lo único que logró fue encontrarse con él, tomó su muñeca.

Sin decir nada la llevo hasta la puerta algo enojado según se veía, salieron sin saber a donde dirigirse, en cuanto Jody la viera tendría seguro que la mataría con sus propias manos por llegar sin nada y tarde, sin saber dónde estuvo husmeando.
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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty AVISO

Mensaje por Moonstar Miér 05 Sep 2018, 11:21 pm

 
 Oh por todos los cielos, perdón, perdón, y excesivamente miles de perdones «A quién corresponda o les esto», últimamente la escuela me a tenido más agitada que de costumbre gracias a mis queridos maestros a los que les doy un enorme agradecimiento por sus proyectos y exposiciones  Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 1926951358 actualizaré pronto, quizá el fin de semana a más tardar así que espero entiendan:(( ¡Gracias por leer fantasmas, o quién sea que les esto! :''3 Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | 350222609
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Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Empty Re: Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 |

Mensaje por Moonstar Dom 09 Sep 2018, 10:18 am

Someday | Harry Styles | CAPITULO 6 | Picsar13




La mañana siguiente se levantó como todos los días intentando no despertar a la chica castaña que yacía en su cama, después de lo de ayer recibió miles de llamadas por parte de Jody que había decidido ignorar pues sabía que si respondía una enojada chica atacaria. Cuando regresó se encontró con su amiga durmiendo en su cuarto y en su cama, no quiso despertarla por compasión, y miedo a lo que pasará.
Colocó la sartén en la estufa mientras estaba encendida, tomó el traste verde con espagueti en el para meterlo en la sartén junto a la salsa Alfredo que había preparado, le dejaría un poco a Jody y llevaría el resto a la oficina no quería bajar a desayunar y toparse con Harry nuevamente.

—Bien, supongo que con esto es suficiente—dijo moviendo la pasta revuelta en un traste.

Tapó el resto y lo dejo junto a una nota después camino hasta su bolsa y metió el traste junto a una bebida y dos plátanos que habían en la mesa, sería poco para un día pesado. No quería tener que imaginar lo que le preparaba ese día. Tomó la chaqueta encima de la sombrerera junto a la bufanda roja, recordar que Harry la vio con ella hacia que se detuviera un momento porque pensó que quizá pudo reconocerla, se vería tonta usandola aún. Cerré la puerta tras de ella y comenzó a caminar entre las calles mezclándose con el resto de personas presentes, todas extrañas entre sí y tan distantes como lo que eran: extraños.

(...)

—¿Sería buena idea colocar esta imagen? Es decir luce como una destacada para mi—expresó Hayle alzando la imagen.

—Si para ti luce de ese modo sería mejor que colocaramos otra, esa sería dada de baja—le contestó aquel castaño en tono burlón.

—Eres un...—antes de lograr su insulto fue callada por la jefa.

—Luke ya déjate de tonterías. Todos aquí debemos ser serios si queremos lograr un mejor puesto este mes, ¿Han entendido?—habló la señora ante los menores.

—Si jefa—respondieron todos al unísono.

Después de eso camino directo a su escritorio con el afán de encontrar algo nuevo que llamara la atención, todos regresaron a sus asientos, debían buscar una noticia jugosa para que pudieran ocupar uno de los primeros lugares en revistas de ese mes debido a que su bajo desempeño hacia que decaiga un mes si y un mes no, si volvían a decaer de nuevo sería una pérdida total para la compañía, tomando en cuenta que hace dos meses seguidos llevaba uno de los puestos más bajos de los que siempre lograban. La castaña suspiro tomando su taza con café, estaba despierta desde temprano preparando la parte estructural de la nota que le había tocado: un artículo sobre lo último en moda. Quería morirse ahí mismo debido a su poco conocimiento en esa área además Jody no ayudaba con sus comentarios sobre la moda urbana y lo genial que de veía, era tan patética como su amiga.

—Mar ¿Haz acabado tu parte ya?—preguntó la castaña sobre su silla rotatoria.

—Aún no. Me eh pasado toda la mañana pensando en algo útil que me pudiera servir.—dijo soltando un gran suspiro.

—Vaya, necesitaba ayuda con la parte técnica del diseño—dijo algo desanimada Hayle.—Bueno, te dejo entonces.

La castaña se volteó hacia la pantalla de su laptop dudando si debía ayudar o no a la menor debido a su poco conocimiento dentro del decorado para la página que tenían. Sabía que era mala idea cuando ni siquiera había empezado por un título pero siendo Hayle sería rápido gracias a su capacidad nata por aprender las cosas rápidas.

—Hayle—habló llamando la atención de la chica que estaba en el escritorio a su lado.

—¿Qué sucede Mar?—preguntó algo confundida, claro que con tremendos lentes la hacían ver curiosa.

—Te ayudaré. Será más fácil para ti terminar de esa manera.

—¡Woah! ¿Enserio? ¡Gracias!—exclamó juntando ambas manos sin dejar de sonreír.

Era gracioso ver a Hayle en un modo infantil que casi la hacia sentir mal por llamarla Dorothy. Además ¿Qué tan difícil puede ser ayudarla?

(...)

—¡Nos vemos mañana! Espero termines tu trabajo está vez—se burló Ricky.

—Qué gracioso Ricky, suerte con conseguir novia—devolvió la burla sin mirarlo e hizo una seña con la mano.

Escucho unos queridos de parte del chico pero simplemente los ignoró sin más. Casi quería ahorcar a Hayle por ser tan distraída a veces, lo que ocasionó que su trabajo no terminará ahí mismo en la oficina y tuviera que llevarlo a casa. Eran pasadas las diez de la noche debido a que editar una página tomaba tiempo, y mucho más si alguien que es una novata en ese campo no sabía nada, desperdició gran parte del día.

—¿Qué pasó?—preguntó de la otra línea una adormilada chica.

Jods llegue tarde de la oficina, apenas voy camino a la casa.

—¿Qué? ¿Tarde?—su voz sonaba confundida. Unos minutos después escucho voces lejos.—¡Oh dios mio, me quedé dormida!

Rió por lo bajo.—Típico de ti amiga. En un momento estaremos cenando comida china.

—Oh sobre eso, eh salido con un chico así que estarás sola hasta mañana—rió junto a otra voz más fuerte. Rodeó los ojos.—te amo no lo olvides.

—Espero no olvides darme una cena mañana por dejar plantada a tu novia.

—Eres la mejor Marggie.

Sólo rió ante el apodo bobo de su amiga y colgó. Sabía que Jody a veces salía con chicos y, bueno técnicamente terminaban en la cama pero sólo era durante una noche aunque últimamente salía días y no regresaba hasta la mañana siguiente.

Observo una tienda de 24 hrs y entró para comprar algún producto instantáneo que llevar a casa y comer mientras veía un maratón de Friends por la televisión. Lo típico de cada día desde que estaba con Jody. Camino entre los pasillos y escogía lo primero que veía, un paquete de fideos, una coca cola grande, dulces de goma y por último dos paquetes de palomitas con un bote de helado de chocolate, vaya calorías había en todo eso que, lo más probable acabaría hoy mismo. Se colocó atrás de una chica para hacer fila al pagar. Su celular vibró indicando un nuevo mensaje.


Número desconocido.
¡An-nyeong!
¿Qué tal tu día? ¿Bien? ¿Mal? Hace tanto que no lograba verte Unnie TT
Junto a Leyum-ssi hemos decidido hacer una fiesta así que deberías venir.
*Lugar*
Te esperaremos 7u7
Soy Hye, aunque eso ya lo sabes♥️

No sabía si reír o querer matarla por seguir usando esos términos coreanos que sólo ella podía usar por siempre, aunque si sospechaba que era Hye desde el momento que vio aquel saludo idiota de ella. La dejo en visto bloqueando su celular para después guardarlo en su bolsa. ¿Una fiesta? ¿Debería ir? Era tentador pero encontrarse a Harry ahí lograba aterrarla un poco aún después de que él la llevará lejos del restaurante.


Era obvio que su fuerza había aumentado más que la última vez por lo que le era difícil seguir su paso, uno que otro tropiezo se hacía presente. Estaban ya a varias cuadras lejos después de su incidente con Zayn que aquel castaño logró causar, era tan diferente a como recordaba.


—¿Podrías parar?—preguntó por cuarta vez donde, por fin Harry cedió.


La soltó haciendo que se estampara contra su pecho al voltearse él, claro que sus manos ayudaron pero no en mucho. Se alejó un poco sobando su cabeza.


—¿Qué te pasa? Casi me rompes el brazo en dos—se quejó ante el ojiverde.


—Eso no te interesa en lo más mínimo—dijo indiferente. Quería matarlo ahora si.—como sea puedes irte llenado. Sólo necesitaba librarme de Zayn.


—¿Eh? ¡Que cobarde!—exclamó golpeando su brazo con el bolso que tenía.


—¡Basta mujer duele! ¡Llevas piedras ahí! ¡Ya!—exclamaba dando vueltas mientras era golpeado.


Mar lo miro con enojo dejando de golpearlo porque si de por si estaba enojada que actuará como idiota la hacia enojar aún más, suspiro y volteó su vista lejos de él. Era tan lindo que no podía evitar que su bobo corazón palpitara con emoción.


«—Basta ya de tanta cursilería, no lo necesito en mi vida—penso.»


Entonces observo algo único, aquella pared en la avenida 104 donde regresaba después de la escuela seguía intacto, en ella estaba grabada aquellas iniciales junto a un corazón. Sin pensarlo su cuerpo actuó por si solo acercándose hasta que pudiera leerlo a la perfección, llevo una mano de forma lenta hasta el garabato que llegaba a ser. Harry se acercó a su paso observando tan sorprendió también, no sabía cómo actuar ni que decir más que mirar, Margot era mucho más baja que él así que podía ver perfectamente sus movimientos y la pared.


—Eso es..—intentó decir algo pero sólo salían susurros que no escuchaba.


—Es patético—completo de una forma cortante y fría, Mar sólo lo miro de una forma ¿Triste? ¿Enojada?

Suspiro recordando aquel encuentro donde después de eso terminó dando la vuelta sin decir nada para volver al apartamento, quería llorar pero su orgullo evitaba que lo hiciera tragando todas sus palabras. Ser dura consigo misma le costaba pero a final de cuentas nadie podría salir lastimado, ni lastimarla. Un pequeño empujón por detrás hizo que caminara hasta la caja, volteó encontrándose con él. Sus ojos parecieron abrirse más de lo pensado pero no dijo nada, más bien no sabía que decir.

—Van a ser dos dólares con veinticinco centavos señorita—dijo la cajera.

Estaba estática mirando directo a sus ojos tanto que parecía querer comerlo con la mirada aunque Harry tampoco hizo nada para evitarla o esquivar sus ojos, simplemente la veía también.

—¿Señorita?—volvió a preguntar sacandola esta vez de su trance.

—ah, si si. Aquí tiene—dio el dinero para después tomar la bolsa.

Una vez en sus manos salió corriendo «literalmente» por la puerta sin mirar pues era una locura encontrarlo tan regular por esa zona, quizá tenía novia y ella vivía ahí, o algún amigo, o familiar o él mismo. De ser alguna de sus locas teorías ciertas entonces debería verlo seguido y si sus encuentros eran así de fuertes no soportaría mucho.

—Rayos, rayos, y muchos rayos más—susurraba mientras caminaba sin pensarlo mucho.

Apretó con fuerzas su abrigo marrón de ese día debido al frío que comenzaba a ser presente durante las noches, la bolsa con la mercancía estaba entre su brazo derecho y su bolsa estaba entrecruzada con su cuerpo. Sus pies temblaban un poco por el miedo mientras que su corazón parecía querer salirse de ella. Diviso la calle frente a su edificio y sin dudarlo mucho camino para poder cruzar rápido aunque sin darse cuenta un carro parecía querer pasar, otra vez se quedó estática pero un calor la hizo entrar en razón.

—¡No!—exclamó cerrando los ojos con fuerza para esperar el impacto pero nunca llegó.

Abrió lentamente sus ojos mirando como los carros pasaban frente a ella, bajo la vista hacia sus zapatos dándose cuenta que estaba a nada de cruzar y un diminuto espacio en la banqueta la separaba de la carretera. Entonces sintió como unos brazos la rodeaban por lo que asustada quiso voltear su vista aunque el individuo no lo permitió, era evidente que el perfume lo conocía de un sitio, sin esperar mucho una cabeza buscó asilo entre el hueco de su cuello haciendo que el aliento caliente del chico hiciera que se le pusieran los pelos de punta.

—¿No crees que tu corazón late demasiado fuerte?—preguntó de una manera algo sexy por el tono de su voz.

—¿Ha..harry?—preguntó casi en un susurró.

—Sigues siendo tan dura como siempre ¿No es así Margot?—dijo junto a una risa algo apagada.

Entonces sintió un calor demasiado fuerte en sus mejillas ocasionando que su corazón latiera con más fuerza que antes. Entre abrió los labios intentando decir algo coherente pero nada salió, con algo de nervios llevo ambas manos al brazo de Harry que la sostenía por los hombros de extremo a extremo, lo apretó sin hacer mucha fuerza intentando voltear su cara pero simplemente no podía por el hecho de que el castaño tenía su rostro oculto en su cuello y la abrazaba desde atrás.

—No pienses que mi corazón está latiendo con tanta fuerza, ese eres tú.

—El caso es, que yo no tengo.
Moonstar
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